República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria

Universidad Territorial Deltaica “Francisco Tamayo”

Tucupita, Estado Delta Amacuro.

P.N.F Administración

Planificación Estratégica del

Mercadeo

Profesora Estudiante

Gloria Merchán T.S.U Lisbeth Moreno 26.117.898

Enero, 2024
La planificación estratégica de mercado es un plan a largo plazo que tiene en
cuenta el proceso social y administrativo, a través del cual las personas
satisfacen la necesidad de crear e intercambiar productos bienes y servicios,
y define las metas a corto plazo para optimizar este proceso de acuerdo con
las características del público objetivo, el contexto general en el que se
desarrolla el mercado y la situación particular de la organización.

Según Kotler, la planificación estratégica determina un futuro deseado

y comprende las etapas que hacen realizable esa proyección. Así, un plan
estratégico de marketing busca, según el contexto de la empresa, asegurar
su competitividad futura. Lo hace partiendo del análisis de su situación
interna y del entorno que se puede desarrollar tomando como base un
análisis DAFO, que permita identificar las fortalezas, debilidades,
oportunidades y amenazas, o bien un análisis Porter de las cinco fuerzas que
determinan la intensidad de la competencia y la rivalidad en la industria.

La planificación estratégica del mercado es una herramienta que sirve

para orientar a las organizaciones a largo plazo, y relativamente se aplica
para todas las áreas de las empresas. Las planeaciones estratégicas de
marketing se centran en temas amplios y duraderos que aseguran la
efectividad de la empresa y su supervivencia durante muchos años. (Philip
Kotler 2009, Pág 57). En cuanto a los tipos de planificación estratégica del
mercado, podemos mencionar: planeación estratégica, operativa y táctica.

 La planeación estratégica de marketing: es una comprensiva a largo

plazo y relativamente general. Los planes estratégicos se centran en
planes amplios y duraderos que aseguran la efectividad de la empresa
y su supervivencia durante muchos años. La planeación estratégica
de marketing son planes a largo plazo que enfoca a la organización
como un todo. Los administradores y mercadólogos consideran a la
organización una unidad total y se preguntan así mismo que debe
hacerse a largo plazo para lograr las metas organizacionales.
 La planeación operativa: se establece a corto plazo, es específica y
está orientada a la consecución de los objetivos determinados, la
planeación operativa convierte los conceptos generales de la
planeación estratégica en cifras claras, en pasos concretos y en
objetivos evaluables a corto plazo. La planeación operativa demanda
una aplicación de recursos que sea eficiente y efectiva en costes en la
 solución de problemas y la consecución de los objetivos establecidos,
los objetivos, prioridades y estrategias de una empresa determinan la
búsqueda y la selección del producto final, se determinan las
especificaciones y se determina la compatibilidad tecnológica para
desarrollarlo.

 La planeación táctica: se ubica en el enlace que puede establecerse

entre los procesos de la planeación estratégica y de la planeación
operativa es más limitada, especifica y a mediano plazo en
comparación con la planeación estratégica, la táctica se refiere más a
asuntos relativos a la eficiencia a largo plazo. Como se aprecia el tipo
de proceso de planeación que deba seguirse se verá condicionado por
el tipo de meta y objetivo que se pretende alcanzar a través del plan.
Los objetivos más generales ya largo plazo requieren de planificación
estratégica, los objetivos precisos ya a corto plazo son propios de la
planeación operativa.

Por tal razón, es importante recalcar la importancia de dicha planificación la

cual radica en ayudar a las empresas a enfocarse en sus objetivos y metas a
largo plazo, y a desarrollar un plan de acción para alcanzarlos. Además, la
planificación estratégica del mercadeo permite a las empresas identificar las
oportunidades y amenazas del mercado, y desarrollar estrategias de
marketing efectivas para aprovechar las oportunidades y minimizar las
amenazas.

Por otro lado, la misión organizacional es la declaración del propósito

y enfoque de la organización. Es una breve descripción de ¿por qué existe?,
incluso explica qué hace la compañía, a quién le sirve y qué la diferencia de
los competidores. Se utiliza para proporcionar orientación, dirección e
inspiración a los empleados, mientras que les dice a los clientes qué esperan
del negocio. La planificación estratégica de mercado toma como punto de
partida la misión de la empresa y su definición de negocio, los cuales
establecen para ella un campo de acción, determinado en base a productos y
servicios (tecnología), mercados atendidos (clientes) y necesidades
satisfechas (beneficios).

En cuanto a su visión organizacional, es una declaración de lo que la

organización quiere lograr a largo plazo. Es una imagen clara y convincente
del futuro deseado de la empresa, que inspira y motiva a los empleados a
trabajar juntos para lograr un objetivo común. La visión debe ser ambiciosa,
pero también realista y alcanzable, y debe estar alineada con la misión de la
empresa.

Es importante destacar que la planificación estratégica está estrechamente

relacionada con la misión y visión organizacional, puesto que los objetivos y
estrategias de marketing deben estar alineados con la dirección y los valores
de la empresa.

Algunos aspectos claves de la planificación estratégica orientada al

mercado están enmarcados principalmente al proceso de gestión de
desarrollar y mantener un ajuste viable entre los objetivos, habilidades y
recursos de la organización y sus cambiantes oportunidades de
mercado. Este proceso se enfoca en el cliente y en la competencia, y busca
identificar las necesidades y deseos de los clientes, y cómo satisfacerlos de
manera más efectiva que la competencia.

A la hora de iniciar el desarrollo de un plan estratégico existen cuatro

grandes aspectos a considerar.

1. La misión: El proceso de planeación estratégica inicia con una misión

que ofrece a la empresa (pero también a sus clientes) un sentido de
propósito y dirección. En ella, la organización describe quién es, qué
hace y hacia dónde quiere ir, en términos más cualitativos que
cuantitativos. Habitualmente se redacta en tiempo presente y tiende a
ser corta, clara y poderosa.
2. Los objetivos: Toda planificación implica la selección de objetivos, y
con frecuencia se utiliza la metodología SMART para asegurar que las
metas propuestas sean concretas, medibles y alcanzables. Como
mencionamos antes, los objetivos típicos en un proceso de planeación
estratégica son de mediano y largo plazo, y es clave que estén
asociados a KPIs relevantes para que los líderes puedan determinar
qué tan bien se está desempeñando el negocio.
3. Alineación con las metas a corto plazo: Cumplir con la visión del
negocio cuando las acciones realizadas en el día a día están
desconectadas de los grandes objetivos de la empresa es imposible.
Por eso, la planeación estratégica debe estar relacionada
directamente con la planificación comercial y las acciones a corto
plazo de la organización. Aquí se pueden utilizar distintas
herramientas, como un mapa estratégico, para ayudar a visualizar la
 manera en que las metas de corto, mediano y largo plazo se
relacionan entre sí.
4. Dinamismo: Un plan estratégico se revisa y revisa periódicamente
para ajustar las prioridades y reevaluar los objetivos a medida que
cambian las condiciones comerciales y surgen nuevas oportunidades.
Las revisiones rápidas de las métricas pueden ocurrir trimestralmente,
y los ajustes al plan estratégico pueden ocurrir anualmente. Lo
fundamental, en todo caso, es que la planificación se plasme en un
documento claro, con objetivos bien definidos, y que se lo tome como
referencia a la hora de tomar decisiones de negocio importantes.

Recordemos que la planificación estratégica orientada al mercado es un

proceso continuo y dinámico. Es importante adaptarse a los cambios en el
mercado y asegurarse regular el cual es importante adaptarse a los cambios
del mercado y asegurarse de que tus estrategias continúen siendo relevantes
y efectivas.

El análisis interno de una organización es un proceso en el que se

evalúan todos los componentes que interactúan dentro de la organización
con el fin de identificar fallos y áreas de oportunidad. El principal objetivo de
este tipo de análisis es averiguar los puntos fuertes y débiles de la
organización. Ayuda a la dirección a tomar decisiones para el desarrollo de la
estrategia corporativa, la formulación y los procedimientos de aplicación.
En el contexto de la planificación estratégica del mercado, el análisis interno
es una herramienta esencial para evaluar la posición de la organización en el
mercado y su capacidad para competir. El análisis interno ayuda a las
empresas a centrarse en las áreas de desarrollo y competitividad. Es una
pérdida de tiempo y esfuerzo desarrollar estrategias empresariales basadas
en suposiciones y no en la investigación.
Existen varios tipos de análisis interno que las empresas pueden realizar,
como el análisis GAP y la evaluación de la estrategia. Cada uno utiliza
herramientas, técnicas y objetivos diferentes para identificar los puntos
fuertes y débiles de la organización.

El análisis externo de una organización es un proceso en el que se evalúan

todos los componentes que interactúan fuera de la organización con el fin de
identificar oportunidades y amenazas. El principal objetivo de este tipo de
análisis es comprender el entorno en el que opera la organización y cómo
puede afectar su capacidad para competir.
En el contexto de la planificación estratégica del mercado, el análisis externo
es una herramienta esencial para evaluar la posición de la organización en el
mercado y su capacidad para competir. El análisis externo ayuda a las
empresas a centrarse en las áreas de desarrollo y competitividad. Es una
pérdida de tiempo y esfuerzo desarrollar estrategias empresariales basadas
en suposiciones y no en la investigación.

Para realizar un análisis externo, las empresas pueden utilizar herramientas

como el análisis PESTEL, el análisis de las cinco fuerzas de Porter y el
análisis FODA. Cada uno utiliza herramientas, técnicas y objetivos diferentes
para identificar las oportunidades y amenazas que enfrenta la organización.

En cuanto a la planificación estratégica del mercado, se concluye que

es la base fundamental para el éxito de toda empresa, gracias a ella se
puede prever alguna situación adversa e implementar planes de acción en
caso de contingencias. Además, al planear un horizonte empresarial se
puede lograr un objetivo con más calma puesto que al planear se revelan los
posibles errores y las ventajas con las que se cuenta al momento de realizar
un proyecto. Es decir, la planificación estratégica conlleva al logro de los
objetivos y metas planteadas, según la amplitud y magnitud de las empresas.