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Los Saduceos, los Samaritanos, los Fariseos y los Esenios fueron grupos religiosos judíos que existieron durante el

período del Segundo Templo en la historia antigua de Israel. Cada grupo tenía sus propias interpretaciones de la ley y
prácticas religiosas distintas.

1. Saduceos:

• Los Saduceos eran miembros de una secta judía que representaba principalmente a la élite
sacerdotal y aristocrática en la sociedad judía de aquel tiempo.

• Interpretación de la ley: Se adherían estrictamente a la Torá (el Pentateuco, los primeros cinco libros
de la Biblia) y rechazaban las enseñanzas orales (la tradición rabínica).

• Prácticas religiosas: Estaban a cargo del templo y sus rituales. No creían en la resurrección de los
muertos ni en la vida después de la muerte, lo que los diferenciaba de otras sectas judías
contemporáneas.

2. Samaritanos:

• Los Samaritanos eran descendientes de las tribus del norte de Israel que habían sido deportadas y
luego se mezclaron con colonos extranjeros enviados por los asirios.

• Interpretación de la ley: Reconocían solo la Torá (Pentateuco) como su autoridad religiosa, y tenían
una versión ligeramente diferente del Pentateuco.

• Prácticas religiosas: Tenían su propio lugar de culto en el Monte Gerizim en lugar de Jerusalén, y
observaban ciertas festividades y rituales de manera diferente a los judíos.

3. Fariseos:

• Los Fariseos eran un grupo de judíos devotos que surgieron como una secta piadosa en el período
del Segundo Templo.

• Interpretación de la ley: Aceptaban tanto la Torá como la tradición oral (la interpretación rabínica)
como autoridades religiosas.

• Prácticas religiosas: Se destacaban por su énfasis en la observancia meticulosa de la ley y las


tradiciones religiosas, así como por su participación activa en la vida religiosa y comunitaria.

4. Esenios:

• Los Esenios eran una secta judía ascética que vivía en comunidades apartadas, principalmente en la
región del Mar Muerto.

• Interpretación de la ley: Mantenían una interpretación rigurosa y purista de la ley, con una estricta
observancia de rituales de pureza.

• Prácticas religiosas: Vivían en comunidades cerradas, practicaban el celibato, compartían bienes


comunes y se dedicaban a la oración, el estudio y el trabajo manual.

Cada uno de estos grupos desempeñó un papel único en la historia y la religión judías, y sus diferencias en la
interpretación de la ley y las prácticas religiosas reflejaban una diversidad significativa dentro del judaísmo del
Segundo Templo.

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