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La Biblia e Israel
La Biblia e Israel
1. YO SOY EL CAMINO
La Biblia nos revela que el ser humano fue creado con un libre albedrío, se rebeló contra su
Creador y, desde entonces, ha nacido desconectado o separado de Dios espiritualmente
(Rom.3:23). El pecado lo sacó de su comunión con Dios (Gén.3:24).
Desde entonces el ser humano se encuentra completamente perdido en la vida, como una
oveja sin pastor (Gén.6:11-12; Isa.53:6). Esta es la razón para la increíble cantidad de filosofías,
religiones, metafísica, meditación trascendental, nueva era, cienciología, masonería, psicología,
etc. Que se han inventado en la búsqueda para tratar de encontrar el camino de regreso a Dios
(Prov.14:12).
Dios tuvo que enviar a su Hijo Jesucristo para enseñarnos que una vez que le recibamos en
nuestra vida como nuestro Señor y Salvador, Él es el camino verdadero para regresar a tener
comunión con Dios. Jesús enseñó que realmente hay solo dos caminos (Mat.7:13-14), ¿en cuál
te encuentras tu caminando?
2. YO SOY LA VERDAD
Antes de ser crucificado, Poncio Pilato, gobernador de judea, interrogó a Jesús (Jn.18: 33-38).
Pero ya antes de Pilato, durante la Época de Oro de la filosofía griega y continuando hasta
nuestros tiempos modernos, se han hecho la misma pregunta: ¿Qué es la verdad? La palabra
verdad proviene del hebreo -emunah-; y del griego -aletheia-, significando en los dos idiomas lo
mismo: “lo que no está sujeto a cambio alguno” o “lo que permanece constante” (Heb.13:8).
La mayoría de las verdades humanas dentro del campo de la ciencia y de la filosofía han sido y
son de carácter relativo, pues han cambiado a través del tiempo. Por ejemplo, ¿qué líder, libro
religioso, religión o filosofía nos puede revelar de dónde venimos? ¿Quiénes somos y a dónde
nos dirigimos?
3. YO SOY LA VIDA
El origen de la vida es uno de los misterios más grandes al cual el ser humano se ha enfrentado
por anhelar conocer de dónde venimos, quiénes somos y cuál es nuestro destino eterno. El
ateísmo ha tratado de esforzarse por explicar el origen del universo y de la vida de una forma
absurda, ilógica e irrazonable (Rom.1:21-22).
Su respuesta ha sido que todo ha sido el resultado de un accidente, de una evolución de las
especies a través de millones de años, o ¡hasta de semillas sembradas por extraterrestres!
¡La famosa Teoría de la Evolución ha sido refutada biológica, genética y físicamente! Y otra vez,
fue necesario que el mismo Autor y Sustentador de la vida bajara del cielo, manifestándose
como la vida misma y demostrando su poder sobre la vida y la muerte (Jn.11:25-26; I Jn.1:1-3;
5:11-12; Ap.1:17-18).