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Señor

JUEZ CONSTITUCIONAL DE TUTELA (reparto)


E. S. D.

REFERENCIA: ACCION DE TUTELA INTEGRAL CON MEDIDA


PROVISIONAL

ACCIONANTE: MARIA ANGELICA VIDAL. (AGENTE OFICIOSA DE SU HIJO


MENOR MARTIN LOPEZ VIDAL)

ACCIONADAS: EPS SANITAS -CLINICA SEBASTIAN DE BELALCAZAR -


SECRETARIA DE SALUD MUNICIPAL

MARIA ANGELICA VIDAL, mayor de edad, identificada como aparece al pie


de correspondiente firma, actuando en calidad de AGENTE OFICIOSO y
representación de mi hijo menor MARTIN LOPEZ VIDAL de 17 meses de edad,
atendiendo el ordenamiento jurídico Colombiano y con el debido respeto a
usted, manifiesto que formulo ACCION DE TUTELA CON MEDIDA
PROVISIONAL, para que sean protegidos los derechos constitucionales
fundamentales a la VIDA Y SALUD que están siendo vulnerados por la
entidades: EPS SANITAS -CLINICA SEBASTIAN DE BELALCAZAR -
SECRETARIA DE SALUD MUNICIPAL DEL DISTRITO DE SANTIAGO DE
CALI.

MEDIDA PROVISIONAL:

Respetuosamente le solicito al señor Juez Constitucional que de conformidad


al artículo 7 Decreto 2591 de 1991, se decrete la siguiente MEDIDA
PROVISIONAL:

Ordenar la realización inmediata del examen de resonancia de cabeza bajo


sedación con contraste, ordenado por el neurocirujano CESAR HUMBERTO
VARON desde el día 06 de junio de 2021, el cual estaba programado en la
CLINICA SEBASTIAN DE BELALCAZAR, así mismo que ordené a la entidad
competente los demás exámenes, intervenciones, operaciones, tratamientos y
entrega de cada uno de los medicamentos necesarios para el tratamiento de la
enfermedad actual de mi hijo menor MARTIN LOPEZ VIDAL.

La acción de tutela consagrada en el artículo 86 de la Constitución Política


faculta a toda persona para reclamar ante los jueces, mediante un
procedimiento preferente y sumario, la protección inmediata de los derechos
fundamentales, cuando éstos resulten vulnerados o amenazados por la
acción o la omisión de cualquier autoridad pública, o de los particulares, en
los casos en que así se autoriza.

El Decreto 2591 de 1991, reglamentario de la acción de tutela, establece que el


juez constitucional cuando lo considere necesario y urgente para proteger un
derecho fundamental “suspenderá la aplicación del acto concreto que lo
amenace o vulnere” y, dicha suspensión puede ser ordenada de oficio o a
petición de parte, para el efecto, el artículo 7° de la mentada normatividad
dispone:

“Artículo 7°. Medidas provisionales para proteger un derecho.


Desde la presentación de la solicitud, cuando el juez expresamente lo
considere necesario y urgente para proteger el derecho,
suspenderá la aplicación del acto concreto que lo amenace o
vulnere.

Sin embargo, a petición de parte o de oficio, se podrá disponer la


ejecución o la continuidad de la ejecución, para evitar perjuicios ciertos
e inminentes al interés público. En todo caso el juez podrá ordenar lo
que considere procedente para proteger los derechos y no hacer
ilusorio el efecto de un eventual fallo a favor del solicitante.

La suspensión de la aplicación se notificará inmediatamente a aquél


contra quien se hubiere hecho la solicitud por el medio más expedito
posible.

El juez también podrá, de oficio o a petición de parte, dictar cualquier


medida de conservación o seguridad encaminada a proteger el derecho
o a evitar que se produzcan otros daños como consecuencia de los
hechos realizados, todo de conformidad con las circunstancias del
caso.

[…]” (Resaltado fuera de texto)

En este sentido, la Honorable Corte Constitucional ha señalado que las


medidas provisionales pueden ser adoptadas en los siguientes casos: “(i)
cuando resultan necesarias para evitar que la amenaza contra el derecho
fundamental se convierta en una violación o; (ii) cuando habiéndose constatado
la existencia de una violación, estas sean necesarias para precaver que la
violación se torne más gravosa”1.

En el caso sub judice, señor Juez Constitucional, mi hijo menor presenta


síntomas de alarma neurolgicase por posible MACROCEFALIA CON
ECOTRANSFONTANELAR C/ VENTRICULOMEGALIA y requiere el examen
antes mencionado de manera urgente para iniciar su tratamiento:
15:11 CESAR HUMBERTO VARON GRAJALES (NEUROCIRUJANO)
MOTIVO DE CONSULTA:
MACROCEFALIA
ENFERMEDAD ACTUAL:
PACIENTE DE 8 MESES NEURODESARROLLO NORMAL MACROCEFALIA CON ECOTRANSFONTANELAR
C/VENTRICULOMEGALIA LEVE EF NEUROLOGICO NORMAL SIN SX O SINTOMAS DE ALARMA NEUROLGICA
SE SOLICTA RM CEREBRAL SIMPLE Y CONTRASTADA -BAJO SEDACION ANESTESICA RETORNO CON
RESULTADOS

Con los argumentos y pruebas aportadas con este escrito, los que
comedidamente solicito al Juez de tutela sean analizados con tal detalle para
efectos de decidir sobre la procedencia de la medida provisional solicitada,
pues se encuentra más que demostrada la violación de los derechos
fundamentales de mi hijo menor de edad invocados.

Ahora bien, lo que se pretende a través del decreto de la medida provisional


consagrada en el artículo 7° del Decreto 2591 de 1991, es que como lo indica
la H. Corte Constitucional se adopten las medidas pertinentes para evitar que
la situación se torne aún más gravosa, lo que causaría un perjuicio
irremediable, el que estamos todavía a tiempo de evitar

En reiterada Jurisprudencia, la H. Corte Constitucional ha expresado a través


de sus sentencias, que la aprobación de la medida provisional, no constituye un
prejuzgamiento, por el contrario, se debe es de entender como el instrumento
la Carta Política que le otorgó a sus asociados, para evitar un perjuicio
irremediable

Respecto de la prueba que justifica la necesidad de la medida provisional, es


importante resaltar que no es otra que las copias de la historia clinica, los
documentos anexos respecto de los trámites realizados hasta el
momento, por lo tanto, la medida requerida no es una simple manifestación.

SEÑOR JUEZ RUEGO QUE IMPIDA SE CONTINUE CON LA


VULNERACIÓN DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES DE MI HIJO
MENOR DE EDAD EN SITUACION DE INDEFENSION Y CONCEDA LA
MEDIDA PROVISIONAL.

HECHOS:

PRIMERO: el día 6 de junio del 2021 mi hijo fue remitido para neurocirugía
pediátrica debido a que en sus crecimiento y desarrollo su perímetro cefálico
siempre dio alto y se envía para esta especialidad para descartar macrocefalia.

15:11 CESAR HUMBERTO VARON GRAJALES (NEUROCIRUJANO)


MOTIVO DE CONSULTA:
MACROCEFALIA
ENFERMEDAD ACTUAL:
PACIENTE DE 8 MESES NEURODESARROLLO NORMAL
MACROCEFALIA CON ECOTRANSFONTANELAR
C/VENTRICULOMEGALIA LEVE EF NEUROLOGICO NORMAL SIN SX
O SINTOMAS DE ALARMA NEUROLGICA SE SOLICTA RM
CEREBRAL SIMPLE Y CONTRASTADA -BAJO SEDACION
ANESTESICA RETORNO CON RESULTADOS

SEGUNDO: Se inician cada uno de los trámites requeridos para las


autorizaciones. y exámenes correspondientes, La cita fue programada para el
25 de agosto del 2021 como se evidencia a continuación:

TERCERO: Recibí un correo electrónico por parte de la Clínica Sebastián de


Belalcázar en la cual me cancelan la cita ya que el equipo de encontraba en
mantenimiento:
CUARTO: La resonancia de cabeza bajo sedación con contraste, fue
reprogramada para el día 22 de diciembre de 2021, información que fue
recibida por medio de un correo electrónico, en el cual no aportan mayor
información fuera de la reprogramación de la cita:

QUINTO: Recibí el día anterior al examen acudí a la Clínica Sebastián de


Belalcázar, donde me informan que debo de llevar vigente el examen de
creatinina no mayor a 30 días y valoración de anestesiólogo y esto no lo habían
indicado en el correo electrónico de reprogramación de cita, razón por la cual
me veo obligada a solicitar reprogramación de cita.
SEXTO: La reprogramación de la cita fue designada para el día 09 de marzo
de 2022 a las 7:00 a.m., me dirigí a la EPS SANITAS, y me dicen que no es
posible una nueva autorización de la orden ya que tiene vigencia de 6 meses, y
que debo de empezar de nuevo todo el proceso desde cero.

Señor Juez, este examen es necesario debido a que se necesita para descartar
macrocefalia de mi hijo menor de edad y si en necesario empezar tratamiento,
para que su calidad de vida no se vea afectada.

Es evidente la vulneración los derechos fundamentales de mi hijo menor de


EPS SANITAS y la CLINICA SEBASTIAN DE BELALCAZAR.

FUNDAMENTOS JURÍDICOS Y DE DERECHO:

DERECHO A LA SALUD

A. EL DERECHO A LA SALUD COMO DERECHO FUNDAMENTAL.

Inicialmente la jurisprudencia de la Corte Constitucional se caracterizó por


diferenciar los derechos susceptibles de protección mediante la acción de tutela
y los derechos de contenido meramente prestacional, los cuales, para ser
amparados por vía de tutela, debían tener conexidad con los derechos
inicialmente nombrados, es decir, los de primer orden.

En la Sentencia T-016 de 2007, la Sala Séptima de Revisión de esta


Corporación, desarrolló el criterio jurisprudencial sostenido por esta Corte,
sobre el carácter fundamental de todos los derechos sin distinguir si se trata de
derechos políticos, civiles, sociales, económicos o culturales, así como que
dicha fundamentalidad tampoco debe derivar de la manera como estos
derechos se hacen efectivos en la realidad. Acertadamente, la jurisprudencia
de la Corte, para establecer la fundamentalidad del derecho a la salud, se ha
apoyado de instrumentos internacionales de distinto orden,[1] por ejemplo por
lo estipulado en la Observación N° 14 del Comité de Derechos Económicos,
Sociales y Culturales, que establece:

“La salud es un derecho humano fundamental e indispensable para el ejercicio de los demás
derechos humanos. Todo ser humano tiene derecho al disfrute del más alto nivel posible de
salud que le permita vivir dignamente. La efectividad del derecho a la salud se puede alcanzar
mediante numerosos procedimientos complementarios, como la formulación de políticas en
materia de salud, la aplicación de los programas de salud elaborados por la Organización
Mundial de la Salud (OMS) o la adopción de instrumentos jurídicos concretos”.

En el mismo sentido, la Constitución de 1991, contempla estos criterios cuando


en el artículo 49, estipula:

“La atención de la salud y el saneamiento ambiental son servicios públicos a cargo del Estado.
Se garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción, protección y
recuperación de la salud”.

“Corresponde al Estado organizar, dirigir y reglamentar la prestación de servicios de salud a los


habitantes y de saneamiento ambiental conforme a los principios de eficiencia, universalidad y
solidaridad. También, establecer las políticas para la prestación de servicios de salud por
entidades privadas, y ejercer su vigilancia y control”.

Por esta razón, el derecho a la salud marca una pauta esencial para que las
personas puedan desarrollarse y gozar de bienestar, esto implica que el
derecho a la salud viene a relacionarse con todas las esferas de la vida de un
ser humano, pues si no goza de buenas condiciones físicas, psicológicas y
sociales, no va a ser una persona protegida en su derecho, por ello cuando se
niega un procedimiento o no se permite suministrar lo necesario para recuperar
su salud, se habla de la vulneración de la misma, es aquí donde el juez puede
hacer efectiva su protección por vía de tutela cuando los encuentre
amenazados o vulnerados.

De igual manera y enfatizando la protección constitucional del derecho a la


salud como derecho fundamental, la Sentencia T-200 de 2007, menciona las
dimensiones de amparo de este derecho, para lo cual estableció:

“…En abundante jurisprudencia esta Corporación ha señalado que la protección ofrecida por el
texto constitucional a la salud, como bien jurídico que goza de especial protección, tal como lo
enseña el tramado de disposiciones que componen el articulado superior y el bloque de
constitucionalidad, se da en dos sentidos: (i) en primer lugar, de acuerdo al artículo 49 de la
Constitución, la salud es un servicio público cuya organización, dirección y reglamentación
corresponde al Estado. La prestación de este servicio debe ser realizado bajo el impostergable
compromiso de satisfacer los principios de universalidad, solidaridad y eficiencia que, según
dispone el artículo 49 superior, orientan dicho servicio[2]. En el mismo sentido, como fue
precisado por esta Sala de revisión en sentencia T-016 de 2007, el diseño de las políticas
encaminadas a la efectiva prestación del servicio público de salud debe estar, en todo caso,
fielmente orientado a la consecución de los altos fines a los cuales se compromete el Estado,
según lo establece el artículo 2° del texto constitucional.

“(ii) La segunda dimensión en la cual es protegido este bien jurídico es su estructuración como
derecho. Sobre el particular, la jurisprudencia de esta Corporación ha señalado que el derecho
a la salud no es de aquellos cuya protección puede ser solicitada prima facie por vía de tutela
[3]. No obstante, en una decantada línea que ha hecho carrera en los pronunciamientos de la
Corte Constitucional, se ha considerado que una vez se ha superado la indeterminación de su
contenido –que es el obstáculo principal a su estructuración como derecho fundamental- por
medio de la regulación ofrecida por el Congreso de la República y por las autoridades que
participan en el Sistema de Seguridad Social; las prestaciones a las cuales se encuentran
obligadas las instituciones del Sistema adquieren el carácter de derechos subjetivos…”.

Se trata entonces de una línea jurisprudencial reiterada por esta Corte, la cual
ha establecido que el derecho a la salud es un derecho fundamental, que
envuelve como sucede también con los demás derechos fundamentales,
prestaciones de orden económico orientadas a garantizar de modo efectivo la
eficacia de estos derechos en la realidad. Bajo esta premisa, el Estado a través
del Sistema de Seguridad Social en Salud, proporciona las condiciones por
medio de las cuales sus asociados pueden acceder a un estado de salud
íntegro y armónico.

Es por ello que la Corte Constitucional ha precisado que la salud puede ser
considerada como un derecho fundamental no solo cuando peligra la vida
como mera existencia, sino que ha resaltado que la salud es esencial para el
mantenimiento de la vida en condiciones dignas y que (el acceso a
tratamientos contra el dolor o el suministro de todo lo necesario, para aquellas
personas que padecen de enfermedades catastróficas que si bien, algunas son
incurables, debe propenderse por todo lo necesario para un padecimiento en
condiciones dignas).

En conclusión, la Corte ha señalado que todas las personas sin excepción


pueden acudir a la acción de tutela para lograr la efectiva protección de su
derecho constitucional fundamental a la salud. Por tanto, todas las entidades
que prestan la atención en salud, deben procurar no solo de manera formal
sino también material la mejor prestación del servicio, con la finalidad del goce
efectivo de los derechos de sus afiliados, pues la salud comporta el goce de
distintos derechos, en especial el de la vida y el de la dignidad; derechos que
deben ser garantizados por el Estado Colombiano de conformidad con los
mandatos internacionales, constitucionales y jurisprudenciales.

2. DERECHO A LA VIDA EN CONDICIONES DIGNAS.

La dignidad humana es un fundamento del Estado colombiano por lo que es


necesario que se refleje en todas las actuaciones que emanan de las
autoridades, así como de servicios públicos esenciales como la salud, cuya
prestación debe garantizar.

La dignidad humana, comprende tres objetos concretos de protección:


 La autonomía o posibilidad de diseñar un plan vital y de determinarse según
sus características, que traduce “vivir como se quiera”.
 La presencia de ciertas condiciones materiales concretas de existencia, es
decir, “vivir bien”.
 La intangibilidad de los bienes no patrimoniales, integridad física e integridad
moral, en otras palabras, “vivir sin humillaciones”. Es entonces la dignidad
humana derecho fundamental, principio y valor. Como menciona la Corte
Constitucional en sentencia T-940 de 2012, respecto de la dignidad

“A grandes rasgos, la dignidad humana como derecho fundamental implica la correlatividad


entre la facultad de exigir su realización en los ámbitos a los que atañe y el deber de
propiciarlos; como principio puede entenderse como una de los fundamentos que dieron origen
a la aparición del Estado colombiano de hoy, así como un mandato de optimización, cuya
realización se debe propender en la mayor medida posible; finalmente, como valor, la dignidad
representa un ideal de corrección al que tiende el Estado y que le corresponde preservar”.1

La dignidad humana en el Estado colombiano constituye una de las bases y de


los presupuestos ontológicos para su existencia, siendo piedra angular para el
desarrollo del contenido de otros derechos fundamentales y deberes estatales
y particulares dispuestos en la carta; por ello el concepto de dignidad humana
se liga con otros, para lograr la mayoría de esferas dentro de la realidad, y no
quede en mera teoría.

Para el caso que se busca tutelar, el derecho a la salud, el cual debe ser
entendido, ya no solo como un derecho o servicio con el que se pretende la
preservación de la existencia, sino como un derecho fundamental que
coadyuva a la realización de la dignidad humana y de la existencia en
condiciones dignas.

DERECHO FUNDAMENTAL A LA SALUD DE NIÑOS Y NIÑAS.

El artículo 44 constitucional consagra la prevalencia de los derechos de los


niños y las niñas sobre los de los demás. Esta norma establece de forma
expresa los derechos a la vida, la integridad física, la salud y la seguridad
social de los menores de edad son fundamentales. Asimismo, dispone que la
familia, la sociedad y el Estado tienen la obligación de asistir y proteger al niño
o niña para asegurar su desarrollo armónico e integral y el ejercicio pleno de
sus garantías. La Corte Constitucional ha establecido que los niños y las niñas,
por encontrarse en condición de debilidad, merecen mayor protección, de
forma tal que se promueva su dignidad. También ha afirmado que sus
derechos, entre ellos la salud, tienen un carácter prevalente en caso de que se
presenten conflictos con otros intereses. Adicionalmente, atendiendo al
carácter de fundamental del derecho, la acción de tutela procede directamente
para salvaguardarlo sin tener que demostrar su conexidad con otra garantía,
incluso en los casos en los que los servicios requeridos no estén incluidos en el
Plan Obligatorio de Salud. Igualmente, ha sostenido que cuando se vislumbre
su vulneración o amenaza, el juez constitucional debe exigir su protección
inmediata y prioritaria.

1
Sentencia T -940 de 2012
ARTICULO 13 DE LA CONTITUCION POLITICA COLOMBIANA.

Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, recibirán la misma
protección y trato de las autoridades y gozarán de los mismos derechos,
libertades y oportunidades sin ninguna discriminación por razones de sexo,
raza, origen nacional o familiar, lengua, religión, opinión política o filosófica.

El Estado promoverá las condiciones para que la igualdad sea real y efectiva y
adoptará medidas en favor de grupos discriminados o marginados.

El Estado protegerá especialmente a aquellas personas que por su


condición económica, física o mental, se encuentren en circunstancia de
debilidad manifiesta y sancionará los abusos o maltratos que contra ellas
se cometan.

Para contextualizar la inclusión de la salud dentro de nuestra Constitución


como derecho, a continuación, se presentan las consideraciones tenidas en
cuenta por los participantes de la Asamblea Nacional Constituyente recogidas
en la ponencia “Derechos humanos y Salud” divulgada en el Simposio Nacional
de derechos del paciente en 1994.

"La atención de la salud y el saneamiento ambiental son servicios públicos a cargo del Estado.
Se garantiza a todas las personas el acceso a los servicios de promoción, protección y
recuperación de la salud.

Corresponde al Estado organizar, dirigir y reglamentar la prestación de servicios de salud a los


habitantes y de saneamiento ambiental conforme a los principios de eficiencia, universalidad y
solidaridad. También, establecer las políticas para la prestación de servicios de salud por
entidades privadas, y ejercer su vigilancia y control. Así mismo, establecer las competencias de
la nación, las entidades territoriales y los particulares y determinar los aportes a su cargo en los
términos y condiciones señalados en la ley.

Los servicios de salud se organizarán en forma descentralizada, por niveles de atención y con
participación de la comunidad.

La ley señalará los términos en los cuales la atención básica para todos los habitantes será
gratuita y obligatoria.

Toda persona tiene el deber de procurar el cuidado integral de su salud y la de su comunidad".

PETICIONES:

PRIMERO: Con el auto admisorio de la demanda se decrete la MEDIDA


PROVISIONAL, donde se ordene a las accionadas practicar el examen
requerido para poder iniciar el tratamiento urgente de mi hijo menor.

SEGUNDO: Señor Juez e imploro que al impartir justicia vigile que la atención
médica y los tratamientos sean continuos hasta la cura total de la enfermedad
de mi hijo menor.
TERCERO: Que la EPS SANITAS, EMITA CADA UNA DE LAS
AUTORIZACIONES NECESARIAS para el tratamiento de mi hijo menor, sin
dilaciones y en tiempo oportuno, teniendo en cuenta su diagnóstico y su edad.

FUNDAMENTOS DE DERECHO

Esta acción de tutela se encuentra fundamentada en el artículo 86 de la


Constitución Política de Colombia y en los decretos 2591 de 1.991, 306 de
1.992 y 1382 de 2000. VI. COMPETENCIA Es usted competente, señor Juez,
por la naturaleza constitucional del asunto y por tener jurisdicción en el lugar
donde tuvieron ocurrencia los hechos que vulneran o amenazan el derecho
fundamental invocado según el artículo 37 del decreto 2591 de 1.991. Así
mismo es usted competente de conformidad por el inciso segundo del numeral
1. del artículo 1 del Decreto 1382 de 2000.

JURAMENTO.

Declaro bajo la gravedad del juramento que no he intentado ante otra instancia
de tipo judicial acción de tutela por las mismas causas y donde se consideren
los mismos hechos, por lo tanto, no me encuentro incurso en la actuación
temeraria de que habla el artículo 38 del Decreto 2591 de 1991. VIII.

PRUEBAS:

Solicito se acepten como medios de prueba las siguientes:

Copia de la historia clínica.


Copia del Registro civil de nacimiento.

NOTIFICACIONES

ACCIONADOS:

EPS SANITAS: notificajudiciales@karalty.com.


comunicacioneseps@colsanitas.com.
Cl. 5e #42A-35, Cali, Valle del Cauca.

CLINICA SEBASTIAN BELALCAZAR:


Avenida 4 Norte # 7 N 81

La accionante:

MARIA ANGELICA VIDAL: angelicavidal1987@hotmail.com.


celisjuridica@gmail.com.
teléfono: 318 5293657
Atentamente:

______________________________
MARIA ANGELICA VIDAL.
C.C. 1.130.654.951

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