CAP.

4:

LAS CONSECUENCIAS DE LA ACEPTACIÓN DE LA

HERENCIA

LA ACEPTACIÓN DE LA HERENCIA Y SUS CONSECUENCIAS

CV. Una herencia podía ser 1.aceptada en forma pura y simple o

2.bajo beneficio de inventario
La distinción, radicaba en la extensión de la responsabilidad del heredero en uno y otro
tipo de aceptación.

CCCN. Eliminó la aceptación bajo beneficio de inventario.

Pero resulta conveniente conocer de qué se trataba para comprender cabalmente el actual
régimen.

LA RESPONSABILIDAD DE LOS HEREDEROS

A. EL BENEFICIO DE INVENTARIO EN EL CV.
El beneficio de inventario es una institución que proviene de la Constitución Justinianea
del año 531 y que constituía una MODALIDAD DE LA ACEPTACIÓN de la herencia, mediante
la cual el heredero limitaba su responsabilidad por las deudas y cargas de la sucesión hasta
la concurrencia del valor de los bienes que había recibido de la herencia. Al ser una
modalidad se lo podía separar del acto jurídico de aceptación y, por lo tanto, se podía
renunciar al beneficio o perderlo.
En razón de ello, implicaba que el heredero mantuviera efectivamente separado su
patrimonio personal del patrimonio hereditario.
Azpiri: sostenía que así, el patrimonio del heredero quedaba distribuido en dos masas de
bienes claramente diferenciadas: los que recibió por herencia y que se destinarán en forma
primordial a pagar las deudas que dejó el causante y a cumplir con los legados y el que ya
poseía con anterioridad a la transmisión sucesoria que no podrá ser efectuado por dichas
deudas y legados.
Por lo tanto, el patrimonio de la herencia mantenía su unidad son confundirse con el
patrimonio del heredero. Está situación constituía una excepción al principio de
unidad del patrimonio.
En CV el concepto de aceptación de herencia con beneficio de inventario se veía
claramente en el art. 3371: “El heredero que aceptaba la herencia con beneficio de
inventario, esta obligado por las deudas y cargas de la sucesión solo hasta la concurrencia
del valor de los bienes que ha recibido de la herencia. Su patrimonio no se confunde con el
del difunto, y puede reclamar como cualquier otro acreedor los créditos que tuviese
contra la sucesión”
A modo de síntesis: la consecuencia más importante era que el heredero veía limitada su
responsabilidad por las deudas y las cargas de la sucesión a los bienes de la herencia, sin
que se produjera una confusión de patrimonios entre el patrimonio del causante y del
heredero.

Pero ¿Cómo era en el código civil originario?

Disponía una responsabilidad ultra vires hereditatis del heredero (el heredero responde
por las deudas del causante no solo con los bienes hereditarios, sino también con sus
propios bienes), la cual solamente se podía limitar mediante beneficio de inventario en
forma expresa por parte del heredero. Tenía una FORMA: EXPRESA, ante el juez de
la sucesión, en el término de 10 días.
La responsabilidad plena e ilimitada del heredero por las deudas y cargas sucesorias era el
principio general y el beneficio lo excepcional.

Régimen después de la ley 17.711:

Produjo un cambio radical. Se modificaron los art. 3363 y 3366 del CV.
Art. 3363 CV: “toda aceptación de herencia se presume efectuada bajo beneficio de
inventario, cualquiera sea el tiempo en que se haga. La realización de actos prohibidos en
este código al heredero beneficiario importara la pérdida del beneficio”
Art. 3366 CV: “el heredero perderá el beneficio si no hiciese el inventario dentro del plazo
de tres meses contados desde que hubiese sido judicialmente intimado por parte
interesada. Luego de hecho el inventario, el heredero gozará de un plazo de treinta días
para renunciar a la herencia, vencido el cual se lo considerara aceptante beneficiario”.

A partir de esta reforma, la aceptación de herencia bajo beneficio de inventario se

transformó en la REGLA, estableciéndose expresamente su presunción legal y, por lo tanto,
consagrándose el sistema de responsabilidad ultra vires hereditatis.
Del texto de los artículos, surge que a diferencia del régimen del CV originario, en
cualquier momento en que el heredero aceptara la herencia, este acto se reputaba hecho
bajo beneficio de inventario, sin necesidad de manifestación de voluntad expresa en ese
sentido, y por otro lado, también se tenía la posibilidad de limitar su responsabilidad ante
un a intimación judicial, realizando el inventario dentro de los tres meses de la misma.
La regla que disponía el derecho al beneficio de inventario era aplicable a todos los
sucesores universales, sin importar su fuente de llamamiento, y al legatario de cuota no se
le otorgaba el beneficio porque su responsabilidad era siempre intra vires hereditatis.
Esta reforma fue criticada por la doctrina: por las contradicciones que surgían al dejar
subsistentes normas del régimen originario.
Ej: colisión entre art. 3363 , 3329 y 3359, en razón de que el primero presumía que toda
aceptación era realizaba bajo beneficio de inventario; el segundo que en todos los casos
de aceptación tácita la sucesión era considerada aceptada pura y simple y el tercero que el
sucesor universal no podía aceptar la herencia con el beneficio si ha realizado actos de
heredero puro y simple.

Caracteres de la aceptación beneficiaria en el régimen dispuesto por la ley 17711:

 presunción legal: cuando se efectuaba la aceptación de herencia regia la
presunción de acogerse al beneficio. Era iuris tantum, es decir se podía renunciar
al beneficio o perderlo por realizar actos prohibidos o bien aceptar en forma pura y
simple.
 Individual: a cada heredero.
 Voluntario: como se trataba de un beneficio quedaba a criterio del heredero
acogerse o no.
 Prohibición de limitar el beneficio: el causante en su testamento no podía haber
impuesto al heredero que aceptase la sucesión sin beneficio de inventario. Es decir
que el derecho que le asistía al heredero de la aceptación beneficiaria no podía ser
limitado por disposición testamentaria.

B. CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL. RÉGIMEN VIGENTE

En el actual código desaparece el instituto del beneficio de inventario como institución
autónoma. Ello no obsta que a lo largo de su articulado se incluyen normas que nos
clarifican la situación del heredero, en cuanto a la separación de patrimonios y a su
responsabilidad, ambas cuestiones relacionadas con el derogado beneficio de inventario
como variante de aceptación.
En el régimen actual, dichas normas (respecto a la separación de patrimonios y la
responsabilidad del heredero) se aplican en toda aceptación.

Los artículos que vienen a instaurar el régimen de responsabilidad del heredero por las
deudas y cargas de la sucesión son:
Art. 2317: “El heredero queda obligado por las deudas y legados de la sucesión solo hasta
la concurrencia del valor de los bienes hereditarios recibidos. En caso de pluralidad de
herederos , estos responden con la masa hereditaria indivisa”.

El régimen se completa con el art. 2280, 3º párrafo: “en principio, responden por las
deudas del causante con los bienes que reciben, o con su valor en caso de haber sido
enajenados”.
HEREDEROS:
REGLA Se consagra de pleno derecho la responsabilidad limitada (intra vires
hereditatis) y la separación de patrimonios.
En relación a la situación de los legatarios, se consagra la limitación de la responsabilidad ,
asi el Art. 2318: “si el legado es de una universalidad de bienes y deudas, el legatario solo
queda obligado al pago de las deudas comprendidas en aquella hasta el valor de los bienes
recibidos…”.

Pero si bien es la regla, se establecen ciertos supuestos de excepción en los cuales la

responsabilidad del heredero será limitada y, por lo tanto, deberá responder con sus
propios bienes.
Así, el art. 2321 extiende la responsabilidad a los bienes del sucesor para el pago de las
deudas y cargas de la sucesión produciéndose de esta forma una confusión de patrimonios
en los siguientes casos:
a. No realiza el inventario en el plazo de 3 meses desde que los acreedores o
legatarios lo limitan judicialmente a su realización: Este supuesto ya se encontraba
consagrado en el CV.
b. Oculta fraudulentamente los bienes de la sucesión omitiendo su inclusión en el
inventario: igual sanción estaba en el CV. La ocultación debe haber sido efectuada
con el propósito de apropiarse de determinados bienes en perjuicio de los terceros
interesados.
c. Exagera dolosamente el pasivo sucesorio.
d. Enajena bienes de la sucesión, excepto que el acto sea conveniente y el precio
obtenido ingrese a la masa: en el CV el beneficio de inventario cesaba ante la
realización de actos de disposición sin observar las formalidades impuestas por ley.

La revisión en paralelo con el régimen anterior es importante, ya que pese a la supresión

del instituto del beneficio de inventario como tal, las consecuencias ante la realización de
determinados actos continua siendo idénticas: confusión de patrimonios y trasformación
en responsabilidad ultra vires hereditatis.
Por otro lado, el art. 2295 establece otro supuesto en que cese la regla de responsabilidad
intra vires hereditatis:

Art.2295: “El heredero que oculta o sustrae bienes de la herencia es considerado

aceptante con responsabilidad ilimitadas, pierde el derecho de renunciar, y no tiene parte
alguna en aquello que ha sido objeto de ocultamiento o sustracción. En el supuesto de que
no pueda restituir la cosa, debe restituir su valor, estimado al momento de la restitución”.

En ambos supuestos (art.2295 y 2321), el heredero deberá responder también por los
daños ocasionados, de acuerdo a las reglas generales de responsabilidad civil.

CCCN Ley 17711 CCCN

Resp. Ultra vires Resp. Intra vires. Resp. Intra vires
Hereditatis. Hereditatis hereditatis
Beneficio de inventario. Benef de inventario se derogo el ben.inv
La excepción. Es la regla gral y se presume. Separación de patri de
plenoD.
LA ACEPTACIÓN Y LA LIMITACIÓN DE LA RESPONSABILIDAD
REGLA: La responsabilidad intra vires , por lo que no existe el derecho de opción de
acogerse a esta modalidad u optar por una responsabilidad ilimitada, razón por la cual no
existe plazo alguno.
El heredero, desde que es investido como tal, responderá de manera limitada y gozará una
efectiva separación de patrimonios. Asimismo, fuere la aceptación de herencia expresa o
tacita, en ambos supuestos la regla es la responsabilidad limitada. Por lo tanto, a pesar de
la derogación del instituto, sus efectos se asimilan a la regulación del CCCN.

A. INVENTARIO EN EL CCCN
PLAZO:
Sin perjuicio de la eliminación del instituto del beneficio de inventario, el heredero
también debe realizar un inventario. Para su confección el Código consagra igual solución
que el anterior.
Se otorga un plazo de 3 meses. Desde que los acreedores o los legatarios hayan
intimado judicialmente a los herederos a realizar el inventario. No se admite prórroga al
plazo.
Para contar el plazo que es de caducidad, es necesario que la intimación judicial se
encuentre firme.
Este plazo difiere del plazo otorgado para aceptar o repudiar la herencia, ya que en el
presente supuesto nos encontramos ante la hipótesis de aquel titular de vocación
hereditaria que ya aceptó la herencia, luego de la intimación judicial, y reviste por tanto
carácter de heredero. Entonces, no es una exigencia ineludible, porque la obligación solo
surge si media intimación judicial.

FORMALIDADES:
La regulación se encuentra conjugada entre el CCCN y los Códigos de forma.
Art. 2341: para su confección , requiere la citación de los herederos, acreedores y
legatarios cuyo domicilio sea conocido, así como el representante del organismo
recaudador fiscal y las partes, realizándose con las partes que concurran.
(ver código procesal santa fe )

Además de las normas procesales, son aplicables las previsiones del Código civil y
comercial. El art. 2342 dispone: “Denuncia de bienes. Por la voluntad unánime de los
copropietarios de la masa indivisa, el inventario puede ser sustituido por la denuncia de
bienes, excepto que el inventario haya sido pedido por acreedores o lo imponga otra
disposición de la ley”.
Es decir, se admite la sustitución del inventario por la denuncia de bienes pero con ciertos
requisitos:
1) que se aunánime por todos los herederos y
2)que la confección de inventario no hubiera sido perdida por algún acreedor o dispuesta
por la ley.
Se considera acertada la inclusión de dicha alternativa, ya que ella privilegia el respeto por
la autonomía de la voluntad y la libertad, y en segundo lugar, incorpora una alternativa
simplificada ante la existencia de acuerdo unánime entre los copropietarios para clarificar
la situación del activo y el pasivo sucesorio.
Asimismo, se incluye en el Código la posibilidad de impugnar el inventario, tanto por parte
de los copropietarios de la masa indivisa como de los acreedores y legatarios, quienes
pueden impugnar en forma total o parcial dicho inventario y el avalúo.
Nada se dispone sobre los gastos por la confección del inventario, sin embargo
comprendemos que se tratan de cargas comunes a la herencia.

EFECTOS DE LA OMISIÓN DE INVENTARIO

El art. 2321 estipula que el heredero responderá con sus propios bienes ante la omisión de
realización del inventario en el plazo fijado o establecido.
El heredero no pierde su calidad de tal, pero surge así el interrogante sobre si estamos
ante una responsabilidad ilimitada o si el heredero debe responder con sus propios bienes
solo hasta el valor de los que ha recibido por herencia.
Hernández, Ocampo, Ugarte: afirman que el inventario debe ser solo un medio de prueba
de los bienes que integran la herencia frente a los acreedores y demás terceros
interesados, pero su falta no puede suponer la responsabilidad ilimitada sino que el
heredero, como en la legislación comparada citada, cargará con la prueba de la existencia
y cuantía de los bienes de la herencia.

B. DERECHO DE RENUNCIA

CV. admitía la renuncia posterior a la confección del inventario.

CCCN. Luego de conocida su situación económica ya no se encuentra presente.

EFECTOS DE LA ACEPTACIÓN

CV. Los efectos eran : a)separación de patrimonios y b)limitación de responsabilidad.

A. SEPARACIÓN DE PATRIMONIOS
CCCN. No hay una norma que consagre la no confusión de créditos y deudas entre el
heredero y la sucesión; sin embargo para su estudio, debemos realizar un análisis
sistemático y remitirnos a las disposiciones del Código sobre confusión de obligaciones.
Art. 931: “la obligación se extingue por confusión cuando las calidades de acreedor y de
deudor se reúnen en una misma persona y en un mismo patrimonio”.
Dado que la separación de patrimonios es la regla en el nuevo régimen, el heredero es
considerado como un tercero en relación con la herencia. Por lo tanto, puede reclamar
como cualquier acreedor los créditos que tuviese contra la sucesión.
Se mantiene la posibilidad de que el heredero ejerza la acción subrogatoria.
En el supuesto de que el heredero hubiere pagado de su propio peculio créditos de
terceros contra la sucesión, tiene la facultad de ejercer la subrogación legal.
También es posible que un heredero accione contra la sucesión. En efecto, si existe un
heredero con responsabilidad limitada y demás herederos que hayan perdido la
responsabilidad limitada como consecuencia de la sanción prevista en los diversos
supuestos que establece el art. 2321. En este caso, la acción se debe dirigir contra estos
últimos porque son responsables ultra vires hereditatis.
En definitiva, como consecuencia del principio de separación de patrimonios, el
administrador podría iniciar acciones judiciales contra el heredero deudor.

B. LIMITACIÓN DE RESPONSABILIDAD
Previamente es necesario explicar las dos modalidades de responsabilidad intra vires
hereditatis, que rige en la actualidad en nuestro sistema.

1.Pro viribus hereditatis: Jorge perrino, en el contexto del derogado código, explicaba: la
responsabilidad queda fijada en un límite cuantitativo hasta el equivalente del valor de los
bienes de la herencia. Cuando es pro viribus los acreedores de la herencia toman tanto
bienes de la sucesión como bienes del heredero, siempre y cuando el valor del conjunto de
los bienes ejecutados no exceda el valor total de los bienes de la sucesión.
Por lo tanto el heredero será responsable con sus bienes propios solo hasta el límite del
valor de los bienes sucesorios inventariados, pudiendo quedar afectado al pago de las
obligaciones hereditarias con su patrimonio personal, al cual se incorporaron los bienes
hereditarios.

2.Cum viribus hereditatis: aquí la responsabilidad se fija por un límite cualitativo y

objetivo, el heredero solo responde con los bienes heredados, no con su valor, sino con los
bienes, quedando fuera de toda acción por parte de los acreedores de la sucesión sus
bienes personales.

B1. LA CUESTION EN EL CV:

La primera parte del derogado art. 3371 consagraba la limitación de responsabilidad del
heredero: “el heredero que acepta la herencia con beneficio de inventario, está obligado
por las deudas y cargas de la sucesión solo hasta la concurrencia del valor de los bienes
que ha recibido de la herencia”.
La interpretación literal de la frase “hasta el valor de los bienes” podía conducir a
responsabilizar personalmente al heredero, es decir, considerar que su responsabilidad se
extendía hasta cubrir el valor de los bienes hereditarios cuando se hubieren perdido o
enajenado los que integraban el caudal relicto.
Lo que disponía el art. 3372. Al determinar con que bienes respondía el heredero por las
deudas de la sucesión, se dejaba en claro que se incluían solamente los bienes que el
causante había dejado al momento de su muerte y no los que le hubiere dado en vida
aunque debieran ser colacionados; igual solución se daba para los bienes dados a sus
coherederos en vida y que el heredero tenía derecho a colacionar.
Como vemos, las posiciones doctrinarias tenían fundamentos legales en ambos sentidos:
pro y cum.

B2. RÉGIMEN VIGENTE EN EL CCCN

¿Cómo organiza la responsabilidad limitada el régimen del CCCN?
El art. 2280, en su parte pertinente, dispone: “En principio, responden por las deudas del
causante con los bienes que reciben, o con su valor en caso de haber sido enajenados”. Y
en la parte de responsabilidad de herederos y legatarios en el art. 2317: “el heredero
queda obligado por las deudas y legados de la sucesión solo hasta la concurrencia del valor
de los bienes hereditarios recibidos. En caso de pluralidad de herederos, estos responden
con la masa hereditaria indivisa”.
Entonces debemos esclarecer si el actual código adopta una responsabilidad cum o pro.
La última parte del art. 2280 establece, respecto de la situación de los herederos , que, en
principio responden por las deudas del causante con los bienes que reciben, o con
su valor en caso de haber sido enajenados.
Es decir, herederos responden, en principio, con los bienes que reciben; por lo tanto, se
consagra de manera expresa una responsabilidad CUM VIRIBUS HEREDITATIS. O sea, se
conforma un patrimonio autónomo destinado al pago de deudas y cargas de la sucesión.
Sin embargo, una vez pagados los acreedores y legatarios conocidos, el heredero mantiene
la responsabilidad limitada, aunque no con los bienes recibidos, sino con su valor. Es decir
se transforma en una responsabilidad PRO VIRIBUS HEREDITATIS. Con su valor en caso de
haber sido enajenados.

ADMINISTRACIÓN DE LOS BIENES POR EL HEREDERO BENEFICIARIO

A.EN EL CV:
La administración de la herencia constituía un deber del heredero beneficiario.
Zannoni: el heredero beneficiario, es simultáneamente, administrador en cosa propia y,
mientras satisfaga los preceptos legales referidos a la administración beneficiaria, obra
también en beneficio de los acreedores y legatarios, puesto que es en interés de estos
últimos que la ley impone las restricciones a la gestión libre de la comunidad, y señala la
forma de realizar los bienes para satisfacer las deudas y cargas.
Esta administración no es equiparable a la realizada por el síndico en un concurso o a la del
administrador de una persona jurídica.

B.EN EL CCCN:
Regula específicamente el estado de indivisión.
Las funciones del administrador (judicial o extrajudicial) son las de:
a. Administración de los bienes
b. Liquidación
c. Rendición de cuentas
Funciones del administrador judicial:
En el supuesto de que se haya iniciado el proceso sucesorio y, por consecuente, se haya
designado un administrador judicial, el art. 2353: