Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Se a palnteado una pregunta en cuestión ¿Por qué estos individuos participan en movimientos
sociales y otros no? Se han dado tres tipos de respuestas:
• Porque poseen ciertas características psicológicas comunes.
• Porque las actitudes que poseen son afines a las del movimiento.
• Porque las circunstancias particulares de su vida favorecen o hacen más accesible la
participación
Accesibilidad a la participación
El contacto con las redes sociales de un movimiento y el hallarse en una coyuntura biográfica
favorable son las dos situaciones que hacen más accesible la oportunidad para la participación, lo
que aumenta la probabilidad de que ésta se produzca. Respecto al contacto con las redes sociales
del movimiento, se ha visto que las asociaciones primarias y secundarias funcionan como
importantes canales de reclutamiento. En este sentido, las relaciones y redes sociales preexistentes
desempeñan un importante papel en la forma de organizar y canalizar la captación de miembros
(Zurcher y Snow, 1981). Se ha comprobado que, cuando un individuo tiene contacto con algún otro
miembro de un movimiento social, a través de sus redes sociales, es mucho más probable que el
individuo sea reclutado por el movimiento, otra situación que favorece la accesibilidad a la
participación, las circunstancias biográficas favorables, sobresalen la disponibilidad actual del
individuo (por ejemplo, ser soltero, tener pocos compromisos y mucho tiempo libre).
Para que surja esta acción colectiva en una situación determinada es necesario que dicha situación
sea definida o interpretada como injusta, de tal forma que surja la necesidad de corregirla. Esto
implica la creación de un marco cognitivo que exprese dicha interpretación, es decir, de un marco de
acción colectiva. El marco de acción colectiva es un conjunto de creencias y valores que orienta, da
sentido y legitima las acciones emprendidas por un movimiento social.
>El sentido de injusticia: surge de la indignación moral relacionada con ciertos agravios, es decir, con
la privación de ciertos derechos que el individuo cree que en justicia le corresponden. El origen de
esta indignación moral suele ser una situación de “desigualdad ilegítima” (Mayor, 1994) entre los
individuos o grupos, la existencia de un trato desigual que se percibe como ilegitimo (por ejemplo, es
el caso del movimiento homosexual);
>El componente de identidad: se refiere al sentimiento de identificación mutua que existe entre los
que comparten un mismo sentido de injusticia. De esta forma surge un “nosotros”, una conciencia
de pertenecer a un mismo grupo. La construcción del nosotros implica la construcción de un “ellos”
(autoridades, grupos de poder) a los que se atribuye la responsabilidad de la situación de injusticia
padecida.
>Sentido de eficacia: este se refiere a la creencia de que una situación de injusticia puede cambiar
gracias a la acción colectiva. esto implica la convicción de que la situación definida como injusta no
es inmutable y de que se poseen los medios suficientes para cambiarla. Este componente de
eficacia, o confianza en la propia capacidad, se opone al sentimiento de impotencia que lleva las
personas a la apatía, al fatalismo y a la resignación.