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SERIE

REBELDÍA, CASTIGO, ARREPENTIMIENTO Y RESTAURACIÒN

Dios desea sanar tu vida espiritual y emocional.


Jueces 6:12
Y el ángel de Jehová se le apareció, y le dijo: Jehová está contigo, varón esforzado y valiente.

Hace unas semanas hablamos de la respuesta de Dios al clamor de Israel, según el v. 6 Los
Israelitas se morían de hambre en manos de los madianitas por que Dios lo permitió, esto sucedió
en consecuencia de la rebeldía contra Dios. Entonces los israelitas clamaron al SEÑOR por ayuda. A
pesar de la rebeldia de este pueblo que Dios habia libertado de la esclavitud de Egipto. Dios
levantó de la tribu de Manasés un Guerrero valiente. Su nombre es Gedeón llamado también como
Jerobaal, que significa «que Baal se defienda a sí mismo», porque él destruyó el altar de Baal.
Gedeón es recordado por ser valiente al desafiar a sus enemigos con tan solo 300 soldados.

Quisiera que observemos como Gedeón pudo vencer sus temores cambiando su actitud al
obedecer y confiar en lo que Dios había dicho de él. …Jehová está contigo, varón esforzado y
valiente.

1.- Dios llama a un hombre temeroso.


En medio del clamor y los temores que vivía el pueblo de Israel. Dios llama a Gedeón un israelita,
hijo de Joás de un pequeño clan de Abiezer el Azbierita. No se conoce mucho, solo se sabe que es
descendiente de la tribu de Manases. Dios no busca lo mejor de la tribu de Manases, ni del pueblo
de Israel. El llamado de Dios para Gedeón tiene un propósito personal para Gedeón que bendecirá
al pueblo de Dios. Dios hoy también busca ayudarnos a superar nuestras debilidades. Pregunte a
los que asisten al culto de célula ¿Cuáles son tus debilidades?
Debemos ser observadores de los planes de Dios para Gedeón, quisiera poner especial atención
en las respuestas de Gedeón a la declaración que el Señor hace de él ¡Jehová está contigo,
varón esforzado y valiente!

1.1 La respuesta de Gedeón, un hombre al que le faltaba fe y esperanza.


—Señor —respondió Gedeón—, si el SEÑOR está con nosotros,
● ¿por qué nos sucede todo esto?
● ¿Y dónde están todos los milagros que nos contaron nuestros antepasados?
● ¿Acaso no dijeron: “El SEÑOR nos sacó de Egipto”?
Pero ahora el SEÑOR nos ha abandonado y nos entregó en manos de los madianitas.
Que difícil debe ser para aquellos que han escuchado las palabras del Señor y solo son como un
recuerdo o una bonita y admirable historia, o una promesa que para ellos nunca será realidad. Las
respuestas de Gedeón con preguntas que suenan más a reproche y reclamo. Pues él concluye y
formula una respuesta basada en su experiencia y no en las palabras del Señor. el SEÑOR nos ha
abandonado y nos entregó en manos de los madianitas.
Recordemos las palabras del profeta que Dios envió en respuesta al clamor del pueblo de Israel: v.
8-10 «Esto dice el SEÑOR, Dios de Israel: “Yo te saqué de la esclavitud en Egipto. Te rescaté de
los egipcios y de todos los que te oprimían. Expulsé a tus enemigos y te di sus tierras. Te dije:
‘Yo soy el SEÑOR, tu Dios. No debes rendir culto a los dioses de los amorreos, en cuya tierra
ahora vives’. Pero no me hiciste caso”

¿Recuerda de donde le sacó el Señor antes de encontrarse hoy en su iglesia? ¿Antes de ser
invitado a esta actividad de adoración?

1.2 Gedeón el hombre que perdió la esperanza en la palabra de Dios. Para Gedeón pudo más
lo que sus ojos miraban, lo que sufría él con su pueblo, que las palabras del Señor por medio del
profeta. Gedeón prefirió concluir que:
¡El SEÑOR nos ha abandonado y nos entregó en manos de los madianitas!
El castigo por 7 años al pueblo de Israel fue por su rebeldía delante de Dios. Rindiendo culto a los
dioses de los amorreos. Gedeón se quejó de Dios, no busco humillarse y clamar al Señor por
misericordia. Debemos aceptar nuestra rebeldía, debemos aceptar que si hemos pecado tarde o
temprano las consecuencias de nuestro pecado y nuestra obstinada manera de vivir traerá
consecuencias dolorosas y vergonzosas.

1.3 El creyente debe aprender a vivir por fe y constante obediencia de la palabra de Dios.
Santiago 1 Ojalá pueda leer en casa este capítulo que encaja bien con las debilidades que el
creyente enfrenta en el día a día. Santiago nos enseña que la fe en la palabra de Dios da frutos de
obediencia. v.3. Siempre que se pone a prueba la fe, la constancia tiene una oportunidad para
desarrollarse. v.4 Cuando la constancia se haya desarrollado plenamente, serán perfectos y
completos, y no les faltará nada.
v12. Dios bendice a los que soportan con paciencia las pruebas y las tentaciones, porque después
de superarlas, recibirán la corona de vida que Dios ha prometido a quienes lo aman. v.21 Así que
quiten de su vida todo lo malo y lo sucio, y acepten con humildad la palabra que Dios les ha
sembrado en el corazón, porque tiene el poder para salvar su alma. 22 No solo escuchen la palabra
de Dios; tienen que ponerla en práctica. De lo contrario, solamente se engañan a sí mismos.

2. Confía en el Señor: ¡Yo soy quien te envía!


Jueces 6:14 Entonces el Señor lo miró y le dijo: —Ve tú con la fuerza que tienes y rescata a Israel
de los madianitas. ¡Yo soy quien te envía!
El Señor miró a Gedeón y le habló una vez más. Esta actitud de paciencia con el hombre es parte
de la naturaleza de nuestro Señor, él no desea que nadie se pierda, siempre mira lo que Él puede
hacer en tu vida, si le crees y le obedeces a sus mandamientos. Si algo conocemos de Dios es su
gracia constante por el hombre, Dios es paciente y espera que cambiemos nuestra conducta. Si
actualmente te encuentras enredado por las consecuencia de tu rebeldía y de tu desobediencia.
Dios te está llamando a corregirte. Abandona tu estilo de vida y vuélvete a Dios.

2.1 Gedeón tenía una fe débil y su confianza en la palabra de Dios se había desvanecido.
Dios una vez más le llamó diciéndole: Ve tú con la fuerza que tienes… Querido hermano que me
escuchas al parecer Gedeón no sentía en ese momento fuerzas de ningún tipo, ni de voluntad, ni
de confianza, ni físicas. Pero Dios estaba viendo su corazón y conocía su potencial si Gedeón daba
un paso de obediencia y fe.

2.2 Dios le da propósito a su llamado: Rescata a Israel de los madianitas…


Querido hermano que me escucha, Dios ha depositado tesoros extraordinarios en tu vida que él
desea desarrollar para bendecir a su pueblo, tu familia y las siguientes generaciones. El Señor no
tiene dudas, no miente. Dios conoce tu corazón y él está proveyendo la fuerza de voluntad,
alentandote para que tengas confianza.

3.2 Confía en el Señor: ¡Yo soy quien te envía!


Estas palabras que escuchó Gedeón le eran muy familiares. Pues Dios habló a Moises de la misma
manera, y sabía que Moises también tuvo temor de enfrentar al Faraón. Aquella palabra del Dios
todopoderoso ahora le estaba llamando diciendo ¡Yo soy quien te envía!.
Gedeón sabía que también Dios habló a Josué y estuvo con él diciendo Josué 1:9 Yo soy quien te
manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Señor y Dios,
estaré contigo dondequiera que vayas.

Conclusión: ¿Recuerda de donde le sacó el Señor? Yo estaba en pecado y amaba el pecado.


Los resultados de mi rebeldía fueron dolorosos y vergonzosos. El castigo por mi pecado fue muy
alto. Recuerdo que clame al Señor suplicando misericordia y Él me dio esperanza diciendo: si se
humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se
convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y
sanaré su tierra. Dios nos llama al cambio de conducta, al arrepentimiento. Si dieras un paso de fe
y confianza en la palabra de Dios ¡Yo soy quien te envía! Estoy convencido que como estuvo con
Gedeón también estará contigo.

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