EXTINCIÓN DE LOS ANIMALES

La extinción de animales es un problema complejo y preocupante que tiene múltiples repercusiones negativas en los
ecosistemas y en la sociedad en general.

1. Pérdida de biodiversidad: Cada especie animal tiene un papel único en su ecosistema, contribuyendo a la
estabilidad y funcionalidad del mismo. La extinción de una especie puede desequilibrar todo el ecosistema y
afectar a otras especies que dependen de ella.
2. Impacto en la cadena alimentaria: Muchas especies animales forman parte de cadenas alimentarias complejas.
La extinción de una especie puede tener efectos cascada, afectando a las poblaciones de otras especies que
dependen de ella como presa o depredador.
3. Servicios ecosistémicos: Los animales desempeñan roles importantes en la prestación de servicios
ecosistémicos, como la polinización de plantas, la dispersión de semillas, el control de plagas y la purificación del
agua. La pérdida de estas especies puede afectar negativamente a la salud y la productividad de los ecosistemas.
La extinción de especies puede socavar la capacidad de los ecosistemas para proporcionar estos servicios, lo
que podría tener consecuencias negativas para la sociedad en su conjunto.
4. Impacto en la cultura y el patrimonio: Muchas culturas y sociedades tienen una conexión profunda con ciertas
especies animales, ya sea a través de mitos, tradiciones, o como símbolos culturales. La pérdida de estas
especies puede tener un impacto negativo en la identidad cultural y el patrimonio de las comunidades.
5. Impacto económico: La extinción de especies animales puede tener consecuencias económicas negativas,
especialmente en comunidades que dependen del turismo relacionado con la observación de vida silvestre.
Además, la pérdida de servicios ecosistémicos puede afectar la productividad de sectores como la agricultura y
la pesca.
6. Responsabilidad ética: Como especie dominante en la Tierra, tenemos una responsabilidad ética de proteger y
conservar la diversidad de vida en el planeta. La extinción de animales debido a actividades humanas
irresponsables, como la caza furtiva, la destrucción del hábitat y el cambio climático, plantea serias preguntas
sobre nuestros valores y nuestra relación con el mundo natural.
7. Valor intrínseco de la biodiversidad: Cada especie tiene un valor intrínseco en el ecosistema
independientemente de su utilidad para los seres humanos. La biodiversidad es crucial para mantener el
equilibrio y la estabilidad de los ecosistemas. La extinción de una especie puede tener efectos negativos en
cadena en todo el ecosistema, afectando a otras especies, incluida la humana.
8. Beneficios económicos y medicinales: Muchas especies de animales proporcionan beneficios económicos
directos a través del ecoturismo, la pesca, la caza sostenible y otros medios. Además, muchas plantas y
animales contienen compuestos químicos únicos que pueden tener aplicaciones medicinales y científicas
importantes. La pérdida de especies puede significar la pérdida de oportunidades económicas y medicinales
importantes.
9. Interconexión de los ecosistemas: Los ecosistemas son intrincadamente interconectados, y cada especie
cumple un papel único en el mantenimiento del equilibrio ecológico. La extinción de una especie puede
desencadenar efectos dominó que afectan a otras especies, la calidad del suelo, el ciclo del agua y otros
aspectos fundamentales de los ecosistemas.
10. Seguridad alimentaria: Muchas comunidades dependen de la fauna silvestre para su seguridad alimentaria
y nutrición. La extinción de especies animales puede poner en riesgo estas fuentes de alimentos,
especialmente en áreas donde la caza y la pesca son prácticas comunes.
11. Potencial desconocido: A menudo, no comprendemos completamente el papel y el potencial de una
especie en el ecosistema hasta que ya está en peligro o extinta. La pérdida de una especie animal podría
significar la pérdida de oportunidades futuras para la investigación, la innovación y el descubrimiento
científico.
En resumen, la extinción de animales no solo representa la pérdida de biodiversidad, sino que también puede tener
impactos económicos, éticos, culturales y adaptativos significativos. Por lo tanto, es importante tomar medidas para
prevenir y mitigar la extinción de especies.

ARGUMENTOS EN CONTRA

Es importante aclarar que no hay argumentos sólidos a favor de la extinción de animales desde una perspectiva ética,
ambiental o de sostenibilidad. La extinción de especies es un fenómeno preocupante que tiene consecuencias negativas
significativas para los ecosistemas y para la humanidad en general. Sin embargo, puedo presentarte algunos puntos que
algunas personas podrían plantear como "argumentos" a favor de la extinción de animales, aunque en realidad son más
bien falacias o argumentos falaces:

Supervivencia del más fuerte: Algunas personas podrían argumentar que la extinción de ciertas especies animales es
simplemente parte del proceso natural de selección y evolución, donde solo los más fuertes y adaptados sobreviven. Sin
embargo, este argumento pasa por alto el hecho de que la actividad humana, como la caza furtiva, la destrucción del
hábitat y el cambio climático, está acelerando el ritmo de extinción y no sigue los principios naturales de selección.

 Contra respuesta: La extinción de especies animales causada por la actividad humana, como la caza furtiva y la
destrucción del hábitat, no sigue los principios naturales de selección. En lugar de ser el resultado de la
adaptación natural, muchas extinciones son causadas por actividades humanas irresponsables que desequilibran
los ecosistemas y ponen en peligro la biodiversidad. Nuestra responsabilidad ética es proteger y conservar la
diversidad de vida en el planeta, no acelerar su extinción.

Beneficios económicos a corto plazo: Algunos individuos o industrias pueden tener un interés económico en la extinción
de ciertas especies animales, como por ejemplo la explotación de recursos naturales presentes en sus hábitats. Sin
embargo, este enfoque es cortoplacista y no tiene en cuenta los impactos negativos a largo plazo en los ecosistemas, la
biodiversidad y la economía en general.

 Contra respuesta: Si bien es cierto que algunas industrias pueden obtener beneficios económicos a corto plazo
de la explotación de recursos naturales en los hábitats de ciertas especies, estos beneficios son temporales y a
menudo insostenibles a largo plazo. La extinción de especies puede tener consecuencias económicas
devastadoras, incluyendo la pérdida de servicios ecosistémicos, la disminución del turismo relacionado con la
vida silvestre y el impacto en sectores como la agricultura y la pesca. La conservación de la biodiversidad, por
otro lado, puede generar beneficios económicos a largo plazo, como la protección de recursos naturales, el
turismo ecológico y la investigación científica.

Reducción de competencia: En ciertos casos, la extinción de una especie animal podría interpretarse como una
reducción de la competencia por recursos entre esa especie y otras, lo que podría beneficiar a otras especies en el
ecosistema. Sin embargo, este argumento es miope ya que no tiene en cuenta las complejas interacciones entre
especies y los efectos cascada que pueden resultar de la desaparición de una especie.

 Contra respuesta: La reducción de la competencia entre especies no es necesariamente beneficiosa para los
ecosistemas, ya que las especies suelen tener interacciones complejas y dependencias mutuas. La extinción de
una especie puede desencadenar efectos cascada impredecibles que afectan a otras especies y al equilibrio
general del ecosistema. Además, la biodiversidad es fundamental para la estabilidad y la resiliencia de los
ecosistemas frente a perturbaciones externas, como el cambio climático y las enfermedades. En lugar de reducir
la competencia, debemos trabajar para conservar la diversidad de vida en la Tierra y promover la coexistencia
armoniosa entre especies.
En resumen, aunque algunos podrían plantear estos "argumentos", ninguno de ellos justifica la extinción de animales
desde una perspectiva ética, ambiental o de sostenibilidad. La conservación y protección de la biodiversidad es
fundamental para garantizar la salud de los ecosistemas y el bienestar de las generaciones futuras.

Cada especie tiene su papel en el ecosistema, forma parte de una red de especies y aporta ese granito de arena
insustituible en el mundo. La unión de todos esos granos o especies forman un resultado extraordinario que nos permite
vivir de la manera que lo hacemos. La falta de esos granitos amenazados, las especies en peligro, alteraría las cadenas
tróficas y los ecosistemas, lo que finalmente supondría un desequilibrio ineludible para la salud del planeta en general y
para nuestro bienestar en particular.

El hecho de que se extinguiera, por ejemplo, una especie de pez en un río supondría un problema para el resto de las
especies, incluida la humana, pues, a pesar de que ese pez no fuera comestible y no supusiera un beneficio
directamente apreciable para las personas, la función de ese pez podría centrarse en mantener los ríos limpios y las
aguas potables. Lo mismo ocurre con las demás especies y grupos de animales, como los insectos polinizadores, como
fuentes básicas para obtener alimento, o las aves, las cuales nos protegen de las plagas de insectos. Aunque es difícil
predecir el impacto total que podría causar la pérdida de una especie en el planeta, este hecho podría llegar a
provocar consecuencias desastrosas en el ecosistema, desencadenando reacciones que afectarían a las demás especies.
Por Anna Arias, Bióloga y Doctora en Ciencias del Mar y Oceanografía. Actualizado: 15 febrero 2021 Ecología Verde

La pérdida de cualquier especie puede generar cambios negativos en los ecosistemas, asimismo crear un desequilibrio
que perturbe el ambiente y genere sistemas insalubres, que a su vez produzcan una alteración en otros seres vivos,
ocasionando enfermedades nuevas o la ampliación de sus fronteras.

Por: Biol. Mar. Jorge Arturo Ramírez Espinosa Investigador Académico UTS - Unidad Académica Crucero San Javier

La desaparición de cualquier especie, desde bacterias hasta mamíferos, supone una amenaza para la salud humana.
Según un estudio presentado por la revista Nature, cada vez que se extingue una especie, se eleva la aparición y
transmisión de enfermedades infecciosas.
El trabajo, titulado 'Impacto de la biodiversidad en la aparición y transmisión de enfermedades infecciosas', revela
una conexión directa entre ambos factores. Señala que la pérdida de especies en ecosistemas se traduce en un aumento
de los organismos patógenos.
Los científicos explican que muchos de los animales, plantas y microbios que desaparecen suelen ser los que amortiguan
la transmisión de diferentes enfermedades infecciosas.

El equilibrio de los ecosistemas no depende, por tanto, solo de la cantidad y variedad de especies que los componen y
de sus relaciones, sino también del papel que juegan las distintas especies en el mantenimiento de dicho equilibrio

La extinción de vegetales y especies animales, una de las peores consecuencias del cambio climático global, está
relacionada con el incremento de enfermedades infecciosas en los seres humanos.
Las bacterias, los virus y los hongos no se resignan a extinguirse junto al organismo que los hospeda y aumentan su
variabilidad genética para conquistar nuevos hospedadores.

La extinción animal puede ocurrir debido a una combinación de factores, como la pérdida de hábitat debido a la
deforestación o el desarrollo humano, la contaminación, la caza excesiva, la introducción de especies invasoras, el
cambio climático y la fragmentación del hábitat. Estos factores pueden actuar solos o en conjunto para impulsar la
extinción de una especie.
El hecho de promover la extinción de los animales de alguna u otra forma es promover nuestra propia extinción ya que
estos factores nos afectan gravemente a nosotros.

La OMS señala que, además, “la diversidad biofísica de microorganismos, flora y fauna ofrece amplios conocimientos
que entrañan beneficios importantes para la biología, las ciencias de la salud y la farmacología”. En la naturaleza
necesitamos tener mucha biodiversidad para encontrar nuevos antibióticos, nuevas moléculas que nos ayuden para
luchar contra las enfermedades: PORTAFOLIO 2021
Según Naciones Unidas, en las últimas décadas, las poblaciones de abejas han disminuido en todo el mundo a causa de
“la pérdida de hábitat, las prácticas agrícolas intensivas, los cambios en los patrones climáticos y el uso excesivo de
productos agroquímicos como los pesticidas. Esto, a su vez, supone una amenaza para una variedad de plantas
fundamentales para el bienestar y el sustento de los seres humanos”.

Los animales juegan un papel esencial en el mantenimiento de un medio ambiente sano. Contribuyen como
polinizadores, controlando plagas e incluso mitigando el cambio climático.

1. Los murciélagos actúan como pesticidas naturales

 Las poblaciones de murciélagos están disminuyendo
 Según el informe sobre el Estado de los Murciélagos de América del Norte de 2023, los murciélagos se enfrentan
a importantes amenazas en forma de destrucción de su hábitat, cambio climático, energía eólica y
enfermedades.
2. Las aves equilibran la naturaleza
 La mayoría de las especies controlan plagas comiendo insectos y enterrando semillas que luego se convertirán
en árboles y otras plantas. Los buitres actúan como equipo de limpieza de la naturaleza al comer cadáveres.
3. Los elefantes crean fuentes de agua para otras especies
 Los elefantes juegan un papel crítico en su hábitat nativo. Durante tiempos de sequía, los elefantes desentierran
lechos de agua secos, creando pozos de agua para ellos y otras especies. Además de esto, los elefantes también
comen plantas y dispersan las semillas, frescas y fertilizadas, en su estiércol.
4. Los tiburones evitan que las enfermedades se propaguen entre la vida marina
 Cuando cazan, los tiburones tienden a buscar animales enfermos y heridos. Al sacar a los individuos enfermos de
la población, evitan que otros animales sean víctimas de enfermedades.

Los elefantes, varias especies de tiburones, algunos murciélagos, ciertos tipos de abejas y varias variedades de aves se
consideran en peligro de extinción.