patrimonio Cultural • La didáctica del patrimonio durante décadas ha estado ligada a la enseñanza del Patrimonio histórico-artístico.
• La Disciplina de referencia ha sido la Historia del Arte.
• Relacionada a situaciones de enseñanza formal o de
ocio. CONSECUENCIAS • La crítica especializada, el simple consumo y la especulación. • Se menosprecia una actividad humana cotidiana: hacer patrimonio • Estudios fundamentados en la mera clasificación y descripción • Análisis superficiales y poco significativos • Observación del patrimonio, desde una perspectiva exclusivamente artística exclusivista. • Observación del patrimonio como un mero objeto de consumo. • El patrimonio cultural está más ligado al ocio que a planteamientos educativos y a experiencias vívida de los ciudadanos. El estudio del patrimonio cultural se realiza comúnmente desde posiciones ligadas a abstractas concepciones formales y metodológicas haciendo uso de: Complejos y oscuros conceptos estilísticos Normas y pautas ininteligibles sobre la percepción artística. Complicado carácter simbólico del elemento histórico- artístico que se trata de interpretar. Esta situación el patrimonio provoca que el patrimonio no pueda ser entendido por la mayoría sino por un pequeño grupo de expertos, pero nunca por el ciudadano medio que carece de recursos intelectuales para poder entender este complicado lenguaje. La didáctica del patrimonio cultural parte de un modelo tradicional muy arraigado caracterizado por: • Una selección del patrimonio en referencia a lo histórico artístico. • Una enseñanza de la Historia del Arte, influenciada por la universidad. • En consecuencia tenemos una ciudadanía pasiva que contempla el patrimonio como obra de arte, por su significado de grandiosidad y belleza artística y estilística La cultura patrimonial que se imparte en la escuela es de tipo academicista. Su finalidad básica es el conocimiento de hechos e informaciones de carácter cultural, ilustrado y/ o centrado en aspectos anecdóticos, Relacionado con prácticas conservacionista, vinculada al valor económico y/o sentimental que el elemento patrimonial tiene en la vida cotidiana de los individuos, de ahí la conservación a ultranza de todos los elementos patrimoniales que se consideren propiamente como patrimonio. La enseñanza del patrimonio cultural desde el modelo tradicional tiene una visión simplista y fragmentaria del patrimonio, que trae como consecuencia su uso de manera puntual en la programación didáctica La enseñanza del patrimonio cultural desde el modelo tradicional desde el punto de vista metodológico. • Renuncia a la participación del alumno lo acostumbra a ser un elemento pasivo en el proceso de enseñanza y aprendizaje • El único elemento activo es el profesor que explica lo que los estudiantes tiene que aprender de forma memorística. • La interpretación “in situ” del patrimonio se hace como actividad de ocio, más que como actividad integrada en la explicación impartida en el aula. Efectos: • Falta de compromiso de los ciudadanos con el patrimonio como “hecho social, con el que deben de tener una actitud participativa, desde la crítica comprometida con la mejora de una sociedad que busca sus signo de identidad colectiva en sus referentes patrimoniales. • Una visión del patrimonio, centrada en el “patrimonio histórico-artístico” eludiendo otros tipos de manifestaciones culturales que pueden y deben ser concebidas como patrimonio cultural. • La dinámica social tiende “a privilegiar los valores individuales, la obsolescencia y la novedad, más que los valores del pasado, la cultura y la identidad de un colectivo. Estos procesos tienden a generar una percepción de mayor alejamiento entre las nuevas generaciones y los elementos patrimoniales que los rodean”. “Frente a estas realidades, vienen surgiendo una serie de inquietudes sobre cómo establecer estrategias educativas que sirvan para potenciar la valoración, conservación y disfrute del PC desde una nueva óptica que tome en cuenta los nuevos elementos que han venido surgiendo.” García Valecillo (2007). “El patrimonio no es referencia exclusiva del pasado y de lo monumental. Está asociado con la vida cotidiana, el presente, y el futuro de los pueblos, etnias, naciones y comunidades donde se crea y se sigue creando… Esto quiere decir que el patrimonio ha de ser generador de riqueza, no sólo en términos económicos sino como referente de identidad de individuo y de grupo social…”. (Convenio Andrés Bello).