Pérdida de biodiversidad

La diversidad biológica, o biodiversidad, es el término por el que se hace referencia a la

amplia variedad de seres vivos sobre la Tierra y los patrones naturales que conforma. La
diversidad biológica que observamos hoy es el fruto de miles de millones de años de
evolución, moldeada por procesos naturales y, cada vez más, por la influencia del ser
humano. Esta diversidad forma la red vital de la cual somos parte integrante y de la cual
tanto dependemos.

Con frecuencia, se entiende por diversidad la amplia variedad de plantas, animales y

microorganismos existentes. La diversidad biológica incluye también las diferencias
genéticas dentro de cada especie, por ejemplo, entre las variedades de cultivos y las razas
de ganado. Los cromosomas, los genes y el ADN, es decir, los componentes vitales,
determinan la singularidad de cada individuo y de cada especie.

Algunas de las principales interacciones entre los componentes de la diversidad biológica

son:

 La purificación del aire y el agua.

 La detoxificación y descomposición de los desechos.
 La estabilización y moderación del clima de la Tierra.
 La moderación de las inundaciones, sequías, temperaturas extremas y fuerza del
viento.
 La generación y renovación de la fertilidad del suelo, incluido el ciclo de los
nutrientes.
 La polinización de las plantas, incluidos muchos cultivos.
 El control de las plagas y enfermedades.
 La capacidad de adaptación al cambio

Si bien el proceso de extinción es natural y es un modo de control de las especies, la mayor

causa de alteración del medio es provocada por el hombre. La deforestación, la agricultura
no conservacionista, el crecimiento desmedido de la población, la caza indiscriminada, la
contaminación, entre otros; son factores que aceleran de forma muy peligrosa el ritmo de la
extinción de especies sin darles el tiempo necesario para su reproducción natural. La
destrucción del hábitat natural y los sucesivos ataques a las estructuras de vida de los seres
vivos provoca que muchos de estos (por ejemplo, pandas, tigres, elefantes o ballenas) se
encuentren en proceso de extinción. La desaparición de bosques y humedales, la
fragmentación del espacio y la degradación de los ecosistemas, sumado a los cambios
atmosféricos agudizan estos procesos. Todo ello desestabiliza los ecosistemas y debilita su
capacidad para hacer frente a estos desastres naturales y a otros generados por el hombre.
Pérdida de suelo
El suelo es considerado uno de los recursos naturales no renovables más importantes ya que
es el elemento de enlace entre los factores bióticos y abióticos; además, es el hábitat para el
desarrollo de plantas y, por eso, es necesario conservarlo y mantener su productividad.

Todos los seres vivos dependemos directa o indirectamente del suelo para el desarrollo de
la vida. Es la base para el sustento de los ecosistemas, la agricultura y la ganadería con las
que obtenemos alimentos, agua, minerales y carbono.

El agua es retenida por los poros y, junto a las sales disueltas en el suelo, forman la
solución que es esencial para abastecer a las plantas y darles los nutrientes necesarios para
su desarrollo.

La productividad y el despliegue de cultivos depende de la composición, estructura, materia

orgánica y conservación del suelo. Existen prácticas sumamente dañinas para el suelo, a
saber:

 Mal manejo agrícola.

 Sobrepastoreo.
 Monocultivo.
 Residuos antropogénicos que se esparcen sin cuidado.
 Aplicación de agroquímicos en forma excesiva.
 Urbanización y asfaltado (porque consumen grandes extensiones de terreno).
 Minería con implicancias negativas para la productividad del suelo.
 Erosión.

Acerca de la erosión del suelo, cabe aclarar que reduce su fertilidad porque provoca la
pérdida de minerales y de materia orgánica de su capa más superficial. Esto trae como
consecuencia la desertificación que es el proceso “por el cual terrenos donde antes existían
suelos fértiles se convierten, con el paso del tiempo y por causas antropogénicas, en
terrenos estériles, desérticos o semi desérticos”

Contaminación
Se entiende por contaminación la presencia en el aire, agua o suelo de sustancias o formas
de energía no deseables en concentraciones tales que puedan afectar al confort, salud y
bienestar de las personas, y al uso y disfrute de lo que ha sido contaminado. Estos cambios
se generan en forma natural o por acción del hombre (ya sea realizada de manera directa o
indirecta). Se pueden clasificar a los tipos de contaminantes, de acuerdo con el medio, de la
siguiente manera:
1) Contaminantes de la atmósfera:

 FISICOS: Ruido o radiaciones ionizantes.

 QUIMICOS: Compuestos de azufre, nitrógeno, óxido de carbono, hidrocarburos.
 BIOLOGICOS: Organismos tales como virus, bacterias, hongos que causan
enfermedades y para los cuales el aire actúa como medio de trasmisión.

2) Contaminantes del agua:

 FISICOS: Cambios en el color, pH o temperatura del agua, pérdida de nitidez.

 QUIMICOS: Agroquímicos, detergentes, hidrocarburos, cloruros o residuos
industriales que se encuentren en el agua.
 BIOLOGICOS: Proliferación de microorganismos causantes de epidemias.

3) Contaminantes del suelo:

 FISICOS: Variaciones en la temperatura o la radioactividad que afecten

negativamente a plantas, animales y humanos.
 QUIMICOS: Elementos que alteren la composición del suelo, presencia de
tóxicos, basura, productos químicos o desechos industriales.
 BIOLOGICOS: Microorganismos ajenos a los que presenta el suelo en forma
natural.