Arco y flecha:

El arco y la flecha son dos herramientas antiguas que han desempeñado un

papel significativo en la historia de la humanidad. Desde tiempos inmemoriales.
¿Saben cómo funciona el arco? ¿y la flecha? Pregunta detonadora para
participación.
La combinación del arco, una estructura curvada que almacena energía
cinética, y la flecha, un proyectil afilado y aerodinámico. ¿en que se puede
comparar el arco y la flecha con la vida diaria?
¿Quién conoce de Gedeón? La historia de Gedeón en la Biblia, encontrada en
el libro de Jueces, ofrece un gran ejemplo de como Dios (el arco) dirijo a
Gedeón (la flecha) hacia la victoria
A continuación, me gustaría proporcionarles un poco de contexto histórico:
En jueces capítulo 6 nos relata cómo los hijos de Israel, al desobedecer a Dios,
fueron entregados en manos de los madianitas durante siete años. Los
madianitas los oprimieron, saqueando sus cosechas y dejándolos sin alimentos
ni ganado.
En la historia, Gedeón es llamado por Dios para liderar al pueblo de Israel en la
lucha contra los madianitas, a pesar de su inicial falta de confianza en sí
mismo. Dios le encomienda una tarea aparentemente imposible: derrotar a un
ejército mucho más grande con tan solo un grupo reducido de hombres.
(Jueces 6:12). La promesa de Dios de estar con Gedeón siempre se encuentra
implícita en el pasaje bíblico en el que el ángel de Jehová se le aparece y le
declara: "Jehová está contigo, hombre poderoso y valiente". Esta declaración
de la presencia de Dios con Gedeón implica una promesa de acompañamiento
y apoyo.
Dios actúa como el arco que guía y dirige la vida de Gedeón. Al igual que un
arco debe ser firme y preciso para lanzar la flecha hacia su objetivo al igual que
Gedeón podemos decir que dios nos prometió estar con nosotros (Mateo
28:20)
Entonces, ¿Qué beneficios nos da escoger a dios como arco?:
Fuerza y Poder: Al igual que un arco tiene la capacidad de almacenar energía y
generar fuerza cuando se tensa, nosotros podemos ver a Dios como una fuente
de poder y fortaleza. La fe en Dios nos puede proporcionar una sensación de
fuerza espiritual que nos ayuda a enfrentar los desafíos y dificultades de la
vida.
Guía y Dirección: Así como un arco guía y dirige la flecha hacia su objetivo,
podemos ver a Dios como una fuerza que guía y dirige nuestras vidas. La fe en
Dios nos puede brindar orientación moral y espiritual.
Propósito y Destino: Al utilizar un arco, la persona tiene un propósito específico
en mente, ya sea cazar, competir o simplemente disfrutar del tiro con arco. De
manera similar, creer que Dios tiene un propósito y un plan para cada uno y
que la fe en Dios nos puede ayudar a descubrirlo.
¿Solo basta tener un arco bueno?
Una buena flecha es crucial en el tiro con arco porque proporciona precisión,
consistencia, penetración, durabilidad y seguridad. Esto ayuda a los arqueros a
apuntar con mayor precisión, mantener la consistencia en sus disparos,
penetrar más profundamente en el objetivo, resistir el impacto repetido.
Gedeón fue una "buena flecha" en la historia bíblica debido a varias cualidades
y acciones que demostró a lo largo de su vida y su llamado por Dios. Estas
cualidades lo convirtieron en un instrumento efectivo en las manos de Dios
para llevar a cabo su propósito. Aquí hay algunas razones por las cuales
Gedeón puede ser considerado una "buena flecha":
Obediencia: A pesar de su inicial falta de confianza y dudas sobre su
capacidad, Gedeón obedeció el llamado de Dios para liderar al pueblo de Israel
en la lucha contra los madianitas. Aceptó el desafío de Dios y confió en Su
guía, demostrando una actitud de obediencia a la voluntad divina (Jueces 6:14-
16).
Valentía: A pesar de estar inicialmente abrumado por la tarea que Dios le
encomendó, Gedeón mostró valentía al aceptar el desafío y enfrentarse al
ejército madianita a pesar de la abrumadora superioridad numérica de su
enemigo (Jueces 7:1-8).
Dependencia en Dios: Gedeón reconoció su propia debilidad y dependencia en
Dios para la victoria. A través de su proceso de purificación del ejército, Dios le
enseñó a confiar en Él como su fuente de fortaleza y poder, y Gedeón aprendió
a depender completamente de Dios para el éxito (Jueces 7:2-8).
Humildad: A pesar de la victoria sobre los madianitas, Gedeón mostró humildad
al atribuir el mérito de la victoria a Dios y no a sí mismo. Reconoció que fue
Dios quien entregó al enemigo en sus manos y lo glorificó por ello (Jueces
7:22; 8:23).
Perseverancia: A pesar de los desafíos y obstáculos que enfrentó, Gedeón
perseveró en su misión y continuó confiando en Dios para la dirección y la
fortaleza. No se rindió ante las dificultades, sino que siguió adelante con
valentía y determinación (Jueces 6-8).
A lo largo de nuestras vidas, a menudo hemos errado en la elección de nuestro
arco, al confiar más en nuestras propias fuerzas y habilidades, o al depositar
nuestra confianza en personas que, al final, nos han lastimado.
Como hemos visto anteriormente, Dios ha prometido estar siempre con
nosotros, pero también depende de nosotros permitir que Dios esté presente
en nuestras vidas.
Así como la flecha sigue una trayectoria desde ese momento en el que se
lanza hasta su objetivo la misma flecha va sorteando obstáculos en el camino
de manera similar nosotros nos enfrentamos desafíos día a día que nosotros
debemos superar con la ayuda de Dios
Ser una buena flecha es importante
En un pasaje relevante, el ángel de Jehová se aparece a Gedeón y lo reconoce
como un "hombre poderoso y valiente". La respuesta de Gedeón refleja su
incredulidad y confusión ante la difícil situación que enfrenta Israel. Gedeón
cuestiona por qué, si Jehová está realmente con ellos, han sufrido tanto. Pero
aquí dios siempre estuvo con Israel solo que Israel se alejó de dios.
¿Quién no se ha sentido como Gedeón en algún momento? ¿Quién no ha
experimentado miedo, inseguridad sobre el plan de Dios, o la sensación de ser
abrumado por los problemas, al punto de sentir que carece de valor o
propósito?
Si alguna vez te has sentido así, recuerda que Dios siempre ha estado y estará
con nosotros. Pero esta afirmación conlleva un compromiso. No es suficiente
tener buenas intenciones para alcanzar el propósito que Dios tiene para
nosotros. También debemos ser la flecha perfecta. ¿Cómo logramos eso?
Siendo perseverantes, humildes, dependiendo de Dios, siendo valientes y
obedientes.
Debemos decirle al Señor: "Quiero que tú guíes mi camino como el arco que
dirige la flecha, y quiero ser tu mejor flecha".
Señor, encomiendo mi vida a Ti, para que seas mi guía constante como el arco
que dirige la flecha, y anhelo ser instrumento en tus manos, dispuesto a seguir
tu voluntad y ser utilizado de la mejor manera posible para cumplir tu propósito
en mi vida.