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Nombre: José Ángel Antolín Zapatero.

Grado: Electromecánica de vehículos.


Curso: 1º.
Módulo: Motores.

ASIENTO DE LAS VÁLVULAS


Las válvulas de un motor son elementos metálicos situados en la culata que permiten
la entrada de aire-combustible (en los motores gasolina) o simplemente aire (motores
diésel) y la salida de los gases de la combustión.
Los asientos de las válvulas de motor son piezas postizas colocadas a presión en la
culata cuya función es hacer de apoyo en la cabeza de la válvula para conseguir un
cierre hermético. De esta manera se evitan las fugas de aire-combustible del cilindro
que conllevan pérdidas de rendimiento.

COMPROBACIONES:
Una de las comprobaciones principales de los asientos de las válvulas sería una
inspección visual buscando zonas dañadas, picadas o incluso quemadas.
Otra de las comprobaciones que hay es la aplicación de azul de Prusia o plomo blanco
en la superficie de la válvula y presionarla ligeramente contra el asiento de la válvula
girando hacia atrás y hacia delante un cuarto de vuelta haciendo poca presión. Al
retirar la válvula, si aparece azul en un ángulo de 360º alrededor de la superficie de la
válvula, esta está concéntrica y color azul a 360º en el asiento de la válvula, la guía y la
superficie están concéntricas. De no ser así, se debe rectificar el asiento.
Además, también se debe verificar la estanqueidad de las válvulas con sus asientos.
Para ello se coloca la culata en posición horizontal con las cámaras hacia arriba y se
vierte un líquido que no oxide, líquido de frenos, por ejemplo, luego se introduce aire a
presión por el colector sujetando las válvulas cerradas con los dedos y con papel en la
pistola de aire comprimido para realizar una mejor estanqueidad entre el colector y la
pistola. Si al aplicar aire comprimido en el colector, aparecen burbujas en el líquido,
significa que hay una falta de estanqueidad en las válvulas. Normalmente, se soluciona
con un esmerilado.
En las cabezas de las válvulas, se realiza una comprobación visual para detectar
posibles daños ya que están expuestas a la combustión de la mezcla y deben de ser
limpiadas por el mismo motivo.

REPARACIONES:
Si la zona del asiento está sucia o simplemente deformada, se puede fresar a mano con
una fresadora de 45º, si la anchura de contacto es mayor se deben rectificar los
asientos y si se encuentran daños importantes que no puedan ser arreglados fresando,
se deben de sustituir los asientos y luego fresarlos para darle un ángulo adecuado.
Si los asientos solo tenían suciedad o una deformación leve, después del fresado
manual se procede al esmerilado de los asientos. Para ello, se introduce la válvula en
su guía y se le aplica un poco de pasta de esmeril en el asiento y se la hace girar a la vez
que se le aprieta contra el asiento. Una vez que en el asiento aparece una banda de
color mate y de igual anchura, se para y se limpia para eliminar los residuos de esmeril.
Una vez finalizado el esmerilado se realizan las comprobaciones de golpeteo y
estanqueidad.
En caso de sustituir los asientos, estos deben ser rectificados. Para ello se deben
destruir los antiguos con una fresa, limpiar los restos y tomar medidas de los
alojamientos de la culata. Luego se debe calentar la culata y enfriar con nitrógeno
líquido e insertarlos con un útil que guía el asiento con la guía de la válvula para que
queden concéntricos. El paso siguiente es rectificar los asientos con tres muelas de
diferentes ángulos, a especificación del fabricante, la varilla de las muelas sirve de
centrador para introducir en la guía de la válvula. Se introduce la muela del ángulo de
la válvula, el asiento suele quedar más ancho de lo recomendado por el fabricante así
que hay que estrecharlo con dos fresas, una de entrada y otra de salida hasta conseguir
una anchura correcta de los asientos en la zona de apoyo de la válvula. Una vez
finalizado, se esmerila y se comprueba estanqueidad.

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