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Resumen de la norma de sacrificio: NORMA Oficial Mexicana NOM-033-

SAG/ZOO-2014, Métodos para dar muerte a los animales domésticos y


silvestres.
La presente norma es de carácter obligatorio en todo el territorio nacional para
todos aquellos negocios encargados de establecimientos públicos o privado,
establece los métodos para dar muerte a los animales garantizando buenos
niveles de bienestar y con el propósito de disminuir al máximo el dolor, sufrimiento,
ansiedad y estrés. Sus disposiciones son aplicables a todos los establecimientos
en donde se le dé muerte a uno o varios animales con fines de abasto,
investigación, pruebas de constatación, enseñanza, aprovechamiento cinegético,
peletería o cualquier otro tipo de aprovechamiento, como así también en
zoológicos o predios o instalaciones que manejan vida silvestre en forma
confinada fuera de su hábitat natural (PIMVS), granjas educativas,
comercializadoras, tiendas de animales, criaderos, centros de rehabilitación,
circos, colecciones particulares, centros de espectáculo, unidades de manejo para
la conservación de vida silvestre (UMA), centros de decomiso o acopio, entre
otros.
Restringe las muertes causadas con dolor o agonía, todos los métodos permitidos
solamente deben llevarse a cabo por el personal perfectamente capacitado y
consciente de sus acciones, contando con los instrumentos, equipo e instalaciones
adecuados y funcionales para inmovilizar a las especies destinadas al sacrificio,
llevando a cabo las buenas prácticas de las metodologías de sacrificio, tales como
el aturdimiento mecánico en las distintas especies de animales, posteriores cortes
en yugulares que lleven a cabo un desangrado lo más rápido posible. Además de
los aturdimientos con gases o electro aturdimientos y lo más importante aún, la
matanza o eutanasia de especies que no serán destinadas a consumo con
anestésicos y fármacos pertinentes que no provoquen algún tipo de sufrimiento
con reacciones secundarias que prolonguen la muerte del animal.
Todo esto con la finalidad de que la preparación del manejo previo a la muerte
conduzca al animal por una vía que no le genere estrés alguno y que pase
desapercibido el sufrimiento que se le pueda causar, independientemente de su
tipo de especie y grados de aturdimiento que requiera.

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