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Laureano Bonifacio Diana Montserrath

¿Quién decide tu destino?, ¿la suerte?

Considero que muchas personas pierden el tiempo “buscando” la suerte con el fin
de tener éxito o cumplir con sus metas y objetivos. Sin embargo, creo que las
personas que piensan de esta manera deberían trabajar por tratar de conseguir el
éxito, las metas, o cualquier cosa que se propongan y la suerte llegará sola. Aunque
para esto, lo primero es tener claro lo que queremos alcanzar o a lo que
pretendemos llegar, como decía en la lectura: “si no sabes a dónde ir, cualquier
camino te podría llevar, pero eso no significa que sea el correcto”

Retomando, creo que el éxito no es más que conseguir aquello que te propones.
Cada uno debemos fijarnos nuestras propias metas y valorar el esfuerzo que
requieren cada una de ellas puesto que el éxito se encuentra en los pequeños
detalles. Aquellos pequeños retos que nos ponemos día a día y que nos permiten
agarrar confianza en nosotros mismos, ya que, a medida que los vamos
consiguiendo, van subiendo en cuanto al nivel de dificultad, pero también vamos
creciendo con ellos.

Entonces, ya viéndolo de esta manera, la suerte solo es una forma sugestiva de ver
las cosas, un “lo espero a ver si pasa”, pero sin hacer absolutamente nada, más que
dejarle las cosas al universo, para que pasen, cuando lo que realmente deberíamos
pensar es “voy a hacer lo que esté en mis manos para que pase”, es decir,
comenzar a dejar de ver tanto a la suerte y comenzar a ser proactivos con nosotros
mismos.

La administración y la organización. El legado socio- histórico de la


modernidad y su desafío en la construcción de un sistema
socioeconómico equilibrado

La modernización hoy en día ha sido sumamente importante en cuanto al desarrollo


tecnológico que ha tenido el mundo, sin embargo, creo que a veces no nos
ponemos a pensar en el otro lado que esto generó y genera en la actualidad para el
medio ambiente debido a diferentes factores, por ejemplo, los mercados
internacionales constantemente generan un aumento en gran escala de los recursos
energéticos, en consecuencia, se incrementa la emisión de sustancias
contaminantes, las cuales producen, a su vez, el cambio climático y el calentamiento
global.

El medio ambiente ha perdido tanta importancia a lo largo de los años, al grado de


ser ignorado, y esto se debe al consumismo exagerado y sin límites que conlleva la
sobreexplotación de los diferentes recursos necesarios para satisfacer los altos
porcentajes de demanda que originan los consumidores.

Nuestro propio espacio, en donde nosotros mismos vivimos se ha afectado a tal


grado que, hemos provocado daños irreversibles en el agua, el aire, la capa de
ozono, los suelos, los ecosistemas, puesto que, estos cada vez presentan mayor
contaminación, y en consecuencia, conllevan daños a la población, pero inclusive,
esta misma hace caso omiso ante esta problemática.

Las cuestiones medioambientales deben dejar de ser tomadas como factores


irrelevantes, tanto personalmente, como empresarialmente. La modernización sí, es
algo muy positivo para el desarrollo tecnológico de las personas, las empresas y
las nacionales, pero no poniendo en riesgo cada día que pasa nuestra propia
supervivencia.

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