Había una vez un niño llamado Juanito que se preguntaba por qué tenía que comer frutas y

verduras. Aunque le encantaba el sabor dulce de los dulces y las golosinas, su mamá siempre le
recordaba la importancia de tener una dieta balanceada que incluyera frutas y verduras.

Un día, mientras jugaba en el jardín de su casa, Juanito se encontró con la Sabia Zanahoria, una
verdura sabia y amigable que conocía todos los secretos de los alimentos saludables. La Sabia
Zanahoria sonrió al ver a Juanito y le dijo: "Querido Juanito, veo que te preguntas por qué es
importante comer frutas y verduras. Permíteme contarte esta maravillosa historia".

Juanito asintió curioso, y la Sabia Zanahoria comenzó su relato:

"Las frutas y verduras son como pequeños tesoros de la naturaleza que nos brindan energía,
vitaminas y nutrientes esenciales para crecer fuertes y sanos. Cada color y sabor de las frutas y
verduras nos ofrece beneficios únicos para nuestro cuerpo y nuestra mente".

Juanito escuchaba atentamente mientras la Sabia Zanahoria continuaba:

"Las frutas, como las manzanas, las uvas y las fresas, nos proporcionan vitaminas y antioxidantes
que fortalecen nuestro sistema inmunológico y nos protegen de enfermedades. Además, tienen
fibra que ayuda a regular nuestro sistema digestivo y mantenernos llenos de energía".

Juanito mostró interés y preguntó: "¿Y las verduras, por qué son importantes?"

La Sabia Zanahoria respondió con entusiasmo: "Las verduras, como las zanahorias, las espinacas y
los brócolis, nos aportan minerales como el hierro, el calcio y el potasio, que son fundamentales
para el crecimiento de nuestros huesos y músculos. También tienen vitaminas que fortalecen
nuestros dientes y nuestra piel".

Juanito asintió con entendimiento y dijo: "¡Entonces las frutas y verduras son como superhéroes
que nos cuidan por dentro!"

La Sabia Zanahoria rió y afirmó: "Exactamente, querido Juanito. Comer frutas y verduras es como
tener un ejército de superhéroes en nuestro plato, listos para proteger nuestra salud y darnos la
energía que necesitamos para jugar, aprender y crecer felizmente".
Juanito agradeció a la Sabia Zanahoria por sus enseñanzas y se comprometió a incluir más frutas y
verduras en su alimentación diaria. Desde entonces, cada vez que veía un plato colorido y variado,
recordaba la importancia de cuidar su salud y disfrutar de los regalos nutritivos que la naturaleza
le ofrecía.

Y así, con su corazón lleno de conocimiento y su cuerpo nutrido, Juanito siguió creciendo
felizmente, sabiendo que las frutas y verduras eran sus aliados para una vida sana y llena de
vitalidad.