Es un metal que se encuentra situado en el grupo 13, periodo 3, dentro de la
tabla periódica su símbolo es “Al”. Es un metal no ferroso, y es el más abundante de los metales, constituyendo cerca del 8% de la corteza terrestre. La alúmina, que es extraída de la bauxita y mezclada con la criolita es la fuente del aluminio. El aluminio puro es demasiado blando, debidamente aleado se obtienen resistencias comparables al acero, por lo cual es útil para toda industria, desde la construcción, decoración, minería, iluminación hasta la industria aeronáutica. Es el único metal que proporciona dureza con bajo peso, es sumamente fácil de pulir, tenaz, dúctil y maleable, posee una gran resistencia a la corrosión y alta conductividad térmica y eléctrica, teniendo la mejor relación beneficio – costo que cualquier otro metal común. Este metal impacta directamente en la economía circular y esto se puede corroborar en base a sus principios: - Primer principio de la economía circular: maximizan los recursos disponibles, tanto materiales como energéticos, para que éstos permanezcan el mayor tiempo posible en el ciclo productivo: Casi la totalidad de los productos de Aluminio pueden ser reciclados para producir nuevos productos, sin perder su calidad y propiedades. En lo relativo al uso de energía para su tratamiento, que representa un 25% de los costes asociados a la producción del aluminio primario, la industria se esfuerza para reducir el uso de electricidad. A través de la tecnología de alimentación puntual en la electrólisis (descomposición, mediante una corriente eléctrica de sustancias ionizadas denominadas electrolitos), se ha logrado registrar una reducción del consumo de electricidad de un 33% desde 1950. - Segundo principio de la economía circular: reducir todo lo posible la generación de residuos y a aprovechar al máximo aquellos cuya generación no se haya podido evitar: El creciente uso del Aluminio reciclado en diferentes aplicaciones le da el reconocimiento de metal verde. Se ha conseguido una producción anual de aluminio reciclado de 1,9 millones de toneladas; las tasas oscilan entre el 42% en latas de bebidas, el 85% en construcción y el 95% en transporte. - Tercer principio de la economía circular: se extraen materias primas, se fabrican productos y de los residuos generados se recuperan materiales y sustancias que posteriormente se reincorporan, de forma segura para la salud humana y el medio ambiente, de nuevo al proceso productivo. Las fuentes de energía que se usan en la industria del aluminio proceden mayoritariamente del agua; la energía hidráulica constituye el 52% del total de energía empleada para los diversos procesos a los que se somete este material. Desde una perspectiva enfocada en el ciclo de vida del aluminio y a través de estudios exhaustivos, la industria procura llevar a cabo todo un programa de actuaciones medioambientales durante todas las etapas del material. El aluminio es un material 100% reciclable sin pérdida de sus cualidades y cuyo proceso resulta beneficioso a la hora de ahorrar energía, reducir las emisiones de gas y para los recursos minerales de las minas. Como podemos ver, el aluminio al estar dentro de la economía circular, gracias a sus componentes y características su extracción, manejo, uso tanto como proceso no presenta grandes impactos en el ambiente, además de conforme pasa el tiempo se desarrollan nuevos métodos que reducen la contaminación que pueda causar. Pero por otra parte el aluminio supone un contaminante que provoca importantes daños en plantas. Afecta principalmente a las raíces provocando patologías que terminan por mermar las capacidades de crecimiento y nutrición del organismo, deviniendo en la muerte, por lo tanto, podría acabar produciendo extinciones locales de plantas especialmente sensibles a él o que no hayan desarrollado todavía mecanismos de defensa o tolerancia frente a dicho metal. También el aluminio puede acumularse en las plantas y causar problemas de salud a animales que consumen esas plantas. Las concentraciones de Aluminio parecen ser muy altas en lagos acidificados. En estos lagos un número de peces y anfibios están disminuyendo debido a las reacciones de los iones de Aluminio con las proteínas de las agallas de los peces y los embriones de las ranas. En la tabla periódica: Ya mencionado el aluminio se encuentra en la tabla periódica en el grupo 13, periodo 3, dentro del grupo de los metales, su símbolo químico es Al y su número atómico es 13. Configuración electrónica: su configuración electrónica es 1s2 2s2 2p6 3s2 3p1, esto nos indica que el aluminio cuenta con 13 electrones distribuidos en sus niveles y subniveles de energía. Niveles y subniveles: este elemento cuenta con los niveles “1s, 2s, 2p, 3s, 3p” y los subniveles “1s2, 2s2, 2p6, 3s2, 3p1”. Los cuales cada uno contiene un número limitado de electrones. También se sabe que los niveles más cercanos al núcleo tienen menor carga que los que se encuentran más lejos. Distribución de electrones: sus electrones están distribuidos como, 2 en 1s, 2 en 2s, 6 en 2p, 2 en 3s, 1 en 3p. Entonces como ya se mencionó anteriormente esto nos da una suma de 13 que es su número atómico. Radio atómico: En comparación con otros elementos, el aluminio tiene un radio atómico relativamente pequeño en la tabla periódica, lo que indica que sus átomos están más densamente empaquetados en una estructura sólida. Esto es coherente con su posición en el tercer período y el grupo 13 de la tabla periódica, donde se encuentra. Esto significa que la atracción que ejerce sobre sus electrones es mayor a cualquier otro elemento que tenga un numero atómico mayor. Energía de ionización: La energía de ionización del aluminio se refiere a la cantidad de energía necesaria para remover un electrón de un átomo de aluminio en su estado gaseoso y convertirlo en un ion positivo (cation). El aluminio tiene una tendencia relativamente alta a retener sus electrones, lo que significa que es relativamente difícil extraer un electrón de un átomo de aluminio. Esto se debe a la configuración electrónica del aluminio, que tiene tres electrones en su capa de valencia (3s² 3p¹), y la remoción de un electrón implica romper una capa relativamente cercana al núcleo, lo que requiere una mayor cantidad de energía. En términos prácticos, la alta energía de ionización del aluminio indica que no es un metal altamente reactivo en términos de perder electrones, a diferencia de algunos metales como el sodio o el potasio que tienen energías de ionización mucho más bajas. Electronegatividad: El aluminio tiene una electronegatividad relativamente baja en comparación con elementos como oxígeno, nitrógeno o flúor. El valor exacto de la electronegatividad del aluminio depende de la escala utilizada para medirla, pero en la escala de Pauling, la electronegatividad del aluminio es aproximadamente 1.5, dado esto el aluminio tiende a ceder electrones en una reacción química. Esto significa que, en enlaces químicos con elementos más electronegativos, como oxígeno o cloro, el aluminio tiende a tener una carga positiva. Un ejemplo común es la formación del óxido de aluminio (Al2O3), también conocido como corindón. En este compuesto, los átomos de aluminio ceden electrones a los átomos de oxígeno, formando enlaces iónicos. El aluminio, al perder electrones, adquiere una carga positiva, mientras que el oxígeno, al ganar electrones, adquiere una carga negativa. Afinidad electrónica: La afinidad electrónica del aluminio es una medida de la energía liberada cuando un átomo de aluminio gana un electrón para formar un ion negativo, su afinidad electrónica es relativamente baja en comparación con otros elementos en la misma columna de la tabla periódica. Esto significa que el aluminio no tiene una fuerte tendencia a ganar electrones y formar iones negativos. La baja afinidad electrónica del aluminio se debe a la estructura electrónica de su capa más externa, específicamente los electrones en el orbital 3p¹. Estos electrones están relativamente lejos del núcleo y están protegidos por las capas internas de electrones, lo que hace que el átomo de aluminio tenga poca atracción hacia un electrón adicional. En resumen: la configuración electrónica de este elemento (1s2 2s2 2p6 3s2 3p1) define sus propiedades, comportamiento, reactividad y capacidad son el resultado de esta que es única y de las más importantes en el grupo de los metales.