Me dirigía al baño. Me apetecía un buen baño matutino.

Me desnudé y me senté en la taza para

aliviarme el vientre como todos los días. Mientras lo echaba todo tranquilamente mientras pensaba
en mis cosas. Jarreth entró a toda prisa. Iba sujetándose la polla y cruzando las piernas. Estaba claro
que tenía una emergencia.

- ¿Todo bien hijo?

-Me estoy cagando vivo. Algo del desayuno me ha sentado mal.

-No te preocupes. Mamá te ayudara. Ven.

Jarreth se acercó y se subió a

los poyetes del retrete. Su entrepierna quedo al nivel de mi boca. Abrí todo lo que pude y saqué la
lengua rozando su ano con la punta. Jarreth hizo fuerza y entonces salió todo el producto. Era líquido
y poco espeso. Comencé a tragar todo lo que pude hasta que la mierda empezó a derramarse por
todo mi cuerpo. Restregué todo contra mis pechos y vientre. Se me pegaba y recorría todo el torso
hasta llegar a mi entrepierna, donde empezó a gotear dentro de la taza. La excitación subía y subía
sin control. El scat es uno de mis vicios favoritos y en cuanto me empiezan a cagar encima ya no me
puedo controlar. Movía la lengua por todo su ano limpiándolo hasta dejarlo limpio e inmaculado.
Entonces, se cogió la polla y me la metió en la boca. Enseguida note como el orín me inundaba toda
entrando hasta mi garganta. Me corrí en el acto mientras intentaba tragarme todo aquello. Cuando
no pude aguantar más y me dio la arcada del vomito. Todo me empezó a salir a presión por la nariz.
Me encanta que me hagan eso. Sentir que no puedes respirar y como la orina y el vómito buscan a la
desesperada un sitio por el que salir, como llenan las fosas nasales para finalmente salir a presión.
Me dejo tirada en el baño con un orgasmo de campeonato. De los que me dejan totalmente rendida.

- ¿Mejor querido?

-Si. Pero espera. Creo que a ti aun te puedo aliviar un poco más – metió la mano dentro del retrete –
un momento.

Saco la mano y en ella tenía mi mierda derramándose y cubriéndola toda. Me la puso en la cara y
restregó todo aquello por mi rostro y me lo hizo tragar todo. Lo repitió hasta que sacó toda la mierda
que había dentro de la taza. Después me cogió por el cuello y me metió la cabeza dentro del retrete.
Sorbí toda la orina y fluidos que había echado en él. Me volví a correr, y esta vez. Él puso la boca en
mi coño y trago todo lo que eche. Acabamos besándonos y pasándonos todo aquello tirados en el
suelo del baño restregándonos en la mierda derramada y mi vomito.
 -Mira cómo nos hemos puesto. Selena. No tienes
remedió - me limpió la mierda de la cara con el dedo - ¿A Ti te parece normal comportarse así con
Tus hijos? Eres una cerda.

-Es que no me puedo aguantar. Os veo y solo quiero haceros guarradas ¿Soy mala madre por ello?

-Mala no. Pero una autentica perra sí ¿Es que no podemos tener sexo normal? A nuestro lado el
porno parece una película de Monjas.

Le quite mierda del rostro y me la lleve a la boca.

-No puedo evitar ser una pervertida. Me gusta serlo – Me abrí de piernas delante de el – Y me
apetece hacer muchas guarradas ahora. Por qué no llamas a Kunhio y a los chicos del equipo y me
hacéis un gangbang. Me apetece sexo duro y veros tener sexo entre vosotros.

-Y sin límites me figuro ¿Fisting?

-Y dobles y triples penetraciones.

- ¿Prolapse? ¿Bondage? ¿Pincharte suero en pechos y coño?

- Si. Pero mejor botox. Y ponéroslo a vosotros también para que tengáis pollones gordos y duros. Me
vais a follar hasta desgarrarme y dislocarme la mandíbula. Hasta que me salgan las tripas por el ano.

- ¿Tortura? Hablamos de probar eso ¿Estarías dispuesta?

-Si. Y vosotros también - me empecé a masturbar - Será algo salvaje y sin control.

Jarreth saco el móvil y abrió un grupo de WhatsApp con todos los chicos. Les explico el plan al
detalle. No tardaron ni cinco segundos en apuntarse todos. Vendrían todos los miembros del equipo
de voleibol del instituto. Seriamos ocho tíos y Yo. Iba a ser algo brutal. Me puse supercachonda.
Tanto que mientras los chicos venían hacía la casa quise empezar a ponerme a tono para que en
cuanto llegaran nos pusiéramos al lio.
Fui al armario de las drogas y cogí el GHB. Me puse en el culo tres dosis enteras. Enseguida me
empezó a subir. Me subió la temperatura y el coño empezó a chorrear. Mientras me estremecía de
placer me di cuenta de que Jarreth estaba preparando el móvil para grabar un video.

-Buena idea – dije – ven.

Me metí en la bañera y dejé correr el agua para que se llenase a la vez que encendía la ducha. Me
puse debajo del chorro. El agua caliente me cubrió todo el cuerpo haciendo que me excitara más.
Comencé entonces a darme una ducha de lo más sexy mientras mi hijo me hacía un directo para
todo el equipo. Me cubrí con jabón y espuma para después frotármelo por los pechos, el coño y el
culo. Estire la mano al armario de las drogas y saque un pincho de Mefe que ya tenía preparado. Me
abrí de piernas y me lo inyecté en el clítoris. El subidón me hizo gemir y arrodillarme en la bañera
dejando el culo por encima del agua. Lo moví de adelante a atrás. De adelante a atrás, mientras
miraba a cámara y me pasaba la lengua por los labios. Y babeaba sin control. Me levanté y me sequé
el coño. Cogí cocaína del armario y la derrame por el borde de la bañera. Puse el coño sobre toda
aquella nieve y lo restregué sobre ella con saña.

-Venid queridos- balbucee – Selena está muy cachonda y quiere guerra.

Diez minutos después mientras seguíamos con el video.

Sonó el timbre. Jarreth fue a abrir y en dos minutos todos los chicos del equipo entraron en el baño.
Ash. El capitán del equipo. Venia acompañado de un chico. Debía tener unos trece años. Moreno y
muy guapo. En cuanto me vio de ruborizo y agacho la cabeza.

-He traído a mi primo Kuro para que se estrene ¿Te importa Selena?

-Claro que no Ash – dije – acércate Kuro. No te asustes.

El chico se acercó a la bañera. Me apoye en el borde y le mire fijamente.

-Hola Kuro. Me llamo Selena y soy la mamá de Jarreth ¿Como estas?

-Bi... Bien señora. Algo nervioso.

-No te preocupes. Eso mismo les paso a todos estos tiarrones la primera vez. Entiendes que nuestros
juegos son secretos. No se lo puedes contar a nadie.
-Si... si señora.

-Señora no. Selena.

Le acaricie la cara para que se tranquilizara. Vi que el

pobre tenía ya la polla erecta. Le ayudé a quitarse la ropa y le metí en la bañera conmigo. Mientras
los demás empezaron a desnudarse y a sobarse entre ellos. Jarreth me inyecto un potenciador de
feromonas. Eso me hizo sudar y empezar a inundar el ambiente, poniendo a todos muy cachondos.
Me acerque a Kuro y con suavidad, le bese en la boca. Metí me lengua despacio en ella y empecé a
moverla. El no tardo en hacer lo mismo. Me eche hacía atrás y le puse sobre mí. Le cogí la mano y la
puse en mi coño.

-Tócalo despacio y suave. Soy muy delicada. Como una muñequita ¿Juegas conmigo?

-Si, seño... Selena.

-Genial. Soy muy traviesa y quiero que tú lo seas también ¿has visto porno alguna vez?

-En el móvil cuando no mira nadie.

-No sé porque me da que te gusta cuando a la chica le meten la mano por sus zonas intimas ¿Me
equivoco?

Era lo que mis sentidos me decían. El Fist le llamaba mucho la atención. Y también notaba como le
excitaba ver a su primo y a sus amigos teniendo relaciones homosexuales.

- ¿Como lo sabe? - se sonrojo – nadie me ha visto.

-Yo se esas cosas Kuro – me dirigí a los chicos – escuchad, a Kuro le da morbo el fist. Empezaremos
con eso ¿Os parece? Ash, entra con nosotros a la bañera.

Entro en la bañera. Yo me tumbé y abrí las piernas.

-Enseña a Tu primo a dilatarme el coño y el culo. Abrírmelos bien. Kuro, tú te pondrás encima de mí.
Así mientras Tu primo te muestra como se hace te haré algo muy rico.
Kuro se puso encima de mí mirando hacía mi coño. Le subí entonces hasta mi cara y con delicadeza
me metí la polla en la boca. El chico puso cara de asombro. Se corrió al instante y se ruborizo de
vergüenza. Ash se río y dijo que no se preocupara. Que no me sacase la polla de la boca y me dejara
hacer a mí. Empezó a sobarme el coño y el culo explicándole a Kuro lo que tenía que hacer. Como
meter los dedos, como moverlos una vez dentro. Como saber cuándo estaba a punto de correrme. El
pequeño prestaba atención mientras Yo masajeaba su polla y genitales dentro de mi boca. Se corrió
cuarto veces. Todas dentro sin que se derramara ni una gota. Después me lo quite de encima y Ash
se cambió con él. Yo solo podía tragar y tragar mientras Ash daba su Masterclass de Fist.

-Bueno primo ¿Qué quieres dilatar primero? ¿Vagina o Culo?

- ¿Puedo el culo?

-Claro que puedes. Pon las manos que te eche lubricante.

El chico se embadurnó de lubri y comenzó. Primero un dedo. Lo movía y sacaba. Lo volvía a meter.
Luego dos dedos. A partir del tercero ya me empezó a dar placer y comencé a mover las caderas al
ritmo de sus manos.

-Eso es que está disfrutando. Continua.

Al final llego el momento de meterme la mano entera. Ash se corrió en mi boca y se puso al lado de
su primo. Le ayudo a empujar hasta que me metió el puño entero. Solté un gemido de gusto al notar
su puño entrando en mis entrañas. Era pequeño, sí. Pero aun así presionaba las paredes del recto no
dejando ningún espacio. Ash le dijo que empujara despacio y sacara sin llegar a sacar todo el puño.
Que cuando estuviese a punto de salir lo metiese de nuevo. Era un buen fisteador para ser novato.
Me llevo al orgasmo enseguida y me corrí a chorro sobre los dos. Ash lamio a Kuro para limpiarlo. Se
sobresalto un poco. No se lo esperaba.

-Kuro – dije – aquí todos jugamos con todos. Esa es la regla.

- Lo entiendo.

-Pero quiero que me lo demuestres. Mientras me sigues trabajando el culo. Quiero que cojas el pene
de tu primo y se lo chupes ¿Podrás hacerlo?

Kuro no dijo nada. Ash se

levantó y sin este decir nada se metió el rabo en la boca. Con decisión y sin dudar. El chico estaba
muy cachondo y no tenía prejuicio alguno. Y, además, supongo que de haber visto tanto porno.
Parecía tener verdadera maestría chupando penes. Porque su primo no tardo ni cinco minutos en
correrse. Cuando lo hizo. Kuro se lo trago todo sin rechistar. Se lo echo en la otra mano. Y entonces
me la metió de golpe en el culo. Me hizo gritar de placer. Fue una inserción bestial.

-Veo que aprendes rápido querido. Casi me corro con esa embestida. Sigue dándome a dos manos.

Mientras Kuro me Dilataba. Los chicos estaban a lo suyo por todo el baño. Kuniho se encontraba en
medio de Dave y Cris haciéndoles una buena mamada mientras Jarreth le daba por el culo y Jos le
chupaba la polla. Era precioso verle disfrutar de esa forma. Los hombres tienen una forma preciosa
de follar entre ellos. Jake y Tim estaban tumbados en el suelo haciéndose un 69 profundo mientras
tenían vibradores por el culo que habían untado en Tramadol. Se los habían insertado de golpe,
desgarrándose. La sangre brotaba de sus culos y caía en sus caras gota a gota en un baile hipnótico.
Yo ya estaba abandonada a la depravación absoluta. Quería que esos chicos me llevaran al límite.

Me sacaron de la bañera y me pusieron sobre la mesa

camilla a lo ancho. Me ataron las manos a la espalda para inmovilizarme. Me sujetaron el cuello con
cuerdas que iban hasta los pies dejándome abierta de piernas. Si intentaba juntarlas las cuerdas me
estrangularían. Quede en la mesa con la cabeza y el culo colgando. Entonces Jos se colocó en mi cara
y Ash detrás de él, tras Ash Jarreth. Cris se puso tras Ash. Entre mis piernas se colocó Jake. Tras el
Kuniho, Tim y Dave. Todos erectos con un pincho de mefe en la mano. Kuro se subió a la mesa. Tenía
un pincho de Mefe. Saqué mi lengua y cogí su mano. Con buen pulso la acerque hasta que me clavo
la aguja. Lo puso perfecto. Entonces todos se pusieron el suyo en la polla. Me metieron una polla en
la boca y otra en el culo. Y entonces el que estaba detrás de cada uno enculo al que tenía delante.
Estábamos todos conectados como un solo ser mientras nos daba aquel subidón bestial. Empezaron
las embestidas. Eran potentes y profundas. Me clavaban las pollas hasta el fondo y ellos se
enculaban sin miramientos y sin lubri. Desgarrando como a mí me gusta. Kuro mientras lamia todo
mi cuerpo y me daba mordiscos en pezones y clítoris. Era brutal. Me estaban follando salvajemente y
sin cortarse un pelo. Me desgarraban el culo y me caia sangre por todas las nalgas. La boca me dolía
del esfuerzo. La mandíbula estaba al límite. De lo fuerte que me la estaban follando, la garganta me
ardía de dolor. Pero al mismo tiempo mi coño chorreaba a borbotones. Me corría una vez tras otra.
Entonces empezaron a correrse dentro de sus culos para acto seguido. Agacharse en un bol y echarlo
todo. Los que se corrieron en mi me hicieron vomitar por la nariz y me sacaron la rosa anal de la que
salieron semen, pis, mierda y sangre que recogieron en el bol junto con el vómito. Intenté hablar,
pero me dolía la mandíbula y solo pude sonreír y babear.

Después de desatarme y recuperar el aliento. Les hice a todos una ronda de mamadas recogiendo
pis y semen en el bol. Mi idea era llenar la bañera de todo. Así que hicimos rondas de follarnos todas
las bocas hasta vomitar y comer guarrerias y laxantes para cagar y mear. Y todo iba a la bañera.
Cuando ya no dábamos más de si. La bañera se había llenado un cuarto de capacidad. No era
suficiente. Pero con la ayuda de un replicador de materia llene el resto. La bañera estaba llena de
nuestros excrementos hasta rebosar.

-Bueno. Y no se vosotros – dije – Pero a mí me apetece un baño y en esa gran bañera cabemos
todos.

Nos metimos todos en aquel enorme estanque de excrementos. Yo estaba en éxtasis. Todos me
sobaban y me follaban. Estaba gozando mucho. No hacía más que tragar y vomitar aquello sobre
todo el mundo. Entonces Jarreth saco del armario el botox. Se lo empezaron a pinchar en las pollas
hasta que se pusieron duras como cemento y gordas. No me cabrían en la boca.

-Chicos. Creo que os habéis pasado. Esso no me entra en la boca.

-Ya verás como si – dijo Jarreth – Te van a entrar de lujo.

Salió de la bañera y volvió con un extraño objeto. Era una pera de la angustia. Un aparato de tortura
medieval que se metía en la boca para dislocar y fracturar mandíbulas. Según lo vi, me corrí. Abrí la
boca todo lo que pude. Me pincharon Tina en la lengua y me pusieron una mascarilla da Popper.
Entonces me metieron la pera. Relaje la mandíbula para que se dislocara sin fractura. Poco a poco
aquel aparato me empezó a presionar la boca. Era tremendamente doloroso y angustioso. Me daban
calambres por todo el cuerpo. Fueron cinco minutos grandiosos hasta que note como se salía el
hueso de la mandíbula. Me sacaron la pera y me pincharon morfina en el clítoris. Tenía la boca
abierta de par en par y no podía cerrarla. Entonces Jarreth se acercó a mí.

-Ahora sí que entra. Ves.

Me metió la polla en la boca. El

grosor con el botox era de 13 cm. Y la tenía dura como el cemento. Al metérmela pude sentir como
me expandía la tráquea y entraba en el esófago presionando las paredes. Estaba a punto de hacerme
la follada de boca más salvaje de la historia. Jarreth tomo una mezcla de cocaína y LSD. Le puso muy
violento. Empezó a meter y a sacar con fuerza. Tenía el rostro desencajado. Me cogió fuertemente
de las orejas y me las retorcía a la vez que me follaba. Me daba bofetadas fuertes y me metía los
dedos por la nariz para asfixiarme. Cuando vomite. Todo salió de mi boca hasta salpicarle entero. Era
una maldita gozada. Toda aquella violencia me estaba haciendo que me derritiera por dentro. Al
final se corrió y se meo dentro de mi garganta. Me hizo quedarme en esa posición de rodillas con la
boca abierta hacia arriba. Se encendió un porro y empezó a fumárselo echándome la ceniza en la
boca. Caían chinas que me entraban en la boca quemándome por dentro. Era un objeto en sus
manos. Los demás encendieron también cigarros y cuando se los terminaban los iban apagando en
mi coño. Jarreth apago el porro en mi lengua. Notaba la quemadura y me corría del gusto. Al final
todos me follaron la boca dislocada hasta que me desmaye de agotamiento.

Desperté y Lo primero que encontré fua a Kuro comiéndome el coño. Me daba lengüetazos sobre las
quemaduras haciendo que escocieran muchísimo. Me habían vuelto a colocar la mandíbula. Dolía,
pero me gustaba la sensación. Los chicos estaban dentro de la bañera enculandose y comiéndose las
pollas.

-Que rico me lo haces Kuro – dije - ¿Te está gustando la experiencia?

-Si, mucho Selena.

- Pues ahora quiero que sigas comiéndome el coño. Pero de una forma muy especial.

- ¿Como?

Le puse un poco de morfina en la lengua. Entonces cogí del armario unos anzuelos y le atravesé la
lengua con ellos para que las puntas sobresaliesen. Después cogí un Taser del armario y me lo puse
en los pezones.

-Cómeme el coño con fuerza – le di al Taser - ¡AAAAAAAAH! Esto es lo más.

Kuro me quito el Taser y me lo metió por el culo. Me quede sin palabras. No me esperaba que
hiciera eso. Me miro y se rio.

-Si te chupo el coño a la vez que activo esto ¿Que pasaría?

-Averigüémoslo.

Me metió la lengua en el coño y enseguida sentí la punzada de dolor de los anzuelos clavándose
dentro de mí. Empecé a sangrar y me meé encima. Entonces Kuro le dio al botón del Taser. La
descarga eléctrica fue brutal. Kuro salió despedido hacia atrás. Al sacar la lengua del coño arranco
trozos de carne y salió un chorro de sangre. Olía a quemado. Era el Tase haciéndome quemaduras
dentro del culo. Fue maravilloso. Quería seguir con aquello enseguida. Me volvió a meter la lengua
en el coño y cuando se engancho de nuevo activo el Taser. Pero esta vez aguanto más. Tanto que el
Taser se me acabo pegando a la piel quemada dentro del recto. Y con los anzuelos me siguió
arrancando cachos del coño. Cuando tubo suficientes. Se los metió en la boca y me los paso a la mía.
Nos comimos los trozos de mi coño hasta que no quedo ninguno.

-Quiero probar el churrasco – dije – sácamelo.

- estará pegado.

-Tu tira hasta que salga.

Me lo arranco retorciéndolo y sacándolo como un corcho. Se había pegado un buen trozo de la rosa
anal. Con un cuchillo al rojo Kuro la corto. Tenía el Taser en la mano con lo que parcia una enorme
salchicha. Me lo metió en la boca y me lo comí todo. Era carne asada. Mi carne. Me corrí y me cagué
encima. Me quede tumbada en el suelo abierta de piernas y temblando de gusto. Estaba en el cielo.
Los chicos me vieron y me volvieron a meter en la bañera. Les había flipado lo del Taser. Así que se
lo hicieron los unos a los otros. Se desgarraron los culos y se comieron los pedazos. Seguimos con
una buena follada por todos nuestros orificios pasando siempre de culo a boca. El sabor que dejaba
aquello era intenso y penetrante. Me apoyé en el borde de la bañera y puse el culo en pompa.

-Bueno chicos ¿creéis que me podréis meter cuatro pollas por el culo?

Todos se abalanzaron sobre mí. me empezaron a

sobar y a lamer con fuerza. Cuatro se salieron de la bañera y se tumbaron en el suelo formando una
cruz poniendo las pollas juntas. Kuro las ato con un cordel y los cuatro quedaron unidos formando
un rabo cuádruple enorme.

-No, así no.

 Me acerque y saque aguja e
hilo del armario. Les puse a los cuatro un pincho de anestesia en las pollas y entonces las cosí.
Intente meterme la cuatro a la vez en la boca. Pero era demasiado. Así que me ayudaron a
dislocarme de nuevo la mandíbula. Desde aquel día llevo un implante facial que me abre la boca
como una puta serpiente. Cuando aquellas cuatro pollas me entraron a la vez en la boca fue
catártico. Notaba el pulso en sus venas y el sabor combinado de todas era embriagador. Y todas me
entraban. Me llegaban a la garganta y hacían tanta presión que no me dejaban respirar. Pero no iba
a dejar que aquello me detuviese. Cogí un bisturí y un tuvo y delante del espejo me hice una
traqueotomía improvisada. Me lo deje perfecto para respirar por el tubito. Ahora estaba lista. Volví a
meterme aquellas cuatro pollas en la boca y esta vez, empuje hasta que me entraron todas. Estaba
con el rostro desencajado y dolorido. Pero joder si lo estaba disfrutando. Me coloque haciendo el
pino encima de ellos y empecé a hacer flexiones para que mi cabeza subiera y bajara sobre sus
pollas. Era una follada de boca en vertical. Me estremecía con cada flexión y ellos gemían al unisonó
de placer. Cuando por fin se corrieron. Lo hicieron todos a la vez. Me llenaron el esófago e hicieron
presión sobre el esfínter entrando de golpe en el estómago. Me dio una gran arcada. Pero no podía
vomitar con las pollas dentro de mí. Pero aquello quería salir. Presionaba y me hacía sufrir. Dolores,
calambres, angustia. Aquello era agónico. Una verdadera tortura. Pero de pronto note que además
de aquello me estaba poniendo muy cachonda. Me iba a correr con aquello. Así que me agarré a sus
piernas y me metí las pollas todo lo que pude para después soltar las manos y quedar sujeta solo por
sus pollas y por los pies. Me corrí tan fuerte que manché el techo y prácticamente todo el baño.
Cuando me saque por fin las pollas de la boca. Eche una mezcolanza de semen, Bilis, vomito y pis
que derrame sobre los chicos. Kuro empezó a lamerlo y a tragárselo hasta que no dejo nada.
Entonces me puso la boca sobre la mía y se provocó el vómito para pasármelo. Lo repetimos hasta
que vomitamos sangre.

-Bueno – dijo Kuro – Hay otros cuatro pollones. Lo suyo es que le folleis cuatro la boca y cuatro el
culo. Primero a ella y luego a mí.

Aquello estaba desatado. Cosimos las cuatro pollas restantes. Yo me metí un manojo por el culo y
Kuro el Otro. El pobre estaba tan prieto que se notaba el bulto de las pollas en su vientre. Se
corrieron varias veces dentro. Después nos fuimos turnando para que nos hicieran follada de boca y
culo simultánea. Estábamos tan abiertos y desgarrados que ya no había no que hacer fuerza. Kuro y
yo Acabamos tumbados en un rincon del baño chorreando por todos nuestros orificios. Mientras los
chicos estaban todos ya en la ducha. LA sesion había sido brutal.
-ME ha gustado mucho Kuro – dije – bienvenido al club

-Gracias Selena.

- ¿Por qué no te quedas esta noche? Tengo ganas de seguir jugando contigo. Pero solo contigo.

Kuro acepto. Así que me lo lleve a mi habitación. Allí tengo una salita llena de juguetes y drogas de
todo tipo. Entramos y Kuro vio los disfraces que tenía en el perchero. Se fijo en el de animadora
sexy. Así que me lo puse. Tiene una faldita tan corta que no tapa nada y un top por el que me
asoman las tetas por debajo aparte de quedarme superajustado. Le hice un baile de animación con
pompones y todo y después me senté en la cama a su lado.

-Ahora vamos a tener una sesión de Drogas – dije – empezaremos a colocarnos y el sexo ira
surgiendo solo mientras charlamos.

-Genial ¿Las inyecciones pueden ser solo en sitios Guais? Coño, culo, polla, huevos.

-Claro que sí. Y lameremos las heridas hasta que no salga sangre. Pero antes tomate esta viagra.

Machaque la pastilla y el polvo se lo metí dentro de la uretra. Después puse un tapón y empecé a
chupársela. Me metí su polla y sus huevos en la boca. Los masajee hasta que empezó a echar
presemen.

Ahora pasaremos a algo más fuerte.

Puse dos pinchos de heroína para

ponérnoslos en la lengua. El estado profundo de relajación que nos produjo y la música tántrica que
puse nos sumió en un sopor absoluto. Nos abrazamos y nos sobamos y besamos muy lentamente.
Nos pasábamos la lengua ensangrentada por todo el cuerpo. Saqué un puñado de chinchetas y puse
la mitad en su boca y la otra mitad en la mía. Nos besamos y desgarramos la lengua. Tragábamos
borbotones de sangre y saliva. Cuando las escupimos. Nos volvimos a hacer lo mismo con una
cuchilla de afeitar. Era algo catártico. Lo estábamos disfrutando a tope.

-Selena esto es muy bonito y sensual – dijo – pero tengo una idea mejor.

Busco todos los anzuelos, chinchetas, agujas, cuchillas, clavos y tornillos que encontró. Los echo
sobre las sábanas. Entonces Yo eche por lo menos diez gramos de heroína en las sábanas. Nos
echamos en la cama y nos metimos un pincho de Mefe cada uno en polla y coño. Nos empezamos a
hacer un 69 de campeonato. Nos arañábamos y clavábamos todo aquello mientras la heroína
penetraba en las heridas. Ambos nos meamos en la cara del otro y después nos abrazamos y
restregamos bien por todo aquello. Cuando estubimos bien limpios nos sentamos en la cama. No
comimos un par de pastillas de extasis. Kuro me comio las tetas llenas de heridas. Me eche sal en
ellas. El escozor y el dolor me llevaron al extasis otra vez. Yo también le comí los pezones llenos de
cortes con sal.

-Méteme cuchillas en el culo y fisteame – dije – ábreme todo lo que puedas.

-Y tú a mí también - dijo – hagámoslo a la vez.

Nos llenamos el culo de cuchillas afeitar junto con un coagulante y dos dosis de GHB. Después nos
metimos sal y lubricante. Nos pusimos de forma que nos pudiéramos meter el puño a la vez y
empezamos. El dolor era intenso, penetrante y muy placentero. Gemíamos como locos mientras
chorreábamos sangre a borbotones. Nos meamos y de los espasmos que nos daban vomitamos
hasta echar bilis. Nos corrimos como cinco veces antes de sacarnos la mano. Nos lamimos las manos
para saborear aquel delicioso liquido mezcla de sangre heces y trozos de entraña. Al final nos
quedamos tumbados en la cama abrazados. Estábamos algo débiles por la falta de sangre. Así que
llame a Akane que estaba en su cuarto para que viniera a ponernos un poco de plasma. Al entrar se
quedó flipando.

-Vaya tela ¿Se puede saber que estáis haciendo?

-Estamos de sesión extrema – dije –pero solo Kuro y Yo. Es su primera vez conmigo.

- ¿Puedo quedarme a mirar?

- Claro. Pero solo mirar querida. Hoy lo quiero solo para mí.

Akane se desnudó y se sentó en el sofá de cuarto mirándonos. Se metió por el culo una dosis de GHB
y se empezó a masturbar.

-Yo mirare. Pero os diré que hacer. Primero de todo. Kuro. Coge una vela y derrama cera sobre ella.
Pero antes, en la neverita encontraras un tarro de guindillas. Frótalas en las heridas y échales el
caldo del vote. Echaras la cera cubriendo las heridas. Después, mientras se retuerce de dolor. Le
follaras la boca.

El chico cogió el tarro y saco las guindillas. Las froto contra mis
heridas y las desmenuzo metiéndome las semillas debajo de la piel. Mezclo el caldo con lubricante y
me cubrió las heridas con él. Yo me retorcía y chorreaba a presión por mi coño. Gemía como una
perra en celo con el rostro desencajado de placer. Cuando me derramo la cera por la piel me cague,
me mee y vomite al mismo tiempo. Tenía todos los esfínteres del cuerpo completamente abiertos y
no podía retener nada. Entonces Kuro me puso un tarro de popper en la boca. Aspire con fuerza diez
veces hasta que me hizo perder la cabeza. Cuando inhale la última vez. Contuve la respiración y fue
cuando Kuro me metió la polla de golpe en la boca y empezó a follarmela con fuerza. Estaba
desatada. Cada embestida era como si me provocara un orgasmo bestial. Me retorcía de espasmos.
El vómito me salía a presión por la nariz salpicándolo todo.

Akane se masturbaba en el sofá cada vez con más fuerza. Se había puesto muy cachonda. Puso sobre
el cogín un gramo de Mefe y empezó a frotarse el coño sobre el mientras se metía los dedos. En la
mano libre tenía una aguja gruesa. Se la clavo en un pezón y se lo atravesó.

-Ahora quiero que Selena te abra el culo con Fórceps y te saque la rosa. Pero la tiene que sacar
tirando.

Kuro se tumbó boca abajo en la cama. Me puse encima de él y le abrí las piernas cogiéndole los
huevos y el pene y estirándolos sobre las sábanas. Cogí una tabla del armario y se la puse entre el
pene a las sábanas. Me acerque a su boca. Le bese y le agarre la lengua. Le puse en ella un pincho de
Tina y se la atravesé con una aguja gruesa que le impediría cerrar la boca. Le puse diez agujas más. Y
también le atravesé las mejillas con varias más. Después fui a su espalda. Le puse anillos bajo piel y
musculo. Estaba tan colocado que ni se movía. Solo gemía del placer. Le puse 20 anillos. Volví a la
tabla que tenía debajo de su polla. Use una grapadora para clavarle el pellejo del pene en la tabla.
Después con clavos y un martillo le clave los testículos en ella. Le ate dejándole las piernas abiertas e
inmovilizadas y pase la cuerda por los anillos y por la polea del techo. Ya solo quedaba tirar para
levantarlo. Le deje en vilo colgado de la espalda. Tire más de la lengua para clavarle más agujas. Le
puse chinchetas entre los labios y los dientes. Le atreverse los pezones con anillos y les añadí peso.
Puse pesos también en la tabla para que le tiraran bien de los huevos.

-Kuro querido – dije – si es mucho para ti hazme una señal y paro.

Kuro negó varias veces con la cabeza. Y entre balbuceo la palabra “no”. Lo estaba gozando
muchísimo. Le puse más chinchetas en las nalgas y por el pene. Le metí varias sondas por la uretra y
le llené de todos los fluidos que habíamos estado echando. Estaba listo para meterle el fórceps. Se lo
clave por el ano y empuje a la vez que lo abría. La mierda empezó a manar sin control, así como el
vómito. Cuando se lo dilate bien no me costó sacarle una rosa de unos treinta centímetros. Colgaba
allí con un aspecto muy sabroso. El temblaba y gemía cada vez más. Los estábamos disfrutando
mucho. La depravación Kuro era increíble.

Akane se había metido un dildo hinchable en el culo y otro en la vagina. Su intención era hacerlos
explotar dentro. Les había puesto mefe y laxante en el interior. Esos Dildos los hacemos nosotros
expresamente con esa función. Dos enormes bultos le asomaban ya por el vientre cuando el sonido
sordo de la explosión y el golpe la hicieron caer al suelo. Cayo de cara por lo que se hizo un buen
corte en la ceja. De su coño y de su culo salía sangre y pis. Se sentó en el suelo y empezó a
tragárselo.

-Madre – dijo Akane – trágate su rosa hasta el fondo. Cuando lo hagas. Os coseré.

Aquello me flipo. Me trague la rosa de Kuro hasta que mi nariz se aplasto contra su perineo. Me
había entrado por todo el esófago. Akane nos cosió. Quedamos unidos como una clase de bestia
deforme mitológica. Para terminar. Introdujo un tubo gordo en mi ano.

-Y ahora vamos a empezar – rio – Os tengo justo como queria.

 Kuro colgado del techo y Yo arrodillada debajo de el
con la cara cosida a su culo. El tubo que salía de mi culo llegaba hasta Akane. Le había quitado a Kuro
las agujas de la boca y le había metido otro tubo por la boca. Preparo una shisha de marihuana y
entonces nos empezó a llenar de humo a treves de los tubos. Metió también laxantes por aquellos
tubos y GHB. Recuerdo cuando de repente note como la mierda empezaba a salir por el recto de
Kuro directamente en mi interior. Me lleno el estómago y el resto me salió por la nariz. Yo me cague
y eche la mierda liquida por el culo hasta llegar a Akane que se la trago entera. Después la vomito
por el tubo hasta Kuro. Se meo encima de mí. Me estaba corriendo y meando como una loca. Era
como un círculo de excrementos que no cesaba. Kuro se corrió varias veces sobre mi restregándome
toda su leche.

Pasamos así dos horas. Acabamos los tres tirados en el sofa. Nos poníamos de vez en cuando un
pincho y nos sobamos y besamos relajadamente. Había sido un dia magnifico. Primero la orgia y
después aquello. Estaba en una nube de placer.

-Sabes madre – Dijo Akane - Mañana por que no te vienes al instituto. Y nos pasamos el día
buscando sexo con mis amigas y Los Chicos del voley. Kuro. ¿Te iremos a buscar a Tu zona si te
parace?

- ¿Y puedo ir vestida de Uniforme?

-Por supuesto.

9
Fui al instituto con Jarreth y Akane. Entramos en una de las aulas vacías por las que pasaba poca
gente. Me puse un uniforme de Akane. Me estaba superajustado y la falda no me cubría
absolutamente nada. Me puse una diadema de orejas de gatita y me maquillé en plan zorrón. El
tanga me asomaba por encima de la falda y me ate la camisa dejando los pechos casi al aire.

El plan era ir con un camuflaje óptico por el instituto e ir cerdeando por todas partes. Además,
quisimos darle más morbo prostituyéndonos. Akane se encargaba de hacer de madame y yo me
pondría una máscara kabuki para que no se me reconociese. Son máscaras de alta tecnología para el
espionaje. Con ella puedes ser quien quieras.

Los primero que aceptaron pagar por tener sexo

conmigo fueron tres chicos de la clase de Akane. Les dijo que, aunque no sabrían la identidad de la
puta que se iban a follar. Podían elegir la cara de quien quisieran. Quería que fuese Scarlette
Johanson. Les gustaba desde que la vieron en “Los vengadores” Así que fui a un baño de la última
planta que siempre estaba fuera de servicio. Estaba sucio y olía a meados. Allí esperaría a que Akane
los llevara. Cuando entraron y me vieron con aquel uniforme y la cara de la actriz se empalmaron al
instante. Eran tres chicos de lo más normalito. Estaban gorditos y tenían pinta de ser los típicos
frikis. La verdad es que me encanta follar con chicos así. Son de los que más se lo curran.

-Hola chicos – dije con voz sensual – ME dicen que sois mis mejores funs. ME siento tan alagada que
tendré que premiaros por ello ¿Como os llamáis?

-Yo... soy Kenshi.

-Alex se...señora.

-Malcom. Mucho gusto.

Los tres balbuceaban sin saber que decir. Así que recurrí a uno de mis mejores trucos.

-Kenshi. Parece que te gustaría jugar con mí culito y comértelo. Te encantara. Se abre muy
fácilmente y esta delicioso. Alex. Creo que a Ti te gusta lamer y que te laman. Te chupare hasta el
último rincón de tu cuerpo y Tú me podrás chupar todo lo que quieras. Malcom. Me sorprendes
chico. Te gusta el Sexo Guarro y sucio. Como puedes ver. Este baño este asqueroso. Me restregare
por toda la mierda y hare lo que quieras con ella.

Los tres estaban flipando. No se podían creer lo que estaba pasando. Entonces, Akane les dio otra
idea depravadisima.

-Por diez mil más podéis drogarla para que este mas sumisa todavía. Que sepáis que a ella le
encanta. Y si son veinte mil más, entrare yo en el paquete. También colocada para vosotros. Tenéis
hora y media para hacernos lo que queráis.

Pagarían los veinte mil. Le hicieron un Bizum a Akane. Nos tendrían a las dos para ellos. Se
desnudaron y empezaron a sobarnos y a darnos chupetones. Nos fueron quitando la ropa hasta
dejarnos desnudas. Uno de ellos sabia poner inyecciones. Así que le dejamos que nos pusiese los
pinchos. Como querían sumisión, nos pusimos heroína. A mí me lo pincho en la lengua y a Akane en
el clítoris. Enseguida nos quedamos relajadas y pasivas. Kenshi se arrodillo detrás de mí y me separo
las nalgas. Saco la lengua y apretó la cara contra mi culo. Movía frenéticamente la lengua como un
poseso. Me incline para que le resultara más fácil.

-Muérdeme también querido. Me pone más cachonda.

Metió la lengua por mí ojete. Empujaba hacía adentro con saña y hacía unos círculos que me volvían
loca. La baba se le caía y hacía ruidos similares a los de los cerdos cuando comen. Me ponía a cien.
Alex se puso delante de mí y empezó a besarme y a pasarme la lengua por la cara y el cuello. Yo
sacaba la mía y le hacía lo mismo. Se la pase por toda la cara de arriba a abajo metiéndole la lengua
por la nariz, labios y hasta por las orejas. El chico estornudo y moqueo bastante. Me lleno de mocos
y otros le colgaban por el rostro.

-Ummmm... parece delicioso.

ME comí todos sus mocos y el me lamio los que me colgaban de la cara. Nos basamos con todo en la
boca pasándonoslos varias veces. Me metí su nariz en la boca para sorber los que le quedaban
dentro. Entonces, conseguí carraspear y sacarme yo una buena cantidad de mocos para seguir
disfrutando de aquello.

Mientras Akane estaba con Malcolm. Sin duda de los

tres era el más decidido. Había cogido a Akane y le había pedido que lamiera los urinarios sucios y
llenos de pises que deberían llevar meses allí. Akane lamia todo lo que encontraba. Daba igual el
aspecto y olor que tuviera. Ella se lo tragaba. Malcom le piso la cabeza por detrás obligándola a
meterla en un baño emponzoñado que casi rebosaba. Cuando la saco la tenía negra llena de
tropezones. Gimió de placer. Se había corrido. El chico la puso sentada sobre aquel mismo retrete y
le meo por todas partes. Después le metió la polla en la boca y comenzó a follarsela. La cara de
vicioso y pervertido que puso fue increíble. ME gusta mucho cuando van en ese plan. Se la follo
hasta correrse dentro y hacerla vomitar. Una pasta negra y putrefacta salió por su boca
derramándose por todo su cuerpo. Quería probar aquello.

-Eso parece delicioso ¿ME dejáis probarlo?

ME acercaron hasta Akane y le lamí todo el vómito. Malcolm le metió los dedos en la garganta y
vomito de nuevo encima de mí. ME cabrío con aquel pringue podrido y maloliente. Me corrí a
presión salpicando a Kenshi que aún estaba con su lengua en mi culo. Las dos nos quedamos tiradas
en el suelo cubiertas de mierda. Los chicos nos mearon encima. Después de aquello nos follaron a
las dos los tres a la vez y acabamos comiéndoles las pollas y cubiertas de semen y pis. Ya se iban
cuando a uno de ellos le entraron ganas de cagar. Akane abrió la boca y Alex le soltó todo dentro.
Una mierda dura y larga que le llenaba entera. Yo me puse sobre ella y me tragué lo que sobresalía
hasta que nuestras bocas se unieron. No dejamos nada.

-Otro día si os apetece. Ensayo con vosotros alguna escena de los vengadores. Pero de la versión
para mayores je, je... ¿Que supervillano os gustaría que me diese lo mío?

- ¡Venom! - dijo Malcolm – ¿Pero podrías ser la Capitana Marvel?

-Claro querido. Seré quien tú quieras.

Después de aquello fuimos a las duchas. Nos metimos en una y nos limpiamos bien. Estábamos muy
calientes todavía. Así que nos comimos el coño para seguir disfrutando. Hicimos el amor bajo el agua
durante otra hora. Jarreth nos llamó entonces. Tenía otros clientes. Dos chicas de su clase. También
gorditas y muy tímidas. Eran novias y querían tener sexo con chicas “muy atractivas” según ellas. Les
gustaba mucho Taylor Swift y Lady Gaga. Así que Nos pusimos esos rostros en las máscaras. Nos
esperarían en los vestuarios del equipo de gimnasia que estaba fuera en un evento deportivo.

Llegamos y las dos chicas estaban en

traje de baño. Clara era Mulata. Muy guapa con unos pechos y un culo enorme. Tenía algo de
celulitis en las piernas. Pero nos resultó supermorbosa. Jin era blanca y morena con unos ojos verdes
preciosos. También tenía el culo y las tetas gigantes. Pero estaban bien proporcionados. Era una
chica gorda, pero estaba buenísima para mi gusto. Cuando nos vieron se quedaron de piedra. Sus
ídolos estaban allí y estaban dispuestas a tener sexo con ellas. Jarreth nos dio dos trikinis minúsculos
para que nos los pusiéramos.

- ¿Podemos hacernos fotos?

-Si – dijo Jarreth – y os puedo grabar en video si queréis. Además, como os he dicho antes. Podemos
hacer que se coloquen para que hagan lo que vosotras queráis.

- ¿Que os parece si nos colocamos las cuatro? - Dijo Akane – Molaría mucho. Aquí además hay una
bañera de hidromasaje para todo el equipo. Podemos usarla. Jarreth nos grabara. Puede usar varias
cámaras a la vez.

Nos metimos en la bañera circular y encendimos las burbujas. Pronto nos empezaron a cosquillear
en el coño dándonos mucho gustito. Me puse con Jin y la cogí suavemente el coño por debajo del
bañador mientras la besaba. Jarreth nos puso un pincho de Tina en las lenguas. Nunca se lo habían
hecho. Pero no opuso resistencia. A ella aquello le daba mucho morbo. Me metió también la mano
entre las piernas y me metió los dedos en el culo.

-ME gusta el anal - gemí - mete todos los dedos que quieras.

- ¿Te gusta el Fist?

-Pues claro Jin. Me flipa y Dilato muy bien. Puedes meterme el brazo entero si quieres.

Akane se había metido en la bañera y Clara se sentó abierta de piernas en el borde. Akane metió la
cabeza entre ellas y le puso un poco de Tina dentro del culo. Ella se tomó unas gotas de GHB y
entonces comenzó a comerle el culo. Combinaba dedos y lengua haciendo a Clara retorcerse y gemir
como una loca. Le pellizcaba los pezones y se los retorcía fuerte. Se empezó a levantar y a echarse
sobre ella lamiendo todo su cuerpo de camino a su boca.

-Sabes muy bien. Y tienes tanta carne para lamer. Me voy a poner las botas.

-Que envidia me das, estas tan delgada.

-Pues a mí tu tripa me pone a mil. Quiero comérmela entera – Se paro un momento - ¿Sabes qué?
Yo también quiero una tripa. Espera.

Se fue a por el tubo de la ducha. Le quito la alcachofa y se lo metió por el culo. Le dio al mando y el
agua la empezó a llenar inflándola como un globo. Hemos hecho eso tanto que ya dilatamos sin
problema. Mientras la besaba y la masturbaba se ponía cada vez más gorda. Cuando no pudo más se
sacó el tubo y apretó el culo. Clara estaba encantada de aquello.

- ¿ME lo haces a mí?

Akane le metió el tubo y dejo correr el agua. Se puso inmensa. Se notaba que no tenía costumbre
porque se puso roja del esfuerzo. Pero aguanto como una campeona. Las dos se pusieron un trapo
en el culo para que el agua no se escapase y se pusieron a hacer el amor en el agua.
 Jin me levanto el culo y lo
puso sobre sus piernas. Me había dilatado el culo y con el agua caliente estaba dilatando muy bien.
Me metió el puño y empezó a meterlo y sacarlo. Iba cambiando de uno a otro hasta que pudo meter
los dos a la vez. Cada vez lo metía más adentro. Sus brazos eran gordos y me abrían muchísimo. Me
acabo desgarrando.

-Lo siento.

Estaba muy asustada. Creía que me había hecho daño. Bueno. Daño si me hizo. Pero ya sabéis que
eso me chifla.

-No pasa nada clara. Me gusta así. Sigue metiéndolo. Te aseguro que me cabe Tu brazo entero.

Clara siguió trabajándome el culo. Aquello era la gloria. Notaba como se movían todas mis tripas al
paso de su brazo. Me lo acabo metiendo hasta el hombro. Y entonces note algo que no había
sentido nunca en una sesión de fisting. ME había agarrado el estómago. Me sobresalte un poco al
principio. Pero entonces sentí el retortijón y aquello me puso a mil otra vez. Me corrí como una
campeona.

-Escucha Clara. Aprieta suavemente. Con cuidado.

- ¿Seguro?

-Seguro. No tengas miedo. Esto me gusta.

 Apretó y sentí otro retortijón. Volvió a hacerlo,
y entonces fue cuando me provoco el vómito. Que te lo provoquen así hace que salga más fuerte y
sin control alguno. Sencillamente no puedes para de vomitar hasta que te dejan de apretar el
estómago. Me hizo deshacerme de placer. Pero me había sabido a poco. No tenía el estómago lleno.
Me bebí entonces el agua de la bañera. Toda la que pude y le pedí que me lo hiciera otra vez. Esta
vez la experiencia fue brutal empecé a echar vomito como una fuente. Me mee y me cague. Me corrí
dos veces. Fue algo magnifico. Una nueva experiencia. Me quede echada en el borde de la bañera
mirando al techo. Clara me puso el coño en la boca y se lo comí hasta que se corrió en mi cara. Le di
chupetones en la entrepierna y por las tetas. Entonces me dijo so Yo podía hacerle eso del vomito a
ella. Claro que sí. La puse abierta e piernas y le empecé a dilatar. Fui metiendo el brazo hasta casi el
hombro. Me costó un poco, pero encontré el estómago y lo aprete como había hecho ella conmigo.
Empezó a vomitar sin control poniéndolo todo perdido. Se corrió, meo y cago. Acabamos abrazadas
en mitad de la bañera besándonos y relamiéndonos todas aquellas babas y restos.

Aquellas chicas eran geniales en el sexo. Estaba claro. Así que las miré y les dije lo que quería de ellas
sin tapujos.

-Chicas, sois geniales. Folláís como a nosotros nos gusta ¿Verdad hijos?

-A mí me han parecido magnificas – dijo Jarreth – eso del fist agarrando el estómago me ha parecido
brutal. Quiero probarlo.

Akane se acercó a ellas y se puso entre las dos pasando los brazos por sus hombros.

-Está claro que Clara y Jin podrían unirse al club. Siempre y cuando acepten las reglas.
Las dos la miraron.

- ¿Que reglas?

-En el Club somos todos bisexuales. Hacemos el amor todos con todos. Por supuesto, aquí todo es
consentido. Nadie va a obligaros a nada. Pero. Cuando estamos en la sede del club no podemos decir
no a nada. Cuando vamos tenemos que estar dispuestos a todo. Dentro de un orden. Pero dentro de
ese orden no se dice no. Además, en el club hay gente de muchas edades diferentes. No se puede
rechazar a nadie por su edad. Sería una falta de respeto.

Me levante y las mire fijamente.

- ¿OS apuntáis? Pensarlo bien.

Las chicas se miraron y después de pensar un rato se pronunciaron. Aceptaban. Nunca habían hecho
el amor con hombres. Pero estaban dispuestas a probar.

-Bien, entonces tendremos que iniciaros en una ceremonia que tenemos para los nuevos miembros.
En ella os pondremos a prueba. No os preocupéis. Es mero formalismo. Pero nos gusta darle algo de
misterio.

-Como en las sociedades secretas.

-Es que esto es una sociedad secreta. Y ayudamos a los miembros. Si os unis a nosotros. No os
preocupareis más por vuestro futuro. Nosotros nos encargamos de todo. Estudiareis lo que queráis
sin preocuparos de lo que cueste y tendréis un trabajo cuando terminéis de estudiar.

-Yo siempre he querido estudiar ingeniería aeronáutica – dijo Clara – me flipan todo lo que tenga
que ver con aviones.

- ¿Y con el espacio? Yo dirijo

la mayor megacorporación de tecnologías aeroespaciales. Fabricamos naves que viajan más rápido
que la luz. Veis ya por donde voy. Pero que esto quede muy claro desde ya. No quiero que os sintáis
obligadas a participar en nuestras actividades solo por aseguraros el futuro. Recordar que el club es
para divertirnos. Lo demás es secundario.

Las chicas estaban emocionadas. Les dijimos como y cuando les recogeríamos para llevarlas al club
para la ceremonia. Se marcharon a clase pensando en que experiencias les esperaban con nosotros.
Estarían encantadas en cuanto nos conocieran mejor. Yo por mi parte seguía con ganas de jarana.
Así que envié a Jarreth a buscar más clientes.

Una hora después. Llamo por teléfono. En el pabellón de gimnasia artística había encontrado a otro
cliente. Nada menos que el entrenador. Le había sorprendido mirando a las chicas en el vestuario
mientras se duchaban. En el equipo de gimnasia estaban Taksuki y Juri. Era su actividad extraescolar.
Y debo reconocer que el mallot les quedaba de miedo. Jarreth le dijo al entrenador que si quería
tener una sesión especial con algunas de las chicas por un módico precio. Este acepto.

Jarreth nos hizo pasar al vestuario por la puerta de atrás. Las chicas se estaban vistiendo ya para irse.
Akane y Yo entramos. Todas se nos quedaron mirando. Taksuki nos miró y se río.

- ¿Se puede saber que hacéis las dos aquí vestidas de putones? - dijo – a ver si adivino ¿os estáis
prostituyendo?

Juri empezó a hablar usando su lenguaje de signos. El ordenador de traducción actuó casi de
inmediato.

-<<Tampoco hay que ser una lince hermanita. Nuestra madre es demasiado predecible>>

-Pues sí - dije – vamos a ver a vuestro entrenador ¿Os apuntáis?

Las dos se miraron. Como teníamos las máscaras no había peligro de que las reconocieran. Además,
conozco a mis hijas. Están tan salidas como Yo y aquello les daba mucho morbo. Claro que se
apuntaron. Su compañera de equipo, Rise también se apuntó. Le resultaba excitante aquello. Así que
enviamos a Jarreth a ver como estaba el entrenador.

El entrenador estaba en el almacén donde guardaban los aparatos. Era un hombre de unos sesenta y
tres años a punto de jubilarse. Bastante arrugado y sin pelo con la piel llena de lunares y alguna que
otra verruga. Si alguno lo viera por la calle pensaría que era un pervertido sexual y se apartaría de él.
Pero a mí esos pervertidos me gustan mucho. Están dispuestos y motivados para las mejores y más
bizarras experiencias. Jarreth le dio un toque en la espalda. El hombre se sobresaltó.

-No me des esos sustos chico – se quejó – que me vas a provocar un infarto.

-Déjese de sustos entrenador y enséñeme el “cash”

Saco un fajo de billetes. Era más de lo que habían acordado.

-El extra es para ti. Para que te unas también a la orgia.

- ¿quiere que me folle a las chicas con usted?

-Lo que quiero es follarte a Ti también ¿Me dejas?

 Jarreth no dijo nada. Solo se arrodillo y
le bajo los pantalones al entrenador. Una enorme polla de al menos 24 Cm le colgaba de la
entrepierna. Era gordísima y estaba llena de unos extraños granos. JArreth se la metió en la boca sin
dudar y empezó a chuparla. La empujo hasta el fondo de su garganta hasta que le toco la campanilla.
Agarro sus testículos y empezó a masajearlos. El hombre no se esperaba aquello y estaba flipando.

-Vaya, pues si que te gusta chupar polla ¿No sabía que eras Gay?

-Soy bisex – dijo – nunca desprecio una buena polla.

Jarreth noto que el entrenador era dominante y le gustaba provocar dolor, el sexo muy duro y cerdo.
Quería tenerle a él para el solo y sin límites. Jarreth sintió la necesidad de complacerle de inmediato.
Así que se sacó la polla de la boca y le miro a los ojos.

- ¿Quieres que Tú y Yo vayamos a algún sitio discreto? Allí podrás usarme para lo que quieras. Yo
estoy dispuesto a complacer tus fantasías más íntimas y perversas. Seguro que me prefieres a mí que
a las chicas.

-Si, sí que te preferiría a Ti.

-Pues vamos donde Tú quieras. Algún sitio más íntimo.

- ¿A una sauna Gay?

-Conozco una muy cerda y sucia en la que no nos harán preguntas. Además, tienen todo tipo de
drogas a nuestra disposición. Quiero que me folles muy, muy duro. Ser completamente sumiso en
tus manos. Complacerte en todo lo que me digas.

- ¿Me dejarías cagarte en la boca?

-Puedes cagarme, mearme incluso vomitarme en la boca. Me lo tragare todo. Lo vomitare y me lo

volveré a tragar.

- ¿Y te vestirías de Mujer?
-Claro que sí. Y hasta me pondré suero en los pezones para ponerme pechos ¿Quieres que me
parezca a una chica ahora?

El entrenador se corrió
en la cara de Jarreth. Se lo lamio todo, después se levantó y beso apasionadamente al entrenador.
Nosotras entramos y Jarreth se acercó a nosotras. Nos dijo lo que quería el entrenador. Nos pareció
muy morboso y les pedimos permiso para mirar mientras tenían su sesión. Acepto. Cogimos a
Jarreth y lo llevamos al vestuario. Le desnudamos y le afeitamos todo el vello del cuerpo. Le
inyectamos varios litros de suero en el pecho para ponerle tetas improvisadas, le atamos los huevos
y la polla para ponérsela entre las piernas y la sujetaron con cinta. Le maquillaron y le pusieron un
vestido superajustado y provocativo. Era super morboso verle vestido de puton. Cuando el
entrenador le vio casi se corre otra vez.

Le cogió del brazo y se salieron del gimnasio. Nos escaqueamos por la puerta de atrás del instituto y
nos dirigimos al barrió rojo. Allí las calles están infestadas de Putas y locales de sexo para todos los
gustos. Jarreth se contoneaba de forma supersexy. Todo el mundo se le quedaba mirando. Era una
tia super buenorra. Le tocaban el culo y los pechos. Le pellizcaban las piernas y hasta le besaron tres
o cuatro veces. El entrenado le llevaba agarrado metiéndole la mano por debajo de la falda e y con
varios dedos dentro de su culo. Era el centro de atención. Nosotras por el camino fuimos cogiendo
una pareja para cada una de nosotras. Yo reclute a dos tíos que tenían pintas de frikis salidos. Eran
gordos y grasientos. Me miraban con cara de ir a devorarme entera.

Llegamos a la Sauna y entramos. Nos desnudamos en los vestuarios. Pero a Jarreth le pusimos un
trikini minúsculo y muy ceñido a los pechos y el culo. Entramos en un reservado para todos.
Teníamos varias piscinas y camas para nosotros. Nos habían surtido de todo lo que pudiéramos
necesitar. El entrenador no tardo ni un segundo en estrujar a Jarreth entre sus brazos mientras le
lamía el cuello tan fuerte que le dejaría buenos morados.

-Lame todo mi cuerpo – dijo – Lléname de saliva y chupetones.

Le paso la lengua por todas partes. Las babas le resbalaban por toda la piel y le hizo morados por
todo el cuerpo. Yo me acerqué un momento y le puse éxtasis al entrenador y burundanga a Jarreth.
Comenzaron a besarse y a sobarse. Se subieron a una de las camas y el entrenador le puso boca
arriba y le metió la polla en la boca para follarsela con fuerza. Jarreth acabo vomitando a través de la
nariz a presión a la vez que se corría. Se incorporo con el pecho salpicado de semen y dejo que el
resto que le quedaba en la boca y garganta saliera suavemente derramándose sobre él.

- ¿Te gusta así? Puedes hacer lo que quieras. Te complaceré sin reservas.

El entrenador le agarro y le puso boca abajo en la cama

sobre el charco de semen y vómitos. Se puso encima de él y le clavo la polla por el culo hasta el
fondo. Sin dilatar ni echar lubricante. Se la metió a lo bestia. Le penetraba violentamente sin parar.
La polla del entrenador no tardo en estar cubierta de sangre y Jarreth gemía como un animal. Le
estaba desgarrando, pero aun así le pedía que le diera más fuerte. Cuando se corrió el chico se meo
encima y se cago. El entrenador la lamio toda la sangre y la mierda del culo y después le beso
pasándoselo todo a su boca.

-Esto es brutal – dijo Jarreth – eres una autentica bestia. Sigue dándome caña. Fisteame.

Jarreth se metió dos dosis de GHB por el culo y lo puso en pompa para que el entrenador le metiera
el puño. Este se lo empezó a meter profundamente hasta que le metió el brazo hasta el codo. Con el
puño metido empezó a besarle metiéndole la lengua hasta el fondo de la garganta. Jarreth se
retorcía de placer mientras lo empalaban violentamente. Se volvió a mear varias veces y se cago
otras tantas. Toda la mierda le salía liquida entre la comisura del ano y el brazo del entrenador.
Akane y su compañera lo lamieron todo de suelo y se morrearon y lamieron sus cuerpos
restregándose toda la mierda y el meado.

Mientras, mis dos nuevos amigos me habían metido en la bañera y me sobaban y lamian con fuerza.
Las caras de pervertidos que ponían hacían que me excitara muchísimo. Me ponían la piel de gallina
y me daban escalofríos y espasmos de puro placer.