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LA GESTIÓN DE LA NANOTECNOLOGÍA EN LA CNEA ANTE EL

UPGRADING DE LA TECNOLOGÍA NUCLEAR

Santiago Enriquez – Antonella Casteletti


Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA)

Resumen

El presente trabajo tiene como objetivo analizar la trayectoria de la Nanociencia y la


Nanotecnología (NyN) en la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), en vistas
a proponer una visión desde la gestión tecnológica acerca del rol de ésta tecnología
clave para la modernización y aumento de productividad de la industria nuclear
argentina en particular.
En ese sentido, teniendo en cuenta que a nivel de las políticas de Estado, la NyN juega
un rol crucial, y que el Plan Nuclear Argentino ha planteado desafíos fundamentales en
materia de desarrollo de la tecnología nuclear, se demostrará que resulta necesario
gestionar estratégicamente la NyN desarrollada en CNEA a partir de una mirada integral
acerca de la trayectoria tecnológica nuclear y la actual situación de las “tecnologías
maduras” que el sector comercializa a nivel nacional e internacional. En un contexto
donde las aplicaciones pacíficas de la tecnología nuclear están abriendo importantes
mercados, y donde las industrias nucleares rusas y chinas podrían plantear un panorama
de competencia en Argentina, resulta clave desarrollar herramientas de gestión
estratégica para estar a la altura del upgrading de la industria nuclear argentina,
desarrollada exitosamente en los últimos 65 años.

Introducción

El concepto de Nanotecnología alude al conjunto de conocimientos utilizados para la


manipulación de la materia a escala nanométrica (es decir la mil millonésima parte de
un metro), como consecuencia de la comprensión de los fenómenos físicos regidos por
mecánica cuántica que alteran el comportamiento de dichos materiales, con el fin de
diseñar y mejorar las propiedades físico-químicas de distintos materiales, tornándolos
de este modo en mucho más eficientes y útiles con respecto a varias de sus aplicaciones
originales (Vila Seoane, 2011). Por este potencial transformador, la nanotecnología
emerge como un campo de conocimiento que trastoca no solamente el estado de la
ciencia y la tecnología, sino sectores económico-productivos generadores de riqueza a
través de la aplicación del conocimiento científico-tecnológico. Este rasgo ha sido
últimamente captado globalmente, particularmente por los Estados y las empresas. En
este marco, y desde el punto de vista de la economía de la innovación, la nanotecnología
aparece como una “fuerza revolucionaria” reconocida políticamente con amplias
perspectivas de crear riqueza en las próximas décadas.
De manera similar a cómo se refleja en el gráfico, Carlota Pérez afirma que es “el
tiempo de gestación de la próxima revolución (tecnológica)”, basada en una
combinación de “biotecnología, nanotecnología, bioelectrónica, nuevos materiales y
nuevas energías, en función de las rupturas tecnológicas que se puedan producir, y
probablemente moldeadas por la creciente preocupación ambiental” (Pérez, 2012).
Asimismo, en tanto las nanotecnologías están revolucionando varios campos de
aplicación, es de esperar que las mismas “tenderán a desarrollarse en conexión con
algunas de las industrias líderes existentes” (Pérez, 2012: 33), el campo fértil donde las
aplicaciones influyen positivamente en la eficiencia de productos y procesos, sino
también en los rendimientos económicos. Entre las industrias existentes se podría
incluir a la industria nuclear, en cuyo seno el conocimiento juega un rol clave para su
desarrollo.
Teniendo en cuenta este amplio campo de oportunidades para la nanotecnología,
resultan fundamentales las políticas públicas de los diferentes Estados del mundo que
tienen como perspectiva fomentar la difusión y aplicación socio-productiva de esta
tecnología.
En efecto, a principios del siglo XXI, la nanotecnología comenzó a ser objeto de
políticas de fomento específicas por parte de los Estados. Así, luego de la Iniciativa
Nacional en Nanotecnologías (National Nanotechnology Initiative, NNI) en 2001,
impulsada por el gobierno de Estados Unidos –con el objetivo de impulsar la
investigación y desarrollo (I+D) en nanotecnología, facilitar la transferencia a
productos, impulsar la educación en nanotecnología, y apoyar su desarrollo responsable-
, más de 60 gobiernos de todo el mundo han diseñado e impulsado una planificación
estratégica con el eje principal en el desarrollo y difusión de la nanotecnología (Mincyt,
2016).
En este contexto, desde el año 2004, la nanotecnología comenzó a ser parte de la agenda
política de Argentina, primero con el apoyo para la creación de redes de investigación
en nanotecnología, y luego, en 2005, con la creación de la Fundación Argentina de
Nanotecnología (FAN), cuyo objetivo es el desarrollo y difusión de la nanotecnología
en el Sistema Nacional de Innovación argentino (Vila Seoane, 2014). Más
recientemente, el rol de la nanotecnología en la política de ciencia y tecnología
argentina se ha evidenciado en el papel que cumple en el marco del Plan Nacional de
CyT “Argentina Innovadora 2020”: aquí lo nano aparece –junto con la biotecnología y
las TIC- como una “tecnología de propósito general” (TPG), esto es, una tecnología
genérica que atraviesa a un conjunto amplio de sectores y que, por esa misma razón,
pautan los incrementos de productividad y calidad de los bienes y servicios, así como la
competitividad internacional del sistema productivo (Bramuglia, 2001).
Planteado este escenario, resulta necesario analizar el papel que tiene la nanotecnología
en la agenda de la política pública del Estado Argentino, y luego, en una escala más
operativa, el modo en que se han sentado las bases para que ésta tecnología atraviese de
manera virtuosa al sector nuclear argentino, a los fines de permitir en el seno de dicho
sector el necesario upgrading de las tecnologías nucleares. Para eso, es importante
desarrollar una visión estratégica acerca de la gestión de la nanotecnología en CNEA, de
tal forma que el sector nuclear argentino pueda aprovechar y maximizar las aplicaciones
productivas del desarrollo científico-tecnológico nano que se encuentran en ejecución
en la institución.
Para la realización del presente trabajo, en primer lugar, se repasarán los principales
lineamientos de la política nanotecnológica nacional en el seno del Plan Nacional
“Argentina Innovadora 2020”, y las principales acciones para la promoción de ésta área
de conocimiento. Luego se abordará, la trayectoria del desarrollo científico-tecnológico
e institucional del área nano en la CNEA. Con esto, se intentará plantear una visión
estratégica acerca de cómo encarar la gestión de la nanotecnología de cara a los desafíos
tecnológicos de la industria nuclear argentina de los próximos años. Finalmente, se
evaluará la importancia del desarrollo y aplicación de la nanotecnología en el sector
nuclear argentino, teniendo en cuenta los posibles futuros desafíos que plantea el
mercado nuclear global.

La nanotecnología en las políticas nacionales de Ciencia, Tecnología e Innovación

En el año 2013, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (Mincyt)


publicó los lineamientos estratégicos del Plan Argentina Innovadora 2020, el cual tiene
el objetivo de “fijar metas de largo plazo que permitan que las acciones implementadas
se traduzcan en una política de Estado y no de un gobierno en particular”1.

En el siguiente gráfico se sintetiza los principales lineamientos políticos y estratégicos


del Plan:

1
Mincyt, Plan Argentina Innovadora 2020, 2012 http://www.argentinainnovadora2020.mincyt.gob.ar/
[consulta: jueves, 29 de mayo de 2014]
Fuente: Elaboración propia basada en Mincyt, 2012

Traduciendo el gráfico, la intención del Mincyt es impulsar la innovación 2 para el


aumento de la competitividad de la economía nacional mediante el fortalecimiento del
Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SNCTI) 3 y el impulso de la
cultura emprendedora, con el objetivo de estructurar un nuevo perfil productivo
competitivo ligado al valor agregado. Para esto, el Mincyt impulsa dos estrategias
cruciales: el desarrollo de actores, recursos, regulaciones, instrumentos financieros
y articulaciones del SNCTI; y la focalización en sectores estratégicos para el aumento
de la innovación.

2
Sabato define a la innovación como un proceso de transferencia a la realidad socio productiva de los
resultados de una investigación. Este conocimiento transferido está sujeto a variables socio-culturales,
económicas, políticas y científicas. Ver Sabato Jorge y Botana, Natalio. La Ciencia y la Tecnología en el
desarrollo futuro de América Latina. Revista de la integración, INTAL, 1(3), pp.15-36, 1968.
3
Mariana Versino define al SNCTI como “un conjunto de interrelaciones entre diferentes instituciones y
actores sociales en pos del desarrollo de nuevas prácticas productivas y tecnológicas. El enfoque de los
SNI concibe al proceso de emergencia de una innovación tecnológica por la difusión de nuevos
conocimientos y su ‘traducción’ en nuevos productos o procesos. El análisis se centra en la empresa y
sus capacidades para innovar y el rasgo central de la perspectiva de los SNI es señalar el carácter
interactivo de los procesos de innovación”. Ver Versino, Mariana y Di Bello, Mariana. El complejo de
Ciencia, Tecnología e Innovación en Argentina: instituciones, políticas e instrumentos de financiamiento.
Observatorio sindical de Políticas Universitarias IEC-CONADU, pp.1-2, 2012.
Particularmente, en la estrategia de la focalización, el Plan menciona explícitamente a la
nanotecnología, junto con las tecnologías de la información y de las comunicaciones
(TIC) y la biotecnología, como tecnologías de propósito general (TPG), es decir,
“tecnologías genéricas que afectan a un conjunto amplio de sectores y que, por esa
misma razón, pautan los incrementos de productividad y calidad de los bienes y
servicios, así como la competitividad internacional del sistema productivo” 4. Ellas
disponen de la capacidad de “afectar la dirección del progreso técnico en múltiples
sectores y, al mismo tiempo, redefinir los patrones de demanda (…) Así, la difusión (de
las TPG) es sin duda una fuerza fundamental que configurará las estructuras productivas
y la inserción internacional de los países en los próximos años”5.
En el marco del Plan, las TPG se insertan en “sectores estratégicos” (agroindustria,
ambiente, desarrollo social, energía, industria y salud), definidos por la agenda política
del Mincyt con un criterio federal, en tanto que la estrategia contempla introducir el
desarrollo científico, tecnológico e industrial en todo el territorio argentino. Como
resultado del entrecruzamiento de TPG-sectores estratégicos, el Plan definió 35 núcleos
socio-productivos estratégicos (NSPE) los cuales determinarán oportunidades de
intervención territorial en sectores a través de los factores llave.
En ese marco, la nanotecnología aparece, entonces, en un rol transversal en las acciones
llevadas a cabo por el Mincyt. Por lo tanto, en principio, no se prevé encontrar a la
nanotecnología ligada a un programa específico del Ministerio, sino que es necesario
rastrearlo en sus inserciones implícitas en diferentes acciones ligadas tanto a la
focalización como al desarrollo institucional de la CTI. Esto es importante remarcar,
pues la nanotecnología como política de Estado deberá impulsarse a través de iniciativas
que involucren no sólo el desarrollo y difusión territorial de esta tecnología genérica,
sino que además promueva la modernización de sectores estratégicos -como por
ejemplo el sector nuclear- y el consecuente desarrollo del SNCTI (Enriquez, 2015).

Por otro lado, en cuanto a la estrategia “desarrollo de actores, recursos, regulaciones,


instrumentos financieros y articulaciones del SNCTI”, la nanotecnología aparece de
manera más explícita, ya que su promoción se realiza a través de políticas tendientes a
la “visibilización y difusión” de dicha área de conocimiento, y su consecuente
aplicación en áreas industriales y de conocimiento preexistentes

En ese marco, en la actualidad, se pueden identificar especialmente tres espacios


institucionales donde se recolecta información sobre la nanotecnología para la posterior
formulación de políticas de nanotecnología : la Fundación Argentina de Nanotecnología
(FAN), la Secretaría de Planeamiento y Políticas (SEPP), y la Dirección Nacional de
Cooperación e Integración Institucional, todas bajo la órbita del Mincyt. Respecto a
esto, es posible resaltar los siguientes puntos:

4
CEPAL . Innovar para crecer. Desafíos y oportunidades para el desarrollo sostenible e inclusivo en
Iberoamérica. SEGIB, p.39. 2009
5
Ibid.
- Las principales funciones de la FAN son sentar las bases y promover el desarrollo de
la infraestructura humana y técnica del país para que, a través de actividades propias y
asociadas, se alcancen las condiciones para competir internacionalmente en la
aplicación y el desarrollo de las nanotecnologías y las microtecnologías; realizar
actividades por si misma o en forma conjunta y/o complementaria con el sector privado
o de otros organismos del Sector Público a los fines incorporar el potencial innovador
de las micro y las nanotecnologías al crecimiento del país; y apoyar actividades de
identificación de prioridades temáticas, nichos de oportunidad para el país, buenas
prácticas y concertación de esfuerzos dirigidas a una consolidación de este campo en
Argentina. De este modo, la FAN se posiciona como el principal organismo promotor
de la difusión de la nanotecnología en el SNCTI.

- En términos de financiamiento, resulta descatable que en el 2013 la principal fuente de


financiamiento del desarrollo de las micro y nanotecnologías provenía del sector
público:

Respecto a este punto, resulta importante resaltar que gran parte de dichos subsidios
públicos provienen de programas de financiamiento a proyectos de I+D y de
modernización tecnológica que implementa la Agencia Nacional de Promoción
Científica y Tecnológica (ANPCYT), cuya principal fuente de financiamiento son
créditos otorgados por el Banco Mundial o por el BID (Vila Seoane, 2015) 6. Esto
demuestra la influencia de organismos internacionales de crédito en el financiamiento
de la I+D nano en Argentina, y en consecuencia, la dependencia en términos de
políticas de créditos, condiciones de gestión de dichos fondos y de otorgamiento a
ciertas líneas de I+D (excluyendo otras que podrían ser prioritarias para la agenda
política nano nacional).

- Los documentos en políticas en nanotecnología de la SEPP afirman que, aun cuando


resulta “difícil predecir a ciencia cierta cuál será el nivel de aplicabilidad industrial y el

6
Respecto de las iniciativas políticas para la promoción de la nanotecnología, la creación de líneas de
financiamiento específicas (FS Nano del FONARSEC, ARN Bio-Nano-TIC del FONTAR) y de fondos de
financiamiento internacional y espacios de asistencia técnica internacional como el Programa
Nanopymes, producto del Acuerdo de Cooperación entre Argentina y la Unión Europea.
impacto de la nanotecnología en la estructura productiva argentina” (Mincyt, 2012), no
obstante se puede afirmar que “la Argentina se encuentra en una posición favorable para
el desarrollo de la actividad nanotecnológica. Actualmente, se cuenta con recursos
humanos de alta capacidad científica y técnica y se dispone de laboratorios de I+D de
primer nivel. A la vez existe una red de colaboración científica a nivel nacional”
(Mincyt, 2012). Asimismo, de los 81 grupos de I+D nano identificados en uno de dichos
documentos, 16 pertenecían a la CNEA (Mincyt, 2012).

En este contexto, se torna clave profundizar en cómo la CNEA emerge como un actor
fundamental en el sistema nanotecnológico argentino, y respecto a los impactos de la
I+D nano de CNEA en la industria nuclear.

La nanotecnología en la CNEA: trayectoria, institucionalización y logros

A fin de 2004, la ANPCYT abrió una convocatoria para financiar redes de cooperación
entre investigadores dedicados al desarrollo de las NyN en Argentina (Spivak L´Hoste
et. al., 2012). Las cuatro redes de colaboración resultantes de dicha convocatoria, cuya
existencia se presume preexistente a la convocatoria misma (Spivak L´Hoste et. al.,
2012), tenían la particularidad de tener por lo menos un grupo de investigación en NyN
de la CNEA:

Redes de cooperación en NyN

Red Integrantes

Red Argentina de Nanociencia y UBA - UNSL - UNC -UNRC -


Nanotecnología Molecular, Supramolecular INIFTA (CONICET/UNLP) - Centro
e Interfases. Atómico Bariloche (CNEA)

Red Argentina de Nanociencia y Centro Atómico Bariloche/ Centro


Nanotecnología: materiales Atómico Constituyentes (CNEA) -
nanoestructurados y UNC - UNSL - UBA
nanosistemas (Red MaN)

Autoorganización de Bionanoestructuras UNC - UNSL - UNT - Centro


para la Transmisión de Información Atómico Bariloche (CNEA)
Molecular
en Neurobiología y Procesos Biológicos

Laboratorio en Red para el Diseño, Centro Atómico Bariloche/ Centro


Simulación y Fabricación de Nano y Micro Atómico Constituyentes (CNEA) -
Dispositivos, Prototipos y Muestras. UBA - UNSAM - UNER - UNNE -
CITEDEF - INTEC - IMBECU
Fuente: Elaboración propia en base a Spivak L´Hoste et. al., 2012

Esto demuestra la importancia de los grupos de investigación de CNEA en las primeras


iniciativas políticas de institucionalización de la nanotecnología a nivel nacional, y sus
vinculaciones con el incipiente sistema nanotecnológico argentino, es decir, su activa
participación en redes de cooperación nano.
Entre 2005 y 2006, un grupo de investigadores del Centro Atómico Constituyentes
(CAC) y Bariloche (CAB) que participaban en estas redes de cooperación plantean la
idea de crear un instituto para impulsar y coordinar las actividades del área de NyN
dentro de la CNEA. Así, en el año 2007 se crea el Instituto Nanociencia y
Nanotecnología (INN), cuyo objetivo es promocionar la generación de conocimiento en
NyN, poniendo especial énfasis en las prioridades de la CNEA. Asimismo, el INN se
propone como plataforma que permite compartir al interior de CNEA infraestructura y
una serie de facilidades instrumentales relacionadas con área de NyN: magnetismo,
electrónica de spin, modelado de propiedades magnéticas y electrónica,
superconductores nanoestructurados y dispositivos MEMS, entre otras (Spivak L´Hoste
et. al., 2012).
A casi 10 años de su creación, es posible valorar la trayectoria del INN desde varios
puntos de vista. Por un lado, en términos de institucionalización, a través del INN fue
posible el reconocimiento y la consolidación de las redes de cooperación de
investigadores altamente calificados al interior de la CNEA, así como su proyección
hacia redes de cooperación en NyN extrainstitucional. Esto otorgó a las líneas de I+D
nano de CNEA la posibilidad de actuar en diferentes ámbitos del SNCTI (vinculación
con otros organismos de CyT, empresas, inversores, etc.) a partir del respaldo
institucional del INN.
En segundo lugar, resulta importante destacar dos activos claves para el desarrollo nano
que posee el INN: facilidades de micro y nanofabricación (en el CAC y el CAB) y salas
limpias asociadas a la I+D nano; y equipos de diversa complejidad (microscopios,
espectroscopios, espectrómetro, difractómetro de Rayos X, etc.), los cuales en varios
casos son únicos en el país. Esta disponibilidad de equipamiento e infraestructura
posiciona a la CNEA -y al INN- dentro del Programa de Mincyt de Sistemas Nacionales
de grandes instrumentos y bases de datos, destinado a la utilización eficiente para todo
el SNCTI de los grandes equipamientos y una mejor organización y acceso a las bases
de datos científicos existentes en las distintas instituciones de CyT de todo el país.
En tercer lugar, a nivel organigrama, el INN se caracteriza por no tener bajo su
dependencia a todas las áreas de aplicación de NyN de CNEA, sino que actúa como
plataforma que coordina a los grupos de investigación de CNEA que desde sus
respectivas Gerencias desarrollan diferentes áreas específicas de NyN. Así, lo que ha
logrado el INN es vincular a dichos grupos, agruparlos desde la mirada transversal
propia de la NyN, y así, plantear una visión integral de todas estas iniciativas de NyN de
CNEA.
En ese sentido, desde una mirada integral, el INN plantea tres áreas temáticas
principales de desarrollo de NyN en CNEA.

- Desarrollo de MEMS
- Nanomagnetismo
- Nanobiología.

En estas tres áreas se han logrado patentes, incubación de Empresas de Base


Tecnológica (EBT), reconocimientos en concursos de innovación y la vinculación con
sectores productivos con fines de escalado comercial. Entre estos logros podemos
destacar:

Acción Característica Logro

Lizys Desarrollo y fabricación de Incubación de EBT


nanopartículas magnéticas
funcionalizadas en su
superficie

MZP Desarrollo de un dispositivo Incubación de EBT -


de diagnóstico médico que Financimiento nacional e
mide la viscosidad de fluidos, internacional - Patente
similar al medidor de glucosa
que utilizan los diabéticos.

Delta L Desarrollo de dispositivos de Premio Concurso IB50K -


Microsensores tecnología innovadora para incubación de EBT
sensores basada en una red de
cables nanométricos, para
medir deformaciones y
tensiones en una amplísima
variedad de componentes y
productos, de todos los
tamaños y de rubros muy
diferentes

Laboratory on a Desarrollo de una plataforma Premio Concurso Innovar


Satellite (Labosat) electrónica conformada por 2016
dos películas metálicas con
un óxido entre medio de unos
20 nm de espesor

Desarrollo de Desarrollo de un Gran Premio Concurso


recubrimientos recubrimiento Innovar 2016
nanoestructurado que
presenta un alto efecto
antibacteriano

Por último, resulta importante destacar, por un lado, la interacción de las capacidades de
investigación en NyN de CNEA con sectores productivos; y por otro lado, la inclusión
de la Nanotecnología en el Plan Estratégico de CNEA 2015-2025.
Respecto al primer, resulta interesante que, tras diez años de institucionalización de la
NyN en CNEA, entre 2014 y 2016 el INN ha realizado dos reuniones con el objetivo de
vincular las capacidades nano de CNEA con sectores productivos con alto grado de
I+D, atendiendo de algún modo a los requerimientos de focalización que establece el
Plan Argentina Innovadora 2020.
La principal acción de focalización fue la Reunión Nano-nuclear, realizada a fines de
2014, y cuyo objetivo fue “incrementar la interacción con las comunidades asociadas a
la energía nuclear para conocer las posibles demandas que la energía nuclear puede
traccionar desde la nano-CyT”. Tomando como antecedentes las dinámicas de reuniones
interdisciplinarias realizadas en Alemania, Japón, Estados Unidos, Rusia y el
Organismo Internacional de Energía Atómica (IAEA), en dicha reunión se han
identificado problemáticas y temas de investigación de la comunidad nuclear argentina,
en cuyo seno podría incorporarse la mirada nano de los investigadores del INN para su
solución. Así, se han tratado temas de sensores, materiales, combustibles, etc., los
cuales podrían ser traccionados desde la NyN y que resultan de especial prioridad para
la ejecución de proyectos del Plan Nuclear Argentino -CAREM25, RA-10, centrales de
potencia, reactores de investigación, etc.
Por otro lado, se ha organizado la reunión Nano-agro, con un objetivo similar a la
Reunión Nano-Nuclear: analizar en conjunto entre investigadores del INN, del
CONICET y del INTA las oportunidades de la nanotecnología aplicada a la agro-
industria, para identificar problemáticas/oportunidades a ser traccionadas desde
recomendaciones futuras de I+D+i con componente nano.
Finalmente, cabe resaltar el lugar de la NyN en la planificación de CNEA. Así, teniendo
en cuenta que el horizonte del “Plan Estratégico de CNEA 2015-2025” consiste en
transformar a la institución “en un verdadero motor de la industria nacional y consolidar
internacionalmente al país en el desarrollo nuclear con fines pacíficos”, se han
planteado “varias líneas de desarrollo y proyectos en todas las áreas de incumbencia” de
la CNEA. Entre dichas área se encuentra “Investigación y Desarrollo”, en cuyo seno se
plantea continuar “con la investigación básica y aplicada en física nuclear y subnuclear
de altas energías, en aplicaciones de la nanotecnología a materiales nucleares y a la
salud”. Asimismo, el Plan Estratégico enfatiza el desarrollo tecnológico de micro y
nanotecnología para aplicaciones nucleares, espaciales, y de la salud que se encuentra
haciendo la CNEA.
Una visión sobre la vinculación nano-nuclear en Argentina

Luego de haber descripto el panorama de la NyN en la agenda del Mincyt y de la


CNEA, se planteará una propuesta para la gestión estratégica de la NyN en la CNEA.
Para esto, se parte del concepto de gestión tecnológica, según lo define Enrique
Medellín, en tanto conjunto de prácticas organizacionales tendientes a las comprensión
del fenómeno innovador, de su modelaje, de sus prácticas, de sus impactos en la
competitividad empresarial, de sus actores, de sus procesos y prácticas, de la interacción
de estos últimos con otros procesos y prácticas organizacionales, de su medición y
evaluación, de sus técnicas y herramientas, y de las condiciones externas e internas
necesarias para que sea efectiva en un contexto y un momento histórico particular
(Medellín, 2010). En ésa línea, la gestión tecnológica aporta un enfoque estratégico de
una organización necesario para el desarrollo de capacidades esenciales para la creación
y mantenimiento del know-how, de I+D e innovación (I+D+i), y de dominio de los
activos complementarios, sola o de forma expandida (Medellín, 2010). Por lo tanto, las
prácticas de gestión de tecnología establecen un marco de relaciones entre la tecnología,
las capacidades de la empresa y los objetivos del negocio.
En éste marco, es posible distinguir tres aspectos claves de la gestión tecnológica en
CNEA, partiendo de sus áreas de gestión:

1) Áreas generadoras de I+D+i y know-how asociado: las Gerencias de Área y sus


dependencias son los principales espacios de generación de conocimiento científico-
tecnológico y del desarrollo. Las mismas se distribuyen en la escala de madurez
tecnológica (TRL) que va desde la idea al desarrollo del producto con conocimiento
incorporado.

Como se planteó oportunamente, las actividades científico-tecnológicas de la CNEA


recorren todo el espectro de la escala de madurez tecnológica, lo que le otorga a la
institución un gran valor económico, social y tecnológico (Enriquez, 2015). Así, a nivel
estratégico, en los niveles TRL-1, TRL-2 y TRL-3 la CNEA se propone desarrollar
tecnologías transversales como nanotecnología –aplicaciones medicinales, biológicas,
energéticas, etc.,; en los TRL de prototipo se posicionaría el proyecto de desarrollo del
prototipo de reactor modular CAREM 25; mientras que en los niveles de “tecnologías
maduras y consolidadas comercialmente” (TRL 8 y 9), la CNEA se posiciona con los
elementos combustibles para reactores de investigación, la fabricación de miniplacas, la
producción de radioisótopos, los paneles solares para misiones satelitales, y desarrollo
de técnicas específicas para transferir al sector socioproductivo.

2) Áreas con visiones particulares sobre la gestión tecnológica: comprende a las


gerencias de apoyo relacionadas con la gestión de la transferencia de tecnología y la
vinculación con el Sistema Nacional de Innovación y el Sistema Nuclear argentino.

Fuente: elaboración propia en base al organigrama de CNEA.

A su vez, es posible caracterizar en conjunto a éstas áreas como un “Sistema de


vinculación y gestión tecnológica in-house fragmentado”, en tanto hay una lógica
subyacente de vinculación tecnológica entre las diferentes áreas, aunque no hay una
coordinación ejecutiva que aúne los diferentes criterios de gestión tecnológica de las
diferentes gerencias.
En ese sentido, cada gerencia perteneciente a este sistema posee una determinada visión
sobre la vinculación y la gestión tecnológica, en función de a qué nivel de madurez
tecnológica se dirigen las respectivas capacidades de gestión.

- TRL 1 a TRL 6: Departamento Propiedad Intelectual (Gerencia Planificación) /


Gerencia Empresas -GEDRE- → han desarrollado capacidades de gestión de I+D
básica y aplicada y desarrollo de prototipos o líneas de investigación en conjunto con el
sector socioproductivo (quién se asegura la comercialización futura) u otros actores del
SNCTI. Aquí la principal fuente de ingresos proviene de las regalías cobradas por la
comercialización de los resultados de I+D.

- TRL 7 y 9: Gerencia Empresas Asociadas / Subgerencia CPIT (Gerencia Coordinación


y Enlace) → La Gerencia de Empresas Asociadas se vincula con las empresas del sector
nuclear en función de la comercialización de las tecnologías maduras desarrolladas
históricamente por CNEA, y de cuya ganancia percibe una proporción. Respecto de la
Subgerencia CPIT, si bien este sector gestiona varios proyectos que pueden abarcar
otros TRL, sus capacidades de gestión están más cercanas a la comercialización de
tecnologías y capacidades maduras y/o consolidadas, las cuales aparecen como parte de
una oferta tecnológica previamente diseñada. Así, la empresa que demanda una
tecnología madura o capacidad de CNEA no está financiando una línea de I+D+i sin
factiblidad económico-productiva, sino que ya tienen en su horizonte de negocios más
inmediato introducir esa tecnología a un producto o proceso productivo. En este sector,
la principal fuente de ingresos son los contratos de transferencia de tecnología y de
asistencia tecnológica a empresas.

3) Área responsable de la planificación estratégica de la CNEA en el marco del


Plan Nuclear Argentino: la Gerencia Planificación, Coordinación y Control es la
responsable de coordinar la ejecución del Plan Estratégico de CNEA 2015-2025
aprobado por la Presidencia de CNEA, en donde se plantea la visión a futuro de la
institución respecto a sus capacidades científico-tecnológicas en el área nuclear. En
otras palabras, este sector de planificación poseería una visión integral de todas las TRL
desarrolladas por CNEA, en donde la nanotecnología aparece en un determinado lugar:
de acuerdo al Plan Estratégico, la nanotecnología es meNcionada en el área temática de
Investigación y Desarrollo, dotándola de cierta orientación en la I+D nano, vinculada a
temáticas e interés por la CNEA -materiales, energía y salud.

Ahora bien, para elaborar una estrategia de impulso de la nanotecnología en la CNEA


que traccione el sector nuclear argentino, se requiere establecer dinámicas de
vinculación entre las áreas relacionadas con las diferentes TRL tanto a nivel técnico,
como de gestión y planificación.
Si bien, como se describió en el punto anterior, ya desde el nivel técnico, en la Reunión
Nano-Nuclear se han establecido canales de comunicación entre grupos de trabajo
relacionados con los niveles de madurez altos y los grupos de I+D nano -ubicados en los
niveles de madurez temprana-, aún es necesario explorar iniciativas de vinculación entre
los modos de gestionar la I+D+i en los TRL 1 a 6 y en los TRL 7 a 9. Para esto se
requiere de una adecuada planificación y organización integral del sistema de
vinculación y gestión tecnológica de la CNEA que diseñe un esquema de gestión
partiendo de la visión particular que otorga la matriz de escala de madurez tecnológica.
Asimismo, la perspectiva de los niveles de madurez debería combinarse con un
horizonte-objetivo a largo plazo que actúe de rector respecto a la direccionalidad de la
gestión tecnológica: en el presente trabajo se propone establecer como objetivo la
modernización de las tecnologías maduras desarrolladas en el sector nuclear
argentino, a través del entecruzamiento con las líneas de investigación nano del INN
y la optimización de capacidades de gestión y articulación.

En efecto, de manera similar a la estrategia del Plan Argentina Innovadora 2020, el


horizonte-objetivo del Plan de vinculación y gestión tecnológica nanotecnológica de
CNEA estaría apoyado en una estrategia de “focalización” y de desarrollo de recursos
científico-tecnológicos nano y de gestión.

En efecto, la vinculación entre grupos de trabajo técnico y de gestión posicionados en


las escala de mayor madurez y aquellos grupos en estadios de desarrollo de las líneas de
I+D+i nano, debe darse de modo sistemático a través de relaciones encadenadas
“Proyecto nuclear - idea inter-nivel de madurez - financiamiento - resultado -
comercialización”. A nivel operativo, cada nivel de madurez tiene perspectivas de
mercado, necesidades financiamiento, de gestión y un horizonte de acción particulares,
aunque, no obstante desde la planificación estratégica integral se debe realizar los
estudios del mercado nuclear para establecer las líneas de modernización de productos y
procesos, que serán compartidas por toda la cadena de madurez tecnológica.
Con los lineamientos de modernización tecnológica nuclear, las capacidades de I+D+i
en TRL 1-6 serán movilizadas y desarrolladas a través del financimiento (derivado de
resultados de comercialización) y del conocimiento del mercado nuclear consolidado
en los niveles de TRL 7-9. Al mismo tiempo, el desarrollo de NyN de CNEA en los
niveles aguas abajo podrían ser el puntapié para desarrollar mercados innovadores a
través del desarrollo comercial de patentes, en una estrategia del “oceano azul”.

Dicho Plan de gestión de la Nanotecnología para la modernización nuclear requiere


sobre todo la decisión política de CNEA de aprovechar las capacidades de NyN
desarrolladas por la institución, y articularse con las demandas y posibilidades de
crecimiento tanto de las plantas industriales de CNEA como de las empresas que
actualmente comercializan “paquetes de tecnología nuclear” en estado de madurez:
Planta ECRI (miniplacas para blancos de irradiación, elementos combustibles para
reactores de investigación), Planta de Irradiación Semi-industrial (tecnología de
irradiación de alimentos y materiales descartables), Planta de Ezeiza de producción de
raiodisótopos, INVAP (reactores de investigación y plantas de producción de
radioisótopos), CONUAR (pastillas de uranio, tubos de zircaloy, elementos
combustibles para reactores de potencia), FAE (tubos sin costura de aleaciones
especiales), DIOXITEK (producción de dioxido de uranio y fuentes selladas de Cobalto
60), Nucleoeléctrica Argentina (arquitecto-ingeniero de centrales de potencia y operador
de centrales), ENSI (producción de agua pesada), y TECNONUCLEAR y BACON
(radiofármacos). En éste aspecto, la visión integral y estratégica de la CNEA -y en
particular del INN en lo que respecta a NyN- es clave para iniciar una sinergia de
demandas, potenciales proyectos conjuntos, necesidades y estrategias conjuntar para la
modernización de la industria nuclear argentina.

Conclusiones: La gestión estratégica de la nanotecnología ante los desafíos del


sector nuclear.

En el presente trabajo se ha realizado un razonamiento deductivo a partir de premisas


teóricas y políticas generales y sectoriales, para luego arribar a reflexiones en lo tocante
a cuestiones de gestión estratégica.
Así, se partió de la importancia de la nanotecnología en el cambio de los paradigmas
tecno-productivos que actualmente está afectando las dinámicas económico-productivas
a escala mundial y en cómo la “revolución tecnológica” requiere de cambios en las
políticas de los gobiernos a los fines de aprovechar las potencialidades que ofrecen la
introducción de ésta tecnología de propósito general. Planteado esto, se describió y
reflexionó sobre la política de CyT de Argentina, en particular su estrategia de impulso
de la nanotecnología en tanto tecnología que atraviesa varias industrias, entre ellas, la
nuclear. En ese sentido, se describió el desarrollo científico, tecnológico e institucional
de la NyN en CNEA, principalmente a través del INN y los principales logros en la
materia. La importancia la NyN en la planificación de CNEA y sus logros alcanzados
permitieron que este trabajo encuentre la viabilidad y factibilidad suficientes para
pensar cómo gestionar estratégicamente la nanotecnología a los fines de realizar el
upgrading de los paquetes tecnológicos nucleares en estado actual de comercialización a
escala nacional e internacional.
Para esto, se ha replicado el método de planificación estratégica del Plan Argentina
Innovadora 2020, poniendo énfasis en el desarrollo de capacidades y en la focalización
en el sector nuclear a partir de líneas de modernización de tecnologías definidas por la
CNEA en conjunto con las empresas nucleares asociadas.
Ahora bien, luego de haber realizado la propuesta, sobreviene una cuestión: el hecho
que se replique la forma de planificar estratégicamente del Mincyt en la gestión nano en
CNEA bien puede atender a las demandas de articular políticas de CyT a nivel general
(Mincyt) y sectorial (CNEA). No obstante, además de eso, la planificación de la
nanotecnología a nivel sectorial debe estar principalmente fundada y justificada en un
diagnóstico de situación del mercado nuclear global y mundial. En ese sentido, una
pregunta clave para justificar propuesta de gestión estratégica de la nanotecnología en
CNEA del presente trabajo sería: ¿por qué habría que gestionar la nanotecnología para
realizar el upgrading de las tecnologías madura del sector nuclear?
Al respecto, vale aclarar que la modernización de las tecnologías a través de la TPG es
una acción para optimizar la performance de las tecnologías y tender a la mejora de las
ventajas competitivas de dichos productos tecnológicos en mercados con creciente
aumento de competencia y de desafíos que plantea el avance de fronteras tecnológicas,
dado por los cambios en paradigmas tecno-productivos.
En el caso argentino, y según la mirada de este trabajo, el desafío más importante que
tiene la industria nuclear argentina en los próximos años viene de la mano de la posible
cooperación/competencia de la industria nuclear rusa y china, las cuales han planteado
estrategias políticas y comerciales para introducir sus respectivas tecnologías nucleares
en el mercado argentino.
Por el lado ruso, desde 2015, la empresa estatal Rosatom ha abierto una oficina regional
en Brasil con una agenda comercial que incluye la construcción de plantas nucleares, el
uso de tecnologías de radiación aplicadas a la medicina, la purificación del agua, la
agricultura, la ciencia, tecnología e innovación en el área nuclear con proyección a toda
América Latina. A la actualidad, Rusia ha comercializado radioisótopos al mercado
brasileño (mercado que comparte con Argentina) y tecnología en medicina nuclear a
Bolivia, y establecido acuerdos de colaboración académica con universidades y centros
de investigación de Argentina (por ejemplo UBA).
Por su parte, China se encuentra implementando una política de exportación de
tecnología nuclear a diferentes mercados (MERICS, 2016), y en Argentina ha
desembarcado como potencial proveedor de tecnología de centrales de potencia.
Actualmente, se encuentra negociando con Nucleoeléctrica Argentina el contrato para la
realización de la cuarta central nuclear, y en cuyas tratativas se está buscando el balance
entre participación de la industria nacional y la introducción de tecnología nuclear china
para reactores PWR.
Tanto China como Rusia apuntan a la comercialización de tecnologías que ya se han
desarrollado o explorado en Argentina, más allá que dicha comercialización se realice
con la participación de capacidades nacionales. Por lo tanto, toda estrategia de
modernización de la tecnología nuclear debería apuntar a estar a la altura
competitiva y de cooperación de los paquetes de las empresas nucleares rusas y
chinas. Si bien este horizonte parece ambicioso, resulta crucial actuar para mejorar la
performance de tecnologías nucleares desarrolladas en el país en un contexto de
ausencia de jugadores externos, tanto para establecer marcos de autonomía
tecnológica como de conservar las capacidades científico-tecnológicas
desarrolladas desde hace más de 65 años. En este escenario, resulta importante un
plan de gestión estratégica de la nanotecnologia que parta de dicho escenario donde hay
nuevos jugadores nucleares globales en la región.
Por último, y realizando un primer análisis de viabilidad del Plan de gestión de la
nanotecnología nuclear, conviene preguntarse si la propuesta está contemplada dentro
de las posibles prácticas de inserción productiva de la nanotecnología.
Al respecto, cabe destacar que la mayoría de las políticas de difusión de la
nanotecnología están basadas en la transferencia a sectores privados de resultados de la
I+D nano realizado en centros de investigación públicos, a los fines de que los primeros
realicen las inversiones necesarias para la comercialización de los resultados exitosos.
En este caso, una de las problemáticas más comunes a esta forma de difusión de la
nanotecnología está dada por la difícil vinculación entre sectores públicos y privados, el
salto entre producción en base a I+D y comercialización. Como plantea Guillermo
Foladori “la orientación de las políticas públicas a promover la inserción de esta
investigación mayoritariamente pública con las empresas privadas presenta muchos
‘valles de la muerte’ que dificultan la transición; porque resulta muy difícil conectar
varias empresas en el nivel de la producción con la comercialización y los consumidores
finales” (Foladori, 2016).
Ahora bien, la propuesta de gestión de la nanotecnología para la modernización de la
tecnología nuclear argentina intenta vincular la I+D+i nano desarrollada en CNEA –un
organismo público- con las tecnologías maduras que actualmente comercializa la misma
CNEA por motu proprio o por empresas nucleares en las la CNEA como organismo
público tiene participación accionaria o poder de decisión en sus respectivos directorios.
Por consiguiente, en este caso, los “valles de la muerte” dado por la transición público-
privada podrían verse subsanados ya que gran parte de la cadena de valor que va del
desarrollo nano al upgrading tecnológico y comercialización estaría parcialmente
gestionada por la CNEA en conjunto con otros actores cercanos a ella. Respecto a esto,
Foladori sostiene que dichas políticas de promoción de CyT “aún no exploradas lo
suficiente en América Latina” parten de sectores que no fueron alcanzados por las
privatizaciones de los años ochenta y noventa, y donde el control estatal es cuasi o
totalmente monopólico -como agua potable, energía, salud, y transportes (Foladori,
2016). Foladori sostiene que en dichos sectores donde el Estado aún participa en la
producción material y de servicios, bien se podría “integrar a la Investigación y
Desarrollo e impulsar la producción bajo el control total o cuasi total de toda la cadena
de valor, evitando de esta forma los ‘valles de la muerte’ que el mercado genera, (y
generando) mecanismos para hacer llegar al consumidor los productos finales, sin
necesidad de pasar por el mercado, o pasando de manera subsidiada” (Foladori, 2016).
El Plan de gestión de la nanotecnología para la modernización nuclear podría ser una
muestra de integración orgánica entre los grupos de investigación con los procesos de
producción y con el consumo.
Si como planteaba hace 30 años Sara Volman, ex directora del Servicio de Asistencia
Técnica a la Industria (SATI), “el programa nuclear llevado a cabo a lo largo de más de
30 años de actividad ininterrumpida y que fue promovido, ejecutado y administrado por
un organismo centralizado (CNEA) logró que el mismo llegara a estar a nivel similar al
de los países más desarrollados del mundo”, tal vez sea posible seguir aprovechando
éste rasgo “centralizante” que aún posee la CNEA -ya que participa en gran parte de la
cadena de valor nuclear-, integrando eslabones para difundir la nanociencia y la
nanotecnología en paquetes tecnológicos comercializables. Dependerá del análisis de
otras variables no consideradas en este trabajo y de la decisión política siempre
fundamental.

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