cómo fue qué caí tan bajo como para derrumbarme por la culpa.

Cuándo comencé a ser tan

despreciable como para que no me importará que frente a mí mís amigas golpearan a una
inocente chica y yo como si nada viendo y sin poder abrir la maldita boca para impedirlo. en
esto me convertí,en una farsante,sin sentimientos,dándome todo lo mismo,sin poder ser yo.
corrí y corrí,sin rumbo alguno,hasta que me cansé y me ví parada frente a un parque,con la
mente en blanco me senté en el escalón de una pequeña escalera y sin darme cuanta las
lágrimas comenzaron a descender,me sentía la peor persona del mundo,ni siquiera sabía si
considerarme una en estos momentos,a tal punto había llegado como para tener estos
pensamientos. Me repetía una y otra vez “tranquila Anya,todo va a estar bien",nada estaba
bien,no podía seguir creyendo en mis propias mentiras. mí propio estornudo me sacó de aquel
oscuro pozo que me tragaba,y me volvió a la realidad,y ahí estaba esa orrible cosa frente a mí,
moviendo su cola y con su lengüita fuera,aterrada comencé a arrastrarme hacia atrás sin
darme cuenta que detrás mío se encontraba un gigantesco árbol el cuál me llevé puesto al
darme vuelta para salir corriendo.
—auch—un gran dolor se instaló en mí nariz y mejilla, no reaccioné hasta que senti un líquido
deslizarse hasta mis labios —oh no,esto no puede estar pasándome —el karma—mierda—
la rata comenzó a ladrar y a mordisquear una pelota roñosa,de pronto el perro quedó estático
con las orejitas alzadas
— JOLIE —comenzaron a gritar y el perrito salió corriendo,lo seguí con la mirada hasta
encontrar la dueña de aquella voz,era una chica ,de mí edad supongo,al ver al perro lo miro
con cara de reproche,como una madre mira a su hijo al hacer una travesura. Nosé cuál fue el
momento en donde nuestras miradas se cruzaron,sus ojos mirándome fijamente,eran tan
negros que me perdí en su oscura tonalidad , comenzó a avanzar hacía mí,con un gesto en su
rostro que no entendí hasta que estuvo frente a mí preguntando — ¿te encuentras bien?, estás
sangrando,¿necesitas que llame a alguien?—estaba tan desconcertada que no entendía la
situación, nosé que cara puse pero se ve que le causó un poco de gracia
—es..estoy bien—respondí y señalé a la rata peluda a su lado—esa cosa fue el culpable —miré
con cara de asco,porque no solo era alérgica a los perros, sinó que también los odiaba,los
odiaba por no poder tener uno serca.
—oh no,disculpa, déjame ayudarte,yo..yo—comemzó a tartamudear nerviosa,se acercó a mí y
me tomó de la muñeca para levantarme del suelo,cuando ya estuve de pié comenzó a
revisarme el rostro y ahí la paré —deja de tocarme,ya pasó,solo cuida mejor a tu
rata—sacudiendo un poco el polvo de mí ropa le pase por un lado y me encaminé hacia los
escalones,pero me frené al escuchar lo siguiente—ademas de niña bonita también eres
arrogante y sin modales —admito que eso me sorprendió,si que si— ¿qué has dicho?— lo que
escuchaste— uff, paciencia porfavor — pues gracias,ahora deja que pueda largarme de aquí —
—no has cambiado nada Anya—
—¿qu.. qué?,¿cómo sabés...—y no dejó que terminara
—que más da,solo vete— con una mano me dió un pequeño empujón para que siga el camino,
no la recuerdo de ninguna parte,esto se ha vuelto raro, será que...
—no voy a preguntar solo porque no quiero recordar nada de mí pasado,y si no me equivoco,
tú perteneces a el—su mirada fue intensa y cortante
—tranquila,no quiero ser parte de tu presente,tenlo por hecho, adiós An— ahora ella era la que
se alejaba y por más que quisiera saber quién era aquella molestia andante solo pude
quedarme parada,con dudas y preguntas, pasé del llanto a la ira y de la ira a la intriga,y encima
con el rostro enrojecido y sangre seca,DIOS.