How To Improvise: 4 Items esenciales

Por: Nicolás Narváez Russi

En esta sección sobre motivos melódicos y cambios de acordes, el autor nos invita a
darle entrenamiento a la mente y el oído para poder comprender como se puede
desarrollar el discurso lírico con estos dos conceptos. Para desarrollar un mejor sólo
se deben usar movimientos o acciones que generen contraste para no caer en la
monotonía durante el desarrollo del discurso.

El autor nos propone dos elementos para generar contraste en la música, los cuales
son, los saltos melódicos y los cambios de acorde;estos dos elementos, al ser
unidos de manera simultánea generan mayor atención en el público, por eso, en
este caso cuando hay un salto melódico para llegar a un acorde se pueden usar dos
tipos de movimientos para llegar a la nota del siguiente acorde, los cuales pueden
ser notas armónicas o no armónicas. En el primer caso, esta nota debe ser común
entre el acorde en que salimos y el acorde al que debemos llegar, pero si es no
armónica, esta debe resolverse de manera directa directa o indirecta mediante
grado conjunto dentro de la melodía que estamos desarrollando entre acordes. El
autor nos presta un ejercicio el cual nos indica que usemos las resoluciones que
vimos anteriormente usando notas notas armónicas o no armónicas.

En el siguiente aspecto se aborda el tema de las notas guía, las cuales permiten
determinar el modo y la función de un acorde. Las estructuras están construidas a
partir de una nota raíz (tónica), el tercer grado (el cual determina el modo), el quinto
grado que permite forjar una congruencia armónica y el séptimo grado que
determina su función (si es dominante o no), por otro lado, con estas notas guías
además pueden construirse líneas melódicas las cuales pueden enfocarse
añadiendo tensiones disponibles que pertenecen al acorde, todo esto en pro de
delinear mejor la armonía y aprovechar mejor los saltos melódicos para poder
realizar las resoluciones de una forma más efectiva, permitiendo una mayor
conexión entre melodías, acordes y así mismo un mejor desarrollo en el discurso
improvisatorio.
Retomando un aspecto que se trató en el anterior trabajo, estas notas guías pueden
reforzarse con un elemento llamado “embellecimiento melódico”, el cual consiste en
añadir más notas a la melodía original con el fin de enriquecer la densidad rítmica y
la melodía per sé, todo esto usando elementos rítmicos como síncopas o
anticipaciones con el fin de desarrollar mejor las frases y los motivos.
Generalmente para este tipo de embellecimiento es necesario tener claridad en la
relación escala/acorde, para tener siempre en cuenta las tensiones disponibles y
contar con una coherencia melódica y armónica.
Para este ítem, es imperativo el conocimiento de escalas y los modos disponibles.
El autor nos presenta una tabla con los tipos de acordes existentes, su escala
(incluida su relativa) y modo correspondiente, además de su respectiva función
diatónica.
En otro cuadro nos muestra las notas de cada tipo de acorde, sus tensiones
disponibles, las notas no armónicas y en qué tipo de acordes pueden ser aplicables.

Estos cuatro ítems son de extrema utilidad para tener mayor conciencia durante la
improvisación y desarrollar un lenguaje rico en lirismo y contenido teórico sin perder
la creatividad propia de un artista.