Vemos la Can Lis, y como los espacios enmarcan en el mar A través de ventanas que protegen los espacios del sol, esta luz, está enfatizando la condición del vacío. La construcción posee una forma masiva pero muy sencilla, de forma que se le considera arquitectura revisionista, me gusta cómo se ven de afuera las ventanas, es como si la sencillez atrapara una casa moderna en una fachada muy vieja, lo cual tiene sentido pues este arquitecto llevaba la contraria a Le Corbusier, pues este era un expresionista del organicismo, la ligereza de su estructura se puede ver si comparas rochamp con un castillo medieval y la planta de esta casa. La cruza del clásico y orgánico se logró mediante la simplificación de formas puras, esto debido a que es algo arcaico pero que se contagia por el realismo que podemos ver cotidianamente dando atisbos de otras culturas, como la griega, pero sin aludirlos completamente. La casa posee dos fachadas, una cobija a la otra esto se sobre poner y crea un contraste para llegar a la condición hibrida del racionalismo con la alógica medieval y el organicismo. La fachada como se mencionó antes es dos, estas se desdoblan con detalles entre los huevos abocinados pues desde dentro los pilares no se ven, por lo que su masividad se percibe diferente del exterior para el exterior. esa presencial visual se difumina por la continuidad que posee la roca, cortada de igual forma para obtener una estructura equilibrada