UNIVERSIDAD VIRTUAL DE

NEGOCIOS.
Dinámica de las empresas familiares.

16 DE SEPTIEMBRE DE 2023
ALUMNO.- ALEXIS DIEGO MORENO
Carrera.-Administración de Capital Humano.
Las empresas familiares son empresas que fueron creadas por como dice el
nombre, pues una familia, y se gestiona gracias a ella, sin embargo, lo que más
la caracteriza es que está hecha en forma de sucesión. Normalmente años atrás
se acostumbraba a que el primer hijo que fuera varón, era el que iba a tener la
gestión del negocio, ya en los últimos años, puede ser el primer hijo o hija, pero
mayormente eso siempre afecta a las familias.

Al principio de la fundación de la empresa, supongamos que cuando es una

pyme, siempre todo eso está a cargo del padre, que es quien está a cargo de la
toma de decisiones y luego se va heredando la empresa como ya dije
anteriormente, en la sucesión.

Las empresas familiares siempre transmiten valores y culturas que fueron

creadas con el tiempo en la familia, para generar un lazo laboral.

La mayor parte de las acciones, aunque no sean de la familia, pero si la mayor

parte, está a cargo de los padres o algunos miembros familiares.

Para que una empresa se considere familiar, uno de sus miembros tiene que
tener al menos el 20% de los derechos de voto y mayor porcentaje de acciones
que el resto de los familiares.

Si el gobierno corporativo de una empresa no está bien formado, entre el 60 y

70% de las empresas desaparecen al morir el fundador, ya que a veces solo
pasan a una segunda generación y cuando intentan pasar a la tercera, fracasan
en el intento porque jamás estuvieron preparadas para llevarlas a cabo.

Existen diversos tipos de empresas familiares cada una de ella con sus
problemas particulares. Elementos como el tamaño de la empresa y de la familia,
la generación en que se encuentra la organización, la madurez que haya
alcanzado su grupo de dirección, el nivel de diversificación de la entidad, la
profesionalización de los sucesores, son factores que van a determinar la
estrategia a seguir para consolidar la compañía, las empresas familiares de hoy
en día se enfrentan a nuevos retos como la globalización y cuentan con nuevas
tecnologías que pueden jugar a su favor o en su contra. Ya no se compite con la
empresa de al lado, se habla de entornos mucho más abiertos que nos ofrecen
toda una serie de opciones.

El problema reside entonces en cambiar el estilo de liderazgo del fundador sin

cambiar a la persona en sí. Obviamente, no todo son inconvenientes en las
empresas familiares y estas cuentan con una serie de ventajas competitivas que,
en muchos casos, son intrínsecas al espíritu que las creó:

El fundador o propietario atiende personalmente a empleados y proveedores,

vigilando los costos de producción y conociendo “por su nombre” a los
trabajadores de la empresa.

La empresa es motivo de pasión para sus propietarios. La impulsan, la

desarrollan y, para muchos, es una parte fundamental de su vida.

El trato con los clientes es más directo y cordial. Existe la preocupación por
conocer sus preferencias y la atención es más esmerada.

Hay mayor flexibilidad a la hora de tomar decisiones, lo que permite mayor

rapidez en las respuestas.

Los propietarios dan lo mejor de sí y buscan colaboradores que compartan esta

filosofía de trabajo. Se exige siempre lo mejor de cada quien. En resumen, la
unidad y el compromiso son las insignias de la compañía.

Cada empresa familiar es única, pero todas tienen un reto en común: orientar la
empresa hacia el crecimiento manteniendo la armonía familiar.

Hoy por hoy es fundamental que las organizaciones sean muy receptivas con
todos los temas relacionados a la gerencia estratégica, pues en un ambiente tan
competido y con empresas como estas que son realmente vulnerables es
necesario tener un plan de acción que nos permita ser proactivos y eliminar esas
reacciones frente a los cambios tan características de empresas rígidas y con
futuro incierto.

Tener un rumbo bien definido y un Capitán muy capaz y conocedor del entorno
en el que nos encontramos es una señal de supervivencia para la organización,
siempre y cuando se tenga muy claro el trato especial que deben tener estas
firmas por su condición de confluir en ellas tres subsistemas: Familia, Propiedad
y Empresa. Es así que el terreno debe prepararse para que el proceso de
sucesión ocurra generando el menor impacto posible para la compañía y la
familia.