Nombre: Diana La Cruz;

Cédula: V-27.784.095

Respuestas:

La cláusula duodécima del contrato establece que las partes deben realizar inspección
previa del inmueble, a fin de constatar el estado de mantenimiento y conservación del
mismo, y en el caso presentado no se menciona la realización de la misma, por lo que el
arrendatario podría primeramente solicitar que esta inspección se realice para constatar si
efectivamente existe un daño y la magnitud del mismo. Así mismo en caso de ser así,
podría llegar a un acuerdo con el arrendador para cubrir el gasto a realizar para dejar el
inmueble en el mismo estado de conservación, pero consiguiendo el un presupuesto que
esté acorde a la reparación y no superior, como es el caso del monto solicitado por el
arrendador; o podrían también de común acuerdo solicitar que esta inspección sea
realizada por un tercero con conocimiento en el área de la reparación requerida, para tener
una evaluación exacta de la situación; y en todo caso, podría también convenir con el
arrendador para restar la suma correspondiente a este gasto, del monto que se le ha
entregado en garantía. Ya que, si bien el estado de conservación del inmueble no era la
misma y dicha obligación recae sobre el arrendatario, tampoco se había realizado la debida
inspección que es responsabilidad de ambas partes.

Las pruebas a presentar por el arrendatario serían el contrato de arrendamiento, para

demostrar la relación arrendaticia y lo que la misma establece, junto con los recibos de
pago que demuestran su solvencia y el recibo por el monto correspondiente a la garantía,
así como también informe de inspección en caso de haber sido realizado por un profesional
y el presupuesto correspondiente de la reparación.

El arrendador podría en todo caso a los diez días hábiles de realizada la inspección y
constatar la existencia del daño, y que el arrendatario no pagase por lo correspondiente a la
reparación, incumpliendo así con la mencionada cláusula duodécima, demandar por
incumplimiento de contrato y solicitar la ejecución del mismo junto con lo pactado en el
mismo como lo es la garantía, según lo establecido en la cláusula décima séptima del
contrato en cuestión.