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Matices

Siniestros

Mai Deus
Título original: Matices siniestros

© María de Jesús Hernández Salas


Todos los derechos reservados
Indautor 03-2023-081510324100-14

© Akasha Ediciones
Colección Itihasa
Monosabio # 6
Segunda Colonia del Periodista
Delegación Benito Juárez, 03620
Ciudad de México
akashaediciones@gmail.com
5521409767
akashaediciones.wixsite.com/misitio

Diseño de portada: Sandra Sánchez


Ilustraciones: Eduardo Yáñez Rodríguez
Corrección de estilo: Rosa Helena Ríos
Edición y formación: Rosa Elena Velasco

Primera edición: diciembre 2023

“Queda prohibida la reproducción total o parcial de


este libro sin expreso consentimiento de la autora”.
A mi abuelo por todos los maravillosos cuentos de fantasía
que creó y contó a su pequeña hija.

A las dos maestras de casa que creen y apoyan mis letras:


mi mamá que me compartió los cuentos que le contaba mi
abuelo y por ser la primera en escuchar, antes que nadie,
cada una de mis historias; y a Emma por impulsarme, con
su ejemplo, a no renunciar a lo que me hace feliz.

A ti, querido lector, por ser parte de estas páginas.


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PRÓLOGO

Una artista multifacética, Mai Deus trae tras de sí,


en su adultez temprana, una productiva historia tanto
literaria, como dramatúrgica, fotográfica y de redes
sociales, en donde nos deleita tanto con sus
microrrelatos, como con reels de viajes al interior de
sí, conviviendo con sus fantasmas.

Mi encuentro con ella tuvo lugar en la Escuela


Mexicana de Escritores (hoy ya extinta), en que tuve
la fortuna de darle clases de dramaturgia y conocer
parte de sus letras, en ese tiempo, líneas oscuras,
tormentosas, con dejos de humor negro muy, muy
escondido.

Me llamó la atención su empeño, su deseo siempre


de aprender, de escuchar, de ser escuchada. Mai era
la primera en llegar, la que entregaba sus trabajos a
tiempo, la que procuraba convivir, a pesar de su ropa
negra, sus grandes lentes que abarcaban la mitad de
su cara y esas horribles chamarras con capucha (aún
en tiempos de calor), que escondían su pequeña/gran
humanidad.

No importaba que quisiera ocultarse, una escritora


luchaba por escurrirse entre las telas de su pesada
ropa. Yo sabía que era cuestión de tiempo para que
saliera de su capullo... y salió.

Un tiempo no supe de ella, pero cuando volvimos


a cruzarnos, una de sus primeras obras de teatro ya

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había cruzado las fronteras del país, Mai iba a pasos
agigantados. Así que me dijo: tengo esta historia, y
esta otra... ¡ah, y esta también y...

...y trabajamos una primera novela con un encanto


muy especial: historia por demás profunda, pero con
tintes de humor y con esperanzas-desesperanzas
entre una estructura literaria que danza, para no per-
mitir que el lector se aburra.

Después viajamos por algunas de sus obras de teatro


y hoy, aquí, aterrizamos con un conjunto de relatos
cortos (y otros no tanto) que siguen su misma línea,
esa que ella adoptó e hizo suya: temas complicados,
personajes en el borde, humor entretejido y finales
inesperados.

Seleccionar los cuentos fue un trabajo que Mai


Deus enfrentó con preocupación, pues tuvo que dejar
en el cajón algunos más, esperando su turno. Mientras
tanto, los elegidos ya brillan con luz propia y algunos
hasta son acompañados por una discreta selección de
ilustraciones.

Seguramente, en cualquier momento, en estas


páginas, te encontrarás tú, lector, porque Mai Deus en
sus paseos fotográficos te captó, te secuestró y te llevó
a su computadora para convertirte en uno más de sus
personajes.

Rosa Helena Ríos


Escritora

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El terror de mis relatos proviene de la
densa oscuridad de mi corazón

Edgar Allan Poe

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MARAVILLAS

Ellos vestían de blanco,


pero ninguno era el conejo, no.

Ellos decían que “Maravillas”


no existía, que todo era una alucinación...
¿cómo no podía ser real?

Ella recordaba todo, a la reina, al sombrerero,


la ausencia de miedo y la libertad.

EL CONEJO BLANCO

—Todo inició cuando esa niña comenzó a perseguirme,


decía que traía conmigo un reloj... ¿Para qué traería
uno? Ni siquiera sabía qué era un reloj... Después de
tanto correr me detuve y, con temor, descubrí que he
olvidado ser un simple conejo.

CAPERUCITA

Caperucita sabía que el leñador la amaba y se aprovechó


de eso. Inventó una historia siniestra en la que un lobo
había querido comerse a su abuela. Pasó lo obvio,
cazaron al inocente animal y la niña se hizo un abrigo
con su piel pues ya estaba harta de su capa roja.

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DESPERTAR

Cuando Alicia abrió los ojos entendió por qué el


sombrerero le había insistido tanto en quedarse...
Ahora era demasiado tarde… estando en el hospital no
había forma de llegar al bosque, ni a los hongos.

MEJOR QUE UNO

Después de la cena, los siete enanos comenzaron a


sentirse adormilados, pensaron que era debido al
cansancio de trabajar en las minas, pero antes de
cerrar por completo los ojos, algunos alcanzaron a ver
como Blanca Nieves le abría la puerta al Cazador que
supuestamente la reina había mandado detrás de ella.

—Ahí los tienes, aunque son pequeños cualquiera


puede servir.

El cazador asintió y comenzó a sacarles el corazón


a cada uno de los enanos.

—Siete son mejor que uno, ¿no?

BESO ¿DE AMOR?

El Príncipe Florian acudió al funeral de Blancanieves


pensando que podría satisfacer sus deseos más
oscuros, por esa razón no tuvo ningún reparo en
besarla... Vaya sorpresa se llevó cuando sintió como el
frío cuerpo empezó a recuperar su calor.

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FUNERAL

Alicia ha muerto y a su funeral han asistido todos los


conejos blancos que persiguió. Sí, no fue sólo uno.
Fueron cientos, cada uno representa el escape al que
siempre recurría para salvarse de una realidad llena
de ansiedad y agonía.

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DESEO DE CUMPLEAÑOS

Miró el pastel, escuchó, como siempre, las mañanitas


y, sorprendiendo a todos, cerró los ojos, murmuró
algo, sopló las velas y enseguida cayó al suelo. Sus
padres dieron un grito de horror, el pequeño había
muerto y extrañamente poseía una sonrisa que nunca
antes había mostrado. Quizá si hubieran puesto
atención, habrían escuchado su deseo: “me quiero
morir”.

UN AÑO MÁS

Aunque Martha lleva muchas horas cocinando, no


se siente cansada porque es un día muy especial: el
cumpleaños de su único hijo, del pequeño Luis. Ella
tiene meses preparando todo, los globos, los platos
y vasos de supermán, manteles, bolsas de dulces,
piñata, gorros, canciones, juegos y todo lo que pueda
hacer de esta fiesta algo inolvidable.

Julio, su esposo, no está tan animado como en años


anteriores, pero imagina que se debe al trabajo y
obviamente al ir y venir del hospital a la casa y de la
casa al hospital.

Y pese a todo, está agradecida ¿qué sería de ella sin


su Julio y su pequeño Luis?, justo cuando ese
pensamiento embarga completamente su corazón, se
escucha la puerta de la entrada abrirse.

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—¡Llegaste!, amor sé que estás agotado, pero quita
esa cara y sonríe, anda ayúdame a poner la mesa, los
invitados no han de tardar en llegar. ¡Ah!, ya quiero
mirar la expresión de nuestro hijo cuando vea cómo
hemos arreglado todo. Cariño, ¿qué pasa?

—Martha, no vendrá nadie.

—¿Qué dices? ¡Shh! Luisito podría escucharte,


claro que vendrán todos sus amigos.

—No esta vez porque no invité a nadie.

—¿Por qué harías algo tan horrible?

—Porque est… porque está cansado, nuestro hijo


está cansado. Debes parar, él…

—¡No te atrevas!, ¡no te atrevas a decirlo! Luis


sanará, ¡lo hará! Ese maldito cáncer se irá de su
cuerpo, así que…

Martha se desploma en el suelo, su cuerpo entero


tiembla y lucha para no dejar salir sus lágrimas, Julio
arrepentido la levanta, la abraza y después de unos
minutos comienza a poner la mesa.

—¿Qué haces?

—Lo siento por no haber invitado a los niños,


pero una fiesta no depende del número de asistentes,
¿verdad?

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—En ese caso mejor ve con Luis, yo terminaré… El
pastel está listo, sólo debo hacerle unos arreglitos y
colocar la vela.

Julio da un beso en la frente de Martha, se coloca


uno de los gorros de fiesta y sube las escaleras, des-
pués de un rato, la entusiasta madre y esposa pide que
bajen para iniciar la fiesta.

—Vamos Luis, deja que papá te siente en la silla,


¿te gusta tu pastel? No puedo creer que cumplas 8
años, ¡eres todo un jovencito! Julio, apaga las luces
para que podamos cantar las mañanitas.

El pequeño Luis no emite ninguna emoción, sus


padres terminan de cantar, pero él no sopla la vela.

—¿Qué pasa?, ¿quieres que papá te ayude? Anda


Julio, sóplalas por él.

Julio sopla las velas y todo queda oscuro, des-pués


de unos segundos él enciende las luces y se le ve
vestido de blanco, en un cuarto blanco también. En
la pared tiene pegadas fotos de su hijo y de Martha,
también hay hojas con dibujos de regalos, un pastel
y globos.

La puerta del pequeño cuarto se abre y entran dos


enfermeras, Cecilia, una de ellas, le sonríe a Julio y le
indica que es hora de tomar su medicina.

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INFELIZ CUMPLEAÑOS

Cada que cumplía años era el niño más infeliz del


mundo, pues sus hermanos muertos siempre le
susurraban: “quizá hoy te unas a nosotros”.

LAS ESCONDIDAS

Todos los niños corrieron a buscar dónde esconderse,


pero Sara no, ella sabía que el pequeño Sebastián no
encontraría un buen lugar, ¡siempre perdía!, por esa
razón lo llevó hacia el pozo, lo ayudó a bajar y para que
les fuera difícil hallarlo, echó piedras, tierra, piedras,
tierra y más piedras…

Se marchó contenta del lugar pues, sin duda, le


había creado el escondite perfecto… Lo ayudó tan bien
que nadie volvió a verlo.

GLOBO

—Si ganas el juego, puedes quedarte con el globo ¿no


quieres intentarlo?

—¡Sí!, ¿qué debo hacer?

—Casi nada, sólo debes ponerte la soga en tu cuello.

—¿Y luego?

—¡Dejar que se eleve!

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—¿Y ya?

—Eso es todo...

TOC TOC

Siempre amé jugar con mi hermana, pero desde hace


unos días he comenzado a odiarlo.

—Toc, toc.

Ella capta cuando no estoy de buen humor, ¿pero


por qué sigue?

—Toc, toc.

Estoy cansada al igual que todos en la casa… ¿por


qué no vas e intentas jugar con papá o con mamá?

—Toc, toc.

¿Será porque este juego es el favorito de ambas?,


sé lo que debo responder, pero si lo hago ¿qué pasará
después?

—Toc, toc.

Ella murió hace una semana, ¿qué es lo que


intenta?

Toc, toc.

Toc, TOC.

TOC, ¡TOC!

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JUEGOS

Siempre les permití a mis hijos seguir con su afición


por los juegos y en especial por el de “ahorcado”; lo
que realmente me preocupa es que, hasta ahora, todos
a los que han invitado a jugar ¡pierden!, ¡ah!, los
cuerpos comienzan a apestar.

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DIENTE DE LEÓN

El pequeño diente de león se siente menos hermoso y


trata de esconderse de sus hermanos girasol y rosa, lo
que no sabe es que son los otros los que le envidian un
poco pues llegará el día en que él se volverá uno con el
viento y volará lejos, ¡muy lejos!

ROSA

Era muy de mañana cuando Julián tomó en brazos a


su pequeña hermana, corrió al jardín la enterró con
cuidado en el hoyo que un día antes había hecho,
colocó también un poco de composta, la regó y se
sentó a esperar a que Rosa dejara de ser una semilla y
floreciera pronto en una hermosa y fragante flor.

ME QUIERE NO ME QUIERE

—Repite eso, ¿por qué le arrancaste los cabellos a tu


prima?

—Porque todos lo hacen.

—¿Hacer qué?

—Eso, arrancarles pétalos a las flores para saber si


alguien te quiere o no.

—Pero ella no es una flor.

—Se llama Dalia, es lo mismo ¿no?

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FLORES

Todos lamentaban la muerte de Isabel, pero entre


los presentes había alguien que se veía sereno y
podríamos decir que hasta feliz.

—Hijo, no es correcto sonreír en este tipo de


situaciones.

—¿Por qué?, después de todo ella logró lo que


siempre había soñado.

—No entiendo, ¿a qué te refieres?

—Siempre se la pasaba diciendo “nunca he reci-


bido flores” y ¡mira!, su ataúd está rodeado no de una
sino de cientos.

VIOLETA

Violeta miró algo confundida a su novio.

—Dijiste que tenías rosas, margaritas, azucenas y


que hoy plantaríamos una flor nueva, pero aquí no
hay nada.

El novio sonrió, tomó su pala y de un golpe mató a


la nueva flor de su jardín.

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MUÑECA

Mamá tiene un nuevo novio y él dice que soy su


“muñequita”. Mamá me ha comprado un vestido y me
ha dejado en el cuarto con su novio… No sé qué pasó,
siento mucho dolor y tristeza. Quiero llorar,pero
mamá dice que las muñecas, pase lo que pase, no
pueden hablar.

MONSTRUO DEL ARMARIO

Estaba oscuro, pero por primera vez el pequeño pudo


reconocer al monstruo del armario.

—Tío, ¿por qué? —preguntó con un nudo enla


garganta mientras sentía como le quitaban las cobijas.

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BUEN CALZADO

Se había hecho de una buena reputación en la morgue


porque siempre compraba zapatos nuevos a los
cadáveres que habían llegado sin ellos. Cuando ella
se los colocaba les decía: “si hubieras traído mejor
calzado, quizá no estarías aquí”.

PUERTA

—¿Nunca escuchaste el dicho de “cuando una puerta


se cierra, otra se abre”?

Me congelé al escuchar eso, no había donde escon-


derse... Mi asesino había entrado.

ALMA

Desde niño siempre había escuchado la frase: “los ojos


son la ventana del alma”. Él llevaba años asesinando
con el único fin de poder ver si era cierto pero, después
del último suspiro, las víctimas y sus ojos perdían el
brillo. Y ya, no había nada más. ¡Qué mentira!

CUANDO UNA PUERTA SE CIERRA

Tanta gente entra y sale de tu vida, mi abuelo insistía


que, por ello, uno siempre debe mantener la puerta

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abierta para dejarlos entrar... Que los que quieran,
se quedarán y otros se marcharán. Esa era la idea del
abuelo, pero yo soy un asesino.

HASTA QUE LA MUERTE…

Cuando el cura decía: “hasta que la muerte los separe”,


la novia sonreía en secreto, pues nadie más tenía que
ver con el deceso de sus parejas, era ella quien lo
hacía... Ella los mataba.

MANTIS

Hace rato que habían terminado de cenar y ahora


estaban por disfrutar de un vino muy especial.

—Olga, hay algo que siempre me ha dado


curiosidad.

—Dime, ¿qué es?

—¿Por qué te apodan así?

Olga sonrió cuando vio a Luis caer en el suelo, las


pastillas habían funcionado muy rápido esta vez.

—Lo mejor de este sedante es que puedes seguir


escuchándome, ¿sabes por qué no te di postre?,
porque serás tú.

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DULCE O TRUCO

El letrero claramente decía “toma uno”, pero los niños


no hicieron caso y se llevaban varios. El veneno que
tenían los chocolates sólo funcionaba si comías más
de cinco, ahí estaba el truco.

LA BESTIA

Sus ojos que eran de un color tan negro como la noche


brillaron al ver terminada su obra maestra: un libro
con forro de piel humana, letras escritas con sangre,
libro con relatos de su mente enferma. Sólo restaba su
firma, algo simple, pero aterrador: la bestia.

PAPÁ

—¿Y a qué hora duermes? —preguntó el monstruo.

—Cuando terminen los gritos, no falta mucho —


respondió el niño.

—Jamás he escuchado a un humano gritar tanto


¿sabes el nombre de quien le provoca tanto miedo?

—Sí.

—¿Cuál es?

—Papá.

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RELAJACIÓN

No hay nada más relajante que ir al bosque y ver cómo


mi víctima se aleja pensando que podrá salvarse.

LA BELLEZA ES SUBJETIVA

—Me gusta mucho una frase de Anthony T. Hincks


que dice: “la belleza de un bosque reside en sus
habitantes”.

—¡Qué hermoso!, hablaba de los árboles, de sus


flores y animales.

—¡Oh!, yo pensé que se refería a los cadáveres.

EL CADÁVER FLOTA

Mamá me enseñó a jugar “el cadáver flota”, teníamos


que arrojarnos al río cuando escuchábamos acercarse
a los soldados o a cualquier hombre que no fuera
papá. Ellos nos veían y decían: “están muertas, así no
es divertido”.

PESTAÑAS

Dicen que debes pedir un deseo cuando soplas una


pestaña, llevo pidiendo varios y ninguno se ha

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cumplido, quiero intentar más, pero mi hermana no
ha dejado de gritar que le duelen y sangran los ojos.

AÑORANZA

—Dicen que los mejores recuerdos de la infancia los


relacionamos con el hogar, ¿es por eso que moviste
cielo, mar y tierra por comprar tu antigua casa?

—Sí.

—Ya veo, entonces ¿me puedes compartir algún


recuerdo?

—Aquí cometí mi primer asesinato.

—¿Qué?

PACIENCIA

Ulises había entendido perfectamente una frase“la


paciencia es amarga, pero su fruto es dulce”, lo
confirmaba cada que sentía el último aliento y latido
de sus víctimas. Amaba ese callejón que quedaba
cerca de una avenida transitada, cada que había hora
pico o llovía a cantaros no faltaba el impaciente que
caminaba por ahí en busca de un atajo o refugio y él,
el calmado Ulises lo esperaba, podían pasar días o
hasta meses, ¡no importaba!

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RUIDO

A las tres de la mañana escuchó un extraño ruido, uno


constante y desesperado; se levantó de la cama, bajó
las escaleras sin prender las luces y cuando llegó al
último escalón sonrió… estas víctimas eran
persistentes y admiró eso de ellos, pero ya que le
habían interrumpido el sueño debía darles una
lección para volverlos más silenciosos.

OJOS QUE NO VEN…

Jesús amaba mucho a Leticia, pero eso no le evitaba


mirar y desear a otras mujeres ¡ah!, si sólo ella lo
hubiera comprendido; así que hizo lo que hizo por el
bien de los dos…

… Le sacó los ojos a su Lety, pues “ojos que no ven,


corazón que no siente”.

MÁS VALE PREVENIR

Alguien me dijo que soñar con cuervos significaba que


terminaría con mi pareja y como yo no pensaba
hacerlo, supuse que él lo haría... Es por eso que lo
maté, prefiero ser una viuda a divorciada.

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¿DUELE?

Inés siempre había sido curiosa y por eso recordaba


haber leído en una revista que “las decepciones
amorosas duelen como una quemadura”; así que
cuando terminó con Raúl, sintió pena. Él siempre
había sido el más sensible en la relación, así que un
día se animó a visitarlo para ver cómo estaba, pero
grande fue su sorpresa al escucharlo:

“Alejarme de ella fue lo mejor que he hecho en mi


vida”.

A Inés le dolió mucho oír eso, no era justo porque


durante cinco meses ella sí había sufrido y llorado casi
todas las noches, así que nadie podía ni debía culparla
por lo que hizo.

Se fue directamente al departamento de Raúl, por


fortuna aún conservaba un juego de llaves, se es-
condió en el viejo ropero y esperó con paciencia a que
su ex se quedara profundamente dormido.

En ese estado tan indefenso, ella tenía mayor ven-


taja. Lo golpeó con la lámpara de noche que siempre
había estado en el buró y después lo ató de pies y
manos, también se aseguró de cubrirle la boca para
que ningún grito se escapara. Pasaron quizá tres
horas cuando finalmente Raúl recuperó la conciencia.

—¿Te duele?, no quise pegarte tan fuerte, perdona.


¿Cómo has estado?, ¿me has extrañado? Yo sí, tanto

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que la otra vez fui a buscarte… nunca imaginé que
pudieras ser tan cruel. ¿cómo pudiste decirle eso a
nuestros amigos?

Raúl quería contestar que sus amigos eran sólo de


él y no de ella, que esa era una de las tantas razones
por las cuales la había dejado, ella no sabía amar, sólo
le gustaba poseer y controlar a los demás; sin em-
bargo, el dolor era insoportable, tanto que comenzaba
a sentir una gran opresión en su pecho y además sus
pensamientos se concentraban en detectar de dónde
provenía el olor a gasolina.

—Sabes, leí que “las decepciones amorosas duelen


como una quemadura”, yo ya sufrí mucho por ti y es
justo que ahora tú experimentes un poco.

Inés sonrió al ver el terror en los ojos de Raúl, él ya


había entendido su situación… Ella intentó encender
varios cerillos hasta que uno prendió y lo tiró en el
suelo, se alejó unos metros para poder observar y es-
cuchar los gemidos de Raúl.

Ahora los dos estaban a mano, ambos sufrían; ella


por decepción y él por el fuego.

FELICIDAD

Esta era la vigésimo octava ruptura en la vida de Estela…


pensó que estaba condenada a morir sola hasta que leyó
una frase: “la felicidad está dentro de uno, no al lado de

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nadie”, repitió esas líneas por varias horas hasta que
decidió hacerla realidad, corrió al departamento de su
ex novio, le enterró un cuchillo y cuando se aseguró de
que estuviera muerto, empezó a comérselo… Sí, ese era
el secreto, sus novios le daban felicidad, pero no podía
ser eterna hasta que le sirvieran de alimento.

MARTHA

Le gustaba todo de ella y eso a Martha le encantaba.


Pensaba que Luis la amaba con locura y por eso
cuando él preguntó si podía hacerla suya, ella dijo que
“sí”. Él tomó su pelo, sus manos, sus ojos, su vida…

PRIMER AMOR

—¿Sabes?, te pareces mucho a mi primer amor —


bromeó el ansioso novio en su noche de bodas.

—Lo sé —sonrió la novia mientras se quitaba un


gran trozo de carne— me costó mucho trabajo encon-
trarla y otro tanto conservar intacto su rostro.

CAZA

7:45 PM

Lucía y Mateo aún no se conocen, pero ambos se


han arreglado y propuesto salir de caza esta noche.

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9:58 PM

Lucía y Mateo están el mismo antro, se han visto


y se han gustado. De extremo a extremo de la barra
intercambian sonrisas ¡el juego ha comenzado!

10: 37 PM

Lucía y Mateo salen del antro, están desesperados


por ser uno y buscan el hotel más cercano.

3:05 AM

Lucía sonríe, besa dulcemente a Mateo y después


encierra su cuerpo inerte en una bolsa.

PAREJA PERFECTA

Eran la pareja perfecta. Ella, con su funeraria sabía


que nunca dejaría de tener clientes y, mucho menos,
con un esposo asesino serial.

Así que prácticamente cada semana se celebraba


un funeral.

MARIPOSAS

Ella sólo quería que su amado sintiera lo mismo, por


esa razón le abrió el estómago y lo llenó de mariposas.

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PIE IZQUIERDO

Al ver que Jorge se había levantado con el pie izquierdo


corrió por un hacha y de un tajo se lo cortó... Sonrió
contenta pese a la sangre y los gritos, pues de la mala
suerte había salvado a su marido.

HILO ROJO

Desde niña tuve la capacidad de ver el famoso “hilo


rojo” que unía a las personas; supuestamente debía
conectarlos de una manera gentil, pero cada que veía
a mis padres me causaba cierto horror.

El hilo que a ellos los unía, rodeaba el cuello de mi


madre y, cada día, mi padre lo apretaba más y más.

DEFECTO

—¿Qué es amor?

Se formó un gran silencio y después el androide “0”


cortó de un tajo la cabeza a quien había hecho la
pregunta, miró con desprecio al cadáver y mandó un
comunicado: “el humano 133 presentó un defecto:
aún siente amor”.

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ANUNCIO1

Leí un anuncio donde pedían donadores de sangre de


cualquier tipo, en la calle Transilvania, informes con
el señor Drácula.

1
Este fue mi primer relato corto, no será el mejor del mundo, pero
ocupa un lugar muy importante en mi corazón.
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HOGAR

—Dijiste que esta zona ya no tiene casas en venta, pero


ayer vi una a las orillas del pueblo, se ve vieja y
abandonada ¿por qué no preguntamos por esa?

—Esa casa está maldita, todo ser que entra, jamás


sale con vida.

—Pero ayer vi a varias personas entrar, ¿por qué


alguien iría a esa casa si saben que morirán?

—Esa casa consume sus almas, les brinda el calor


y dulzura del hogar que tanto añoran, es por eso que
sus víctimas, son vagabundos.

COMPAÑÍA

Luis y Pedro no entendían por qué los habían


adoptado si, al final, los iban a matar.

—Lo entenderán cuando lo vean —dijo la madre


adoptiva.

Después de haber enterrado los cuerpos de los


pobres niños, sonrió al ver cómo los columpios co-
menzaban a moverse, su hijo, que llevaba dos años
muerto ya tenía con quien jugar.

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OJOS VERDES

Siempre le reclamé a mi padre el no haber sacado


el color de sus ojos... Pensé que nunca me prestaba
atención, pero hoy supe que sí. El notario leyó el
testamento, mi viejo me dejó dentro de una cajita
sus ojos verdes y una nota que dice: “ahora ya los
tienes”.

TESTAMENTO

Cuando comenzó la lectura del testamento, Sara no


podía sentirse más abrumada y desinteresada al
mismo tiempo; su padre, que llevaba años muerto,
había solicitado que cuando ella cumpliera 27 años se
leyera su último deseo.

Y sí, había bienes para todos, a unos les tocó la


casa, a otros un carro viejo, joyería, antigüedades y
una serie de cosas que a la única hija del fallecido
realmente no le llamaban la atención, cuando llegó su
turno el abogado le dio una caja y mencionó que la
abriera cuando estuviera completamente sola.

Fue así que algunos se marcharon satisfechos y


otros no tanto; sin embargo, la mayoría lo hizo con
la gran duda sobre qué había en aquella misteriosa
caja. Sara esperó a estar completamente a solas y
cuando el último rayo de sol se ocultó, destapó la caja.

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Lo primero que observó fue un sobre amarillento,
lo abrió y su expresión de apatía pasó a una de entu-
siasmo; enseguida se fue a bañar, usó su vestido fa-
vorito y regresó a su cuarto para terminar de sacar lo
que había en la caja…

A la mañana siguiente cuando fueron a buscar a


Sara se encontraron con una escena aterradora, la
recién cumpleañera se había colgado al igual que lo
había hecho su padre a la edad de 27 años. Cuando
empezaron a revisar sus cosas encontraron la carta y
entendieron todo.

“Mi dulce Sara, en tu mirada encuentro un vacío


como el que siento yo; de ser el caso, si al llegar a los
27 sigues sintiéndote igual, te daré dos obsequios.
El primero son las instrucciones para atar perfecta-
mente una cuerda. Si lo haces bien, mi segundo regalo
es ¡la libertad!”.
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CELOS

Siempre tuve celos de aquellos que eran adoptados.


Ellos ya tenían a quien querer y quien los quisiera.
Incluso sentía envidia de las muñecas que la directora
tenía en su oficina, estas recibían más cuidado y
cariño que cualquier niño del orfanato.

Una noche, antes de dormir, le dije: “ojalá fuera


una de ellas, una de sus muñecas”. La directora sonrió
y me dijo: siempre hay un espacio más en mi vitrina.
Duerme ya, mañana será otro día.

Cuando desperté me sentí rara, alguien me sos-


tenía en sus brazos, quise moverme y después gritar,
pero no pude. No entendía qué pasaba hasta quela
directora me dijo: “tranquila, ya tienes quien te
quiera, ahora eres una más de mis muñecas”.

VOTOS

Escribió los votos, donde prometería amarla y


respetarla eternamente pero nunca pudo leerlos ya
que él era el padrino.

INCOMPATIBLES

Para ella, él era todo.


para él, ella era nada.

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FILO

Siempre la regañaba, aun cuando no era su


responsabilidad el mantener afilados los cuchillos.

—¿Tiene filo o no? —gritó nuevamente el chef.

—¡¿Está bien así?! —preguntó con un tono cal-


mado y orgulloso la joven mientras apuñalaba una y
otra vez al molesto hombre.

GANGRENA

Mientras Irma estaba siendo brutalmente golpeada,


recordaba la nueva palabra que había aprendido en la
mañana… era extraño, ¿desde cuándo hacía eso?, ¿qué
ganaba con recordar de principio a fin el significado
de algo que jamás podría aplicar en su día a día?

“GAN…GRE…NA…Tejido muerto
ocasionado por una in…fección o la falta
de… de irriga…ción sanguínea….

Una patada en el estómago.

… muerte del tejido sue… le ocurrir en las


extremidades o la piel debido a la pérdida
de… de la irrigación sanguínea….

Patadas en la espalda, cabeza, insultos.

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Generalmente afecta a los dedos del pie y
de la mano… decoloración de la piel, dolor
intenso seguido de entumecimiento…

Jalón de pelo, puñetazos en la cara, insultos, olor


a sangre.

y secreciones fétidas…

El dolor es intenso, Irma apenas puede ver y


respirar.

La gangrena requiere atención médica


urgente.

Ernesto no va a cambiar, Ernesto golpea con mayor


intensidad, Ernesto ha tomado un martillo.

El tratamiento incluye antibióticos y la


eliminación del tejido muerto.

Irma quiere vivir ¡tiene derecho a vivir!

y la eliminación del tejido muerto…

Ernesto es gangrena, es la gangrena de Irma.

eliminación del tejido muerto…

Ernesto se agacha para decir algo, sonríe, precipita


su victoria, admira su cruel barbarie y deja a un lado el
martillo, Irma aprovecha y lo toma. Respira y… golpea
fuerte, con rabia, con esperanza, con todo. Ernesto cae
sin vida, el tejido muerto en la vida de Irma ¡se ha ido!

45
NO MÁS

El miedo dejó de existir en ella cuando vio sus manos


llenas de sangre... El hombre que la golpeaba y
llamaba tonta no respiraba más.

NUDO

No habían pasado ni diez minutos cuando mandaron


al pequeño Ulises por su madre. El niño hizo caso,
subió y bajó en menos de un minuto.

—¿Qué te dijo? —preguntó molestó su padre.

—Nada, ella tiene un nudo en la garganta —respondió


Ulises.

—Esa mujer llora por todo, ya no la soportó —bufó


el padre.

—Es su problema, si no quiere ir ¡que no vaya a la


fiesta! —soltó con desdén la abuela paterna.

La abuela salió primero, después el padre cargó a


Ulises, lo llevó y metió al auto para irse solos, el pe-
queño no dejó de mirar hacia la ventana y mientras se
alejaba en el carro siguió viendo a su madre colgada
de una lámpara del techo.

46
48
DUALIDAD

Cuando alguien me pide un ejemplo de dualidad, les


cuento la historia de mis padres... ambos cuidaron por
varios años de un árbol y cuando este fue lo
suficientemente alto y fuerte, ataron cuerdas.

Mamá lo hizo para columpiarse.

Papá, para ahorcarse.

DOPPELGÄNGER

Sara no podía entender la reacción de sus padres, no


cuando ellos siempre le habían dicho qué hacer ante
esa situación. El detective preguntó de nuevo:

—Sara, ¿por qué la mataste?

—Porque así debía de ser, dicen que, si ves a tu


doble, lo más seguro es que él o ella te quiera matar
para después remplazarte; así que sólo lo evité.

—Sara, ¡ella era tu gemela!

HADA DE LOS DIENTES

El fuerte y doliente llanto de Ian despertó a sus


padres, cuando llegaron a su habitación se les heló la
sangre al ver a su bebé de año y medio sangrando de
la boca, cuando recobraron el sentido lo examinaron

49
y se dieron cuenta que le habían sacado sus dos
dientes… El papá cargó a Ian y se adelantó al coche
para dirigirse al hospital, la madre fue por Samuel,
su hijo de seis años, para cerciorarse de que estuviera
bien…

… Al principio sintió alivio al verlo dormir con


tranquilidad, pero después algo en el buró la hizo
gritar, con la mano temblorosa tomó una nota man-
chada con sangre en la que se leía:

“Querida hada, mis padres dicen que no puedes


dejarme dinero porque no he perdido ningún diente;
así que te doy los de mi hermano, él no los necesita de
todas formas, se la pasa comiendo papillas”.

La madre buscó debajo de la almohada de Samuel


y se horrorizó al confirmar que los dos dientes de Ian
estaban ahí.

SIEMPRE CONMIGO

Aunque hace mucho que están muertos, mis padres,


nunca me han dejado solo y comienza a ser una gran
molestia, aún no entiendo cómo lo hacen, pero sé que
me observan, ansiosos esperan que llegue el día en
que vomite sus ojos…

50
LA HIJA DE MIS SUEÑOS

Antes de tener a mi hija soñaba con una niña que


amenazaba con matarme a mí y a su padre... Después
esa pesadilla terminó o eso creí. ¡Qué tonta! Debí
decírselo a mi esposo, pero es demasiado tarde...

—Mami, mira ¡ya aprendí a escribir!

No abro los ojos ¿para qué? Sé que ella ha escrito:


“hoy morirán”. Se ríe, escucho sus pasos, su respiración,
sé que pronto mi marido gritará y después lo haré yo.

AMIGO IMAGINARIO

Bertha nunca había tenido problema con que su hijo


tuviera un amigo imaginario, pero su familia y
amistades la convencieron de que era momento de
ponerle un alto, no era sano para el niño, pero desde
que le había prohibido hacerlo lo notaba deprimido.

—Hijo, ¿sigues molesto por tu amigo?

—No, yo estoy triste, pero él sí que está muy enojado


contigo.

—¿Crees que puedas decirle que lo siento?

—¡No!, tú debes hacerlo, eso dice… ¿en verdad lo


harás?

51
—¡Claro!, ¿qué debo hacer?

—Espera en tu cuarto a las once, él te irá a ver.

—¿A las once? ¿Por qué tan tarde? ¿Tu amigo no


duerme temprano?

—Él dijo que sí tú querías disculparte tenía que ser


a esa hora porque yo ya estoy durmiendo.

Bertha esperó a que su hijo se durmiera, se puso a


limpiar y acomodar unas cosas, eran apenas las diez
cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo, sólo
tenía que irse a dormir y mentirle a su hijo con que
se había quedado despierta hasta las once esperando
a su amigo. Se fue a su cuarto, se lavó la cara, en-
cendió la televisión y se acostó, después de un rato
sintió que alguien se sentó en su cama.

—Hijo, ¿qué pasa? ¿No puedes dormir?

—Una madre nunca debería mentirle a su hijo, le


prometiste una disculpa ¿lo olvidaste? No mereces
tener bajo tu cuidado a ese niño, así que después de
hoy no tendré remordimientos y me lo llevaré.

Bertha no pudo gritar, levantarse, pedir ayuda ¡no


pudo hacer nada!, antes de cerrar por siempre sus
ojos, vio que en las noticias pasaban el rostro de un
hombre que llevaba años secuestrando niños y lloró al
reconocer al amigo imaginario de su hijo.

52
AUTO NUEVO

Fuimos a elegir un nuevo auto y mientras mi pareja


preguntaba sobre las características de cada uno, yo
fijaba mis ojos en el maletero y me preguntaba:
¿cuántos cadáveres podré meter ahí?

PREJUICIOS

Mamá siempre le pone peros a nuestros novios, que si


son gordos o muy flacos, que si tienen tatuajes o alguna
enfermedad; papá es diferente, él siempre dice: “el
sabor se puede arreglar con un poco de pimienta y sal”.

MORGUE

De niña siempre soñé con comer carne todos los días,


nunca imaginé que lo lograría trabajando en la morgue.

HERENCIA

“A todos mis hijos que ayudaron a mi muerte


prematura, les dejo unos ataúdes a la medida... ¡Ah!,
espero que hayan disfrutado del café”. El notario
sonrío al ver como a la familia no le había dado tiempo
de reaccionar, el veneno había actuado pronto.

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MUÑECO DE NIEVE

La nieve comenzaba a derretirse, así que decidió


guardar aquel muñeco de nieve en el congelador.

—¿Por qué haces eso?— preguntó su padre.

—Porque mamá dijo que lo terminaríamos cuando


volviera del hospital... ¿qué pasa? ¿Por qué lloras,
papá?

911

Estaba muy emocionada por su primer día detrabajo,


siempre le habían dicho que era buena para conservar
la calma, además la idea de poder ayudara alguien
en peligro la hacía sentir bien. Ese día cuando atendió
la llamada vigésimo quinta, la vidala puso a prueba.

—911, ¿cuál es su emergencia?

Pasaron unos segundos hasta que la voz de una pe-


queña de ocho años respondió casi en un murmullo.

—Mamá no está y alguien ha entrado a la casa…


Tengo miedo.

Miedo fue lo que también sintió Susana al reco-


nocer esa voz, reaccionó hasta escuchar los gritos de
su hija, golpes y después la risa de un hombre.

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SIEMPRE JUNTAS

Desde pequeña tenía la misma pesadilla. Estaba en un


lugar oscuro, frío y sin vida. Ella desconocía que ese
sueño era lo que veía su gemela muerta.

SÓLO UN LADRÓN

Enrique estaba contento, era la primera casa de la


semana, prácticamente tenía con eso para darse una
buena vida por lo que restaba del mes.

—¿Quién eres tú?

Se congeló al descubrir que no estaba solo, sus com-


pañeros le habían dicho que los dueños de esa casa se
encontraban de vacaciones, la voz era de un hombre
mayor así que no sintió peligro, bastaba con alzar la
voz y quizá fingir que llevaba un arma para asustarlo.

—¡¿Quién eres tú?!

Enrique volteó con toda la confianza del mundo,


misma que se desvaneció en segundos al darse cuenta
que la voz del viejo pertenecía a su padre, al hombre
que llevaba años sin verlo.

—¡¿Quién eres tú?!

Sintió un nudo en la garganta que duró poco pues


era una fortuna que el viejo tuviera esa enfermedad
que se roba tus recuerdos, de esa forma, su padre

55
no podría sonreír y ver que había atinado cuando le
decía: “de todos mis hijos, eres el único que siempre
me dará vergüenza”.

—¡¿Quién eres tú?!

—Sólo soy un ladrón, señor.

RECONCILIACIÓN

Desde que padre e hijo habían hablado de sus miedos,


invitaban a estos a unírseles y disfrutar de una tarde
juntos, en silencio y absoluta tranquilidad.

ÁRBOL GENEALÓGICO

En clase nos pidieron llevar nuestro árbol genealógico,


dije que no tenía uno, mis compañeros se rieron, la
maestra se enojó y me pidió que fuera el primero en
mostrarlo... ¡Bien!, ya colgué a toda mi familia, pero
¿ahora cómo lo llevo a la escuela?

56
ARMARIO

Extraño los temores de la infancia, ellos no podían


salir del armario, pero ahora que he crecido me he
dado cuenta que son más grandes, más violentos,
aterradores y gustan salir de caza.

Y sí, yo soy su presa.

NOTAS

Después de haber despertado del coma no dejaba de


recibir aquellas misteriosas notas, no importaba si
estaba en su casa o en un hotel.

Cada mañana al abrir los ojos sabía que encon-


traría la misma nota:

Devuélveme mi cuerpo.

¡Devuélveme mi cuerpo!

¡DEVUÉLVEME MI CUERPO!

NÚMERO 4

—Japón y sus supersticiones, mire que temerle a un


simple número.

—No es tan simple cuando significa “muerte”.

—Bueno, estamos a salvo. No hay número 4.

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—Se equivoca… Usted es el cuarto hijo nacido en el
cuarto mes del cuarto día, ¿no?

—Sí…

—¡Sujétese bien!

PRESAGIO

Desde muy niña vi la misma sombra oscura en la


esquina de la casa, evitaba mirarla y no entendíala
razón, conforme fui creciendo supe que me
incomodaba, a veces me daba miedo, nostalgia y en
otras ocasiones tristeza.

Se lo conté una vez a la abuela y me dijo: “seguro es


una pobre alma en pena, ¿por qué no rezas por ella?”.
Sus palabras me disgustaron, ¿por qué debía ayudar
a lo que me daba miedo?, si se había quedado estan-
cada en este mundo, seguro se lo había ganado y yo no
iba a apaciguar su dolor,

La sombra se quedó por años, creció conmigo.La


casa de la abuela pasó a mi mamá y después amí,
fue entonces cuando, cansada de su estúpida
presencia, decidí vender la propiedad. ¡Qué ilusa!,
esa alma o lo que fuera se mudó conmigo y no me dejó
hasta que…

… Hasta que entendí que era yo, todo el tiempo vi


en lo que me convertiría y no lo entendí o no quise

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aceptarlo. Cuando estaba muriendo pude verme en
ella y ella me vio a mí como siempre lo había hecho:
con odio y pena.

¿ES UN SUEÑO?

Durante unos minutos se mantuvo tranquilo ya que


le dijeron que durante una parálisis de sueño era
normal oír, sentir y ver cosas, pero cuando el aire
comenzó a hacerle falta se preguntó si realmente se
encontraba durmiendo.

NADA

—¿Sigues dispuesto a cruzar?

—Sí, aunque hay tantas cosas que no termino de


comprender. Una duda más ¿cómo se llama lo que
estoy por hacer?

—¡Vivir!

¿Y después que sigue?

—La muerte.

—¿Y luego?

—¡La nada! Y ese es el destino final.

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LABERINTO

Entró al laberinto siendo un niño y sin saber cómo


ni cuándo se hizo joven, después adulto y en algún
momento murió. Sin darse cuenta su alma siguió
penando, dando vueltas y vueltas, sintiendo la agonía
de un eterno cansancio.

60
LIBRES

Preguntó si era posible sentir mariposas en la panza


y le respondieron que sí, pensando que hablaba de
amor, así que la pequeña Susana subió a su cuarto,
abrió la ventana y saltó, esa era la única forma de abrir
su cabeza y dejar salir a las voces que habitabandentro
de ella.

MEDIA LUNA

Hay días que me siento como la media luna. Soy dolor


y apenas sonrisa. No estoy ni me siento completa…

… Me sobra oscuridad y me falta vida.

OSCURIDAD

Cuando quedó completamente ciego, su familia y


amigos lloraron, pero él no. Él se quedó quieto y
sonrió al entender todo, la oscuridad lo reclamaba
como suyo y él comenzaba a disfrutarlo.

AFLICCIÓN

Cada que llegaba frente al árbol de la aflicción veía con


gran pesar como infinidad de vidas encontraban
descanso al colgarse en sus ramas. “¿Y por qué a mí

61
no me dejas? Yo te sembré con nostalgia, te regué con
tristeza y nutrí con dolor ¿y así me pagas?”.

FRÁGIL

Si Julia hubiera nacido con una nota: “frágil al


desinterés, gritos, golpes, decepción…”, quizá nunca
se hubiera roto.

FOTO

La foto que usaron para su funeral, ella misma la tomó


días antes de saltar al mar. Esa fue la primera y última
vez que sonrió.

ELISA Y EL CABALLO

Elisa despertó después de horas, los azotes que siempre


recibía por parte de su madre la agotaban cada día
más… no sólo del cuerpo sino también del alma. Miró
al cielo y sin pensarlo mucho corrió hacia los establos y
sacó al caballo más viejo, al que ya nadie quería por no
soportar cargas pesadas… Con gran trabajo, la joven y
el animal llegaron hasta la cima de una colina…

Elisa colgó una cuerda de la rama de un gran árbol,


se la colocó en el cuello y le dio la orden al caballo de
que avanzara.

62
Pero nada pasó.

“Maldición. ¿Qué haces caballo tonto? ¿No lo en-


tiendes?, sólo necesitas correr ¡corre y ya! Te elegí a
ti porque sé que extrañas tu vida en la pradera, lo sé
porque tus ojos nunca han dejado de mirar más allá de
la cerca, ya eres viejo, ¿no quisieras morir siendo libre?”.

Pero el caballo seguía quieto, era como si entendiera


que, si se movía, Elisa moriría.

La joven no tenía fuerza para seguir, así que per-


maneció con la soga en su cuello, rogando porque el
viejo caballo se cansara y terminara cayendo al suelo.

Pero eso tampoco pasó.

Elisa podía sentir como el cuerpo entero del ca-


ballo temblaba de cansancio, pero este seguía firme,
quizá el animal esperaba que la joven desistiera y que,
así como había huido de casa, también escapara de
ese cruel deseo.

Casi al amanecer, Elisa sonrió y susurró: “eres


libre”… después de esto, el caballo sintió un peso
mayor. La joven había logrado su cometido… No había
sido necesario que el caballo avanzara o terminará
cayendo debido al cansancio, los golpes que la joven
recibió horas antes fueron sus verdugos. El caballo
luchó por permanecer de pie el tiempo que fuera nece-
sario, un humano tenía que aparecer y darse cuenta de
la trágica situación, bajar a la joven, llorar su muerte y
sentir la misma o más tristeza que la que tenía él.

63
Pero eso no ocurriría y antes de que se diera cuenta,
él también falleció.

MUNDO PARALELO

En un mundo paralelo las estrellas nos observan


desde sus hogares y susurran: “mira cómo brillan los
humanos, lástima que ya están muertos”.

LADO A LADO

La muerte sonrió melancólicamente al ver como


aquella joven aceptaba el luto, el dolor la había
alcanzado y no iba a soltarla; al menos no pronto,
ni mañana, ni pasado mañana, ¡algún día!, pero
mientras tanto, ambos, caminarían lado a lado.

REFLEJO

Me miro al espejo y antes de hacer la pregunta, mi


reflejo me responde: “seguimos rotos”.

INTRUSO

Desde que el pequeño Tomás perdió a sus padres todo


era diferente… El temible monstruo de las noches

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había pasado al olvido ya que algo más grande y
terrible ocupaba la mente y corazón del niño…

Ese algo se llamaba tristeza y cuando esta llega no


deja espacio para nada más.

DOLOR

El silencio estalla en un grito,


mi valor se desvanece sin remedio
y mi alma se vuelve transparente,
¿pueden verlo?

Mi corazón se rompe en mil pedazos,


las pupilas se nublan de tristeza
y las lágrimas brotan ¡brotan como un río!
en medio del dolor y el desconcierto.

SEMILLAS

Las semillas de esperanza y temor se habían revuelto...


Dudó un poco, pero al final decidió comerlas todas ya
que recordó una frase que decía:

“La esperanza y el temor son inseparables y no hay


temor sin esperanza, ni esperanza sin temor”.

65
EPITAFIO

Los que asistieron a su funeral no supieron cómo


reaccionar cuando leyeron el epitafio: “no lloren ni
sufran por mí, yo ya estaba muerto del alma y sólo
fingía estar viviendo”.

PASEO

Los ojos de Matías hace mucho que habían perdido su


brillo, ¿cuándo ocurrió?

¿Fue cuando le pusieron seguro a los cajones


donde se guardan los cuchillos y las pastillas?

¿Fue desde que no lo dejan ni un minuto a solas?

No importa desde cuándo sino la razón de ello…

Y para solucionar su problema, le compraron un


perro, uno que no hace otra cosa que pedir a diario
su estúpido paseo, Matías tiene que sacarlo, es parte
de su terapia, dicen que es bueno conectarse conotro
ser vivo. ¿Qué de bueno hay en eso?

¡Oh!, sí hay algo bueno… ¡no!, es algo maravilloso


¡lo mejor que le haya podido ocurrir!, ¿por qué apenas
se dio cuenta? Matías toma la correa y avisa que lle-
vará al perro a dar un paseo; todos sonríen pues es la
primera vez que él toma la iniciativa. Pide ir a solas y
lo aceptan ya que el parque no queda lejos…

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… Al llegar ahí, Matías desata al animal, correhasta
un árbol, ata un extremo de la correa y despuéshace
realidad su deseo.

SONRISA

Cuando siento que no puedo más, me paro frente al


espejo y sonrío... Lo hago imaginando que tú lo haces.
Supongo que haber tenido una gemela no es tan malo;
aunque ya no estás, puedo ver una parte de ti en mí.

¿CUÁNTO?

¿Cuánto tarda el tiempo en sanar?, llevo tanto


naufragando en mi tristeza que, quizá, ya soy llanto y
no lo he notado.

CONMIGO

Un día me descubrí conversando y riendo, pero entre


cada broma y carcajada un vacío inexplicable hacía
más y más profundo el hueco en lo que yo suelo sentir
y llamar “alma”. No entendía lo que me pasaba hasta
que alguien me preguntó: ¿estás triste?

Entonces lo entendí, la tristeza finalmente había


venido a presentarse y convertirse en una conmigo.

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PARAGUAS

Bajo el paraguas se cubría de la lluvia, pero no de sus


lágrimas.

PÁGINAS EN BLANCO

Lucía siempre llevaba un diario con ella y no tenía


miedo de perderlo, pues nadie jamás podría leerlo.
Cada noche escribía con sus lágrimas todo el dolor
que sentía, de esa forma pensaba que no era real.

TIEMPO

El tiempo tiene el trabajo más difícil de todos, sanar


corazones heridos que no dejan de gritar, llorar,
rabiar: “¿por qué yo?”... El tiempo zurce con hilos de
consuelo, no es que te haga olvidar, pero sí logra que
duela menos.

CANSANCIO

Estaba harta de escuchar a los mayores decirle


“tiempo es lo que te sobra para ser feliz”... Ella no
quería serlo, así que cortó sus venas y espero
pacientemente a la muerte, ¡total!, sangre era lo que
también le sobraba.

68
ESTRELLA

Cuando me dijo “en lugar de bajarte una estrella,me


convertiré en una”, no imaginé que estuviera
anunciándome su muerte.

COMUNIÓN

En el catecismo le dijeron que comería la carney


bebería la sangre de Cristo y, desde ese día,
comprendió que era correcto el canibalismo.

PLAGA

—¿Estás diciendo que la humanidad vivió antes en


otro planeta?

—En otro universo.

—¿Y qué hacemos aquí en la Tierra?

—Fuimos desechados.

—¿Por qué?

—Por defectuosos, éramos una plaga.

—...

—Y veo que seguimos siéndolo.

69
DIOS

Logramos entrar al área 51 y descubrimos su gran


secreto... Aquí mantienen secuestrado a “Dios”, seve
que llevan tiempo martirizándolo. ¿La razón?, los
humanos quieren más especies, más agua, más riquezas
y él está cansado, arrepentido de habernos creado.

MIÉRCOLES DE CENIZA

Soñé que era lágrimas, miedos, risa, dolor, esperanza


y nada, ¡nada! Quise despertar, pero escuché la voz
de un hombre decir: “polvo eres y en polvo te
convertirás”, después sentí como mi existencia era
impuesta en la frente de alguien más.

DECADENCIA

Los seres humanos no somos la creación perfecta, con


nosotros, Dios perdió su divinidad.

70
IGUALDAD

Durante mucho tiempo a Tomás lo habían torturado


todos los niños del pueblo, nadie lo defendía porque
era huérfano y ciego. Sin embargo, él no les guardaba
rencor, un día lo persiguieron y golpearon tanto que
terminó perdiéndose en el bosque y ahí pasó la noche.

Escuchó gruñidos, pasos y después silencio, sabía


que no eran los niños así que, sintiéndose a salvo, se
quedó dormido. Los demonios que habían llegado
para aterrarlo quedaron completamente sorprendidos,
no entendían cómo ese niño estaba tan tranquilo y fue
tanta su curiosidad que lo devolvieron al pueblo y se
dedicaron a observarlo.

Así pasaron los días y Tomás siempre volvía con


ellos al bosque, les hablaba y agradecía su buen trato
y compañía. Después de unos meses, lo regresaron al
pueblo y él notó algo diferente, nadie lo había moles-
tado y antes de ser golpeado se dirigió al bosque, ahí
los demonios lo esperaban y al tenerlo frente a ellos,
uno habló:

—Te quisimos dar un regalo.

—¿Qué es?

—¡Igualdad!

—¿Igualdad?, no entiendo.

—Sí, le hemos sacado los ojos a todos los niños


del pueblo, ahora ya nadie podrá burlarse de ti ni
llamarte “el pobre ciego”.

73
74
***

Julia estaba desesperada por sus hijos, por eso pidió


un hechizo de protección. La bruja aceptó, le bastó ver
los moretones en todo el cuerpo para entender. Así
pues, fue en búsqueda del responsable y sin recurrir
a su magia sólo ocupó un hacha y cortó las manos del
golpeador.

INQUISICIÓN

Las últimas palabras de la mujer que acusaron de


bruja, dejaron mudos a todos los presentes:

“Temen y maldicen a una mujer que cura con


hierbas, por eso me llaman bruja y me condenan...
Pero ¿qué hay de ustedes y de aquel que sostiene esa
cruz? Ustedes son los malos, son la oscuridad an-
siosa de cubrir la luz”.

ENEMIGO

Recurrió a la magia para que le mostrara a su peor


enemigo y así poder encerrarlo con la ayuda de un
hechizo, la bruja sonrió ante tal petición, le pidió
mirar su reflejo y después de un parpadeo, él quedó
atrapado dentro de un espejo.

75
VERDUGO

Se convirtió en verdugo porque la Iglesia le dijo que


una bruja se había llevado a su hija. Por eso amaba
torturarlas lentamente antes de colgarlas.

—Tus últimas palabras, ¿cuáles son?

—Te perdono, papá.

76
SALVACIÓN

Reflexionando en silencio, la chica y su perro se


encontraban frente al lago. Ahí admiraban el
horizonte, mientras el agua tranquila reflejaba el cielo
nublado. Ella había rescatado al perro de un pasado
oscuro, pero lo que no sabía era que él también la
había salvado a ella de la profunda depresión que la
consumía.

En medio de la melancolía, el lago les recordaba


que, a veces, las almas heridas pueden encontrar sa-
nación mutua en los lazos más inesperados.

MONOTONÍA

Laura sigue al pie de la letra una rutina que estableció


desde hace diez años.

6:45 Levantarse.

6:50 Bañarse.

7:30 Desayunar.

8:00 Salir de casa.

9:30 Entrar al trabajo.

15:00 Comida.

19:00 Salir del trabajo.

77
20:30 Llegar a casa.

21:15 Cenar.

22:00 Marcar, con una paloma, en un pizarrón que


tiene colgado al lado de su cama, si ha cumplido con
su horario…

Y después remarcar con mucho pesar una palabra


“vivir”.

¿ES MI CULPA?

El pobre sapo está más que triste ya que, después


de haber sido acosado por una princesa, aceptó ser
besado por ella.

¿Y luego?

Ha sido insultado y arrojado nuevamente a su


charco.

—¡Tú no eres un príncipe convertido en rana! ¡Me


das asco!

¡Ah!, pobrecito, ¿qué culpa tiene él de que lo hayan


confundido?, ahora sigue siendo lo que siempre ha
sido: un sapo, pero uno con el corazón herido.

78
JAQUE MATE

La muerte da todo de ella para ganar esa partida, pero


Dios siempre es el que dice: “jaque mate”.

—¿Por qué seguimos haciendo esto?, siempre


ganas y tu premio es llevarte a uno de ellos.

—Es divertido, pero no te hagas la inocente, que


nunca me haces fácil la partida.

NARCISO

Miguel y Carlos eran gemelos idénticos y aparente-


mente se llevaban de maravilla; sin embargo, uno de
ellos siempre se consideró el más guapo de los dos, su
obsesión era tal que no podía soportar la idea de que
alguien más fuera tan atractivo como él.

Un día, la mente de Miguel se desequilibró. Ideó


un plan siniestro. Esperó a que Carlos estuviera pro-
fundamente dormido y, con un cuchillo en la mano, se
acercó sigilosamente a su cama. Sin ninguna piedad,
apuñaló a su hermano una…

Y otra…

¡Y otra vez!

79
Hasta que la vida abandonó el cuerpo de Carlos…
Miguel sonrió con satisfacción al comprobar que,
ahora, era el único guapo de la familia.

FELICIDAD

Dicen que el dinero no compra la felicidad, ¡ja!


¿Piensan que el prozac es gratis?

ANSIEDAD

En lo más profundo de la oscuridad, donde la razón se


desvanece, se encuentra un incómodo huésped, este
se alimenta del miedo; cada latido del corazónes un
recordatorio constante de su presencia.

Se alimenta de tus sueños convirtiéndolos en pe-


sadillas, distorsiona la realidad y siembra la duda en
cada paso que das.

Intentas escapar, pero siempre encuentra una


grieta por la que colarse. No importa cuánto luches,
siempre estará ahí, esperando en las sombras, recor-
dándote que nunca podrás escapar.

80
ATUENDO PERFECTO

Cada que miro en el armario y dudo qué ponerme, la


inseguridad, me susurra: “úsame, luzco genial en ti”.

CAPRICHO

¡Ah!, de ser cierta la historia de la creación del mundo


que me contaron en el catecismo, estoy cansada de
vivir entre las ruinas de un capricho que no le salió
bien a Dios.

ESPANTAPÁJAROS

Era un ornitólogo y pidió que, al morir, sus cenizas


fueran arrojadas al campo, así podría ir a donde lo
llevara el viento, ¡volar como si fuera un ave! Su deseo
se cumplió, pero no como él soñó ya que su esposa
dejó su cuerpo a merced de las aves carroñeras.

ASUNTO PENDIENTE

¿Cuál es tu asunto pendiente?, preguntó la médium.

—Él —respondió el alma—, al que llamas esposo,


debió morir conmigo porque antes de ser tu prome-
tido, fue el mío.

81
Dicho esto, el alma besó al hombre hasta quitarle
el último suspiro.

LA COMIDA NO SE TIRA

Dicen que “la tragedia no es morir, sino desperdi-


ciarse”, por esa razón, yo consigo la carne en la morgue.

NO SOPORTAR MÁS

Y de pronto una oleada de emociones reprimidas

me fastidia, me detiene, me sofoca,

¡ah!, la garganta arde,

el pecho duele,

¡lágrimas brotan!

MANTRA

“Vuelve al punto donde el alma era libre,

antes que las sombras se adueñaran de ti,

arranca las cadenas de la incertidumbre

y, sobre todo, aférrate a vivir”.

82
INTRUSIVOS…

Han vuelto las noches de insomnio,

¿también han de alzarse las sombras

de sueños rotos?

PUENTE

Siempre terminaba a la orilla del mismo puentey


pasaba horas observando el mar… las olas, en
constante movimiento, parecían reflejar su inquietud
interna. Cada amanecer era un recordatorio desu
soledad, cada anochecer, una invitación a la
desesperanza.

¡ESCAPE!

Carlos, quien estaba agotado después de correr y


haber recibido tantos golpes, sintió de pronto una
gran paz.

—¿De qué te ríes?, ¿piensas que aquí hay un lugar


dónde escapar?

—¡Lo hay!

Carlos sonrió y sin titubear saltó, sabía que sus


acosadores no irían tras de él, la muerte era su escape.

83
Colección Itihasa
Esta primera edición consta de 200 ejemplares.
Se terminó de imprimir en diciembre de 2023 en
Litográfica Ingramex, S.A. de C.V.
Centeno 162-1, Col. Granjas Esmeralda,
Delegación Iztapalapa. C.P. 09810,
Ciudad de México.

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