Machine Translated by Google

Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238

Listas de contenidos disponibles en ScienceDirect

Perspectivas de desarrollo mundial

página de inicio de la revista: www.elsevier.com/locate/wdp

La sostenibilidad social y el boom del argán como desarrollo verde en Marruecos

Wendy Perry
Boyd Caton Group, Inc., 943 Glenwood Station Lane, Charlottesville, VA, EE. UU.

INFORMACIÓN DEL ARTÍCULO ABSTRACTO

Palabras clave: Marruecos comercializa el aceite de argán como un elixir de salud y belleza orgánico y de comercio justo que las mujeres extraen
Sostenibilidad de un antiguo bosque protegido internacionalmente para limpiar el aire del mundo. Desde la década de 1990, el reino se ha
Bosque
asociado con organizaciones de gobernanza global e inversores extranjeros para desarrollar el bosque de argán como un recurso
Mujer
natural codiciado, designado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1998. Las inversiones a gran escala en reforestación y
Empoderamiento
“arganicultura” proponen mitigar las emisiones de carbono. emisiones, aliviar la pobreza y empoderar a las trabajadoras en la
argán
proliferación de cooperativas de aceite de argán subsidiadas por el estado en la cadena de valor de los productos básicos
Cooperativa
orientados a la exportación. Esta evaluación de impacto de la floreciente empresa del argán sopesa los beneficios y costos sociales
de un impulso transnacional que priorice el crecimiento económico sobre la sostenibilidad social. Los datos empíricos de 829
encuestas con residentes locales muestran un sector comercial informal y no regulado en desacuerdo con la narrativa de desarrollo
neoliberal inclusivo en general. Los resultados muestran que las mujeres rurales y sus comunidades están expuestas a riesgos en
una industria extractivista centralizada, impulsada por el mercado y orientada a los consumidores. El auge vertical del argán ha
desencadenado nueva legislación e innovaciones en ciencia y tecnología que han trasladado el control de la tierra, las prácticas
agroforestales y el proceso de extracción de petróleo de los productores locales al Estado. De este modo, las mujeres y los pobres
de las zonas rurales han sido despojados de su patrimonio y marginalmente sostenidos como mano de obra en lugar de
empoderarse efectivamente. En el futuro, reequilibrar las prioridades de sostenibilidad económica, ambiental y social requerirá
iniciativas basadas en indicadores de empoderamiento, políticas regulatorias revisadas, estrategias de inversión diversificadas y
el compromiso de garantizar el cumplimiento, la transparencia y la evaluación imparcial de los beneficios y costos para las trabajadoras. .

Días después de que el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático de 2015 entrara en vigor
en 2016, el Rey de Marruecos dio la bienvenida a Marrakech a las “majestades, excelencias y
altezas” de las Naciones Unidas. Como anfitrión de la Conferencia sobre el Clima de 2016,
Mohammed VI preguntó a los líderes mundiales qué sentido tienen tales acuerdos “si dejamos que
las poblaciones más vulnerables enfrenten su destino cargado de peligros” en entornos amenazados
por el cambio climático (Ministerio de Cultura y Comunicación, 2016). Los gobiernos y las
instituciones de gobernanza global promueven el desarrollo verde como un medio para alcanzar
los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas para 2030 (ODS), incluida la
igualdad de género y el alivio de la pobreza.
Marruecos reclama el estatus de pionero por sus esfuerzos, enorgulleciéndose especialmente de
su “arganicultura”, o de las crecientes inversiones en el bosque de argán del país, apreciado desde
1998 como Reserva de la Biosfera de la UNESCO. Sus defensores argumentan que la arganicultura
no sólo reduce las emisiones de carbono, sino que también reduce la pobreza y empodera a las
mujeres al brindarles empleo. Las mujeres rurales de los pueblos amazigh (bereberes) son
maestras en la extracción del precioso aceite de nuez del árbol de argán, un producto de moda en
los florecientes mercados mundiales de belleza y salud de la actualidad. Las cooperativas de
mujeres de argán se han multiplicado en todo el suroeste de Marruecos con subsidios del Estado,
demandas impulsadas por el ecologismo. ¿Las mujeres rurales comparten las ganancias? ¿Está
la sociedad avanzando hacia la igualdad de género?
Las investigaciones sobre evaluación del impacto social indican que la transformación de
Marruecos de la producción tradicional de subsistencia de aceite de argán en una cadena global
de valor de productos básicos no ha empoderado efectivamente a las mujeres rurales ni a sus
comunidades (tal vez de manera predecible), ya que los proyectos reflejan poca teoría del
empoderamiento en su diseño, implementación, monitoreo y y evaluación. Este artículo presenta
un enfoque de métodos mixtos para la investigación en el campo que respalda las críticas a los
programas neoliberales de uso de la tierra a gran escala. Proporciona evidencia empírica de las
formas en que el impulso de Marruecos por un desarrollo verde controla el bosque de argán y a
sus habitantes, en particular a las mujeres, para obtener ganancias. A nivel práctico, al dar voz a
las mujeres y hombres locales, esta investigación desafía a los formuladores de políticas y a los
inversionistas a elevar el nivel de responsabilidad en materia de sostenibilidad social en el sector
del argán, a exigir resultados que acumulen beneficios transformadores para las trabajadoras,
como se propone.
1. Introducción

proporcionando la mano de obra calificada que el crecimiento del reino­

Las mujeres y los pobres en Marruecos enfrentan peligros profundamente arraigados más allá

Dirección: 1610 Mulberry Avenue, Charlottesville, VA 22903, EE. UU.

Dirección de correo electrónico: weperry@gmail.com.

https://doi.org/10.1016/j.wdp.2020.100238 Recibido el 7
de marzo de 2020; Recibido en forma revisada el 7 de julio de 2020; Aceptado el 10 de julio de 2020 Disponible
en línea el 24 de julio de 2020
2452­2929/ © 2020 Elsevier Ltd. Todos los derechos reservados.
Machine Translated by Google
W.Perry
cambio climático, especialmente en las regiones rurales. Las Naciones Unidas se ubican
el reino se encuentra en el tercio inferior del mundo en desarrollo humano
y emisiones de carbono, en el puesto 123 de 189 países (PNUD, 2018).
Sin embargo, en la segunda cumbre anual sobre Mujeres en África en 2018, King
Mohammed VI promovió la transversalización de género, afirmando que “las medidas a favor
de la igualdad de género deben impulsar toda estrategia eficaz de
desarrollo sostenible” (Ministerio de Cultura y Comunicación,
2018b). Haciendo referencia a los 17 ODS de las Naciones Unidas, el Rey presentó
Marruecos como motor de progreso hacia la igualdad de género a partir de la
reformas constitucionales y legislativas, nuevas cuotas para mujeres en el parlamento y
programas diseñados para fomentar la independencia económica y el espíritu empresarial de
las mujeres instituidos en las dos primeras décadas de
su reinado. Mientras el cambio climático ocupa un lugar central entre las preocupaciones
mundiales, el reino ha intensificado el desarrollo verde a gran escala.
proyectos, comercializados con éxito entre los inversores como doblemente beneficiosos para el
medio ambiente y a las poblaciones locales desfavorecidas, particularmente las rurales.
mujer.
Entonces, ¿por qué Marruecos permanece inactivo en la parte inferior de la escala de
desarrollo humano global, en el último lugar en el norte de África y detrás de otros trece países?
¿Países árabes en el Índice de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas?1
Si bien los indicadores de otros países en desarrollo han mejorado constantemente,
La tasa de crecimiento del desarrollo humano de Marruecos se ha desacelerado desde 2010.
El Informe sobre la brecha de género global del Foro Económico Mundial , que evalúa la
discriminación contra las mujeres, sitúa a Marruecos en el puesto 137 de 149
países (Foro Económico Mundial, 2018). En todo el país, un sorprendente 56 por ciento de las
mujeres son analfabetas, una tasa que llega al 90 por ciento.
por ciento en algunas regiones rurales. Desde 1990, la tasa de participación económica de las
mujeres ha rondado el 26 por ciento, entre las más bajas.
y las tasas más estancadas en el mundo (Grupo del Banco Mundial, 2015, 5–6,
13).2 Después de décadas de reformas, las mujeres marroquíes siguen estando
desproporcionadamente desatendidas en el acceso a la educación, el empleo,
atención médica y voz política. Las mayores disparidades entre mujeres
y los hombres existen en las regiones rurales.
La investigación empírica en el sector del argán llega a la raíz de esta desconcertante
ineficacia. Refuta el mito de que simplemente dibujar mujeres
incorporarse a la fuerza laboral remunerada constituye empoderamiento, sin la adecuada
regulación o beneficios sociales (Cornwall, 2016; Cornwall, Harrison y
Whitehead 2007; Duflo, 2012; Moghadam y Senftova, 2005; pearson,
2004). El agresivo programa de reforestación de Marruecos para combatir el carbono
emisiones y mercantilizar el aceite de argán, en otras palabras, su mercado basado
enfoque para la conservación de la biodiversidad, ha beneficiado al consumidor y
líderes de la industria más que los productores locales y su ecosistema (Aziz,
Mormont y Allali, 2013; Lybbert, Aboudrare, Chaloud, Magnan y
Nash, 2011; Michon, Genin, Romagny, Alifriqui y Auclair, 2017;
Nouaim, 2005; Turner, 2014). Los tres pilares del desarrollo (sostenibilidad económica, ambiental
y social) están fuera de lugar.
equilibrio, y Marruecos se ha convertido en un Estado más frágil en los últimos años
(Fondo para la Paz, 2019). En 2018, el Rey reconoció las carencias
de iniciativas de desarrollo que marcaron su primer reinado, lamentando que
“a pesar de los esfuerzos realizados en términos de proyectos económicos y programas
sociales, los resultados obtenidos no están a la altura de mis ambiciones”
(Ministerio de Cultura y Comunicación, 2018a). El auge de Marruecos
La empresa de argán, un éxito económico a nivel macro y una decepción en el terreno según
muchos aspectos, proporciona valiosas
lecciones aprendidas para el futuro desarrollo sostenible en el norte de África,
donde la investigación en este ámbito es escasa.
Aquí se presenta una evaluación del impacto social de los programas subsidiados por el estado.
cooperativas de argán que evalúa los beneficios y costos para las trabajadoras.
Este nuevo enfoque utiliza investigación participativa y aleatorización.
Para evitar sesgos de selección, combina análisis cuantitativos y cualitativos de
1
De los veintiún países árabes, Marruecos sólo supera a Comoras, Yibuti,
Mauritania, Sudán, Siria y Yemen. Somalia no fue incluida en el informe.
2
Las tasas de analfabetismo masculino y participación económica son del 31 por ciento y del 75 por ciento.
por ciento respectivamente.
2
Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238
Más de 800 observaciones, controles por edad y también involucra a hombres.
como mujeres para abordar grandes lagunas de conocimiento sobre el empoderamiento de las mujeres,
particularmente en el Medio Oriente y el Norte de África (Taylor & Pereznieto,
2014, 13). ¿Las cooperativas de argán empoderan a las mujeres en sus comunidades? ¿El
auge del argán está beneficiando a los productores locales de manera socialmente sostenible?
El siguiente análisis comienza con una explicación de
El argán, su medio ambiente y las vigorosas inversiones de Marruecos en materia verde.
desarrollo a través de la reforestación y expansión de la arganicultura para
producción de aceite de argán. En este contexto, se ha demostrado que el creciente éxito
comercial del argán ha provocado un desequilibrio entre los pilares económico, ambiental y
social del desarrollo sostenible.
Las teorías de la sostenibilidad social y el empoderamiento de las mujeres sientan las bases
fundamentos analíticos de la investigación empírica que evalúa la situación social
impacto de 12 cooperativas de argán. Los resultados presentados se centran en los salarios, un
indicador clave de empoderamiento. Corriendo el telón de lo performativo
El comercio justo en la industria del argán proporciona un contexto crucial para la mejora salarial.
cuestión y una ventana a los desafíos ocultos de la sostenibilidad en Mor­
occo.
Los resultados ofrecen ideas para el camino a seguir. Las cooperativas de argán tienen
el potencial para empoderar a las trabajadoras en un grado modesto. todavía en
En general, la evidencia muestra que cascar nueces por sí solo es un método ineficaz.
significa empoderamiento. Por otra parte, los datos establecen la
correlación más fuerte entre el empoderamiento de las mujeres y las matemáticas básicas
habilidades. Finalmente, este proyecto destaca los beneficios de solicitar opiniones
de los locales para futuros proyectos de desarrollo, y concluye con políticas
recomendaciones que mejorarían los resultados socialmente sostenibles.
2. El bosque de argán y su gente
De mayor superficie que la selva amazónica, más grande que todos los bosques
estadounidenses al este de Texas, con cerca de 2,5 millones de acres, el bosque de argán de Marruecos
presta servicios a un ecosistema complejo del que dependen 3,5 millones de vidas locales
(Aziz, 2016; Lybbert et al., 2011; Michon, 2015; Turner, 2014). En
A diferencia de otros árboles que sustentan la economía marroquí (por ejemplo, el corcho).
roble, cedro, olivo, almendro), el árbol de argán, Argania spinosa (L.) Skeels,
se destaca de tres maneras: (1) su particularidad con su hábitat nativo,
las tierras montañosas áridas y semiáridas del sur de Marruecos; (2) su
propiedades multiuso y amplio potencial de extracción para beneficio humano;
y (3) su milenario significado metafísico en la cultura local, asociado fundamentalmente a las
mujeres.
Mientras países como Israel, Sudáfrica y Túnez experimentan
con el trasplante de argán, Marruecos sigue siendo inigualable como país del árbol
ambiente endémico, donde el bosque cubre cinco zonas del suroeste
provincias: Essaouira, Agadir­Ida­Outanane, Chtouka­Ait­Baha, Tiznit,
y Taroudannt (Falasca, Pitta­Alvarez y Ulberich, 2018; Khallouki,
Eddouks, Mourad, Breuer y Owen, 2017; Nouaim, 2005). Los lugareños codician
el árbol como un recurso natural resiliente con una vida media superior a los 200 años. La
madera de argán, de combustión prolongada, se utiliza como energía y
construcción. La cabra, cuya carne es la principal proteína del alimento local
Dieta: se alimenta del follaje y de los frutos. La sombra del árbol de argán sustenta los cultivos
de cereales básicos, especialmente los escasos, así como otros animales, plantas e insectos
nativos. Lo más preciado es el aceite extraído del
nuez de argán, valorada desde hace mucho tiempo en la región por sus propiedades nutricionales, medicinales y
Beneficios cosméticos. Las mujeres cosechan, secan y pelan la fruta, luego la parten.
las nueces a mano usando dos piedras y moler los granos en un molino para
extraer el aceite. La pulpa se prensa para formar tortas para alimentar al ganado y la
Los proyectiles se queman como combustible adicional. El árbol de argán se remonta a millones
de años hasta la Era Cenozoica, y hoy la agroforestería basada en el argán sostiene la gran
mayoría de la economía regional rural. Es proverbial
cuidadores, mujeres locales, preservan el papel primordial del argán en la antigua
Rituales, costumbres y mitos. Durante siglos los habitantes de la región han
gestionaron su relación íntima con el bosque con responsables,
métodos agroforestales equitativos, incluido el usufructo y el acceso complejos
Machine Translated by Google
W.Perry
derechos (Aziz, 2016; Genin & Simenel, 2011; Lybbert et al., 2011; Michon, 2015; Michon
et al., 2017; Nouaim, 2005).
El más arduo de estos métodos, la extracción del aceite de argán, debe su origen a
las mujeres de la comunidad amazigh. Comúnmente conocidos en el mundo desarrollado
como bereberes, los amazigh o "pueblos libres" son las poblaciones indígenas del norte
de África que, si bien observan en gran medida el Islam sunita con la mayoría de los
marroquíes, mantienen su diversidad e independencia cultural del predominio árabe.
Desde la época de la conquista árabe, Marruecos (Al Maghrib en árabe, que significa
“donde se pone el sol” o “el oeste”) ha absorbido a diversos pueblos amazigh que migraron
desde el noreste de África (Ennaji, 2015; Hoffman, 2008; Nouaim, 2005, 65 –69). La etnia
amazigh, un mosaico lingüístico y cultural, es una cuestión de gran carga política en
Marruecos. Por primera vez, el censo nacional de 2004 midió la fluidez en idiomas
amazigh. El siguiente censo de 2014 no lo hizo.3 Tashelhit es el dialecto del subgrupo
Ishelhin de los pueblos amazigh del sur que residen en las montañas del Atlas y sus
alrededores. Los
Ishelhin son una comunidad agropastoril cuya sociedad gira en torno a la agricultura
y el pastoreo de ganado (Hoffman, 2008). Las mujeres desempeñan un papel ancestral
prominente en este ecosistema segregado estrictamente por género.
Su espacio en la cultura amazigh se limita al hogar y la tierra, protegidos de relaciones no
consanguíneas con hombres y adolescentes.
Los tradicionalistas buscan proteger la preservación de la identidad amazigh por parte de
las mujeres de ideas que se cree que plantean amenazas a la pureza femenina, y de las
instituciones que difunden esas ideas, incluidas las asociaciones políticas y las escuelas,
especialmente más allá del nivel elemental (Hoffman, 2008, 77– 78; Sadiqi, 2014, 191­195;
Kerkech, 2016).
3. Desarrollo verde mediante la reforestación y la arganicultura
Desde la década de 1990, Marruecos ha buscado financiación internacional para el
desarrollo con gran éxito. Las propuestas de apoyo externo se aceleraron después de
que Mohammed VI ascendiera al trono en 1999. En 2014
Solo, el mundo desarrollado invirtió 2.240 millones de dólares en el reino, lo que lo sitúa
entre el 15 por ciento de los países que reciben ayuda exterior (Banco Mundial, 2017). El
interés mundial por el aire y la energía limpios y renovables ha puesto de relieve el bosque
de argán situado entre el Alto Atlas y el Anti­Atlas, junto con las afueras vecinas del
desierto del Sahara, donde se encuentra la central de energía solar de Noor­Ouarzazate
en Marruecos, el mayor complejo solar de su historia. amable en el mundo.
Sin embargo, el reclamo del Estado sobre los bosques marroquíes se remonta a la
época colonial. En 1917, el Protectorado francés instituyó el Código Forestal para proteger
el medio ambiente de la deforestación y la desertificación, con el motivo social y político
explícito adicional de sedentarizar a las “tribus rebeldes” (los pueblos amazigh) y
reorganizarlos como mano de obra asalariada para empresas coloniales (Davis , 2007,
138­139). Duras incluso para los estándares coloniales, las políticas marroquíes
restringieron, regularon y criminalizaron las prácticas tradicionales de gestión de la tierra
de los agropastoriles indígenas, despojándolos de su patrimonio, en particular el argán,
apreciado como tesoro nacional. Desde que Marruecos recuperó su independencia en
1956, el Servicio Forestal ha continuado apropiándose de tierras y recursos naturales
(Davis, 2000, 2007). Actualmente, el 99 por ciento de las tierras forestales de Marruecos
son de propiedad pública.
Las estimaciones modernas sobre la degradación de los bosques de argán varían
ampliamente. Los informes sobre una pérdida acelerada de densidad oscilan entre el 2
por ciento anual en las montañas y el 7­15 por ciento en las llanuras y en los márgenes,
cerca de ciudades en expansión (Green Climate Fund, 2016a, 7; Lybbert et al., 2011).
Dejando a un lado las métricas exactas, los intereses transnacionales, estatales y locales
han convergido en el bosque de argán sobre la premisa de la degradación, con una tensión
creciente entre objetivos en competencia de conservación, producción y acumulación de
biodiversidad, y desarrollo humano. Internacional
3
La población marroquí alcanzó los 33,8 millones en 2014. Los activistas amazigh
argumentan que el gobierno subestima la fluidez de las lenguas amazigh en un 40 por
ciento en lugar de lo que creen que es entre un 60 y un 70 por ciento, la mayoría étnica.
3
Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238
Las organizaciones de gobernanza y las corporaciones multinacionales han aumentado
las expectativas de responsabilidad social para los proyectos marroquíes. Sobre el papel,
la empresa de argán ha ofrecido un laboratorio ideal para probar soluciones de desarrollo
inclusivas y beneficiosas para todos: (1) la alta demanda global de aceite de argán genera
riqueza, (2) la reforestación purifica el aire del mundo y (3) las mujeres locales (y los
hombres) obtienen acceso a empleos que alivian la pobreza y empoderan a los
trabajadores. ¿Es esta imagen exacta?
El interés en el argán se agudizó en la década de 1990, cuando los químicos
comenzaron a confirmar los beneficios cosméticos y para la salud del aceite de argán
(Charrouf y Guillaume, 2014, 2018). Las pruebas se han centrado en el potencial del argán
para tratar una serie de enfermedades, desde artritis y diabetes hasta enfermedades
cardiovasculares y cáncer (Khallouki et al., 2017). La validación científica ha llevado a que
la valoración del argán se dispare como “oro líquido” en el discurso popular.
Ante la creciente competencia de los proyectos de trasplante en el extranjero, Marruecos
ha aumentado sus inversiones en la reforestación de argán y la producción de petróleo.
En 2010, los locales pagaban aproximadamente 20 dirhams (2,50 dólares) por un litro de
aceite de argán. En 2013, ese precio se había cuadriplicado a aproximadamente 80
dirhams (10 dólares). El aceite cosmético, que hoy tiene un precio de 100 dirhams (10
dólares) por litro en el mercado local, cuesta hasta 3.000 dirhams (300 dólares) por litro en
el floreciente mercado de exportación. (Aziz et al., 2013; Lybbert et al., 2011).
El impulso para la fiebre del aceite de argán se originó tanto en instituciones de
gobernanza traslacional e inversores extranjeros como en el Gobierno marroquí. Tras el
Convenio Internacional sobre la Diversidad Biológica de 1992, las Naciones Unidas
presionaron para que se declarara el bosque de argán Reserva de la Biosfera de la
UNESCO, y lo lograron en 1998 después de sofocar las preocupaciones de Marruecos
sobre los costos y el mantenimiento adicionales (Turner, 2014).
Inmediatamente después siguieron las cooperativas de aceite de argán subsidiadas con la
narrativa del empoderamiento de las mujeres. Según el modelo de negocio cooperativo,
varias docenas de mujeres pagan una cuota de membresía para unirse a la empresa
comunitaria que facilita la cadena de valor. En la mayoría de los casos, la cooperativa
adquiere la materia prima (nueces de argán) para que las mujeres procesen y comercialicen
sus productos en el mercado. En teoría, las cooperativas son administradas por mujeres
para mujeres y los miembros ejercen el derecho de voto en una asamblea general anual.
Los miembros reciben un salario estandarizado basado en la producción y una
participación en las ganancias de la cooperativa.
Además de los ingresos, a menudo figuran en la narrativa del empoderamiento otros
beneficios adaptados a las necesidades de las mujeres, como clases de alfabetización
para las mujeres y guarderías o escuelas para los niños.
A medida que el modelo cooperativo se extendió a miles de personas en todo el país,
algunos formando federaciones y sindicatos, el estado creó la Oficina de Desarrollo
Cooperativo (ODCO, 2017), una unidad de supuesta supervisión que exige un "impuesto
de desarrollo cooperativo" parafiscal del 2 por ciento sobre las ganancias netas y impone
fuertes multas por incumplimiento. En 2010, en un esfuerzo por acaparar el cada vez más
competitivo mercado internacional, la Comisión Nacional de Signos Distintivos de Origen
y Calidad de Marruecos protegió el aceite de argán con el estatus de Indicación
Geográfica. Para 2027, se prevé que el mercado del aceite de argán marroquí se expandirá
a una tasa de crecimiento anual compuesta basada en los ingresos del 10,8 por ciento,
superando los 507,2 millones de dólares en retornos por miles de toneladas de aceite
producido íntegramente por mujeres (Lybbert et al., 2011, Lybbert, 2007, Lybbert y Barrett,
2002, Grand View Research, 2020).
Desde principios del siglo XXI, el Estado ha controlado proyectos de desarrollo
internacionales centrados en el argán combinando objetivos económicos, ambientales y
sociales, aunque los resultados apuntan al crecimiento del PIB como el principal impulsor.
En 2003, en colaboración con la Agencia de Desarrollo Social de Marruecos, la Unión
Europea aportó la mayor parte de los 12,6 millones de dólares destinados al Proyecto
Argán para financiar cooperativas de mujeres y la reforestación del argán. Dos años más
tarde, el rey Mohammed VI lanzó su obra emblemática de “largo reinado”, la Iniciativa
Nacional para el Desarrollo Humano (INDH), una colaboración entre Marruecos, donantes
internacionales y organizaciones sin fines de lucro, destinada a hacer crecer la economía
y aliviar la pobreza con un enfoque que estimularía en principio la democracia participativa
(Ministerio de Cultura y
Machine Translated by Google
W.Perry
Comunicación, 2005).4 Al inaugurar el INDH, el Rey citó el empoderamiento de las
mujeres como un objetivo, reforzando las reformas para los derechos de las mujeres
en el Moudawana (Código de Familia) de 2004, posteriormente ampliado en la
Constitución de 2011. Las cooperativas de aceite de argán ocuparon un lugar
destacado en la cartera rural del INDH.
Para equilibrar esta inversión, Marruecos introdujo el Plan Marruecos Verde
(GMP) en 2008, añadiendo otra capa de participación en el argán.
Con el mismo enfoque y resultados que los planes de desarrollo neoliberales
anteriores, el GMP propuso crear más de un millón de puestos de trabajo, incluido
el empleo para mujeres en cooperativas de argán, y convertir la agricultura en el
principal mecanismo de crecimiento de la economía exportadora de Marruecos
(Montanari & Bergh, 2019). Al año siguiente, el Estado creó la Agencia Nacional
para el Desarrollo de las Zonas Oasis y del Árbol de Argán (ANDZOA) para
gestionar 128 millones de dólares para el bosque de argán.
Dado que el GMP finalizará en 2020, Marruecos obtuvo financiación adicional
para centrarse específicamente en el argán. Seis semanas antes de albergar la
Conferencia sobre el Clima de 2016, el reino presentó una propuesta al Fondo
Verde para el Clima (GCF) de las Naciones Unidas solicitando una inversión del 80
por ciento en un proyecto de 49,2 millones de dólares para desarrollar el bosque
de argán a través de la “arganicultura”. El “Desarrollo de huertos de argán en
entornos degradados” (DARED) propuso combatir las emisiones de carbono y
empoderar a 26.000 habitantes de los bosques mediante la plantación de 25.000
acres de árboles de argán. DARED planeó además expandir el sector cooperativo
de mujeres y desarrollar conocimientos agroforestales entre los lugareños. Para
2030, DARED pretende mitigar 604.223 toneladas métricas de emisiones de
carbono, equivalente a las emisiones de gases de efecto invernadero de 68
millones de galones de gasolina o 211 toneladas de residuos de vertederos.
Otorgado cuatro meses después de la Conferencia sobre el Clima de las Naciones
Unidas de 2016, DARED prometió tener un “impacto significativo en la promoción
del empleo y la emancipación de las mujeres rurales”, añadiendo 300 nuevas y el gobierno marroquí. La designación de la región del argán como Reserva de la
cooperativas para emplear a 6.500 mujeres más (Fondo Verde para el Clima, 2016a, 35). Biosfera de la UNESCO requería marcos para cercar el bosque, obtener el control
4. ¿Extraer, enriquecer, potenciar? ¿Quién se beneficia de la arganicultura?
En las últimas décadas, mientras los científicos validan el valor químico del
argán, otros académicos en Marruecos y otros lugares han señalado los costos
sociales y ambientales del auge del argán y de gran parte del desarrollo verde
impulsado por el crecimiento. Las preocupaciones sobre el cambio climático han
justificado nuevos mercados financieros que economizan la naturaleza y ecologizan
la economía (Wichterich, 2015). Al examinar las cuestiones sociales, los ecologistas
políticos, economistas, antropólogos, feministas, ambientalistas, historiadores y
geógrafos continúan llamando la atención sobre las fallas en la lógica del mercado
económico verde basada en la premisa de que el crecimiento del PIB mediante la
extracción de recursos naturales en programas de desarrollo inclusivos crece. el pastel.
A pesar de estas críticas, las cadenas de valor globales extractivistas han
ganado impulso, particularmente en el hemisferio sur. Las comunidades basadas
en los bosques son objetivos obvios de iniciativas que devalúan los modos de vida
agropastoriles tradicionales como ineficientes y no rentables (Hasnaoui & Krott,
2019; Michon, 2015; Turner, 2014; Wichterich, 2015). Al estilo foucaultiano, a través
de tecnologías que no sólo son socialmente sino también ambientalmente
perniciosas, los gobiernos centralizados han despojado a las poblaciones rurales
de su patrimonio, las han subordinado a las normas del mercado capitalista y han
contratado expertos para enseñar a las poblaciones locales cómo gestionar sus
tierras ancestrales, regulando esencialmente la vida local. (Agrawal, 2005; Aziz et
al., 2013; Michon et al., 2017; Nouaim, 2005; Turner, 2014; Wichterich, 2015). Los
intereses empresariales han convertido productos elaborados tradicionalmente para
sustentar a las comunidades rurales en
4
La Corporación del Desafío del Milenio de los Estados Unidos comprometió una parte de su Pacto
Marroquí de 697,5 millones de dólares al presupuesto original del INDH de 3.000 millones de dólares.
Otros donantes incluyeron las Naciones Unidas, la Unión Europea, Arabia Saudita, China, Francia,
Alemania, Italia, Japón y España. Una vez completada la primera fase en 2010, el Banco Mundial
prestó 300 millones de dólares para la segunda fase que finalizará en 2015. En su tercera fase,
2019­2023, valorada en 1.900 millones de dólares, el INDH informa solo una inversión internacional
del 10 por ciento (INDH, 2019, 59).
4
Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238
bienes comercializables elaborados por una fuerza laboral optimizada, que a
menudo exacerban las desigualdades interseccionales crónicas de género, clase,
raza y etnia en el proceso (Cornwall et al. 2007; Rocheleau, Thomas­Slayter y
Wangari, 2013; Wichterich, 2015) .
En Marruecos, para satisfacer la demanda mundial de aceite de argán de
primera calidad y larga vida útil, el gobierno instituyó marcos legales y administrativos
que apoyan la investigación industrial, derechos de propiedad intelectual, etiquetas
de indicación geográfica protegida y certificaciones de pureza orgánica y comercio
justo que implican socialmente prácticas comerciales responsables y equitativas.
Se hace creer a los consumidores que el aceite de argán comercializado beneficia
a las mujeres rurales que lo elaboran. Sin embargo, en la práctica, la legislación y
las innovaciones tecnológicas de la cadena de valor global del argán priorizan las
necesidades de los consumidores sobre las necesidades de los productores (Turner,
2014; Lybbert, 2007; Lybbert & Barrett, 2002; Lybbert et al., 2011). A medida que
avanza la tecnología del argán, la producción mecanizada de petróleo ha roto la
relación entre las mujeres amazigh y su oficio.
Los bioprospectores y los especuladores del mercado compran materias primas al
por mayor, desplazando a muchas mujeres recolectoras. La introducción de
máquinas de extrusión y equipos de filtración ha relegado a la mayoría de los
trabajadores al paso más oneroso del proceso de producción: cascar nueces a
mano. Los subsidios a las cooperativas generalmente se otorgan para cubrir costos
de construcción, maquinaria y equipos, en lugar de inversiones que beneficiarían
directamente a los trabajadores (Aziz et al., 2013; Damamme, 2011; Lybbert et al.,
2011; Turner, 2014). .
Lejos de ser una cadena de valor fuerte y articulada que vincule diversos
intereses con intenciones y propósitos compatibles, el auge del argán ha llegado a
funcionar como una empresa de extracción fragmentada y vertical: aproximadamente
dos tercios de empresa a empresa y un tercio de empresa a empresa. estafa­
verano—impulsado por instituciones transnacionales, corporaciones multinacionales
del argán como recurso, buscar un crecimiento económico regenerativo y crear
programas de investigación científica para avanzar en el conocimiento ambiental
global. En aras de la reforestación, una red inconexa de organizaciones e
intermediarios con distintos niveles de autoridad, incluido el Proyecto Argán, INDH,
ODCO, ANDZOA y, más recientemente, DARED, ha transferido el control del argán
al Estado y a los intereses empresariales. Más del 60 por ciento del aceite de argán
producido por las cooperativas se distribuye globalmente a través de grandes
corporaciones marroquíes (por ejemplo, OLVEA, ARGANisme, Zineglob, Purus
International), intermediarios (por ejemplo, Targanine, Tizargane) y firmas de
cosméticos extranjeras y multinacionales (por ejemplo, L 'Oréal/Garnier, BASF,
Unilever, Oriflame) que enriquecen sus productos con argán. Un variado elenco de
personajes ha inundado el escenario del argán, entre ellos agencias de desarrollo
marroquíes, instituciones de gobernanza global, donantes internacionales,
organizaciones sin fines de lucro para la conservación de la naturaleza, equipos
de investigación científica, comerciantes y distribuidores, compañías de alimentos
y cosméticos orgánicos, firmas farmacéuticas, organizaciones de mujeres, políticos,
funcionarios públicos y formuladores de políticas (Grand View Research, 2020;
Lybbert et al., 2011; Turner, 2014).
Este torbellino de compromiso cambiante ha despertado desconfianza y
escepticismo en el terreno. El aparato de desarrollo de Marruecos, sobrevalorado
ante el público como participación participativa, se ha ganado la reputación de
buscar en cambio el control y el beneficio. (Bergh, 2012, 410–426; Bergh, 2017, 84;
Hanieh, 2011; Montanari y Bergh, 2019). La industria del argán no es una excepción
(Genin & Simenel, 2011; Michon et al., 2017; Nouaim, 2005). Se han desarraigado
las prácticas comunitarias tradicionales que gestionan el bosque como patrimonio
compartido de conformidad con la ley Sharia (Aziz et al., 2013; Nouaim, 2005;
Turner, 2014). Los productores que antes eran independientes han perdido su
autonomía. Los hombres migran a las ciudades en busca de trabajo, mientras que
la carga laboral de las mujeres aumenta. Los administradores forestales que afirman
El dominio sobre cualquier tierra con árboles crea inseguridad en la tenencia entre
los propietarios locales con derechos legítimos de usufructo (Turner, 2014). Las
costumbres, ritos y tradiciones amazigh están desapareciendo. El aceite casero es
más difícil de vender. Con los modos indígenas de acceso al argán para pastoreo
y cosecha restringidos, la competencia por las materias primas ha introducido
nuevas tensiones, agresiones y codicia entre los habitantes de los bosques.
Machine Translated by Google

W.Perry Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238

La ganadería se aleja de las cabras, la emblemática amazigh Naciones Unidas promueven con más fuerza la transversalización de género en la palabra
bestia, a ovejas que no pastan argán. Muchos lugareños ya no pueden que de hecho. El Fondo Verde para el Clima de las Naciones Unidas exige que las propuestas
permitirse el lujo de aceite de argán. Sin tratamientos medicinales con argán, algunos caen incluyan una “evaluación de género completa y una acción de género a nivel de proyecto”.
víctima de enfermedades, en ciertos casos con nuevas enfermedades introducidas desde plan” alineado con la política de género bien desarrollada de la organización. Todavía
el cada vez más reducido mundo exterior (Aziz et al., 2013; Turner, 2014). Hoy, Haciendo caso omiso de sus propios estándares, el GCF aprobó el proyecto de argán de
El valor del argán reside más en las materias primas que en la sociedad que Marruecos, DARED, de 49,2 millones de dólares, sin ninguno. En lugar de un plano sobre
lo presentó al mundo. género, ANDZOA solicitó $600.000 para desarrollar su Proyecto Ambiental y
Plan de Gestión Social posterior, que “establecería una evaluación de
actividades de las mujeres para tenerlas en cuenta en la planificación de
5. Sostenibilidad social y empoderamiento de las mujeres en el argán el proyecto y sus actividades durante la fase de implementación”: evidencia dudosa de un
industria compromiso real con el empoderamiento de las mujeres (Green
Fondo Climático, 2016b, 19, 120).
Defensores de la arganicultura presentan el modelo de negocio cooperativo
como medio para mejorar los medios de vida de las mujeres rurales y sus comunidades. La
6. Una evaluación del impacto social del argán subsidiado por el estado.
narrativa del empoderamiento describe una empresa colaborativa, de abajo hacia arriba, de
cooperativas
propiedad compartida y beneficios adaptados a las necesidades de las mujeres.
necesidades.5 En la práctica, sin embargo, la producción cada vez más tecnificada
Las voces de la población local apenas son audibles en el coro de defensores del
para los mercados de exportación reduce la mayoría de los trabajadores de las cooperativas de argán a trabajadores calificados
desarrollo en Marruecos. Para aprender sobre la industria del argán
trabajo manual, cascar nueces por trabajo a destajo, remunerado por la producción.6
Desde sus perspectivas, en 2014­2015 mi equipo de investigación llevó a cabo un
Algunas cooperativas operan más o menos de acuerdo con su misión de
Evaluación del impacto social de la inversión de Marruecos en cooperativas de argán.
lo mejor que pudieron, en general, la falta de una regulación adecuada,
y el grado en que estas cooperativas empoderan a las mujeres (Perry
capacitación y supervisión han dado licencia para la explotación, intencional o
et al., 2019). Encuestamos a 829 mujeres y hombres al azar en 54 comunidades de las
inadvertido, especialmente entre los inexpertos y analfabetos. Beneficios
montañas del Atlas y sus estribaciones, 413 mujeres y 416
tienden a fluir de manera desigual a lo largo de las jerarquías sociales y económicas hacia los niveles más educados.
hombres de 20 a 45 años, dado que cuanto más joven es la edad, mayor es el potencial de
gerentes, intermediarios, ejecutivos de la industria y distribuidores en
las intervenciones para lograr un impacto transformador. La mitad de los participantes
centros urbanos (Aziz et al., 2013; Montanari & Bergh, 2019; Turner,
residían en 12 comunidades con cooperativas de argán subvencionadas
2014).
por el INDH de Marruecos, y la mitad residía en comunidades sin ningún programa de
Idealmente, los programas de desarrollo verde responden a las necesidades de las comunidades locales.
desarrollo de ningún tipo.7 Intentamos evaluar si el INDH
personas, apoyándolas en el desarrollo de sus capacidades para ayudarse a sí mismas. Los
había logrado su misión de impacto social. ¿Eran comunidades con argán?
pilares económico, ambiental y social de la sostenibilidad
¿Las cooperativas avanzan hacia el empoderamiento de las mujeres, como lo imaginó el rey
Se espera que sean complementarios. En realidad, sin embargo, los planes de desarrollo verde
Mohamed VI?
a menudo dejan de lado las cuestiones sociales, especialmente las relacionadas con el género.
Los indicadores de sostenibilidad social varían según la disciplina y el contexto. A
Cuanto más alejadas están las mujeres del poder, más pesadas son las cargas
evaluar empíricamente el impacto social del sector del argán, nuestro equipo
cargan de injusticias políticas y económicas (Agrawal, 2005; Ajmal,
adoptó el modelo teórico del empoderamiento de las mujeres para comprobar si la existencia
Khan, Hussain y Helo, 2018; Boström, 2012; Wichterich, 2015).
de cooperativas de aceite de argán apoyadas por el INDH se correlacionaba
Las estrategias impulsadas por el crecimiento equiparan el empoderamiento con el empleo,
para cambiar actitudes hacia (1) la capacidad de una mujer para trabajar fuera del
a pesar de los hallazgos científicos sociales que refutan esa ecuación. Una evolución
hogar; aprender a leer, escribir y usar números; y circular dentro y
concepto fluido y fluido, la sostenibilidad social se define ampliamente en términos de
fuera de la comunidad sin compañía de un hombre; (2) su poder para
sistemas y estructuras que apoyan a las generaciones actuales y futuras en
gastar y ahorrar dinero, poseer tierras y tener metas financieras; (3) ella
creando comunidades saludables y prósperas. Los principios subyacentes se refieren a
poder y agencia dentro de la familia y la comunidad como se refleja en
cuestiones de derechos humanos, equidad, seguridad, diversidad, calidad de vida,
su capacidad de toma de decisiones, su participación política y sus relaciones con
y participación ciudadana (Ajmal et al., 2018; Boström, 2012). Interdependiente de estas
otras mujeres y hombres fuera de la familia; y (4) su identidad como
ideas, el concepto de empoderamiento se refiere a la
miembro igual de la sociedad: su satisfacción en la vida, su autoestima, su sentido de
desarrollo de la capacidad de uno para tomar decisiones estratégicas de vida en un contexto
independencia económica, conciencia de los derechos y creencia en el apoyo
donde anteriormente se les negaba esta capacidad. Integral de las Naciones Unidas
su comunidad ofrece a las mujeres la búsqueda de una vida feliz y plena
enfoque hacia la sostenibilidad social, el empoderamiento de las mujeres tiene como objetivo
Ellos eligen.
transformar una sociedad que limita el poder y el acceso de las mujeres a una que
El gobierno marroquí prohíbe encuestar al público sin
mejora su poder y agencia en términos de (1) conocimiento de las mujeres,
autorización, controlando así la narrativa con un estricto control de la información en todos
capacidades y confianza en sí mismos para cambiar sus vidas; (2) su poder de toma de
los niveles subordinados, desde los gobernadores provinciales hasta los de aldea.
decisiones dentro de su hogar, comunidad y economía local;
moquadems, guardianes del acceso y los ojos y oídos del poder.
(3) su acceso y control sobre los activos, incluida la educación, la salud
Navegando por los bordes afilados de este control, nuestro equipo recopiló encuestas
cuidado y dinero; y (4) su capacidad para organizarse con otros para promover sus propios
respuestas que cuentan una historia de ambivalencia generalizada hacia el desarrollo.
intereses (Cornwall, 2016; Cornwall et al. 2007;
Desesperados por recibir ayuda donde no la había y, a menudo,
Moghadam y Senftova, 2005; Rocheleau et al., 2013; Taylor y
Péreznieto, 2014).
En cambio, así como los proyectos de desarrollo verde impulsados por el crecimiento a 7
Las comunidades con cooperativas de argán fueron seleccionadas al azar a partir de la información
gran escala extraen recursos naturales no explotados, las mujeres rurales han sido arrastradas proporcionada por funcionarios del INDH en las provincias de Essaouira y Agadir­Ida­Outanane, en el corazón
en la fuerza laboral como capital humano subutilizado al servicio de la de la región de argán. Para minimizar las externalidades, se seleccionaron al azar comunidades no

mercado global. Se podría argumentar que el Gobierno marroquí y la
5
Taylor y Pereznieto (2014) ofrecen una evaluación detallada de la investigación que critica este tipo de
intervenciones implementadas principalmente en el sur de Asia y el África subsahariana.
África. 6
Un trabajador cualificado puede producir alrededor de un kilo y medio de granos en una jornada completa.
día. Los estándares de la industria definen un salario decente entre 4 y 5 dólares por kilo. Apenas
Se necesitan veinte horas de trabajo manual calificado para producir un litro de aceite.
desarrolladas por su proximidad. Encuestamos a un número igual de mujeres y hombres en cada comunidad
para cumplir con nuestros
Criterios de investigación. Los hogares se seleccionaron al azar y el muestreo cubrió
cada comunidad de manera uniforme. Las investigadoras encuestaron a mujeres y los investigadores
encuestaron a hombres. El éxodo de muchos hombres desempleados en países subdesarrollados
comunidades rurales a áreas urbanizadas requirieron visitar un mayor número de
comunidades subdesarrolladas que las comunidades con cooperativas de argán para
lograr el equilibrio de género. Para obtener detalles sobre la metodología, consulte Perry et al. (2019),
y White y Raitzer (2017).

5
Machine Translated by Google

W.Perry Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238

tabla 1 efectivamente aumentó su autonomía en general. El auge de la industria ha roto el ciclo de la

Muestra: 829 participantes de la encuesta. Fuente: Cálculos del autor. producción tradicional de argán y
tejido un tapiz de cooperativas más o menos débiles, en su mayor parte
Muestra: 829 participantes de la encuesta
dependientes de intermediarios para obtener materias primas (Aziz et al., 2013). Todo
413 mujeres 416 hombres Las cooperativas de nuestra muestra adquirieron sus materias primas a granel.
compradores. Como explicó un trabajador cooperativo, “la cooperativa necesita
amazigh* 95% 99%
Casado** 76% 59%
dinero. No puede pagarnos ahora. Las materias primas son demasiado caras.”18 Las comunidades

Recibió al menos una educación superficial*** 30% 75% amazigh que antes eran autosuficientes encontraron
Capaz de escribir el nombre del pueblo cómodamente. 19% 60% sujetos a las fluctuaciones competitivas del mercado. Otro
posee terreno 5% 39%
Una mujer informó: “Una vez compramos nosotros mismos un saco de nueces de argán.
Obtiene ingresos 53% 87%
por 140 dirhams (14 dólares), los partió y vendió los granos por 160
Conoce los nuevos derechos de las mujeres. 37% 17%
dirhams (16 dólares). Sólo ganamos 20 dirhams (2 dólares). No vale la pena.”19

* Otros identificados como árabes, o amazigh y árabes.
** Otro 7% de las mujeres y el 1% de los hombres eran viudos, divorciados o separados, y el resto
no se había casado. Los casos de poligamia eran raros.
*** De la pequeña población de mujeres que habían asistido a la escuela, el 70 por ciento
lo hizo durante no más de tres a seis años.
decepcionados con los resultados donde lo hicieron, la población local, abrumadoramente
El amazigh, como refleja la Tabla 1 , expresaba una mezcla de fuerza e ingenio, desconfianza y
pesimismo, esperanza y desesperanza.
El acceso a la capacitación también es limitado y muchos gerentes de cooperativas (sin
experiencia en negocios y marketing) no están preparados para hacerlo.
competir con grupos de interés económico privados (Aziz et al., 2013).
Aunque un tercio de las cooperativas de nuestra muestra estaban dirigidas por mujeres de
negocios educadas y con talento natural, dos tercios enfrentaban situaciones de liderazgo.
desafíos que conducen a acusaciones de mala gestión, explotación,
corrupción y fraude. Un trabajador de una cooperativa en dificultades observó:
Nuestra cooperativa necesita que alguien nos ayude, pero no hay nadie. Otro

Los hombres eran especialmente obstinados en el tema del desarrollo, como Las cooperativas tienen apoyo, pero el nuestro no. Queremos vender nuestros productos más

Un hombre que reside cerca de una próspera cooperativa de argán comentó: “pocos ampliamente. Nos falta distribución y marketing. nunca hemos

la gente se beneficia de los programas de desarrollo”.8 El marido de una argán recibido alguna ayuda. No sé si el problema es nuestro presidente o

Un trabajador cooperativo de otros lugares se hizo eco de él al decir: “el desarrollo es qué. Otras cooperativas se gestionan mejor. […] Nosotros necesitamos

sólo una forma para que los líderes y autoridades obtengan dinero”. 9 Generalmente, los hombres
en comunidades con cooperativas de argán vieron pocos beneficios para las mujeres,
a pesar de los salarios. “Las mujeres aquí no tienen nada interesante.
oportunidades. No reciben ningún apoyo importante”, dice un tendero.
argumentó.10 Un joven de otra comunidad cooperativa de argán
estuvo de acuerdo: “nuestra comunidad no se interesa por las mujeres. los problemas de las mujeres
no son un objetivo.”11
Para las mujeres locales orgullosas de su oficio ancestral, el argán evocó opiniones
complicadas, visto como una bendición que sustentaba su civilización.
y un arrastre que los retiene. “Ningún otro programa de desarrollo
Aquí solo trabajo argán”, sugirió una mujer, reconociendo el alto
demanda del tesoro de la región.12 “El argán nos ayuda mucho”, otro
dijo una mujer.13 Otra mujer más en una comunidad subdesarrollada reconoció que con poco
acceso a la educación, las mujeres rurales podrían
ganar al menos algo de dinero con su conocimiento sobre el argán: “Necesitamos una cooperativa
(para el argán, por ejemplo), donde las mujeres analfabetas puedan trabajar.”14
Sin embargo, de manera circular, el analfabetismo limitó las opciones de las mujeres amazigh al
argán y, a su vez, el argán mantuvo a las mujeres en su lugar tradicional de analfabetismo. Como
observó una mujer, “hay una gran diferencia entre las mujeres rurales y las mujeres de la ciudad.
Las mujeres rurales no reciben educación y
No puedo hablar árabe. Queremos una oportunidad”. 15 A muchas mujeres no les gustó que el
La única oportunidad que se les dio fue el argán. “Aquí no tenemos nada excepto
argán”, era un lamento frecuente, y “todo lo que tenemos aquí es el argán
cooperativa. Eso no es suficiente.”16
alguien que nos enseñe cómo vender argán, cómo comercializarlo y cómo
encontrar clientes.20
Las trabajadoras, ellas mismas inversoras en la empresa del argán, pagan
cuesta mucho más que la cuota de membresía cooperativa por sí sola. El
La introducción de máquinas de filtración y extrusión para cumplir con los estándares globales ha
relegado a la mayoría de los trabajadores a la dura y repetitiva tarea de craquear.
nueces a mano, algunas con los dedos vendados, como observamos. En cierto
áreas transportadas en camiones desde pueblos cercanos, 21 trabajadores trabajaron
para todos los efectos como mano de obra de bajo costo, en el peor de los casos etiquetada
“mujeres estúpidas y analfabetas (femmes bêtes et analphabètes en francés)” por
un supervisor masculino que habló con nosotros, en lugar de una verdadera cooperación
miembros (Aziz et al., 2013; Perry et al., 2019). En nuestra evaluación, de la
participantes de la encuesta que trabajaban en cooperativas de argán, 95 por ciento
Solo nueces partidas. Sólo cuatro mujeres realizaban otras tareas, como
operar una máquina, contabilidad o ventas.
El mito de que el trabajo remunerado es suficiente para emancipar a los trabajadores pasa por alto
al menos una realidad: que las empresas en el mundo en desarrollo no regulado
pone en riesgo a las mujeres y otros trabajadores vulnerables. Este mito, fundamentado
en la teoría económica basada en las necesidades, es un enfoque insostenible, como afirma Nobel
el laureado Amartya Sen ha argumentado, abogando en cambio por soluciones
basado en los principios de derechos humanos y el desarrollo de capacidades (Sen,
2013). ¿Quién determina la necesidad?
Las leyes laborales marroquíes tratan a los trabajadores de las cooperativas como nacionales de facto
mano de obra. En todo el Medio Oriente y el Norte de África, los trabajadores domésticos,
Las mujeres, en su mayoría, disfrutan de protecciones mucho más débiles que otros trabajadores, y

7. Salarios: un indicador clave del empoderamiento incluso esas protecciones a menudo no se aplican (Moghadam y Senftova,
2005). Legalmente, en Marruecos, remuneración mínima por trabajo doméstico

“Aquí lo único que podemos hacer es trabajar en la cooperativa de argán, pero se fija en el 60 por ciento del salario mínimo estándar (obligatorio en 2018

no ganan mucho dinero”, informó un trabajador de una cooperativa.17 Nuestros resultados después de años de retraso), es decir, 8 dirhams por hora (0,96 dólares en 2014 y

muestran que el trabajo de las mujeres en la producción ampliada de argán no ha 0,83 dólares en 2017).22 En la propuesta DARED aprobada por las Naciones Unidas sin un plan
de acción de género en 2017, ANDZOA afirmó que “la
El proyecto tendrá un impacto significativo en la promoción del empleo y
8
Encuesta DM886GF, 23 de abril de 2015.
9
Encuesta LO990BG, 8 de enero de 2015.
10
Encuesta HY594FX, 27 de mayo de 2015.
11 18
Encuesta JQ611AA, 30 de mayo de 2015. Encuesta LK236XE, 6 de enero de 2015.
12 19
Encuesta KQ835ZZ, 7 de junio de 2015. Encuesta IV988TR, 3 de mayo de 2015.
13 20
Encuesta YG229HW, 8 de junio de 2015. Encuesta VB220IU, 1 de junio de 2015.
14 21
Encuesta AF821ON, 31 de mayo de 2015. Encuesta JN310SF, 11 de junio de 2015.
15 22
Encuesta EY955LX, 3 de mayo de 2015. Los valores monetarios se convierten de dirhams marroquíes a dólares estadounidenses en
Encuestas YU663FL, 28 de mayo de 2015, y MI496BV, 8 de junio de 2015. las tasas de 0,119 para 2014, 0,1026 para 2015, 0,102 para 2016, 0,1031 para 2017,
dieciséis

17 y 0,1042 para 2019.

Encuesta LK236XE, 6 de enero de 2015.

6
Machine Translated by Google
W.Perry
emancipación de las mujeres rurales”, prometiendo un ingreso de “4,5 dólares por
día por mujer” (Fondo Verde para el Clima, 2016a, 35). El salario mínimo
para los trabajadores en la industria manufacturera, el comercio y el libre comercio marroquíes es 85
dirhams (8,83 dólares) por una jornada de seis horas. Por ley, los trabajadores agrícolas ganan un
mínimo de 73 dirhams (7,73 dólares) por un día de trabajo.
Y, sin embargo, en nuestra evaluación, a la mayoría de las mujeres en el mundo informal y
desenfrenado de las cooperativas de argán les fue mucho peor de lo que proponía ANDZOA, y
en la mayoría de los casos ganaban mucho menos que la ya baja tasa de
$4.50 por día. En primer lugar, las mujeres que cascaban nueces, la mayoría de las cuales informaron
trabajaba seis horas al día, seis días a la semana, recibía salario no diario
pero de forma irregular para el trabajo a destajo, basándose en teoría en la cantidad de argán
granos que produjeron. La irregularidad salarial (ilegal en sectores formales)
hizo a las mujeres dependientes de los cálculos y la imparcialidad de
gestión cooperativa. Los trabajadores no tenían forma de verificar que sus
el salario era equitativo. En segundo lugar, aunque las mujeres tuvieron dificultades para estimar
sus ingresos, el ingreso medio aproximado reportado fue de $1.71
diario (400 dirhams o 41 dólares mensuales), aproximadamente un tercio del precio legal
ingresos mínimos de un trabajador doméstico que ya vive muy por debajo del
umbral de pobreza (1.163 dirhams o 119 dólares mensuales por la misma cantidad de
tiempo).23 Más importante aún, las ganancias declaradas oscilaron ampliamente entre 0,11 dólares
a 7,27 dólares diarios (entre 25 y 1.700 dirhams o entre 2,57 y 174,42 dólares mensuales), lo que
plantea cuestiones importantes. (1) ¿Es justa la tarifa DARED de $4,50 diarios y
¿factible? (2) ¿Esa tasa es promediada o fija? (3) Si se fija, ¿pueden las cooperativas
¿Pagar a los trabajadores por su tiempo en lugar de por su producción y aun así tener éxito? (4) ¿Algunos
¿Los trabajadores reciben menos salario que en el pasado mientras que otros reciben más? (5)
¿Cómo garantizará ANDZOA el cumplimiento? (6) ¿Se llevarán a cabo inspecciones laborales
rigurosas según el Código del Trabajo?
Según nuestras observaciones, no todas las cooperativas funcionaban de la misma manera, y
Una remuneración amplia correspondía naturalmente a una satisfacción amplia.
niveles. Como compartió un trabajador calificado de una próspera cooperativa: “Le debo
mi vida a la cooperativa. Mis hijos van al colegio gracias a ello. Tengo
comida y todo lo que necesito gracias a ello.'24 Otro trabajador estaba satisfecho
tener dinero para gastar. “Antes de trabajar aquí no tenía nada. Ahora yo
Tengo dinero de bolsillo y muchas cosas han cambiado en mi opinión”, dijo.25 Sin embargo ,
apenas el 15 por ciento de los trabajadores reportaron ganar salarios estándar. Aún,
Las mujeres apreciaron que incluso el trabajo mal remunerado ayudaba a sus
hogares en dificultades. Otras mujeres encontraron los frutos de su trabajo.
carente. “No me ha ayudado mucho. Solo un poco. No gano lo suficiente para
cubrir los gastos del hogar”, dijo un trabajador de la cooperativa, y otro,
"Es raro que podamos ganarnos la vida con el argán".26
8. El comercio justo performativo esconde desafíos
“Normalmente en la cooperativa no nos permiten hablar con los visitantes.
a menos que el jefe nos entrene de antemano”, explicó un trabajador sincero.27
El turismo, sólo superado por los fosfatos, es una gran fuente de ingresos para Marruecos,
especialmente en el sur, donde las cooperativas de argán se enfrentan a presiones.
no sólo para producir petróleo, sino también para poner en escena el empoderamiento del comercio justo
narrativa a los visitantes. Nuestras visitas no anunciadas y enfoque aleatorio
La selección de muestras desenmascaró los desafíos ocultos detrás de esta rutina.
hospitalidad y comercio justo performativo, exponiendo una situación general precaria
sector comercial para los trabajadores. Aunque algunas cooperativas en nuestro
La muestra no estuvo sujeta a informes negativos por parte de los participantes de la encuesta.
Se alegaba que dos tercios de ellos ponía en riesgo a los trabajadores. Estos riesgos fueron el
resultado de una mala gestión en algunos casos; en otros, la corrupción y
la codicia tenía rienda suelta en ausencia de vigilancia y protección adecuadas. Después de
completar nuestra encuesta, un participante nos saludó con la mano.
bajó para aliviar su conciencia con un comentario adicional:
23
El Banco Mundial fija el umbral de pobreza para Marruecos en 2015 en 3.030 dólares anuales
per cápita.
24
Encuesta OA102PT, 29 de diciembre de 2014.
25
Encuesta FH037JI, 23 de abril de 2015.
26
Encuestas FI002LK, 10 de diciembre de 2014, e IG243HI, 8 de junio de 2015.
27
Encuesta NY700GV, 4 de junio de 2015.
7
Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238
Yo era tesorero de la cooperativa, pero lo único que hacía era firmar los cheques. I
No estaba involucrado en la contabilidad. [Directores masculinos y femeninos]
Aceptaba cheques en blanco firmados por mí todo el tiempo, desde el
La cooperativa se fundó en 2005. Esto siempre me ha preocupado. I
no creo que sea correcto. Algo huele mal y no sé qué hacer.
hacer. No sé a dónde va ese dinero.28
Un trabajador de otra cooperativa confesó: “los demás funcionarios y yo
Presioné a las mujeres para que nos partieran nueces en casa, aparte. Nosotros
se embolsó el dinero. Ahora el asunto está en manos de los tribunales. Enfermo
probablemente vayan a prisión”. 29 “Se espera que todas las mujeres de la aldea
para trabajar en la cooperativa. Ni siquiera sabemos el precio actual del argán.
petróleo”, nos confiaron en secreto los trabajadores de otra cooperativa, añadiendo
que la dirección les pagaba “sólo un poco de dinero de vez en cuando”. 30 Uno
La trabajadora dijo que su nombre no fue agregado a la lista de la cooperativa hasta
cumplió dieciocho años, doce años después de empezar a cascar nueces
junto a su madre allí.31 En una industria sin licencia de maternidad obligatoria, la sobrina de una
mujer la reemplazó en la cooperativa
cuando, como explicó la sobrina, “la cooperativa le dijo a mi tía que ella
Perdería su lugar si no encontraba un reemplazo mientras tenía un
bebé”. 32 Los programas de enriquecimiento para trabajadores ampliamente publicitados no
siempre se materializaron. En una cooperativa que promovió directamente su alfabetización
clases a nuestro equipo de investigación, un participante seleccionado al azar informó
esperanza de que algún día la cooperativa ofreciera clases de alfabetización.33 Los hombres también
sufrido. Una mujer informó:
Mi marido ha trabajado como jardinero en el Argan.
Unión de Cooperativas desde hace diez años. Al principio le pagaron. Pero
el nuevo presidente no le ha pagado nada durante los últimos siete años.
Él sigue trabajando porque ella le dice que le pagará pronto, pronto.
Presentó una denuncia ante las autoridades locales, pero no han
respondió. ¿Cómo se supone que debemos vivir? Mi suegra nos da
dinero de su trabajo pastoreando cabras y cascando nueces de argán en
hogar. Mi marido todavía va a trabajar a las Cooperativas de Argán.
Unión todos los días.34
A pesar de la narrativa inclusiva de la arganicultura presentada a los forasteros, las
comunidades rurales han sufrido afrentas a sus tradiciones.
modos de vida. En nuestra muestra, 32 hombres identificaron la corrupción como el principal
obstáculo a los programas de desarrollo para las mujeres. La búsqueda de ganancias en
El desenfrenado universo argán ha traído consigo ofensas a la Shariah.
Ley: avaricia, competencia y violaciones del concepto puro tawuniya (cooperativo), según el cual
se comparten los beneficios. “Se supone que una cooperativa es colectiva, pero en realidad aquí
sólo el propietario
y el beneficio del director”, informó un hombre.35 Otro hombre preguntó: “¿No
¿Los estadounidenses saben que lo que ven en los medios marroquíes es lo opuesto a la
verdad?”36 Preocupaciones por la “dignidad” de las mujeres y la de los hombres.
El “valor” impregnó los comentarios de 416 hombres, muchos de los cuales desaprobaban
programas que podrían hacer que el papel del hombre “desapareciera” o
hacerlo “absurdo”. 37 Irónicamente, como la valoración económica del argán ha
atrajo a las mujeres a la fuerza laboral, la valoración ambiental de la
El bosque ha desplazado a los hombres. Los hombres desempleados y empleables residían en el 22%
de los 413 hogares de mujeres. Otro 21% de los hogares incluidos
hombres que recurrían a trabajos ocasionales por un salario exiguo, unos días a la semana al menos
mayoría. En el 53 por ciento de los hogares de mujeres, los salarios remunerados de las mujeres
el trabajo sostenía en gran medida a la familia, y en el 40 por ciento de los casos
28
Encuesta, WE398KH, 26 de abril de 2015.
29
Encuesta UB833KT, 29 de diciembre de 2014.
30
Encuestas SM501TE, NY700GV y WA459HF, 4 de junio de 2015.
31
Encuesta WA459HF, 4 de junio de 2015.
32
Encuesta YT863OI, 10 de diciembre de 2014.
33
Encuesta PA372ST, 22 de diciembre de 2014.
34
Encuesta SX258UV, 15 de diciembre de 2014.
35
Encuesta DR421AX, 23 de abril de 2015.
36
Encuesta PJ562HS, 1 de enero de 2015.
37
Encuestas OE271BU, 20 de diciembre de 2014, y TP844YC, 17 de diciembre de 2014.
Machine Translated by Google

W.Perry Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238

El trabajo consistía en cascar nueces. “Casi todos trabajamos argán”, una mujer en el uso de números. Sólo setenta y nueve mujeres (19 por ciento) calificaron su
se ofreció a decir: “Siempre tengo dolor de espalda”. 38 habilidades matemáticas básicas (es decir, 8 + 3=?, 100–50=?) como “buenas” o “muy buenas”.
Como indica el Cuadro 3 , las mujeres con conocimientos numéricos tenían entre un 22 y un 85 por ciento más probabilidades
que innumerables mujeres tengan la libertad de trabajar fuera del hogar
9. Medir el empoderamiento: Cascanueces no es suficiente
si lo deseaban, y sus hogares tenían entre un 13 y un 71 por ciento más de probabilidades de
ahorrar dinero. Las mujeres con capacidad numérica también tenían entre un 16 y un 85 por ciento más de probabilidades de
“Necesitamos más actividades y clases, no sólo cascanueces”, dijo uno
entienden sus derechos según el nuevo Código de Familia, entre un 9 y un 67 por ciento más
dijo el trabajador cooperativo.39 Nuestra evaluación empírica del sector informal
Es probable que tengan confianza en sus propias habilidades y capacidades generales, 8–64.
El sector del argán expone fallas en la lógica de mercado que impulsa las iniciativas de generación
por ciento más probabilidades de votar en las elecciones, y entre 49 y 127 por ciento más probabilidades
de ingresos financiadas por aliados transnacionales ejecutadas por el gobierno marroquí.
para saber adónde acudir si necesitaban ayuda.
Gobierno. Seguramente hoy en día hay abundante evidencia que refuta el argumento –explicado
La educación marroquí en todo el país tiene un rendimiento inferior al de otros
explícitamente por el proyecto DARED– de que las mujeres están emancipadas.
países de ingresos bajos y medios. La más reciente gran escala
simplemente uniéndose a la fuerza laboral remunerada (Cornwall, 2016; Cornwall et al.
La evaluación del aprendizaje estima que el 64 por ciento de los marroquíes realizaron
2007; Moghadam y Senftova, 2005; Pearson, 2004). Nuestra evaluación
por debajo del punto de referencia de rendimiento más bajo en lectura, en comparación con un
muestra que las cooperativas de argán pueden ofrecer una ayuda modesta a las mujeres y
promedio del 15 por ciento para los países pares, y el 59 por ciento lo hizo en matemáticas
sus comunidades cuando están reguladas, pero incluso entonces, esa ayuda por sí sola no
en comparación con el 17 por ciento de los otros países que administraron el
no empoderarlos. En general, observamos que, más a menudo que
misma valoración. Los niños rurales tienen menores posibilidades de obtener una buena
De no ser así, los trabajadores de las cooperativas estaban expuestos a graves riesgos derivados de
educación que los niños urbanos, y el 63 por ciento de las niñas y niños rurales
una gestión débil a la explotación y la delincuencia. Comunidades enteras fueron
abandonan la escuela en el nivel secundario (Banco Mundial, 2018).
susceptibles de incurrir en los costos sociales de la cadena de valor del argán en un
En palabras de un hombre local: “Aquí la oportunidad de obtener una buena
economía emergente insuficientemente supervisada por el Estado para mitigar
la educación no existe. Se podría decir que las mujeres aquí viven en el infierno.”41
estos riesgos, particularmente en materia de compensación laboral.
En general, sólo el 19 por ciento de las mujeres de nuestra muestra podían cómodamente
Por el lado positivo, en nuestro análisis, como refleja la Tabla 2 , la presencia de un
demuestran escribir el nombre de su aldea, un indicador bajo de alfabetización.
La cooperativa de argán se correlacionó positivamente con varios indicadores de empoderamiento.
La narrativa de empoderamiento de la empresa argán promueve la alfabetización
Las mujeres que vivían en comunidades con cooperativas eran entre 43 y 283
clases para trabajadores cooperativos y, sin embargo, la tasa de alfabetización que observamos
por ciento más propensos a sentirse optimistas sobre las oportunidades de mejorar
entre los trabajadores estaba por debajo del 18 por ciento, incluso más bajo que el ya bajo
sus vidas que las mujeres en comunidades sin asistencia para el desarrollo,
tasa para todas las mujeres participantes en la encuesta. “Si hubiera ido a la escuela,
y tenían entre 127 y 582 por ciento más probabilidades de obtener ingresos, ya sea en
"No podría callarme", exclamó una mujer, "por favor, no
una cooperativa de argán o por otros medios. Sus hogares también tenían una
olvídame.”42
mayor capacidad reportada para ahorrar dinero. Sin embargo, identificamos una fuerte
“Aquí las mujeres trabajan el argán. Eso nos ayuda, pero no es suficiente. Nosotros
correlación leve y positiva entre la existencia de cooperativas de argán
necesitamos clases de alfabetización y otros tipos de trabajo”, argumentó una mujer;43
y mujeres votando en las elecciones. Con un 95 por ciento de confianza, nuestros datos
y otro dijo: “Las mujeres no saben leer ni escribir, y aquí no hay nada
muestran que las mujeres en comunidades con cooperativas de argán tenían 3
que ellos hicieran excepto el argán”. 44 En otro lugar, otra mujer explicó
por ciento más probabilidades de votar a menudo o siempre y un 8 por ciento menos probable
que “[las mujeres] no pueden encontrar buenos trabajos sin una buena educación. La obra
nunca votar. En general, de las 413 mujeres encuestadas, 228 (55 por ciento)
y los salarios son demasiado bajos sin él. Sí, las mujeres pueden trabajar el argán, pero el argán
informaron votar a menudo o siempre, mientras que 144 (35 por ciento) votaron rara vez o
realmente no mejora sus vidas. Las mujeres necesitan educación.”45 En nuestro
nunca. Las mujeres que viven cerca de las cooperativas de argán con mayor frecuencia
evaluación, las mujeres analfabetas que buscaban trabajo remunerado tenían pocos recursos
comentó que recientemente habían comenzado a votar y planeaban mantener
que el argán. Además, los servicios de cuidado infantil en las cooperativas (por ejemplo, guarderías,
votar en el futuro, en contraste con las mujeres que viven en comunidades subdesarrolladas, la
escuelas) y las opciones para contratar trabajo desde casa rara vez fueron
mayoría de las cuales no se habían registrado para votar o no recibieron
observado, lo que sesgó la fuerza laboral hacia mujeres que no cuidaban a los jóvenes
sus votos.
niños, lo que limita aún más las opciones. Como miembro fundador de uno de los
Al mismo tiempo, sin embargo, nuestros datos revelan desventajas del argán.
Las cooperativas de argán más antiguas concluyeron: “Todo lo que tenemos es la cooperativa.
cooperativas en las comunidades, donde la carga de trabajo de las mujeres había aumentado sin
Eso no es mucho para el desarrollo humano”. Durante 16 años ella había roto
un aumento concomitante en su estatus o papel. mujeres que viven
nueces allí, desde que tenía 24 años. Cada mes descascaraba suficiente argán
en comunidades con cooperativas sintieron niveles más bajos de respeto por parte de otros
granos para producir más de siete litros de aceite por un valor de más de 2.000 dólares en
miembros de su hogar, menores niveles de solidaridad de las mujeres y
valor de exportación. Sin recibir remuneración por su trabajo en los primeros años de la cooperativa,
un poco menos de libertad para salir de la comunidad sin la compañía de un
estaba agradecido de ganar una media de 34 dirhams (3,75 dólares) al día,
hombre. Como observó una mujer que vivía cerca de una cooperativa: “Solía haber
trabajando de ocho a cinco. Aun así, quería que las mujeres tuvieran otras oportunidades. No sabía
Aquí habrá más solidaridad entre las mujeres. Las mentalidades han cambiado.
leer ni escribir. Ella no tenía sueños propios.
La gente está demasiado ocupada. Las mujeres se casan y se mantienen reservadas.
“Tal vez algún día”, dijo.46
Ya no hay espíritu para socializar.”40
Lo más importante es que no encontramos una correlación clara entre las mujeres
trabajar (en una cooperativa de argán o en cualquier otro lugar) y controlar sus
10. Desarrollo participativo y los beneficios de escuchar
propios activos financieros. Los sistemas familiares dependientes tradicionales de muchos
Los países en desarrollo suelen involucrarse en prácticas que involucran a las mujeres.
“Nadie escucha a las mujeres ni las ayuda. Las nuevas leyes no han llevado a ningún
compartir el control de sus ingresos con otros miembros de la familia (hombres y
Cambio en los pueblos. Las autoridades locales hablan, hablan, hablan, pero nadie
mujer), o renunciar por completo al control.
escucha. La gente les tiene miedo y está cansada”, se lamentó una mujer.47 En principio, el
La falta de habilidades matemáticas básicas de una mujer socava su confianza en
desarrollo inclusivo implica escuchar y
administrar el dinero por su cuenta. Nuestro análisis encontró que la aritmética, no
alfabetización o trabajo, se correlacionó positivamente con el mayor número de indicadores de
41
empoderamiento de las mujeres con al menos un 95 por ciento de confianza. Todavía Encuesta VC024EW, 10 de mayo de 2015.
42
la mayoría de las mujeres que encuestamos (81 por ciento) no estaban seguras Encuesta KA943LO, 11 de mayo de 2015.
43
Encuesta NH251UR, 14 de mayo de 2015.
44
Encuesta ZR019KD, 9 de diciembre de 2014.
38 45
Encuesta RJ714VD, 14 de mayo de 2015. Encuesta HA393AM. 14 de junio de 2015.
39 46
Encuesta BC859OS, 22 de diciembre de 2014. Encuesta OA102PT, 29 de diciembre de 2014.
40 47
Encuesta YV874BC, 28 de abril de 2015. Encuesta GE004MA, 4 de enero de 2015.

8
Machine Translated by Google

W.Perry Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238

Tabla 2
Efectos del tratamiento en las mujeres participantes de la encuesta. Fuente: Cálculos del autor.

Efectos sobre las mujeres participantes en la encuesta en comunidades con cooperativas de argán

Efectos de las cooperativas de argán en personas únicas y dependientes Efecto Impares [95% de confianza Valor p estándar Observaciones de error (de 413) Tasa de respuesta
Variables para las mujeres Relación** Intervalo]

Ingresos del participante Positivo 3.932 2.268 6.817 0.000 1.101 410 0,99
Ver oportunidades en la comunidad para que las mujeres mejoren Positivo 2.340 1.427 3.834 0.001 0,588 404 0,98
sus vidas/perseguir metas
Capacidad del hogar para ahorrar dinero. Positivo 2,134 1.248 3.649 0,006 0,582 402 0,97
Percibir la solidaridad de las mujeres en comunidad Negativo 0,530 0.326 0.862 0.011 0.131 407 0,99
Sentirse respetado por los demás en el hogar. Negativo 0,475 0.248 0.908 0.025 0,157 407 0,99
Libertad para salir de la comunidad sin un hombre. Negativo 0,556 0.331 0.932 0,026 0,146 404 0,98

** Un odds ratio se calcula tomando la probabilidad de una respuesta y dividiéndola por la probabilidad de la(s) alternativa(s). Para respuestas en una escala ordinal (es decir,
no sí/no), el efecto es un promedio constante.

Tabla 3
Efectos de la aritmética en las mujeres participantes en la encuesta. Fuente: Cálculos del autor.

Efectos de la aritmética en las mujeres participantes en la encuesta

Efectos de la aritmética* sobre las variables únicas y dependientes Odds ratio** [intervalo de confianza del 95%] Valor p estándar error Observaciones (de 413) Tasa de respuesta

Capacidad para trabajar fuera de casa. Positivo 1.498 1.216 1.845 0.000 0,159 403 0,98
Actitudes sobre las mujeres que trabajan fuera de casa Positivo 1.345 1.068 1.692 0.012 0,157 407 0,99
Capacidad del hogar para ahorrar dinero. Positivo 1.386 1.126 1.706 0.002 0,147 402 0,97
Conocimiento de los nuevos derechos de las mujeres. Positivo 1.469 1.164 1.852 0.001 0,173 407 0,99
Confianza en las propias habilidades y habilidades. Positivo 1.348 1.089 1.668 0.006 0,146 406 0,98
Frecuencia de votación en las elecciones. Positivo 1.328 1.079 1.635 0.007 0.140 404 0,98
Conocimiento de dónde acudir en busca de ayuda. Positivo 1.834 1.486 2.265 0.000 0,197 405 0,98

*
Aritmética (habilidades matemáticas básicas), la variable independiente, medida en una escala Likert ordinal.
** Ver Tabla 2.

involucrar a las comunidades locales; sin embargo, en nuestra muestra sólo el 8 por ciento de Tabla 4
Las mujeres y el 7 por ciento de los hombres habían hablado alguna vez con alguien fuera de su grupo. Metas/sueños de las mujeres para sí mismas. Fuente: Cálculos del autor.
comunidad. De los que sí lo habían hecho, la mayoría identificó a “extranjeros”, profesores,
Metas/sueños de las mujeres para sí mismas* Mujeres 207 de 413 respuesta
estudiantes, agencias donantes y personal de organizaciones sin fines de lucro no marroquíes. El tasa: 50%
El presidente de un grupo de jóvenes de una aldea citó una excepción notable cuando
Encontrar un buen trabajo (p. ej., costura, pastelería) 111
El Ministro de Agua y Bosques de Marruecos realizó una visita en busca de opiniones.
Casarse, tener y criar hijos, mantener una 51
“Pero fue vago”, dijo el hombre.48
hogar
Escuchar para apreciar las perspectivas locales influye en la sostenibilidad Asistir a la escuela, tomar clases 42
soluciones y aumenta su potencial “más allá de los mercados y los estados”, como Ser feliz y estar bien, vivir cómodamente 11

argumentó la premio Nobel Elinor Ostrom (Ostrom, 2009). Reconociendo esto Tiene metas pero no puede articularlas Trabaja 10
con argán 13
beneficio, nuestro equipo de investigación aprendió de los habitantes de los bosques que las
cooperativas de argán pueden ayudarlos hasta cierto punto, cuando se las apoya de manera efectiva,
* Comentario abierto, se permiten múltiples respuestas.
gestionados y monitoreados. Sin embargo, las cooperativas no resuelven problemas estructurales
e interseccionales y, en algunos casos, al carecer de los atributos de una economía formal,
participantes (35 por ciento) creían que las mujeres de su comunidad
pueden acentuar las desigualdades de género.
Necesitaba opciones laborales además del argán. Y, sin embargo, en general el boom del argán
género, etnia y clase.
ha limitado a la mayoría de las mujeres rurales de la región a cascar nueces para ganar dinero.
En un momento de nuestra encuesta, preguntamos a las mujeres si tenían metas,
Una mujer que vivía cerca de una cooperativa informó: “Soy originaria de
sueños o deseos para sus propias vidas. La mitad de ellos respondió que
Salé, cerca de Rabat. Allí enseñé a las niñas a coser. Cuando me casé y me mudé
No. “No tengo metas ni sueños. Sólo rompo nueces de argán, eso es
aquí dejé de enseñar costura, porque aquí las mujeres solo trabajan
todos”, respondió rotundamente un trabajador de la cooperativa.49 Otros informaron haber
argán. Ahora me quedo en casa.51 Con la atención centrada singularmente en
metas, pero me costó articularlas, como en "sí, tengo metas, pero no
argán, se pasan por alto otras oportunidades.
No sé cuáles son” o “Tengo tantas ideas en la cabeza que no puedo
Sorprendentemente, cuando preguntamos a todos los participantes sobre sus esperanzas de
Ni siquiera puedo encontrar las palabras para hablar de ellos.”50
las niñas de su comunidad, mujeres y hombres respondieron con extraordinaria similitud, como
Argán estuvo notoriamente ausente de la mayoría de las respuestas afirmativas.
lo muestra el Cuadro 5 . Nadie reporta esperanzas para las niñas
respuestas. Como refleja el Cuadro 4 , sólo 13 mujeres (6 por ciento) deseaban
Luché por articularlos, y nadie, ni mujer ni hombre, mencionó el argán. En cambio, la mayoría de
administrar su propia cooperativa de argán o trabajar en una si aún no lo hicieron. La mayoría de
los participantes que respondieron afirmativamente esperaban que las niñas permanecieran en
los encuestados deseaba encontrar un “buen trabajo” y cuando se les preguntó
la escuela más allá del nivel primario y
por ejemplo, la costura o la pastelería más específicas, otras formas de
encontrar trabajos “respetables” y “dignos”. En la mayoría de los casos, la educación y el empleo
mano de obra femenina calificada que, aunque no sea tan comercializable globalmente como el
iban de la mano. Dieciséis mujeres imaginaron explícitamente
argán, satisfaría las necesidades locales. Más de un tercio de las 413 mujeres
vidas para las niñas que serían “mejores” o “no similares” a las suyas, y
la mayoría de esas mujeres trabajaban el argán. Curiosamente, a diferencia de las mujeres
deseos para ellos mismos, para las niñas, tanto mujeres como hombres compartieron ejemplos
48
Encuesta BE003TY, 28 de mayo de 2015.
49
Encuesta QW975JB, 13 de junio de 2015.
50 51
Encuestas TB778VX, 31 de mayo de 2015, y AX786SR, 3 de mayo de 2015. Encuesta OK757OH, 7 de enero de 2015.

9
Machine Translated by Google

W.Perry Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238

Tabla 5
Las esperanzas de mujeres y hombres para las niñas locales. Fuente: Cálculos del autor.

Las esperanzas de mujeres y hombres para las niñas locales* Mujeres 218 de 413 tasa de respuesta: 53% Hombres 179 de 416 tasa de respuesta: 43%

Permanecer en la escuela, encontrar un buen trabajo (por ejemplo, enseñanza, ingeniería) 183 143
Casarse, tener y criar hijos, mantener un hogar Ser feliz y 31 19
estar bien, vivir cómodamente Tiene 23 19
esperanzas pero no puede expresarlas Trabaja 0 0
con argán 0 0

* Comentario abierto, se permiten múltiples respuestas.

de trabajos profesionales sin género, como la enseñanza, la ingeniería, el derecho, La cultura amazigh se ha comercializado más que fortalecido.
medicina y trabajo gubernamental. Un hombre esperaba que las chicas locales La mayoría de las trabajadoras han sido relegadas a un solo paso de su oficio.
crecer “para dar buenos ejemplos a las mujeres amazigh al tener una buena educación y buenos en el proceso tecnificado de producción de argán, el arduo trabajo de
trabajos”. 52 En general, más de unas pocas respuestas de hombres expresaron orgullo amazigh. cascar nueces.
¿Las cooperativas ayudan a las mujeres? Marginal y desigualmente. Sobre el
en conjunto, ellos por sí solos no los empoderan de manera efectiva. En definitiva, nuestra
El análisis muestra que las mujeres en el suroeste de Marruecos soportan más que sus
11. Conclusión y discusión
una parte justa de las cargas de la injusticia social, política y económica.
Mientras que las cooperativas de argán se correlacionaron positivamente con tres empoderamientos
Esta evaluación de impacto de la floreciente industria del argán ofrece evidencia empírica
indicadores: mujeres que obtienen ingresos, visión de oportunidades en la comunidad y ahorros
de las responsabilidades que se incurren cuando los estados priorizan el crecimiento económico
del hogar, también identificamos correlaciones negativas. Las mujeres que viven en comunidades
sobre la sostenibilidad social. Aplicamos la teoría
con cooperativas de argán se sintieron menos
modelo de empoderamiento de las mujeres para encuestar a 829 residentes locales y
respetados en sus hogares, menos solidaridad de las mujeres y menos libertad
descubrió que comercializar la artesanía tradicional femenina del argán no es
de movilidad. Lo más importante es que no encontramos una correlación clara entre
suficiente para emancipar a las mujeres de la tradicional desigualdad de género:
cooperativas de argán y mujeres que controlan sus activos financieros. Sobre el
de los ODS de las Naciones Unidas. Las investigaciones sobre el impacto social de las iniciativas
Por otro lado, encontramos correlaciones fuertes y positivas entre la capacidad de aritmética
de desarrollo en Oriente Medio y el Norte de África son escasas. Este
habilidades y un elevado número de indicadores de empoderamiento, incluida la capacidad de las
El proyecto revela que, en general, las intervenciones en el argán de Marruecos
mujeres para trabajar, su confianza en sí mismas, su conocimiento de sus derechos, su derecho a votar,
El sector ha sostenido marginalmente a las comunidades rurales mediante la contratación
y ahorros de los hogares, validando empíricamente la educación como una
Las mujeres amazigh como mano de obra calificada, mercantilizando sus conocimientos
herramienta de empoderamiento predictivo que el trabajo manual por sí solo.
sin protecciones adecuadas, en lugar de empoderarlos de manera
Nuestros resultados respaldan el argumento de que la economía racional y neoliberal
que promuevan la igualdad de género.
Las políticas suponen una formalidad para las empresas que simplemente no existe en el mundo.
Al aprovechar claramente el argán, Marruecos ha cedido ante dos
economías en desarrollo, especialmente en las regiones rurales. Tampoco integrar
trampas del desarrollo que perpetúan la pobreza: (1) aprovechar un recurso natural rico y
La incorporación de capital humano desempleado a la fuerza laboral remunerada constituye
explotable, y (2) una gobernanza ineficaz (Collier,
empoderamiento o emancipación para esos trabajadores, sin disposiciones adecuadas para
2007). El reino ha adoptado un enfoque ecológico impulsado por el mercado.
igualdad de salario, seguridad y beneficios no salariales, como el cuidado de sus hijos.
desarrollo en asociación con inversores transnacionales. Las partes interesadas externas,
salud reproductiva y acceso a la educación y la formación. De acuerdo a
incluidas las agencias de ayuda y las corporaciones multinacionales, han
Según una mujer, “muchas cosas han cambiado para las mujeres en las ciudades, pero nada
contribuido a transformar el bosque de argán en un motor de crecimiento económico
cambiado para nosotras aquí en la aldea”. 54 En el mundo en desarrollo, las mujeres
crecimiento y al mismo tiempo anuncian soluciones al cambio climático que aliviarán
El trabajo está en gran medida desregulado y desprotegido, como lo documenta nuestra
pobreza y empoderar a las mujeres. Nuevos marcos regulatorios e innovaciones en ciencia y
evaluación. Las leyes laborales marroquíes subestiman y no regulan lo suficiente
tecnología se han cruzado para apoyar la reforestación aparentemente en beneficio de las
trabajo, un sector abrumadoramente femenino que incluye, por extensión, a los trabajadores
poblaciones locales, al tiempo que, en última instancia, legitiman las invasiones de su ecosistema.
cooperativos. Incluso en términos puramente económicos, aunque nuestros datos
la narrativa de
revelan que algunos trabajadores cooperativos obtuvieron un nivel (aunque bajo)
aceite de argán como producto de salud y belleza orgánico certificado y de comercio justo,
salario, el 85 por ciento ni siquiera ganaba eso. Sin duda, el
mercantilizado para un mercado global socialmente responsable, pasa por alto la
La carga de trabajo para las mujeres en el bosque de argán se ha intensificado mientras su
Transferencia gradual de la tierra, materias primas y proceso de extracción de petróleo.
El estatus ha cambiado poco.
desde los pueblos amazigh hasta el Estado y los intereses empresariales. Nacional
¿Puede la cadena de valor del argán adaptarse para responder más directamente a las
y los grupos de interés internacionales gestionan la economía rural informal
necesidades de la población local, construyendo sus capacidades para la sostenibilidad social?
a través de una creciente y compleja red de intermediarios administrativos,
Medidas socialmente responsables a nivel internacional, nacional,
corredores y distribuidores. Regulación insuficiente en este desenfrenado y los niveles locales harían avanzar a Marruecos en su camino hacia una sostenibilidad
campo ha dado lugar a la competencia, la corrupción y la codicia, poniendo en peligro
equilibrada. Para mejorar la coordinación y la claridad de la misión, las partes interesadas de
tradiciones locales y exponer a las trabajadoras a riesgos. como un joven extremo a extremo de la cadena de valor deben comprender la
Una mujer local comentó: “las mujeres necesitan un portavoz y un defensor.
conceptos de sostenibilidad social y empoderamiento.
Los funcionarios siempre dicen que están comprometidos con el desarrollo, incluidos los
A nivel internacional, (1) las organizaciones transnacionales y los donantes extranjeros
programas para mujeres, pero nunca lo cumplen. Esta comunidad necesita
deben respetar los estándares, asumir la responsabilidad social en
supervisión.”53
poner condiciones a la ayuda y alejarse de la estricta verticalidad
Las cooperativas de mujeres desempeñan un papel fundamental en este desenfrenado
enfoque, a carteras diversificadas que asignan fondos a las mujeres
sector emergente. Sin embargo, lejos del desarrollo inclusivo y autoorganizado
grupos sin fines de lucro y agencias gubernamentales. (2) Agencias de ayuda
solución que presentan los intereses hegemónicos a inversores y consumidores,
Sólo se deben considerar propuestas que incorporen las ciencias sociales y
Las cooperativas son testigos de la progresiva subordinación de la población local.
experiencia en género en su diseño, implementación, seguimiento y
población al control nacional e internacional. A través del argán,
evaluación, para garantizar que se proporcione el apoyo adecuado a las mujeres. (3)

52
Encuesta NU789BV, 1 de enero de 2015.
53 54
Encuesta BI440QM, 29 de abril de 2015. Encuesta VB220IU, 1 de junio de 2015.

10
Machine Translated by Google
W.Perry
Investigadores independientes calificados deben evaluar los costos y beneficios,
evitando el sesgo de selección y el peligro del comercio justo performativo con una
buena dosis de escepticismo. Las partes interesadas pueden financiar estas
evaluaciones siempre que se proteja la libertad científica.
A nivel nacional, (1) el Gobierno marroquí, como principal actor e inversor,
también debería adoptar las tres recomendaciones de política anteriores. Además,
(2) debería involucrar a mujeres y hombres locales en la identificación de soluciones
relacionadas con la arganicultura y otorgar a los locales un papel más destacado en
su planificación y ejecución. Lo más importante es que (3) las leyes laborales y los
marcos regulatorios deben revisarse y aplicarse para proteger a los trabajadores de
las cooperativas. El Estado debe garantizar un salario mínimo justo y también debe
proporcionar prestaciones básicas, como la licencia de maternidad y el acceso a la
educación y la formación.
A nivel local, (1) los administradores de cooperativas deberían aprovechar la
capacitación cuando exista acceso. (2) Para atraer a un mayor número de mujeres
jóvenes y maximizar el potencial de impacto transformador, las cooperativas
deberían adaptar los servicios de enriquecimiento a las necesidades de sus
trabajadores cuando se les concedan los recursos para implementarlos,
independientemente del resultado final. En nuestra observación, la satisfacción de
los trabajadores fue mayor en las pocas cooperativas que buscaron enriquecer a
sus trabajadores, aparentemente debido al liderazgo de mujeres empresarias
educadas y creativas más que a intervenciones que preparen a mujeres gerentes.
Estos servicios podrían incluir licencia de maternidad, cuidado de niños, trabajo
remoto, programas educativos y capacitación en habilidades distintas al cascanueces,
como costura u otras funciones en el proceso de producción de argán.
Si se regula para garantizar ganancias equitativas, el sector del argán puede
desempeñar un papel en el desarrollo de las comunidades rurales y bien puede
servir como trampolín para otras actividades generadoras de ingresos que emplean
a segmentos más amplios de la población. La sostenibilidad social requiere un
enfoque que responda a las necesidades locales. Es necesario aliviar las cargas
actuales que soportan los bosques de argán y las mujeres rurales. Las intervenciones
mixtas que brindan oportunidades generadoras de ingresos junto con educación en
habilidades para la vida y otras capacitaciones tienen el mayor potencial para
empoderar. En el futuro, el valor residirá en investigaciones que investiguen más a
fondo los beneficios y costos para las trabajadoras en tales intervenciones. Serían
especialmente interesantes las evaluaciones de diferentes actividades generadoras
de ingresos, los estudios comparativos, las evaluaciones previas y posteriores y los
análisis de los sistemas familiares para evaluar el empoderamiento (y el
desempoderamiento). Además de la cuestión del trabajo, otros indicadores de
empoderamiento, como la alfabetización y la aritmética, deberían seguir midiéndose
a lo largo del tiempo. Más allá del impacto social, profundizar en el negocio del
aceite de argán (es decir, las operaciones cooperativas y la cadena de valor en
general) podría ayudar a determinar dónde residen las fortalezas y las necesidades
de mejora. Los nuevos conocimientos en estas áreas respaldarán los esfuerzos de
desarrollo en su búsqueda de lograr una sostenibilidad plena y equilibrada.
Fondos
Este trabajo fue apoyado por la Asociación Fulbright (Beca Académica de EE.
UU. 8365­MO).
Declaración de contribución de autoría CRediT
Wendy Perry: Conceptualización, Metodología, Adquisición de fondos, Recursos,
Administración de proyectos, Investigación, Escritura ­ borrador original, Escritura ­
revisión y edición.
Declaración de intereses en competencia
Los autores declaran que no tienen intereses financieros en conflicto ni relaciones
personales conocidas que pudieran haber influido en el trabajo presentado en este
artículo.
11
Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238
Agradecimientos
Nuestro agradecimiento a los participantes del proyecto; a los miembros del
equipo de investigación: Olivia Rappe, Ali Boulhaoua, Latifa Hassan Loux, Youness
Elhouss, Hichame Ait Ahssain, Zohra Ait Barich, Hasna Akhiyat, Tayeb Amine
Aznague y Sahar Hraïd; a colegas en Estados Unidos y en el extranjero que
apoyaron el proyecto; y a revisores anónimos de la revista.
Referencias
Agrawal, A. (2005). Ambientalidad: Tecnologías de gobierno y la formación de sujetos.
Durham, Carolina del Norte, Londres: Duke University Press.
Ajmal, MM, Khan, M., Hussain, M. y Helo, P. (2018). Conceptualizar e in­
Corporar la sostenibilidad social en el mundo empresarial. Revista Internacional de Desarrollo
Sostenible y Ecología Mundial, 25(4), 327–339. https://doi.org/10.1080/13504509.2017.1408714 .
Aziz, L. (2016). Des saviors locaux et una gestion communautaire à valoriser: Le cas de la forêt d'arganier d'Essaouira
au Maroc. En C. Farcy y N. Huybens (Eds.). Bosques, conocimientos y motivaciones. París: L'Harmattan.
Aziz, L., Mormont, M. y Allali, K. (2013). Efectos de la marchandización de l'arganier sobre la vida socioéconómica
de las poblaciones de l'arganeraie marocaine. VertigO – La revista électronique en sciences de l'environnement,
13(1), 1–19.
Bergh, SI (2012). Neoliberalismo 'inclusivo', reformas de la gobernanza local y redespliegue del poder
estatal: el caso de la Iniciativa Nacional para el Desarrollo Humano (INDH) en Marruecos. Política
mediterránea, 17 (3), 410–426. https://doi. org/10.1080/13629395.2012.725304.
Bergh, SI (2017). La política de desarrollo en Marruecos: gobernanza local y participación.
ción en el norte de África. Londres, Nueva York: IB Taurus.
Boström, M. (2012). ¿Un pilar perdido? Desafíos en la teorización y la práctica social.
Sostenibilidad: Introducción al número especial. Sostenibilidad: ciencia, práctica y políticas, 8(1), 3–14.
https://doi.org/10.1080/15487733.2012.11908080.
Charrouf, Z. y Guillaume, D. (2014). Aceite de argán: el producto de 35 años de investigación.
Revista europea de ciencia y tecnología de lípidos, 116(10), 1316–1321. https://doi.org/10.1002/ejlt.201400261 .
Charrouf, Z. y Guillaume, D. (2018). El proyecto del aceite de Argán: De la utopía a la realidad en 20 años. OCL:
Semillas oleaginosas, cultivos grasos y lípidos, 25(2), D209. https://doi.org/10. 1051/ocl/2018006.
Collier, P. (2007). Los mil millones más pobres: por qué los países más pobres están fracasando y qué se puede hacer
hecho al respecto. Oxford, Nueva York: Oxford University Press.
Cornualles, A. (2016). Empoderamiento de las mujeres: ¿Qué funciona? Revista de Internacional
Desarrollo, 28(3), 342–359.
Cornwall, A., Harrison, E. y Whitehead, A. (Eds.). (2007). Feminismos en el desarrollo: contradicciones,
contestaciones y desafíos. Londres, Nueva York, Nueva York: Zed.
Damamme, A. (2011). El difícil reconocimiento del trabajo femenino en Marruecos: Le cas des
cooperativas de huile d'argan. Toulouse, Francia: ERES85–106.
Davis, D. (2000). ¿El ambientalismo como control social? Una exploración de la transformación de las
sociedades pastoriles nómadas en el norte de África colonial francesa. Geógrafo del mundo árabe, 3(3),
182–198. https://doi.org/10.5555/arwg.3.3.1262g1tt86w84266.
Davis, DK (2007). Resucitando el granero de Roma: historia ambiental y expansión colonial francesa en el norte
de África. Atenas, OH: Ohio University Press.
Duflo, E. (2012). Empoderamiento de las mujeres y desarrollo económico. Revista de Economía
Literatura, 50(4), 1051–1079.
Ennaji, M. (2015). Los bereberes en Marruecos: de los márgenes al centro. Trenton, Nueva Jersey: rojo
Prensa marina 85–98.
Falasca, SL, Pitta­Alvarez, S. y Ulberich, A. (2018). Las áreas potenciales de crecimiento
para Argania spinosa(L.) Skeels (Sapotaceae) en las tierras secas de Argentina. Revista Internacional de
Agronomía, 2018. https://doi.org/10.1155/2018/9262659.
Fondo para la Paz (2019). Informe anual del Índice de Estados Frágiles 2019. Washington, DC: Fondo para la Paz.
https://tinyurl.com/y4eft4t6.
Genin, D. y Simenel, R. (2011). Manejo forestal endógeno bereber y configuración funcional de los bosques
rurales en el sur de Marruecos: implicaciones para las opciones de manejo forestal compartido. Ecología
humana, 39(3), 257–269. https://doi.org/10.1007/s10745­011­9390­2 .
Investigación de Grand View. (2020). Informe de análisis de tendencias, participación y tamaño del mercado de
aceite de argán por tipo (convencional, orgánico), por forma (absoluta, concentrada, mezcla), por
aplicación, por canal de distribución, por región y pronósticos de segmento, 2020­2027. San Francisco,
CA : Investigación de Grand View. https://www.grandviewresearch. com/industry­analysis/argan­oil­market
Consultado el 28 de junio de 2020.
Fondo Verde para el Clima (2016a). Propuesta de Financiamiento FP022: Desarrollo de huertos de Argán en
Ambiente Degradado – DARED. 27 de septiembre de 2016. https://tinyurl.com/y239jk4x Consultado el 12 de
junio de 2019.
Fondo Verde para el Clima (2016b). Proyecto “Establecimiento de huertos de argán en zonas degradadas
Ambientes” DARED: Evaluación de Impacto Ambiental y Social & PGAS.
Salvaguardias ambientales y sociales. FP022: Desarrollo de huertos de Argán en Medio Degradado
(DARED). 1 de agosto de 2016. https://tinyurl.com/y47syfcm Consultado el 19 de julio de 2019.
Hanieh, A. (2011). ¿Prioridades cambiantes o seguir como siempre? Continuidad y cambio en el compromiso del
FMI y el Banco Mundial con Túnez, Marruecos y Egipto después de 2011.
Revista de estudios de Oriente Medio, 42 (1), 119­134.
Hasnaoui, A. y Krott, M. (2019). Optimización de las instituciones forestales estatales para los habitantes de los
bosques: un estudio de caso sobre sostenibilidad social en Túnez. Sostenibilidad, 11, 1954. https://doi.
Machine Translated by Google
W.Perry
org/10.3390/su11071954.
Hoffman, KE (2008). Compartimos muros: lengua, tierra y género en el Marruecos bereber.
Malden, MA: Wiley­Blackwell.
INDH. 2019. Presentación Fase III 2019­2023. https://tinyurl.com/y8kykjj9 Accedido
29 de junio de 2020.
Kerkech, R. (2016). Los derechos culturales de las mujeres marroquíes: una perspectiva psicosocial sobre
paradojas culturales. En F. Sadiqi (Ed.). Movimientos de mujeres en el norte de África posterior a la
'Primavera Árabe' (págs. 267–282). Nueva York, Nueva York: Palgrave Macmillan.
Khallouki, F., Eddouks, M., Mourad, A., Breuer, A. y Owen, RW (2017). Aspectos etnobotánicos,
etnofarmacológicos y nuevos conocimientos fitoquímicos sobre los frutos del argán marroquíes. Revista
Internacional de Ciencias Moleculares, 18(11), 2277. https://doi.org/10. 3390/ijms18112277.
Lybbert, TJ (2007). Requisitos de divulgación de patentes y distribución de beneficios: un caso contrafáctico
del aceite de argán de Marruecos. Economía ecológica, 64, 12­18.
Lybbert, TJ, Aboudrare, A., Chaloud, D., Magnan, N. y Nash, MS (2011). Los mercados en auge del aceite de
argán marroquí parecen beneficiar a algunos hogares rurales al tiempo que amenazan el bosque
endémico de argán. Actas de la Academia Nacional de Ciencias, 108(34), 13963–13968. https://goo.gl/
cZwEMc.
Lybbert, TJ y Barrett, CB (2002). Conservación basada en el mercado y beneficios locales: el caso del aceite de
argán en Marruecos. Economía ecológica, 41 (1), 125­144. https://doi.org/10.1016/S0921­8009(02)00020­4 .
Michón, G. (2015). Agriculteurs à l'ombre des forêts du monde: Agroforesteries vernaculaires.
Arlés, París: Actes Sud.
Michon, G., Genin, D., Romagny, B., Alifriqui, M. y Auclair, L. (2017). Autour de l' arganier: ¿Jusqu'où peut­on
“faire son marché” dans les saviors locaux? Autrepart, 81 años, 75–90.
Ministerio de Cultura y Comunicación. (2005). Discours Royal de Sa Majesté le Roi
Mohammed VI (18 de mayo de 2005). https://tinyurl.com/y8rxfjn4 Consultado el 28 de junio de 2020.
Ministerio de Cultura y Comunicación. (2016). Texte intégral du Discours adressé par SM le Roi lors de la Séance
solennelle de Haut Niveau de la COP 22, 15 de noviembre de 2016. https://tinyurl.com/y2tgshfe. Consultado
el 2 de julio de 2019.
Ministerio de Cultura y Comunicación. (2018b). Mensaje dirigido por SM le Roi aux
participantes en la 2­ème édition du sommet annuel de l'Initiative 'Mujeres en África', 27 de septiembre de
2018. https://tinyurl.com/y6d8ulpz Consultado el 26 de junio de 2019.
Ministerio de Cultura y Comunicación. (2018a). Discursos de SM le Roi à la Nation en ocasión del 65ème
anniversaire de la Révolution du Roi et du Peuple. 20 de agosto de 2018. https://tinyurl.com/y2tmplnv
Consultado el 26 de junio de 2019.
Moghadam, V. y Senftova, L. (2005). Medición del empoderamiento de las mujeres: participación y derechos
en los ámbitos civil, político, social, económico y cultural. Documento de trabajo de la UNESCO, UNESCO:
Oxford. https://tinyurl.com/y49cl3w.
Montanari, B. y Bergh, SI (2019). Un análisis de género de la generación de ingresos
12
Perspectivas de Desarrollo Mundial 20 (2020) 100238
actividades del Plan Marruecos Verde: ¿quién se beneficia? Ecología humana, 47(3), 409–417.
https://doi.org/10.1007/s10745­019­00086­8.
Nouaim, R. (2005). L'Arganier au Maroc: Entre Mythes et Realités, una civilización nacida de una
árbol. París: L'Harmattan.
ODCO (Oficina de Desarrollo de la Cooperación). (2017). La taxe parafiscale. https://
goo.gl/1PntUn Consultado el 11 de agosto de 2019.
Ostrom, E. (2009). Un marco general para analizar la sostenibilidad de los sistemas socioecológicos. Ciencia,
325, 419–422. https://doi.org/10.1126/science.1172133.
Pearson, R. (2004). Mujeres, trabajo y empoderamiento en una era global. Boletín IDS (Instituto de
Estudios del Desarrollo), 35(4), 117–124.
Perry, W., Rappe, O., Boulhaoua, A., Loux, LH, Elhouss, Y., Ait Ahssain, H., ... Hraïd, S.
(2019). El aceite de argán y la cuestión del empoderamiento en el Marruecos rural. La Revista de Estudios
del Norte de África, 24(5), 830–859. https://doi.org/10.1080/13629387.2018. 1542596.
Rocheleau, D., Thomas­Slayter, B. y Wangari, E. (2013). Ecología política feminista: cuestiones globales y
experiencia local. Londres, Nueva York, Nueva York: Routledge.
Sadiqi, F. (Ed.). (2014). Discursos feministas marroquíes. Nueva York, Nueva York: Palgrave Macmillan.
Sen, A. (2013). Los fines y medios de la sostenibilidad. Revista de Desarrollo Humano y Capacidades, 14(1), 6–
20. https://doi.org/10.1080/19452829.2012.747492.
Taylor, G. y Pereznieto, P. (2014). Revisión de los enfoques y métodos de evaluación utilizados en las
intervenciones sobre el empoderamiento económico de mujeres y niñas. Londres: Instituto de
Desarrollo Extranjero. https://goo.gl/YS8E5t.
Turner, B. (2014). Política neoliberal de extracción de recursos: aceite de argán marroquí. Foro de Estudios
sobre el Desarrollo, 41(2), 207–232. https://doi.org/10.1080/08039410.2014. 901239.
PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo). (2018). Datos de desarrollo humano
(1990­2017). http://hdr.undp.org/en/data Consultado el 30 de junio de 2019.
White, H. y Raitzer, DA (2017). Evaluación de impacto de las intervenciones de desarrollo: A
guía práctica. Metro Manila, Filipinas: Banco Asiático de Desarrollo. https://goo.gl/eMR1ap .
Wichterich, C. (2015). Impugnando el crecimiento verde, conectando la atención, los bienes comunes y basta.
En W. Harcourt e IL Nielsen (Eds.). Practicar ecologías políticas feministas: ir más allá de la 'economía
verde' (págs. 67­100). Londres: Zed.
Grupo del Banco Mundial. (2015). Marruecos—Cuidado con la brecha: empoderar a las mujeres para una
sociedad más abierta, inclusiva y próspera. Washington DC. https://goo.gl/jVsXy9.
Banco Mundial. (2017). Asistencia oficial neta para el desarrollo recibida (USD a precios corrientes):
Marruecos, 1960­2015. https://goo.gl/r4RTxp Consultado el 9 de agosto de 2019.
Banco Mundial. (2018). Marruecos: perfil educativo nacional, actualización de 2018. Política educativa y centro
de datos. https://tinyurl.com/y2drrs7t Consultado el 31 de agosto de 2019.
Foro Economico Mundial. (2018). Informe global sobre la brecha de género 2018. Ginebra: Foro
Económico Mundial. https://tinyurl.com/y3s6t4b8.