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DESARROLLO MORAL

Entendemos por desarrollo moral aquella forma en que surgen los juicios y las
acciones morales, así como la forma en que estas se estabilizan a lo largo de la vida. Si
entendemos moral desde una perspectiva universal, es fundamental explicar que no
todos compartimos las mismas normas y juicios, sino que debemos ocuparnos de las
condiciones que rigen el juicio y la acción del agente (Cruz Puerto, 2020). En estos
términos, la moral siempre se ha relacionado con las acciones del ser humano
entendiendo a este como un hombre libre, capaz de decidir a partir de su conocimiento y
voluntad. Esta idea se vincula por tanto a una perspectiva sociológica donde la moral es
un hecho social y como se citaba anteriormente donde cada sociedad construye sus
propias reglas morales o sistemas y les diferencian de otros grupos (Reyes-Ruiz et al.,
2021).
En las últimas décadas se han establecido varias teorías sobre el desarrollo y el
comportamiento moral. Estas teorías se pueden dividir en diferentes categorías: aspecto
de sentimiento y emoción; aspecto conductual; aspecto cognitivo y perspectivas
integradas. El primero de los aspectos enfatiza en el aspecto afectivo del desarrollo
moral incluyendo las teorías del altruismo de Aronfreed, la teoría del desarrollo de
Eisenberg y la teoría de la empatía y el desarrollo moral de Hoffman. En cuanto, al
aspecto conductual estas teorías tratan el comportamiento moral por ejemplo de
Eysenck. El aspecto cognitivo se centra en teorías del juicio moral de Piaget y
Kohlberg. Y, por último, las perspectivas integradas proponen teorías que integran
diferentes aspectos de los anteriores, por ejemplo, afectivos, conductuales y cognitivos
(Keung Ma, 2014).