Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Volumen 1/Número 1
“Dios, Dios mío eres tú; De madrugada te buscaré; Mi alma tiene sed
de ti, mi carne te anhela, En tierra seca y árida donde no hay aguas,
Área de cuidado y desarrollo ministerial, a través del Para ver tu poder y tu gloria, Así como te he mirado en el santuario.
tiempo devocional.
CONCLUSIÓN:
Amigos y hermanos, la oración es fuente de poder y además fortalece nuestra relación personal con nuestro
Padre Celestial. En el corazón de mi Señor Jesucristo habrá gozo al ver a sus discípulos haciendo lo que en
algún momento los apóstoles les costo.
Mateó 26:40-42 “Vino luego a sus discípulos, y los halló durmiendo, y dijo a Pedro: ¿Así que no habéis podido
velar conmigo una hora? Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto,
pero la carne es débil. Otra vez fue, y oró por segunda vez, diciendo: Padre mío, si no puede pasar de mí esta
copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad.”
Si tú oras Él te escuchará, si tú le pides Él sabrá darte lo que mejor te conviene, si tú le buscas sin duda lo
encontrarás, si tú le crees de seguro Él te suplirá a su debido tiempo.
Isaías 43:10-13 “Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y
creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí.
Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve. Yo anuncié, y salvé, e hice oír, y no hubo entre vosotros dios
ajeno. Vosotros, pues, sois mis testigos, dice Jehová, que yo soy Dios.
Aun antes que hubiera día, yo era; y no hay quien de mi mano libre. Lo que hago yo, ¿quién lo estorbará?”