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HIGIENE Y SEGURIDAD
RUIDOS Y VIBRACIONES
Integrantes:
Paschini, Nicolás
Spesia, Daniel A.
Zambrana, Julián R.
2010
RUIDOS Y VIBRACIONES
1. Introducción Teórica:
Procedimiento:
Se introduce en la columna 1 de la tabla 1 la duración total durante una semana de cada nivel sonoro y se lee
en la intersección con el correspondiente nivel sonoro el índice parcial de exposición (Ei).
La suma aritmética de los índices parciales (E i) de exposición así obtenidos es el índice compuesto de
exposición (Ec).
Se entra con el valor del índice compuesto de exposición en la tabla 2 y se lee en ella el nivel sonoro continuo
equivalente.
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1.2. Decreto Nº 351/79, reglamentario de la ley nº 19.587
En el artículo 23, perteneciente al capítulo 3, se establece que “los exámenes de salud serán los siguientes: de
ingreso, de adaptación, periódicos...”. En el artículo 24, se indica que el “examen médico de ingreso” incluirá
“... audiometría en los casos de trabajo en ambientes ruidosos.” Además, se practicarán “exámenes clínicos y
complementarios” con frecuencia semestral entre otros casos cuando se deban utilizar “herramientas
manuales de aire comprimido que produzcan vibraciones”, y a quienes estén “expuestos a nivel sonoro
continuo equivalente2 de 85 dB(A)3 o más” se les examinará “al mes de ingreso, a los seis meses, y
posteriormente cada año, debiendo efectuar las audiometrías como mínimo 16 horas después de finalizada la
exposición al ruido”. Esto muestra que, a pesar de que el límite máximo tolerado, según veremos, es de 90 dBA
(Anexo V), este decreto considera los 85 dBA como un nivel de precaución.
El capítulo 13 del anexo I (artículos 85 a 94), trata específicamente la cuestión de los ruidos y vibraciones. El
artículo 85 expresa que “ningún trabajador podrá ser expuesto a una dosis de nivel sonoro continuo
equivalente superior a la establecida en el Anexo V.” El artículo 87 resume las estrategias para corregir
problemas de ruido, y dice textualmente:
“Art. 87. Cuando el nivel sonoro continuo equivalente supere en el ámbito de trabajo la dosis establecida en el
Anexo V, se procederá a reducirlo adoptando las correcciones que se enuncian a continuación y en el orden que
se detalla:
1. Procedimientos de ingeniería, ya sea en la fuente, en las vías de transmisión o en el recinto receptor.
2. Protección auditiva del trabajador.
3. De no ser suficiente las correcciones indicadas precedentemente, se procederá a la reducción de los
tiempos de exposición.”
Se observa que de todas las soluciones resultan preferibles aquellas que implican la reducción del ruido. Los
artículos que siguen, 88 y 89, van aún más lejos, requiriendo una fundamentación ante la autoridad
competente en caso de que no puedan aplicarse las dos primeras correcciones, y en ese caso establecen la
“obligatoriedad del uso de protectores auditivos por toda persona expuesta” o la “reducción de los tiempos de
exposición” según corresponda.
El artículo 92 establece que cuando en un trabajador expuesto a una dosis superior a 85 dBA de nivel sonoro
continuo equivalente “se detecte un aumento persistente del umbral auditivo, el afectado deberá utilizar en
forma ininterrumpida protectores auditivos”, y que “en caso de continuar dicho aumento, deberá ser
transferido a otras tareas no ruidosas”. Este artículo tiene en cuenta el hecho de que la susceptibilidad
individual a experimentar daño auditivo es muy variable, y respalda por lo tanto al porcentaje de trabajadores
que estadísticamente llegan a la hipoacusia con los niveles admitidos por la ley. Si bien esto impide la
profundización del problema, de hecho tiene la inocultable limitación de que se basa en el hecho consumado,
es decir, que se protege al trabajador cuando ya ha sufrido un daño irreversible. Esto es consecuencia de que
los niveles tolerados son excesivamente altos.
Por último, los artículos 93 y 94 se refieren, respectivamente, a los límites admisibles de ultrasonidos e
infrasonidos y de vibraciones, haciendo referencia al Anexo V.
Pasemos ahora al ya mencionado Anexo V. En lo referente a ruidos y vibraciones es la parte más técnica del
decreto Nº 351/79. En primer lugar se introduce el concepto de Nivel Sonoro Continuo Equivalente (NSCE o
Neq o Leq) como “el nivel sonoro medido en dB(A) de un ruido supuesto constante y continuo durante toda la
jornada, cuya energía sonora sea igual a la del ruido variable medido estadísticamente a lo largo de la
misma”.4 Esta definición no es correcta, ya que no coincide con el procedimiento de cálculo que más adelante
sugiere el mismo anexo5. Una definición más correcta sería “el nivel sonoro medido en dB(A) de un ruido
supuesto constante y continuo durante toda la jornada, cuya energía después de atravesar la red A sea igual a
la correspondiente al ruido variable a lo largo de la jornada”.
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1.3. Acondicionamiento de locales
Tenemos dos tipos diferentes de problemas:
Reducir el nivel de ruido protegiendo los ambientes contra ruidos provenientes del exterior (tanto aéreos
como de impacto) Es una cuestión de AISLAMIENTO
Mejorar el comportamiento del local para corregir defectos en la percepción de ruidos producidos en el
propio ambiente. Es una cuestión de ABSORCIÓN.
a) Por Muros: se produce por las fisuras y por los poros, por las rendijas de las aberturas y por el efecto de
diafragma vibrante, que se produce cuando no son lo suficientemente pesadas. Por ende, hay que evitar los
materiales porosos, se deben hermetizar perfectamente las aberturas y las paredes deben tener unos 350
Kg/m2 como mínimo, como corresponde a un muro de ladrillos comunes de 30 cm de espesor, que proveerá
un aislamiento de 48dB. En paredes simples, se aplica la ley de la masa, el aislamiento aumenta en 5 dB cada
vez que se duplica la masa de la pared. Espacios intermedios (de dimensiones acotadas) sin vinculación y
materiales de diferentes características, favorecen el aislamiento.
b) Por Ventanas y puertas: las ventanas son los puentes para transmisión en los muros de fachada, deben
contar con juntas bien estudiadas y construidas y ajustar perfectamente a los marcos. Es importante el peso
del vidrio, relacionado con su espesor. Algo parecido sucede con las puertas, donde se debe cuidar el cierre
mediante el doble contacto y burletes plásticos, y el peso y la disposición interna de los materiales. La doble
puerta, una de ellas acolchada, es la solución óptima si se cuenta con el espesor de pared necesario.
c) Por cerramientos horizontales (losas de entrepisos): transmite principalmente los ruidos de impacto, para
disminuirlos se suele hacer una losa flotante de 4 cm de espesor separada de la losa estructural mediante
material aislante. Del lado del departamento de abajo, se coloca un cielorraso suspendido, separado de la losa
mediante aire o bien, rellenando dicho espacio con material aislante. Las juntas de las suspensiones serán
elásticas con resortes o bien, con materiales elastómeros, para cortar el paso de las vibraciones.
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2. Ejercicios:
1) Dado el siguiente nivel de ruido y el tiempo de exposición de un trabajador que maneja una pala
cargadora, determinar:
a) NSCE
b) ¿El palero debe usar EPI?
Pala Cargadora
dB 100 95
90 85
hs 5 8
20 15
Con esos valores ingresamos a la tabla 1 del anexo V del decreto 351/79, obteniendo el índice parcial de
exposición (Ei).
E1 = 40
E2 = 10
E3 = 105
E4 = 50
E = 205
Según detallamos en el marco conceptual, la ley de higiene y seguridad 19587 nos dice que “Ningún
trabajador podrá estar expuesto a una dosis superior a 90 dB de NSCE para una jornada de 8 h y 48 h
semanales.” Continuado, el decreto reglamentario 351/79 nos dice en su Art. 87 que “... cuando el nivel
sonoro continuo equivalente supere en el ámbito de trabajo la dosis establecida en el Anexo V, se procederá a
reducirlo adoptando las correcciones que se enuncian a continuación y en el orden que se detalla:
1. Procedimientos de ingeniería, ya sea en la fuente, en las vías de transmisión o en el recinto receptor.
2. Protección auditiva del trabajador.
3. De no ser suficiente las correcciones indicadas precedentemente, se procederá a la reducción de los
tiempos de exposición.”
Por lo tanto determinamos que en este caso deberíamos, como primera medida realizar algún
procedimiento de atenuación del sonido, ya sea en la fuente como en las vías de trasmisión, por medio de
pantallas desviadoras o medios absorbentes. De no ser posible esto se deberá exigir la utilización de medidas
protectoras personales, pero siempre como último recurso, ya que estos elementos incomodan al operario y
perjudican la realización de las tareas, haciendo a éstas peligrosas e inseguras.
2) Con el mismo NSCE del punto anterior, si no verifica la ley, solucionar el problema, utilizando el siguiente
protector de capa:
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Desviación 2,00 3,00 3,00 2,00 2,50 5,00 4,50
El operario está expuesto a dosis mayores a la admisible, se utilizarán protectores auditivos para disminuir la
dosis de N.S.C.E en su oído.
Determinación del dispositivo protector:
Frecuencias centrales ( análisis en bandas de octava)
Frecuencias 125 250 500 1000 2000 4000 8000
Nivel de
93 93 93 93 93 93 93
Ruido dBA
Donde:
3) La pala de 1) trabaja en un galpón, al lado está la casa del cuidador. Además trabajan otras dos máquinas
según el siguiente esquema:
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Máximos deseados: 1 según Ley para operarios
2 60 dB
3 70 dB
Paredes de 30 cm con revoque
Tli h
b [m]
[dB] [m]
Ventan
40 0,90 1,00
a
Portón 30 5,00 10,00
Puerta 20 2,00 1,00
En el recinto se encuentran 3 máquinas trabajando con un nivel sonoro de 93 dB, 25 dB y 110 dB. Por
tratarse de unidades logarítmicas, no pueden sumarse en forma directa, por lo que recurrimos a los gráficos
para poder sumar los efectos. Para ello tomamos de a par los niveles sonoros y efectuamos la composición,
obteniendo como resultado final de la sumatoria el nivel sonoro mayor, debido a que el mismo es mucho
mayor a los demás.
Por lo tanto en el recinto encontramos un nivel sonoro de 110 dB, lo cual está fuera de norma, por lo que se
propone:
Sobre la fuente; proveer una capa protectora sobre el motor generador del sonido, provocando una
absorción del mismo y reduciéndolo.
Sobre la vía de transmisión; generar algún tipo de pantalla que desvíe el sonido y sea captado, para de
ésta forma no perjudicar a los operarios que trabajan en el lugar.
Sobre el operario; utilización de diferentes medios de protección según el grado y tiempo de
exposición.
Usar tapones cuando el nivel no supera los 105 dB
Usar orejeras cuando el nivel esté comprendido entre 105 y 115 dB.
Usar cascos para niveles superiores a los 115 dB
Portón, A = 50 m2
TL = 30 dB
TLt = 10 log Si / ( Si / 10 0.1 x Tli) = 10 log ((400+50) / (400/10 10,8 + 50/10 3,0) = 40 dB
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(TL: pérdida por transmisión de cada elemento)
En éste caso no se asegura el nivel máximo deseado de 60 dB, por lo que deberemos realizar algunos
tratamientos sobre el muro y sobre el portón.
Muro Absorbente confeccionar un muro de un material con cualidades absorbentes, de manera que
sea capaz de atenuar el sonido.
Espacios intermedios; confeccionar un doble muro con un espacio aislante en medio, debido a que
materiales de diferentes características no vinculados entre sí, favorecen el aislamiento.
Portón; se debe cuidar el cierre mediante el doble contacto y burletes plásticos, y el peso y la
disposición interna de los materiales. La doble puerta, una de ellas acolchada, es la solución óptima si
se cuenta con el espesor de pared necesario.
Puerta: A = 2 m2
TL =20 dB
Ventana: A = 0,9 m2
TL = 40 dB
Por lo que verifica respecto el nivel máximo deseado y no se requiere ninguna medida de regulación.
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3. Anexo
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