El apóstol Juan, también conocido como Juan el Evangelista, nació en Betsaida,
Galilea, alrededor del año 6 d.C. Era hijo de Zebedeo y Salomé y hermano de Santiago. Antes de ser llamado por Jesús, Juan era pescador en el mar de Galilea, al igual que su padre y su hermano. Trabajaba junto a ellos en su barca y participaba en la pesca. Hasta el momento en que fueron llamados por Jesús para ser sus discípulos, ambos dejaron todo y siguieron a Jesús. Junto a Pedro formaron parte del círculo íntimo de Jesús. Juan como apóstol y seguidor de Jesús presenció y participó en muchos de los milagros realizados durante su ministerio, como la multiplicación de los panes y los peces, la curación de enfermos, la resurrección de Lázaro, entre otros. Juan fue testigo de la crucifixión de Jesús y estuvo presente junto a María, la madre de Jesús, en ese momento. Jesús confió a Juan el cuidado de su madre antes de morir. Él fue uno de los primeros discípulos en enterarse de la resurrección de Jesús y estuvo presente en la ascensión de Jesús al cielo. Juan "el discípulo a quien Jesús amaba" Juan 13:23-25, durante la Última Cena, Juan se recostó en el pecho de Jesús. Este pasaje muestra la relación especial que tenía Juan con Jesús y la intimidad que compartían. La gente acostumbraba a recostarse sobre sofás para comer, y este discípulo se recostó sobre el pecho de Jesús, esto se consideraba una posición de cercanía y confianza. Durante la comida, Jesús le dijo a Juan que Judas lo traicionaría. Juan fue autor de cinco libros que encontramos en el nuevo Testamento de la biblia: El Evangelio de San Juan: El Evangelio de Juan se centra en la vida, los milagros y las enseñanzas de Jesús, con un énfasis particular en su divinidad y su relación con el Padre. Las Epístolas de Juan: Juan también escribió 1 Juan, 2 Juan y 3 Juan. En ellas, Juan aborda temas como el amor, la verdad, la obediencia y la importancia de vivir de acuerdo con los mandamientos de Dios. El Apocalipsis: El último libro del Nuevo Testamento es el Apocalipsis, también conocido como el Libro de la Revelación. Juan es reconocido como el autor de este libro apocalíptico, que contiene visiones proféticas y simbólicas sobre el fin de los tiempos y la venida del Reino de Dios. Jesús reprende a Pedro en defensa de Juan. Juan 21:15-22 En este pasaje, Jesús se dirige a Pedro y le hace una serie de preguntas sobre su amor por él. Después de cada respuesta afirmativa de Pedro, Jesús le da un mandato: "Apacienta mis corderos", "Pastorea mis ovejas" y "Apacienta mis ovejas". Le da la instrucción de cuidar, enseñar y liderar espiritualmente a los seguidores de Jesús, es decir, a su iglesia. Pedro, al ver a Juan siguiéndolos, pregunta a Jesús sobre su futuro y qué sucederá con él. Jesús responde Si quiero que él quede hasta que yo venga, que si él quiere que Juan permanezca hasta su venida, no es asunto de Pedro, sino que Pedro debe seguir a Jesús. La respuesta de Jesús a Pedro indica que a Pedro no le debe importar lo que suceda con Juan, su enfoque debe estar en seguir a Jesús y cumplir con su propio llamado. Jesús llamó a Juan y Santiago "Boanerges", que significa "hijos del trueno". Marcos 3:17: Juan y Santiago eran conocidos por tener personalidades enérgicas y temperamentos fuertes. El apodo "hijos del trueno" también puede interpretarse como un aliento a la valentía y la audacia en el servicio a Dios. El trueno se asocia con el poder divino en la tradición bíblica.
Destierro en la isla de Patmos
Juan fue desterrado a la isla de Patmos por proclamar el mensaje de Jesús. Durante su tiempo allí, recibió visiones y revelaciones que escribió en el libro del Apocalipsis. Se cree que Juan vivió hasta una edad avanzada y murió en Éfeso, Asia Menor, alrededor del año 100 d.C. Su legado como apóstol y escritor ha influido significativamente en la teología cristiana y su testimonio continúa siendo una parte fundamental de la fe cristiana.