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Cómo hacer un código de ética

Estas listo para vivir bajo tus propios principios éticos y así llevar una vida significativa. Uno puede sacar
ideas y aplicaciones de la religión, enseñanzas superiores, de un tutor o simplemente usando el instinto
para implementar estos cambios. El único problema es, que no estás seguro de cuáles son esos
principios. La ética se trata de las relaciones. Se trata de trabajar para desarrollar una consciencia bien
informada. Se trata de mantenerse fieles a la idea de quiénes somos y que representamos. Se trata de
tener el coraje para explorar preguntas difíciles y rendir cuentas. Necesitaras valores, moral, conceptos
para distinguir el bien del mal, tener conocimiento, necesitar sabiduría, tener inteligencia. Aquí hay
algunas ideas de cómo comenzar a formar tu propio código ético.

Pasos

1 Aprende qué es un código ético. Es esencialmente un sistema para comprender el bien y el mal. Es un
conjunto de guías que te ayudaran a hacer decisiones basadas en tu propia conciencia.

2 Usa códigos existentes para desarrollar el tuyo. Algunos lugares en los que puedes buscar son en las
ideologías políticas, los códigos religiosos, la filosofía analítica, etc. Pregúntate a ti mismo que ideas
tiene sentido para ti, y cuáles no. Por ejemplo, ¿estás de acuerdo con que la guerra puede ser
justificada? ¿Crees que es importante ayudar a los demás, aun cuando no sea conveniente hacerlo?
¿Cómo deberían los humanos tratar a los animales? Formúlate la mayor cantidad de interrogantes que
puedas, y no dejes que la opinión popular te influencie. ¿Qué piensas tú realmente?
3 Escribe tus ideas. Es mejor salvarlas en la computadora o en un papel, para que puedas editarlas más
adelante si es necesario.

4 Trata de encontrar patrones y organiza tus ideas en principios específicos.Quizá estés en contra de
cualquier tipo de violencia, así que la adhesión hacia la no-violencia seria uno de tus principios.
Usualmente encontraras que la mayoría de tus opiniones se puede agrupar en varios principios. Este es
tu código ético.

5 Ajusta tu código mediante ensayo y error. Una vez tengas algo concreto, intenta aplicarlo a tus
experiencias de la vida real. Si descubres que te sientes distinto a la hora de ponerlo en práctica,
deberías cambiar una o más de tus ideas.
6 Ve a la escuela, y realmente presta atención y aprende algo que ellos quieran que tu sepas.

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7 Conoce y entiende como se aplican las leyes para ti y tu situación. La ley (incluso la ley de Dios) tiene
mucho que ver con los parámetros del bien y el mal, y las consecuencias que conllevan si la quebrantas.

Consejos

 Se paciente con ti mismo. No puedes desarrollar un código ético de la noche a la mañana.


Tomara tiempo y esfuerzo, pero saber que estás viviendo por tu propio conjunto moral puede
ser muy apremiante.

 Conoce los asuntos. Cuando vayas a realizar una decisión ética, deberías conocer los distintos
puntos de vista que se presentan para tener buenas justificaciones a la hora de decidir.

 Confía en tus instintos. Muchas veces, al oír dos opiniones conflictivas, eres capaz de determinar
de que base parte cada una. Esa es una cualidad muy útil, pero aun si no puedes justificar algo
mediante la lógica, sentirás que un lado del argumento se siente correcto, para ti. Cuando todo
falla, sigue ese instinto.

 No pretendas que todo el mundo esté de acuerdo contigo. El propósito principal al desarrollar
un código ético es tener una idea de cómo deberías vivir tu vida. Quizá piensas que el mundo
sería un lugar mejor si todos pensaran como tú, pero juzgar a los demás y decirles lo que deben
de hacer no hará que cambien. Da el ejemplo, manteniéndote optimista y comprehensivo, y los
demás serán más propensos a seguir tus pasos.

 Distingue el bien del mal.

Advertencias

 No adoptes el código ético de alguna persona o grupo sin antes pensarlo detenidamente.
Probablemente no sea el adecuado para ti, y contradice el propósito de desarrollar tu propio
código ético.

 Asegúrate que te adhieras a tu código ético una vez lo tengas. Considera lo que los demás te
dicen al disentir en caso de que tengas que hacer ajustes, pero si sabes que estás en lo cierto,
apégate a ello. Ten cuidado de no cambiar tu opinión cada vez que alguien discrepe.

 Puede ser difícil.

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