Trabajo practico n 2

Alumna: Claudia Marcela Salvatierra

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RENACIMIENTO VESALIO BERENGARIO VIDUS VITIUS

EL RENACIMIENTO

El Renacimiento fue expresión de la lucha entre viejas y nuevas concepciones y abrió

nuevos paradigmas científicos y revisión de matrices culturales. Los estudios de Leonardo Da
Vinci y de Andrés Vesalio quienes fueron de los primeros de emprender la disección de
cuerpos humanos y cuestionar, en los hechos, las enseñanzas de Galeno, no pudieron
desprenderse de la versión del “sexo único” de inversión anatómica de las mujeres como
varones invertidos.

No obstante, los resabios aristotélicos y las exageraciones medievales de las

enseñanzas de Galeno, las disecciones de los anatomistas de los siglos XV y XVI abrieron
puertas a nuevas observaciones y nuevos conocimientos.

En 1559 Colombo gracias a la observación, descubre el clítoris y expresa: “es el asiento

fundamental del placer femenino” y como un pene” si lo tocas, encontraras que se hace un
poco más duro y oblondo hasta el punto de parecer una especie de miembro viril”. En la
misma época, el atomista Gabriel Falopio identifica oviductos (trompas) y Kaspar II Bartholin
encuentra y otorga su nombre a las grandes glándulas vestibulares que lubrican la parte final
de la vagina durante el acto sexual.

El siglo se plaga de clases públicas de anatomía y de espectáculos de disección humana

en Anfiteatros, donde la mayor atracción son los cuerpos de las mujeres, pero la anatomía
renacentista no logra desprenderse de siglos de cultura de poder masculino. Fue entonces la
ideología y no las observaciones la que determinaba la descripción que se hacía de ella. Aun
así, los estudios de obstetricia y ginecología se multiplican durante el siglo XVI.

Fue el descubrimiento de Harvey sobre la circulación de la sangre (1619), en el siglo

XVII, el que inaugura una nueva etapa de conocimiento sobre los humores corporales; por
ejemplo, la conversión de la menstruación en leche. Abre, entonces, un campo nuevo de la
medicina: la fisiología. Este camino inacabado del saber permitió el paulatino abandono de las
versiones aristotélicas y galeanas del “sexo único” – el de los varones-que como modelo
“testifica virilidad” (testículos). Fue Harvey quien dijo por primera vez que toda vida procede
de un “huevo”.

En estos tiempos comienzan a dar nombre propio a los órganos sexuales y

reproductivos de las mujeres, por lo que adquieren estas entidades anatómicas y fisiológicas
autónomas de la existencia de los varones. Los ovarios y la vagina pasaron a ser protagonista y,
pese a la resistencia social a los nuevos conocimientos hasta avanzado el siglo XIX, para
entonces ya se pudieron observar por el microscopio el “huevo y el esperma”, lo que inauguró
un nuevo paradigma científico la Teoría de la Fusión para la Concepción. La ciencia moderna
comienza a vislumbrar la existencia de un sexo biológico y otro de índole social. La formulación
del reconocimiento del aporte de los dos sexos para la concepción fue un avance científico.
Según Facio- Fries, las ideologías patriarcales que no solo construyen diferencias entre
hombres y mujeres, sino que las construyen de manera que la inferioridad de estas es
entendida como biológicamente inherente o natural. Aunque las diversas ideologías
patriarcales construyen las diferencias de los sexos de manera distinta, en realidad este tipo de
ideologías solo varían en el grado en que legitiman las desventajas femeninas y el número de
personas que comparten un consenso sobre ellas

Las ideas patriarcales no solo afectan a las mujeres al ubicarlas en un plano de

inferioridad en la mayoría de todos los ámbitos de la vida, sino que restringen y limitan
también a los hombres, a pesar de su situación de privilegio. En efecto, al asignar a las mujeres
un conjunto de características, comportamientos y roles “propios de su sexo”, los hombres
quedan obligados a prescindir de estos roles, comportamientos y características y a tensar al
máximo sus diferencias con ellas.

La ideología patriarcal no solo explica y construye las diferencias entre mujeres y

hombres como biológicamente inherente y naturales, sino que mantiene y agudiza otras
(todas) formas de dominación.

En 1972 Oakley escribió su tratado Sexo, género y sociedad que es primero en

introducir el termino de género en el discurso de las ciencias sociales. A partir de entonces fue
usada como instrumento válido para explicar la subordinación de las mujeres como algo
construido socialmente y no justificado por la biología. Este fue un paso importante en la lucha
contra la subordinación de las mujeres si pensamos que éramos biológicamente inferiores a
los hombres. Existen volúmenes de libros sobre la inferioridad mental y física de la mujer de
distintas disciplinas como filosofía, la historia, la medicina, el derecho, etc. Mientras se
mantuvo que las mujeres éramos inferiores debido a nuestra anatomía, esta era nuestro
destino.

Mary Wollstonecraft en 1792 escribió su famoso Vindicación por los derechos de las
mujeres la autora denuncia como la sociedad y no la biología, incapacita a las mujeres para el
trabajo intelectual y hasta ciertos trabajos físicos

A partir de 1972 se ha podido ir desarrollando teorías más sofisticadas para explicar

cómo y cuánto participa la sociedad en la construcción de la identidad masculina y femenina.
Como el status de las mujeres no se debe a un factor único, existen diversas teorías sobre el
género que enfatizan distintos aspectos de este. Sin embargo, se puede afirmar que la
mayoría coinciden en que a partir de una importancia exagerada a las diferencias biológicas se
construyen las diferencias/desigualdades constitutivas de cada sexo: a los bebes con genitales
masculinos- o masculinizados- se les asigna unas características y a los bebes con genitales
femeninos-o feminizados- las características contrarias. De los primeros se espera agresivo,
racional, activo, publico etc. De las segundas se espera un comportamiento contrario: dulces,
emocionales, pasivas, hogareñas, etc. Características estas de menor prestigio que las primeras

La familia patriarcal es considerada como el espacio privilegiado de reproducción del

patriarcado en tanto constituye la unidad de control económico, sexual y reproductivo del
varón sobre la mujer y sus hijos

La educación ha sido históricamente un instrumento del patriarcado destinada a

trasmitir las ideas, valores, conductas y los mecanismos que han asegurado la dominación de
los hombres sobre las mujeres. La educación sigue reforzando la cultura patriarcal y
contribuyendo a los procesos de socialización de género. Así, refuerza al hombre y lo
masculino como referentes invisibilizando el aporte de las mujeres en la sociedad. La
educación institucionaliza la sobrevaloración de lo masculino y la visión androcéntrica
3- Manual Ciencias Sociales 2015 Tinta Fresca. Capítulo 5 Revolución Neolítica Pág. 92-93 En el
Neolítico había división del trabajo. Las mujeres se dedicaban al tejido y a la alfarería. Esto se
dio a lo largo de la antigüedad. En los milenios las mujeres se dedicaban a tareas domésticas, al
hilado y a la alfarería. También fabricaban cestos y canastas. Los hombres se dedicaban a cazar
y pescar. Tendría que haber una ilustración con la mujer tejiendo y hombre de cacería. Era una
tarea cooperativa Se ve la distinción de lo femenino de lo masculino. Las mujeres de la
antigüedad realizaban todo tipo de actividades. En ese momento esta lo masculino sobre lo
femenino. La idea de patriarcado está presente. Hay que incrementar los esfuerzos para
superar la invisibilidad de las mujeres en el curriculum. Incorporando contenidos métodos que
ayuden a comprender la semejanzas y diferencias existente desde la perspectiva histórica,
considerando sus causas y consecuencias y enseñar a usar dicho análisis para valorar
situaciones actuales y mejorar situaciones futuras.