MODULO  I                                                            VIDA  ESPIRITUAL     CLASE  –  7  

El FRUTO DEL ESPÍRITU

Parte 1
Cada árbol da fruto no soló por su especie sino también por su condición, resulta mas fácil
reconocer a un árbol por su fruto que por la abundancia de su follaje, o por lo robusto de su
tronco o por la extenso de sus ramas.

De igual manera la autenticidad de la vida Cristian será identificada no por los DONES del
Espíritu, sino, por los FRUTOS del Espíritu que se dejen reflejar.

Los FRUTOS del Espíritu son virtudes espirituales los cuales el creyente debe desarrollar.
Los frutos de los que estamos hablando son “nueve” y están en Gálatas 5:22 “Mas el fruto del
Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra
tales cosas no hay ley.

Los frutos del Espíritu, como en lo natural, forma parte integral del árbol, el FRUTO no se da
por separado puesto que surge del mismo tronco y es alimentado de la misma raíz. Por lo que
entendemos que el FRUTO del Espíritu forma parte de mi ser y tiene todo que ver conmigo; es
parte de mi y surge de mi.

LOS DONES DEL ESPIRITU También son “nueve” pero estos son habilidades sobrenaturales
nunca antes experimentadas.

Están clasificadas en tres categorías 3 de poder, 3 de revelación y 3 de inspiración. Tres hacen,

tres ven y tres dicen. Cabe señalar que al recibir UNO de los NUEVE dones también se recibe la
capacidad para actuar en los otros de la misma categoría y que además mientras mas llevemos
una vida espiritual no estaremos limitados a una sola categoría.

1 Corintios 12: 7-11 “Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para
provecho. Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia
según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el
mismo Espíritu. A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a
otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas. Pero todas estas cosas
las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.”

El don tiene que ver absolutamente del Espíritu Santo, quien lo da para que podamos cumplir con
el destino profético que Dios diseño para nuestra vida desde antes de que naciéramos.
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Mientras que los FRUTOS del amor, el gozo, la paz, la paciencia, la benignidad, la bondad, la fe
la mansedumbre y la templanza son virtudes que tu desarrollas, El DON, no forma parte de tu
ser, no te pertenece y no surge de ti.

Cuando Dios da un don no tiene nada que ver con el estilo de vida de la persona o con la
elección, porque el DON no es un fruto; es un regalo que tiene que ver con una habilidad
sobrenatural, que Dios da a quien él quiere y como él quiere y no hay nada que podamos hacer
en la vida para determinar el don que el Espíritu Santo nos dará.

EL FRUTO ES LO QUE NOS DEFINE

El don manifiesta la habilidad de Dios, mientras que el fruto manifiesta el carácter del
individuo; el fruto es lo que nos define, el don no define a nadie.

El DON es instantáneo, es vistoso y no requiere esfuerzo porque fue un regalo, el FRUTO por lo
contrario, lleva tiempo, es un proceso, se requiere de esfuerzo y de quebranto.
El FRUTO tiene que ver totalmente de ti, de cómo vives, como hablas, que haces, que decides,
como actúas, cual es tu conducta, etc.

Comprendamos que los frutos son el mejor indicador de las motivaciones personales.
Mateo 7:15-16 “ Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas,
pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los
espinos, o higos de los abrojos?”

¿QUÉ TIENE MAYOR IMPORTANCIA, EL DON O EL FRUTO?

Por lo regular se le da mas importancia al DON que al FRUTO y esto tiene que ver porque el
DON es una habilidad sorprendente y sobrenatural, sin embargo es un error no prestar la misma
importancia a los frutos, ya que depende de los FRUTOS que el DON perdure.
1 Corintios 13: 8 “El amor nunca deja de ser; pero las profecías se acabarán, y cesarán las
lenguas, y la ciencia acabará.”

Los dones son temporales, no son eternos, están limitados para esta vida y dejaran de existir
porque solo cumplen su propósito para esta vida.
DESARROLLO DE LOS FRUTOS

Los frutos del Espíritu también los podemos clasificar en tres categorías:

1.   Los tres primeros “amor, gozo y paz”, son especialmente en relación con Dios.
2.   Los siguientes tres “paciencia, benignidad y bondad”, son en relaciona al prójimo.
3.   Y los últimos tres “fe, mansedumbre y templanza”, son en relación a uno mismo.
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PRIMER CATEGORIA

EL AMOR
El primer fruto del Espíritu mencionado es EL AMOR, ya que representa la base de todos los
dones, de echo, el amor es lo que nos determina e impulsa para operar en los dones espirituales.

1 Corintios 13: 1-7 “Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser
como metal que resuena, o címbalo que retiñe. Y si tuviese profecía, y entendiese todos los
misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no
tengo amor, nada soy. Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si
entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve. El amor es sufrido,
es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; no hace nada
indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; no se goza de la injusticia, mas se
goza de la verdad. Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.”

El Fruto del amor es abundante, continuo y fiel, es un amor sublime, santo y abnegado que
procede del inmenso amor de Cristo, derramado por el Espíritu Santo en nuestro corazón. Es un
amor humilde y generoso, nos sentimentalista ni preferencial. Este es un amor que abarca el
corazón y la mente del creyente. Es perceptivo, inteligente y práctico. Es un amor que discierne y
se esfuerza por escoger lo mejor y lo que realmente agrada al Señor y a los demás.

Debemos saber que Dios no solo tiene amor; el es amor. 1 Juan 4: 8 “El que no ama, no ha
conocido a Dios; porque Dios es amor.”

EL GOZO
A diferencia de la felicidad el gozo no es resultado de circunstancias externas, depende
únicamente de la actividad del Espíritu Santo en la vida de una persona, así pues las
circunstancias aunque adversas no influyen en la voluntad de las personas que tienen una
relación profunda con el Padre.

El gozo es activado en la presencia de Dios. Salmo 16:11 “Me mostrarás la senda de la vida; en
tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre.”

El gozo del Señor puede coexistir con el sufrimiento. Hechos 5:41 “Y ellos salieron de la
presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa
del Nombre.” Santiago 1:2

El gozo del Espíritu puede convivir con la tristeza. Romanos 12:12 “gozosos en la esperanza;
sufridos en la tribulación; constantes en la oración;”

El gozo del Espíritu no puede coexistir con el pecado. Salmo 51 El rey David después de : v3
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“Porque yo reconozco mis rebeliones, y mi pecado está siempre delante de mí.” V12 “Vuélveme
el gozo de tu salvación, y espíritu noble me sustente.”

Nuestro gozo aumenta a medida que crecemos en el conocimiento del Señor. Al principio, quizás,
podemos regocijarnos en medio de incomodidades pequeñas, enfermedades y molestias
triviales. Pero el Espíritu de Dios desea llevarnos al punto donde podemos ver a Dios aun cuando
las circunstancias sean peor que nunca y regocijarnos al saber que Su camino es perfecto.

Sabemos que hemos llegado a la madurez espiritual cuando podemos decir con Habacuc 3:17-
18: “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos, aunque falte el producto del olivo,
y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas
en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación”.

LA PAZ

Esta paz es más que una simple quietud o la ausencia de problemas en la vida. Ella ofrece,
ciertamente, un ambiente de tranquilidad y sosiego, pero también incluye salud y bienestar
espiritual, junto con la certidumbre de que se está en buena relación con Dios.

Filipenses 4:7 “Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros
corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.”

Lo que se refiere al decir que la paz de Dios sobrepasa el entendimiento, no se refiere a que no
la podemos entender, sino mas bien se refiere a que supera todos los esfuerzos mentales por
alcanzarla.

MINISTRAR:

Ponte de pie y pídele al Señor que te de su amor, que te enseñe a amar, que derrame en ti de su
gracia para amar…
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Los 9 Frutos del Espíritu Santo

RETROALIMENTACIÓN

De la clase del día de hoy es importante que realices una reflexión de lo que aprendiste.

1. Escribe los nueve dones del Espíritu.

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2. ¿Los frutos del Espíritu manifiestan el poder de Dios o nuestro carácter?

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3. ¿Los primeros tres frutos están relacionados con?

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Leer el capitulo de 1 Juan 4