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Progreso (TESSFP)
Ética
Segundo corte
Alumno:
Grupo:101
Lo antes mencionado nos podrá abrir puertas en cualquier lugar, esta actividad en nuestra
Ingeniería en Informática, nos ayuda a conocer desarrollar nuestra solidaridad con las personas, ya
que no por ser personas estudiadas debemos de olvidar nuestros valores.
Nuestro equipo realizo la actividad de compartir con una persona necesitada como: kínder,
primaria, estancias de abuelos, hospitales, centros de apoyo: personas de la calle o personas que
se encuentran fuera de los hospitales esperando a su enfermo; con el fin de regalar algo de comida
y enfatizar la solidaridad.
El proyecto consistió en regalar y compartir algo a una persona necesitada (con una aportación de
$50 pesos, para poder realizar dicha actividad, ya que con ese dinero podríamos optar por regalar
café, atoles, gelatinas, etc.) optamos por regalar gelatinas, por cada integrante fueron 20 gelatinas,
las cuales pudimos repartir en ambos hospitales debido a que en el IMSS se encontraba pocas
personas y en Hospital General, si encontramos a un poco más de personas.
Salimos de la escuela, pero antes tuvimos que pedirle permiso a nuestra jefa de división para que
nos dejara ir hacer la repartición de gelatinas a los dos hospitales de Atlacomulco ya que eran las
dos opciones que teníamos contempladas nos dirigimos hacia el estacionamiento de la escuela,
yo contaba con un vehículo para trasportarnos al hospital en el camino estaba lloviendo y se
empañaban los vidrios del coche y nos impidió un poco la vista tuvimos un pequeño percance con
el choche ya que se apagó por un momento y no quiso arrancar pero notamos que era un pequeño
cable que se había desprendido de la batería del coche tuve que reparar el daño para poder seguir
nuestro camino ya que contábamos con poco tiempo para hacer la actividad.
Al llegar al HGZ No. 252 IMSS Atlacomulco (NUEVO), notamos que no había tanta gente y
empezamos a repartir las gelatinas a las personas, habían algunas personas que no aceptaban la
gelatina y nos vimos con la necesidad de irnos al Hospital General de Atlacomulco, llegamos y
vimos que había mucha gente, la cual se encontraba con una cara de tristeza angustia y
preocupación por sus familiares, fuimos ofreciendo las gelatinas y notamos como cambiaba sus
expresiones y regresaba su sentido del humor había gente que nos pedía de dos a tres gelatinas y
se nos acabaron rápido, nos vimos la necesidad de retirarnos ya que no teníamos más gelatinas
que regalar.
Por otra parte, el seguir recorriendo y que las personas si te acepten las gelatinas es algo
fascinante, ya que algunas personas no aceptaban nuestras gelatinas. Se siente bien poder ayudar
a las personas que esperan afuera a que su familiar se recupere, no fue mucho con lo que
apoyamos, pero si algo con lo que pudimos brindar, esto fue una experiencia agradable.
Para mí, Karen Azucena González Sánchez, fue una experiencia llena de diferentes emociones, el
clima no era tan favorable, la actividad la queríamos hacer desde el lunes 23 pero un compañero
se enfermó, el martes 24 llovió en la hora de salida y ya no pudimos ir, incluso debido a que
estábamos cargando nuestras gelatinas pensaron algunos compañeros de otras carreras, que las
andábamos vendiendo, pero realmente no era así, por estas circunstancias hicimos el proyecto
hasta el 25, por lo cual tuvimos que pedir permiso con jefe de división y con la maestra Martha
Patricia, debido a que ya estamos en hora clase. El clima como antes ya se menciono no era tan
favorable debido a que estaba brizando, y de repente llovía, pero nos dimos el valor y fuimos, el
compañero Jonathan nos brindó el transporte, aunque en el camino el vehículo tubo un pequeño
problema, el cual se pudo resolver, y así continuar con nuestro camino. El compañero Jonathan
propuso el HGZ No. 252 IMSS Atlacomulco (NUEVO), debido que hace unas semanas tuvo un
enfermo en ese lugar, y pensó que encontraríamos algunas personas; sin embargo, debido al clima
había pocas, pero si pudimos repartir nuestras gelatinas.
Llegamos y nos encontramos con un señor que traía un paraguas, una persona de la tercera edad
a la cual le dije: “somos alumnos del Tecnológico de Estudios Superiores de San Felipe del
Progreso, venimos haciendo un proyecto de labor social, el cual consiste en compartir algo con
personas, ya sea de la calle o que se encuentran a fuera de los hospitales, andamos regalando
gelatinas, están limpias, si no la quiere aceptar, si no, no hay ningún problema”, el señor nos dijo:
“sí que no hay problema.”
Seguimos con las demás personas que se encontraban afuera, tuve una experiencia algo no tan
agradable en ese hospital, debido a que con la señora que se encuentra en la foto de abajo,
aquella que tiene un reboso en la cabeza, le ofrecí una gelatina y la acepto pero cuando le dije:
“espero se mejore su enfermo”, ella me contesto que su hija acababa de fallecer, y sentí muy feo,
ya que nosotros íbamos con la intención de sacar una sonrisa tan si quiera, la verdad me puse en
el lugar de la señora y se lo feo que se siente, le dije que si le podía dar un abrazo, a lo que ella
acepto, le dije: “sé que es difícil, pero espero sea fuerte”. La verdad ya me iba a poner a llorar,
porque he pasado eso y es difícil, mas porque tienes la esperanza de que mejorara tu enfermo y
realmente eso no pasa.
Otras personas fueron honestas con nosotros y nos dijeron que ellos no las necesitaban tanto, tal
como la señorita del paraguas, la cual nos dijo que los que se encontraban en la camioneta y en la
lona roja ya llevaban días ahí, así que nos acercamos ahí, después de un mal momento, por lo
menos pude sacarles una sonrisa a esas personas. Nos aceptaron las gelatinas y nos dieron los
mejores deseos, mi caja de gelatinas ya se estaba mojando y estas ya las estaba acabando. En el
Hospital General de Atlacomulco, nos aceptaron las gelatinas, ellos al parecer llevaban días debido
a que encontrábamos cobijas, o algo así, ahí nos hicieron falta gelatinas, pero pudimos sacarles
una sonrisa, y un montón de gracias, fuimos solidarios y el recibir un gracias fue lo mejor para mí,
porque con eso me conformo.
Tuvimos momentos algo no agradables, con la situación de la señora a la cual le falleció su hija,
fue algo, que nos hizo pensar cuantas personas están en el hospital esperando que su familiar se
recupere y realmente esto no pase, que difícil a de ser estar afuera de un hospital, con la
esperanza de que el enfermo se este mejorando, o todo lo que tiene que esperar y soportar para
estar al pendiente de su enfermo.
Llegamos a la conclusión de que esta actividad nos ayudo a desarrollar un poco mas algunas de
nuestras habilidades, y a mejorar nuestros valores, nos fascino la actividad, porque obtuvimos
muchos gracias, así como también que es bueno compartir con alguien con necesidad.