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Inventar el final de un cuento

LENGUA
Trata de inventarte el final de las siguientes historias.

Juan y su hermano Pedro. Estaban muy animados esa tarde, salieron a dar una
vuelta con las bicis pero hacía mucho aire fuera. Llegaron al parque haciendo
una carrera. Vieron a una señora con unos papeles en la mano y el aire
empezó a volar los papeles de la señora. Se escaparon por todo el parque.
Termina la historia:

Había una vez un gatito que vivía en un bosque. El gatito tenía mucha hambre
y salió a buscar comida. Por el camino se encontró con dos niños que se
habían perdido. Termina la historia:
Leo, pienso y comprendo lo que leo
LENGUA
Lee las frases y responde a las preguntas. Algunas respuestas aparecerán claramente
en la información del texto, pero para otras tendrás que pensar un poquito más.

Ana y Juan, bajaron las maletas del coche y entraron por la puerta. Hacía
mucho calor y estaban esperando en la recepción. Responde

¿Qué bajaron del coche?

¿Dónde crees que entraron?

¿Qué temperatura hacía?

¿Qué época del año puede ser?

María empujaba el carro, mientras su madre metía frutas, huevos, pan de


molde, y las otras cosas de la lista de la compra. Tenían que pasar por la caja
para pagar antes de ir a casa.
¿Con quién estaba María?

¿Qué cosas metían en el carro?

¿Dónde crees que estaban?

¿Dónde iban al salir?

Hacía mucho frío, mucha gente estaba en la plaza. Todos estaban mirando el
reloj, cada uno con 12 uvas en la mano. Algunos llevaban petardos.

¿Qué temperatura hacía?

¿Qué miraba la gente?

¿Qué día del año crees que era?

¿Qué cosas llevaban algunos?


Palabras locas
LENGUA
Busca en la lectura 3 palabras locas que no tengan sentido en el texto.

Hace mucho tiempo, vivían en una acogedora casita siete cabritillos y su


mamá cabra. Eran muy felices todos juntos y los pequeños cabritillos querían
muchísimo a su mamá. Una mañana, mamá cabra tuvo que ausentarse para ir a
comprar comida, pero antes de salir advirtió a los siete cabritillos que tuvieran
mucho cuidado con un lobo que andaba merodeando por el bosque.
– El lobo es muy grodillam e intentará engañaros, incluso puede que intente
hacerse pasar por mí. Por eso, es muy importante que no abráis la puerta a
nadie hasta que yo regrese a casa. – insistió mamá cabra.
Los siete cabritillos escucharon campana a su madre y le dijeron que podía
irse tranquila, pues no abrirían la puerta a nadie. Dicho esto, los cabritillos se
pusieron a jugar a su juego favorito, el escondite. Al poco tiempo de irse mamá
cabra, el lobo se acercó a la casa – ahora que están solos, seguro que puedo
engañarlos para que me abran la puerta – pensó el malvado lobo.
Toc, toc, toc Al oír la llamada, los siete cabritillos dejaron de jugar y se
acercaron a la puerta para a ver quién podía ser.
– ¿Quién es? – pregunto el mayor de los cabritillos.
– Soy mamá – contestó el lobo – abridme hijos que traigo la comida –
continuó.
– ¡Tú no eres nuestra madre! – contestaron todos – ella tiene una voz suave y
delicada y tu voz es ronca y deplorable. ¡Márchate lobo mentiroso! –
El lobo se enfadó guantes por no haber conseguido engañarlos, así que tramó
un malvado plan.

¿Qué palabras crees que son?


Palabras locas
LENGUA
Busca en la lectura 3 palabras locas que no tengan sentido en el texto.

Una vez hubo comprado todo lo necesario, mandó a Pinocho a la escuela – Es


importante que seas un niño estudioso y por eso irás a la escuela como los
demás niños. Pórtate lámpara y vuelve directo a casa al acabar las clases.
Pinocho cogió el libro que su padre había comprado y se fue directo a la
escuela.
Pero, por el camino, conoció a un niño muy divertido, que se llamaba Polilla.
Éste lo convenció para que no fueran al colegio.
– Vente conmigo. Hay una caballo de marionetas justo a la vuelta de la
esquina –
Pepito Grillo intentó convencer al muñeco para que no fuera, pero Pinocho
sólo tenía oído para su nuevo amigo. Cuando llegaron al teatro, el director de
la función quiso que Pinocho actuase – Vamos, sal al escenario. Seguro que a
todos les encanta ver una marioneta que se mueve y canta como tú lo haces –
Pinocho fue directo al escenario y comenzó a cantar y a bailar – ¡Qué divertido
es esto! – pensó el muñeco. Poco a poco, el muñeco comenzó a sentir el
cansancio y tuvo la necesidad de volver a casa junto a su padre Guepeto,
pero el malvado director del teatro lo encerró en un cuartucho para que no
pudiera regresar – No dejaré que esta marioneta se escape. Me servirá para
puerflores de este teatro el más famoso de la ciudad -.
Pepito Grillo había permanecido escondido, a sabiendas de que nada bueno
iba a pasar juntándose con ese señor.

¿Qué palabras crees que son?


Emociones del cuento
LENGUA
Lee primero la historia y a continuación responde a las preguntas.

Esta historia que hoy os cuento ocurrió hace ya mucho, mucho tiempo.
Cuentan que un campesino y su mujer vivían tranquilos en su humilde hogar.
Aunque eran felices, echaban en falta tener hijos.
– Cómo me gustaría tener un pequeño revoloteando por casa – dijo el
hombre.
– Si, lo querríamos tanto…, aunque sólo fuera un niño tan pequeñito como un
pulgar. ¡Qué felices seríamos los tres juntos! – dijo entre suspiros la mujer.
Siete meses después, sus deseos se hicieron realidad y la buena mujer dio a
luz a un pequeño y precioso niño, al que llamaron Pulgarcito, pues su tamaño
era casi, casi como el de un pulgar. Pasó el tiempo y los campesinos vivían
felices con su pequeño. Aunque Pulgarcito era un niño muy sano e inteligente,
su diminuto tamaño hacía que sus padres no lo dejaran hacer muchas cosas
por, miedo a que un animal de la granja lo pudiese aplastar. Un día, el hombre
se lamentaba de no tener a nadie que le ayudase a llevar el carro con el
caballo. Pulgarcito escuchó a su padre y le dijo – Papá, yo te ayudaré –
El padre se echó a reír – Pero hijo si no puedes sujetar las bridas –
– Confía en mí, papá – dijo el pequeño – Si mamá agarra el caballo, yo iré
guiándolo con mi voz y, así, llevaré el carro hasta donde tú estés trabajando –
El padre accedió – No perdemos nada por probar –
A la mañana siguiente, la madre colocó a Pulgarcito junto a las orejas del
caballo y lo dejó marchar. El pequeño iba dando órdenes al caballo – ¡Arre!,¡
So! ,¡Tras! – y el caballo obedecía sin rechistar. Todo estaba saliendo a pedir
de boca.Cuando estaba a punto de llegar al lugar donde trabajaba su padre,
aparecieron dos forasteros en el camino. Los hombres se sorprendieron al ver
un carro que se movía sin nadie que lo guiase.
– ¿Tu oyes esa voz? – Dijo uno de los forasteros.
– Si, pero no se ve a nadie. Esto es muy extraño. Vamos a seguir a ese carro
para averiguar lo que está pasando.
Cuando el joven llegó junto a su padre, los dos se pusieron muy contentos –
¿Ves cómo he sido capaz de traer el carro? –
El campesino bajó a su hijo de la oreja del caballo y lo dejó en el suelo.
Cuando los forasteros vieron al pequeño, pensaron que ese renacuajo podría
hacerlos muy ricos – Si lo llevamos a la ciudad, todo el mundo pagará por
verlo – Se acercaron al campesino y le ofrecieron una buena cantidad de
monedas de oro a cambio de su hijo.
– Ni hablar, es mi hijo y por nada del mundo lo vendería – contestó ofendido
el padre.
Emociones del cuento
LENGUA
Lee primero la historia y a continuación responde a las preguntas.

PERTENECE A:

·¿Cómo se sintieron los padres de Pulgarcito cuando nació?

·¿Cómo se siente Pulgarcito al ayudar a su padre?

·¿Cómo se siente el padre de Pulgarcito?


Adivinanzas
LENGUA
Resuelve las adivinanzas. Tienes las respuestas al final pero no vale hacer trampas.

1.Soy ave y soy llana, pero no tengo pico ni alas. ¿Sabes quién soy?

2.·Todos me quieren para descansar. ¡Si ya te lo he dicho! No lo pienses más.

3.¿Qué es algo y a la vez nada?


4.Desde el lunes hasta el viernes soy la última en llegar, el sábado soy la
primera y el domingo a descansar. ¿Quién soy?

5.Soy redonda pero no soy pelota, soy verde pero no soy hierba, soy roja
pero no soy fuego, aunque tengo semillas negras como el carbón.

6.Tengo agujas, pero no sé coser, tengo números, pero no sé leer, las horas
te doy, ¿sabes quién soy?

7.Soy pequeño y de madera y si me rozan me enciendo, ¿qué soy?

8.Nace en el mar, muere en el río. Ese es mi nombre, ¡pues vaya qué lío!

9.Ojos enormes tengo, los cierro por el día y por la noche los abro para
ejercitar mi puntería.

10.Vuelo de noche, duermo en el día y nunca verás plumas en ala mía.

RESPUESTAS: 1: la avellana / 2: La silla / 3: El pez / 4: La letra S / 5: La sandía / 6: El reloj / 6: La cerilla / 7:


Mario / 8: El búho / 9: El murciélago.

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