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ANATOMÍA DE LOS
MAMÍFEROS DOMÉSTICOS
DE IMPORTANCIA
VETERINARIA”
Año 2019
Cuenta la historia que la palabra cadáver se originó de la leyenda que tenía una las primeras lápidas donde
estaba escrito…“caro data vermibus”, y que en latín significa “carne dada a los gusanos”. Dicha lápida, por
efecto del clima se desgastó, hasta quedar sólo las primeras sílabas de cada palabra, es decir “ca-da-ver”.
¡Mortui vivos docent! (¡Los muertos son docentes de los vivos!)
¡El cadáver es profesor de profesores! ¡Es la verdad inmutable e indiscutible!
Clasificación
Estesiología: estudia los órganos de los sentidos, son los que permiten relacionar al
individuo con el medio externo o el entorno que lo rodea.
4. Los términos deberán ser fáciles de recordar y tendrán, sobre todo, valor instructivo y descriptivo.
5. Las estructuras que topográficamente tienen una relación íntima deberán tener nombres similares:
por ejemplo, arteria femoral, vena femoral, nervio femoral.
6. Los adjetivos diferenciales serán por lo general opuestos, tales como mayor y menor, superficial y
profundo.
7. No deberán usarse términos derivados de nombres propios (epónimos).
Los “Ungulados”, son los mamíferos que presentan una pezuña (o casco) en la
terminación de su(s) dedo(s), e incluyen dos grupos: Artiodáctilos, cuyas extremidades
finalizan con un número par de dedos, de los cuales apoyan por lo menos dos de ellos en el
suelo; y los Perisodáctilos, que se caracterizan por la posesión de extremidades con un
número impar de dedos, y el dedo central (que sirve de apoyo) más desarrollado que los
demás. En la NAV sólo se incluye dentro de este último grupo a los equinos, que poseen un
único dedo (el tercero) desarrollado.
Izq
Der
Figura 1: Esquema de la silueta de un caballo vista desde “dorsal”, para observar el trazado de un plano
mediano y su corte correspondiente (línea continua). La línea atraviesa y recorre el eje longitudinal mayor del
cuerpo del animal. Las partes resultantes son, una izquierda (Izq) y otra derecha (Der).
Der Izq
Med
Lat
Figura 3: Esquema del trazado de un plano sagital y su corte correspondiente (línea continua). El plano sagital
es siempre paralelo al plano (y corte) mediano, representado por la línea discontinua. Las partes resultantes del
trazado o corte sagital son, una lateral (Lat) y otra medial (Med).
Med Figura 4: Esquema del trazado de un plano sagital y su corte correspondiente (línea
Lat continua). Es paralelo al plano (y corte) mediano, representado por la línea
discontinua. Las partes resultantes del trazado o corte sagital es una porción lateral
(Lat) y otra medial (Med).
Proximal
F
E
Distal
Figura 5: Esquema del trazado de varios planos (o cortes) transversales (líneas continuas) en diferentes
regiones del animal (A, B, C, D, E y F). Los planos son “perpendiculares” al eje longitudinal mayor de la
estructura anatómica (cabeza, tronco, miembros, o cualquier elemento anatómico elegido). Los nombres de las
partes resultantes difieren según el lugar donde se practique el corte o trace el plano.
Dorsal
Dorsal
Ventral
Ventral
Proximal Proximal
Distal Distal
Figura 6: Los nombres de las partes resultantes difieren según donde se practique el corte o trace el plano
transversal. En la región de los miembros, y específicamente en la espalda y grupa, se pueden utilizar “dorsal y
ventral”. Desde el brazo y muslo (inclusive) se aplican los términos “proximal y distal”, en reemplazo a los
términos antes mencionados. Esquema extraído de Barone R, 1999.
A
B
Figura 7: Esquema del trazado
del plano mediano (A),
transversal (B), y dorsal (u
horizontal, C) en el tronco del
animal. Todos ellos son
“perpendiculares” entre sí. Los
C
nombres de las partes
resultantes difieren según el
lugar donde se practique el
B corte o trace el plano.
Es muy importante comprender el significado de los términos direccionales que con gran
frecuencia son utilizados en anatomía y abordados también en otras disciplinas de la
medicina veterinaria, entre ellas la radiología, ecografía, patología, clínica, semiología,
cirugía, etc. Algunos de los términos pueden aplicarse a cualquier elemento anatómico,
parte o región corporal; así como otros, se utilizan con exclusividad en ciertas regiones o
para determinadas estructuras anatómicas.
Los términos de dirección, situación o posición, se presentan de a pares, y cada uno del
grupo posee un significado contrario u opuesto (es decir son antónimos). Como ejemplo,
podemos citar algunos de estos términos: externo e interno; superficial y profundo; superior
e inferior, craneal y caudal, dorsal y ventral, etc.
A continuación ofreceremos una breve explicación del significado, utilidad o aplicación de
los términos de dirección y situación empleados con gran frecuencia en la bibliografía
anatómica. De algún modo, el vocabulario que utilizamos en nuestra vida cotidiana, será
reemplazado por términos propios del lenguaje anatómico, con gran valor instructivo, y
académico-científico. Cabe mencionar que se deberán revisar y comprender los diferentes
planos anatómicos y el significado de los nombres resultantes al practicar cada plano o
corte.
VC
VS VL VT
Ángulo
VCo ventral
de la
escápula
Esternón
Escápula
Figura 10: Vista interna del riñón de bovino. Extraído de Dyce, Sack y Wensing, 2010.
• Interno y Externo:
La aplicación de estos términos generalmente se restringe para órganos huecos (vasos
sanguíneos, esófago, estómago, intestino, laringe, tráquea, bronquios, corazón, etc.), como
también para las diferentes cavidades corporales (cavidad torácica, abdominal y pélvica). De
todas maneras, ambos términos se utilizan con mucha frecuencia y para numerosas
estructuras anatómicas.
Interno, hace referencia a la parte dirigida hacia o más cercana al lumen o espacio central
del órgano, y externo, es la parte más cercana o dirigida hacia la superficie exterior, y que
generalmente establece relaciones o contacta con estructuras anatómicas vecinas. Por
ejemplo, en el corazón, la capa interna del órgano (denominada “endocardio”) contacta con
la sangre, mientras que la externa lo hace con otros órganos torácicos vecinos (Fig. 11).
• Medio e Intermedio:
Suele denominarse medio (o media) a la estructura anatómica o parte de un órgano,
posicionada entre dos similares, ubicada una a craneal y la otra a caudal. También puede
considerarse entre dorsal y ventral; proximal y distal, etc. Por ejemplo, el pulmón derecho
del perro, presenta cuatro lóbulos dispuestos en serie cráneo-caudal, por lo tanto se los
menciona como lóbulo craneal, “lóbulo medio”, lóbulo caudal, y un lóbulo accesorio.
Se suele aplicar el término intermedio, para indicar la posición de una estructura
anatómica que se encuentra entre otras dos similares, una ubicada a lateral y la otra a
medial de aquella. Por ejemplo para los ligamentos rotulianos del caballo, se menciona un
ligamento rotuliano medial, uno lateral, y un ligamento rotuliano “intermedio” ubicado
entre los anteriores (Fig. 12 y 13).
Rótula
Craneal Caudal
Craneal Caudal
Dorsal Plantar
Palmar
Dorsal
Figura 14: Aplicación de los términos anatómicos propios o especiales en las extremidades. En los miembros
torácicos se utiliza dorsal y palmar, el carpo (mano) hasta el piso; y en los miembros pélvicos, se aplica dorsal y
plantar a partir de la región del tarso (pie) hasta el suelo. Esquema extraído de Adams and Stashak`s: Lameness
in Horses, 2011.
• Axial y Ab-axial:
Términos que indican una posición relativamente más cercana (axial) o más alejada (ab-
axial) del eje (axis) longitudinal del miembro. El prefijo “ab” (ab-axial) significa que está hacia
afuera del eje. EI empleo de estos términos por lo general está restringido a la región digital
(dedos) de especies poli o multi-dactilares (artiodáctilos) donde el eje funcional del miembro
Superficie o cara
Superficies o caras “axial” del hueso
“axiales” de los huesos sesamoideo
sesamoideos proximales. proximal medial.
Superficie o cara
“abaxial” del hueso
sesamoideo proximal
medial.
Cara “abaxial” de
uno de los huesos
sesamoideos
proximales.
Figura 15: Vista palmar del esqueleto de la mano del perro (imagen izquierda). El eje funcional (línea
punteada) pasa entre el tercer (III) y cuarto (IV) dedos desarrollados. En el dedo del equino (imagen de la
derecha, vista palmar) este eje atraviesa por el centro de su único dígito. Extraído de Barone R, 2001.
• Proximal y Distal:
Ambos términos son utilizados comúnmente y en referencia a los miembros. El primer
término implica que el elemento anatómico posee una posición cercana o relativamente
más “próxima” al tronco del animal. Bajo otros usos, puede referirse a un punto de
referencia obvio, como ser las diferentes partes de una estructura anatómica, o las
relaciones existentes entre elementos anatómicos distintos. Otros ejemplos; cuando se
aplica a vasos sanguíneos implican que algunos de estos vasos presentan una posición más
cercana (próxima) al corazón. Dentro del riñón, se refiere a la porción del túbulo
contorneado más cercano al glomérulo, etcétera. El término distal, también empleado por
lo general en los miembros; implica una posición más alejada o relativamente más
“distante” del tronco (Fig. 5 y 6).
Puede aplicarse a innumerables estructuras, por ejemplo, el brazo se relaciona a proximal
con la espalda, y a distal con el antebrazo. El húmero, es la base ósea o hueso del brazo, y
como todos los huesos largos posee una epífisis proximal y otra distal.
• Rostral y Caudal:
Los distintos planos dividen a la cabeza de igual forma que en el resto del tronco,
teniendo en cuenta la dirección del eje mayor de la misma. Sólo se debe reemplazar el
término craneal por rostral. Por ejemplo, el ojo presenta una ubicación “rostral” respecto a
Iris
Cristalino
Pupila
Córnea
Cámara
anterior
Nervio
Cámara óptico
posterior
Figura 16: Región orbitaria del equino (imagen izquierda), y esquema del globo ocular (imagen derecha). En la
imagen izquierda se indican diferentes estructuras vinculadas al aparato visual. A, párpado superior; B,
párpado inferior; C, pliegue conjuntival semilunar (tercer párpado); D, laguna lagrimal y E, carúncula lagrimal.
Extraído de Budras K, Anatomy of the horse, 2008.
Se reconoce la existencia de nombres anatómicos especiales para los dientes, así como
los diversos sistemas de numeración dental. Los nombres anatómicos correctos de los
dientes son: derecho o izquierdo; maxilar o mandibular; primero, segundo, tercero o cuarto;
incisivo, canino, premolar, molar; según corresponda, escritos completos o abreviados. A
continuación, enunciaremos los más utilizados en la práctica diaria veterinaria.
• Maxilar y Mandibular:
Los dientes, según se relacionen con los huesos incisivos y maxilares; o con las
mandíbulas, las piezas dentarias reciben el nombre de maxilar y mandibular
respectivamente. Estos términos se pueden aplicar en reemplazo de los términos “superior
e inferior” que además son utilizados para los labios, los vasos y nervios relacionados.
• Lingual y Palatal:
El término, lingual hace referencia a la superficie de un diente (mandibular o maxilar) que
en está en relación a la lengua. Para el caso de los dientes incisivos, esta superficie se orienta
hacia caudal, pero en los dientes premolares y molares, la cara lingual es la que se dirige
Superficie labial
Superficie oclusal
Superficie mesial Figura 17: Vista dorsal de las mandíbulas
del equino. Se indican las diferentes
Superficie superficies o caras de los dientes
vestibular mandibulares (inferiores) de acuerdo a
Superficie distal
sus relaciones entre sí, y con otras
estructuras de la región y cavidad bucal.
Lingual Extraído de Budras K, Anatomy of the
horse, 2008.
Introducción
El aparato locomotor está constituido por órganos pasivos, los huesos; vinculados entre sí
mediante diferentes tipos de tejidos y formando de esta manera articulaciones, las cuales
están diseñadas para ser más o menos móviles, acorde a las funciones necesarias y
especiales de cada región corporal.
Los huesos, y las articulaciones que los conectan, son movilizados por acción de los
músculos, órganos activos del sistema locomotor. Estos últimos, se fijan sobre los diferentes
relieves que presentan las superficies óseas, permitiendo de esta manera funcionar como
palancas bio-físicas.
Los huesos son órganos duros y resistentes, de apariencia petrosa. Colocados en sus
relaciones naturales, en unión con cartílagos y ligamentos, constituyen el esqueleto. Este
endoesqueleto, es el armazón interno que ofrece al cuerpo la conformación general, las
dimensiones, el soporte estructural, la protección de estructuras blandas, órganos vitales y
es un importante depósito de minerales. Los componentes del esqueleto han evolucionado
para optimizar la postura y la locomoción acordes al estilo de vida del individuo.
El esqueleto, forma numerosos relieves óseos que, de acuerdo a la especie y al estado
corporal, se logran palpar o se pueden observar a simple vista, sirviendo así de referencia
para localizar estructuras profundas. Además, la identificación de estos relieves óseos y de
las estructuras asociadas, permiten realizar una adecuada revisación clínica del aparato
locomotor del animal.
Hasta ahora se ha hecho referencia al esqueleto natural, pero si las piezas óseas están
unidas por elementos artificiales, como alambres o pegamentos, es un esqueleto artificial.
Cuando los huesos están separados se denomina esqueleto desarticulado.
El esqueleto, representa a todos los huesos de un animal. La cantidad o número de
huesos de los animales domésticos es muy variable. Difiere de una especie a otra,
principalmente debido a la cantidad de vértebras y costillas, el número de dedos o la fusión
de algunos huesos entre sí. Por lo tanto, el número de huesos es de aproximadamente 320
para perros y gatos adultos, 290 para los cerdos, 240 en bovinos y 205 para caballos.
Esqueleto apendicular:
Está formado por todos los huesos que integran los miembros o extremidades. Los
apéndices locomotores de los mamíferos tetrápodos de importancia veterinaria, se
diferencian en dos (2) miembros torácicos y dos (2) miembros pelvianos; o superiores e
inferiores en aquellas especies que adoptan una postura bípeda, como es el caso del
humano, otros primates y numerosas especies.
Desde el punto de vista de la anatomía veterinaria y según la N.A.V; los miembros en los
cuadrúpedos, no deberían ser denominarlos “anteriores y posteriores”, a pesar de su uso
frecuente en la literatura clínica-quirúrgica.
Las extremidades, se vinculan de manera más o menos estrecha con el esqueleto axial
mediante los denominados “cinturones (del latin cingulum)” del miembro torácico y del
miembro pelviano. Para la extremidad torácica, el hueso del cinturón está representado por
la escápula; y en ciertas especies (felinos, conejos y otros roedores) también participa una
clavícula rudimentaria. Para la extremidad pélvica, el hueso del cinturón está representado
por el hueso coxal, que resulta de la fusión de tres huesos: ilion, isquion y pubis. Además, se
debe agregar un pequeño hueso acetabular, que se fusiona con los demás, por lo general
antes del nacimiento.
La extremidad torácica incluye a los huesos: escápula, húmero, el radio, cúbito o ulna,
los huesos del carpo, los huesos metacarpianos, las falanges y los huesos sesamoideos. Para
los huesos de la mano, incluidos los de los dedos, su número es variable según la especie
animal. Los huesos de la extremidad pélvica incluyen a: el coxal, fémur, la tibia, el peroné o
fíbula, los huesos del tarso, los huesos metatarsianos, las falanges y los huesos
sesamoideos, incluida la rótula o patela. De la misma manera, el número de huesos del pie,
incluidas las falanges, también es variable según la especie. Como se puede apreciar, ambos
miembros están compuestos por la misma cantidad de segmentos que se equivalen uno a
uno (Fig. 18).
Figura 18: Esquema del esqueleto del perro. Se puede apreciar la homología en el número de segmentos
óseos que integran ambos miembros (torácico y pélvico). Además, se señalan los componentes óseos que
integran el esqueleto axial. Extraído de Barone R, 1999.
Esta parte del esqueleto, también denominado esqueleto visceral, está compuesto por
huesos que se desarrollan en el interior de ciertos órganos blandos. Los huesos esplácnicos
no tienen conexión con las restantes partes del esqueleto. Los ejemplos son notablemente
escasos, dentro de los cuales se describe el hueso desarrollado dentro de los tejidos del
pene (Os penis) del perro (y raramente en el gato); y el tejido óseo que se observa en
relación a las válvulas del corazón (Os cordis) de los bovinos y otros rumiantes, sobre todo de
edad avanzada. Otra rareza (considerada patológica por numerosos autores), es la aparición
esporádica de hueso dentro del clítoris de la perra.
Este orden lógico, permite realizar una descripción clara y precisa (del hueso u otra
estructura), ya sea cuando lo estamos observando o, aún sin verlo, intenta describir y
comparar este elemento de una manera comprensible.
El nombre permite identificar al hueso. Éste, puede hacer referencia a la ubicación del
hueso (por ejemplo, hueso frontal= ubicado en la frente; huesos nasales= ubicados en la
nariz, etc.), por su semejanza o parecido con ciertos objetos (fíbula, parecido a la hebilla o
broche usado antiguamente por griegos y romanos para sujetarse el cabello; hueso
navicular, semejante a la quilla de un navío o embarcación, etc.), relacionado a su tamaño
(capitatum o hueso grande), etc. Esta nomenclatura, un tanto heterogénea, confeccionada
inicialmente para la anatomía humana, suele ser en muchas ocasiones poco lógica para la
anatomía veterinaria.
Una parte importante de la descripción ósea, corresponde a la dirección que adopta el hueso.
Ésta puede ser absoluta o relativa. La dirección absoluta, es la que presenta el eje mayor del
hueso, considerado de manera aislada (por ejemplo apoyado sobre una mesa) y en cualquier
posición. Los huesos pueden ser rectos (ej. los huesos metacarpianos), curvos (ej. las costillas),
Dorsal + DORSO
Caudal CAUDAL
Dorsal
Caudal
Craneal
Figura 19: Método propuesto para determinar la dirección relativa de aquellos huesos que presentan
una oblicuidad o inclinación en el esqueleto.
Periostio
Cartílago epifisiario
EPÍFISIS
DISTAL (tejido
óseo esponjoso o
trabecular)
Cartílago articular
Figura 20: Esquema de un hueso largo. Corte frontal de fémur de ternero de 2 meses de edad. Barone
R., 1999.
Un hueso alargado tiene las características de un hueso largo pero carece de cavidad
medular (ej. las costillas). De todas maneras, este tipo de huesos posee médula ósea, la cual
se encuentra ocupando los espacios que forma el hueso esponjoso.
Los huesos planos, son aquellos en que dos de las dimensiones (largo y ancho) predominan
sobre la tercera (el espesor). Contribuyen a formar las cavidades óseas, como la craneana
(ejemplo, los huesos frontales); y los cinturones de los miembros torácico y pélvico (el hueso
escápula y el coxal). No poseen cavidad medular, pero sí presentan médula ósea alojada entre
los espacios que forma el tejido óseo esponjoso.
En un hueso corto ninguna dimensión predomina sobre las otras. Los huesos cortos, como los
que conforman el carpo y tarso; la falange distal, huesos sesamoideos, poseen abundante
cantidad de tejido óseo esponjoso, el cual aporta resistencia a las fuerzas de compresión. Poseen
médula ósea. Las vértebras y los huesos del piso del cráneo (donde tampoco predomina una
dimensión determinada), son consideradas huesos irregulares, debido a su forma (irregular), la
presencia de múltiples salientes óseas y en diferentes direcciones.
El término proceso (Processus) es un término general, utilizado para designar una eminencia, ya
sea articular o no-articular. Existen numerosos procesos o apófisis, cuyos nombres derivan de la
semejanza de su forma con determinados elementos: proceso espinoso (en forma de espina
EMINENCIAS NO ARTICULARES:
Tuberosidad (Tuber, Tuberositas) es una eminencia grande, y generalmente algo
redondeada.
Tubérculo (Tuberculum) es una proyección más pequeña. La mayoría son no articulares,
aunque existen algunos ejemplos donde aparecen tubérculos articulares.
Trocánter, se asemeja a una tuberosidad o tubérculo, pero se aplica para algunas
eminencias especiales ubicadas en el fémur.
Espina (Espina) o apófisis espinosa (Processus spinosus) es una proyección puntiaguda.
Cresta (Crista) es una cresta afilada.
Línea (Línea) es una cresta muy pequeña.
EMINENCIAS ARTICULARES:
Cabeza (Caput) es un ensanchamiento articular, generalmente de forma redondeada,
ubicada en el extremo de un hueso, la cual suele estar unida al cuerpo del hueso por una
parte más o menos estrangulada, denominada cuello (Collum).
Cóndilo (Condylus) es una eminencia articular, generalmente de forma cilíndrica. Una
proyección no articular en conexión con un cóndilo puede denominarse epicóndilo
(Epicondylus).
Tróclea es una masa articular semejante a una polea, tiene dos labios y surco entre ellos.
Faceta se aplica comúnmente a superficies articulares de pequeña extensión,
especialmente cuando no son fuertemente cóncavas.
Las CAVIDADES son todas aquellas depresiones (concavidades) en la superficie de los huesos, y
que contrario a las eminencias, lógicamente no sobresalen. También se clasifican en articulares y
no articulares.
CAVIDADES ARTICULARES:
Cavidad glenoidea (Cavitas glenoidalis) es una depresión articular superficial, levemente
cóncava.
Cavidad cotiloidea (acetábulo) es una cavidad articular más profunda que la anterior.
Faceta se aplica comúnmente a superficies articulares de pequeña extensión,
especialmente cuando no son fuertemente cóncavas.
Cóclea, es una depresión similar a la caparazón de un caracol, consta de un par de surcos
separados por una cresta o labio central.
CAVIDADES NO ARTICULARES:
Los términos fosa, (Fóvea), surco (Sulcus), y las impresiones, se aplican a diversas formas
de depresiones.
Seno (Sinus), son cavidades óseas, llenas de aire y revestidas de una membrana mucosa,
conectados con indirectamente con el exterior a través de la cavidad nasal.
Estructura ósea
2- Baxter GM. In Adams and Stashak´s Lameness in Horses. 6th. Edition, Wiley-Blackwell, 2011.
3- Budras KD, Sack WO, Röck S. Anatomy of the horse. Fifth, Revised Edition. Schlütersche
Verlagsgesellschaft mbH & Co. KG, Germany, 2009.
4- Dyce KM, Sack WO, and Wensing CJG. Textbook of Veterinary Anatomy. 4th. Edition.
Saunders-Elsevier Ed. 2010.
5- Getty R, de Sisson S y Grossman JD. Anatomía de los animales domésticos. Vol. 1. Ed.
Masson, 2002.
6- Goodship AE, Smith RKW. Chapter 2. Skeletal physiology: responses to exercise and
training. In Hinchkliff KW, Gero RJ and Kaneps AJ: Equine Exercise Physiology: The Science
of Exercise in the Atlethic Horse. Saunders-Elsevier, 2008.
7- König HE, Liebich HG. Anatomía de los animales domésticos. Tomo I, Aparato locomotor.
Ed. Médica Panamericana, 2011.
8- Nómina Anatómica Veterinaria, 6th Edition. Published by the Editorial Committee Hanover
(Germany), Ghent (Belgium), Columbia, MO (U.S.A.), Rio de Janeiro (Brazil), 2017.
9- Ross MW, Dyson SJ. Diagnosis and management of lameness in the horse. 2nd ed. Elsevier-
Saunders, 2011.
10- Shively MJ. Anatomía Veterinaria, Básica, Comparativa y Clínica. Ed. Manual Moderno. México
DF, 1993.