Está en la página 1de 156

PREHISTORIA, ETNOHISTORIA E

HISTORIA DEL CANTÓN CHONE

1
CAPÍTULO I

ARQUEOLOGÍA DEL CANTÓN CHONE Y SU ÁREA DE INFLUENCIA

Hace muchos años tuvimos el agrado de conversar varias veces con el


arqueólogo Julio Viteri Gamboa (+) cuando dirigía el museo de la ESPOL en
Guayaquil. Nos dijo en una ocasión: “Manabí es un libro abierto en arqueología
solo hay que ir al campo y leerlo. Esa es vuestra misión”. Más de cuarenta
años después, estamos totalmente convencidos de que nuestra provincia tiene
invalorables sitios arqueológicos desde pequeñas comarcas hasta los grandes
poblados que registraron los cronistas de indias y las investigaciones
posteriores.

En esta tierra hermosa se han detectado imponentes sitios como Cerro


Jaboncillo, Salango, San Isidro, Japotó, Jama donde hay concentraciones de
sitios en, al menos, tres sectores de esta cuenca; en Río Grande, Tablada de
Sánchez, La Ñarusa, El Aguacate, El Ceibo, El Achiote o Coñaque que tienen
terrazas, canales, albarradas, montículos, estructuras con plataformas, con
varias ocupaciones culturales que van desde una a 15 hectáreas o más.
Alrededor del humedal La Segua los hay con restos de conchas y moluscos
asociados con cerámicas antiguas. Hay petroglifos especialmente al este del
cantón tallados en cuevas o en paredes de roca. Las evidencias de erupciones
volcánicas se pueden observar a simple vista en Simón Bolívar, Boyacá,
Canuto, La Rivera, Eloy Alfaro, Río Grande, Platanales, Monduque, San Pablo,
Los Chaschajos y otros lugares. Enormes montículos como en Bejucal
(Canuto) o laderas en las que se construyeron terrazas modificando el paisaje
en beneficio de los antiguos habitantes y que en la actualidad son
aprovechadas por nuestros campesinos para la siembra de sus cultivos.

Algunos de nuestros ríos y esteros han labrado sus cauces dejando al


descubierto fósiles de origen marino como descubrimos en Río Grande, Río
Platanales, Esteros El Zapote, El Jobo y La Guabina aportantes del Río
Mosquito, Estero Tres Bocas de Ricaurte. Estos fósiles también los
encontramos en cerro Mirador y Cerro de Río Grande en la construcción de

2
vías. Seguimos las huellas de nuestros antepasados en los caminos
ancestrales mientras buscamos conocer el origen de la palabra Chone.

En el norte de Manabí se han realizado algunas investigaciones en las áreas:


arqueológica, prehistoria, etnohistoria e historia, pero las mismas son
desconocidas para la gran mayoría de la población y en el ámbito académico
son consideradas como línea base para futuras investigaciones por
arqueólogos y otros expertos en el tema que, en la mayoría de los casos
entregan sus tesis a las universidades que las publican en sus respectivas
páginas web mientras que los informes de los arqueólogos que realizan
investigaciones de campo y excavaciones son entregados al Instituto Nacional
de Patrimonio Cultural (INPC) pasando a engrosar sus archivos porque no son
publicados. Algunos de estos investigadores publican artículos científicos
cortos que no cubren las expectativas de los lectores sin aportar con datos
relevantes sobre nuestros orígenes.

Esto incide en el escaso conocimiento de nuestro pasado en la mayoría de la


población inclusive en el ámbito académico no relacionado con el tema por lo
que podemos encontrar en referencias “históricas cantonales” menciones a
mayas, mochicas, chibchas u otras culturas que no tienen nada que ver con
nuestro pasado y que devienen de lecturas de libros de historia en donde se
plantea la evolución de nuestras culturas desde lo externo, con escasas
referencias a estudios efectuados sobre arqueología y etnohistoria
interpretándola de acuerdo a datos parciales y muchas veces alejados de la
realidad; mas, no desconocemos los contactos que se produjeron a lo largo del
tiempo con otras comunidades regionales, incluso fuera de las actuales
fronteras de nuestro país.

Esta investigación sobre la prehistoria, etnohistoria e historia del Cantón Chone


y su área de influencia aporta con datos históricos secuenciales
correspondientes a la zona de estudio en las áreas de arqueología, etnografía,
historia e investigación documental y bibliográfica que incluye mapas antiguos y
otros aspectos de interés cultural, así como los avances logrados por
profesionales en las áreas mencionadas anteriormente que han realizado
publicaciones.
3
Hay zonas del cantón
y sus áreas aledañas
en las que no existe
ninguna información
oficial sobre la
prehistoria e historia a
pesar de las
evidencias
arqueológicas e
históricas en territorio,
por lo que son “zonas
grises” (Gráfico 1) en
el conocimiento de
nuestro pasado y que
se requieren investigar
comenzando con
prospección de campo
y registro de sitios

Existe un archivo
arqueológico que se
levantó durante el
inventario de bienes
patrimoniales del
estado en los años 2007-2008 que hemos revisado para esta investigación
incorporando información de nuevos sitios que esta propuesta reconoció
durante la exploración y prospección de campo realizada por el autor en los
últimos quince años.

Brevemente haremos una caracterización de la provincia de Manabí y Chone


respectivamente abarcando aspectos geográficos, climáticos, geológicos y
medio ambientales entre otros. Antes de entrar en contexto local es necesario
hacer una breve caracterización del Cantón Chone para luego revisar las
últimas investigaciones sobre el poblamiento de América, su evolución cultural

4
desde los primeros cazadores-recolectores-forreajadores que habitaron este
continente y su paso hacia el desarrollo de la agricultura aunque no
necesariamente a la conversión en alfareros cultivadores puesto que algunos
pueblos desarrollaron agricultura incipiente mucho antes que los recipientes
cerámicos (ver: El Amanecer de todo, de David Graeber y David Wengrow).

En la siguiente parte abarcaremos el desarrollo de los antiguos habitantes de la


zona estudiada desde los distintos períodos en los que ha dividido la
Arqueología del Ecuador basados en las investigaciones realizadas por
arqueólogos e historiadores desde fines del siglo XIX hasta la actualidad.

La Provincia de Manabí

Fue creada por el Libertador Simón Bolívar el 25 de junio


de 18241. Con una superficie actual de 19.516,6 Km 2,
una población de 1’592.840 habitantes dividida en 22
Cantones: Pedernales, El Carmen, Jama, Flavio Alfaro,
San Vicente, Chone, Pichincha, Sucre, Tosagua, Bolívar,
Junín, Rocafuerte, Portoviejo, Manta, Jaramijó,
Montecristi, Santa Ana, Olmedo, Jipijapa, Puerto López y
Paján, Veinticuatro de Mayo2 con 55 parroquias rurales

La franja litoral tiene un clima tropical mega térmico


semiárido con lluvias menores a 500 mm con
una estación de lluvias desde fines de
diciembre hasta principios de mayo en
condiciones normales (14% de la superficie
provincial). Las temperaturas pueden variar de
18o Celsius hasta 40 o. La siguiente franja
climática corresponde al clima mega térmico
tropical seco (22% de la superficie provincial).
con precipitaciones de 500 a 1000 mm anuales con rangos de temperatura
parecidos a la anterior franja. La franja climática es el tropical mega térmico
1
Hasta hoy, no se sabe por qué Bolívar escogió ese nombre para la nueva provincia. Algunos
investigadores plantean que el nombre se debe a una parcialidad indígena que Cieza de León menciona en
esta región, pero probablemente, Bolívar no conoció ese dato.
2
PDOT Manabí 2030. GAD Provincial de Manabí. P. 6
5
semi húmedo (58% de la superficie provincial) con promedio de precipitaciones
desde 500 a 1000 mm de lluvia anuales y temperaturas que van desde 20 a 40 o
Centígrados. Finalmente, el clima mega térmico húmedo (5% de la superficie
provincial) en el noreste de Manabí con precipitaciones de 1000 a 2000 mm al
año con temperaturas de 15 a 24oC.

Geología

Manabí, geológicamente,
se encuentra en la
denominada cuenca de
Manabí constituida por
rocas cretácicas de la
formación Piñón sobre
las que están rocas
vulcano-terrígenas de la
Formación Cayo, y
clásticas neríticas de las
formaciones Cerro, San
Mateo, Playa Rica,
Tosagua Angostura,
Onzole y Borbón3.

Las terrazas aluviales se


ubican en las cuencas
bajas de los ríos Chone,
Carrizal, Canuto, Jama y Portoviejo con frecuentes inundaciones que provocan
millones de dólares en pérdidas cada año puesto que las represas construidas
en las cuencas altas tienen poca efectividad para el control de las inundaciones
porque los técnicos de los organismos estatales en todos sus niveles no
entienden las dinámicas hidráulicas de nuestros ríos. Un ejemplo de este
desconocimiento son las obras de desazolve que se efectúan por tramos, el
corte de meandros de los ríos, el taponamiento de las vías naturales de

3
Idem. P. 10
6
evacuación de aguas, entre otras acciones, sin comprender la importancia de la
recarga de acuíferos.

Hidrografía

En la provincia hay las


siguientes cuencas
hidrográficas: 12 Río
Esmeraldas, 21 Río
Cojimíes, 22 Río
Marcos, 23 Rio Cuaque,
24 Estero Don Juan, 25
Río Jama, 26 Río
Muchacho, 27 Río
Briseño, 28 Río Chone,
29 Estero Pajonal, 30
Río Portoviejo, 31 Río
Jaramijó, 32 Río Manta,
33 Río San Mateo, 34
Río Cañas, 35 Río
Bravo, 36 Río
Cantagallo, 37 Río
Jipijapa, 38 Río Salaite,
39 Río Buena Vista, 40 Río Ayampe, 52 Río Guayas4.

Áreas protegidas

Las áreas protegidas son las siguientes5:

Bosque Protector Poza Honda de 35.856,40 Ha, Declaratoria No. 82 del 16 de


junio de 1972.

4
Los números corresponden a la clasificación del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología
5
PDOT Manabí 2030, p. 17
7
Bosque Protector Daule Peripa de 149,567,12 Ha, Declaratoria 684 del 13 de
mayo de 1987 (Con resolución ministerial No, 131 del 8 de mayo de 1987)

Bosque Protector Carrizal – Chone, Declaratoria No. 52 del 24 de octubre de


1988 con resolución ministerial No. 55 del 12 de octubre de 1988.

Parque Nacional Machalilla, 58.499,89 Ha, 26 de julio de 1979 la reserva


terrestre, y, 31 de marzo de 1994 la reserva marina. Se encuentra en la zona
costera sur de Manabí.

Reserva Ecológica Mache Chindul, 37.533,32 Ha, 9 de octubre de 1996


ubicada al norte de la provincia es compartida con Esmeraldas.

Refugio de Vida Silvestre Isla Corazón y las Islas Fragatas, 2.811,67 Ha, 11 de
marzo de 2002, ubicado en el estuario del Río Chone.

Refugio de vida silvestre terrestre y marino Manglares Estuario del río Muisne,
8.7776,46 Ha., 28 de marzo de 2003 (27/06/2016).

Refugio de Vida Silvestre y Marino Pacoche, 31.517,89 Ha, 2 de septiembre de


2008 (06/11/2014), ubicado en la parroquia San Lorenzo de Manta.

Reserva Marina Cantagallo – Machalilla, 142.266,45 Ha; 15 de enero de 2015,


ubicada en la parroquia Puerto Cayo de Jipijapa.

Humedal La Segua de 1742 hectáreas entre Chone y Tosagua.

Existen otras áreas declaradas como bosques protectores: Bosque Camarones


en Jama y la parroquia de Pedernales, 10 de Agosto. Parque Ecológico
Papagayo en Portoviejo. Isla del Amor en Pedernales, Tablada del Tigre – Bio
corredor Andarieles entre Junín y Quiroga (Bolívar). Bío Corredor de
Recreación Ecológica Cascada El Armadillo, Santa María-El Paraíso-La 14, El
Carmen.

Zonas Bióticas de Manabí

1. Manglar

2. Maleza desértica subtropical

3. Bosque espinoso tropical


8
4. Bosque espinoso tropical

5. Bosque muy húmedo montañoso

6. Bosque seco tropical

7. Bosque húmedo subtropical

8. Bosque muy húmedo montañoso

9. Bosque muy húmedo subtropical

Caracterización de Chone

Ubicación: Costa del Ecuador,


norte de la provincia de
Manabí.

Límites: al norte: Con el cantón


Pedernales y la provincia de
Esmeraldas. Al este: Con la
provincia de Santo Domingo,
Cantón El Carmen, Cantón
Flavio Alfaro. Al sur: Con
Cantón Pichincha, Cantón
Bolívar y Cantón Tosagua. Y al
oeste: Cantón San Vicente,
Cantón Sucre (Parroquia San
Isidro), Cantón Jama y Cantón
Pedernales.

Extensión: 3.570 Km²

Población: 130.121 h. (Censo 2022)

Temperatura Media Anual: 25,3 °C (19 a 40 °C)

Parroquias Urbanas: Chone y Santa Rita

9
Parroquias Rurales: Canuto,
San Antonio, Boyacá, Ricaurte,
Eloy Alfaro, Convento y
Chibunga.

Relieve:

Al norte el sistema montañoso de


Convento. En el centro del
territorio, hacia el Oeste, las
montañas de San Isidro y Balzar.
Hacia el Este las montañas de
Sánchez, El Toro, Vendido. Hacia
el sur, valle del río Chone y
montañas de Canuto. Las
elevaciones no sobrepasan los
600 msnm.

Cuencas hidrográficas:

Por el norte, el territorio del


cantón con sus distintos ríos,
aporta a las cuencas del río Esmeraldas (Quinindé, Mongoya, Chibunga); del
Coaque y del Jama (Convento, Yesca, La Isla).

Por el este a la cuenca del Guayas: Ñause, Vendido, Pescado.

En el sur del cantón está la cuenca Chone-Carrizal. De Chone aportan los ríos
San Lorenzo, Garrapata, Mosquito y Grande, y, el río Canuto se une al río
Carrizal –que viene desde el cantón Bolívar, cerca de Bachillero, y, el Carrizal
al río Chone en el sector conocido como Larrea para desembocar en el estuario
del Río Chone en la Bahía de Caráquez.

Flora y Fauna

10
Son correspondientes con las regiones ecológicas y bioclimáticas. En una
pequeña zona del norte del cantón, la flora corresponde al bosque tropical
húmedo. Una gran parte del territorio corresponde al bosque tropical (Monzón
Tropical). Parte de las parroquias Boyacá y San Antonio pertenecen al Bosque
Tropical Seco. Solo queda alrededor del 8% de los bosques primarios.

Respecto a la Fauna, no hay estudios cantonales precisos. Hay investigaciones


concretas sobre el Humedal La Segua6 en donde se reportan las siguientes
especies: 164 de aves, 12 de peces, 2 de crustáceos, 6 de reptiles, 2 de
anfibios, 8 de mamíferos.

Algunas especies de fauna ya se han extinguido en nuestra zona y otras están


en peligro. Entre las primeras podemos mencionar a ciertos peces como la
guabina, la zapata, la bonga. Mientras que la odola, el guacuco, la raspa balsa,
el barbudo, la vieja azul, entre otros están en serio peligro de extinción.

En cuanto a los mamíferos sobreviven en pequeños remanentes de bosques


los monos aulladores de la costa, guatusos, perezosos, guantas, conejos
(conocidos en nuestra zona como “mulas de monte”).

En aves en el campo podemos escuchar a las guacharacas, palomas de varias


especies hasta la turrenga, la paloma más pequeña de América. loros, pericos,
águilas, halcones, valdivias, colibríes y muchas especies más.

En reptiles destacan serpientes peligrosas como: equis, huascama, mona, coral


o menos dañinas como mata caballo (boa constrictor), volantusa, casera.

EL POBLAMIENTO DE AMÉRICA

6
Declaratoria de humedal Ramsar por el MAE el 7 de junio de 2000, número 1028 en el mundo y quinto
de importancia internacional para el Ecuador. Declarada Área de Conservación Provincial desde el 3 de
abril de 2015 por el GAD Provincial de Manabí.
11
Durante las últimas décadas del siglo XX se postuló que el continente
americano fue poblado alrededor de 23000 años antes de Cristo en oleadas
sucesivas de migrantes que aprovecharon el paso Beringia en el noroeste de
América, paso que estaba conectado con Asia porque el nivel del mar estaba
unos 120 metros más abajo que el nivel actual.

Otros autores han sostenido que esta migración se dio al final de la última
glaciación cuando comenzaba el Holoceno alrededor del 12800 AC.

12
Sin embargo, investigaciones recientes7 determinaron que el sitio Monteverde
en Chile, es el más antiguo lo que demuestra que los humanos modernos
(Homo Sapiens) llegaron a América hace más de treinta mil años. A este
evento se lo ha dado por llamar el poblamiento temprano y también se ha
determinado que los humanos llegaron a nuestras tierras en varias oleadas y
por varias vías, incluida la marítima. Esto por las investigaciones paleo
genéticas que nos aportan datos de la ascendencia de los distintos grupos
humanos que colonizaron nuestro continente.

7
Un haplogrupo es, en el estudio de la evolución molecular, un grupo grande de haplotipos, que son series
de alelos en lugares específicos de un cromosoma (Fuente: Wikipedia, 2022)
13
DIVISIÓN DE LA ARQUEOLOGÍA DEL ECUADOR

La periodización de la arqueología ecuatoriana es la que se detalla a


continuación siendo la más aceptada y que fue realizada por Emilio Estrada

bajo la influencia de la arqueología americana (Marcos, 1993), aunque varios


arqueólogos prefieren categorizar el desarrollo de nuestros antepasados en

14
“horizontes culturales” que, probablemente, puede ser útil para otros lugares de
nuestro continente. Esta periodización se basa en la clasificación de la
cerámica reflejada en los utensilios de uso cotidiano mientras que el pre
cerámico tiene otros indicadores.

PERÍODO PALEOINDIO O PRECERÁMICO 12000 – 4000 AC

Abarca desde el
período geológico
conocido como
Holoceno que
empieza después
de la última
glaciación
alrededor del
12800 AC. La
mayoría de los
sitios estudiados
que corresponden
a este período
han sido
encontrados en la
sierra ecuatoriana
desde Pichincha
hasta Loja lo que no significa la existencia de otros lugares de lo que
actualmente es Ecuador. Florencio Delgado y Richard Lunnis informaron de
dos hallazgos pre cerámicos en Julcuy (Jipijapa) y Salango (Puerto López)
respectivamente más las excavaciones realizadas por Karen Stothert en la
península de Santa Elena que corresponden a Las Vegas Temprano y Tardío.
Además, los sitios Gran Cacao al norte de la provincia de Los Ríos, y, Las
Mercedes y Los Naranjos en Santo Domingo.

Sitios precerámicos del Ecuador

SITIO ANTIGUEDAD LUGAR CARACTERÍSTICAS


Cerro Ilaló, Valle de Instrumentos líticos de
15
El Inga 7300-4000 AC Los Chillos, basalto y obsidiana. Puntas
Provincia de de proyectil tipo “cola de
Pichincha pescado”, lanceoladas o
foliáceas.
Jondachi ¿7000 AC? Valle de Misagualli, Instrumentos líticos como
Alto Napo, en la raederas, cuchillos,
confluencia de los perforadores, buriles y otros
ríos Misaguallí y artefactos compuestos.
Jondachi
A 2400 msnm este lugar
La cueva Negra de 7638 – 6405 AC Cantón Sigsig, sirvió como refugio. Restos
Chobshi Azuay. líticos, basurales y restos de
fauna. Puntas de proyectil
bifaciales..
Nacimiento del río A 3100 msnm, el lugar
Oña en el límite de corresponde al sub páramo
Cubilán 10206 – 8368 AC las provincias de y es la manifestación del
Loja, Azuay y paleo indio más al sur del
Zamora Chinchipe. Ecuador hasta ahora.
Puntas foliáceas y cuchillos
bifaciales
31 sitios conocidos hasta
ahora. Representa una
tradición cultural diferente
porque no utilizaron puntas
de proyectil o instrumentos
Pre-Vegas líticos especializados. La
11820-8850 AC subsistencia estuvo basada
Fase Temprana en el consumo de recursos
Las Vegas 9620 – 6000 AC marinos, explotación del
Fase Tardía manglar, ríos y esteros.
7000 – 4000 AC Provincia de Santa Cazaron mamíferos y
Elena roedores. Recolectaron
plantas y comenzaron la
domesticación de flora
silvestre como zapallos,
maíz, mate, lerén (raíz
comestible) así como la
yuca y otras especies.
Se ha reconocido la
transición hacia la cultura
Valdivia.
Las Vegas Sitio 80 8000-4600 AC Prov. Santa Elena Igual anterior
El Encanto 5125-3220 AC Isla Puná s/d
Las Mercedes 4900-4600 AC Santo Domingo No dejaron indicios de
agricultura. Cazadores
Recolectores
Los Naranjos 5355-4971 AC Santo Domingo Cazadores Recolectores
Gran Cacao Norte de Los Ríos.
7520-7340 AC Cerca de la Cazadores Recolectores
confluencia de los río
Gran Toachi y Baba
Julcuy 4000 AC Parroquia Julcuy, Cazadores Recolectores
Jipijapa, Manabí
Salango 4000 AC Parroquia Salango, Cazadores Recolectores
Puerto López,
Manabí
Montequinto 9858-8500 AC Cuenca alta del R. Cazadores Recolectores
Esmeraldas al
noroeste de Quito
Guaguacanoayacu 9278-7905 AC Río Canoayacu Cazadores Recolectores
Santa Elena Restos pre cerámicos
Altomayo parecidos a los de Las
Vegas

16
Analistas especializados en lítica de este período coinciden en que los grupos
humanos del paleoindio mantuvieron contacto y se establecieron en
Sudamérica antes que los Clovis en Norteamérica. Estos grupos humanos se
desplazaron de acuerdo a las estaciones del año en áreas determinadas a fin
de aprovechar mejor los recursos del medio. Esto es lo que Udo Oberem
(1976) propone cuando establece “los antiguos habitantes de la sierra
ecuatoriana tuvieron acceso a las diferentes ecologías” en una ponencia
presentada en el XLII Congreso Internacional de Americanistas en París. Es de
resaltar que los seres humanos de la antigüedad transformaron los recursos
naturales en su beneficio.

Una de las muchas dificultades de los arqueólogos consiste en determinar los


lugares de extracción de piedras para sus utensilios en lugares donde no
existen canteras. Los pobladores antiguos resolvieron esto de tres maneras:
una, tomando las duras piedras de las playas de los ríos; la segunda
determinando canteras locales y la tercera por intercambio como es el caso de
la obsidiana. Los primeros habitantes fueron cazadores recolectores que no

17
dejaron huellas de agricultura si es que acaso lo hicieron excepto en Las
Vegas.

Jama Coaque. Fragmento cerámico representando una serpiente. El Achiote. Río


Grande. Foto Boris Zambrano Cabrera
Las
Culturas Cerámicas ecuatorianas

PERIODIZACIÓN DE LAS CULTURAS EN EL ECUADOR


PERÍODO CERÁMICO 4000 AC - 1532 DC
Periodo Formativo 4000 – 500 AC
Formativo Temprano 4000 – 1450 AC
Formativo Tardío 1450 – 500 AC
Período Desarrollo Regional 500 AC – 500 DC
Período de Integración 500 – 1532 DC

El período formativo como su nombre lo indica es de formación en donde las


personas comienzan a delimitar una cultura mediante la implementación de
estrategias y tecnologías en propio beneficio despegando hacia la construcción
de formas socio económicas cada vez más complejas (Marcos, 1993) mediante
un largo proceso en la transformación de la naturaleza y producción de
alimentos. Comienza la sedentarización con el aparecimiento de la cerámica y
el desarrollo de técnicas agrícolas (Damp 2010). En Real Alto 8, península de
8
Sitio Valdivia, fase I a VII (3800-2000 aC)
18
Santa Elena, se ha investigado la transformación de una aldea muy reducida
hasta un poblado que albergó en su momento cúspide a centenas de
habitantes, definiendo la vivienda, definiendo la vivienda, la economía y la vida
ceremonial de Valdivia (Damp 2010). La domesticación de plantas para su
aprovechamiento alimentario se fue mejorando cada vez más al tiempo que
estos seres humanos pescaban y cazaban para obtener proteínas para su
nutrición.

El Formativo Tardío está representado por Chorrera con un desarrollo


sorprendente de la cerámica con interesantes técnicas decorativas como el
negativo e iridiscente, el uso del polícromo y moldes para la elaboración de
figurinas huecas.

Durante el siguiente período, Desarrollo Regional se producen cambios en la


vida de las personas que desarrollan otras estrategias para el aprovechamiento
de los recursos de su entorno. Encontramos en este período culturas que
tienen territorios específicos en su evolución sin dejar de lado los contactos que
generaron a su vez intercambio de conocimientos imprescindibles para su
supervivencia como la implementación de cultivos intensivos que son
mejorados con tecnologías hidráulicas porque había de enfrentarse a dos
estaciones climáticas diferentes: lluvias y sequías. Al igual que muchas
sociedades actuales, jamás se abandonó la caza, la pesca, la recolección y el
forrajeo. Los poblados crecieron en extensión mientras se extendieron en la
búsqueda de más y mejores tierras de cultivo. Los ceramistas Chorrera en el
formativo Tardío son reemplazados por otras fases culturales que dan origen a
otras, aunque no en todos los casos. Aparecen La Tolita, Jama Coaque, Bahía,
Guangala, Daule-Tejar, Jambelí y la Fase Guayaquil en el Litoral ecuatoriano.

En el periodo de Integración hay cambios en la estructura de la sociedad lo


que se refleja en la elaboración de los objetos que se relacionan con su vida
diaria, en la producción, en el manejo del entorno recomponiendo estructuras
sociales y económicas que se reflejan en los restos arqueológicos (Marcos,
1993). Se fortalecen las alianzas regionales y la expansión del comercio (Damp
2010). Las culturas que sobresalen son: Atacames, Jama Coaque II, Manteño,
Huancavilca, y Milagro Quevedo.
19
El comienzo y la finalización de las fases culturales en el marco, por ejemplo,
del período Formativo es flexible porque una fase cultural con las
características de este período puede pasar el límite imaginario en tiempo que
ha sido creado por los investigadores a fin de sistematizar la evolución de las
fases o culturas. Así, Engoroy siendo del Formativo Tardío llega hasta 100 AC 9,
época que correspondería a Desarrollo Regional. Formativo es indicativo de
“formación” en donde las culturas comienzan a “crear” tecnologías de distintos
tipos a fin de lograr mejores resultados. Marcos (1993; 48) relata que las
últimas investigaciones nos revelan que los alfareros o las alfareras mezclaron
las arcillas y sus desgrasantes10 “para conseguir pastas que permitieran a las
vasijas resistir los impactos de la manipulación y los choques térmicos a los
que son sometidos durante su uso en los fogones”. Estas técnicas se fueron
mejorando con el transcurso del tiempo hasta llegar a expresiones
extraordinarias.

Nuestras abuelas y madres cuando compraban una olla o alambique para agua
de los alfareros locales le hacían una “curación” que consistía “sobar o frotar” la
vasija por afuera utilizando cáscaras de plátano maduro y con esta acción
conseguían impermeabilizar el objeto de manera que el agua no filtre al exterior
conservándose más fresca para beber.

ANDANZAS DE NUESTRO PRIMEROS POBLADORES POR LA REGIÓN DE


CHONE Y SU ÁREA DE INFLUENCIA

Varios valdivianos11
sus familias arribaron
a las cercanías del
9
Richard Lunnis en Investigaciones arqueológicas en Salango, artículo.
10
Los desgrasantes se añaden a la pasta de arcilla una vez que esta ha sido depurada para lograr
plasticidad de la misma. Los desgrasantes comunes son arena y sustancias orgánicas como restos
vegetales.
11
Valdivia fue descubierta en 1956 por Emilio Estrada en el sitio San Pedro de Valdivia, península de
Santa Elena.
20
humedal La Segua. Buscaban tierras fértiles y otros recursos como agua y
bosques. Son agricultores que desarrollaron la cerámica hace más de mil años.
Han domesticado plantas para su uso como el maíz, el cacao, la calabaza,
entre otros. (Zeidler J., y Pearsall, Deborah, 2003)12.

Este supuesto evento debe haber ocurrido probablemente alrededor de 2500


AC. En realidad, no sabemos aún por dónde ni cuando llegaron los Valdivianos
al actual territorio del cantón Chone y la región de Manabí del Norte. Corey
Herrmann que ha realizado prospecciones y excavaciones en la micro cuenca
del Río Grande durante los años 2018 a 2022, excepto en 2020, recolectó
muestras de carbón orgánico que una vez analizadas dieron fechas de 1880
AC para el sitio La Ñarusa y 2440 AC para Platanales, en su marco de tesis
doctoral por la Universidad de Yale (EUA). “Por las evidencias creemos que la
presencia de Valdivia en esta región es más temprana de lo que pensábamos
antes y que nos retroceden varios siglos en la ocupación humana de estos
territorios” (Conversación personal, mayo de 2023).

En sitios como La Sabana, Los Guasmos, El Conchero, La Papaya y La Playita


de la parroquia San Antonio del cantón Chone hemos encontrado evidencia
cerámica de Valdivia asociada a restos de conchas y moluscos. Poco a poco,
los valdivianos ocuparon estos sectores por su cercanía al humedal y al
estuario del Río Chone rico en recursos como peces, crustáceos, moluscos,
aves, reptiles y mamíferos,

Conforme la población aumentaba, las familias recién formadas y algunos


mayores anduvieron en busca de nuevos sitios para explotar tanto en
agricultura como en las riquezas que proporcionaba el medio ambiente
estableciéndose en comunidades pequeñas, tal vez unidades familiares que
dominaron ciertas áreas a fin de aprovechar los recursos locales como madera,
tierra, agua, plantas, caza, pesca. Después avanzaron a los valles de los ríos:
Chone, San Lorenzo, Briceño, Jama, Grande, Mosquito y Garrapata. Salvo los
estudios realizados por Zeidler y otros en la cuenca del río Jama y por
Herrmann en la micro cuenca del río Grande de Chone, no contamos con

12
Menú del Hombre Valdivia. Artículo publicado el 9 de noviembre de 2003 en el Diario El Universo.
21
fechas de radiocarbono (14C)13 para determinar rutas de ocupación. También
hemos encontrado Valdivia al norte de Chone como en: La Betania, Las Yerbas
y Camarones en Flavio Alfaro.

En muchos sitios arqueológicos que hemos explorado se ha encontrado que ha


sido ocupado por varias fases culturales a lo largo del tiempo, desde Valdivia
hasta la última fase de Jama Coaque, excepto en lugares como la cuenca del
río Jama que estuvo prácticamente deshabitada cerca de 400 años luego de
una desastrosa erupción volcánica alrededor del 1590 AC que también afectó a
otros sectores de Manabí del Norte. En Coñaque (Río Grande) en un perfil del
camino pudimos observar restos cerámicos de Valdivia terminal, Chorrera y
Jama Coaque, Lo mismo vimos en la nueva escuela del sitio Platanales en la
micro cuenca del Rio Grande.

Valdivia pobló prácticamente toda la costa ecuatoriana e influenció a otras


culturas en la región interandina. Con seguridad podemos decir que las
personas que vivieron en estos lugares se trasladaron a otros porque se ha
encontrado, por ejemplo, obsidiana que es un vidrio de origen volcánico, así
como restos de conchas (Spondylus prínceps) y moluscos como caracoles,
extraídos de las profundidades marinas, estuarios, humedales, etc.

CULTURA
VALDIVIA.

En la actualidad
sabemos que esta
cultura evolucionó a
partir de Las Vegas
ubicando sus inicios
en la península de
Santa Elena.

Varias fases se han


determinado en la
13

22
evolución de Valdivia siendo la más aceptada aquella planteada por Betsy Hill
en 1972 y que tiene las siguientes fases:

Valdivia I: 3800-3200 AC

Valdivia II: 3200-2900 AC

Valdivia III: 2900-2600 AC

Valdivia IV: 2600-2400 AC

Valdivia V: 2400-2200 AC

Valdivia VI: 2200-2000 AC

Valdivia VII: 2000-1800 AC

Valdivia VIII: 1800-1450 AC14

Cerámica

El desarrollo de la cerámica en la cultura Valdivia, así como en otras regiones


del mundo no se relaciona exclusivamente al descubrimiento de la agricultura.
Es decir que no es un proceso “de la noche a la mañana” sino que tomó
muchos años. La cerámica permitió que los humanos pudieran cocer sus
alimentos especialmente los más duros para mejor digestión y
aprovechamiento nutricional15. Al principio la cerámica era tosca con pastas de
arcilla y desgrasantes en los que se puede notar a simple vista piedrecillas de
la arena y otros materiales.

Ollas y cuencos para distintos usos van siendo fabricados conforme se


adquieren nuevas experiencias y esto conlleva a la especialización de los
habitantes de manera que las sociedades van adquiriendo otros conocimientos
que son útiles para su progreso. Esto da paso a la generación de artistas que
se dedicarán a la representación del entorno en que desarrollan sus
actividades cotidianas trabajando en figuras que, en el caso de Valdivia, son
14
Esta clasificación no es rígida en cuanto al tiempo de desarrollo de cada fase debido a que no fue lo
mismo para todos los sitios. Por ejemplo, los sitios Valdivia del interior de la costa en la cuenca del
Guayas desarrollan la agricultura intensiva y estrategias para el manejo del agua.
15
Las legumbres son semillas que se crían en vainas: haba, frijol, garbanzo, lenteja, soja, maní.
23
mayoritariamente femeninas en sus distintos estados de madurez o condición
de desarrollo corporal como adolescentes, pubertad, mujeres embarazadas,
maternidad, adultez16.

Subsistencia

Conforme pasó el tiempo, los valdivianos desarrollaron una dieta variada que
consistió en vegetales, hortalizas, frutas, raíces y proteína animal de distinto
origen proveniente de la caza y recolección, pero principalmente de la siembra
en tierras fértiles en las que desarrollaron estrategias para obtener mejores
cosechas y mantener reservas para las épocas secas.

Agricultura

Se desarrolló desde actividades incipientes como describe Marcos (1993)


“horticultura de jardín” hasta huertos grandes y cultivos intensivos que tuvieron
su mayor auge a fines del período de Integración. Es razonable suponer que
los pobladores de las distintas comarcas intercambiaron conocimientos sobre la
utilidad de diversas plantas y su domesticación aprovechando sus propiedades
para alimentación, obtención de fibras para cordeles, sogas, cestería, espinas
para fabricar anzuelos, madera para casas y canoas, cercas, utensilios
(cucharas, cuencos, bototos17), catangas o nasas para pesca, trampas, etc.

Tecnologías hidráulicas

16
Ontaneda 2009, pp. 61-68
17
Los bototos son recipientes para portar agua elaborados de calabazas o de mate (Crescentia cujete L.)
24
En todos los ambientes se han desarrollado tecnologías para el manejo del
agua especialmente en zonas donde ésta es escasa o hay afectaciones por
fenómenos climáticos como sequías. Los Valdivianos transformaron sus
ambientes producto de la necesidad y de la observación ya que se dieron
cuenta que mediante algunas estrategias podrían cambiar su entorno para
mejorar la captación, dosificar el recurso agua y/o reteniéndola en albarradas,
creando humedales artificiales.

Albarradas

Una de esas primeras


estrategias fue construir
albarradas en la zona costera
del Ecuador especialmente en
la península de Santa Elena18 y
posteriormente en otros
lugares. Esto permitió que se
mantuvieran húmedas las
terrazas inferiores y poder
aprovechar el agua para las
siembras de verano.

Muchas de estas antiguas


construcciones han sido
eliminadas o dañadas
seriamente por la población
local. Por ejemplo, en el sector
de La Ñaruza encontramos
una albarrada que le hicieron
un canal para desaguarla y
aprovechar el espacio para la cría de cerdos.

En el sector de Estero Seco de Boyacá detectamos una serie de albarradas en


secuencia de arriba hacia abajo. En la cima de la cumbre a unos 160 msnm

18
Indicadores de sustentabilidad en sistemas de albarradas: aportes metodológicos. Silvia Álvarez y Laura
Zulaica, 2015.
25
existe una poza recolectora que deriva el agua hacia abajo a la siguiente
albarrada y así hasta 3 más. Notamos que el lecho por donde rueda el agua fue
hecho con una arcilla muy resistente a la erosión hídrica. Lamentablemente
este sitio fue afectado por el fenómeno El Niño de 1997-98. Otra albarrada en
montaña está ubicada en La Laguna (Ricaurte, Chone). Las albarradas no solo
son exclusivas de las zonas secas o semi áridas. Las hemos encontrado en
zonas de bosque tropical como en la Tablada de Sánchez.

Terrazas

También modificaron el suelo construyendo terrazas de cultivo que tuvieron


como finalidad dosificar la percolación del agua y evitar la erosión reteniendo
nutrientes importantes para los cultivos. En algunos lugares se usaron piedras
para sostener las terrazas y probablemente troncos de los que no se conservan
evidencias.

Cuando retornamos a la micro cuenca del Río Grande en 2010, encontramos


varios lugares con terrazas. Nos percatamos que las terrazas fueron
construidas con pendientes ligeras. Por ejemplo, la terraza más alta tiene una
pendiente hacia la izquierda, la siguiente hacia la derecha y así sucesivamente
26
(El Achiote, Río Grande, observación personal). De esta manera el agua de
lluvia se dosifica mientras se retienen nutrientes para los cultivos y después el
agua es derivada hacia los esteros. En otros lugares como El Ceibo (Río
Grande) y en El Madero de Hueso de Vaca (Canuto), las terrazas se
construyeron como una gran “escalera” siempre con la preocupación de evitar
la erosión.

Curiosamente, estos espacios que nuestros antepasados modificaron para


aprovecharlos como tierras de cultivos son los mismos en los que hasta ahora
los campesinos los usan para cultivos perennes como cacao, plátanos y
cítricos.

27
Fase Cultural San Pedro

En 1971 el arqueólogo alemán


Henning Bischof encontró un
tipo de cerámica diferente que
le puso por nombre San Pedro
en una comunidad del mismo
nombre en la actual provincia
de Santa Elena. Jorge Marcos
y los arqueólogos rusos
Aleksander Popov y Andrei
Tabarev de la Universidad
Federal del Extremo Oriente,
ejecutaron dos temporadas de
excavación (2014-2015) en
Real Alto encontrando nuevos
restos de esta cerámica.
Según estos investigadores
San Pedro representa una
cultura diferente porque los
detalles y los colores de las
piezas son distintas a Valdivia
lo que quiere decir que
cohabitaron juntos.19 Esta fase
19
San Pedro, una cerámica distinta a la Valdivia. Noticia publicada por Diario El Universo. 23 de julio de
2017. https://eluniverso.com/
28
cultural no se la ha encontrado en Manabí del Norte, limitándose a la Península
de Santa Elena.

SECUENCIA CULTURAL EN LA REGIÓN NORTE DE MANABÍ

La evolución cultural de la cuenca del rio Jama se interrumpe alrededor del


1590 AC debido a una devastadora erupción del volcán Guagua Pichincha que
arrojó ceniza hasta tres metros de espesor en muchos lugares de esta cuenca
lo que provocó la muerte o migración de sus habitantes. Probablemente los que
vivían cerca a la costa pudieron escapar en sus embarcaciones, pero los que
estaban al interior de esta zona sucumbieron ante tal devastador evento. En
estudios realizados por Zeidler y otros investigadores se han detectado por lo
menos nueve tefras volcánicas diferentes en Manabí del Norte (Vallejo Vargas,

Silvia)20

20
Tesis de Grado en Ingeniería Geológica, 2011.
29
El valle del río Chone y sus micro cuencas Río Grande, Mosquito, Garrapata,
San Lorenzo, Briceño21 y Canuto no tuvieron grandes afectaciones por
erupciones volcánicas aunque hemos identificado restos de cenizas en Río
Grande, Boyacá, Simón Bolívar, La Rivera, El Madero de Hueso de Vaca, Los
Chaschajos. En cantones cercanos como Tosagua se pueden evidenciar restos
de cenizas de origen volcánico.

En esta región no se ha encontrado hasta ahora otra fase cultural del período
Formativo distinta a Valdivia cuyos integrantes muestran transiciones hacia
otra fase cultural que se ha denominado Machalilla, pero esto no sucede en
esta zona. Esas transiciones se dieron en lo que hoy conocemos como el sur
de Manabí, Santa Elena y parte de Guayas. Sin embargo, en un artículo de
Heiko Prümers22 ubica una zona habitada por Machalilla entre el cabo de San
Francisco y la ciudad de Esmeraldas pero no tenemos evidencia de aquello. En
este mapa incluye una ocupación que abarca desde la Bahía de Caráquez
avanzando hacia el sur hasta el golfo de Guayaquil lo que sí es coherente con
las actuales investigaciones.

Cultura Machalilla
21
El río Briceño nace en la parroquia Boyacá perteneciente al cantón Chone.
22
Machalilla revisited – New data for the Early Formative Period of Coastal Ecuador, 2022.
30
No se han encontrado hasta la fecha sitios Machalilla en la región Manabí del
Norte pero los valdivianos sobrevivientes en la micro cuenca del Río Grande
transicionan en una fase que, Herrmann23, (Conversación personal, mayo de
2023) ha denominado preliminarmente como La Ñarusa y éstos a su vez, con
el transcurso del tiempo, pasan a formar la fase cultural Tabuchila I que es el
Chorrera de Manabí del Norte, alrededor del 1100 AC y después Tabuchila II.
Más adelante detallaremos el fenómeno cultural llamado Chorrera.

Tabuchila I evoluciona a Tabuchila II y posteriormente a Jama Coaque I


(Muchique 1) y luego a Jama Coaque II (Muchique 2, 3, 4 y 5) de acuerdo a los
estudios llevados a cabo por James Anthony Zeidler y sus colaboradores desde
1981 hasta 1994, en el valle del Río Jama en Manabí del Norte. Mientras tanto,
en el sur de Manabí, Santa Elena y parte de Guayas, Machalilla da origen a la
fase Engoroy que es el “Chorrera de la península”.

Esta transición no es clara o no se dio en Manabí del Norte. Herrmann


(Conversación personal, mayo 2023) cree que puede haber una “influencia muy
sutil de Machalilla en esta región” pero no hay sitios de esa cultura en la zona
que nos ocupa ahora. Las prospecciones de Zeidler, Herrmann y otros
investigadores no han reportado esta cerámica y tampoco el autor que ha
recorrido durante muchos años esta parte de Manabí registrando y
descubriendo muchos sitios arqueológicos24.

El fenómeno cultural llamado Chorrera

La cultura Chorrera fue descubierta en


1940 por Francisco Huerta Rendón en
la Hacienda La Compañía cerca de
Babahoyo en la provincia de Los Ríos.
Desde el inicio sorprendió por las
elaboradas formas de la cerámica que
por su finura algunos historiadores
llegaron a denominar “cerámica de

23
Corey A. Herrman, doctorando en Arqueología, Universidad de Yale, USA.
24
Boris Zambrano Cabrera trabajó como ejecutor-explorador de Sitios Arqueológicos en el marco del
Inventario Nacional de Bienes Patrimoniales del Estado en 2007-2008. ESPOL-CONAH.
31
cascara de huevo”. Chorrera es la cultura que mejor ha representado el entorno
en que se desarrolló mediante elaborados objetos que representan aves,
reptiles, peces, mamíferos y actividades y objetos de uso cotidiano como
canoas, personajes, shamanes, hombres y mujeres ricamente ataviados, así
como instrumentos musicales en ocarinas zoomorfas. La máxima expresión en
cerámica se da con las botellas silbato cuya forma básica es heredada de la
cultura Machalilla que creó la botella asa de doble estribo que después fue
imitada por otras culturas regionales inclusive fuera de las actuales fronteras
del Ecuador.

Los artesanos chorrera crearon la pintura iridiscente con compuestos metálicos


con la que decoraron sus cuencos, platos y compoteras que al ser
humedecidos parecen espejos pues reflejan las imágenes del entorno.

La presencia de
Chorrera en la zona
norte de Manabí estuvo
muy extendida
ocupando distintos
nichos ecológicos para
el mejor
aprovechamiento que
ofrecía el ambiente
desde la orilla del mar
hasta las altas
elevaciones de nuestra
geografía que en esta
parte del Ecuador llega
a unos 600 msnm, pasando por
humedales, llanos, valles, sabanas y
praderas.

Los Chorrera modifican el paisaje


especialmente en la parte baja de los
cerros construyendo terrazas de cultivo o
32
habitacionales, así como tolas y montículos ceremoniales o funerarios con la
finalidad de aprovechar mejor los recursos del entorno especialmente el agua
dosificando la escorrentía natural para construir albarradas que fue una
tecnología hidráulica usada desde los valdivianos.

33
CHORRERA Y SUS DISTINTAS MANIFESTACIONES
FASE TIEMPO ESPACIO
MAFA 700-350 AC Norte de la provincia de
Esmeraldas
TACHINA 1000-500 AC Sur de la provincia de
Esmeraldas
TABUCHILA I 1100-800 AC Norte de la provincia de Manabí
TABUCHILA II 800-500 AC Norte de la provincia de Manabí
CHORRERA 1100-200 AC Centro y Sur de la provincia de
Manabí, Guayas y Cuenca del
Río Guayas.
ENGOROY 840-100 AC Sur de Manabí, Provincia de
Santa Elena y región costera de
la provincia del Guayas,
JUBONES (Fase Temprana) 950 AC-1 DC Sudeste del Guayas y
Occidente del Azuay.
ARENILLAS 800-100 AC Provincia de El Oro.
PECHICHE 850-370 AC Norte de la costa peruana

34
Las excavaciones recientes en la sierra y en el norte del Ecuador y el sur
occidente de Colombia han revelado huellas del estilo Chorrera y esto es
dramático e imponente como ha descrito Scott (2014). La Misión Arqueológica
Española identificó este estilo en la fase Tachina de la costa occidental de
Esmeraldas. Francisco Valdez comprobó su existencia en La Tolita (Pre Tolita),
mientras que Bouchard encontró sus huellas en la región de Tumaco en la
frontera con Colombia. Zeidler y sus colaboradores comprobó su existencia en
la Fase Tabuchila en el norte de Manabí (Scott et. al).

Cultura Jama Coaque 500 AC – 1650 DC

Se desarrolló alrededor del 500 AC


en la zona norte de Manabí desde la
costa hasta el interior de la misma,
pero sin pasar a las vertientes de la
cuenca del Guayas de acuerdo a los
registros actuales. Comparte espacio
y tiempo con la cultura Chorrera en su
fase tardía. Zeidler (1994) la ha
dividido en dos etapas: Jama Coaque
I (Muchique 1 de 500 AC – 400 DC) y
Jama Coaque II (Muchique 2, 3, 4 y 5,
400 – 1650 DC). Esta división no es
arbitraria ya que los investigadores
consideran que después de la erupción del
volcán Atacazo por el año 400 de nuestra
era los Jama Coaque cambian sus
estrategias sociales tanto en agricultura
como cerámica, manejo del entorno,
aprovechamiento de recursos, lapidaria,
metalurgia, etc. Los Jama Coaque

35
responden a una larga tradición cerámica de más de 2000 años desde Inicios
de Desarrollo Regional hasta después del período de Integración c.a.1700 DC.

La plasticidad en la cerámica
Jama Coaque se destina a
representación de los seres
humanos potenciada en los
detalles de su elaboración que
se nota en manos y pies, así
como en la indumentaria
minuciosamente presentada en
las distintas figuras con
complicados vestidos en los que
siempre se puede identificar al
personaje antropomorfo
masculino y femenino. En las
figuras de animales destacan los
felinos y aves no siempre fáciles
de reconocer, pero también hay
figuras híbridas entre
humanos y seres
fantásticos.

36
37
Cultura Bahía 500 AC – 650 DC

Se desarrolla en las zonas


centro y sur de Manabí, desde
la Bahía de Caráquez y también
en la actual provincia de Santa
Elena. En la isla de La Plata
establecieron un centro de culto
al que peregrinaron durante
siglos. Excelentes navegantes,
desarrollaron técnicas de
navegación en balsas con el
uso de velas y timones
especiales llamados guaras lo
38
que les llevó al intercambio marítimo en largas distancias. Varias ensenadas y
bahías, como Manta, Jaramijó, Puerto López, Puerto Cayo y Bahía fueron sus
puertos más importantes.

A. Dorsey, en 1901 encontró las primeras evidencias en la isla mencionada


anteriormente, pero fue el historiador y arqueólogo Francisco Huerta Rendón
quien anunció en 1940 el descubrimiento de una civilización precolombina en
Bahía de Caráquez.

Años después, Emilio Estrada dividiría esta cultura


en dos fases, Bahía I y Bahía II. Algunos
investigadores creen, basados en evidencias que
esta cultura también ocupó territorios en Palenque
(Porras) y por nuestras indagaciones, creemos que
ocuparon valles de los ríos: El Toro, Pescado,
Vendido (Cantón Pichincha) y Ñause en el cantón
Chone. Estrada registró sitios bahía en Cativo al
sur de la ciudad de Chone mientras que el
arqueólogo Telmo López (Conversación personal)
nos informó en 2012 de la existencia de un sitio
Bahía cerca del actual botadero municipal de basura.

Ocupaciones Bahía también las podemos encontrar alrededor del humedal La


Segua que comparten los cantones Chone, Tosagua y Sucre.

las personas de Bahía devienen de una


transición desde Chorrera quienes van
cambiando paulatinamente su alfarería de
manera especial sus figuras que son
escultóricas, así como los gigantes encontrados
en la Playa Los Esteros en 1966 en una duna
de arena con orientación al mar.

En la fase sucesiva la alfarería es más sencilla


en la representación de personas y animales.

39
El estudio de las figuras antropomorfas nos hace deducir que los Bahía se
esmeraron en su cuidado personal. Lucían muchos aretes, collares de cuentas,
brazaletes, ajorcas en los tobillos y en media pierna. En cerámica
representaros su vida diaria y especialmente sus casas. Los orfebres
elaboraron en metales, oro, plata y cobre, máscaras repujadas, orejeras,
narigueras, etc. Utilizaron conchas marinas para artesanías. Realizaron
abundante producción de figurillas producidas en moldes herencia de sus
antepasados. Las figuras antropomorfas más grandes pueden llegar a medir
hasta 80 cm de altura.

“Con la piedra fabricaron varios tipos de hachas que debieron ser utilizadas
para la tala de árboles, así como para labrar madera para la fabricación de
casas y embarcaciones…representaron decoraciones geométricas grabadas
en piedra que llaman “tablillas” cuadradas o rectangulares que se desconoce
su significado”25.

25
Melvin Hoyos G., Guion del Museo Municipal de Guayaquil.
40
41
Manteños o Paches

Evolucionan a partir de la
Cultura Guangala (100 AC
– 800 DC) ocupando los
territorios de la zona central
de Manabí (Canoa, Los
Bravos, Chone, Canuto)
hasta Salango por el sur y
por el este hasta las
montañas que dividen
aguas hacia la cuenca del
Guayas.

El entorno ambiental en
que se desarrolló esta cultura
fue difícil sin embargo
supieron aprovecharlo
implementando tecnologías
para el manejo del agua con
la construcción de albarradas
o mejorando las ya existentes
heredadas de culturas
anteriores por ejemplo en el
sitio La Laguna (Cantón
Sucre) en donde hay un
sistema de albarradas
interconectadas y que la
evidencia arqueológica
muestra ocupaciones desde Valdivia. Estas albarradas se continúan usando en
la actualidad.

42
Lo que conocemos como
Manteño fue registrado
étnicamente como Pache y sus
antecesores, siempre fueron
llamados Guancavilcas, nombre
que se mantiene en los campos
de la Arqueología y Etnografía.
El límite de su territorio es cerca
de la Parroquia Canoa del
Cantón Sucre al norte de la
ciudad de Bahía de Caráquez
que está en el sur de la
desembocadura del río Chone y
por el sur llegan hasta la
población de Salango. Zeidler
(Conversación personal, dic.
14/23) ha encontrado en el valle del Río Jama varios mascarones de origen
Pache o Manteño que cree representan “alianzas políticas” ya que no hay más
elementos de esta cultura asociados como cerámica que indique la existencia
de un sitio arqueológico propiamente dicho.

Arqueológicamente tenemos similitudes en las manifestaciones de cultura


material entre estos grupos étnicos, de allí que es común encontrar la definición
generalizada de Manteño – Guancavilca, geográficamente la zona comprende
las actuales provincias de Manabí (parte central y sur), Santa Elena y Guayas.
Evidencias culturales tenemos en la ribera oeste del río Daule, hacia el norte,
hasta la población de Balzar en la cuenca media del río Guayas.

Se considera que esta sociedad fue compleja en sus manifestaciones sociales,


organizados en comunidades-ciudades de comerciantes, artesanos, orfebres,
agricultores, pescadores, sacerdotes y sabios que comerciaron prácticamente
en toda la costa pacífica americana la concha spondylus prínceps, el mullu, que
lo habían convertido en un objeto ritual en el área andina y su comercio
abarcaba hasta el golfo de California.

43
“Tienen los pueblos muy bien
trazadas sus calles, tienen muchos
géneros de hortalizas y tienen
mucho orden y justicia entre sí y es
gente de mucha policía” refirieron
los cronistas de indias. Y las primeras fuentes coloniales españolas señalan la
presencia de peces manta que le daría su nombre hasta la actualidad.

Los arqueólogos ecuatorianos J. Jijón y Emilio Estrada entre 1950 y 1960


identificaron esta cultura a lo largo de la costa central del Ecuador localizando
diversos sitios pensando en la existencia de un estado conformado a partir de
varias ciudades en una “Liga de Mercaderes”

Pedro Cieza de León nos informa: “En esta costa y tierra subjeta a la ciudad de
Puerto viejo y a la de Guayaquil ay maneras de gente: porque desde el cabo
de passaos y río santiago hasta el pueblo de çalango son los hombres
labrados en el rostro:”. “Hay dos puertos; el uno se dice Callo y el otro Zalango,
donde las naos surgen y toman agua y leña.”.

Mientras tanto Cabello de Balboa escribe: “La tierra donde esto sucedió a
nuestro Guayna - Cápac fue la de los Paches, aquella misma donde a cabo de
algunos años Francisco Pizarro pobló la ciudad de Puerto Viejo, …”. “…, y la
primera tierra que
tomaron en la costa
pirulera fue la boca del
río Coaque, de allí
fueron por tierra hasta
un valle en la provincia
de los Pachesdonde
poblaron la ciudad de
Puerto Viejo, que fue la
primera de esta parte
Antártica, …”.

44
Girolamo Benzoni describe brevemente: “… ciudad habitada por españoles,
que tiene unas veintidós casas de caña cubiertas de paja.”.

GUANCAVILCAS

Ocuparon toda la gran


península del Morro y Santa
Elena en el sector norte,
hasta la actual zona de Olón
y hacia el este, tenían como
población importante y límite,
a la población de Chongón.
Carlos Zevallos Menéndez26,
indicó que “la Guancavilca es
el origen de la cultura
Manteño, por tener mayor
antigüedad”.

Cabello de Balboa: “… fuimos a una provincia que se dice Odón, en los


Guancavilcas, tierra abundosa de comida, y allí estuvimos quince días, para
reformar la gente y los enfermos…desde la punta de Santa Elena va la costa
derechamente al Este, veinte leguas hasta Olón…” “…viven en esta ciudad y
su distrito dos naciones de indios, unos llamados Guamcavillcas, gente bien
dispuesta y blanca, limpios en sus vestidos y de buen parecer. Los otros se
llaman Chonos, morenos, no tan políticos como los Guamcavillcas. Los unos y
los otros son gente guerrera; sus armas: arco y flecha.”

GUANCAVILCAS DE LA PUNÁ

Nuevamente Cabello de Balboa: “Estos indios son grandes marineros; tienen


balsas grandes de madera liviana, con las cuales navegan y se meten en la
mar a pescar muchas leguas. Vienen a Guayaquil con ellas cargadas de
pescado, lizas, tollos, camarones y otros; …”.… “y rompiendo inaccesibles
asperezas llegó a la provincia de los Guancavilcas”… “Y con el progreso dél
26
En “Nuestras raíces huancavilcas”
45
hicieron los Cuzcos muchas y muy notables correrías, sujetaron los
Guancavilcas y Chonos, y pasaron a Túmbes”.

Girolamo Benzoni: “Pasados los límites de Puerto Viejo se entra al país de los
Guancavilcas, provincia inferior del Reino del Perú y el primer pueblo que se
encuentra en la costa se llama Colonchi y está situado cerca de la Punta de
Santa Elena.”.

CHONOS o Milagro Quevedo

El grupo humano que se ubicó en la zona más rica agrícolamente en el


Ecuador, la llamada cuenca del río Guayas, estuvo ocupada por los habitantes
de la cultura arqueológica denominada Milagro – Quevedo, siendo la Milagro
más antigua. Étnicamente a todo este grupo humano, lo denominaron los

46
cronistas en sus documentos como Chonos, que tienen como sus antecesores,
a la cultura Daule-Tejar, en el periodo de Desarrollo Regional. “Viven en esta
ciudad y su distrito dos naciones de indios, unos llamados guamcavillcas,
gente bien dispuesta y blanca, limpios en sus vestidos y de buen parecer; los
otros se llaman chonos, morenos, no tan políticos como los guamcavillcas; los
unos y los otros es gente guerrera; sus armas, arco y flecha.”.

Otto von Buchwald, arqueólogo alemán fue el primero en estudiar esta


cultura en Guayas y después Emilio Estrada le pondría el nombre que
lleva actualmente.

Esta cultura se caracteriza por


la construcción de enormes
montículos o tolas
habitacionales, ceremoniales
y funerarias.

La cerámica la elaboraron
mediante pastillaje y son
notables las llamadas “cocinas
de brujo”, pequeñas vasijas
asociadas a los curanderos o
shamanes con acabados de
incisiones, puntos y
representaciones zoomorfas
de serpientes, lechuzas y
ranas. Algunas vasijas tienen
polipodios trenzados y se usa
el engobe rojo27.

Los Chonos controlaron toda


la cuenca del Guayas hasta Santo Domingo y el sur de Esmeraldas. En Manabí
hay sitios en La Bramadora, Suma, Chila (El Carmen), San Juan del Búa
(Chone), Comunal, Tinaja (El Carmen) y en nuestra zona Chone, vía a Canuto,

27
Gutierrez Usillos, Andrés. Dioses, símbolos y alimentación en Los Andes: interrelación hombre-fauna
en el Ecuador.
47
San Lorenzo, El Madero y Bejucal de Canuto. Evidentemente se extendieron
por el territorio buscando tierras fértiles y control de redes de intercambio y
suministro de bienes de manera paulatina desde su origen como fase Milagro
que se propagó hacia Quevedo y otras zonas.

El INPC en su página web informa que: “Dentro del territorio Milagro Quevedo
se desarrolló el mayor centro agrícola conocido por la transformación de
terrenos pantanosos en tierras de cultivo movilizando enormes cantidades de
tierra con mano de obra que usó palos, azadas de madera y cestos de carga”
(Publicación del 19-09-2019).

Una de las características de esta cultura es el manejo de los metales para la


elaboración de joyas, brazaletes, narigueras, aretes, collares, etc., mediante
varias técnicas. Trabajaron el oro batido para vasijas y es frecuente el uso de
alambre de metales como cobre y oro para adornos complicados (Holm, 1983).
También fabricaron campanitas, anzuelos, pinzas depiladoras, agujas,
cascabeles y cuchillos.

La cerámica de la cultura Chonos no tiene mayores logros estéticos por lo que


es simple expresión de la rutina diaria de artefactos que se necesitan para el
desarrollo de las actividades cotidianas. Confeccionaron urnas gigantes usadas

48
para almacenar agua o granos, y como urnas funerarias. Hicieron torteros para
hilar, pequeñas figuras y silbatos.

Destacan las pequeñas vasijas que Otto von Buchwald denomino “cocinas de
brujo” decoradas con figuras de culebras, sapos, lianas, seres humanos y
pájaros que decoran vasijas y trípodes (Holm 1983).

49
¿Cómo reconocemos los objetos de cerámica pertenecientes a una
determinada cultura?

Existen varios elementos que nos permiten reconocer a los objetos como
pertenecientes a una determinada cultura arqueológica.

1. La decoración externa de la pieza de cerámica:


1.1 Líneas excisas, incisas finas, medianas o gruesas, o la combinación
de varias de aquellas.
1.2 Decoraciones o grabados antropomorfos, zoomorfos, fitomorfos
1.3 Engobe
1.4 Pintura
1.5 Modelado
1.6 Acanalado
1.7 Achurado
1.8 Ahumado
1.9 Estampado
1.10 Aplicaciones
2. Acabado de la superficie: alisado, pulido, corrugado, brochado o bruñido
3. La pasta de arcilla con sus desgrasantes que pueden ser sin mayor
tamizado o cernido en ambos casos; pasta de arcilla muy fina con
desgrasante cernido que casi no se nota el mismo
4. Cocción de la pieza por oxidación que en este caso puede tomar un
color naranja; o, por reducción en la que la pasta puede tomar color gris
azulado
5. La forma de la pieza que puede ser característica para una cultura:
vasijas u ollas simples o compuestas, cuencos con base o sin ella,
platos, platos polípodos, botellas, botella silbato, compotera, copa,
nuquera, cuchara, cucharón, ralladores,
6. Los bordes de las vasijas y cuencos: cortado y biselado, lobulado
(Echeverría 2011),
7. Forma de la boca de la vasija: circular, elíptica, cuadrangular,
rectangular, ovoidea, asimétrica. Por su amplitud: ancha o estrecha.

50
8. Forma de los ojos: rombo, círculo, raya horizontal, perforado, incisos y
saltones, ciegos, grano de café, círculo doble.
9. La utilización de pigmentos para obtener iridiscencia
10. En las transiciones, elementos de la cultura A se mantienen por un
determinado tiempo hasta el inicio de la cultura B como tal. Estas
transiciones pueden ser paralelas en el tiempo como en el caso Valdivia
a Machalilla, o, desde A a B sin que haya paralelismo en el tiempo:
Guangala a Manteño; Tejar-Daule a Milagro Quevedo, por ejemplo.

Con la práctica se aprende a reconocer la cultura a la que pertenece el objeto


cerámico que usted está mirando, aunque es muy difícil tener 100% de
exactitud sobre todo si el objeto en cuestión procede desde un contexto no
controlado como es el de una excavación o de colecciones privadas.

Tipos de sitios arqueológicos

Intentaremos una aproximación hacia la descripción de los diferentes tipos de


sitios arqueológicos que existen en nuestra área de estudio. Lo primero que
debemos entender es que a diferencia del área septentrional andina en donde
se ubica arqueológicamente a Ecuador no hay construcciones enormes en que
se haya utilizado la piedra como elemento primordial para edificaciones
excepto desde el Cerro Jaboncillo y cerros aledaños hacia el sur de la
provincia, obras que fueron realizadas por Los Paches o Manteños
especialmente. Sin embargo, hay que aclarar que aún restan por hacer
prospecciones intensivas en la zona norte de la provincia de Manabí
especialmente hacia el interior.

En lugares como Coñaque y El Aguacate de Río Grande hemos podido


observar piedras asociadas a estos sitios arqueológicos, pero aún no se ha
determinado su función. Es probable que la piedra local fuese usada para algún
tipo de basamento o como material para señalar un sitio de culto o sagrado.
Corey Herrmann que realizó excavaciones en la micro cuenca del Río Grande
de Chone, sector de Platanales encontró una estructura en forma de espiral de
unos 5 m, a nivel de piso que probablemente sería una especie de adoratorio
con cierta similitud a la encontrada en Palanda, provincia de Zamora Chinchipe,

51
asociada a la cultura Mayo – Chinchipe según la denominó su descubridor
Francisco Valdez.

Si hay estructuras monumentales en Manabí del Norte: son de tierra, como el


Cerro de La Cruz en San Isidro con una plataforma y que fue construida
durante cientos de años, desde Valdivia hasta Jama Coaque. Zeidler, además,
utilizando una técnica demográfica descubrió por lo menos tres sitios de
concentraciones de montículos o tolas en la cuenca del Río Jama. ¿Tres
centros de poder? Probablemente cada uno en un tiempo determinado. En la
cuenca del río Guayas Los Chonos construyeron miles de tolas desde unos
pocos metros de diámetro y altura hasta enormes montículos con diversas
funciones, algunos de una hectárea y veinte metros de altura, por ejemplo.

Un sitio arqueológico es un lugar donde hay restos de actividad social: tiestos


de cerámica, conchas, piedras, ollas enterradas que se ven a simple vista
como en algunos lugares de Río Grande, albarradas, tolas o montículos,
terrazas, etc., acciones que dejan restos materiales son considerados sitios
(Echeverría, 2011). Inicialmente estos sitios son detectados por la prospección
de campo.

Por estos días se están usando otras técnicas como acceder desde Google
Earth para encontrar sitios especialmente construcciones. Desde el aire se ha
puesto de moda utilizar la tecnología LIDAR (Light Detection and
Ranging o Laser Imaging Detection and Ranging)28 que es un mecanismo por
el cual desde un objeto móvil como un dron o un avión de emiten millones de
emisiones laser que con colectadas de retorno en un programa especial que
permitirá después analizar las distintas capas eliminando por ejemplo la
cobertura arbórea para encontrar sitios arqueológicos y dentro de ellos las
construcciones, los caminos, los reservorios de agua, objetos, etc.

28
Wikipedia. Acceso diciembre 29 de 2023.
52
También se usan los radares de penetración profunda (GPR) que son operados
desde la superficie del suelo detectando las estructuras enterradas para

proceder a excavaciones en el futuro, siendo estos sistemas no invasivos y no


destructivos porque hay que entender que los arqueólogos destruyen
sistemática y científicamente para deducir el desarrollo de nuestras culturas.

Tola o Montículo: es una acumulación de tierra con propósito funerario,


habitacional o ceremonial. Nuestra experiencia en la zona nos da motivos para
creer que las tolas de poca elevación son de filiación Chorrera, generalmente
circulares (La Ñarusa-Río Grande; Camarones-Pedernales) sin que esto sea
determinante. En El Ceibo-Río Grande hay siete tolas, seis de las cuales están
alineadas de Este a Oeste excepto la última que está hacia el Noroeste, y
luego hay varias terrazas hacia el Este.

Camellones: construidos para sembrar en épocas de mucha lluvia, los canales


adyacentes se usaban para transporte fluvial y pesca. La cuenca del Río
Guayas es el lugar donde más se usó esta tecnología hidráulica. En Chone
existieron estos camellones al sur de la ciudad entre la avenida Sixto Durán
Ballén hasta la zona del hipódromo. Solo quedan algunas pequeñas secciones
en una propiedad privada junto al Colegio Amazonas.
53
Campos elevados: Restos de estas construcciones se las puede observar aún
cerca al paso lateral de San Antonio y especialmente en La Sabana junto al
humedal La Segua. Construidos generalmente para fines agrícolas también
fueron usados para vivienda y otros como lugares ceremoniales relacionados
con el culto al agua como han demostrado algunos investigadores.

Canales: Construidos para conducir agua desde una fuente hacia lugares de
siembra, albarradas o simplemente para derivar aguas excesivas evitando la
perdida de cultivos o inundaciones en sitios habitacionales,

Hay un sistema que se puede ver hacia el este y sureste del paso lateral de
San Antonio. El canal principal viene desde el sector de la Playita alimentado
por las crecidas del Río Chone29 hasta La Papaya para luego ir hacia lo que
hoy conocemos como humedal La Segua. Lamentablemente este sistema está
siendo destruido, sin hacer estudios, por los rellenos que, sin ningún control, se
realizan en ambos lados del mencionado paso lateral en donde hay por lo
menos doce montículos de distintas dimensiones sobre los cuales hay
viviendas desde hace muchos años.

29
Es probable que, en nuestros ríos, especialmente en las zonas bajas y durante la estación seca, nuestros
antepasados hayan construidos presas derivadoras para irrigar cultivos como se ha demostrado en otros
lugares de América.
54
Terraza: es una modificación de la ladera de una elevación con fines de cultivo,
vivienda, lugar ceremonial. Pueden ser de varios pisos generalmente con una
ligera inclinación hacia un lado para permitir la percolación del agua y evitar el
arrastre de nutrientes del suelo, la siguiente terraza tendrá inclinación hacia el
otro lado y así sucesivamente hasta donde sea posible. Pero también las
encontramos aisladas, es decir solo una terraza. En el sitio La Rivera Adentro
observamos una terraza con piedras a modo de muro para protegerla de las
crecidas del río Pueblo Viejo.

Albarrada: es un reservorio para agua especialmente en zonas secas, aunque


las hay en zonas de bosque tropical como La Tablada de Sánchez que
anotamos anteriormente. En La Laguna (Sucre) registramos una con tres
albarradas pequeñas para alimentar a la principal que todavía es la fuente de
agua de esta comunidad.

Concheros: estos sitios presentan acumulaciones de restos de conchas y


moluscos junto con cerámica. Tres de éstos están ubicados en la parroquia
San Antonio: La Playita, Sabana Nueva y El Conchero por el sector de La
Segua lamentablemente destruido por la actividad camaronera.

La navegación

Los valdivianos fueron capaces de navegar en alta mar desde hace 2000 años
antes de nuestra era realizando viajes de culto y peregrinación hacia la isla de
La Plata que está a más de 30 km en línea recta de la costa ecuatoriana
utilizando embarcaciones fabricadas con palos de balsa (Ochroma logopus) y
cañas (Guadua angustifolia). Para el viaje hacia esta isla se necesitaron
conocimientos de navegación marítima como corrientes marinas y vientos
favorables.

La representación de las primeras embarcaciones en cerámica de canoas


hechas de un solo tronco en Valdivia, se hace también en la Cultura Chorrera
que además representó el “caballito de totora” que es otro medio de
navegación para la pesca a orillas de la playa (Ontaneda, 2009). Las
evidencias de la pesca mar afuera se hallan en los restos de huesos de
55
pescado encontrados en diversos sitios arqueológicos en donde se han
identificado huesos a atún aleta amarilla y albacora.

Las canoas y bongos pequeños se usaron para esteros, ríos, lagunas y


estuarios, es decir para pesca en lugares de fácil acceso mientras que para
navegar mar afuera se crearon embarcaciones mayores, de gran tonelaje como
aquella que encontró Bartolomé Ruiz 30 en su viaje de regreso a Panamá en
1525 (Marcos, 1993).

La navegación por mar abierto abrió las posibilidades de crear redes de


intercambio y por el 500 AC se establecieron contactos con culturas del oeste
mejicano, de centro América, Colombia, Perú y el norte de Chile. Tanto el palo
de balsa como la caña eran extraídos del ecosistema de bosque tropical de la
costa del Ecuador y fue apropiación exclusiva de nuestras culturas los que
aseguró el monopolio sobre la construcción y la implementación de nuevas y
mejores técnicas de navegación.

Nuestras balsas navegaban inclusive contra el viento utilizando la vela cuadra y


“guaras” que eran tablas que se colocaban entre los troncos que se alzaban o
hundían verticalmente tanto en proa como en popa, logrando cambios de
rumbo y estabilidad de la embarcación.

Pero ¿Qué comerciaban? El principal producto


fue la concha bivalva Spondylus prínceps cuyo

30
"venian asta veynte hombres..... y tenya parecer de cavida de asta treynta toneles" (Sámano-Xerez,
1697).
56
hábitat marino está ubicado frente a las costas de Ecuador y México. Esta
concha fue relacionada con las lluvias pues aparecía en las playas
ocasionalmente con la aparición de la corriente cálida de El Niño a fines de
diciembre, justo cuando en nuestra costa comienzan las lluvias. También
comerciaban con espejos de obsidiana, telas bordadas, joyas de oro y plata,
recipientes cerámicos y esmeraldas, entre otros productos. Viajaban hasta
México para obtener más spondylus ya que en la zona andina la tenían en alta
estima considerándola un objeto sagrado. En el sur obtenían lapislázuli,
turquesa y cobre procedentes de Perú y el norte de Chile.

En los puertos recalaban y comerciaban con personas que manejaban las


redes de intercambio hacia las zonas interiores. En el área mesoamericana, los
"canasteros" aparecen en las fases Miraflores (ca. 200 a.C.), La Esperanza (ca.
250 d.C) y en Kaminaljuyú, en los altos de Guatemala, y otros provienen de

Toluca y Puebla, en México. «Durante el período inicial, que corresponde al


establecimiento de la metalurgia en el Occidente de México (aproximadamente
del 800 al 1200-1300 d. C.), la similitud con la metalurgia del sur del Ecuador
es de lo más llamativa. En el Occidente de México, las campanillas,
agujas, aros y pinzas depilatorias, así como hachas, leznas y, ocasionalmente,
anzuelos, constituyen la constelación básica durante esta época de los objetos
elaborados en metal. Durante este período, y anteriormente, en Ecuador el
metal era utilizado para fabricar el mismo inventario de objetos que exhiben las
mismas características en su diseño y las mismas técnicas de fabricación».
(Hosler, et al., 1990: p. 80).

57
58
La música

Desde el inicio de la humanidad los seres humanos


crearon la música que se convirtió en parte fundamental
de sus vidas. La danza también tuvo parte esencial en
las creaciones musicales de nuestros antepasados. Y la
representación de estos eventos fue plasmada en la
cerámica mediante figuras que representan a músicos y
danzantes, en silbatos, en ocarinas, en ideófonos, en
sonajeros, en tambores, en litófonos entre otros
instrumentos. Es creativa la representación de estos
objetos plasmados en figuras zoomorfas, pero también
hay que considerar las botellas silbato.

59
La metalurgia

El uso de metales en el actual


Ecuador se inició con experimentos
entre el 1500 al 1000 AC mientras que
su mayor esplendor se da a partir del
desarrollo Regional por el 500 AC
especialmente en la Cultura La Tolita
quienes fueron los primeros a nivel de
todo el mundo en trabajar el platino
aliándolo con el oro (Ontaneda 2011).

Las técnicas que utilizaron fueron:


martillado, fundido, laminado,
repujado, soldadura, filigrana,
incrustación y ensamblaje, entre
otras como “cera perdida”. El
manejo del cobre llegó a su mejor
expresión con las culturas del
período de integración para lograr
objetos complejos lo que requiere un
manejo controlado de la temperatura
de los metales.

La orfebrería alcanzó gran importancia en el área septentrional andina por el


evidente uso de las “hachas monedas” entre chonos, Paches, Guancavilcas,
punaés y sus aliados de la “Liga de Mercaderes” y pueblos de la costa norte del
antiguo Perú (Marcos 1993).

60
La organización social

Desde los inicios de la humanidad los seres humanos comenzaron a agruparse


en hordas, clanes, tribus, cacicazgos, estados, imperios…porque el ser
humano es social por naturaleza. Al principio sus viviendas eran cuevas o
refugios rocosos, luego chozas de ramas, de pieles, de piedras, de adobe en
regiones secas o de arcilla en regiones más húmedas, es decir que se
adaptaron al medio ambiente ya que crearon hasta viviendas de hielo como es
el caso de los esquimales.

61
En nuestro medio los primeros poblados se inician en Las Vegas, cultura pre
cerámica en la península de Santa Elena. Posteriormente en el sitio Real Alto
en la misma zona se evidencia el desarrollo de un poblado desde la fase inicial
de Valdivia hasta la fase VII. Es lógico suponer que las personas comenzaron a
agruparse buscando un ordenamiento en su vida física bajo el reflejo de una
organización social incipiente desarrollando además manifestaciones de orden
religioso en la creencia de dioses que dirigieron sus vidas, aspectos que solo
podemos inferir a partir de la evidencia arqueológica.

Es lógico suponer entonces que surgieron personas que tomaron el mando


como “cabezas de familia”, luego líderes de una comuna o caciques a cargo de
ciertas zonas como era la situación a la llegada de los europeos narrada en las
diferentes crónicas. Probablemente nuestra gente se organizó hasta llegar a
confederaciones.

A diferencia de las fases culturales de la costa peruana que competían,


luchaban a muerte y conquistaban los fértiles valles irrigados por los deshielos
andinos, nuestras culturas no tuvieron mayores confrontaciones por el territorio
que era más rico en recursos naturales (agua, suelo, bosques, manglares,
humedales, etc.) que los vecinos del sur.

Al final del período de Integración habían poblados desde la Costa hasta la


Amazonía que fueron abandonados o diezmados por las enfermedades frente
a las cuales no teníamos defensas biológicas, por las mitas y encomiendas, por
la esclavitud. Los cronistas describen poblados muy ordenados con
autoridades que les gobernaron.

Al igual que en la actualidad, ellos vivieron, enfrentaron, murieron y


sobrevivieron a los fenómenos naturales. Desde hace miles de años las
erupciones volcánicas provocaron la desaparición de culturas o el
desplazamiento de las mismas. Volcanes como Sangay, Reventador, Guagua
Pichincha, Ninahuilca, Pululahua, Cotopaxi, Tungurahua, entre otros
provocaron grandes catástrofes. Antes del 800 DC nuestra región sufrió los
efectos devastadores de un evento climático que ahora se denomina fenómeno
El Niño. A partir de ese año, América en general, sufrió una grave sequía que

62
duró unos 300 años. Muchas culturas desaparecieron por la falta de agua y la
naturaleza fue afectada fuertemente.

Hay registro de un evento sísmico cerca al año 2000 AC que desvío el curso
del Río Santiago en Esmeraldas a su posición actual. También fuimos
afectados por tsunamis especialmente uno por el año 700 DC que obligó a las
poblaciones junto al mar a retirarse tierras adentro y depender menos de los
recursos marinos y de los manglares por lo menos varios años (González,
2014).

Fósiles de origen marino y terrestre en el cantón Chone

En muchos lugares del cantón Chone, especialmente en las montañas al este


de la ciudad, desde Canuto hasta Ricaurte en el límite con Flavio Alfaro es
posible encontrar lugares con restos de fósiles de origen marino. Los hay en:
Cerro Mirador, El Cerro de Río Grande, en el Río Platanales, en Estero La
Tranca (Platanales), en La Tola, en río Sánchez, en Garrapata (Estero Tres
Bocas), en El Zapote, El Jobo, La Guabina de Mosquito, entre otros lugares
que corresponden a la formación geológica denominada Borbón.

Varios cronistas como Cieza de León y Garcilazo de La Vega mencionaron en


sus escritos “historias de razas antiguas de humanos gigantes”. Juan de
Velasco en su Historia natural del Ecuador menciona la importancia biológica

63
de estas tierras y la presencia de huesos enormes los mismos que habrían
originado las leyendas de seres gigantes31.

La Misión Geodésica Francesa, 1736-1744, hizo la primera investigación


geográfica que incluyó temas geológicos. Humboldt y Bonpland recogieron
varias muestras de rocas y fósiles en su viaje realizado por América de 1799 a
1804. Andrés Wagner realizó en 1860 el primer estudio detallado de los fósiles
del Ecuador en los alrededores de Quito. Teodoro Wolf en 1875, realizó
estudios geológicos más profundos en los yacimientos antes mencionados,
publicados en una serie de obras entre las que se destaca su Geografía y
Geología del Ecuador.

Hay varios yacimientos de fósiles en el Ecuador siendo el más famoso el


Bosque Petrificado de Puyango- Este bosque ha sido datado en el Cretáceo
medio – inferior cuya antigüedad es de 110 millones de años. Hay restos de
árboles en un área reducida pero la concentración de los mismos es increíble.
“En Puyango llama mucho la atención, la sobre posición de material marino
fósil como bivalvos, gasterópodos, y amonites, con los restos de troncos
petrificados, incluso muchos investigadores opinan que el verdadero estrato
geológico, indicador de la edad es el marino y que los troncos son restos de
material arrastrado de las partes más altas de la Cordillera de los Andes”,

31
Román Carrión, José Luis
64
escribe Román en un artículo en las publicaciones de la Escuela Politécnica
Nacional de Quito.

Erupciones volcánicas

Desde hace muchos siglos las erupciones de los volcanes ecuatorianos


han causado desastres en el territorio y sus afectaciones afectaron a las
poblaciones antiguas provocando el abandono de sus comarcas y la
desaparición de culturas, estos procesos eruptivos nos continúan
afectando en la actualidad, aunque con eventos menos catastróficos
hasta ahora,

La cordillera de Los Andes es una agrupación de edificios volcánicos cuya


actividad no deja de dar forma a los paisajes escribe Guillaume-Gentil (2013)
que “se caracterizan por una abundancia de erupciones de tipo pliniano, con
explosiones catastróficas capaces de cubrir superficies considerables”.

La región norte de Manabí ha sido afectada por la caída de cenizas en varias


ocasiones lo que se evidencia en el registro de los perfiles de carreteras,
caminos vecinales y especialmente en la estratigrafía de las excavaciones
arqueológicas realizadas en esta zona, Hay tefras visibles en Boyacá, Simón

65
Bolívar, Los Chaschajos y La Rivera de Canuto, en Río Grande, revelando
varios niveles de cenizas lo que corresponde a distintas erupciones.

Cada volcán tiene su particular huella geoquímica lo que ha permitido a los


investigadores en vulcanología y geología, establecer el origen de las
erupciones. La datación de cada erupción se hace desde los restos orgánicos
como carbón recogido en las excavaciones arqueológicas asociados a las
distintas tefras para lo que se utiliza el análisis por radio carbónico 14C.

NOTA: a las fechas aAP, o, AP, se les debe restar 1950 para convertirlas en
fechas AC, o DC., señalada por los metrólogos -en 1954- que establecieron el
año de 1950 del calendario gregoriano como el año de origen arbitrario de la
escala temporal para su uso en la datación por radiocarbono usando muestras
de referencia de ácido oxálico (Wikipedia, diciembre de 2023).

“Grandes áreas de las


tierras altas
ecuatorianas fueron
66
completamente devastadas por impactos piroclásticos dramáticos en la vida
humana prehispánica y sus asentamientos, lo que planteó severos
impedimentos para el desarrollo cultural sostenido a lo largo de la prehistoria.
Para las tierras bajas costeras, grandes franjas de territorio fueron cubiertas
repetidamente con depósitos de ceniza volcánica o “tefra”, en varios momentos
del pasado prehispánico, los que tuvieron impactos variables, pero a menudo
devastadores, en estas sociedades, desde la provincia de Esmeraldas y la
occidental de Pichincha en el norte hasta el sur de la provincia Manabí en el
sur. En estos casos se han identificado distintos hiatos de abandono y
transiciones culturales mucho más (Zeidler, 2023)”

67
Caminos ancestrales

Desde hace muchos años hemos recorrido las campiñas manabitas con el
deseo de conocer sitios arqueológicos y mantener contacto con nuestra gente
de la que hemos aprendido mucho y compartido conocimientos. Una de los
asuntos que siempre nos llamó la atención era conocer por donde caminaron
nuestros antepasados de las distintas comarcas hacia otros lugares porque los
seres humanos siempre se han
estado moviendo para conocer
nuevos lares, para buscar
materias primas o tierras fértiles,
para intercambio y comercio.

En 2011 a propósito de una visita


que realizamos a Don José
Acosta Villamil del sitio El Zapote
de Mosquito, le manifestamos
esta inquietud. La familia Acosta
tiene parientes en la Tablada de
Sánchez y se visitan en
ocasiones especiales como reuniones familiares para los velorios religiosos u
otros acontecimientos. El Zapote está a unos 40 msnm mientras que las alturas
de la Tablada de Sánchez van de 300 a 400 msnm, y, en línea recta hacia el
sur, menos de 2 kilómetros separan estos dos sitios.

“No sabría usted!” nos dijo Don José. “Por aquí hay varias subidas para llegar
a la Tablada de Sánchez: La Zambrano, La Pica, La López y otras más que
hemos caminado durante muchos años”. No está demás decir que esta
información nos causó enorme alegría. Después de esto dedicamos tiempo
para investigar este tema. Descubrimos varios caminos que utilizan los
habitantes para subir desde el Río Mosquito 32 hacia Tablada de Sánchez y
viceversa.

32
El Río Mosquito es afluente del Río Chone. Se le une en el Sector de San Andrés también llamado La
Boca de Mosquito. Nace como estero Las Cuevas que viene de norte a sur por unos 5 Kms y luego fluye
de este a oeste. Es Alimentado por el Río Las Pulgas y muchos esteros como Pajonal, Vaca de Monte, El
Jobo, entre otros.
68
Hasta ahora hemos detectado seis caminos ancestrales. El primero es El Cerro
que es el camino asfaltado que conduce desde El Pueblito de Río Grande

hacia Tablada de Sánchez, El Cerro de Río Grande, Ciudad Jardín


(Reasentamiento), la unidad educativa del sector (Luis María Castro), Loma de
Ayala, Tres Puntas llegando hasta la parroquia Barraganete del cantón
Pichincha.

El segundo se lo conocía antiguamente como “Sube y Baja”, actualmente es un


camino lastrado que conecta hacia el Río Mosquito en el sector La Puerta de

Champag junto al Balneario El Caracol. Entre estos dos caminos ancestrales

69
hay otros senderos según nuestros informantes que son usados especialmente
para cacería.

El Tercero es “La Pica” que es el más peligroso por sus pendientes abruptas
que, sin embargo, eran usados por los campesinos de esa zona hasta por
gente de La Ñarusa, El Achiote, El Naranjo, etc., de la micro cuenca del Río
Grande.

El cuarto es “La López” que recorrimos en enero de 2022 encontrando

increíbles paisajes y un sitio arqueológico en la loma Cometierra muy cerca al


cauce del río y que contiene un par de terrazas muy interesantes.

El quinto le denominan “Vaca de Monte” o “Loma de la Calahuala”. Según nos


informaron la calahuala es un helecho.

El sexto es “La Fátima” en la Tablada de Fátima.

Ignacio Mesías de La Tola de Platanales nos contó que sus ancestros cuando
viajaban desde la zona de Canuto lo hacían por Olla Vieja, San Pablo de
Tarugo, Casa Grande, tomando un camino que los conducía a La Tola, luego
seguían por el Río Platanales hasta el Río Grande hasta tomar la Boca de
Sánchez y por este Río a La Ñarusa para seguir camino en varias jornadas
hasta Río Vendido. Sunny Alcívar cuya esposa es de Ñause viajó muchas
veces siguiendo el curso del Río Mosquito desde San Andrés, aguas arriba por
El Jordán, La Manchuria, La Carmela, La Alianza, Puerta de Champang, La
70
Guabina, Las Pulgas, El Toro de Mosquito, La Loma del Mono, La Loma del
Aguacate, Ñause, Vendido, Pescado, etc.

Estos caminos antiguos fueron usados para muchas actividades desde la


antigüedad y poseen un valor histórico muy importante ya que podemos inferir
rutas de comunicación entre los sectores a fin de entender otros procesos que
se desarrollaron, por ejemplo, a la llegada de los españoles. Los cronistas
narran que muchos pueblos estaban vacíos cuando ellos arribaban. Ahora
podemos entender que nuestros aborígenes escaparon a tierras altas de muy
difícil acceso como es la Tablada de Sánchez que tiene pendientes de 30 hasta
100%. En la Tablada hemos visto sitios arqueológicos con altas
concentraciones de pozos de almacenamiento (p.e.: ollas enterradas en piso) y
concentraciones de cerámica en superficie que inferimos corresponden a Jama
Coaque II, y talvez, de los últimos sobrevivientes…

71
PETROGLIFOS

LA DIBUJADA

Ubicada en el sitio La Dibujada de la parroquia Ricaurte del Cantón Chone en


el nacimiento del río Santos afluente del río Garrapata, en la ladera este se
encuentra una enorme roca en la que hay petroglifos cuya filiación cultural se
desconoce pues no se han realizado estudios.

Fue redescubierta por Boris Zambrano Cabrera en 1989 quien la visitó


continuamente con grupos de estudiantes del Colegio Nacional Técnico
Raymundo Aveiga de la ciudad de Chone.

LA CAPILLA DEL DIABLO

En el verano del año 2003, César Velásquez Giler y Moisés Muñoz Cedeño,
miembros de la Fundación Arkahios Campus de Chone, visitaron una cueva en
la que encontraron más de 100 petroglifos quedando asombrados por tal
descubrimiento. Días después hicieron una nota periodística para un diario
provincial.

Según el propietario del lugar Don Hernán Macías (+), él llegó a este lugar en
la década de 1960. Años después, encontró la cueva, pero no le dio mayor
importancia. Posteriormente algunos vecinos la visitaron pero básicamente en
busca de un mamífero roedor cuya carne es bastante apreciada en la zona: la
guanta (Agoutit aczanowskii).

72
El domingo 23 de septiembre de 2012, César Velásquez Giler volvió a visitar la
cueva esta vez en compañía de Boris Zambrano Cabrera, también miembro de
la Fundación Arkahios Campus, quien tiene estudios en arqueología y ha
trabajado en varios proyectos entre ellos el Inventario de Bienes Patrimoniales
del Estado (2007-2008) para hacer una breve inspección del lugar.

Ubicación

La cueva está al este de la ciudad de Chone, distante 30 Km, en el sitio Río


Vendido otrora perteneciente a Chone pero hoy bajo la jurisdicción del cantón
Pichincha. Se accede por caminos lastrados y de verano en vehículos que
puedan trepar lomas de hasta 550 metros de altura sobre el nivel del mar. Para
que tengan una idea, Chone está a 14 msnm.

Descripción de la Cueva

La cueva tiene 11 m de ancho, con una entrada de 4.70 m, cuya altura


promedio es de 2,4 m. Los glifos están distribuidos en un área de 14 m
tomando en consideración la parte interna de la cueva, unos 3 m hacia adentro.
La entrada de la cueva está orientada al noroeste. Se estrecha hacia el interior
en un pasadizo de unos 15 m de profundidad por 70 cm de ancho. No
detectamos glifos en esta parte. Hay murciélagos y según testimonio del
propietario el lugar es refugio de roedores como el descrito anteriormente. No
hay escorrentía de agua desde el interior pero las paredes, especialmente del
lado izquierdo presentan bastante humedad producto de la existencia de una
pequeña corriente de agua. El piso es de tierra y desconocemos su
profundidad hasta la roca base. Este es un dato interesante ya que puede
haber evidencias arqueológicas.

Los Glifos

Están distribuidos desde la izquierda de la cueva hacia la derecha,


comenzando por uno que está solo, pero conforme se avanza hacia la entrada
aumentan en número en diversas representaciones. La longitud usada para las
representaciones desde la parte exterior hacia el interior izquierdo volviendo
hacia el exterior derecho, es de aproximadamente 14 metros.

73
Fotografía 1: Vista general de la Cueva. Se pueden observar algunos de los glifos.

Vamos a detallar algunos que nos parecen muy interesantes y que contienen,
aparte de su propio simbolismo, un mensaje legado de nuestros antepasados.

74
El hombre cargando un pescado:

Desde la cultura Valdivia (4000-1450 a.C.) se iniciaron los intercambios con las
distintas regiones de lo que hoy es el territorio del Ecuador, incluso con la
Amazonía. Valdivia también comienza la larga tradición marinera que
caracterizó a los antiguos pobladores de esta región. Los productos se
trasladaban de región en región a través de una liga de mercaderes, según
algunos investigadores. Aparte de la concha bivalva Spondylus Princeps
también se intercambiaron otros productos entre ellos el pescado. Esta
representación nos da a entender que se comerciaba con ese producto
extraído del mar o de ríos y humedales.

En la fotografía 3 también podemos observar un glifo en forma de varias “V”


que podría representar un tocado de los que lucieron nuestros antepasados
75
según hemos podido ver en innumerables figuras antropomorfas de cerámica
de nuestras culturas antiguas.

Ave:

Claramente podemos observar la representación de un ave en esta parte de la


cueva. Posiblemente se ha representado a la guacharaca (Ortalisgutta
taguttata), ave arborícola de las galliformes que es común en esta zona y que
desarrolla su vida en los árboles, bajando ocasionalmente para comer ciertos
frutos y semillas.

Así como los ceramistas de las diversas culturas representaron las diversas
actividades de la vida cotidiana de sus miembros, aquellos que tallaron estos
glifos también lo hicieron. Según Javier Véliz –comunicación personal- estos
lugares –cueva con petroglifos- han sido usados para iniciaciones shamánicas
según testimonio de ancianos Tsáchilas ya que siempre están cerca de fuentes
de agua y en lugares no muy accesibles para el común de la gente.

76
La Chola:

Es un glifo de unos 80 cm de altura que representa, en principio, a una mujer o


quizá a una sacerdotisa.

Es interesante pensar en las asociaciones que se ven en este lugar. Cabe


preguntarnos sobre las intenciones de quienes vivieron allí, del mensaje oculto
que nos legaron. Las interpretaciones pueden ser variadas.

77
El hombre de la esquina:

Glifo representando a un personaje


en posición sedente, al parecer con
un gran “gorro” sobre su cabeza.
Está al lado izquierdo de La Chola.

Glifos en el interior izquierdo de la cueva:

Estos glifos representan a una multitud de personajes en una gran escena. Se


nota que encarnan distintas acciones.

78
Glifo en el techo de la cueva:

Este es el único
glifo que
notamos por
ahora en el
techo de la
cueva.

79
Glifos en el interior derecho de la cueva:

Estos glifos están


en el lado derecho
de la cueva.

Hay varias
representaciones
que se deberán
estudiar al detalle.

La roca grande
sobre el piso, bajo
la regla que
usamos como
escala contiene
glifos según
testimonio del
propietario del
lugar.

Desde el punto de vista arqueológico este lugar representa testimonio de


nuestros antepasados y nos puede brindar información valiosa para el
conocimiento de la forma de vida de quienes habitaron esta zona. Cabe indicar
que la cueva está asociada a montículos, muros y tolas en donde se han

80
encontrado restos de cerámica en superficie que identificamos pertenecientes a
la cultura Jama Coaque (500 a.C.-1650 d.C.).

LA CONGA

Ubicada en el sector de La Conga de Río Vendido fue fotografiada por el señor


Carlos Zambrano quien nos envió el detalle. No ha sido visitada por el autor de
esta nota.

81
ETNOHISTORIA

LOS CAMPACES

Los Campaces, en la actual Esmeraldas, ocuparon toda la zona de esta


provincia. El norte de la provincia de Esmeraldas, es zona de estuario donde
perdura la actividad económica más antigua, la recolección de crustáceos y
moluscos. Hacia el interior hay zonas bajas propicias para el desarrollo de la
agricultura. Hacia el sur, la culminación de la cordillera Costanera en las
montañas de Mache y Chindul, que generan ambientes diversos. La zona
fluvial de esta provincia está marcada por los ríos que vienen de la región
andina, cuyas aguas van al océano Pacífico como el Guayllabamba, el
Santiago, el Blanco entre otros, exceptuando el río Quinindé que nace en las
montañas de Chone viniendo desde el sur.

Hay accidentes geográficos importantes que fueron bautizados por los


españoles como la bahía de San Mateo, Atacames, el Puerto y la Punta
Galera. Arqueológicamente es llamada toda esta zona hasta llegar a la altura
del río Portete, como cultura Atacames.

Daniel Schávelzon, recoge los trabajos de Max Uhle e indica que: “El sitio de
habitación más grande de la Isla se encuentra en la parte sur, sobre el río y
prácticamente rodeado por dos brazos de agua”.

“Llegó hasta el pueblo de Cancebí, que es en aquella costa. Y antes deste


pueblo habían visto otras poblaciones muy ricas de oro y plata, y a la gente de
más razón que toda la que antes habían visto de indios”. Sobre este pueblo de
Cancebí, Oviedo, dice: “volviendo, entró en el paraje de aquel pueblo grande,
que decía que tenía una legua de población, e le puso nombre de Cabo de la
Galera”.

82
NEGUAS O NIGUAS

Nuevamente citamos a Cabello de Balboa: “…desde luego, comencé a


preguntar con mucho recato, qué gentes había en aquellos contornos con
quien ellos tuviesen guerra; pude colegir de algunas respuestas, no tener ellos
guerra con nadie, y que los molestados eran los de más abajo, que habitan en
la Provincia que llaman Niguas, …”.

“Más abajo, cercano a lo llano, hay otra provincia que, aunque es verdad, que
también son llamados Yumbos, no lo son en efecto, porque su lengua y
costumbres y su traje son diferentes: llamase estos Niguas, de quien otras
veces se ha hecho mención, están alguna parte de estos Niguas en su libertad,
que no sirven ni dan tributo a nadie, y otros lo dan y pagan muy bien, y acuden
a servir a sus encomenderos cuando se les manda.”

La Condamine – S. XVIII: ”Encontré a media subida, después de cuatro días


de marcha, un pueblo indio llamado Niguas, donde me detuve. Entré en él por
una estrecha quebrada cavada por las aguas hasta una profundidad de 18
pies; …”.

LOS CRONISTAS DE INDIAS33

Con la llegada de los conquistadores españoles durante la conquista y


posteriormente en la colonia, los cronistas de indias fueron parte importante de
la recolección de información de las tierras que poco a poco iban conquistando.
Varios textos de sus escritos son expuestos aquí para entender un poco más
las manifestaciones culturales, ocupacionales y descripciones de nuestros
antepasados.

Miguel Cabello de Balboa relata sobre la actual provincia de Esmeralda: “Fue


en esta provincia, la primera tierra que se descubrió debajo de nombre de Pirú,
en el año de mil y quinientos veinte e cinco”. Lo que da a entender que fue la
costa colombiana actual a la que denominaron Pirú.

Cancebí no estaba en Manabí

33
Basado en la conferencia “Los Grupos Étnicos del Litoral Ecuatoriano” dictada por Javier Véliz
Alvarado en el Archivo Histórico del Guayas, en 2017.
83
La ubicación de Cancebí no fue en Manabí sino en Esmeraldas. Diego de
Trujillo en “Relación del descubrimiento del Reyno del Perú” indica que, junto a
Francisco Pizarro, llegaron a la bahía de San Mateo y que después, “a cuatro
leguas34” arriban a un pueblo despoblado que llama Catamez. “De ahí llegamos
a un pueblo grande en la costa, despoblado que se decía Canceví…esta tierra
era falta de agua dulce, de que se padecía trabajo…De allí fuimos, caminando,
hasta los ríos de los Quiximis (Cojimíes) adonde se hicieron balsas para
pasarlos”.

El historiador
peruano Raúl Porras
Barrenechea
estudiando la crónica
de Diego Trujillo
establece aportes
interesantes para
conocer mejor la
ubicación de
Cancebí: “En la
información de
servicios de Nicolás
de Ribera el Viejo se
dice que la provincia
de Canceby es tierra
montuosa y sin
población ninguna
(Archivo de Indias)”.
En la de Francisco Luis de Alcántara de 1562 “que Cancebí –Caucesa- está
cinco o siete leguas más aca de la baya –bahía- de San Mateo (Archivo de
Indias)”, y en la información de servicio de Martín Pizarro de 1590 se menciona
“como el primer pueblo pacificado por los españoles es el de Cancebí”

34
Legua: medida que en el antiguo sistema español equivale a 5.572,7 metros.
84
El martes 14 de febrero de 1531, las huestes de Pizarro iniciaron la marcha
desde Tacamez en dirección austral hasta el pueblo de Cancebí, donde
descansan hasta el 19 puesto que el lunes 20 se ponen en marcha hacia “los
Cojimíes” sostiene otro historiador peruano José Antonio del Busto. También
en los testimonios recogidos por Gonzalo Fernández de Oviedo sobre el
contacto de Bartolomé Ruiz y el navío de mercaderes Manteños provenientes
de Salango aporta referencias sobre un pueblo grande que se le puso por
nombre el Cabo de la Galera, siendo probable que haya sido Cancebí.

En la Crónica Rimada de 1538 se señala que “CCXX //Algunos vieron cuasi


burlados / por la noticia que hubo de aquí [de Tacamez], / Hasta otro pueblo
que es Canceby / Adonde también estaban alzados”. Otros cronistas hacen
aportes sobre este tema. Cada vez es más claro que la probable ubicación del
pueblo Cancebí estaría entre el actual poblado de Tonchigüe y el cabo San
Francisco refiere Daniel González en el artículo “Los pueblos nativos del
Distrito de Puerto Viejo durante el siglo XVI: crisis y transformaciones” en
Estudios Multidisciplinarios en cinco espacios prehispánicos tardíos del
Ecuador, INPC, Quito, 2014.

85
A la luz de estos nuevos datos, Cancebí nunca estuvo en la zona central de lo
que hoy es Manabí, pero si se registró la existencia de una parcialidad aborigen
llamada manaví, lo que hace factible el origen del nombre de nuestra provincia.
González refiere que cuando Teodoro Wolf (fines del s. XIX) hizo un análisis de
los grupos de nombres geográficos que corresponden a distintas naciones
antiguas en lo que hoy corresponde a Esmeraldas y Santo Domingo,
recogiendo algunos nombres: Cachabí, Uimbí, Tululbi, Palabi, Canumbí, entre
otros, que se corresponden fonéticamente al vocablo Cancebí.

El origen del nombre Chone

Con los datos que tenemos hasta la actualidad, basados especialmente en las
crónicas de los conquistadores, en documentos etnohistóricos y en las
narraciones de los viajeros y exploradores que visitaron nuestras costas desde
principios del siglo XVI, intentaremos hacer una aproximación al origen del
nombre Chone.

En la Relación Samano se registra una comunidad con el nombre de


PECHONCE en las proximidades de San Antonio. Girolamo Benzoni, viajero
italiano anota que hay un pueblo llamado CIONE en 1565. Posteriormente, en

86
los mapas del siglo XVII aparece el nombre de CHONES y CHONES
VIEJOS….

En el mapa de Manuel Villavicencio de 1858 35 podemos notar lo siguiente:


desde el este se nombran los siguientes ríos: Montaña, Tiure, Plátanos,
Chagua(Lú), Mosquito, Bachillero, Chones.

Los poblados de Chones y Peludo (San Antonio), y (La) Segua. Hacia el este,
Salina, Canoa y un poco al sur Baya (Bahía). Desde la ubicación, en este mapa
desde Chones, hacia el sureste están los Cerros de Tosagua y los poblados de
Tosagua, Calceta y Canuto.

Cuando arriban los conquistadores a esta tierra, especificamnte en el valle del


río Chone las culturas que estaben asentadas eran las siguientes: Jama
Coaque II (al norte), Paches o Manteños (al este) y Chonos o Milagro Quevedo
(al sur) como apreciamos en el siguiente gráfico.

35
Carta Corográfica delineada de las cartas de Don Pedro Maldonado, el Barón de Humboldt, Mr.
Wisse…etc.
87
En el siglo XVI, los españoles encontraron varios señoríos o cacicazgos y se
mostraron admirados por la forma de navegar en las grandes balsas, incluso
con viento en contra, maniobra que no podían realizar las naves españolas.
Nuestros antepasados lucían lujosas vestimentas, ricamente ornamentadas.
Consumían productos del mar y de la tierra, su dieta era balanceada. Algunos
lugares de asentamiento se convirtieron en ciudades (Jocay, hoy Manta) o
comunas muy organizadas bajo el dominio de un cacique.

Cuentan los cronistas sobre el “Señor de Salangone” (actual Salango) que


tenía dominio en esta región y comerciaba con otras partes de la costa del
Pacífico.
Estos datos devienen de dos fuentes confiables: La primera, de los
documentos redactados por los CRONISTAS DE INDIAS, personas designadas
por las autoridades españolas para recoger datos sobre América o simples
voluntarios e investigadores. La gran mayoría de estos documentos se
encuentran en el ARCHIVO REAL DE SEVILLA, en España. Y la segunda,
proviene de las investigaciones antropológicas y excavaciones arqueológicas
realizadas por ecuatorianos y extranjeros desde 1950.

Julio Estrada Ycaza en el libro “ANDANZAS DE CIEZA POR TIERRAS


AMERICANAS”, (Guayaquil, 1987) descubre que Cieza de León no visitó todos
los lugares que describe en sus crónicas. Se limitó a escribir lo que otros le
contaron. Sin embargo, hay datos que coinciden con otros cronistas.

La palabra chonana aparece en el capítulo LV: “Muchos indios de los


Huancavilcas sirven a los españoles vecinos desta ciudad de Santiago de
Guayaquil; y sin ellos, están en su comarca y jurisdicción los pueblos de
Yacual, Colonche, Chinduy, Chongón, Daule, CHONANA y muchos
otros..............”.

La palabra CHONOS aparece varias veces en las crónicas de Cieza aunque el


nunca se enteró de ellos. En su época ya había abundancia de material
informativo sobre los chonos: Diego de Trujillo (1571) los mencionó como

88
enemigos de los indios de la isla de Puná. Lizarraga trata más profundamente
sobre esta enemistad. Alonso de Borregán (1565) contó que en la isla de Puná
“Guainacaba apresó algunos señores de los chonos y guancabelicas (y) los
hizo matar”.Cabello Balboa (1586) relató como al regresar Tupa Ynga de su
mítica expedición oceánica, los Cuzcos “sugetaron (a) los Huancavilcas y
Chonos” antes de seguir a Túmbez; y Benzoni escribió sobre el río CHONO a
cuya ribera se edificó Guayaquil en su último traslado”.

Rodrigo de Vargas (1574) en la pregunta trece de su probanza se refiere a los


“chonos del río” como belicosos y guerreros. Diego de Urbina le escribió al rey
en mayo 1 de 1543 sobre “las provincias de los chonos”. Interesa también la
tasa de los indios de Paya...................Del virrey Toledo (1578) donde se habla
de una ropa de algodón de la que llaman chona.

Nadie puede hablar de fronteras culturales definidas. La evidencia arqueológica


nos muestra que el pueblo CHONO es lo que conocemos como cultura
MILAGRO QUEVEDO que moraban en la cuenca del río Guayas hasta Santo
Domingo y sur de Esmeraldas y algunas áreas de Manabí como ya hemos
anotado. de la que descienden las etnias CAYAPA y COLORADO que habitan
los territorios de Esmeraldas y Pichincha en la actualidad.

Chone, se derivaría de vocablos relacionados con la lengua barbacoana de


acuerdo a los mapas linguísticos especializados de acuerdo a los registros
actuales: PECHONCE – CIONE – CHONES – CHONE. Futuras investigaciones
nos darán más luces al respecto.

“La Casa Ardiente, el Rey Chuno, el chuno garrido, los Chonanas” son
leyendas creadas porque las personas necesitan creer en mitos fundacionales
que son relatos formados por elementos fantásticos e imaginativos más que
por hechos históricos reales.

89
RELACIÓN SÁMANO

La relación Samano Xerez, que corresponde a Joan de Samano es el primer


relato de los viajes y exploraciones de Francisco Pizarro y está basado en las
bitácoras de Bartolomé Ruiz en lo que constituye el segundo viaje a la mar del
sur desde Panamá. Recibió orden de recorrer la costa hacia el sur durante dos
meses. Y …”halló una baya muy buena que puso su nombre Sant Mateo y ally
vio tres pueblos grandes…y salieron algunos indios a el que venían adornados
de oro y tres principales puestos una diadema y dixieron al piloto que se fuese
con ellos dioles un nombre que se dize… de bocanegra y estuvo halli dos
días…”36

36
Proyecto Kitu. Los Navegantes Ancestrales, Los nombres de sus pueblos ancestrales y algunas
costumbres. Publicado por PROYECTOKITU en octubre 3 de 2019
90
Samano va relatando el nombre de los
pueblos que los españoles van
encontrando en el siguiente viaje de
Pizarro que culminaría con la
conquista del imperio inca.

Diversos historiadoes han investigado


las crónicas de indias a fin de
determinar los sitios en donde se
encontraban esos poblados y
ciudades al inicio de la conquista,
aunque no hay unidad de criterios
debido principalmente a intereses
personales, institucionales, nacionales
e inclusive por la creación de “mitos fundacionales” como el de “El Reino de
Quito”, o la existtencia de héroes como “Guayas y Quil” que es simplemte una
leyenda. Cosa igual ocurre localmente con la creación de relatos sobre una
tribu denominada chunos o chonanas, el rey chuno y su casa ardiente en
Chagualú de lo que no existe ninguna evidencia histórica y arqueológica hasta
la actualidad,

En la siguiente tabla detallamos los nombres de los poblados y ciudades que


encontraron los españoles en la costa de lo que hoy es el actual Ecuador.

RELACIÓN SAMANO XEREZ


POBLADO ANTIGUO UBICACIÓN POBLADO UBICACIÓN
ANTIGUO
Tacamez Atacames Pechonce Chone
Cancebí Al norte del cabo San Conchipa Flavio Alfaro
Francisco
Quisimos Cojimíes Misbaque Calceta
Coaque Coaque Tocagua Tosagua
Nacavez ? Pichota Rocafuerte
Torivisimi/Novirisimi ? Yesca Eloy Alfaro
Canilope ? Tusco Machalilla
Papagayos ? Xagua (Catarama) Portoviejo
Tolona ? Amotopse ?
Tonconjes ? Docoa (Jocay) Manta
Aranpasaos/ Cabo Pasado Calangome Agua Blanca
Aranpajaos
91
/Pasaos
Pintagua Canoa ? Calango Salango
Caraslobez Bahía de Caráquez Chondana/Pachota Santa Ana
Xamaejos/Amarejos Jaramijó Apelope Sucre
Cames San Mateo Xipixapa Jipijapa
Sercapez Puerto López Pipay Paján
Pillasagua El Aromo Picalauceme Julcuy
Levique Ligüiqui Chonana Palestina
Tohalla Tohalla Grande Camiloa Las Chacras
Japotó37 Charapotó Ayampi Ayampe

Otros cronistas y exploradores también informaron de estos poblados:

Miguel de Estete: Santiago y San Mateo (nombrse españoles), Tacanez


(Atacames), Coaque, Puna, Pasao, Caraque, Tumbes.

Juan Ruiz de Arce: Sant Mateo, Quaqui (Coaque), Achira (nombre de la


cacica de Pasao), Punan, Sata Elena (nombre español), Tumbez.

Pedro Cieza de León: Quaque, Pasao, Zalango, Passaos, Xaramixo


(Jaramijó). Pimpiguase, Peclansemeque, Xagua, Pechonce (Chone), Monte
Cristo (nombre español), Apechique, Silos, Canilloha, Manta, Came, Zapil,
Manaví (una parcialidad indigena), Xaraguaza, Caraque, Colima, Picuaza,
Pueblo Viejo (nombre español), Santa Elena, Puna, Yagua, Colonche, Chinduy,
Chongon, Daule, Chonana.

Relación Anónima de Guayaquil de 1605: Japoto (Charapotó), Pasao,


Tosagua, Conchipa, Manta, Jaramijó, Levique, Capil, Ginguigui (después
Picoazá), Misbay, Tohalla, Salango-

37
Algunos investigadores sostienen que Japotó es un pueblo distinto del actual Charapotó.
92
Poblados especializados, rutas, tambos e intercambios

Sabemos que nuestros antepasados se agruparon en pequeñas aldeas hasta


llegar a conformar poblados de más de 5000 habitantes. También sabemos
que poco a poco se fueron especializando en diversos oficios: lítica, cerámica,
metalurgia, tejidos, cestería o agricultores-cazadores y pescadores.

Las evidencias arqueológicas mostrarán estas actividades que inferimos se


efectuaron en nuestra región. Una tarea pendiente será la determinación de
sitios arqueológicos mayores, por ejemplo, de 1 hectárea con elementos
asociados (terrazas, montículos, estructuras, pozos, concheros, albarradas...)
que nos aporten una primera aproximación hacia el tipo de sitio que
registramos para luego realizar muestreos y excavaciones que arrojen
información sobre los ocupantes en cuanto a tiempo y espacio.

Probablemente estos poblados fueron parte de las antiguas rutas de


intercambio o los caminos ancestrales como les hemos denominado. La
cerámica sería un marcador insuperable y también obsidiana, conchas, etc. El
uso de estas rutas de intercambio seguramente fue cambiando en el tiempo por
otras más accesibles o porque fueron afectadas por fenómenos naturales
(erupciones, terremotos, sequías), por situaciones políticas o por conflictos.

Estos poblados se convirtieron en TAMBOS 38 o sitios de descanso para la


siguiente jornada de camino a grandes mercados de Los Andes (de este a
oeste) o viceversa hacia los puertos costeros (de oeste a este), conectándose
de sur a norte o de norte a sur, formando una gran red de comercio e
intercambio.
38
Tambo: del quechua TANPU que significa alojamiento temporal.
93
Mientras los poblados iban creciendo debido a
que las rutas de comercio e intercambio se fueron
haciendo cada vez más importantes; entendemos Los descendientes
de Huayna Cápac
que estos poblados eran de una misma cultura
Erróneamente hemos
hasta llegar a tener contactos con la siguiente
aprendido que
cultura; por ejemplo, en la época de los españoles Atabalipa fue el
heredero del trono
se encontraban en el valle del río Chone, tres inca a la muerte de
culturas diferentes: los Manteños o Paches, los su padre. Esto no es
cierto porque en la
Chonos o Milagro Quevedo y los Jama Coaque II, línea de sucesión,
Atabalipa o
estableciendo políticas de intercambio de no Atahualpa ocupaba el
hostigamiento y así mismo, si pasamos por un tercer lugar.

territorio definido que fue de la cultura Jama 1, Ninan Cuyuchi, 2.


Huáscar, 3.
Coaque II hasta ya llegar a lo que es la cuenca Atahualpa, 4. Túpac
Hualpa, 5. Manco
alta del Río Guayas, los caminantes y los Inca, 6. Paullu Inca,
comerciantes que usaban estas rutas iban con 7. Chuqui Huipa, 8.
Atoc, 9. Rumiñahui, y
toda seguridad talvez usando una "insignia" como otros más.
"pasaporte", o guías especializados, traductores, Ninan Cuyuchi murió
en 1527
negociadores; luego establecieron contacto y
probablemente por
comercio con la siguiente fase cultural que en este viruela. Cuando
muere Huayna
caso eran los Milagro Quevedo que ocupaban en Cápac, la realeza
esa época en la cuenca del Río Guayas y luego cuzqueña entroniza a
Huáscar como
hacia Los Andes ya con otras culturas en otros emperador. Luego se
produce una guerra
mercados y así sucesivamente si esta gente civil de la que hay
llegaba hasta la Amazonía o desde allí también varias versiones, Sin
embargo, la mayoría
subían hacia la sierra bajaban a la costa haciendo de los investigadores
sostienen que se dio
comercio intercambio de conocimientos y porque Huáscar no
tecnologías de semillas, metalurgia, cerámica, etc. era proclive a
mantener ciertas
tradiciones como la
Es importantísimo, encontrar esos poblados en
AYA MARCAY KILLA
estas rutas, es decir sitios arqueológicos en donde que era el festival de
los muertos y el
haya montículos terrazas asociados a humedales, paseo de las momias
fuentes de agua como ríos, de manera que esos de los antepasados.

lugares poblados, pequeños en importancia al


principio pero que después fueron creciendo de acuerdo al comercio o fueron
94
desapareciendo porque esa ruta ya no se usó por diversas razones por alguna
catástrofe natural, por alguna una erupción volcánica, por conflictos, entonces
se usó otra ruta esos poblados ya que perdieron importancia, por lo tanto la
gente migra tal como sucede ahora, hay poblados en la costa que
prácticamente están abandonados, solamente viven ancianos porque la gente
sale a trabajar a otros lados a conseguir recursos, así mismo pasó en el
pasado.

Elaborar un mapa cultural de desarrollo es lo que se pretende en la


investigación que llevamos a cabo, determinando ocupaciones por los restos
cerámicos en superficie y después por las excavaciones científicas. Bouchard 39
denomina a estos eventos como relaciones interculturales porque hay que
determinar las vías de contacto, las migraciones de los pueblos involucrados
desde el período Formativo.

Presencia Inca en nuestra región

Hasta ahora no se ha encontrado evidencia de la presencia Inca en nuestra


región. Lunnis (2023, en STRATA) plantea una influencia en la construcción de
un edificio en el cerro Jaboncillo “porque las evidencias sugieren que cuando
Tupac Inca Yupanqui, con su ejército acampado en Manta y Charapotó vio el
mar desde un punto alto y lo adoró” agregando que hay un pequeño y creciente
conjunto de datos que indica una presencia inca dispersa, diversa y selectiva
en la costa. Agrega que “…existe evidencia convincente de la influencia inca en
el diseño de dos complejos sagrados vinculados que habrían sido de
importancia central para el calendario ritual de cerro Jaboncillo y que apuntan,
de paso, a la relación funcional entre el sector ceremonial del este y los
sistemas agrícolas del oeste”.

Los incas no estuvieron presentes en nuestra región Manabí del Norte pues la
evidencia actual no registra sitios arqueológicos de dicha procedencia sin
descartar que nuevas investigaciones demuestren lo contrario.

39
Jean François Bouchard. Congreso Internacional de Americanistas, Ámsterdam 1988.
95
Costumbres y tradiciones de Chone40

La Etnografía trata del “estudio descriptivo


de las tradiciones y costumbres de los
pueblos” mientras que la Etnología estudia
“las causas y razones de las tradiciones y
costumbres de los pueblos”. Esta sección
es una descripción de enseres que se
usaron o se usan en la vida cotidiana
especialmente de la zona rural, algunos de
esos enseres fueron hechos con elementos
naturales, otros vinieron del extranjero y
unos más son producto del ingenio de
nuestra gente. Para abordar este tema,
conversamos con varias personas de
40
Esta investigación fue hecha por Boris L. C. Zambrano Cabrera en 2012. Revisada en 2013 y 2023.
Varias de las personas nombradas no residen en los sitios mencionados en la actualidad. Para todos
nuestros agradecimientos.
96
distintas comunidades, generalmente mayores de 60 años que son quienes
conservan en su memoria conocimientos ancestrales que intentamos preservar
para las presentes y futuras generaciones. A ellas y a ellos, gracias sinceras.

Manabí es una provincia que se caracteriza porque hay tradiciones que no


desaparecen como el uso del horno de leña para la preparación de platos
típicos como el caldo de gallina criolla o los panes de almidón 41 aunque en
ciudades grandes ya no se utiliza debido a que hemos adoptado costumbres de
otros lares así como las viviendas urbanas no prestan las facilidades para este
tipo de hornos, entre otras causas.

De acuerdo a investigaciones
arqueológicas, el uso del horno viene
desde las culturas antiguas como Valdivia
(Marcos, 2000). A la llegada de los
españoles lo usaban las culturas Jama
Coaque y Manteño en cuanto se refiere
estrictamente a Manabí. Por esos días, los
hornos estaban a nivel del suelo de las
viviendas. Posteriormente se construyeron
estructuras de madera en forma de cubos
en donde se empotraban las ollas de barro
que sirven como hornos. Para colocar las
cacerolas se utilizan hierros de distinto
diámetro, aunque los preferidos son las
láminas de hojas de resorte de vehículos
que se han roto.

El pueblo montubio se ha caracterizado, al


igual que los antepasados, en usar los
materiales del medio. El mate (Crescentia
cujete)42 (Borja y Lasso, 1990) es una
planta que proporciona frutos redondos o
alargados que han sido usados para la
41
Fécula blanca, ligera y suave que se obtiene del procesamiento de la yuca
97
confección de diversos objetos útiles en la vida diaria como el bototo que se
usa para llevar agua para beber en las faenas agrícolas, hoy lamentablemente
reemplazado por botellas de plástico que calientan el líquido a diferencia del
mate que lo mantiene fresco durante el día; para tapar del bototo se usa la tusa
de maíz. También se confeccionan coladores, “matiancho” o “mateancho”,
alcancías y cucharas para las tareas culinarias, así como “canastillos” para
recoger huevos. Inclusive se hacen filtros para “pasar el café molido” a fin de
obtener una esencia que sirve para preparar el “café de palo” o “café pasado”
bebida indispensable en las mañanas y en las tardes. Del mate largo grande se
confecciona un colador que la gente llama susunga.

Una piladora tradicional para el arroz es el bunque,


tallado en un tronco de buena madera. Se deposita los
granos y con el pilón, también de madera, se machacan
hasta sacarles las cáscaras. También se usa para
desgranar el maíz. Se dice que la mejor madera para
hacerlo es el ajo43 (Guarea guidonia). Para el pilón se
usa una madera que no pierda peso al
secarse como: piñuela, simple, caujillo
(Pouteria caimito).

Para iluminarse se utilizaban las


lámparas de queroseno
confeccionadas en lata, artesanía que
hoy es difícil encontrar en los lugares de expendio de
artículos para las diferentes actividades campesinas como las
talabarterías. Se emplearon también las lámparas de tubo
de queroseno y las que usaban gasolina conocidas como
petromax.

El andullo44 de caucho: es una lámpara en la que la materia


combustible es una tira de caucho45 previamente secada que
se rodea de ceniza en una olla u otro recipiente
42
Hemos distinguido siete variedades de mate: largo grande, largo mediano, largo pequeño, redondo
alargado, redondo grande, redondo mediano y redondo pequeño.
43
Le dicen así porque al machacar las hojas de este árbol se percibe un olor a ajo.
98
incombustible. La punta del caucho es la que se enciende para iluminar. Este
artefacto era imprescindible en los hogares de antaño en la zona rural, nos
refirió Ida Vera, habitante de El Ceibo de Río Grande, quien recuerda con
nostalgia esos días.

La caña (Bambusa guadua) tiene


muchas utilidades, una de ellas en la
elaboración de las catangas –o nasas-,
artes de pesca, para la captura de
camarones, especialmente el cacaño
(Machrobrachium americanum)
ingrediente principal del viche46
montubio. De la caña también se hacían
los faroles, llamados candiles usados
en las jornadas de pesca nocturna o
para alumbrar el camino en las noches
sin luna. Arpones para pesca se hacen
de caña guadua aún verde, y las
poaderas (podaderas) se colocan
en cañas finas y largas para
cosechar las mazorcas de cacao o
naranjas.

Antes, la mantequilla blanca se


envasaba en canutos de caña verde
lo que le daba un sabor
incomparable. Así mismo, el queso
se envolvía en hojas de plátano curadas previamente sobre el fuego. En Río
Grande, específicamente en la comunidad El Ceibo, la señora Estilita
Rodríguez continúa con la tradición de envolver el queso en hojas de plátano.
“Le da al queso un sabor exquisito y se mantiene fresco por varios días” refiere
esta dama que además elabora el mejor borroque del sector. (El borroque es

44
Originalmente este término significa: hoja larga de tabaco arrollada. (Pelayo, 1964)
45
El caucho se obtenía del árbol del mismo nombre, Hevea guianensis Aubl.
46
Sopa de maní con verduras. Este plato se consume todo el año y especialmente en Semana Santa.
99
una bebida que se hace con chontilla madura –Bactris gassipaes H.B.K- y
plátano maduro -Musa paradisiaca, M. Sapentium- que se ponen a cocinar.
Luego se exprime el jugo de las chontillas y se agrega el maduro previamente
molido o “majado” como decimos los montubios). Entre mayo y junio, y,
noviembre y diciembre se cosecha la chontilla.

Las bateas de madera eran artefactos imprescindibles en la vida de los


montubios. Se tallaban en cedro (Cedrela fissilis Vell.), majagua (Poulsenia
armata (Miq.) Standl.) o laurel (Cordia alliodora (R&P) Oken) utilizando una
gubia, nos cuenta la señora Dora Pazmiño Acosta moradora de Betillal de Río
Grande quien sostiene que tanto para hacer bunques o bateas, la mejor
madera es la majagua, árbol que llega a crecer 30 metros con un tronco de 75
cm de diámetro. De estos árboles también se elaboraban grandes cucharas
usadas en las cocinas montubias.

Otro recipiente que aún se puede ver en


algunos hogares es el alambique, olla
grande hecha en barro en la que se
almacena agua hervida o filtrada para
beber extrayéndola con un coso47. Antes
cada hogar tenía “la piedra” para filtrar
agua que era recogida en un alambique de
donde se sacaba para que guste toda la
familia. La piedra se montaba en una
estructura de madera protegida con mallas
anti mosquitos para evitar la intromisión
de insectos.

También de barro se confeccionan


diversos recipientes: cazuelas para
“reventar” el arroz y ollas para la
cocción de los estofados o sopas –
menestras- que acompañan diversas

47
Recipiente hecho de mate o de coco, de ocho a diez centímetros de ancho.
100
preparaciones. El comal, recipiente de barro casi plano, es usado para tostar
cacao o café.

Los molinillos se elaboran de madera un árbol conocido en el campo como


molinillo (Quararibea funebris) y son instrumentos que tienen tres, cuatro o
más puntas en un extremo, usados para “batir” la coladas, menestras y el
chocolate. Se usa haciéndolo girar vigorosamente con las palmas de las manos
de manera que las puntas del extremo destrocen los ingredientes de la
preparación que se bate.

Para lavar los platos se utilizaba


el jaboncillo (Sapindus
saponaria), fruto de una planta
que tiene alto contenido de una
sustancia detergente. En el
interior se encuentra una semilla
negra y esférica que servía para
jugar a las “bolichas” que luego
fueron reemplazadas por las de
vidrio y también se usan para
artesanías.

La mejor leña es la que se obtiene del naranjillo (Trichanthera gigantea)


árbol que se encuentra en peligro de extinción y que puede crecer más de 30
metros. La madera del guayabo (Psidium guajaba L.) y la del naranjo (Citrus
aurantium), también son excelentes especialmente para el ahumado de carnes
y chorizos –longaniza.

Durante las épocas de lluvias, el transporte suele hacerse en “Johnson”, que


es en realidad el nombre de marca de los primeros motores fuera de borda que
llegaron al Ecuador. Hoy predominan los motores japoneses que mueven las
canoas en nuestros ríos, especialmente en Río Grande durante la estación de
lluvias (enero a mayo). Pero también se confeccionan balsas de caña guadua
(Bambusa guadua, B. angustifolia), de boya y de tallos de plátano.

101
La primera se hace con la intención de “bajar” aguas abajo, cañas para vender
en los mercados locales o para uso personal. En ocasiones se las cargaba con
plátanos y otros productos. Por eso se habla aún de una “Balsa de Caña” que
se confeccionaba con 24 unidades. Las balsas de boya (Ochroma
pyramidale, O. logopus, O. sp) son usadas para transportar personas y
productos hasta las ciudades o hasta lugares en donde se han habilitado las
vías “carrozables”. Una vez cumplido su cometido, las boyas se venden,
obsequian, o se dejan en los pasos de ríos para uso de las personas. Las
balsas de tallos de plátano son emergentes y se hacen cuando no se posee
boya o caña. Bien amarrados, los tallos pueden soportar una persona y
navegar aguas abajo.

El cambio de brazo y las medidas para préstamo o ventas aún se mantiene en


las comunidades rurales, aunque con cierta dificultad según nos contó Holmer
Alcívar de El Ceibo de Río Grande, ya que muchas personas han migrado a
otras partes debido a que el sector agrario no tiene apoyo estatal. El “cambio
de brazos” es cuando las personas vienen a trabajar en una finca por uno o
varios días y luego debemos “pagar” ese tiempo yendo a trabajar a las fincas
de las personas que nos ayudaron antes.

La fanega (del árabe, fanica) es una medida de capacidad para áridos –


granos- que es variable en cada región de España, equivalente a doce
celemines48 o 55 litros y medio, según consta en el Diccionario Pequeño
Larousse (1964). Sin embargo, este termino es usado en nuestra región como
indicador de cantidad. Así, puedo comprar o prestar, por ejemplo, una fanega
de maíz (1.800 mazorcas) o dos almudes que son 300 mazorcas. La fanega
tiene 12 almudes, un almud tiene 150 mazorcas.

El aceite de palma real se obtenía a través de la siguiente operación: se pela


la palma real, se procede a tostarla en un comal, luego se muele.
Posteriormente se pone a hervir. El aceite que desprende la palma real flota en
la superficie y se va recogiendo para usarse posteriormente como medicina
casera en especial para las afecciones bronquiales y para cocinar lo que da un
toque con sabor a coco en las frituras especialmente. El autor de este
48
Celemín: medida de capacidad para áridos equivalente a 4, 625 litros.
102
documento elabora anillos de palma real para las pañoletas que usan los boys
scouts.

Los molinos corona son infaltables en los hogares montubios y jamás otra
marca ha podido reemplazarlos. Con estos instrumentos se muele maíz, cacao,
café, etc., y constituyen elementos valiosos para las actividades culinarias y
pecuarias.

La ropa se asentaba utilizando las planchas


de lámina que se calentaban en las brasas.
Posteriormete apareció la plancha gallito,
llamada así porque el seguro del depósito
donde se colocaban las brasas ardientes,
tenía forma de gallito. Por esos días, la ropa
recibía una generosa porción de almidón
disuelto en agua antes del enjuagado final.
También se le agregaba “azulejo” a la ropa blanca para que tome un color
ligeramente azulado.

El pututo o caracol (Strombus


galeatus, o, el caracol blanco
grande, Conus fergusoni) se
usaban para llamar a los
trabajadores a almorzar. Su sonido
se podía escuchar a varios cientos
de metros de distancia. También se
utilizaba para pedir ayuda en caso de emergencia. En nuestros campos se lo
conoce con el nombre de churo. Luz María Ponce López de La Isla, Ricaurte,
refiere que los churos también se hacían con cuernos de vaca.

La troja o granero era una construcción de madera que se hacía cerca de la


casa principal con la finalidad de guardar
maíz para protegerlo de plagas, insectos
y roedores. De unos tres metros de
altura, por dos o tres metros de ancho y

103
largo, nunca se le dejaba escaleras y los postes que sostienen esta
construcción se los forraba en parte de teja metálica para que las ratas y
ratones no puedan acceder a las cosechas guardadas.

Para la cacería se utilizaba la escopeta de


chimenea o escopeta de chispa (ver foto) para
cobrar presas pequeñas como perdices,
palomas, guatusos, etc. Posteriormente se
introdujo la escopeta Ruger49 de cartucho
calibre 16 que pronto fue imitada por armeros
locales. Fue un arma de defensa contra animales
peligrosos como la serpiente X o los jaguares.

El sote es un instrumento para avivar las llamas en el horno tradicional. Es un


tubo generalmente de metal, de unos 50 cm de longitud, se soplaba por un
extremo a fin de que las brasas no pierdan su intensidad. En esta labor de
“atizar” el fuego también se usan las tenazas de metal mas son indispensables
para el asado de los plátanos, camotes, maduros o carnes.

El rallo o rallador, es un instrumento cuyo origen se remonta antes de Cristo.


En Chone hemos encontrado evidencia de
ralladores de cerámica, todos circulares, en
varios sitios. El rallador de la fotografía es el
único de ese tipo que tenemos, y como nos fue
entregado fuera de contexto, no podemos
definir a que fase pertenece. Fue hecho de
cerámica con piedrillas incrustadas las mismas
que servían para rallar yuca, posiblemente.

El rallo se sigue usando. El maíz rallado para


tortillas tendrá mejor sabor frente al que
49
Escopeta Ruger: Sturm, Ruger & Company, Incorporated es una compañía ubicada en Southport,
Connecticut, Estados Unidos, dedicada a la fabricación de armas de fuego, más conocida por su nombre
abreviado Ruger. La empresa produce rifles, escopetas, pistolas y revólveres. Es el cuarto fabricante de
armas de los Estados Unidos. Sturm, Ruger & Company fue fundada por William B. Ruger y Alexander
McCormick Sturm en 1949 en un pequeño taller de Southport, Connecticut.
(http://es.wikipedia.org/wiki/Sturm,_Ruger)

104
procesa en una licuadora. El toque de amor que le da la ralladora en su labor
es lo que hace la diferencia. El rallo actual es de hojalata o de zinc; siendo una
lámina que se perfora con clavos en el lado inverso que se usa. La lámina se
monta en una pequeña estructura de madera a fin de mantener una forma semi
circular.

Las alforjas50 eran artículo indispensable de nuestros montubios para llevar


cargas livianas tanto en las bestias de carga como al hombro de las personas.
Se confeccionaban de algodón tejido. Posteriormente se las hacía de sacos de
plástico. Ahora están en desuso.

Bibliografía Chone: Costumbres y Tradiciones

GARCÍA PELAYO Y GROSS, Ramón. Pequeño Larousse Ilustrado. París,


1964

MARCOS, Jorge. Arqueología de la Antigua Provincia de Manabí. Ediciones


Banco Central. Guayaquil, 2000.

BORJA A, Cristina; y, LASSO B., Sergio. Plantas nativas para reforestación en


el Ecuador. Fundación Natura-AID. Quito, 1990.

Webgrafía:

http://es.wikipedia.org/wiki/Sturm,_Ruger. (Consultada en junio de 2013)

50
Especie de talega, abierta por el centro y cerrada por sus extremos, que se echa al hombro para llevar el
peso bien repartido. (Larousse, 1964)
105
Casas con basamentos de piedra

En muchas comunidades al sur y


este de la ciudad de Chone hemos
encontrado casas con columnas
que tienen basamentos de piedras
de cada lugar que visitamos. Por
lo observado, las piedras son
locales y se las puede encontrar
con facilidad.

De acuerdo al diseño de la casa,


se obtienen cuatro, seis y hasta 12
piedras para el número de
columnas que tendrá las mismas
que son colocadas en el suelo
donde se plantará la casa con la
única modificación, de ser el
caso, de las caras que van hacia
el suelo y las que van a soportar
las columnas que consisten en
“horcones” de madera de buena
calidad (moral, huevo de mono,
naranjillo, caoba...) para luego
poner las vigas que se
“enmecharán” a cada pilar
formando una C invertida.

106
Después se continuará con las siguientes
tareas como el levantamiento de las
columnas superiores sobre las vigas
colocadas anteriormente y así hasta
construir toda la casa. Para evitar la caída
de la estructura se utilizan “contretes” en
lugares estratégicos que van de columnas
a vigas como graficamos…

Don Moisés Intriago del sitio Ñause (Visita


realizada en agosto de 2022) nos contaba
que su padre le indicó que esta forma de
construir con basamentos de piedra
la trajo a esta comunidad un señor
que vino desde Bachillero (Tosagua)
por el año de 1950, sin recordar
más detalles. “Hay muchas casas
por acá construidas de esta manera
y ninguna tuvo afectaciones graves
en el terremoto de abril 16 de 2016”
refirió este campesino en cuya finca
y otras aledañas hay un importante sitio
arqueológico con montículos, tolas, terrazas y
albarradas.

107
Desde el sus del cantón en San
Elías, Casa Grande, Varolisa51
en Canuto, pasando por La Tola
de Platanales y Coñaque en Río
Grande hasta Ñause y Pescado
en el noreste hemos visto este
tipo de construcciones que
conservan la tradicional forma
de la casa de campo manabita
que consiste básicamente en
tres cuerpos: sala con
dormitorios adjuntos y a veces un pasillo que conduce desde los mismos a la
cocina o el comedor; comedor y cocina desde donde se accede al sanitario.

La casa que vimos en Varolisa (Canuto) tiene una diferencia notable que
consiste en que en las piedras de basamento se colocan las vigas y sobre
éstas se levanta la estructura de la casa colocando las columnas y luego vigas
con lo que se aprovechó el
espacio de la primera
planta para bodegas y/o
habitaciones.

51
Ninguno de nuestros informantes conoce el origen y significado de este nombre.
108
109
Al final de esta primera ruta…

Como decían los escritores de antaño, muchas cosas se quedan en el tintero, y


también en nuestros recuerdos sobre las visitas incontables que durante más
de cuarenta años hemos realizados a las campiñas manabitas por excursiones,
acampadas, exploraciones, prospecciones, excavaciones o para compartir
eventos comunitarios.

Nos resta seguir investigando, elaborar artículos e informes sobre nuestra


prehistoria, etnohistoria e historia de la rica herencia cultural de nuestros
antepasados, investigadores, escritores, cronistas, historiadores, para que este
legado no se pierda en la desidia y el olvido de aquellos que estamos llamados
de una u otra manera a conservar nuestro pasado para el futuro de Chone y su
región de influencia.

A todos, gracias por su atención y paciencia.

Boris L.C. Zambrano Cabrera

Diciembre de 2023

110
Bibliografía Arqueología y Etnohistoria

Borja, Cristina y Sergio Lasso B. (1990). Plantas nativas para reforestación en


el Ecuador. Fundación Natura – AID – EDUNAT III, Quito-Ecuador.

Damp Jonathan y otros. (2010). Excavaciones arqueológicas en Los Samanes.


Proyecto Los Samanes 2010. Informe de campo Presentado al Instituto
Nacional de Patrimonio Cultural y M.I. Municipalidad de Guayaquil, diciembre
de 2010.

Echeverría Almeida, José (2011). Glosario de Arqueología y temas afines.


Tomos I y II, Serie Glosarios. Municipio del Distrito Metropolitano de Quito e
Instituto Nacional de Patrimonio Cultural. Quito.

Estrada, Emilio. Arqueología de Manabí Central. Publicación del Museo Víctor


Emilio Estrada. Publicación No. 7, Guayaquil, Ecuador.

Estrada, Emilio. (1958). Las Culturas Pre-Clásicas, Formativas o Arcaicas del


Ecuador. Publicación del Museo Víctor Emilio Estrada. 1 de junio de 1958.

Fundación Alexander von Humboldt. Revista Fronteras de investigación. Año


1, Número 1, Quito, Ecuador, 1997.

Funes Sánchez, María Antonieta. Arte Precolombino Ecuatoriano: Las


fusaiolas o torteras del Litoral. Separata de Cuadernos de Historia y
Arqueología No. 37 Año XX. Publicación de la Casa de la Cultura Ecuatoriana,
Núcleo del Guayas. Guayaquil, diciembre de 1970.

García Caputi, Mariela; Veintimilla B., César, y, Xomchuk, Irina. Orígenes:


Caras, Jamas y Coaques. Museo de Bahía de Caráquez del Banco Central del
Ecuador. Guayaquil, noviembre de 2006.

González, Daniel (2014). Los pueblos nativos del Distrito de Puerto Viejo
durante el siglo XVI: crisis y transformaciones; en: Estudios multidisciplinarios
en cinco espacios prehispánicos tardíos del Ecuador.

111
Guillaume Gentil, Nicolás. (2013). Cinco mil años de historia al pie de los
volcanes. Implantación, población y cronología en el Ecuador. FLACSO-Sede
Ecuador. Quito, Ecuador.

Hidrovo Quiñonez, Tatiana M. (2016). Tras las huellas de la Ciudad de los


Cerros. Corporación Cívica Ciudad Alfaro, Montecristi, Ecuador. Primera
edición.

Holm, Olaf. Compilador y Editor del folleto. Los primeros hombres del Ecuador.
Museo Antropológico del Banco Central del Ecuador. Julio de 1981.

Holm, Olaf. Milagro Quevedo. Museo Antropológico del Banco Central del
Ecuador. Julio de 1983.

Lathrap, Donald W. El Ecuador Antiguo. Catálogo de una exhibición


organizada por el Museo Field de Historia Natural. Abril-Agosto de 1975,
catalogada por: Donald Collier y Helen Chandra.

Marcos Pino, Jorge G. Ecuador Antiguo. Las sociedades de la costa del área
Septentrional Andina 300 a.C. – 1500 d.C. Banco del Pacífico Museo
Arqueológico, Guayaquil, Ecuador, 1993.

Marcos Pino, Jorge G. Las vías de interacción en los tiempos anteriores a Los
Incas. Los caminos en el Ecuador.

Marcos Pino, Jorge G. Arqueología de la Antigua Provincia de Manabí. Centro


de Estudios Arqueológicos y Antropológicos CEAA-ESPOL. Guayaquil,
noviembre de 2000.

Oberem, Udo (1976). El acceso a los recursos naturales de diferentes


ecologías en la sierra ecuatoriana. Ponencia presentada en el XLII Congreso
Internacional de Americanistas. Paris, septiembre de 1976.

Parducci, Resfa. Instrumentos musicales de percusión del Litoral Prehistórico


Ecuatoriano. BCE. Guayaquil 1986.

Vallejo Vargas, Silvia Ximena. (2011). Distribución de las cenizas volcánicas


holocénicas – tardías en la costa del Ecuador. Tesis de Grado en Ingeniería
Geológica. Escuela Politécnica Nacional, Quito.

112
Viteri Gamboa, Julio. Valdivia Tierra Adentro. Publicación del Museo de la
ESPOL. Guayaquil, enero de 1980.

Ontaneda Luciano, Santiago. Ecuador. Hitos de su pasado precolombino.


Banco Central del Ecuador, Manta, diciembre de 2009.

Stothert, Karen E., editora. Lanzas Silbadoras y otras contribuciones de Olaf


Holm al estudio del pasado del Ecuador. BCE, Ecuador 2001.

Zeidler, James A., y, Pearsall, Deborah M. Arqueología Regional del Norte de


Manabí, Ecuador, Volumen 1. Medio Ambiente, Cronología Cultural y
Subsistencia Prehistórica en el Valle del Río Jama. University of Pittsburgh,
Departament of Anthopology. Ediciones Libri Mundi. Pittsburgh-Quito 1994.

Zeller, Richard H. Valdivia. Guayaquil, 1975 (?)

Artículos

Álvarez, Silvia y Laura Zulaica. (2015). Indicadores de sustentabilidad en


sistemas de albarradas: Aportes metodológicos. Letras Verdes. Revista
Latinoamericana de Estudios Socioambientales. N° 18, septiembre de 2015,
pp. 184-207.

Román Carrión, José Luis. La Paleontología en el Ecuador.: Historia y


Perspectivas. Museo de Historia Natural Gustavo Orcés. Escuela Politécnica
Nacional, Quito. (Visita: diciembre 13 de 2023)

Lunnis, Richard Marshall. (2016). Investigaciones arqueológicas en Salango:


nuevos aportes al estudio de un antiguo sitio sagrado. Rehuso 1(2), 1-38.
Recuperado de:
http://revistas.utm.edu.ec/index.php/rehuso/article/view/300/257

Ortiz – Troncoso, Omar R. Bouchard, Jean François & Mercedes Guinea


(eds.). – Relaciones Inter Culturales en el área ecuatorial del Pacífico durante
la época precolombina. Proceeding of de 46° Congreso Internacional de

113
Americanistas (Ámsterdam 1988). In: Journal de la Societé des Américanistes.
Tome 76, 1990, pp. 266-270.

Proyecto Kitu. Los navegantes ecuatoriales, los nombres de sus pueblos


ancestrales y algunas costumbres. Texto e investigación Carlos Mauricio
Quiroz Cevallos. Publicado por Proyecto Kitu, octubre 3 de 2019.
proyectokitu.wordpress,com

Prümers, Heiko; María Fernanda Ugalde y Eric Dyrdahl. (2022). Machalilla


revisited – New data for the Early Formative Period of Coastal Ecuador; En:
joGA 2022. 138-201, S 1-74, http://dol.org/10.34780/p4a6-406a

Stothert, Karen y Amelia Sánchez (2011). Culturas del Pleistoceno Final y el


Holoceno Temprano en el Ecuador. Boletín de Arqueología PUCP/N°15/2011,
81-119/ISSN 1029-2004.

Zeidler, James A. (2023). Nuevas perspectivas sobre el volcanismo holocénico


ecuatoriano y sus repetidos impactos en el valle de Jama: hacia un
“geoarchivo” de tefra distal. STRATA, 07-12/ 2023, vol. 1, nro.2, e9

114
TESTIMONIOS DE NUESTROS ANTEPASADOS

Esta galería de imágenes está dedicada a los artistas que nos dejaron su
testimonio plasmado en la cerámica, en las piedras, en conchas, huesos y
metales en parte de Manabí del Norte.

115
116
117
118
119
120
121
122
123
124
125
126
127
128
129
130
131
132
133
134
135
136
137
138
139
140
141
142
143
144
145
146
147
148
149
150
151
152
153
ÍNDICE DEL CAPÍTULO I

154
.

155

También podría gustarte