DOCUMENTO
LA INVESTIGACION
EN LOS MUSEOS
PALOMA CABRERA BONET *
Durante las últimas décadas
el museo, como institución cultural,
ha sufrido una transformación radical.
En el nuevo museo la investigación
es el instrumento que posibilita la
conservación, comunicación y
exhibición de sus contenidos
culturales. La nueva estructura
de los museos españoles concede
a la investigación un papel de gran
importancia. En este artículo se
analizan estas cuestiones, así como
los problemas de integración
en el Plan Nacional de Investigación
Cientifica y Desarrollo Tecnológico.
During the Iast decades, the Museum, as a
cultural institution, has undergone a radical
transformation. In the new Museum the
research is the instrument that makes possible
the conservation, communication and exhibi-
tion of its cultural contents. In the new Spa-
nish museums structure the museological re-
search play an important role. We analyze also
the problems for the integration in the Natio-
nal Plan for the Research and Technological
Development.
n los últimos años hemos sido
testigos en España de la crisis
y transformación de valores e
instituciones culturales y,
entre ellas, del museo y de su
papel frente a las exigencias
culturales de la sociedad
actual. Realmente estamos lejos ya de la idea del museo
como "templo del saber", como guardián celoso de los
testimonios de nuestra historia, retazos de un pasado
casi inaccesible por la hermética sacralización que,
desde el propio edificio hasta los funcionarios
custodios, imponían sobre los objetos, impidi endo que
aquellos que no pertenecían a la élite capaz de
desentrañar sus claves lograran comprender, y
aprehender, el mensaje que el mismo objeto reclama.
Estamos lejos de la idea del museo como "almacén de
antigüedades". Se ha dado en España un paso muy
importante, aunque con retraso respecto a otros países
occidentales, hacia la transformación del museo en un
organi smo cultural vivo y dinámico, integrado y al
servicio de una sociedad que demanda con mayor
frecuencia unas señas de identidad cultural propias y un
espacio lúdico y de ocio cada vez más amplio.
Es en la relación museo- sociedad, o más
específicamente en la relación objeto-sujeto, donde
podemos observar un cambio más evidente. Si
queremos traducir a claves los signos de esta
transformación, creo que una de las más significativas,
si no la más importante, se encuentra precisamente en
el establecimiento de una nueva relación en la que el
suj eto ha adquirido un papel preponderante, un
protagonismo que antes no había conocido. Esta nueva
relación ha supuesto nuevas transformaciones en los
medios y en los métodos a través de los cuales se
posibilita la comunicación, el diálogo entre las piezas y
los que las contemplan . Y ello ha conducido,
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finalmente, a una concepción nueva del museo,
concepción que ha sido enunciada como definición
teórica, obligada referencia para la formulación de los
objetivos de la propia institución museística.
El International Council of Museurns (ICOM) define el
museo como "una institución permanente, al servicio
de la sociedad y su desa1Tol10, abierta al público, que
adquiere, conserva, investiga, comunica y exhibe, con
fines de estudio, educación y deleite, testimonios
materiales del hombre y de su entorno" . Esta definición
-y, por tanto, los objetivos que en ella se formulan-
ha sido recogida por la Ley del Patrimonio Histórico
Español, promulgada en junio de 1985, que en su
artículo 59.3 dice: "Son museos las instituciones de
carácter permanente que adquieren, conservan,
investigan, comunican y exhiben para fines de estudio,
educación y contemplación conjuntos y colecciones de
valor histórico, artístico, científico y técnico o de
cualquier otra naturaleza cultural."
Por otra parte, esta sensibilización de nuestros poderes
públicos hacia la transformación que se estaba
operando y que nuestra sociedad estaba demandando
queda reflejada en el Reglamento de Museos de
Titularidad Estatal y del Sistema Español de Museos
(R. D. 620/1987, de 10 de abril), que en su preámbulo
dice: "La Ley 16/1985, de 25 de junio, del Patrimonio
Histórico Español, consagra un nuevo concepto de
museo en función de los servicios que éste ha de prestar
a la sociedad, de acuerdo con la demanda actual y los
principios que en materia museológica están asumidos
por la mayoría de los países afines a nuestra cultura y
por las entidades internacionales especializadas en esta
materia."
La investigación: función y objetivo básico del museo
En este proceso de transformación, y en la nueva
concepción y realidad surgida de él, la investigación
juega un papel fundamental. En el museo actual,
entendido como organismo dinámico, la inte1Telación
entre todas sus funciones es absoluta: adquisición,
conservación, investigación, comunicación, exhibición,
educación y deleite. Pero creo que, de todas ellas, dos
son las que actúan como polos del sistema: la
comunicación y la investigación. Y si la primera
justifica la razón de ser del museo actual, la segunda es
el instrumento que la posibilita.
Si no se e_stablece una comunicación entre el objeto y el
espectador, una comunicación de cualquier tipo,
estética o cargada de significantes, entonces el objeto
quedará enmudecido y el museo muerto . La
investigación, como proceso de observación, análisis,
experimentación y deducción que conduce al
conocimiento, posibilita
no sólo la transmisión
Ene/museo del objeto en sí mismo ,
en su realidad física no
actual, la des virtuada, sino
adquisición, también de todos sus
contenidos culturales.
conservación, En una visión
investigación, integradora de las
comunicación, funciones y objetivos
del museo, entendernos
exhibición y que para conservar y
deleite están transmitir, para enseñar,
para dotar de contenido
perfectamente a los objetos, para
interrelacionados integrar esos objetos en
las circunstancias
técnicas, sociales,
económicas y, más ampliamente, culturales que los
engendraron, para exhibirlos de forma que se alcance
un alto grado de comunicación con el espectador, para
todo ello es necesario conocer. Conocimiento que, para
ser considerado verdaderamente como tal, debe ser
renovado constantemente, puesto al día conforme se
producen los avances en los diferentes campos de la
investigación científica.
Todo ello justifica la necesidad de la labor
investigadora en el museo; pero para que este
organismo pueda ser considerado como un
verdadero centro de investigación debe contar con
personal científico investigador en todas las materias
de su competencia, no sólo en lo referente a su
contenido, sino también a la conservación y difusión
del mismo ; estar dotado con la infraestructura básica
de investigación: laboratorios, biblioteca, servicios
de documentación (informática, dibujo, fotografía);
realizar trabajos de investigación estables; acoger a
otros investigadores y establecer colaboraciones
científicas con otras instituciones y organismos;
formar especialistas en los diversos campos
temáticos del museo ; difundir los resultados de los
trabajos de investigación a través de publicaciones,
exposiciones, congresos y seminarios; y, sobre todo,
tener unas líneas claras de investigación, pues sin
ellas todas las acciones serán esfuerzos aislados,
parciales, infructuosos y efímeros.
No qui siera ofrecer una visión irreal de lo que es la
investigación en los museos españoles, pues sólo
los grandes museos cumplen estos requisitos en un
grado de efectividad satisfactorio. La falta de
personal y de presupuesto para inversiones en
equipos de investigación es un problema
generalizado, más agudizado cuanto más pequeño
es el mu seo. De todas formas, los esfuerzos, tanto
 D O C U M E N T O
de las diferentes Administraciones como de los
profesionales de los museos, están actualmente
empeñados en la con secución de estos objetivos.
Buena prueba de ello, al menos en el capítulo de
intenciones y de modelos teóricos, es cómo se ha
entendido el papel de la investigación, y cómo ésta
se ha articulado, en el sistema actual de los museos
españoles y en la nueva estructura de los museos
estatales.
La investigación en los museos españoles
El Reglamento de Museos de Titularidad Estatal y del
Sistema Español de Museos dispone en el capítulo VI
la dirección y áreas básicas de los museos. En el
artículo 18 establece como área básica la de
conservación e investigación , y dice: "El área de
conservación e investigación abarcará las funciones de
identificación, control científico, preservación y
tratamiento de los fondos del museo y seguimiento de
la acción cultural del mi smo. Se encuadran en este área
las actividades tendentes a la elaboración de los
instrumentos de descripción preci sos para el análisis
científico de los fondos ; el examen técnico y analítico
correspondiente a la preservación , rehabilitación y
restauración pertinentes; la elaboración y ejecución de
programas de investigación en el ámbito de la
especialidad del mu seo, y la redacción de publicaciones
científicas y divulgativas del mu seo."
En el reglamento aparecen unidas en una misma área la
conservación y la investigación. Ya veremos cómo en
la nueva estructura de los museos se han separado en
dos departamentos diferentes, con objetivos y
fu nciones independientes, aunque, naturalmente, ello
no quiere decir que la función investigadora sea
exclusiva del/los departamento/s de investigación o de
las secciones que lo integren. En el museo actual, y
según la nueva concepción de la que hemos venido
hablando, esa función es competencia de todas y cada
una de las áreas o departamentos en los que se
estructura el museo.
Hay que destacar dos puntos importantes que quedan
recogidos en el reglamento entre las actividades
propias de este área: la elaboración de los
instrumentos de descripción y la ejecución de
programas de investigación. Si la primera actividad
ha sido una misión fundamental, pero también
tradicional, en los museos españoles, la segunda ha
sido por primera vez definida como una acción
prioritaria desde el punto de vista institucional y
administrativo, y no queda, como ocurría antaño, a la
li bre voluntad del personal de los museos.
Sobre la base de lo establecido en el capítulo VI del
Reglamento de Museos, la Dirección de los Museos
Estatales del Ministerio de Cultura ha propuesto una
estructuración departamental que, aunque no tiene
aún carácter oficial, se va aplicando gradualmente en
los museos estatales, en la que se contempla la
existencia, en el área de conservación e
investigación, de tres grandes unidades
departamentales: conservación, investigación y
documentación. El número de los departamentos de
investigación depende del volumen de los fondos y
de la variedad científica, cultural y temática de los
mismos. Las funciones encomendadas a estos
departamentos son las siguientes: elaboración de los
instrumentos de descripción y catalogación para el
análisis científico de las piezas; recogida y registro
de los datos referentes a los objetos del entorno del
museo, relacionados con la colección y, en su caso,
acopio de esos mismos objetos en orden a su
preservación y defensa; información de las
necesidades científicas de incremento de los fondos;
publicación y difusión de los resultados de las
investigaciones científicas del museo; programación,
proyección y realización de la exposición en su
aspecto científico; proporcionar al departamento de
documentación la adecuada catalogación y
clasificación científica de los fondos; asesoramiento
sobre los criterios de preservación de la identidad del
objeto, que habrán de tenerse en cuenta a la hora de
establecer los tratamientos de conservación y
restauración; elaboración de programas de
investigación en el ámbito de su especialidad;
colaboración con programas de investigación de
instituciones anejas al museo, en el área de su
competencia.
Como se puede
observar, han sido
Sino se aumentadas las
funciones respecto al
establece una Reglamento de
comunicación Museos y, a la vez,
han sido definidas
entre el objeto el con y mayor precisión.
espectador, el De ellas quisiera
objeto quedará destacar como
novedad la recogida y
enmudecido el y registro de los datos
museo muerto referentes a los
objetos del entorno
del museo, función
que se ajusta perfectamente, y quizá con mayor
precisión que en otros museos, a las características
investigadoras de los museos arqueológicos y
etnológicos, extendiendo su campo de acción sobre
el territorio, marco de contextualización
13
 DI (O)
indispensable en la mayoría de los estudio .
También destacaría la colaboración con program
de investigación de otras instituciones, uno de lo
aspectos que con menor frecuencia se ha puesto en
práctica, pero que debe considerarse imprescindible
si tenemos en cuenta el carácter necesariamente
interdisciplinar de la investigación científica y la
ausencia de determinados especialistas en las
plantillas de los museos o la precariedad de sus
eqmpos.
El ámbito de la investigación en el museo
No sé hasta qué punto sigue aún vigente el viejo
estereotipo que limitaba el ámbito de la investigación
en los museos al de su propia especialización; es
decir, los museos arqueológicos a la Arqueología, los
de Bellas Artes a la Historia del Arte, etc. Aun siendo
ello verdad, la realidad actual es mucho más rica.
Efectivamente, el ámbito de la investigación en el
museo de hoy es mucho más amplio. En principio, y
según su propia definición, es la museología el
campo de investigación y de acción propio de un
museo. Pero la museología tiene, a su vez, varios
campos de investigación científica: histórico-
artística, etnológica, arqueológica, antropológica,
físico-química, tecnológica, pedagógica, etc. Cada
uno de ellos utiliza métodos y medios propios y, por
ello, sólo una estructuración orgánica del museo, con
unas líneas directoras claras, es capaz de coordinar
los trabajos de forma eficaz para lograr el fin social
que la museología exige.
Dentro de cada tipo de museo la investigación
llevada a cabo por cada departamento, y por cada una
de sus secciones, se dirige al campo de su
Figura 1
Plan Nacional de I + D. Patrimonio Histórico.
Participación de museos
D Museos ■ Otros organismos D Total
Datos referidos al período 1987-1991
14
f N T O
especializa ión. Por ello, algunos museos españoles,
con indiferen ia de u temática, podemos encontrar
equipos interdi ciplinares llev ando a cabo proyectos
de in\'e tiga ión obre las materias más diversas,
pero finalmente integradas en lo que realmente es la
inve tigación mu eológica: sistemas de conservación
pre ervación de diferentes materiales, sistemas de
documentación e infonnatización de museos, o
in e tigación obre público, exposiciones y didáctica
de los mu eo , además de la investigación en su
propio ámbito temático. Un buen reflejo de esta
realidad se puede encontrar en otros trabajos que se
presentan en e te mismo documento, en los que se
exponen diferentes líneas de investigación llevadas a
cabo en museo de muy di versa naturaleza:
investigación en documentación, llevada a cabo
desde el Museo Arq ueológico Nacional;
investigación en conservación de madera procedente
del medio subacuático, llevada a cabo desde el
Museo Nacional de Arqueología Marítima; o
investigación sobre aspectos tecnológicos e históricos
de las cerámicas medievales, llevada a cabo en el
Museo Nacional de Cerámica.
La investigación museológica en el Plan Nacional
La política científica y tecnológica de nuestro país,
diseñada para coordinar esfuerzos, utilizar
óptimamente los medios y adecuarlos a necesidades
peculiares, y fomentar determinadas acciones en el
campo científico-técnico, exige que la investigación
realizada desde los museos no quede desconectada ni
aislada del resto de las acciones emprendidas por
otros organismos y que ésta se adecúe a las
prioridades y necesidades nacionales. Es a través de
la integración de las acciones investigadoras en el
Plan Nacional de I + D como pueden lograrse estos
objetivos.
Sin embargo, no ha
sido ésta una
tendencia frecuente
en los museos
investigación se españoles, por lo que
ha articulado en podemos decir que,
salvo determinadas
el sistema actual excepciones, la
de museos política
investigadora de los
españoles museos no se ha
integrado totalmente
en la política
diseñada por el Plan Nacional. Si atendemos a las
líneas de acción prioritarias marcadas en el Plan
para los Programas Nacionales, vemos cómo es en
 O O C U M E N T O

Figura 2 otros programas del Plan Nacional , como son el

Programa Nacional de Información para la
Investigación Científica y el Desanollo
Plan Nacional de I + D. Proyectos de museos Tecnológico (INF) y el Programa Nacional de
Investigación en la Antártida (ANT), en el que sólo
5 participa el Museo Nacional de Ciencias Naturales ,
dependiente del Consejo Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC) (1).
4

La participación de los museos ha sido lógicamente

3
más numerosa en el Programa Sectorial de
Promoción General de Conocimiento, puesto que no
2 existe la limitación temática de los Programas
Nacionales. Sin embargo, si se analiza el gráfico de
la figura 3, el porcentaje mayor de proyectos
realizados por museos durante el período 1981-1991
corresponde al Museo Nacional de Ciencias
INF ANT PAT Naturales, dependiente del CSIC. Le siguen , a gran
distancia, los proyectos realizados por museos
dependientes de otros organismos (Comunidades
■
INF: Programa Nacional de Información para la
Autónomas, Ayuntamientos, etc.) y, por último, los
Investigación Científica y el Desarrollo
Tecnológico.
proyectos realizados por museos estatales, con sólo
dos proyectos. La filosofía del Plan Nacional y la
ANT: Programa Nacional de Investigación en la acción coordinadora llevada a cabo desde la
Antártida.
Comisión Interministerial de Ciencia y Tecnología
PAT: Programa Nacional del Patrimonio Nacio- (CICYT) , diseñada y vinculada especialmente a los
nal. organismos "tradicionalmente" considerados
investigadores como las universidades y el CSIC,
Datos referidos al periodo 1987-1991 frente a otras instituciones, podrían explicar estas
diferencias.

Han sido los propios

museos, o las
el Programa de Patrimonio Histórico donde tienen La política Administraciones de
cabida la mayor parte de los proyectos de las que dependen
investigación de los museos. En este programa científica y (Mini sterios,
estuvieron presentes hasta 1989 los temas tecnológica de Comunidades
museística e informatización de museos, temas que Autónomas), las que
fuero n suprimidos en años posteriores, quedando
nuestro país exige
han soportado los
reducidos a aquellos relacionados con la que/a gastos generados por
conservación y restauración del Patrimonio investigación su acción
Histórico. Ello limitó sensiblemente las in vestigadora.
posibilidades de integración, aunque el de realizada desde Sin embargo, ello no
informatización quedó englobado en el Programa los museos ha supuesto la
Nacional de Información para la Investigación aprobación de un
Científica y el Desarrollo Tecnológico. En el
no quede
presupuesto
gráfico de la figura l se observa que, en el período desconectada del específico con tal
comprendido entre 1987 y 1991, los museos resto de las finalidad , quedando
participaron en el Programa Nacional de Patrimonio integrados los gastos
Histórico con cuatro proyectos de investigación acciones de investigación en
sobre un total de 57. Pero se debe contar también emprendidas por el mismo capítulo
con la participación de algunos museos en otros que los derivados,
programas del Plan Nacional, especialmente
otros organismos
por ejemplo, del
aquellos cuyo ámbito temático está relacionado con mantenimiento de
las cienci as de la naturaleza. En el gráfico de la las instalaciones.
fig ura 2 se puede ver la participación de museos en Desde el Ministerio

15
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Figura 3 el Plan Nacional reside en la dificultad de

Plan Sectorial PGC. Proyectos de Museos
canalizar la financiación externa, en este
caso procedente de la CICYT, puesto que el
sistema de gestión administrativa y
financiera de la Administración del Estado
facilita las transferencias de fondos entre sus
propios departamentos ministeriales.

No es éste el caso de los museos

PGC: Programa General del Conocimiento.
■ Min isterio de Cultura O Consejo Superior
de Investigaciones
Científicas (CS IC)
Datos referidos al periodo 1981-1991
de Cultura no se ha financiado expresamente
ningún proyecto de investigación en los museos, ni
siquiera en los de gestión directa. Los gastos
corrientes o la adquisición de equipos quedan
integrados en los gastos corrientes del museo o en
los presupuestos de inversiones de la Dirección
General de Bellas Artes y Archivos, lo que supone
una cierta ventaja
- una disponibilidad de los recursos no sujeta
a la aprobación externa de los proyectos- , pero
también una serie de inconvenientes: la lentitud
del proceso
administr.ativo y de
gestión de los
dependientes del Ministerio de Educación,
en concreto el Museo Nacional de Ciencias
Naturales; de ahí, como ya se ha señalado, su
elevado porcentaje de participación en el
Plan Nacional y su diferencia respecto a
otros museos. De esta forma , los museos, al
menos los de titularidad y gestión estatal
dependientes del Ministerio de Cultura,
deben recurrir a asociaciones colaboradoras
O Otros y a una serie de complicados recursos para
recibir los fondos procedentes de la CICYT.
Estas dificultades administrativas, en
algunos casos insuperables, han desanimado
a muchos equipos de investigación a
presentar sus solicitudes al Plan Nacional.
La ausencia de proyectos de investigación
englobados en éste, y las dificultades antes
mencionadas, han impedido la integración de
becarios del Plan Nacional de Formación del
Personal Investigador en los museos
españoles.
Si los responsables de la política científica
están convencidos de que la ordenación y
planificación es, en estos momentos,
incomparablemente mejor que confiar la
suerte del futuro científico-técnico español al
capricho del azar o a un voluntarismo estéril,

Se ha dado
paso importante
un recursos, y la
limitación de los
mismos al tener que
entonces comprenderán que se impone dotar
a los museos, como centros de investigación,
de los recursos humanos y materiales de los
compartirlos con que hoy carecen, y planificar la
hacia la otras necesidades investigación a desarrollar en los mismos
transformación funcionales del con unas miras más amplias , suprimiendo
museo. Es por ello
del museo en un por lo que es
trabas administrativas y burocráticas y
promoviendo una transferencia de recursos y
organismo necesario recurrir a medios más ágil.
canales de
cultural vivo y financiación
dinámico externos,
fundamentalmente Nota: Datos extraídos de la Memoria de Desarrollo del
Plan Nacional de l + D en el período 1988-1 990.
de la CICYT. Comisión Intermini sterial de Cienci a y
Tecnología. Madrid, 1991, y de las bases de datos
existentes en la CICYT.
Sin embargo, el problema de la escasa
integración de los proyectos de investigación *Jefe del Departamento de Antigüedades Griegas y Romanas del
lle vados a cabo por los museos españoles en Museo Arqueológico Nacional.

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