SERIE: Cumpliendo Mi Misión LECCIÓN Nº: 6

Tema: ¿Cómo crecer solidamente?

Texto:
Propósito General: - Consagración
Propósito Específico:- Que el oyente permita a Dios hacerle crecer en su fe.
Expositor: -
Fecha: - jueves, 21 de marzo de 2024
Predicado en: -
INTRODUCCIÓN
1) Hay muchas personas que están estancadas en sus emociones, que padecen por
largos años depresión o tristeza.
La persona que se estanca en una emoción no puede seguir creciendo, está como
encarcelada, dominada por la emoción que no le permite pensar positivamente.
2) Al analizar la vida de Pedro vemos que era un hombre inestable emocionalmente, y por
eso permanecía al lado de Jesús, que era un hombre fuerte, a quien todos escuchaban,
que para todo tenía una respuesta, que bendecía, hacía milagros. Pero, cuando se
encontró con un Jesús que era despreciado, vapuleado, abofeteado, latigado,
enjuiciado, todas las fuerzas y coraje de Pedro se fueron a pique, ya que él se sentía
fuerte al lado de quien sacaba su fortaleza, y empezó a debilitarse cuando vio que
maltrataban a Jesús.
a) Aunque Pedro siempre fue inestable veremos que, por todo ese proceso, se
transformará en un hombre maduro.
b) Según investigaciones, se sostiene que el ser humano del futuro será muy capaz de
dar respuestas lógicas a los problemas pero incapaz de que esas respuestas sean
prácticas, le costará mucho superar los desafíos emocionales, lidiar con sus dolores
y protegerse emocionalmente, por eso se expondrá, cada vez más, a las
enfermedades síquicas o sicosomáticas.
La depresión, los trastornos de ansiedad y las enfermedades sicosomáticas ocupan
el primer lugar en este siglo.
c) Estadísticamente somos más inteligentes, más trabajadores, tenemos más
disposición, logramos todo más rápidamente, sin embargo, no podemos responder a
nuestras crisis emocionales.
Por encuestas realizadas, se llegó a la conclusión de que las sociedades de hoy se
componen por seres humanos que no saben disfrutar de la vida, que no pueden
levantarse cada mañana honrando la vida, que no saben valorar el día y agradecer
el estar vivos y permanecen encarcelados por las emociones negativas que los
oprimen y no les permite valorar lo que está por delante.
3) Para salir de la cárcel de las emociones, debemos:
I) ANHELA MADURAR
1) La madurez requiere de un proceso que no es rápido, debemos aprender a aceptar que
el tiempo pasa y transcurrirlo.
A veces no tenemos paciencia con nosotros mismas, queremos ser maduros “ya”, salir
de la circunstancia “ya”, y no aceptamos el proceso ni valoramos lo que nos ocurre en
él.
2) Si tuvieras que hacer fuego, ¿qué utilizarías leña o semillas? Lo natural y lógico es usar
leña, sin embargo Jesús usó semillas cada vez que quiso hacer fuego en la vida de una
persona.
En el Templo Esmirna, edificamos gente y transformamos vidas… Pagina Nº. 1
3) Cuando Jesús quiere lograr algo en tu vida, encenderá la pasión sembrando una
semilla en tu mente, con una idea que te transforme y esperará a que crezca, que se
haga árbol, que dé más semillas y vuelvan a ser sembradas, ese es el proceso. Luego
esas semillas vuelven a dar árboles de los cuales sacamos leña para hacer más fuego.
4) Para crecer y madurar hay que meterse en el proceso de Dios: semillas de libertad, de
independencia, de autoestima, sembradas en la mente, en el espíritu, en el corazón y
que empiecen a echar raíces.
5) Antes de mirar las ramas y las hojas, Dios mira si hay raíces.
6) Decimos: “No veo crecimiento, ni resultados, ni madurez”, y Dios no mira lo externo, Él
siempre sembrará semillas en la mente porque es el más interesado en que
maduremos.
Dios ve en qué área estamos flojos y nos dice: “Empieza a trabajar allí.”
Cuando queremos cambios en la mente tenemos que pedir proceso, no milagros,
porque hay semillas sembradas.
7) Por ejemplo: “Quiero cambiar “ya”; que Dios me saque de la depresión de un día para el
otro.” Y Dios no hará ese milagro específicamente sino te meterá en el proceso de
transformarte de “niño a hombre”, sacar tu mentalidad de nene para llevarte a la de un
hombre maduro.
II) DEJA LA MENTE DE NIÑO
1) El niño o niña vive jugando en el mundo de la fantasía y cree que está viviendo en un
mundo real, es el que siempre quiere tener lo que tiene el otro: “me gustaría tener el
pelo de aquella”, “el cuerpo de la otra”, “los dones de la de más allá”, “el marido de tal”.
2) Son hombres y mujeres inseguras que preguntan todo el tiempo: “me querés o no me
querés”, “me amás o no me amás”, “¿por qué el pastor eligió a aquel y no a mí?”, “¿por
qué la líder le dijo eso a ese discípulo y a mí no me lo dijo?”
3) Son personas que no quieren entrar en el proceso de Dios pero, para madurar, será
necesario.
Se enojan cuando no se les da lo que quieren y se van de la iglesia, dejan el grupo, no
ofrendan, ni adoran, dejan de asistir a los cultos, porque son personas infantiles que
“juegan a hacer cosas” pero no producen nada, viven echándole la culpa a otros todo el
tiempo y ponen excusas: “a mi no me dicen”, “nunca me dan la oportunidad”, “nunca
dan lugar a mi proyecto” (y si Dios te lo dio es para que lo hagas tu, no otro).
III) DEJA LA MENTE DE ADOLESCENTE
1) El adolescente se mueve por conveniencia, dice: “Yo haré esto pero si me reconocen o
aplauden”. Siempre buscan reconocimiento, tratan de ser vistos, como el adolescente
que, cuando el padre le pide que le lave el auto, le pide algo a cambio.
2) Siempre tienen un “sí, pero…” porque su imagen ante los demás es muy importante.
3) La persona a la que no le interesa la imagen es la que reconoce que Dios quiere
sanarla y hacer algo en su vida, sacarla del lugar donde está para lograr sus sueños; y
ya no será una persona dividida, porque no tiene que mentir ni mostrar una doble
fachada.
4) La mente adolescente siempre muestra una doble fachada “que nadie se entere en la
iglesia de…”, “que nadie sepa que…”, “no le digas a nadie cómo vivimos…”, porque
tiene la necesidad de mostrar una imagen que no es real; quiere crecer y a la vez estar
tomado de lo infantil, un día está bien quiere ser un líder de excelencia y a la semana
siguiente desapareció, no es niño ni adulto.
5) Dios validará la disposición de tu corazón y bendecirá tu vida cuando seas íntegro.

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