REACCIÓN PERSONAL AL LIBRO “Encuentros – Una cita con Jesús” DE

Roberto Badenas
Milagros Idiarte – Ingeniería en Sistemas – Fundamentos del cristianismo

Existen numerosas lecciones que podemos extraer de la vida de Jesús para aplicar en nuestras vidas.

En cada momento de su vida en la tierra, Jesús priorizó el amor hacia las personas, buscando mostrar la
esperanza, el amor y la salvación en cada encuentro. Este nos brinda un principio que deberíamos llevar
con nosotros todos los días: que nuestras acciones hacia los demás puedan dirigir a otros hacia Jesús,
inspirando fe y amor y que cada persona con la que nos encontremos pueda ver en nosotros a Jesús.

“Y así, sabiendo que todo ser humano necesita más amor del que merece, por el simple método de la
comprensión y del respeto absoluto, Jesús descubría tesoros ocultos en corazones”

Jesús no solo buscaba enseñar con palabras, sino también con acciones. Su amor incondicional y su
compasión por los que sufren nos enseña a mirar más allá de nuestras propias preocupaciones y a
acercarnos a los demás con empatía genuina.

“Jesús no viene a impartir su reino por el poder de la fuerza, sino por la persuasión del amor”

A través de los encuentros de Jesús con Nicodemo, la mujer samaritana, Zaqueo y muchos otros,
descubrimos que su mensaje va más allá de las barreras sociales, culturales y religiosas. Jesús no
discriminaba, sino que ofrecía su amor y perdón a todos, independientemente de su pasado o su estatus
social.

Nos desafía a salir de nuestra zona de confort, a abrirnos a los demás y a buscar oportunidades para
compartir el amor de Cristo en nuestro entorno, ya sea en el trabajo, en la escuela o en nuestra
comunidad.

“Al encontrar a Jesús todos descubrimos, como Zaqueo, que ni el Evangelio ni la vida se pueden vivir en
solitario, sino en solidario.”

Jesús buscaba conducir a las personas hacia la realización personal, pero siempre con un enfoque en los
principios que Dios quiere que sigamos.

La paciencia de Jesús, incluso con aquellos como Nicodemo, que pensaban entender la verdad, pero aún
tenían preguntas vacías, es un ejemplo para nosotros. También podemos aprender de cómo Jesús
manejó las preguntas de Pilato, usando cada oportunidad para enseñar la verdad con amor.

Los encuentros de Jesús con las personas de este mundo nos ofrecen valiosas lecciones sobre cómo
interactuar con los demás. Como cristianos que buscamos vivir como Él, la Biblia nos brinda abundante
información sobre la vida y las enseñanzas de Jesús. Debemos permitir que Él nos guíe en esta vida y que
sus enseñanzas queden marcadas en nuestras vidas para la eternidad.
Este libro me recuerda que, al igual que aquellos que encontraron a Jesús hace dos mil años, nosotros
también podemos experimentar su amor transformador y su gracia salvadora en nuestras vidas hoy en
día.