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ANNE © Ν©Μ||Ξ
Publicado por primera vez en 2013 por Anna Nomis Ltd
Da Vinci House, Basingview, Basingstoke, Hampshire RG21 4EQ Reino Unido
www.anneonomis.com
Derechos de autor © Anne O Nomis 2013
Se hace valer el derecho de Anne O Nomis a ser identificada como
autora de esta obra en virtud del artículo 96 de la Ley de Propiedad
Intelectual de 1994.
Foto de la contraportada: Retrato de la autora Anne O Nomis © Kristyna Hessova,
Melbourne, Australia
Fotografía de la portada: Retrato de Mistress Morrigan por el artista Phil
Miller, 2013 Ilustración de la portada: construida por Anna Egan-Reid
utilizando elementos de istockphoto.com
Se ha hecho todo lo posible por localizar a los titulares de los derechos de autor.

Diseñado y maquetado por Anna Egan-Reid en Mary Egan


Publishing Producido por Mary Egan Publishing
www.maryegan.co.nz
Impreso y distribuido por DAI Rubicon Pty Ltd
Reservados todos los derechos. Sin perjuicio de los derechos de autor reservados
anteriormente, ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada
o introducida en un sistema de recuperación de datos, ni transmitida de ninguna
forma ni por ningún medio (electrónico, mecánico, fotocopia, grabación u otros), sin
el permiso previo por escrito tanto del propietario de los derechos de autor como del
editor de este libro mencionado anteriormente.
ISBN 978-0-9927010-0-0
Incluye referencias bibliográficas e índice
1. Dominatrix - historia 2. Dominatrix - Reino Unido
3. Dominatrix - Estados Unidos 4 . Dominatrix - Australia 5. Rol sexual - historia
CONTENIDOS

Lista de ilustraciones 6
Prefacio 13
CAPÍTULO I La antigua diosa dominatrix
y sus Sacerdotisas Iniciadas 31
CAPÍTULO II Las institutrices flagelantes en
de los siglos XVII al XIX 73
CAPÍTULO III Las extrañas damas dominantes del
El metro del siglo XX 119
CAPÍTULO IV La ocupación contemporánea y
Artes de la dominatrix 169
CAPÍTULO V Las Artes de los Siete Reinos 215
AFTERWORD Salida de los infiernos 278
LIsTa DE ILLUsTrATIONs

FIGURA 1 La dama de Warka de la ciudad de Uruk (Warka)


(c3100 a.C.) Mármol, 21,2 cm de altura, Colección del Museo de Irak, Bagdad, Irak. Foto
ref #345588 © Bridgeman Art Library.

FIGURA 2 Jarrón Warka (Uruk)


(c3200-3000 a.C.) Alabastro tallado con frisos, procedente de la casa del tesoro de la diosa
Inanna en el distrito de Eanna. Alrededor de 1 m de altura (altura atribuida citada hasta 120 cm
de altura), Colección del Museo de Iraq. Fotografía ref #BO14987 © 2013. Foto SCALA,
Florencia/BPK Bildangatur fuer Kunst, Kultur und Gesthichte, Berlín.

FIGURAS 3A Y 3B Detalle del abrevadero de Uruk


(c3300-3000 a.C.) Vasija de piedra caliza, 96,5 x 35,5 cm, Colección del Museo Británico,
Londres, Reino Unido. Ref # ME 12000, Picture ref#: AN327001001 y AN32384001, ©
British Museum Trustees.

FIGURA 4 Venus de Laussel


(c23000 a.C.) Talla en bajorrelieve de piedra caliza. Del abrigo rocoso de Abri de Laussel,
Dordoña, Francia. Colección: Museo de Aquitania, Burdeos, Francia. Wikimedia Commons.

FIGURA 5 Hembra sentada con leonas


(VI Milenio a.C.) Estatua de terracota. Hallada en un granero de Çatalhöyük, Turquía.
Colección del Museo de Civilizaciones de Anatolia, Ankara, Turquía.
Fotografía ref #DA32308 © 2013. Fototeca DeAgostini/SCALA, Florencia.

FIGURA 6 Reina de la noche


(c1800-1750 a.C.) Placa de arcilla cocida y templada con paja, 49,5 x 37 cm, antigua
Babilonia. (antes denominada "Relieve de Burney"), Colección del Museo Británico.
Ref # ME 2003-7-18-1, Picture ref # AN3323001, © British Museum Trustees.

FIGURA 7 Reconstrucción de joyas de las tumbas de Ur


(c2600 a.C.) Collares de oro, lapislázuli y cornalina de las tumbas de Ur, Mesopotamia (sur
de Irak). Colección del Museo Británico, Londres, Reino Unido. Ref. 122411, Foto ref.
AN810871001 © British Museum Trustees.
LISTA DE ILUSTRACIONES 7

FIGURA 8 Sello cilíndrico que representa a Ishtar


(c2334-2165 a.C.) Sello cilíndrico del periodo de Akkad. Instituto Oriental de Chicago,
Estados Unidos. Ref # A27903, © Instituto Oriental de Chicago.

FIGURA 9 Disco de la Gran Sacerdotisa Enheduanna de Ur


(c2350-2300 a.C.) Disco de piedra caliza calcita, 25 cm de diámetro x 7 cm de profundidad,
procedente de las tumbas de Ur (sur de Irak) Colección del Museo Penn, EE UU. Ref #
B16665, © Penn Museum.

FIGURA 10 Tablilla cuneiforme de arcilla del Himno a Ishtar


Neoasirio de la Biblioteca de Ashurbanipal, 16 x 9,4 cm, Colección del Museo Británico,
Londres, Reino Unido. Ref # SM.954, Picture ref # AN31113001 © British Museum
Trustees.

FIGURA 11 Figura sobre un león en la placa del león de Ishtar


(c2000-1595 a.C.) Fragmento de placa de arcilla, 7 cm de altura. Ref # 31-43-425, © Penn Museum.

FIGURA 12 Procesión de celebración


(730-727 a.C.) Relieve mural en yeso del reinado de Tiglat Pileser III en Nimrud,
ref #136773, British Library Collection, Picture ref # AN111849001, © British Museum
Trustees.

FIGURA 13 Dios Min de Coptus en Egipto


Del antiguo templo de Min en Coptus, Egipto. NB: Esculturas de Min conservadas en la
colección del Museo Ashmolean de Oxford, Reino Unido © Wikimedia commons.

FIGURAS 14 Y 15 Figurillas votivas de plomo del Santuario de Artemisa Orthia


(finales del siglo VI-V a.C.) del Santuario de Artemisa Orthia, plomo, 3,5 cm de altura,
Museo Fitzwilliam, refs. nº GR 1456.1923 y GR 1449.1923 © Fitzwilliam Museum de
Cambridge.

FIGURA 16 Sacerdotisa alada blandiendo un látigo en Pompeya


(Pre-79 d.C.) Fresco mural Villa de los Misterios, Pompeya, Italia. © The Art Archive /
Villa de los Misterios/Colección Dagli Orti.

FIGURA 17 Jarro de agua Aquamanile en forma de Filis dominando a


Aristóteles (Principios del siglo XV) Procedente de Maasland, Colección de Artes
Decorativas Europeas, Parque del Jubileo, Bruselas. Imagen © Vassil, cortesía de Creative
Commons.

FIGURA 18 Sócrates C Xantippe


(c1670-1700) Mezzotinta de John Smith según Hendrich Goltzius, Colección del Yale
Center for British Art, Connecticut, EEUU. Ref # B1790.3.1667 © Yale Center for British
Art.

FIGURA 19 El Cully Flaug'd


(c1674-1702) Mezzotinta, Según Marcellus Laroon, 24,6 x 19,6 cm, ref #
1886,0612.320, Colección del British Museum, Londres, Reino Unido. Picture ref
#AN49538001, © British Museum Trustees.
8 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 20 Escena de flagelación erótica


(1718) Frontispicio de la reimpresión de Edmund Curll del libro A Treatise in the Use of
Flogging in Venereal Affairs. Ref # P.C.20.a.23 de la colección de Libros Raros de la
Biblioteca Británica, Londres, Reino Unido. © The British Library Board.

FIGURA 21 Grabado de la flagelación


(1752) Grabado de John June, 'Publish'd according to Act of Parliament, Sold by
Sr. L'Agneau de Black Fryars, 1752, 26 de marzo. Ref # PC3-1752 de la Colección de la
Biblioteca del Congreso, Washington D.C © Biblioteca del Congreso.

FIGURA 22 Conferencias de moda impartidas con disciplina de abedul


Frontispicio del libro en el que figuran los nombres de 57 damas que practican la
disciplina de abedul. Ref. nº P.C.31.e.18/7 Rare Books collection of the British Library,
Londres, Reino Unido © The British Library Board.

FIGURA 23 George Beare, Retrato de Peg Woffington


(c1740-9) Óleo sobre lienzo, 76,2 x 63,5 cm, Colección Paul Mellon, Yale Center for
British Art, Connecticut, EE.UU. Nº de referencia B.1981.25.38. © Yale Center for
British Art.

FIGURA 24 Nathaniel Hone, Retrato de Kitty Fisher


(1765) Óleo sobre lienzo, 74,9 x 62,2 cm, Colección de la National Portrait Gallery,
Londres, Reino Unido. NPG2354 © National Portrait Gallery.

FIGURA 25 George Willison, Nancy Parsons en traje turco (c1771)


Óleo sobre lienzo, 57,2 x 47,6 cm, Colección del Yale Center for British Art,
Connecticut, EE.UU. Ref # B1981.25681. © Yale Center for British Art.

FIGURA 26 James Wilson, La bella monja desenmascarada


(c1770) Mezzotinta realizada según pintura de Henry Morland, 34,9 x 25,1 cm, Colección del
Yale Center for British Art, Connecticut, EE.UU., Ref # B1970.3.576, © Yale Center for
British Art.

FIGURA 27 El Caballo Berkley, diseñado en 1828 por la institutriz


dominatrix Theresa Berkley
(c1876-7) Reproducido en el Index Librorum Prohibitorum (1877) Ref. nº P.C.14.de.3 de la
colección de libros raros de la Biblioteca Británica, Londres, Reino Unido © The British
Library Board. (Se cree que esta imagen procede de un antiguo ejemplar del libro Venus
School-mistress).

FIGURA 28 Detalle de putti azotándose contra una escalera


(c1876-7) Detalle del "Frontispiece" de Pisanus Fraxi (seudónimo de Henry Spencer
Ashbee) Index Librorum Prohibitorum (1877) Ejemplar de colección privada
© Anne O Nomis.

FIGURA 29 Página de la carta manuscrita de Frederick Hankey a Ashbee


(1875) Carta fechada el 26 de mayo de 1875 e intercalada en la copia manuscrita anotada
personal de Henry Spencer Ashbee del Index Librorum Prohibitorum (1877) Ref #
P.C.14.
LISTA DE ILUSTRACIONES 9

de.3, Colección de Libros Raros de la Biblioteca Británica, Londres, Reino Unido. ©


Consejo de la Biblioteca Británica.

FIGURA 30 Frontispicio del Index librorum Prohibitorum - Índice de libros


prohibidos
Detalle del "Frontispiece" de Pisanus Fraxi (seudónimo de Henry Spencer Ashbee) Index
Librorum Prohibitorum (1877) Ejemplar de colección privada © Anne O Nomis.

FIGURAS 31 Y 32 Modelos para Jacques Biederer, París


(c1930s) Colección privada facilitada a la autora © Anne O Nomis.

FIGURAS 33 Y 34 Modelo Nativa en fotografías para Yva Richards, París


(c1930s) Colección privada facilitada a la autora © Anne O Nomis.

FIGURAS 35, 36, 37 Modelos en pony-play para Charles Guyette, Nueva York
(c1940s) De la colección del Instituto Kinsey, Universidad de Indiana, EE.UU. © Instituto
Kinsey.

FIGURA 38 Imagen de época de una pareja modelando para Charles Guyette, Nueva York
De la colección del Instituto Kinsey, Universidad de Indiana, EE.UU. © Instituto Kinsey.

FIGURA 39 Imagen de época del culto al pie de Charles Guyette, Nueva York
De la colección del Instituto Kinsey, Universidad de Indiana, EE.UU. © Instituto Kinsey.

FIGURA 40 Una dama de estilo "bizarro" con látigo de John Willie ( J.S.
Coutts) (c1962) Obra de arte en tempura y acuarela de John Willie ( J.S Coutts), El
original se conserva en una colección privada. Esta imagen también se reproduce en el
libro The Adventures of Sweet
Gwendoline de John Willie, publicado por Bélier Press, segunda edición revisada y ampliada
(con dibujos y pinturas inéditos), p.353. ISBN: 0-914646-48-6
© Bélier Press, Inc.

FIGURA 41 Expositor en la tienda de revistas Back Date, 1175 6th Ave., NYC
en septiembre de 1958
(1958) 8 x 10 Fotografía de la colección del Instituto Kinsey, Universidad de Indiana,
EE.UU. © Instituto Kinsey.

FIGURA 42 Martin Leigh, The Velvet Underground (1963)


(1963) Miniatura de la cubierta del libro facilitada al autor.

FIGURA 43 Bruce Rogers, The Bizarre lovemakers (1967)


(1967) Miniatura de la cubierta del libro facilitada al autor.

FIGURA 44 Myron Kosloff, Dominatrix (1968)


(1968) Miniatura de la cubierta del libro facilitada al autor.

FIGURA 45 Cartel de la película Maîtresse (1975/6) diseñado por el artista británico Allen Jones
Cartel de cine original de época, 104 x 69 cm, de la colección de Reel Poster Gallery,
10 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Londres, Reino Unido (donde se venden carteles de cine vintage originales). Fotografía
de A.J Photographics. Reel Poster Gallery.

FIGURA 46 Miss Doreen, alias Miss Anne, Miss Anita, Miss Tracey,
Londres (años 60)
(c1960s) Fotografía de época © David Jackson, revista DDI, EEUU.

FIGURAS 47 Y 48 La Srta. Doreen en su piso del West End (años 60)


(c1960s) Fotografía de época © David Jackson, revista DDI, EEUU.

FIGURAS 49, 50, 51 Señora Ana de Kent, Reino Unido


(c1963) Imágenes antiguas de John Sutcliffe, publicadas en la revista AtomAge Vol. 3
© John Sutcliffe/Revista AtomAge.

FIGURAS 52 Y 53 Jean Fischer de Ossining, Nueva York


(c1960s) Fotografía de época © David Jackson, revista DDI.

FIGURA 54 Obra de arte de dominatrix con guantes distintivos parecidos a los


de Jean Fischer, por John Willie ( J.S Coutts)
(c1962) Obra de arte en tempura y acuarela de John Willie ( J.S Coutts). El original se
conserva en una colección privada. Esta imagen también se reproduce en el libro The
Adventures of Sweet Gwendoline de John Willie, publicado por Bélier Press, Segunda
edición revisada y ampliada (con dibujos y pinturas inéditos), p. 348.
ISBN: 0-914646-48-6 © Bélier Press, Inc.

FIGURAS 55 Y 56 Anne Laurence, Alto Manhattan


(c1960s) Fotografías antiguas © David Jackson, revista DDI.

FIGURA 57 Dominatrix holandesa Monique Von Cleef, Nueva York


(c1963) Fotografías antiguas tomadas en el apartamento de Leonard (Lenny) Burtman
para la revista Bizarre Life © Leonard Burtman, revista Bizarre Life y David Jackson,
DDI Magazine.

FIGURA 58 Portada del Bakersfield Californian sobre la redada policial contra Von Cleef.
(22 dic, 1965) Periódico Bakersfield Californian, EE UU © Bakersfield Californian.

FIGURA 59 Fotografía firmada de Monique Von Cleef en su "Casa del Dolor",


La Haya
(c1970s) Fotografía antigua autografiada por Von Cleef y regalada a David Jackson
© David Jackson, revista DDI.

FIGURA 60 Monique Von Cleef en La Haya


(c1960s) Fotografía vintage en color de Monique Von Cleef en su 'House of Pain'.
© David Jackson, revista DDI.
LISTA DE ILUSTRACIONES 11

FIGURA 61 Sadom Bea, La Haya


(c1970s) Fotografía antigua, colección privada. © David Jackson, revista DDI.

FIGURA 62 Miss Kenny, La Haya, en la portada de la revista Domination


Directory International Magazine
(c1970s) Imagen de Miss Kenny por Bert Wibo reproducida en la portada de la revista DDI
Volumen 1, Número 2, c1984 © Bert Wibo, Massad Magazine y David Jackson, revista
DDI.

FIGURA 63 Brita Schmerse, Herbertstrasse, Alemania


(Finales de los años 70) Fotografía de época © Bert Wibo, Massad Magazine y David Jackson,
Revista DDI.

FIGURA 64 Mistress Gaby, Herbertstrasse, Alemania


(c1980) Fotografía de época © Bert Wibo, Massad Magazine y David Jackson,
Revista DDI.

FIGURA 65 Nicole de Carje, Herbertstrasse, Alemania


(c1982) Fotografía de época © Bert Wibo, Massad Magazine y David Jackson,
Revista DDI.

FIGURA 66 Artista Natasha Gornik, Mistress Alex Goes to Times Square I


(2013) Nueva York, impresión digital de edición limitada © Natasha Gornik.

FIGURA 67 Artista Natasha Gornik, Mistress Alex Goes to Times Square I


(2013) Nueva York, impresión digital de edición limitada © Natasha Gornik.

FIGURA 68 Artista Ian Reid, Thrill. (Mistress Darcy deja entrar a su esclavo en
su discreta guarida).
(2013) Nueva York, Impresión digital de edición limitada © Ian Reid.

FIGURA 69 Artista Kate Peters, Mistress Absolute. (Retrato de la


Sí serie Mistress).
20 x 24" edición limitada C-type hand print © Kate Peters/INSTITUTE.

FIGURA 70 Artista Kate Peters, Madame Caramel. (Retrato de la


Sí serie Mistress).
20 x 24" edición limitada C-type hand print © Kate Peters/INSTITUTE.

FIGURA 71 Artista Kate Peters, Mistress Jezabel. (Retrato del Sí Mistress


serie).
20 x 24" edición limitada C-type hand print © Kate Peters/INSTITUTE.

FIGURA 72 Artista Stuart Pearson Wright, Retrato de Mistress Jezabel


(2011) Óleo sobre lienzo, enmarcado en óvalo, 40 x 50 cm © Stuart Pearson Wright.
12 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 73 Ama Amanda Dwyer, Propietaria de Salon Kitty's


Fotografía de época facilitada por Mistress Amanda Dwyer © Salon Kitty's/Mistress
Amanda Dwyer.

FIGURA 74 Salón Kitty's "Red Dungeon Room


Sydney, Australia. Fotografía facilitada por Mistress Amanda Dwyer © Salon Kitty's /
Mistress Amanda Dwyer.

FIGURA 75 Domina V en su esponjoso tocador - A Safe Place for Sissies,


Brighton, Reino Unido
Fotógrafo H9 © Domina V.

FIGURA 76 Ama Tokio jugando en su mazmorra


Sydney, Australia. Fotógrafo Lucas Konrad Messerer, de Soul Focus Studio
© Mistress Tokyo/Soul Focus Studio.

FIGURAS 77A Y 77B Cuntress Gabrielle y Mistress Electra Amore,


Fetish Palace, Adelaida
(2013) Adelaida, Australia. © Fetish Palace.

FIGURA 78 Artista Phil Miller, Retrato de Mistress Morrigan en su mazmorra


(2013) Londres, Reino Unido. Impresión digital de edición limitada. © Phil Miller.

FIGURA 79 Artista Phil Miller, Imágenes de mazmorras de la guarida de la dama,


Londres
(2012) Londres, Reino Unido. Impresiones digitales de edición limitada. © Phil Miller.

FIGURA 80 Artista Lucina Nathanael, Venus en pieles o el homenaje de Maîtresse


Nuit a la Mujer Ideal de l Von Sacher Masoch
(2013) Londres, Reino Unido. Impresión digital en edición limitada © Lucina Nathanael & Nuit d'Or.

FIGURA 81 Artista Lucina Nathanael, Tacón


(2011) Londres, Reino Unido. Impresión fotográfica en edición limitada © Lucina Nathanael & Nuit d'Or.

FIGURA 82 Artista Nuit d'Or, le Noir 9


(2011) Londres, Reino Unido. Impresión digital en edición limitada © Lucina Nathanael & Nuit d'Or.

FIGURA 83 Artista Lucina Nathanael, Tacones C Látigo


(2011) Londres, Reino Unido. Impresión digital en edición limitada © Lucina Nathanael & Nuit d'Or.

FIGURA 84 Artista Nuit d'Or, animación suspendida


(2011) Londres, Reino Unido. Impresión digital en edición limitada © Lucina Nathanael & Nuit d'Or.

FIGURA 85 Artista Lucina Nathanael, Intimidad


(2011) Londres, Reino Unido. Impresión digital en edición limitada © Lucina Nathanael & Nuit d'Or.

FIGURAS 86A Y 86B Artista Natasha Gornik, pareja Domme Jaguar C


Edición limitada © Natasha Gornik.
PrEFACE

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Mi viaje al mundo de las dominatrices comenzó en Melbourne,


Australia, hace cinco años. El barrio de Fitzroy, en el centro de la
ciudad, era entonces el dominio de las dominatrices. Una línea de
tranvía atraviesa el corazón del suburbio, a lo largo de Brunswick
Street, repleta de cafés, boutiques y bares de copas. A pocos
minutos a pie de la calle principal había dos mazmorras,
discretamente situadas en villas victorianas de frondosas calles
laterales.
Por aquel entonces, yo dirigía una gran sala de exposiciones de
diseño, cuya entrada al aparcamiento estaba enfrente de uno de
los establecimientos de mazmorras. Mis compañeros de trabajo
estaban atentos a la llegada o salida de una de estas intrigantes
damas, que pasaban de largo.
14 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

a través de la alta verja delantera, con una bolsa de lona colgada del
hombro, llena hasta los topes.
Las Dominatrices de Fitzroy formaban entonces parte de la
geografía cultural del lugar. Las botas de tacón alto se deslizaban
por los senderos de Fitzroy a zancadas seguras. Cada calabozo
albergaba alrededor de una docena de Dominatrices. En ocasiones
se las podía ver en puestos locales, en Atomica Coffee, en el bar
Black Pearl y en Polly Lounge. De hecho, este último tenía una
lista de cócteles que incluía una bebida "Mistress" y "Red
Stiletto", en un aparente guiño a su clientela, que a menudo
frecuentaba el bar después del trabajo.
Una noche estaba en el bar Polly Lounge con unos amigos,
tumbados en tumbonas de terciopelo rodeados de esculturas de
Venus y cuadros prerrafaelitas; cuando en el patio de butacas de
mi derecha, una mujer ordenó a su acompañante que le besara el
pie.
Bésame el pie, esclavo", fue exactamente lo que dijo. Se tiró al
suelo, obediente, para obedecer, besándole la punta del pie a plena
luz del día. En realidad, miento, era la luz de una lámpara de araña,
pero ya me entienden. Me sorprendió, me divirtió y me intrigó a la
vez. Al igual que mis amigos.
La oportunidad de aprender más se presentó cuando me invitaron
a la fiesta de cumpleaños de una de las Dominatrices. Se celebró
en la calle Gertrude de Fitzroy, una noche a base de "sucios martinis
rusos". Conocí a unas diez Dominatrices, todas ellas trabajaban en
la misma mazmorra. Lo que me sorprendió fue conocer sus
antecedentes y "otras" ocupaciones. Una era traductora judicial y
policial y hablaba siete idiomas. Otra era educadora infantil. Otro
era trapecista de circo. Otro estudiaba medicina china y
acupuntura. Otra estudiaba permacultura e irrigación de entornos
desérticos. Eran el tipo de mujeres que te encantarían en una
cena. Inteligentes, elocuentes y
PRÓLOGO 15

convincente, con una perspectiva abierta e independiente del


mundo. Fascinante.
Les pregunté por la historia de la dominatrix, cuánto tiempo
llevaba existiendo. Ni ellas mismas lo sabían. Una pensaba que la
dominación era un fenómeno del siglo XX, una especie de
evolución posterior a la guerra paralela a la liberación sexual de la
mujer. Otro me dijo que se remontaba a la época victoriana inglesa
y a la disciplina escolar. Les pregunté si conocían algún libro sobre
el tema. Las cabezas asintieron que no, que no había ningún
libro.1 Encogimiento de hombros.
En ese periodo entrelazado ocurrieron algunas cosas, no todas
las cuales puedo compartir debido a las restricciones contractuales
de una carpeta azul. Para ponerme en antecedentes, mi padre
tenía cáncer, y yo estaba sumida en el dolor a medida que
avanzaba y empeoraba, al tiempo que buscaba para él el mejor
tratamiento médico disponible en los hospitales más
especializados del extranjero y le ofrecía todo mi apoyo emocional
lo mejor que podía. También había cambiado de trabajo y me
sentía muy poco desafiada e infrautilizada en mi nueva función.
Una combinación de inmenso dolor en mi vida personal y
aburrimiento en mi vida laboral. Un terreno propicio para el
crecimiento de una flor inusual.
Tenía una pizarra en mi cocina con una cita de Katherine
Mansfield (escritora de relatos cortos y neozelandesa expatriada).
Cada mañana, mientras desayunaba, levantaba la vista e ingería sus
palabras junto con la tostada y el café:

¡Arriesga! ¡Arriesga lo que sea!


No te preocupes más por las opiniones de los demás, por
esas voces. Haz lo más difícil del mundo para ti.
Actúa por ti mismo. Afronta la verdad.
16 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Si la gente se pasa la vida preocupándose demasiado por lo que


piensan los demás, la proximidad de la muerte rompe algunas de
esas absorciones. Y como me dijo uno de mis amigos mayores, "al
final, todos somos abono para la hierba". No te arrepientes tanto de
las cosas que has hecho en la vida como de las que no hiciste, de
las oportunidades que no aprovechaste".
Quería aceptar el reto y escribir el libro sobre la Dominatrix. Y
mientras me enfrentaba a los oscuros temores de perder a uno de
mis familiares más cercanos a causa del cáncer, otras
preocupaciones como lo que pensarían los demás empezaron a
palidecer en comparación de magnitud.
El atractivo de la mazmorra era el de un reino del "otro
mundo". Aprender sobre la Dominatrix prometía una visión de las
cuestiones de sumisión, sufrimiento, aceptación y los secretos de los
deseos más profundos de las personas. También había algo sobre la
disciplina y el enfrentamiento al miedo en la mazmorra, que yo
deseaba (o quizás necesitaba) en aquel momento. La decisión de
escribir sobre su oficio cambiaría mi camino para siempre,
conduciéndome a una doble vida clandestina, de días dedicados a
mi trabajo y noches dedicadas a aprender sobre las artes de estas
mujeres. Un año de corsés, jaulas, látigos... e inevitablemente de
muerte. Después de empaparme de dolor y pérdida, y procesarlos,
por fin encontré el valor para empezar a vivir de nuevo.
Abandonar mi aburrido y poco estimulante trabajo, mudarme a
Europa y estudiar un máster en el campo que más me apasionaba
hasta lo más profundo de mi ser, y al mismo tiempo
completar mi investigación sobre la Dominatrix.
Mi departamento universitario resultó estar situado en
Gordon Square, donde antaño frecuentaba el subversivo Grupo
Bloomsbury de artistas y escritores. Estaba a pocas manzanas del
Museo Británico en una dirección y de la Biblioteca Británica en la
otra. Tampoco estaba lejos de los calabozos londinenses de
Marylebone. La mayoría estaban situados en un sótano,
metafóricamente como
PRÓLOGO 17

así como literalmente subterráneas, aislando la vista, la luz y el


sonido del mundo exterior. Por las noches, Londres ofrecía un
sinfín de eventos fetichistas, que abarcaban subculturas de la
escena gótica, fiestas de máscaras, Torture Garden, fiestas de
juegos, Rubber Balls, Social 'Munches' y 'Crunches' (como se les
conoce de diversas maneras).
A través de estas interconexiones, tuve acceso privilegiado a
todo el material de estudio y las personalidades que podía desear
para embarcarme en mi proyecto. Me hice amigo de algunas de
las Dominatrices más famosas del mundo, y bien considerado
dentro de su círculo social.
Mis estudios universitarios y mi libro eran dos proyectos
claramente separados. O al menos eso creía yo. En mis estudios
me topé con la antigua diosa de Mesopotamia y también con una
diosa "dominatrix" llamada Inanna. Era la deidad patrona de la
principal ciudad primitiva del mundo, Uruk (también conocida
como Warka). De ella procede el primer sistema de escritura del
mundo y la arquitectura monumental primitiva. En un caso de
"Dominatrix y la ciudad", Inanna activó la sexualidad, la virilidad,
la fertilidad, la abundancia y el éxito en la batalla en beneficio de
su ciudad. Su religión apoyó el desarrollo de la sabiduría artesanal
en Uruk, y dentro de la mitología adquiere todos los "mes" para su
ciudad: los poderes de la civilización, que incluían áreas de
sabiduría, artes de batalla, conocimiento artesanal, escritura, y se
extendían a las artes sexuales. La civilización humana, tal y como la
conocemos, estaba estrechamente ligada a una Diosa Dominadora.
A Inanna se la representaba con el símbolo de columnas de
juncos enrollados vinculadas al almacén y al redil, y se la
relacionaba con la estrella de Venus y la estrella-rosette, y con el
león. En los textos antiguos, Inanna (o Ishtar, como se la conoce
en acadio) tiene un misterioso implemento llamado keppû,
utilizado en rituales que parecen estar relacionados con la
exhibición de dominación. También está el himno a Inanna como
"Señora de
18 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El corazón más grande", en el que tienen lugar rituales de


dominación que implican transformación de género, castigo,
dolor, lamento y éxtasis. Apenas podía creer lo que estaba
leyendo. Este himno estaba vinculado a una mujer histórica, cuyo
nombre se registra en primera persona, ella habla, 'Yo Enheduanna
. . .' Esta mujer, Enheduanna, era una poderosa En-Sacerdotisa, hija
del rey Sargón y, por tanto, princesa. También era devota de la diosa
Inanna, y parece que escribió poesía o editó poesía dedicada a
Inanna. Si es lo primero, que ella escribió el himno (como creen
muchos expertos), Enheduanna es la primera autora registrada
conocida en la historia.
Las prácticas religiosas posteriores de la diosa Artemisa Orthia
de Esparta incluían la flagelación como parte de los ritos de
iniciación de los jóvenes. Al parecer, los rituales de flagelación
formaban parte de una serie de ritos de fertilidad e iniciación en el
Mediterráneo antiguo, y en las paredes de la Villa de los Misterios
de Pompeya se representa a una sacerdotisa alada azotando a una
iniciada.
Educada en las raíces sagradas de los rituales de las
Dominatrix a partir de mis estudios, traté de investigar el oficio
profesional secular dentro de la historia. Al principio resultó ser
más difícil de lo que imaginaba. Las dominatrices operan "entre
las grietas" y nunca hay carteles que indiquen la puerta de su
mazmorra. Son anónimas y seudónimas, adoptan un "nombre
artístico" de Ama y con él un alter ego, un súper yo más que un yo
"falso". Al retirarse, las Dominatrices desaparecen en el aire, o eso
parece. Cierran la tienda, sin una dirección de contacto ni un
nombre "real" (legal) bajo el que localizarlos. En la era de la
publicidad de las revistas fetichistas de los años 70, al menos se
conservan sus fotografías y nombres en este medio, pero antes de
esta época hay pocos registros de su existencia. Muchas de las
supuestas imágenes de las primeras Dominatrices del siglo XX
resultaron ser
PRÓLOGO 19

sólo mujeres en poses y escenas para fotógrafos comerciales que


producen imágenes eróticas y fetichistas para la venta.
Las verdaderas Dominatrices de principios y mediados del siglo
XX mantenían un perfil muy bajo. Se anunciaban a través de
tarjetitas para una Dama Domi- nante colocadas en los escaparates
de los estancos del Soho y en las cabinas telefónicas. Las
referencias se transmitían de boca en boca entre los compañeros
que buscaban autoridad femenina. Algunas Dominatrices se
arriesgaban a publicar anuncios en medios impresos, y cuando lo
hacían, velaban su ocupación con un lenguaje cuidadosamente
seleccionado, promocionándose como una Ama de Escuela o
Gobernanta "Estricta Disciplinaria".
Una de las pistas más útiles para averiguar cómo practicaban
estas mujeres su secreto oficio procedía de los editores de revistas
fetichistas, que las habían visitado y estaban en contacto con sus
clientes en la escena clandestina. El editor de una revista, David
Jackson, trabajó en un archivo único que él llama los "Archivos
Domina", documentando el conocimiento de las primeras
Dominatrices, la mayoría de las cuales habían fallecido. Sin el
esfuerzo de Jackson, el conocimiento de estas mujeres se habría
perdido para la historia, sobre todo las primeras practicantes de
los años 50 y 60, antes de que la publicidad de las revistas
fetichistas se pusiera en marcha.
En Inglaterra, las dominatrices en activo enviaban a sus
clientes a John Sutcliffe, de AtomAge, para que les confeccionara
trajes fetichistas y catsuits a medida, en los mismos talleres que
construían los trajes para la serie de televisión Los Vengadores.
En EE.UU., el pequeño número de Dominatrices que ejercían
eran conocidas por los esclavos a través del discreto boca a boca.
Ponerse en contacto con una Dominatrix en la vida real para
concertar una sesión suponía "un auténtico asunto de capa y
espada", como dijo un esclavo. Las practicantes y sus clientes a
menudo estaban vinculados
20 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

en una red de círculos privados y conocidos interconectados,


mediante reuniones clandestinas y revistas clandestinas de venta
por correo -cuyos editores fueron frecuentemente perseguidos o
procesados en la época. El Servicio Postal de Estados Unidos y las
fuerzas del orden trabajaban codo con codo en sus investigaciones
sobre "obscenidad".
Una dominatrix holandesa en EE.UU., Monique von Cleef,
fue objeto de una redada conjunta del servicio postal y la policía
en su casa de Newark, Nueva Jersey, pocos días antes de la
Navidad de 1965. La redada ocupó las portadas de los periódicos
estadounidenses, con fotos de los detectives blandiendo los látigos
de Von Cleef ante las cámaras. La lista de sus clientes fue entregada
al FBI y se llevaron sus pertenencias. Von Cleef fue enviada a la
cárcel durante cuatro meses, pero más tarde ganó el caso ante el
Tribunal Supremo, que consideró que la policía había abusado de
sus poderes en el registro.
Para entonces, Von Cleef se había trasladado a La Haya, una
de las capitales de la dominación femenina en la década de 1970,
donde atendía a políticos, diplomáticos y abogados que residían
en la ciudad o la visitaban. Las dominatrices de otros lugares se
adaptaron a las condiciones locales y a la aplicación de la ley,
colocándose en una ventana de un local de sexo, diferenciadas en
sus ofertas y bien cubiertas con su ropa fetichista, rodeadas de látigos
y equipo. Algunos prefirieron situarse lejos de la industria del sexo,
discretamente en una tienda o en una zona residencial, con el
espacio y la intimidad necesarios para disponer de un amplio
mobiliario bondage personalizado y equipo especializado.
El siglo XX fue una época muy interesante, durante la cual se
acuñó y popularizó por primera vez el término "Dominatrix". Sin
embargo, la ocupación en sí se remonta mucho más atrás en la
historia. Pero, ¿cómo rastrearla? Después de investigar, no tardé
en seguir la pista de grabados y "libros prohibidos" de los siglos
XVII al XIX.
PRÓLOGO 21

siglos, que son la principal fuente de información fragmentaria


sobre las Dominatrices "institutrices" de la época.
Muchos de estos libros eróticos que incorporaban la
flagelación fueron publicados por Henry Spencer Ashbee. Era un
hombre que al mundo exterior le parecía un consumado caballero
victoriano, pero que ocultaba una erotomanía secreta. De hecho,
la colección erótica de Ashbee era tan extensa que se vio obligado a
alquilar habitaciones en Gray's Inn Square, en Holburn, para albergar
sus numerosos volúmenes. Ashbee fue autor y publicó en privado un
índice bibliográfico de libros eróticos, titulado Index Librorum
Prohibitorum (Índice de libros prohibidos) bajo el seudónimo de
Pisanus Fraxi. Contiene parte del material histórico más
importante sobre las Dominatrices de la época.
A su muerte, Ashbee legó sus libros al Museo Británico. Su
colección de "libros prohibidos" fue a parar a la tristemente célebre
"vitrina privada" del museo. Sin embargo, para acceder al "Private
Case" había que ser un caballero de clase alta. Las mujeres y las
clases bajas estaban protegidas (es decir, prohibidas) de los libros
de la vitrina privada, ya que se creía que corrompían. Sin embargo,
en décadas más recientes y con el cambio de los valores sociales,
los libros se trasladaron a la colección de "Libros Raros" de la
Biblioteca Británica, donde yo los busqué. Aunque técnicamente
accesible al público, el ejemplar personal de Ashbee de su Index
Librorum Prohibitorum es un objeto de acceso restringido, debido
a su fragilidad, antigüedad, rareza y estado de conservación, más
que a su contenido tabú. Tuve que solicitar un permiso especial
por escrito a los conservadores para ver el libro. Consciente de la
importancia de ver este volumen, redacté una solicitud de acceso
en la que exponía mis intereses de investigación y mis credenciales
académicas.
Afortunadamente, la Biblioteca Británica accedió varios días más
tarde y me asignaron un horario de visionado.
22 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Hay que despojarse de todas las pertenencias, bolsos y abrigos,


antes de entrar en la Sala de Lectura de Libros Raros de la
Biblioteca Británica. Sólo se puede entrar con una bolsa de
plástico transparente, un ordenador portátil y lápices (no
bolígrafos), pasando por delante de los guardias de seguridad de la
entrada y la salida. Los libros son llamados desde las
profundidades, a través de catálogos informáticos, y recuperados
de las cámaras acorazadas. Tras una espera anticipada, se entregan
en un mostrador, un altar, para su recogida. Si el libro es
especialmente raro o valioso, sólo se puede ver en los mostradores
designados, vigilados por cámaras de seguridad.
Viajar desde una mazmorra cercana hasta las Salas de Lectura
de la Biblioteca Británica puso de relieve para mí las cualidades
fetichistas de los libros raros, guardados bajo tierra, preciosos,
materiales en sus cualidades, hojeados, tocados y atesorados.
Ashbee era, de hecho, un fetichista de los libros, no nos
andemos con rodeos, junto con, sospecho, la mayoría de los que
trabajan en la Biblioteca Británica, atraídos por tal profesión. Me
convertí a su religión aquel día, al pasar las páginas del hermoso
volumen del Index Librorum Prohibitorum del propio Ashbee,
con una importante carta manuscrita de Frederick Hankey
intercalada en sus páginas, en la que se describían todas las
Governess Dominatrices de la época anterior. En el libro de
Ashbee también se reproduce un dibujo de un appa- ratus de
flagelación, diseñado por la Governess Dominatrix Theresa
Berkley.
Fue un momento exquisitamente conmovedor, leer sobre
Dominatrices históricas, en un libro al que, durante décadas, se
había negado el acceso a las mujeres, para que no se corrompiera.
Oh la ironía - un poco tarde para eso, diría yo.
También localicé un importante libro de una época anterior
del siglo XVIII, en el que "bellas damas" ofrecían Conferencias de
Moda Dictadas con Disciplina de Abedul, en papeles de Madrastra o
de
PRÓLOGO 23

institutriz en representaciones teatrales. En una inteligente forma


de marketing, el libro promocionaba a las flagelantes. Su
frontispicio contiene los nombres de 57 mujeres, muchas de las
cuales llegaron a ser las cortesanas y bellezas más famosas de su
época en Inglaterra. Cortesanas como Kitty Fisher, Fanny
Murray, Lucy Cooper, Nancy Parsons, Peg Woffington, por
nombrar sólo algunas. Estas "disciplinantes del abedul" se hicieron
muy conocidas y fueron inmortalizadas por artistas en pinturas y
grabados, que cuelgan en colecciones de arte públicas y casas
señoriales de todo el mundo.
Con estampas de flagelaciones procedentes del Museo
Británico e incluso de la Biblioteca del Congreso de Washington
DC, mi libro empezaba a tomar forma. También se estaba
convirtiendo en uno de esos proyectos que, de haber tenido alguna
idea del trabajo que conllevaba, uno nunca habría empezado. El
tema se hizo aún más difícil por el hecho de que había tan poco
escrito sobre la Dominatrix, y por lo tanto gran parte de la
investigación era original. Había numerosos libros sobre otros
temas, como las geishas japonesas o las cortesanas francesas. ¿Por
qué había tan poco sobre la Dominatrix?
Estoy seguro de que la razón, aparte de los retos de la
investigación, es la naturaleza secreta, subversiva y tabú del dominio
de la Dominatrix. La dominatrix es un arquetipo del poder sexual
femenino, y esas tres palabras juntas forman una de las
agrupaciones más cargadas imaginables, en un mundo dominado
por grandes religiones patriarcales como el cristianismo y el islam,
que han tratado de imponer la obediencia, la sumisión y la
modestia de las mujeres.
Las convenciones morales que restringen y salvaguardan la
sexualidad de las mujeres se han desarrollado en gran medida en
paralelo a la propiedad privada y el control patriarcal, diseñados
para garantizar la seguridad de la paternidad y la inversión en la
descendencia. Estos códigos son intrínsecamente territoriales. Se
pueden consultar en
24 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

se basan en la tierra y la propiedad, de las que la mujer era considerada


un bien. La religión patriarcal reforzaba los códigos morales
destinados a garantizar la castidad de la mujer antes del
matrimonio, la fidelidad dentro del matrimonio y la sumisión a su
marido, mientras que las obligaciones de los hombres eran el
intercambio recíproco de seguridad, protección y provisión
invertida de su mujer y su familia. Las mujeres debían ser criaturas
débiles y sumisas, y los hombres fuertes proveedores; esto creaba
presiones antinaturales sobre ambos, reprimiendo naturalezas y
deseos. El movimiento sufragista para establecer el voto femenino
fue percibido como revolucionario y subversivo en su época,
desafiando posiciones de género y poder establecidas desde hacía
mucho tiempo.
La Dominatrix defiende a la mujer en el control, ejerciendo su
poder sexual sobre los hombres, que están a su merced. La larga
historia de la Dominatrix sugiere que hay algo muy importante, y
necesario, en su papel en la sociedad. La imagen de una mujer
sexual poderosa a la que adorar. Tratar con el fetiche, recibir y
abrazar identidades sexuales alternativas, anular y ofrecer alivio a
los roles sociales fijos, poseer conocimientos sobre estados
psicológicos de sumisión y éxtasis.
La Dominatrix opera a lo largo de las fallas de la civilización,
bailando en los bordes liminales donde su corteza flotante cae en un
magma burbujeante de deseo subterráneo. Un calor caótico y
fluido que intentamos suprimir en la sociedad y en nosotros
mismos, asustados por su poder y sus propiedades potencialmente
destructivas. (Lo pintamos como el Infierno de Dante, un
infierno ardiente, que con razón tememos leer).
Sin embargo, necesitamos una cantidad de calor, gases y
minerales para salir a la superficie que habitamos. Y, en efecto, la
dominatrix accede a este mundo de deseos e identidades
reprimidos, aliviando sus presiones. No sólo juega con la fantasía,
sino que levanta joyas de sabiduría
PRÓLOGO 25

sobre el autoconocimiento, el sufrimiento, el éxtasis, la aceptación, la


misericordia y la sabiduría. Une lo celestial con lo bajo, pues en su
obra hay igualmente lo terrenal, lo corporal, lo sexual y lo humano.
La Dominatrix aplica una combinación de intuición y
perspicacia en sus prácticas. Gracias a su mente y corazón abiertos,
atrae a una gran variedad de seguidores con matices diferentes.
Utiliza su profundo conocimiento de la psique, la sexualidad, los
deseos y las necesidades humanas, junto con sus habilidades
prácticas, experiencia, herramientas especializadas y equipos para
llevar a cabo su oficio.
Antes de poder terminar el libro, tuve que sentarme a pensar
cómo describir sus prácticas de una forma más coherente que un
índice alfabético de la A a la Z, o caer en el término comodín de
"BDSM". Lo que se me ocurrió, después de considerarlo
detenidamente, fue la clasificación de "Artes de los Siete Reinos".
Lo mejor que pude, estas prácticas van al corazón del oficio de la
Dominatrix.
Tan tabúes son, que cuando llegó el momento de llevar el libro
a la imprenta, los editores quisieron expurgar secciones
significativas a modo de censura. Surgieron dudas sobre si sería
posible obtener permisos de los museos más importantes del
mundo para reproducir obras de arte de sus colecciones en un
libro sobre la Dominatrix. Los editores tampoco querían incurrir
en los costes asociados a los permisos de imagen y las láminas en
color.
A pesar de lo desalentador de la noticia, seguí adelante con el
proyecto tal y como lo había concebido en un principio. Solicité
permisos para reproducir las ilustraciones y el material de archivo
importante de cada museo. Encontré una editorial privada
independiente, con la que tenía afinidad de visión y estética. Y
uno a uno, todos y cada uno de los museos a los que envié una
solicitud de permisos de reproducción de imágenes, aceptaron mi
propuesta.
26 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Esto significaba que el libro podía seguir adelante con todas las
obras de arte y material histórico importantes, reunidos en el
Museo Británico, la Biblioteca Británica, el Museo de Iraq, el
Museo Fitzwilliam de Cambridge, el Instituto Oriental de
Chicago, el Centro de Arte Británico de Yale, el Museo Penn,
etcétera. Este material se combina con imágenes fetichistas
antiguas de dominatrices históricas y arte contemporáneo sobre la
dominatrix de hoy en día para aclarar sus prácticas. Impulsada por
la convicción de que era una publicación importante que existiera
en las bibliotecas y en el acervo colectivo de conocimientos, ha
llegado a imprimirse con el material que merece contener.
Divertida e irónicamente, también ha acabado siendo un "libro
prohibido". Como muchos de los libros prohibidos históricos, se
ha impreso en privado con imágenes en color y contenidos
subversivos bajo un seudónimo (Anne O Nomis, un juego de
palabras con "anónimo"). La edición impresa, encuadernada en
cuarto de arlín, recupera las cualidades de la tradición artesanal del
libro y su delicioso atractivo táctil. Será ideal para bibliotecas,
coleccionistas y fetichistas por igual. Estoy seguro de que Ashbee
sonreirá complacido desde el cielo. (O saludando desde el infierno,
donde está disfrutando),
según el caso).
Es un final apropiado para este viaje, y quiero expresar mi
enorme agradecimiento a todos los que me han ayudado a ver la
luz del libro.
Dedico el libro a todas las Dominatrices, a sus antepasados
fustigadores a lo largo de la historia y a quienes se han desnudado a
sus pies.

Anne O Nomis, 2013


PRÓLOGO 27

Nota final
1 Este es el primer libro publicado sobre la historia de la Dominatrix. Algunos de
los libros más utilizados sobre prácticas BDSM son: Wiseman, J. SM101: A
Realistic Introduction (EE.UU.: Greenery Press, 1997) y Miller, P. y Devon,
M. Screw the Roses, Send Me the Thorns: The Romance and Sexual Sorcery of
Sadomasochism (Reino Unido: Mystic Rose Books, 2002). Sobre el tema del
estilo de vida femenino/dominación doméstica, véase Powers, Mistress Lorelei,
The Mistress Manual: The Good Girl's Guide to Female Dominance (US:
Greenery Press, 2001) y Sutton, E. Female Domination: An Exploration of the
Male Desire for Loving Female Authority (Lulu Books, 2003). Lindemann,
D. Gender, Eroticism and Control in the Dungeon (Chicago: University of
Chicago Press, 2012) ha publicado recientemente una perspectiva
sociológica académica sobre la dominación profesional.
un poco de información sobre langueta
Este libro incluye temas adultos en relación con la sexualidad, el fetichismo y
las prácticas de BDSM (Bondage y Disciplina [B&D],
Dominación/sumisión [D/s], y Sadismo y Masoquismo [S/M]). Es adecuado
para lectores maduros y de mente abierta. Algunos de los textos tienen un
contenido inevitablemente erótico o explícito.
Desafiando las convenciones del idioma inglés, verá muchas
mayúsculas en la ortografía de Dominatrices, Diosas, 'Ella' y 'Ella'. Esto
puede resultar chocante para algunos, irritante para otros y considerado
incorrecto por muchos. Sin embargo, el uso de mayúsculas es intencionado.
Al igual que el "Dios" cristiano se escribe con mayúscula, aquí también se
escribe "Diosas".
Uno de los retos de escribir un libro sobre Dominatrices es que el
idioma inglés no tiene equivalentes femeninos para algunas palabras que
existen en forma masculina. En inglés, utilizamos la palabra 'mastery'
para referirnos al dominio y posesión de habilidades, y la persona que lo
consigue es un 'master'. La palabra "mistress" no tiene ese significado
equívoco en inglés, ni existe la palabra "mistressery". (¡Y quizá debería
existir!)
Verás algunas ideas y expresiones "raras" y traducciones de lenguas
antiguas que se han visto influidas por visiones del poder y la sexualidad
femeninos distintas de las tuyas. En algunos casos, las palabras antiguas no
tienen un equivalente sencillo en el inglés actual. (En sumerio antiguo,
por ejemplo, "Nin" significa Señora, Sacerdotisa, Propietaria, Ama, Reina
[en traducción aproximada]). En la medida de lo posible, he intentado
explicarlo lo mejor que he podido en un lenguaje accesible. No me disculpo,
sin embargo, por el efecto inicial chocante de leer sobre mujeres que se
escriben con mayúsculas y poder. Con el tiempo, te someterás al lenguaje
y al control de "Ella" sobre este libro.
CHAP TER I

EL DOmINATROx ANCIANO
DIOSES E INICIATIvAS
PrIEsTEs
--�-

Los rituales de dominación se remontan a miles de años atrás, a


las prácticas sagradas de la religión de las diosas. Los arqueólogos
han descubierto textos escritos en escritura cuneiforme en tablillas
de arcilla que describen ritos realizados a iniciados que implicaban
transformaciones de género, castigos, dolor y éxtasis. Estos
rituales se practicaban en honor de una "diosa dominadora"
llamada "Inanna" ("Ishtar" en acadio). Era una diosa de "temibles
poderes divinos" que dominaba la libido, el vigor, el atractivo y el
poder de combate.
Los antiguos himnos que exaltan los rasgos dominantes de la
diosa Innana están relacionados con una alta sacerdotisa histórica
llamada Enheduanna, que era hija del rey Sargón y vivió en el
siglo XVI.
32 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

alrededor de los años 2285-2250 a.C. Habla en primera persona


en uno de los principales himnos de la Dominatrix y se cree que
es la primera autora registrada en la historia de la humanidad.1
La diosa Inanna, a la que se honra en los himnos, era una
antigua diosa del granero y la estrella de Venus. Fomentaba el
vigor, la fertilidad, la producción y la reproducción, el aumento de
la población y el éxito de la civilización antigua: el primer sistema
de escritura y la arquitectura monumental surgieron del recinto de
la diosa.
Esta es la historia de la civilización que no te enseñaron en la
escuela... una historia de dominatrix, sexo y la ciudad antigua.

EL DOmINATrIx, EL sEx Y LA CITy (ANTIgUA)


El cuerpo de la "literatura dominatrix" viene en forma de himnos
religiosos a una diosa llamada Inanna. Era la principal deidad
femenina de la antigua Mesopotamia, la región situada entre los
ríos Tigris y Éufrates, en el actual Irak. Esta región formaba parte de
la "media luna fértil", donde floreció la civilización y se
desarrollaron los rasgos distintivos que asociamos a la civilización:
escritura, sistemas de administración, arquitectura monumental,
complejos sistemas de irrigación, excedentes de grano y una
población del tamaño de una ciudad (más de 50.000 habitantes).
Inanna reinaba sobre la ciudad más importante de la época,
Uruk (también conocida como "Warka" y "Erech" en los textos
bíblicos). Alrededor del año 3000 a.C., Uruk estaba en su apogeo.
Su población había alcanzado el tamaño de una ciudad. En el
corazón de la ciudad se encontraba el recinto de la diosa Inanna,
conocido como "Eanna", donde se ubicaban los templos y se
llevaban a cabo la administración y la artesanía de la ciudad. Es en
el barrio Eanna de la diosa donde se originó el primer sistema de
escritura del mundo.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 33

surgió. Al principio se utilizó para la administración y, a medida


que se desarrollaba, para registrar listas de reyes, himnos
religiosos, mitos y la "Epopeya de Gilgamesh". Fue también en el
distrito de Eanna donde los arqueólogos encontraron los primeros
ejemplos de arquitectura monumental.
Sin embargo, la mayoría de la gente ignora que estas "señas de
identidad de la civilización" se desarrollaron a partir de una zona
controlada por una Diosa, una Diosa cuyo poder era sexual. Es
atribuible a los "restos" conservadores de la ideología victoriana y
al choque de valores religiosos en las principales religiones
modernas (cristianismo, judaísmo e islam) que esta historia no se
conozca ni se cuente bien.
Los arqueólogos han excavado partes de la antigua ciudad de
Uruk (o Warka), y entre los hallazgos se encontraba la primera
escultura de un rostro humano a tamaño natural jamás
encontrada. Se trataba de la cabeza de mármol de una mujer, una
escultura que fue bautizada como la Dama de Warka. Se cree que
esta "Dama" representa a la propia diosa Inanna (véase la FIGURA
1).
¿Qué aspecto tenía la diosa Inanna? Como una dominatrix,
por supuesto. Inanna tiene expresión severa, mirada fija y aspecto
severo. Antaño estaba bellamente adornada con incrustaciones de
piedras preciosas en los ojos, una peluca postiza fijada en la parte
superior de la cabeza, maquillaje pintado y delineador negro
alrededor de los ojos. Sin embargo, con el paso de los milenios,
estos elementos se han desintegrado. La escultura habría
encarnado el encanto erótico, una de las más bellas esculturas
vistas en su época. A menudo se la llama la "Mona Lisa sumeria".
Inanna tenía poder sobre la sexualidad y era una especie de
"Dama Virago". La moderna pastillita azul Viagra debe su nombre
a la palabra "virago", lo que da una idea de sus efectos. En otras
palabras, Inanna encarnaba el vigor, la libido, el atractivo erótico y
la destreza. Su religión incorporaba a personas de sexualidad no
normativa y
34 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

identidad, así como la unión heterosexual de Inanna y el pastor


Dumuzi como rey.
Inanna no fue un retroceso a una época "incivilizada". Al
contrario, Inanna hizo posible la civilización. Lo que impulsaba la
producción y la reproducción en la antigua ciudad era el vigor, la
dominación y el atractivo erótico. Los hombres llevaban ofrendas
de alimentos y tributos al distrito del templo. Había saludables
excedentes de grano y el ganado era robusto y productivo. Piedras
preciosas y recursos llegaban a la ciudad desde lejos, la artesanía se
nutría junto a la Diosa, y maravillosos festivales y celebraciones
atraían a la gente y vigorizaban a sus habitantes. En el distrito
Eanna de la Diosa, la civilización se nutría de vigor erótico.
Una vasija conocida como el Jarrón de Warka representa escenas
de ofrendas a su templo. Se encuentra en el Museo de Bagdad,
pero está hecha pedazos, ya que fue robada durante el caos de la
guerra de Irak en 2003 y figuraba en el número uno de la "Lista de
antigüedades más buscadas".2 Posteriormente fue devuelta en una
amnistía, pero rota en 14 pedazos. (La Dama de Warka también
fue robada, y apareció enterrada en el patio trasero de un granjero
bajo medio metro de tierra. Afortunadamente no sufrió daños y
sólo fue necesario limpiarla tras la terrible experiencia).
Una foto del Jarrón de Uruk antes del robo muestra la
producción de recompensas, ofrendas y tributos traídos por
hombres desnudos a la Diosa (ver FIGURA 2). (Las Dominatrices
de hoy en día que lean este libro sin duda asentirán con la cabeza
en señal de aprobación ante la idea de hombres desnudos
obligados a trabajar y traer tributo a la Diosa. El lenguaje
contemporáneo de dinero y regalos traídos a las Dominatrices se
llama en realidad 'tributo a la Diosa'). En los registros inferiores
hay plantas y ovejas. En el registro superior aparece la presentación
de ofrendas a la diosa Inanna y la figura de una mujer que
probablemente sea la diosa Inanna.
FIGURA 1 La dama de Warka, c. 3100 a.C. Mármol, 21,2 cm. Museo de Iraq. [Se
cree que representa la cabeza de la diosa Inanna].
36 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

alta En-Sacerdotisa. Las dos formas en forma de pilar que se


enroscan en la parte superior, detrás de la sacerdotisa, son símbolos
que representaban a la diosa Inanna. ¿Qué era este símbolo? ¿Esta
forma vertical en forma de pilar con el extremo enroscado?
Representaba el poste de caña del almacén y del redil. (En algunas
zonas rurales, los postes de las puertas siguen estando hechos de
junco tejido). Este símbolo relacionaba el granero con el tracto
vaginal, que debía llenarse de semillas, de leche, de abundancia.
Había una correlación entre el llenado del granero y la provisión de
m'Lady - para traer
lo que "Ella" desea.

los dioses del mundo: la leche, el grano y la


abundancia
Los orígenes de Inanna son como diosa del almacén del redil y
como estrella radiante de Venus. El Comedero de Uruk del
Museo Británico representa esta conexión (véase la FIGURA 3A).
La entrada al aprisco está representada en imágenes en el
costado del recipiente, con ovejas entrando y corderos saliendo de
ambos lados. En la parte superior de la cabaña sobresale el antiguo
símbolo de Inanna: los postes de caña con extremos en espiral. La
forma también recuerda la ascensión ascendente de la estrella Venus
y la forma del tracto vaginal femenino. Es una forma que resultaba
familiar por el parto de las ovejas y el conocimiento de las
relaciones sexuales. La semilla que brota de la tierra tiene esta
forma. La vulva femenina y el tracto vaginal, el almacén y el redil,
eran conceptos entrelazados. En el lateral de la vasija se encuentra
el símbolo de la "estrella-rosette" de Inanna. Es una amalgama de
la estrella de Venus y una flor en flor. Está representado en la vista
lateral de la vasija ritual en forma de artesa, junto con las ovejas y el
poste de caña (véase la FIGURA 3B).
FIGURA 2
Jarrón Warka (Uruk),
c. 3200-3000 A.C.
Alabastro tallado con
frisos, 1 m (altura).
Museo de Iraq.
[Hombres desnudos
llevando ofrendas a la
diosa Inanna.]
FIGURA 3A

FIGURA 3B

FIGURA 3A Detalle del abrevadero de Uruk (vasija ritual de la diosa Inanna),


c. 3300-3100 A.C. Piedra caliza. Museo Británico.

FIGURA 3B Detalle de la vista lateral del abrevadero de Uruk con la roseta-estrella, la oveja y el poste de caña espiral de
Inanna.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 39

La sexualidad de Inanna y su "vulva sagrada" se celebran en la


literatura mesopotámica. Los traductores suelen utilizar la palabra
"genitales" para evitar decir (como hace Inanna en los himnos)
"mi sagrada vulva". Hay un conjunto de balbales sumerios, o
"poesía amorosa" erótica, como algunos la llaman, en la que
Inanna pregunta lastimeramente "¿Quién arará mi santa vulva?".
Dumuzi, el dios pastor, responde a su llamada: "Yo, Dumuzi,
araré tu sagrada vulva". Entonces, ara... ¡hombre de mi corazón!",
responde ella. Los arqueólogos y los estudiosos de los textos
debaten si se trataba de una representación literal de la unión
sexual del rey y la gran sacerdotisa en el clímax del festival de
Inanna o si era un acto mitológico imaginario.
El hecho de que fuera o no un acto sexual sagrado "real"
realizado en vivo es irrelevante para el tema subyacente. La
sexualidad vigorosa y sana, la parte activa de la mujer, deseosa,
deseando que su vulva se llene, era una celebración de la libido, la
(re)producción y la abundancia.
Inanna se preparaba ritualmente bañándose, llevando joyas
preciosas y delineándose los ojos con kohl negro, en erótica
anticipación del acontecimiento. Dumuzi trae ofrendas, y a
menudo hay mantequilla y nata y metáforas de la leche batida, el
ritmo y la energía del trabajo. El brote de la lechuga es una
metáfora del crecimiento, la erección, el vigor y la vida. Se planta la
semilla. Se riega el árbol. La manzana madura. Semilla y fluido,
acción y actividad con vigor aseguran el crecimiento y la
abundancia.
Lo que ocurre cuando Inanna desciende al inframundo es que
cesa toda actividad sexual en la Tierra:

el toro no montaría a la vaca, el burro no preñaría a la burra,


el joven no embarazaría a la chica en la calle, el joven ha
dormido en su habitación privada,
la joven ha dormido sola.3
40 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Se veneraba la sagrada vulva de Inanna, su atractivo erótico y


su resplandor.
La celebración de la poderosa sexualidad femenina puede
remontarse a decenas de miles de años, e incluso más, hasta la
Prehistoria. Por ejemplo, en el Paleolítico Superior se han
encontrado pequeñas figuritas que representan a mujeres
voluptuosas y que datan de entre 35.000 y 10.000 años antes de
Cristo. A menudo se las denomina (quizá de forma engañosa)
"estatuillas de Venus". A pesar de proceder de yacimientos dispersos
por Siberia y Europa a lo largo de un dilatado periodo de tiempo,
se agrupan porque comparten una serie de atributos. Son
corpulentas, voluptuosas, con pechos colgantes, caderas anchas y la
vulva incisa para denotar los labios. La cabeza y la cara, sin
embargo, reciben muy poca atención o detalle. Parece que lo
importante es su sexualidad, su abundante forma femenina.
Algunas personas han supuesto que están embarazadas, pero no es
necesariamente el caso. El tipo de cuerpo difiere del énfasis de
nuestra cultura moderna en los cuerpos esbeltos y en forma como
modelo de belleza. En la Edad de Hielo del Paleolítico Superior,
éste bien podría haber sido el tipo de cuerpo de una mujer que
había atraído una buena provisión de alimentos, disfrutaba del
sexo, sobrevivía y prosperaba. El cuerpo de una matriarca: una
figura de sexualidad, fertilidad y abundancia.4
Al no existir un lenguaje escrito tan antiguo, se desconoce su
significado. Sin embargo, hay una imagen de una "Venus"
voluptuosa tallada en una roca caliza que puede proporcionar
alguna pista. Está de pie con un cuerno levantado, probablemente
un símbolo de fertilidad (véase la FIGURA 4). Se trata de la Venus
de Laussel, que debe su nombre a la cueva francesa en la que fue
hallada y que data del año 20.000 a.C. El cuerno que levanta se asemeja a
un cuerno de fuego. El cuerno que levanta se asemeja a una
cornucopia, un "cuerno de la abundancia", como se conoció más
tarde. No sabemos si tenía la misma
FIGURA 4
Venus de Laussel,
c. 20.000 A.C.
Talla en bajorrelieve
de piedra caliza
(abrigo rocoso del
Abri de Laussel,
Dordoña, Francia).
Museo de Aquitania.

FIGURA 5
Mujer sentada
con leonas, VI
milenio a.C.
Encontrado en un
depósito de grano en
Çatalhöyük,
Turquía.
42 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

tipo de significado tan lejano en la prehistoria. El cuerno tiene


forma de media luna y lleva inscritas 13 muescas. Podría tratarse
de un número arbitrario, pero en particular hay 13 ciclos lunares y
menstruales cada año. La luna creciente se utiliza como símbolo,
principalmente por las mujeres, en tribus etnográficas de todo el
mundo.5 Muchas diosas a lo largo de la historia también han
tenido la luna creciente o el cuerno como uno de sus símbolos.6
¿Es nuestra Dama tallada en piedra caliza una diosa primitiva?
¿Una sacerdotisa que realiza un ritual? ¿Una mujer ilustrada de
forma simbólica, relacionada quizá con la fertilidad o la luna?
Muchos miles de años después, en el Neolítico, los
arqueólogos hallaron una figura de Venus, recuperada de un
contenedor de grano (véase la FIGURA 5). Fue hallada en
Çatalhöyük (Turquía), una "protociudad" datada entre los años
7400 y 5700 a. de C. Aunque algunos arqueólogos niegan que la
figura de Çatalhöyük sea una diosa, existen pruebas sustanciales
que sugieren que sí lo es. Desde un punto de vista religioso e
iconográfico, las leonas que la flanquean, el asiento en forma de
trono y la posición de la figura femenina parecen apoyar la tesis de
que se trata de una deidad femenina. El emplazamiento del granero
donde se halló la estatuilla sugiere que se trata de una diosa
relacionada con la sexualidad y la fertilidad.

PODER LEONÍSTICO Y ALUdA ErÓTICA: LA


LANgUAgE CORPORAL DE UN DOMINATROx
Los rasgos dominantes de la Diosa se representaban como "poder
del león", así como aves de rapiña, con garras. La diosa anatolia
Cibeles, por ejemplo, se asociaba con el león, el halcón (como ave
de presa) y la montaña. La conocida historiadora británica
Bethany

FIGURA 6 (OPUESTA) Reina de la Noche


(atribuida como Ishtar-Inanna), c. 1800-1750
a.C.. Placa de arcilla, 49,5 cm x 37 cm. Museo
Británico.
44 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
44 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Hughes describe a la diosa Cibeles retratada en una gran escultura,


que en su día se colocó en un nicho dentro de la montaña, como
"una especie de dominatrix, que vigilaba y gobernaba un vasto
paisaje".7 Estos mismos elementos que caracterizarían a la diosa
Cibeles parecen trasladarse a Inanna. Está representada por el
león feroz, las aves de presa, las montañas y la entrada al "mundo
de las tinieblas".
Uno de los tesoros del Museo Británico es la Reina de la
Noche, un relieve de arcilla cocida que representa a una mujer que
se cree que es Inanna (véase la FIGURA 6). La dama lleva el tocado
de cuernos de la divinidad y sostiene una caña y un carrete en cada
mano, denotando su condición de diosa. Cabalga sobre un par de
leones. Sus pies son los de un ave rapaz y está rodeada por un par
de búhos que cazan de noche. La diosa muestra una "sexualidad
feroz", poderosa y seductora a la vez. Sus pechos destacan en la
placa en relieve, y sus pezones y triángulo púbico se habrían
resaltado por el contraste de color en la pigmentación de la placa
(que se ha perdido con el paso del tiempo.) Las joyas de la diosa
habrían sido de colores que evocan el oro, el lapislázuli y la
cornalina.8
Su adorno era sagrado para sus poderes de seducción erótica.
El nombre de la máscara de maquillaje de ojos kohl de Inanna
(traducido) era "¡Que venga un hombre, que venga un hombre!".
Sus joyas para el pecho se llamaban "¡Ven, hombre, ven!"9.
Embellecerse y adornarse era asumir un poder erótico sagrado.
Para hacernos una idea de cómo eran las joyas de las diosas y
sacerdotisas, podemos ver joyas similares en las famosas tumbas
de la ciudad de Ur (otra ciudad importante, que se encontraba a
poca distancia de Uruk) (véase la FIGURA 7). En la tumba de Nin
Puabi (Dama Puabi), y en las tumbas cercanas, se excavó gran
cantidad de joyas y maquillaje. Muchos de estos hallazgos tienen
también el conocido símbolo de la estrella-rosetón.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 45

FIGURA 7
Reconstrucción
de joyas de
(¿sacerdotisa?),
tumbas "reales"
de Ur, c. 2600
a.C.
Museo Británico.

El maquillaje se guardaba en conchas de bivalvos (se cree que


son símbolos de los genitales femeninos y los labios mayores, que
se hinchan y abren con la excitación). Cuando la diosa Afrodita
llegó a las costas de Chipre en una concha de vieira (según la
mitología), puede que fuera literalmente con conchas de cosméticos
con lo que el culto a la diosa oriental llegara a la isla, transportado
con fenicios y otros marinos.10 Incluso hoy en día, el maquillaje se
denomina "pintura de guerra", sugerente de
el uso de cosméticos con fines eróticos y de poder al estilo
dominatrix.
46 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 8 La ['Diosa Dominadora'] Inanna-Ishtar [sujetando un león con una correa],


c. 2334-2165 A.C. Sello cilíndrico. Instituto Oriental de Chicago.

La postura de la diosa en la placa de la Reina de la Noche es


frontal, en contacto directo con el espectador, al estilo "dominatrix".
De hecho, esto no es más evidente que en un sello cilíndrico
acadio de la diosa como Ishtar (véase la FIGURA 8). Los sellos
cilíndricos mesopotámicos se fabricaban tradicionalmente con
piedra dura y preciosa en la que se inscribían imágenes, y se
utilizaban para imprimir la imagen haciéndola rodar por la
superficie de arcilla húmeda o cera caliente. También se usaban
como objetos de valor. En este sello cilíndrico de Ishtar del Penn
Museum, la diosa aparece vestida con un traje sagrado y armada
como guerrera. Una hendidura en su vestido deja al descubierto su
pierna, y su pie se eleva para descansar sobre un león. Y lo que es
mejor... ¡sujeta al león con una correa!
Su lenguaje corporal y su postura son muy parecidos a los de la
Dominatrix de hoy en día: un rápido vistazo a cualquier revista o
página web de Dominatrix contemporánea mostrará numerosas
fotografías de Dominatrices exactamente en esta postura.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 47

La poderosa pose de Dominatrix es la antítesis de las pinturas


de "Venus reclinada" de la tradición occidental. No está tumbada
pasivamente para el acceso sexual masculino. Está de frente, de pie,
enfrentada y mirando directamente al exterior con un lenguaje
corporal dominante, y es "dueña" de su sexualidad.
Esta imagen de poderosa sexualidad encuentra su
contrapartida literaria en la "literatura dominatrix". Escritos como
himnos a la diosa Inanna, los textos están relacionados con una
mujer llamada Enheduanna. Describen los poderes de dominación
de la diosa, un misterioso instrumento llamado keppû, utilizado en
sus "juegos" sagrados, y rituales de dominación que implican la
transformación de género y el dolor.

ENhEDUANNA Y LA LITErATUrA DOMINATrIxA


Enheduanna vivió en torno a los años 2285-2250 a.C. Es una de las
primeras mujeres de las que tenemos constancia histórica y la hija
del rey Sargón. Desempeñó el poderoso papel de alta En-
Sacerdotisa del dios de la Luna Nanna y consorte femenina Ningal
(que significa "gran Señora/Reina"). Enheduanna también era muy
devota de la diosa Inanna, y habla en primera persona en un himno
a la diosa Inanna. Como prueba adicional de su papel como autora
o editora, los "Himnos del Templo" asociados a su nombre
terminan con la frase: "La compiladora de las tablillas fue
Enheduanna. Rey mío, se ha creado algo que nadie había creado
antes "11.
Nadie en arqueología pone en duda el poderoso papel de
Enheduanna. Ocupó uno de los puestos más altos de la religión y
está vinculada a un corpus de textos religiosos, copiados
repetidamente, mucho después de su muerte. El principal punto
de debate es si ella misma escribió los himnos como autora o si editó
los ya existentes.
48 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 9 Disco de la Gran Sacerdotisa Enheduanna de Ur, c. 2350-2300 a.C.. Disco


de calcita, 25 cm (diámetro). Museo Penn.

de los himnos, reelaborándolos antes de reunirlos en una obra. Su


estilo es tan característico que los expertos en lengua sumeria pueden
reconocer su expresión.
Hay una imagen de Enheduanna, en su papel de gran
Sacerdotisa, en un disco de piedra que los arqueólogos
descubrieron en la ciudad de Ur (ver FIGURA 9). Se encontró en el
templo de la diosa Ningal. La razón por la que sabemos que el disco
es de Enheduanna es porque está convenientemente

FIGURA 10 (OPUESTA) Tablilla cuneiforme de


arcilla del Himno a Ishtar. Neoasirio de la
Biblioteca de Ashurbanipal, 16 cm x 9,4 cm.
Museo Británico.
50 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

inscrito. (En el reverso, Enheduanna figura como dedicataria del


objeto).
Enheduanna es la figura central de la escena, con túnica y
corona de Señora/Sacerdotisa. Supervisa el vertido del líquido de
libación (probablemente) en el altar ritual. El sacerdote que está
detrás de ella sostiene un objeto que se supone que es una batidora
ritual.12
Por supuesto, los himnos no se grababan con pluma sobre
papel, como pensamos hoy en día. Se grababan en placas de arcilla
con un estilete en forma de cuña que presionaba sobre la arcilla
húmeda y dejaba marcas en forma de cuña. Esta escritura se
denomina "cuneiforme".
Para dar una idea de cómo eran estos escritos en cuneiforme
sobre arcilla, existe un Himno a la diosa Inanna completamente
intacto, que tuvo la rara suerte de conservarse en la Biblioteca de
Ashurbanipal en el incendio que destruyó Nínive (véase
FIGURA 10).
Esta tablilla es más reciente que las que nos ocupan (sólo tiene
más de 2.600 años), pero es un buen ejemplo del aspecto original de
las tablillas de arcilla cuneiformes. La mayoría de las tablillas
antiguas están rotas y se han hecho pedazos con el paso del
tiempo; a menudo, los trozos han acabado en museos diferentes -
un trozo en un museo y el otro en otro-, para luego volver a
juntarse con algo de esfuerzo.
Por suerte, suele haber varias versiones de himnos e historias
importantes. Se copiaron muchas veces durante siglos (y a veces
incluso milenios). Por ejemplo, se han encontrado copias de textos
que se cree que fueron escritos por Enheduanna siglos después de
su muerte en ciudades antiguas como Ur y Nippur.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 51

Los antiguos textos de la Diosa 'Dominatrix' incluyen:


* Inanna y Enki (la historia de Inanna manipulando al Dios de
la Sabiduría para que le conceda todos los poderes "mes", de
los que se apodera
y lleva a Uruk)
* Inanna y Ebih (la historia de la diosa Inanna dominando
ferozmente a Ebih, con una danza de dominación)
* Himno a Inanna (la "Dama del Mayor Corazón", demostra-
y sus rituales de dominación que incluyen el travestismo, el
castigo, el dolor y el éxtasis).

El primero de ellos, Inanna y Enki, es quizás el menos relevante


para la historia, pero será discutido brevemente, ya que ofrece
cierta diversión y demostración de la Diosa Dominadora que
busca todos los poderes para sí misma.
En la antigua Mesopotamia, los "mes" (pronunciado mays)
eran los "poderes de la civilización", que representaban
conocimientos y oficios especiales asociados a la ciudad.
A la Diosa Inanna se le había asignado el poder sobre la
sexualidad en la asignación de poderes entre los dioses, pero
naturalmente ella quería todos los poderes (como cualquier buena
Dominatrix). Entonces, ¿cómo hace la Diosa Dominatrix para
obtener todos los poderes "mes"? Primero, Inanna alaba su vulva
sagrada. El texto antiguo dice literalmente: 'su vulva era notable...
se alababa a sí misma, llena de deleite ante su vulva'.13
A continuación, va a ver a papá, el dios Enki, y bebe cerveza con
él. Le convence para que le dé todos los poderes "mes",
generosamente, por turnos, mientras brindan en sus vasijas.14 Por
lo que puede deducirse de la traducción, estos importantes "mes",
los poderes fundacionales de la civilización, eran:
52 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El poder del heroísmo, el poder del saqueo bélico, el poder de hacer


lamentaciones rituales, el poder de dirigir celebraciones, el poder de la
agricultura y del redil, el poder del temor, el poder de la reverencia, el
poder del respeto, los objetos rituales de poder - el cetro, el bastón y el
báculo, las sacerdotisas y sacerdotes especialistas, el poder de ascender (a
los cielos) y descender, el oficio del peinado ritual, el arte del sexo, el arte
de besar el falo, el arte de la prostitución, el poder de la taberna sagrada,
el poder de hacer fuego, el oficio de la música, el oficio de anciano, el
oficio de escriba (escribir), el oficio de trabajar el cobre, el oficio de
trabajar el cuero, el oficio de construir y tejer cestos de juncos, el poder y
el conocimiento de dar sabios consejos, el poder de juzgar y el poder de
tomar decisiones.15

Cuando su padre recobra el sentido y se da cuenta de que le ha


dado todos los poderes, envía a su ministro a buscar a su hija para
que se los devuelva. Inanna, sin embargo, se mantiene firme en su
postura. Le dice al ministro que su padre le dio el "mes", le hace
cumplir su palabra y continúa hacia su ciudad de Uruk.16
Por estos medios, Inanna y su ciudad de Uruk llegaron a
detentar todos los poderes (en la mitología). Había una base
histórica de verdad en el mito. Estos poderes 'mes' eran las
fortalezas y atributos que hicieron de Uruk la poderosa ciudad que
era.
Los historiadores masculinos tienden a hacer hincapié en el
"excedente de grano", el imperio y la tecnología del metal en su
historia de la civilización, y a menudo olvidan la importancia de
los rituales, las celebraciones, la peluquería, las tabernas
"sagradas", el poder del sexo y... aparentemente, el arte de la
mamada. El sexo se hizo importante para la ciudad antigua, con
una Diosa Dominatrix que simbólicamente ostentaba su poder.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 53

el dios de la guerra y su danza de dominación


(¿con un whip?)
La dominación de Inanna se dirigía sobre varios hombres, dioses
y estados extranjeros. Uno de los antiguos textos sagrados sobre
los poderes de dominación de Inanna sobre las montañas de Ebih,
en el que se la representa como una dominadora guerrera y se la
compara con un león rugiente, dice así:

Diosa de los temibles poderes divinos, vestida de terror, cabalgando sobre


los grandes poderes divinos. En el cielo y en la tierra ruges como un león.
. . Como un enorme toro salvaje triunfas sobre las tierras hostiles. Como
un león temible apaciguas a los insumisos e insumisos con tu hiel.17

Inanna, como "diosa dominadora", obliga a hombres y


montañas a inclinarse ante ella en señal de sumisión:

Puesto que no actuaron apropiadamente por iniciativa propia, puesto que


no pusieron sus narices en el suelo por mí, puesto que no frotaron sus
labios en el polvo por mí, llenaré mi mano con la alta cordillera y dejaré
que aprenda a temerme. . . La asaltaré y comenzaré el "juego" de la santa
Inanna.18

Inanna tenía un "juego" o "danza" muy especial, que se


consideraba sagrado y santo. Se trataba de un misterioso
instrumento llamado keppû. Se menciona en varios textos, y
durante mucho tiempo este keppû ha desconcertado a los
estudiosos.
Se pensó erróneamente que era una cuerda de saltar,
basándose en una escena glíptica que muestra a Inanna
sosteniendo lo que se creía que era una cuerda de saltar, arqueada
sobre su cabeza. Sin embargo, esto resultó ser completamente
erróneo. La supuesta cuerda de saltar era en realidad una
representación de Inanna de joven levantándose la falda. La
supuesta
54 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

cuerda de saltar era en realidad el dobladillo de su vestido


levantado.19 (Ah sí, Inanna era ciertamente una "provocadora de
penes").
Así que los arqueólogos volvieron a la mesa de dibujo, y el
misterio se complicó. Pirjo Lapinkivi, uno de los mejores
traductores de textos antiguos, observó que el keppû se utilizaba con
el verbo šutakpû, que significa "doblar, hacer girar". Se utilizaba
en el patio de la diosa, o espacio de juego.20 Stephane Dalley
propuso que podría tratarse de un "látigo".21 Sin embargo, parece
que el objeto también se blandía como arma.22
Cualquier Dominatrix que lea este libro, va a estar más o
menos chillando "¡es un látigo!", o un implemento de dominación
similar. Una Dominatrix moderna maneja látigos, floggers, cat o'
nine tails, bastones, tawses, paletas, todos ellos denominados sus
"juguetes". Sus actividades de dominación se describen como "su
juego", y su mazmorra se conoce como su "espacio de juego".
¿El misterioso instrumento keppû de la diosa Inanna es un
látigo (o similar)?
Observando las imágenes antiguas excavadas hasta ahora, se ve a Inanna
sosteniendo:
* armas de combate (con arcos y flechas a la espalda, como en
el sello cilíndrico de Ishtar)
* objetos de poder (como la caña y el carrete sagrados, como en Queen of
la Noche)
* ramas de dátiles o juncos que se suponía simbolizaban la
fertilidad (como en el Sello de Adda del Museo Británico).
No se conoce ninguna imagen que la muestre distintivamente
con un látigo. Como muchos han señalado, sostiene la rama de
dátil en forma de látigo, lo que abre la posibilidad de que pudiera
haber sido utilizada de esta manera.
FIGURA 11
Figura sobre un león
(¿Ishtar- Inanna?) en la
placa del león de Ishtar, c.
2000-1595 a.C. Fragmento de
placa de arcilla, 7 cm. Museo
Penn.

FIGURA 12 (ABAJO)
Procesión de celebración (en
honor de Ishtar, con figura
con látigo), 730-727 a.C.
Relieve mural neoasirio de
yeso del reinado de Tiglat
Pileser III. Museo Británico.
56 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Existe, sin embargo, un interesante fragmento de placa de


arcilla en el Museo Penn, que representa la figura de un león, que
es la criatura típica de Ishtar (véase la FIGURA 11). Es sólo la parte
inferior de una placa y, según el catálogo de Penn, estaba
destinada a "encajar" con otro fragmento de la parte superior de
una deidad masculina con un látigo. Sin embargo, los dos no
parecían encajar correctamente, y las investigaciones posteriores
demostraron que, efectivamente, no encajaban, y que la
"coincidencia" era un error. 23
La placa podría ser la diosa Inanna-Ishtar sobre su león, y a
"su" izquierda hay una disposición en forma de cruz estrellada,
líneas de unión y un círculo. ¿El misterioso keppû? ¿Un látigo de
varias hebras, como un gato de nueve colas girando? ¿O se trata
de un pictograma con el símbolo de la estrella y otras líneas?
Otra posible pieza del rompecabezas es un relieve mural
neoasirio muy posterior que representa a una figura sosteniendo lo
que se cree que es un látigo. Vestida con una piel de león, la figura
participa en una procesión ante la diosa Ishtar (véase la FIGURA
12)24.
¿Por qué se asocia un látigo con la Diosa? En la religión
antigua, el látigo, el azotador y el mayal se utilizaban como
símbolos de dominación ritual y sexual, relacionados con la
fertilidad y el poder de los guerreros. En el antiguo Egipto, por
ejemplo, el dios Min sujeta un azotador con un gran pene erecto.25
El azotador se utilizaba como instrumento de dominación,
derivado del azotador agrícola o látigo animal, que mostraba el
poder de la libido y la fertilidad, y el dominio sobre los animales y
la agricultura.
En el templo de Copto se encontraron esculturas colosales del
dios Min (véase la FIGURA 13). Algunas de ellas constituyen la
pieza central de la colección del Museo Ashmolean de Oxford.
En su día tenían enormes penes erectos, que el dios Min sujetaba
por la base, hecha de mármol que encajaba en un zócalo. La otra
mano del dios sujetaba
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 57

FIGURA 13
Escultura del dios Min de Copto
(falta el falo).

un instrumento -se cree que es un mayal- a su lado. El poderoso


simbolismo sexual de las esculturas Min se oculta al público. Los
penes gigantes yacen en algún lugar del almacén del sótano del
Ashmolean, dejando la mano de cada escultura del Dios Min
agarrada a un agujero de enchufe vacío.
El nombre coloquial "no oficial" de las esculturas de Min en el
Ashmolean es "los gigantes pajeros sin polla". Las miniaturas de
las esculturas se venden en la tienda de regalos del Museo
Ashmolean (a menudo se compran como regalo para una "broma"
entre estudiantes de la Universidad de Oxford). De este modo, los
pequeños "pajilleros sin polla" se han colado en casas, oficinas y
estanterías de antiguos alumnos de Oxford de todo el mundo.
(Sin ánimo de menospreciar a la Universidad de Oxford ni a sus
graduados).
Es probable que el misterio de la danza de dominación de la
diosa Inanna y su implemento keppû se resuelva a su debido
tiempo. Los numerosos fragmentos de artefactos que se
encuentran en almacenes de museos y colecciones privadas de
todo el mundo podrían revelar el
58 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

solución, y aún queda mucho por revelar bajo las arenas de


Mesopotamia en futuras excavaciones arqueológicas.
Mientras tanto, sin embargo, no cabe duda de que las
Dominatrices harán sus apuestas.

rITUALES DOMINATrIxOS DE GÉNERO


TrANsFOrmACIón, ECsTAsIA y DOLOR
Los rituales sagrados de Inanna se asemejan a las prácticas de las
Dominatrices actuales, que incluyen ceremonias de
transformación de género, castigo, dolor, éxtasis, lamentaciones y
provocación de estados alterados de conciencia.
El Himno a Inanna (o "Señora del corazón más grande") reza así:

Convertir a un hombre en mujer y a una mujer en hombre son tuyos,


Inanna [tus poderes].26

La diosa tenía el poder de transformar a los hombres en


mujeres y a las mujeres en hombres. Estas prácticas no eran sólo
míticas, sino reales.
La transformación de género es muy interesante, ya que las
Dominatrices modernas también se involucran en prácticas de
"feminización forzada", "entrenamiento de mariquitas" y otros
juegos de "género". A menudo se llevan a cabo en un espacio de
"tocador" femenino, equipado con pelucas, maquillaje, ropa
femenina con volantes y "guarra", joyas, medias, tacones altos y
botas. La Dominatrix ofrece un "lugar seguro" con una mente y
un corazón abiertos que da la bienvenida a todas las identidades
de género. Las personas con identidades transgénero (que se
identifican con el sexo opuesto o desean serlo), así como las
personas con deseos travestis (que desean llevar el atuendo del sexo
opuesto), a menudo acuden a la Dominatrix por sus habilidades
para
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 59

este ámbito. La dominatrix también lleva a cabo la "feminización


forzada" y el travestismo, o mezcla de elementos masculinos y
femeninos - androginia, para enfatizar que su reino está fuera de
las restricciones sociales y de los roles y presiones normativos de
género.
Betty De Shong Meador describe los rituales de
transformación de género de Inanna como un homenaje al
aspecto ceremonial de las personas con una identificación de
género ambigua. Señala que la joven del ritual de cambio de sexo
se describe con la palabra sumeria "la-la", que significa "el vigor
de un joven en la flor de la vida".27 El personal del templo de
Inanna incluía a personas andróginas y sexualmente ambivalentes,
eunucos, hermafroditas, travestis28 y sumisos sexuales, que tenían un
lugar en el corazón de la diosa. Al parecer, a algunos se les
asignaban funciones como cantantes, animadores y tamborileros al
servicio de las festividades de la Diosa.
El pasaje del Himno a Inanna que documenta los rituales de la
Dominatrix está parcialmente roto. Por lo que podemos deducir,
la diosa abre "la puerta de la sabiduría y da a conocer su interior".
Se lee:

Los que no respetan su red suspendida no escapan. . . cuando ella


suspende las mallas de su red. Al hombre que ha llamado por su nombre
no lo tiene en estima. Habiéndose acercado a la mujer, rompe el arma y le
da una lanza. El hombre gˆiċgisagˆ keċ, el nisub y la mujer gˆiċgi oficiantes
rituales, después de haber. . . castigo, gimiendo. . . Los extáticos, los
pilipili transformados, los kurgˆara y los sagˆursagˆ . . . El lamento y el
canto . . . Se agotan con el llanto y la pena, se . . . lamentan29.

¿Es la "red suspendida" una red de suspensión de la esclavitud


(como la que utilizan las Dominatrices modernas), o la línea es
meramente metafórica?
60 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Los traductores no están seguros. En otras partes del himno


abundan las imágenes de dominación. La diosa Inanna es descrita
como "la dueña, un águila que no deja escapar a nadie", y como "un
enorme grillete que sujeta a los dioses".30
Domina a los dioses del himno, que se ven obligados a
inclinarse y abajarse ante Inanna, besando la tierra y postrándose
ante la diosa.31
El ritual descrito está impregnado de dolor y éxtasis,
provocando la iniciación y viajes de estados alterados de conciencia;
juegos de palabras, gemidos, éxtasis, lamentos y canciones, los
participantes se agotan en llanto y dolor.32 Estos son estados que
las Dominatrices modernas utilizan para provocar la liberación
catártica, junto con un lavado de endorfinas, emociones y
"subespacio" experimentado como ir en un viaje o como volar.
La En-Sacerdotisa Enheduanna, habla dramáticamente en
primera persona dentro del himno, proclamando devoción: "Mi
señora... misericordia...".
. . . compasión . . . Soy tuya'.
Suplica clemencia a la diosa y señala que "mi cuerpo ha sufrido
tu gran castigo".33
Durante mucho tiempo se ha supuesto que el "castigo" de
Enheduanna estaba relacionado con la opresión o la expulsión del
templo, pero ¿se refiere Enheduanna realmente al castigo físico y
al dolor? Desgraciadamente, falta una parte importante del texto
por roturas en el fragmento de arcilla. (La palabra 'misericordia' es
la súplica más común utilizada por los esclavos en las sesiones de
las Dominatrices, y se suele utilizar como la 'palabra segura'
negociada).
El sacrificio de sangre es un rito de devoción religiosa y
trascendencia del cuerpo que se practica interculturalmente en
todo el mundo. En la tradición cristiana, la flagelación y la
"mortificación del cuerpo"...
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 61

eran practicadas en monasterios por monjes y santos.


Las dominatrices modernas utilizan azotes, látigos, agujas y
juegos sangrientos para empujar a sus víctimas a aceptar el dolor
con devoción y sumisión. Las personas que realizan estas prácticas
experimentan un "subidón de endorfinas", en el que se sienten
como si volaran o flotaran, abandonando su cuerpo y
emprendiendo un viaje. También suelen tener una sensación de
liberación catártica, éxtasis y procesamiento de sabiduría, revelación
y comprensión, que puede durar varios días después de la
experiencia.
Es posible que en Mesopotamia se utilizaran alfileres rituales
para perforar la carne. En las "Tumbas de Ur" se encontraron
numerosos alfileres de plata y oro y, curiosamente, unos dos
milenios más tarde se encontraron alfileres similares en el yacimiento
de la diosa Artemisa Orthia en Esparta. Es interesante que en este
mismo lugar se celebraran ceremonias en las que se azotaba a los
jóvenes en honor a una diosa. . .

el "WhIPsTrEss" y el MysTErIEs
En honor de la diosa Artemsis Orthia de Esparta, se practicaba
un ritual llamado diamastigosis (flagelación) a los hombres
jóvenes (efebos). La ceremonia era una iniciación, descrita aquí
por el historiador Pausanias:

Junto a ellos está la sacerdotisa, sosteniendo la imagen de madera. Ahora


es pequeña y ligera, pero si alguna vez los azotadores ahorran los
latigazos por la belleza o el alto rango de un muchacho, entonces la
sacerdotisa se da cuenta de que la imagen se vuelve tan pesada que apenas
puede llevarla. Echa la culpa a los azotadores y dice que es culpa de ellos
que ella sea tan pesada. Así, desde los sacrificios en el país táurico, la
imagen mantiene su afición por la sangre humana.34
62 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El nombre de la diosa, "Orthia", significaba "erguida". Puede que


se tratara de la estatua de la diosa, que estaba erguida, o puede que
también tuviera una connotación de la excitación sexual que
invocaba. En el yacimiento se excavaron esculturas itifálicas con
penes erectos, junto a los broches de los vestidos, las máscaras y las
figurillas femeninas.35
Entre los hallazgos había pequeños votivos de plomo que
representaban a una diosa guerrera con flechas visibles en la espalda
y un tocado (véase la FIGURA 14). Otra figura representa a una
mujer con alas que sostiene un instrumento que probablemente era
un látigo, basándose en los relatos históricos de la ceremonia de
flagelación (véase la FIGURA 15).
En Pompeya hay una figura de una "Azotadora" con alas, que
se encuentra en la Villa de los Misterios. Los frescos de la sala de
esta villa privada parecen representar la iniciación de una joven en
los Misterios. Durante los rituales, recibe el dolor de la mano de
una Azotadora, que lleva unas magníficas alas y está preparada para
asestar un fuerte golpe (véase la FIGURA 16).
Estas imágenes del mundo griego y romano muestran que el
papel de la "Azotadora" no era el de una violencia sin sentido,
sino que se llevaba a cabo dentro de ceremonias sagradas de
iniciación. La sacerdotisa era la iniciadora, la conductora de un
ceremonial simbólico de muerte y renacimiento.
Es posible que la diosa arcaica Afrodita también estuviera
armada. En la Villa de Teseo se recuperó una escultura de mármol
que la representa blandiendo un arma hoy desaparecida con el
brazo levantado. Pausanias también hace referencia a una
"Afrodita armada" de madera (hoplismene¯) en varios lugares de
Citera, Acrocorinto y Esparta.36 Quizá sea revelador que Afrodita
fuera descrita como una "diosa horrible y encantadora" en la
Teogonía de Hesíodo, y que otro de sus nombres fuera
"Philommedes", que puede interpretarse como sexy "amante de la
sonrisa" o "amante de los testículos".37 Sus orígenes apuntan al
juego de palabras y la asociación
FIGURA 14

FIGURA 1 5

FIGURAS 14 Y 15
Figurillas de
sacerdotisa/diosa de
Artemisa Orthia en
Esparta, finales del siglo
VI-V a.C. Figurillas
votivas de plomo.
3,5 cm de altura. Museo
Fitzwilliam de
Cambridge.
FIGURA 16 Sacerdotisa alada blandiendo un látigo, anterior a 79 d.C. Fresco mural. Villa de los Misterios, Pompeya, Italia.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 65

con semen: nació completamente formada del "afros" de espuma


marina de los genitales castrados de Urano.
La poetisa Safo escribió en devoción a la diosa Afrodita desde
la isla de Lesbos, hablando de los "duros dolores" de Afrodita:

Afrodita inmortal de la mente de lentejuelas (trono de


incrustaciones), hija de Zeus, que retuerces señuelos, te lo
ruego.
no rompas con duros dolores,
oh señora, mi corazón.38

LA VIDENCIA DE LAS FIgURAS DE PrIEsTEsA


y DE DIsEñOs
Sería imposible tratar el tema de la Diosa Dominatrix sin abordar
la influencia de las religiones patriarcales del Cristianismo y el
Islam, en las que la sexualidad femenina se convertía en pasiva,
controlada y al servicio del marido. Mientras que durante miles de
años varias Diosas habían tenido poder sobre la sexualidad, la
fertilidad y la seducción, lo que se celebraba en el mundo antiguo,
estas Diosas pronto fueron aniquiladas por el monoteísmo
dominado por los hombres. Con ellas, también fueron derrocadas
las poderosas Sacerdotisas.
En la Biblia, la sacerdotisa Jezabel es arrojada simbólicamente
por la ventana, una "mujer pintada" (2 Reyes 9-30). Los arqueólogos
han recuperado cabezas femeninas esculpidas en un desagüe de
Jordania, y la "mujer en la ventana" aparece como motivo en los
marfiles de Nimrud y en una maqueta del edificio de un templo en
Chipre. Parece ser que la religión de las diosas asociada a Astarté y
otras diosas sexuales del Mediterráneo oriental contaba con
cabezas femeninas montadas arquitectónicamente.
66 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

en los marcos de las ventanas del templo. Estas cabezas femeninas


esculpidas habrían sido decoradas con preciosas incrustaciones de
lapislázuli y otras piedras, embellecidas y sacralizadas.
Estas Diosas de la sexualidad y sus Sacerdotisas desempeñaban
un papel importante en la celebración del atractivo, la vitalidad, la
fertilidad y la unión, que eran una parte importante para garantizar
que las ciudades y las civilizaciones fueran vitales, productivas,
florecieran, produjeran y se reprodujeran. Sin embargo, las diosas
y sacerdotisas fueron derrocadas por el establecimiento del control
masculino patriarcal religiosamente institucionalizado sobre la
propiedad privada y los linajes masculinos. Mediante el control de
la sexualidad femenina, por el que las mujeres eran una propiedad
que pasaba de padres a maridos, se aseguraba la descendencia
legítima junto con la garantía de paternidad. Se imponía la castidad
antes del matrimonio. Se castigaba el adulterio y los actos sexuales
fuera del matrimonio.
Las mujeres llegaron a ser excluidas de los altos cargos del
clero. Las "sacerdotisas" han sido desconocidas en Occidente y
Oriente Próximo durante siglos, siendo la Iglesia Anglicana una
de las pocas que permite el sacerdocio femenino, y no sin polémica.
Mientras tanto, los sacerdotes y clérigos dan consejos religiosos y
dictan sentencias sobre temas que van desde la anticoncepción y el
aborto hasta las limitaciones de la vestimenta femenina y la
obediencia y sumisión a los maridos en el matrimonio.
La dominatrix supone una amenaza para el orden social -para
la dominación masculina- y, al mismo tiempo, excita. Cuando
empecé a escribir este libro, me interesaba el efecto tabú de la
palabra. De hecho, era una especie de tabú de un tabú (de un
tabú), superpuesto y sobre sí mismo.
Por un lado, la mujer se presenta como ramera, sexual,
prostituta y franca. (También en las ilustraciones se la ve de
frente, de frente y enfrentada).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 67

sumisa a la autoridad masculina. Es exigente y quiere tener el


control sobre sí misma. Utilizando sus poderes de belleza,
seducción y sabiduría, es la más aterradora para los hombres,
porque temen perder el control y ser derribados por su deseo de
una mujer.
La poderosa historia de la Diosa Dominatrix y las Sacerdotisas
revela la importancia que tuvo en la aparición de ciudades
asociadas a la civilización y la literatura primitivas. Las altas
Sacerdotisas abrazaban la sabiduría y el poder místicos de la
sexualidad, poseían conocimientos sobre los estados alterados de
conciencia, el juego de géneros y la sumisión, y en sus prácticas se
aceptaban formas variadas de identidad sexual. Las personas del
"tercer género", que de otro modo eran rechazadas por la
sociedad, recibían un papel y una identidad. Sus festivales eran
coloridos y festivos, y atraían a la ciudad a gentes venidas de lejos,
que traían consigo sus conocimientos artesanales y los recursos
materiales instalados en las proximidades del templo. Las
prácticas de la diosa dominadora vigorizaban al pueblo desde lo
más profundo de sus entrañas. Fomentaba la unión y la fertilidad,
la producción y la abundancia, los poderes de la Guerrera, en
beneficio de la ciudad y de una civilización floreciente.

Notas finales
1 Hafford, B. 'Proyecto de digitalización de Ur: Item of the Month June 2012'
(Disco de Enheduanna) Penn Museum (2012). Disponible en línea en
(http://www. penn.museum/blog/museum/ur-digitization-project-item-of-
the-month- june-2012/); véase también: De Shong Meador, B. Inanna:
Lady of Largest Heart, Poems of the Sumerian High Priestess Enheduanna
(University of Texas Press, 2010); y De Shong Meador, B. Princess, Priestess,
Poet: The Temple Hymns of Enheduanna (University of Texas Press, 2010).
2 Véanse: Iraq Museum Database (http://oi.uchicago.edu/OI/IRAQ/dbfiles/
Iraqdatabasehome.htm) y Emergency Red List of Iraqi Antiquities at Risk
(http://icom.museum/resources/red-lists-database/red-list/iraq/).
3 Lapinkivi, Pirjo, "El descenso de Inanna a los infiernos", The Neo-Assyrian
68 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Myth of Istar's Descent and Resurrection (Helsinki: Neo-Assyrian Text Corpus


Project, 2010), p. 31; Black, J., Cunningham, G., Robson, E. y Zolyomio,
G. "El descenso de Inanna a los infiernos", La literatura de la antigua Sumeria
(Oxford: Oxford University Press, 2006).
4 El término "matriarca" no debe interpretarse como una creencia en el
matriarcado antiguo. Aún no está muy clara la estructura de las sociedades
del Paleolítico Superior, ni si eran matrilineales o no.
5 Por poner sólo un ejemplo, la tribu Ede de Vietnam utiliza la luna creciente,
los pechos y la estrella como símbolos en su cultura matrilineal. Los
símbolos de la luna creciente y los pechos están, por ejemplo, tallados en una
escalera de acceso a la casa de una poderosa familia matrilineal en una
exposición al aire libre en el Museo Etnológico de Vietnam en Hanoi. La
cultura Ede es matrilineal, y los hijos adoptan el apellido de la familia
materna. La mujer inicia el matrimonio decidiendo con quién quiere casarse,
y su marido pasa a vivir con la familia de la mujer.
6 La diosa Astarté está representada con la media luna o "doble cuerno".
Muchas otras diosas que tienen el símbolo de la media luna son diosas de la
luna: Artemisa, Luna, Diana, etc. La diosa mesopotámica Inanna-Ishtar está
asociada a la forma de luna creciente -la "barca del cielo"- vinculada a su
sexo. Las diosas indias Durga y Kali tienen la media luna como uno de sus
símbolos.
7 Hughes, Bethany, When God Was A Girl (Londres: BBC, 2012), DVD.
8 El Museo Británico ha realizado una reconstrucción digital de la placa con
pintura, mostrando un fondo oscuro, y la piel de la diosa pintada y las joyas
destacadas. Sin embargo, resulta interesante que incluso esta reconstrucción
desvirtúa su poder erótico y su presencia, en la que sus pezones y su triángulo
púbico se resaltaban en contraste con la pintura. Su vulva era sagrada y
aparecía repetidamente en la literatura antigua. Se habría pintado en un
color oscuro para resaltarla, como aún puede verse en el vaso de Ishtar del
Museo del Louvre.
9 El descenso de Inanna a los infiernos', Black, J., Cunningham, G., Robson,
E. y Zolyomi, G. (2010).
10 La llegada de Afrodita no fue una mera importación de una nueva religión,
sino una unión entre el culto a la diosa preexistente en la isla y los sistemas
de creencias, ideas, artefactos y costumbres orientales. Al igual que Inanna-
Ishtar y la diosa fenicia Astarté, Afrodita también se asociaría con la estrella
de Venus, la sexualidad, la joyería y el arte del adorno y el encanto.
11 Los "Himnos del Templo de Enheduanna" pueden consultarse traducidos
en el Electronic Text Corpus of Sumerian Literature, de la Facultad de
Estudios Orientales de la Universidad de Oxford
(http://etcsl.orinst.ox.ac.uk/cgi-bin/etcsl. cgi?text=t.4.80.1#): El compilador
de las tablillas fue Enheduanna. Mi rey,
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 69

se ha creado algo que nadie había creado antes". (Líneas 543-44).


12 Es posible que haya que revisar la atribución del objeto a un "batidor de
moscas". Los batidores de moscas se utilizan ceremonialmente en culturas
de todo el mundo, y son identificables en el relieve "Garden Party" del Museo
Británico, procedente de la escena del Palacio Norte de Ashurbanipal (ref. nº
ME 124920). A partir de la época victoriana se han identificado muchos
artículos como "látigos de mosca", que pueden haber sido otros objetos. Por
ejemplo, se tiene constancia del uso de látigos en rituales de Ishtar (véase la
figura 12: relieve de panel mural de yeso del reinado de Tiglat-pileser III,
que muestra una figura con capa de león con un utensilio -aparentemente un
látigo- en una procesión de celebración) (British Museum, ref. nº 136773).
13 La traducción de Oxford utiliza el término "genitales" en lugar de "vulva".
Véase "Inana y Enki" en línea en Electronic Text Corpus of Sumerian
Literature, Facultad de Estudios Orientales, Universidad de Oxford
(http://etcsl.orinst.ox.ac.uk/cgi-bin/ etcsl.cgi?text=t.1.3.1#).
14 Inanna y el Dios de la Sabiduría', Inanna: Queen of Heaven and Earth: Her
Stories and Hymns from Sumer (Nueva York: Harper and Row, 1983), pp. 16-
19. Véase también: "Inana y Enki", ETCSL.
15 Adaptación propia a partir de las traducciones de Wolkstein, D. y Noah
Kramer, S. 'Inanna and the God of Wisdom', e 'Inana and Enki', ETCSL.
16 Ibid.
17 Énfasis mío. Inana and Ebih', ETCSL, Facultad de Estudios Orientales,
Universidad de Oxford (http://etcsl.orinst.ox.ac.uk/cgi-bin/etcsl.cgi? tex-
t=t.1.3.2#). También disponible en traducción en De Shong Meador, B.
Inanna: Lady of Largest Heart, Poems of the Sumerian High Priestess Enheduanna
(Texas: University of Texas Press, 2000), pp. 89-102.
18 Inana y Ebih", ETCSL, líneas 33-40.
19 Dalley, S. (2000) Myths from Mesopotamia: Creation, the Flood, Gilgamesh and
Others (Oxford: Oxford University Press, 2000), p. 130 n. 80; Lapinkivi, P.
The Neo-Assyrian Myth of Iċtar's Descent and Resurrection The Neo-Assyrian Text
Corpus Project, pp. 49-54. La antigua traducción era que el Juego de
Inanna competía con cuerdas de saltar, pero como argumentan Dalley (y
Laprinkivi) esto se basaba en una interpretación errónea de una escena
glíptica, y ahora se piensa que el keppû, que se ha traducido como cuerda de
saltar, es en realidad una fusta o látigo.
20 Lapinkivi, P. El mito neoasirio del descenso y la resurrección de Ištar,
p. 47-48.
21 Dalley citado en las notas a pie de página de Lapinkivi, op. cit.
22 En "Las hazañas de Ninutra", el personaje llamado Lugale-e dice: "No
levantes el brazo para golpear las armas, para la fiesta de los jóvenes, para...".
70 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

La danza de Inanna (eċemen inanna-ke)". Véanse las líneas 135-37, citadas en Lapinkivi, P.
The Neo-Assyrian Myth of Iċtar's Descent and Resurrection, p. 50.
23 Los objetos en cuestión son el león de Ishtar (31-43-425, número de campo:
U.16910a) (http://www.penn.museum/collections/object/196231) y la
deidad con látigo (31-43-455, número de campo: U.16487) (http://www.
penn.museum/collections/object/48366).
24 Relieve de panel mural, 730-727 a.C., reinado de Tiglat-pileser III, del
Palacio Central de Nimrud, Museo Británico (n.º de ref. 136773). Véase
Barnett, R. D. y Falkner, M. "The Sculptures of Tiglath-pileser III"
(Londres, 1962), pp. 9-10; y el sitio web del Museo Británico: (http://www.
britishmuseum.org/research/collection_online/collection_object_details.
aspx?objectId=369051&partId=1&searchText=136773&page=1).
25 Kemp, B. J. Antiguo Egipto: Anatomy of a Civilization (Londres: Routledge,
2006). (Véase, en particular, la figura 47, p. 138.) Imágenes formalizadas del
dios Min como dios de la fertilidad, añadiendo a la imagen antropomórfica
ideal del dios, los elementos del pene erecto y el mayal blandido derivados
del Coptus Colossai).
26 Lady of the Largest Heart', o 'A Hymn to Inana (C)', disponible en
Electronic Text Corpus of Sumerian Literature, Faculty of Oriental Studies,
University of Oxford (http://etcsl.orinst.ox.ac.uk/cgi-
bin/etcsl.cgi?text=t.4.07.3#). ('Un himno a Inana [Inana C]', véanse las
líneas 115-31.)
27 De Shong Meador, B. Inanna: Lady of Largest Heart, Poems of the
Sumerian High Priestess Enheduanna (Texas: University of Texas Press,
2000), p. 162; y véase la sección más general sobre "Andrógino", pp. 162-67
(y referencias).
28 Ibid.
29 Lady of the Largest Heart", o "A Hymn to Inana (C)", ETCSL, Facultad
de Estudios Orientales, Universidad de Oxford
(http://etcsl.orinst.ox.ac.uk/cgi-bin/ etcsl.cgi?text=t.4.07.3#). ('Un himno a
Inana [Inana C]', véanse las líneas 80-90.)
30 Señora del corazón más grande" o "Himno a Inana (C)", véase la sección
final: líneas 1-10, 29-38.
31 Ibídem, véanse las líneas 99-114.
32 Ibídem, véanse las líneas 80-90.
33 Ibídem, véanse las líneas 243-53.
34 Pausanias III, 16: 10-11 (http://www.theoi.com/Text/Pausanias3B.html).
35 El historiador Pausanias habla de un festival bianual de flagelaciones rituales
en favor de la fertilidad de las mujeres, que se celebraba en Alea (donde
había santuarios de Artemisa de Éfeso). En honor de Dioniso celebran cada
dos años un festival llamado Sciereia, y en este festival, en obediencia a una
respuesta de Delfos, las mujeres son azotadas, al igual que los muchachos
espartanos son azotados a la imagen...".
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 71

de la diosa Orta". (Pausanias VIII, 23:1, http://www.theoi.com/Text/


Pausanias8B.html)
36 Se refiere a ellos como en el santuario de Afrodita Urania en Citera, un
templo de Afrodita en la cumbre del Acrocorinto, y en un antiguo templo a
Afrodita con un piso superior en Esparta. Véase Pausanias III, 23:1; II, 5:1;
III, 15:10.
37 Hesíodo, Teogonía, 195-200 en particular, y véase Cyrino, M. S. Afrodita
(Londres: Routledge, 2010), pp. 39-40.
38 Carson, A. Si no, invierno: Fragments of Sappho (Virago Press, 2002), p. 3, 357.
CHAP TER II

LA FLAGELANTE FEMENINA
LA GESTIÓN EN LOS SIGLOS XVII-
XIX
--�-

La documentación más antigua de la profesión laica de


Dominatrix se encuentra en libros raros de los siglos XVII al XIX,
que revelan las identidades y la organización de las mujeres que
dirigían establecimientos de flagelación en Inglaterra. Desde las
primeras "azotadoras" de burdeles de flagelación hasta las famosas
cortesanas "disciplinadoras del abedul" y las "institutrices" de la
edad de oro, el oficio se desarrolló con herramientas y equipos
elaborados, y se combinó con habilidades y conocimientos
refinados. Su profesión se creó para satisfacer el deseo fantástico
de dominación erótica por parte de una mujer sexualmente
poderosa, entrenada para ser una fuerte figura disciplinaria. Estas
flagelantes eran expertas empresarias eróticas de su época.
74 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Entre su clientela figuraba la élite de la aristocracia británica,


políticos y, sí, incluso miembros de la realeza.
Era a "Ella" a quien acudían los hombres, para adorar y ser
disciplinados por una mujer superior, para ser atados y castigados, y
sometidos al dolor y la liberación; era con "Ella" con quien podían
compartir sus anhelos y deseos no normativos, en compañía de
alguien con una mente abierta.
Este capítulo examina el deseo masculino que informaba el
oficio, el desarrollo de la ocupación de nicho, y la compleja
configuración y habilidades - informados por los relatos en los
"libros prohibidos" guardados en las bóvedas de la colección de
Libros Raros de la Biblioteca Británica, y de las impresiones
subidas de tono de la época.

EL FANTAJE DE 'A PhyLLIs


La fantasía que informó la profesión es la imagen erótica de la
mujer superior en una posición de poder sexual. En el arte, esta
fantasía de dominación femenina sobre el hombre se plasmó en la
popular imagen renacentista de Aristóteles y Filis. La imagen es
la de una mujer montada a lomos de un hombre, a partir de la
historia del fausto filósofo Aristóteles dominado por Filis, la
amante de Alejandro Magno.
La historia parece surgir de la Edad Media del siglo XIII. Su
narración sigue al antiguo filósofo griego Aristóteles como maestro
de Alejandro (el Grande), quien enseñó a Alejandro que debía
abstenerse de mantener relaciones amorosas con las mujeres, ya
que eran una distracción del serio trabajo de los grandes hombres.
Como consecuencia, Alejandro desprecia a su dama favorita, Filis.
Tuvo su merecido. Moviéndose cerca del gran
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 75

FIGURA 17 Phyllis Dominando a Aristóteles, principios del siglo XV. Jarro de agua
aguamanil. Procedente de Maasland, Colección de Artes Decorativas Europeas, Parque del
Jubileo, Bruselas.

filósofo, sus encantos femeninos fueron demasiado para él.


Aristóteles se encaprichó de Filis y le hizo proposiciones amorosas, a
pesar de que era la amante de Alejandro, su alumno. Filis respondió
con astucia a los deseos sexuales de Aristóteles:

Esto ciertamente no lo haré, a menos que vea una señal de amor, no sea
que me estés poniendo a prueba. Por tanto, ven a mi aposento
arrastrándote de pies y manos, para llevarme como a un caballo. Así sabré
que no me engañas.1

Aristóteles acudió a Phyllis a cuatro patas, como ella le pidió, y


ella lo montó sobre su lomo, como un caballo, convirtiéndolo en
objeto de burla.
76 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El Gran Aristóteles fue rebajado a una posición humilde por una


mujer en su deseo.
Phyllis ejemplificaba el arquetipo de la dominatrix. La imagen
debía servir como parábola, una lección sobre el poder de la
atracción erótica de una mujer y las consecuencias de sucumbir a
ella. Pero el tema también proporcionaba una "excusa" filosófica para
crear o conservar una imagen erótica de dominación femenina, para
el placer erótico privado.
El tema fue muy popular en el Renacimiento. Numerosos
artistas retomaron el tema en pinturas y grabados. Hay objetos
domésticos que reproducen esta escena, como platos de metal y
jarras de agua de aguamanil (véase la FIGURA 17). En algunas
versiones de la escena, Phyllis empuña un látigo u otro instrumento
de dominación y sujeta unas riendas, que están sujetas a una mordaza
que Aristóteles tiene en la boca. Las obras de arte sobre el tema de
Phyllis y Aristóteles dibujan un "escalofrío" erótico en el
intercambio de poder entre los sexos y la subversión de los roles
sociales de género convencionales. La entrepierna de la mujer, el
peso de su sexo, presiona al hombre. Lo controla desde arriba,
convirtiéndolo en un animal/esclavo a su perverso servicio. En su
estado de excitación,
deseo y devoción, está dispuesto a hacer cualquier cosa para complacerla.
Doscientos años más tarde, en Inglaterra, la misma imagen se
repite en grabados al mezzotinto de otro filósofo antiguo, Sócrates,
y su joven y asertiva esposa Xanthippe (véase la FIGURA 18). Esta
sustitución puede deberse a varias razones. Xántipe era una figura
histórica conocida por ser una "mujer difícil", pero Sócrates la
adoraba. En el antiguo Simposio de Jenofonte, Xanthippe es un
tema de conversación. Se dice de ella que es "difícil de tratar".
Sócrates también está de acuerdo con esta descripción de ella con sus
compañeros, pero ensalza los beneficios de una mujer de mente
fuerte, dando este discurso en explicación a los amigos reunidos:
FIGURA 18 Sócrates y Xantippe, c. 1670-1700. Mezzotinta de John Smith.
Centro de Arte Británico de Yale.
78 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Es el ejemplo del jinete que desea convertirse en un experto jinete: "Nada


de animales dóciles y de boca blanda para mí", dice; "el caballo que yo
tenga debe mostrar algo de espíritu" en la creencia, sin duda, de que si
puede manejar un animal así, será bastante fácil tratar con cualquier otro
caballo. Y ése es precisamente mi caso. Deseo tratar con seres humanos,
relacionarme con el hombre en general; de ahí mi elección de esposa. Sé
muy bien que si puedo tolerar su espíritu, podré relacionarme fácilmente
con cualquier otro ser humano.2

El simposio de hombres acepta esta explicación,


comprendiendo que para Sócrates, su mujer Xántipe es como un
caballo de alta silla. (Hoy podríamos usar la analogía de que una
mujer es como un coche de alto mantenimiento). Es fuerte,
apasionada, una virago, y Sócrates prefiere una mujer así, con
cierto "espíritu", una mujer dominante.
El nombre de Xanthippe en griego deriva lingüísticamente de
"caballo" (o caballo amarillo), con connotaciones de buena crianza,
lo que también puede haber hecho más adecuada la sustitución.
Aparece en la obra de William Shakespeare La fierecilla domada,
escrita entre 1590 y 1592. Petruchio compara a la protagonista de
la obra, la difícil y espirituosa Katherina, con "la Xanthippe de
Sócrates, o algo peor".3 Otros nombres utilizados para referirse a
una arpía son "termagant" y "virago", ambos aplicados a mujeres
disciplinadoras de estilo dominatrix en la literatura erótica y los
grabados sobre flagelación.
La figura de la dominatrix cautivó la imaginación de una parte
concreta de la población. Sin duda, los hombres cuyas fantasías
sexuales iban en esa dirección, si no también las mujeres a las que les
gustaba la idea de dominar. También atrajo la atención de aquellos
que se sentían más amenazados por este intercambio de poder,
para quienes la imagen era un índice de sus propias ansiedades
internas y de su sistema de deseos y creencias en ebullición.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 79

La posición de la mujer por encima del hombre chocaba con las


normas sociales (impuestas por la religión patriarcal y una sociedad
clasista), en las que la mujer ocupaba un estatus y una posición
diferentes a los del hombre. En términos generales, las mujeres
debían ser sumisas y obedientes a sus maridos, mientras que los
hombres debían ser dominantes y mandar.
El arquetipo de la Dominatrix derroca las normas y
convenciones sociales, defendiendo una posición femenina de
superioridad y poder. El hombre se vuelve sumiso y obediente. En
este papel encuentra excitación y satisfacción sexual, en la
sumisión a una mujer poderosa y en la seguridad y estructura de la
disciplina y la devoción.
Este es el escenario en el que la profesión de Dominatrix se ha
convertido en un nicho de especialización dentro de las artes
eróticas. Aprovechando el "capital erótico" y la economía de la
oferta y la demanda, la ocupación de Dominatrix comienza con
una conciencia de deseo-demanda. Las mujeres reconocieron la
demanda de este papel y persiguieron su curiosidad e interés por
aprender más sobre un papel para el que se veían bien dotadas;
una forma de atender empresarialmente.
La Dominatrix como profesión es un conocimiento que suele
transmitirse por aprendizaje, con una Dominatrix experimentada
que actúa como maestra y mentora. También puede ser
desarrollado por una mujer que se entera de la demanda a través
de clientes potenciales, hombres que quieren que ella desempeñe
el papel.
Dentro del mercado comercial, el papel de la dominatrix ha
llegado a combinar no sólo el intercambio de poder de la
dominación/sumisión, sino también una amplia gama de
conocimientos sobre diferentes fantasías eróticas y fetiches,
prácticas especializadas con equipos a medida y la capacidad casi
"mística" de intuir las necesidades psicosexuales profundamente
arraigadas de un cliente. En Inglaterra, la forma de dominación
más
80 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Con frecuencia, la toma estaba estrechamente ligada a la figura de


autoridad femenina que impartía la disciplina escolar y la
flagelación, lo que llegó a conocerse como le vice Anglais (el vicio
inglés).

ESCUELAS FLOTANTES Y CULTIVOS


La profesión de Dominatrix parece haberse originado como una
especialización dentro de los burdeles, antes de convertirse en su
propio nicho artesanal. Ya en la década de 1590 se registra la
flagelación en un entorno erótico, como en este crudo epigrama
de John Davies:

Cuando Francus viene a solazarse con su mujer [sic]


Manda a buscar varas y se desnuda completamente:
Porque su lujuria duerme, y no se levantará antes,
Por los azotes de la moza se despierta.4

Como los clientes buscaban la flagelación y otras fantasías en


los burdeles, muchos guardaban algunas varas de abedul y látigos
para satisfacer las inclinaciones y deseos de sus clientes. Algunas
mujeres de los burdeles se hicieron famosas por su aptitud para
dirigir escenarios. Se las valoraba por su "dominio" de la vara o el
látigo, administrados con aire de autoridad, y por su refinada
técnica. Llegaron a crearse "escuelas de flagelación" dedicadas
exclusivamente a la dominación, la disciplina y los juegos de rol. Las
mujeres que adoptaban el papel de dominatrix en la primera época
inglesa se denominaban "Whipstress", "School Mistress" o
"Governess".
Shadwell's Virtuoso (1676) presenta a un hombre descrito
como "producto de la escuela de Westminster", que todavía se
deleita con el abedul. Visita a un "School-Mistriss" [sic] "que
tiene una escuela muy virtuosa para disciplinar a los caballeros de
edad avanzada que tienen esperanzas".5 Otro
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 81

La fuente histórica es Troth's Knavery of Astrology (1680), que


afirma que "en los últimos años, hay una bonita invención llamada
Flogging, inventada a propósito para complacer a los viejos
Fumblers, o a los jóvenes débiles: lo que es, pueden encontrarlo
fácilmente en Betty B 's School, o Moorfields.'6
Aunque se afirmaba que la flagelación era un "nuevo invento",
lo que era nuevo no era el acto en sí, sino la palabra "flagelar".
Uno de los primeros grabados eróticos de Inglaterra es el de
una mujer en un papel dominante de flagelación, y haciendo uso
de este nuevo término, el mezzotinto se titula The Cully Flaug'd
[Flogged] [El Cully flagelado] (véase la FIGURA 19). Se cree que la
obra, que forma parte de la colección del Museo Británico, data
de 1672-1702, y que fue grabada a partir de un cuadro de
Laroon.7 En la puesta en escena, una joven con la falda recogida
hacia atrás empuña una vara de abedul y se dispone a "azotar" a
un anciano. Éste está inclinado sobre una silla, con las nalgas al aire y
la cara vuelta hacia arriba; su mirada se fija en la vulva que ella le
muestra. La vulva no está representada en el grabado para que el
espectador la vea, sino que es una imagen fantaseada para la
imaginación del espectador.
La mujer tiene muchos rasgos distintivos del oficio de
dominatrix; mantiene un lenguaje corporal y una postura firmes, y
blande la vara de abedul con confianza. En la mesa parecen verse
monedas, lo que sugiere un pago por el servicio. También hay una
prosa deliciosamente divertida debajo de la imagen:

¡Qué trabajo tan pesado hay aquí, qué corrección de


despedida de soltera! para llevar a un viejo a la
insurrección.
Firk on Fair Lady [,] Flaug the Fumbler's Thighs Sin
tal Conjuring th'Devil will not rise

Insurrección" es un levantamiento, utilizado para describir el


cambio ascendente en el estatus social, derivado de insurgere
(levantarse). En el contexto
FIGURA 19 El Cully Flaug'd, c. 1674-1702. Mezzotinta según Marcellus Laroon. Museo Británico.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 83

de la prosa, la sublevación representa una erección ascendente.


Firk" era un término del inglés antiguo que significaba
"golpear, azotar, fustigar",8 y en el inglés actual "firk on" es una
forma imperativa de "seguir adelante". Mientras que "flaug" era la
palabra alternativa "flog", que significaba azotar. En aquella época,
"flog" era un término relativamente nuevo en la lengua inglesa. El
poema anima a la "Bella Dama" a seguir azotando, corrigiendo y
castigando al hombre para que se ponga erecto.
La prosa también hace referencia a Bridewell, la prisión histórica
para el castigo de los pobres desordenados en Londres durante esta
época.9 Los "escenarios" (juegos de rol) de calabozos o prisiones son
una fantasía común solicitada por las Dominatrices modernas.
Tan omnipresente es este escenario que la fantasía de la "cámara
del calabozo" se ha convertido en el espacio de juego más común
establecido por las Dominatrices para trabajar.
La relación de los escenarios de castigo y corrección de la
Dominatrix como paralelos a la prisión o mazmorra histórica se
discute en el Terrae-Filius londinense de Ward (1701). Ward
discute el caso de una Maestra de una escuela de flagelación que
sufrió una redada en su "Academia de Titilación":

la justicia de la Caza de Putas encontró al Lechero y a su Azotadora


escondidos en un armario, rodeados de un gran número de Instrumentos
de Azotamiento, para la flagelación secreta de sodomitas superannuados,
atados con varias cintas de todos los colores. Las varas, unas consistían en
ramitas más finas y otras más gruesas, y se distinguían unas de otras por
la ligadura del mango, de modo que cada bestia, desde el cuero de piel de
ante hasta el de piel de cordero, entendía por el color cómo pedir un
azote que fuera el más agradable a la ternura de su Curtis. Esta Profesora
de la Ciencia de los Azotes y sus compañeras fueron enviadas a
Bridewell, para que su lascivia
84 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

pueden ser enfriados de acuerdo a su propio ejercicio, con una pica de


toro, o un gato de nueve colas . . . Bridewell es una especie de escuela de
flagelación.10

Ward llama la atención sobre la ironía de que las "Amas" de


estos establecimientos corrían el riesgo de ser encarceladas y
castigadas en Bridewell, expuestas a un trato similar al que
normalmente administraban a sus clientes. La prisión de
Bridewell aplicaba una disciplina sancionada institucionalmente,
mientras que las escuelas de flagelación aplicaban una disciplina
sancionada eróticamente.
Los hombres que disfrutaban con los azotes eran conocidos
como "cullies" (o, en singular, como "a cully"). En el New Canting
Dictionary de 1725, un 'flog- ging cully' se describe como: a Naked
Woman's whipping (with Rods) an Old (usually) and (sometimes)
a Young Lecher" (una mujer desnuda que azota (con varas) a un
viejo (normalmente) y (a veces) a un joven).11 A menudo se
representaba a un "cully" como un anciano que sufría de
disfunción eréctil en la vejez, que buscaba una flagelación para
curar su impotencia. El término se utilizaba así para burlarse y
denigrar a los hombres que tenían deseos no normativos, que
deseaban someterse a una mujer para sus fantasías de disciplina y
castigo. Más adelante, Wilson aborda este estereotipo y se
apresura a señalar que los clientes de las institutrices no sólo eran
ancianos, sino también jóvenes, y que lo que los diferenciaba solía
ser su nivel educativo: provenían de una educación o
escolarización en la que se practicaba el castigo corporal. (Escribe:

Es muy cierto que hay innumerables viejos generales, almirantes,


coroneles y capitanes, así como obispos, jueces, abogados, lores, plebeyos
y médicos, que periódicamente van a ser azotados, simplemente porque
les calienta la sangre, y mantiene un poco de excitación agradable en sus
sistemas mucho después de que el poder de disfrutar del sexo opuesto les
ha fallado; pero es igualmente cierto, que cientos de hombres jóvenes,
habiendo sido
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 85

educados en instituciones donde los maestros eran aficionados a


administrar la disciplina del abedul, y recordando ciertas sensaciones
producidas por ella, han imbuido una pasión por ella, y han anhelado
recibir tal castigo de las manos de una buena mujer.12

Se pensaba que la flagelación ayudaba a las funciones venéreas,


calentando la sangre y aumentando el flujo sanguíneo a la región,
así como la excitación. Un conocido libro médico sobre el tema de
la flagelación se titulaba Tratado sobre el uso de la flagelación en
asuntos venéreos, traducido del latín De Usu Flagorum in re Medica et
Venerea (1639).13 Fue escrito por el médico alemán Johann
Heinrich Meibom, y se reimprimió varias veces, con notas
introductorias del hijo de Meibom y Thomas Bartholin. El texto
propone:

que azotando los lomos, y calentando las riendas, se acelera o aumenta la


materia de la simiente, y cómo eso debe realizarse por la circulación de la
sangre en las riendas... recurrir con vosotros a la causa común, el calor de
la sangre, inflamada por la flagelación de los lomos, para aumentar el
calor de las riendas, y provocar un apetito venéreo.14

Cuando este tratado fue reimpreso en inglés en 1718 por el


famoso Edmund Curll, se cambió el nombre del autor por un
equivalente inglés (John Henry en lugar de Johann Heinrich) y se
dio un giro latinizado al apellido (Meibomius en lugar de
Meibom). Curll también incluyó una escena erótica de flagelación
como frontispicio (véase la FIGURA 20).
La ilustración erótica representa una escena de tocador en un
dormitorio doméstico, en la que una mujer abofetea las nalgas de un
hombre mientras es observada por una segunda mujer desde la
cama, y otras dos figuras que miran desde la ventana exterior. Se
trata de una flagelación voyeurista "vista".
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 87

La intención de Curll de publicar un texto puramente


médico/científico queda desmentida por el frontispicio erótico del
libro. El libro había llegado originalmente de Europa a finales del
siglo XVII, circulando con y entre una serie de libros que
presentaban la flagelación y la dominación, y que aumentaron la
conciencia de estas actividades y fantasías.
Otra importación extranjera a Inglaterra fue el "diálogo de
putas" de Aloisiae Sigeae, escrito en latín hacia 1660 en un
intento de ocultar su origen supuestamente español; en realidad,
fue escrito por un francés. Fue reeditado en francés dos décadas
más tarde, y poco después en inglés, con el nuevo título de:
Diálogo entre una dama casada y una criada. El tema era una
mujer mayor que educaba a una más joven en cuestiones sexuales,
incluyendo la flagelación y la sumisión contractual (que ocupa una
parte importante del libro), así como otros tipos de conocimientos
sexuales. El editor inglés William Cademean fue procesado en
relación con esta obra, lo que ilustra lo arriesgado de este tipo de
publicaciones en esta época. Otra publicación subversiva francesa
fue Vénus Dans
La Cloître (hacia 1682), atribuido a Jean Barrin. Fue traducido al
inglés como Venus in the Cloister, y reeditado por Edmund Curll
en 1724-25. Este libro, junto con la reedición de Treatise in the Use
of Flogging in Venereal Affairs, supuso para Edmund Curll
problemas con la ley. Fue detenido y encarcelado, y finalmente
acusado de "difamación", ya que en aquella época no existía una
"ley de obscenidad" por la que acusarle; y así se desarrolló la forma
de difamación por obscenidad.
En 1748 se publicó en Inglaterra el libro de John Cleland,
Memorias de una mujer de placer (más conocido como Fanny
Hill ), que influyó en el auge de la flagelación y la demanda de
este servicio en Inglaterra. El libro presentaba a su protagonista
Fanny Hill

FIGURA 20 (OPUESTA) Escena erótica de


flagelación. Frontispicio de la reimpresión de
Edmund Curll de A Treatise in the Use of Flogging
in Venereal Affairs (1718).
88 LALA HISTORIA
HISTORIA Y LAS
Y LAS ARTES
ARTES DEDE
LALA DOMINATRIX
DOMINATRIX 89

satisfacer los deseos "inusuales" del Sr. Barville en una escena,


orquestando un escenario de flagelación y bondage en el que ella da
y recibe latigazos:

Le conduje al banco, y según mi indicación, jugué a forzarle a


acostarse: a lo cual, después de alguna pequeña muestra de renuencia
por la forma, se sometió; fue inmediatamente extendido sobre su
vientre, en el banco, con una almohada bajo su cara; y así fue
dócilmente acostado. Le até fuertemente, de pies y manos, a las patas
del banco; hecho esto, y quedando su camisa atada sobre la parte baja
de su espalda, le bajé los calzones hasta las rodillas; y ahora yacía, en
todo el más bello y amplio despliegue de esa parte de la jauría; en la
que un par de regordetes, suaves mejillas y blancas caderas se
elevaban amortiguando hacia arriba desde dos muslos robustos y
carnosos, y terminando su hendidura, o separación, por una unión y
la parte baja de la espalda, presentaban una marca audaz, que se
hinchaba como si fuera, para recibir el azote . . .
Agarrando ahora una de las varas, me coloqué sobre él, de
acuerdo con sus instrucciones, y le di, de un soplo, diez latigazos con
mucha buena voluntad y el mayor nervio y vigor de brazo que pude
ponerles, de modo que aquellos carnosos orbes temblaron de nuevo
bajo ellos15.

El autor y el editor fueron detenidos y acusados, y el libro se


retiró de la imprenta. Siguió circulando como un "libro
prohibido", que se vendía por debajo del mostrador y se pasaba de
mano en mano entre conocidos. A juzgar por las pruebas de la
época, parece que el libro también fue en gran parte responsable
de popularizar las fantasías de flagelación y de impulsar el papel
profesional de la dominatrix que las atendía.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 89

TUrNINAR LA FLAgELACIóN EN UNA FAsIóN


Un grabado inglés que data de unos años después de la aparición
del famoso libro Fanny Hill representa a una figura femenina de
autoridad blandiendo la vara de abedul (véase la FIGURA 21). Lleva
un vestido y un corsé que acentúan su fina figura. El hombre está
vestido a la moda de la clase alta de la época, con las nalgas al
descubierto y delineadas por las marcas de la vara. El fuego que
arde en el centro de la escena es una elegante metáfora del calor
que provoca la mujer que lleva la vara.
El lugar se identifica en el texto como "una casa cerca de Covent
Garden". Pretende ser "la representación exacta de un asunto que
le ocurrió recientemente a un joven caballero". En otra habitación
oye "la voz de una mujer, como la de una maestra, que azota y
regaña a un niño". Pero lo que despierta su curiosidad es "el tono
masculino del delincuente, que pedía perdón de todo corazón". Al
entrar en escena a través de una puerta privada, encuentra a un
"caballero anciano, notablemente conocido", que deja tras de sí la
nota que es un dictado de la Maestra de Escuela que ha hecho que
su alumno le grabe:

De todos los niños que he tenido en mi escuela, tú eres el que más


problemas me ha dado. Me veo obligado a azotarte el trasero dos veces
por semana hasta que te sale sangre. Ahora estoy decidido a azotarte
severamente. Los niños miran su trasero y se dan cuenta de que es un vil
niño travieso. Ayer hizo novillos y hoy no quiere comer pan con
mantequilla sin que le corten cristales, pero yo le cortaré cristales en el
culo.16
FIGURA 21 Grabado de la
Flagelación, 1752. Grabado de John
June. Biblioteca del Congreso,
Washington D.C.
92 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El pasaje termina con este comentario satírico:

Estamos completamente perdidos en cómo explicar este extraordinario


giro de las pasiones, o para decir por qué método, esta forma poco común
de recibir placer opera: por lo tanto, debemos referir la solución de esta
paradoja a la Royal Society y al Colegio de Médicos, y si esos cuerpos
eruditos no tienen éxito, el último recurso de nuestras esperanzas deben
ser las profundas investigaciones Hebdomadales de la Sociedad Robin
Hood.

La mencionada Sociedad Robin Hood era un club privado


cuyos miembros pertenecían a la aristocracia. El grabado pasó a
formar parte de la colección de la Biblioteca del Congreso de
Washington DC. Las clases altas se encontraban entre los
principales clientes de la Dominatrix School-Mistress, hombres a
los que ofrecía con flexibilidad una serie de escenarios de juegos
de rol para sus fantasías. Aunque el papel de ama de escuela era
sin duda el más popular, también podía desempeñar el papel de
madre, madrastra, tía, institutriz, o de Dama de la Justicia en
castigos judiciales17 .
Las variantes de "juego de rol" de la profesión quedan
demostradas por un libro notable para su época. La pequeña
publicación clandestina, al parecer impresa en Francia (para evitar
problemas con las autoridades inglesas), se titulaba: Conferencias de
moda: compuestas y pronunciadas con disciplina de abedul, por las
siguientes y muchas otras bellas damas, que han desempeñado con
aprobación universal el carácter de madre, madrastra, institutriz,
doncella, ama de llaves, etc., etc. (c. 1761). (c. 1761).18
Se publicó bajo la apariencia de ser conferencias u obras
teatrales, pero en realidad era un anuncio velado de "Disciplinarios
del abedul", que enumera en su frontispicio unos 57 nombres de
mujeres. Se lee como una especie de
FIGURA 22 Conferencias de moda impartidas con disciplina de abedul.
Frontispicio, en el que figuran los nombres de 57 damas que practican
la disciplina del abedul.
94 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

de "quién es quién" de algunas de las cortesanas y damas más


famosas de su época, como Fanny Murray, Nancy Parsons y Kitty
Fisher, por citar sólo algunas. (Véase la FIGURA 22.)
Algunos de los nombres de las damas están parcialmente en
blanco o se han adoptado seudónimos para ocultar sus
identidades. Algunos de los nombres parecen aludir al papel que
desempeñaron, como "Madre Birch", la "Condesa de Medina" y
la "Sra. Judge". Curiosamente, en la lista también figura una
mujer fallecida, la difunta Srta. Kennedy, lo que sugiere un
reconocimiento póstumo de sus excelentes "servicios a la
disciplina del abedul". O quizá pagó por el privilegio de figurar en
la lista antes de su prematuro fallecimiento.
No todas las mujeres de la lista eran dominicas a tiempo
completo. Algunas eran actrices y prostitutas que se dedicaban a la
disciplina y la flagelación, tan de moda en la época.
Lo que sigue es la oferta de tentación hecha al
lector/comprador del libro:

Todos aquellos compradores de las Conferencias, que han tenido la


curiosidad de juzgar su efecto cuando se pronuncian con propiedad,
serán remitidos a una dama de distinguidos logros personales y
mentales, quien, si se le hacen los cumplidos apropiados, pronunciará
cualquiera de las Conferencias, con toda la elocuencia y energía de la
voz apasionada y la acción felizmente unidas.
La señora tiene su propia casa y su sala de conferencias está
amueblada con varas, colas de gato y algunos de los mejores grabados
sobre flagelación. La señora tiene una mujer robusta en su casa, capaz
de cargar a un hombre sobre su espalda cuando éste quiere ser tratado
como un colegial; y ella y
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 95

su criada estén dispuestas a ser pasivas algunas veces en el uso de la


vara, cuando se requiera. Precio de la entrega de la primera
Conferencia, una Guinea - cada conferencia después, media guinea, y
media corona a la criada si se emplea como caballo en la ocasión.
N.B. Caballeros solteros, aficionados a representar colegiales,
atendidos por ama y criada a cualquier hora, antes de levantarse por
la mañana, en sus propias casas, donde se representará con
admiración el delicioso divertimento de ser sacados de la cama,
montados a caballo y azotados por no ir a la escuela.19

Un asombroso lazo de mercadotecnia de mediados del siglo


XVIII para los Disciplinarios del Abedul de la época.
¿Empresarios astutos? Eso eran.
Algunas de las damas se convirtieron en cortesanas famosas
que publicaron memorias (o biografías sobre ellas). Varias de estas
mujeres fueron retratadas por artistas de talento, como Nathaniel
Hone, George Willison, James Northcote y Sir Joshua Reynolds
(véanse las FIGURAS 23, 24 Y 25).
Estas mujeres desempeñaron un papel decisivo en la
construcción de su propia identidad. Kitty Fisher, por ejemplo,
publicó un anuncio en un periódico en 1759, en el que deploraba
la constante explotación de su persona por parte de viles
escribientes y vendedores de estampas.20 Pocos días después fue a
ver a uno de los mejores retratistas de su época, Joshua Reynolds,
para que la pintara.21 De este modo podía controlar su propia
imagen. También se sentaría a la mesa de Nathaniel Hone, que le
hizo un retrato con un ingenioso juego de palabras sobre su
nombre: un gato metiendo la mano en una pecera, de ahí Kitty
(gato) y Fish(er), para obtener "Kitty Fisher" (véase la FIGURA 24).
Las cortesanas disciplinadas del abedul se contaban entre las
bellezas más apreciadas de su época, cuyo gusto por la moda
influyó en la Inglaterra de
FIGURA 23FIGURA 24

FIGURA 25

FIGURA 23 George Beare, Retrato de Peg Woffington, c. 1749. Centro de Arte Británico de Yale.

FIGURA 24 Nathaniel Hone, Retrato de Kitty Fisher, c. 1765. National Portrait Gallery, Londres.

FIGURA 25 George Willison, Nancy Parsons en traje turco, c. 1771. Centro de Arte Británico de Yale.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 97

gusto por la moda. Las mujeres llevaban una "gorra de Fanny


Murray" cuando emulaban el estilo cortesano de llevar una gorra
de ala ancha, o se decía que vestían al "estilo Kitty Fisher".
Numerosos grabados y pinturas de estas mujeres se encuentran
en galerías de arte, museos y casas señoriales de todo el Reino
Unido y Estados Unidos, y si se rastrea la "línea de acceso" de
cómo algunas de estas pinturas llegaron a las galerías públicas o
colecciones de museos a través de su procedencia y propiedad, a
menudo se llega a un mecenas aristocrático de la dama en
cuestión. (No hago conjeturas sobre las inclinaciones sexuales de
los tatarabuelos de estos contemporáneos). También se editaron
miles de estampas y grabados baratos, accesibles a las masas.
Un escandaloso poema titulado An Essay on Women (una parodia
pornográfica de An Essay on Men de Alexander Pope) fue dedicado a
Fanny Murray. El poema se leyó por secciones en la Cámara de
los Lores, donde se consideró obsceno. Se le relacionó con John
Wilkes, que pudo ser o no el verdadero autor de la obra, pero que,
en cualquier caso, provocó su caída social.
El nombre de Kitty Fisher quedó inmortalizado en la famosa
canción infantil:

Lucy Locket perdió su bolsillo


Kitty Fisher lo encontró;
Pero no había ni un centavo en él,
excepto en la atadura que lo
rodeaba.

Estas "damas de moda que ofrecen disciplina de abedul"


también tenían, en muchos casos, conexiones con miembros del
Beefeater Club de Dublín (del que Peg Woffington era presidenta),
y con el Sublime Beefeater Club inglés, que se reunía en el teatro
Covent Garden.
98 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Algunas de estas mujeres aparecían como monjas (enmascaradas)


en el "Monks of Medmenham", un club privado fundado por Sir
Francis Dashwood y conocido posteriormente como el "Hellfire
Club". A él asistía John Montagu, IV Conde de Sandwich (de
quien Fanny Murray fue amante durante un tiempo) y sus
reuniones se celebraban por esta época en la abadía de
Medmenham, del siglo XIII, en Buckinghamshire, y se
denominaban los Monjes de Medmenham.22 El club también
estaba relacionado con West Wycombe, donde Dashwood tenía
su residencia y había excavado cuevas, y donde Benjamin Franklin
venía a alojarse cuando visitaba Inglaterra. Algunos de los
nombres alternativos del club aluden a Wycombe, como "Los
frailes de San Francisco de Wycombe", y entre sus miembros se
rumoreaba que figuraban algunos nombres de nobles y políticos
muy conocidos. El artista William Hogarth pintó a Dashwood
como un fraile franciscano, y también se dice que Benjamin
Franklin asistió al club de Dashwood, aunque no hay pruebas
fehacientes que lo demuestren.
¿Qué ocurría en las reuniones del club? El libertinaje delicioso
parece seguro, pero la naturaleza exacta de sus rituales es materia de
leyendas y rumores. Se dice que se disfrazaban de monjes y
monjas. De hecho, en la colección del Museo Británico hay un
grabado de Fanny Murray con su característica gorra, sosteniendo
una máscara, y un cuadro de Henry Morland titulado The Fair
Nun Unmasked (La bella monja desenmascarada) que ilustra el
traje que se llevaba en estas fiestas, con mezzotintas realizadas a
partir del cuadro (véase la FIGURA 26).
El club era una "institución burlesca" que se burlaba
subversivamente de los seminarios religiosos que Dashwood había
visitado en su gran gira y que, en su opinión, contradecían la
lógica y la razón. En lugar de la austeridad y la abstinencia, los
"monjes" practicaban la alegría, la hilaridad y la felicidad23.
FIGURA 26 James Wilson, La bella monja desenmascarada, c. 1770. Mezzotinta realizada a partir de la
pintura de Henry Morland, Yale Center for British Art.
Inscrita: "En su blanco pecho llevaba una cruz resplandeciente, que los judíos podían besar y los infieles adorar - PAPA".
100 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El rey de la Antigüedad se dedicaba a honrar a dioses y diosas de


la Antigüedad en función de las fechas de las fiestas paganas de
temática clásica, y tenía esculturas de Venus y otras divinidades en
su residencia.
La relación entre estas "Fashionable Ladies" y los miembros de
un club privado da una idea de la clientela de estas mujeres. Sin
embargo, no todos sus clientes recibían necesariamente la
disciplina del abedul, y era más probable que algunos la dieran
que la recibieran. Las disciplinadoras de abedul ofrecían lo que
hoy en día se conoce como un servicio de "cambio de amante".
Esto significa que eran capaces de imponer o recibir la disciplina
mediante la negociación en escenarios de juegos de rol.
Entre las clases altas inglesas, ir a visitar un establecimiento de
flagelación femenina School Mistress se había convertido en algo
de rigor. Las fantasías de dominación, esclavitud y flagelación se
comentaban entre amigos y conocidos, y los "Misterios de Birch"
formaban parte de la vida privada de los miembros de la sociedad.
Los nombres de las Amas de la Escuela de Bellas Artes se
transmitían por recomendación y eran muy frecuentadas.
La moda de la flagelación proporcionó un mercado para los
libros de flagelación, con escenarios en entornos escolares y
tocadores aristocráticos. En Inglaterra se publicaron series de libros
como The Exhibition of the Female Flagellants, impresos hacia
1777 y 1785 como Parte I y II. La datación exacta de estos libros
es muy difícil de determinar, ya que estos "libros prohibidos" se
imprimían con sellos y fechas falsos, seudónimos para el autor y los
editores cambiaban frecuentemente de dirección para evitar ser
descubiertos.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 101

LA EDAD DE ORO DEL GOBIERNO


La pasión por la flagelación y las "Flagelantes femeninas" no
disminuyó y, a finales de siglo, las "institutrices" causaban furor en
Londres. En la década de 1840 existían no menos de 20
espléndidos establecimientos que se sustentaban enteramente con
la práctica de la flagelación.24 Se trataba de "Casas de Disciplina",
que eran distintas de los burdeles. En el prefacio del libro The
Venus School-Mistress, una mujer llamada Mary Wilson describe
las cualidades de una institutriz (dominatrix):

Las mujeres que más satisfacen a los aficionados a la disciplina se llaman


institutrices, porque han adquirido por experiencia un tacto y un modus
operandi que la generalidad no posee. No es sólo el hecho de tener una
vara y estar dispuesta a azotar lo que hace que una mujer sea visitada por
los adoradores del abedul: debe haber servido su tiempo a alguna otra
mujer que entendiera su negocio, y ser completamente experta en el arte.
Deben tener un método rápido e intuitivo para observar las aberraciones
de la mente humana, y estar listas y dispuestas a complacerlas y
aliviarlas.25

La autora parece haber sido institutriz durante esta época y


colega de la Sra. Theresa Berkley.26 Dio en el clavo (o en el
abedul) en cuanto a lo que hace a una gran institutriz. El "arte" de
la institutriz residía en la comprensión intuitiva de la psicología de
sus clientes, junto con el dominio (o más bien, la "maestría") de su
técnica. Los conocimientos y el enfoque de una buena institutriz
se adquirían mediante el aprendizaje de una profesional
experimentada.
Wilson enumera una serie de nombres de conocidas
institutrices de épocas anteriores. La Sra. Chalmers y la Sra.
Noyeau, que habían
102 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

habían sido dos de las institutrices con más experiencia, y para


entonces ya estaban retiradas del negocio. La difunta Sra. Jones
de Hertford Street y London Street, Fitzroy Square; la difunta
Sra. Theresa Burkley; Bessy Burgess de York Square y la Sra.
Pyree de Burton Crescent.27 La institutriz dominatrix se había
convertido en una ocupación relativamente conocida, y que en esta
"época dorada" había ido paralela a un marcado profesionalismo
en la configuración y el equipamiento.
La difunta Theresa Berkley, que murió en 1836, fue una de las
más famosas institutrices dominatrix inglesas, señalada por varios
escritores. Tenía su establecimiento de disciplina en Charlotte
Street (ahora Hallam Street), cerca de Portland Place en
Marylebone, y al parecer llevó la profesión de la dominación a un
nivel completamente nuevo en Inglaterra. En 1828 diseñó un
armazón especializado en la flagelación con puntos de fijación para
el bondage, conocido como "El caballo de Berkley" (véase
FIGURA 27).28
Este aparato se convirtió en un artículo "imprescindible" para toda
institutriz seria. (Se sabe que la Sra. Stewart, la Sra. Pryce y las
Sras. Collett y Beverley tenían uno). El Caballo de Berkley se
basaba libremente en las escaleras de madera que ya habían sido
adaptadas para su uso por las institutrices. Una ilustración de putti
(criaturas parecidas a querubines) azotándose contra una escalera
de madera se incorporó al frontispicio del Index Librorum
Prohibitorum (véase la FIGURA 28), y evidencia la similitud en su
forma básica de la que se adaptó el Caballo de Berkley.
El diseño de Berkley era una solución mucho más personalizada
y elegante, que permitía azotar con seguridad contra un armazón
acolchado relativamente cómodo. En el armazón de la tabla se
practicaban orificios que no sólo servían para colocar la cabeza,
sino también para acceder a determinadas partes del cuerpo. En
las memorias de Berkley aparecía un grabado de un hombre atado
desnudo al marco, con una mujer...
FIGURA 27 El Caballo Berkley, diseñado en 1828 por la institutriz dominatrix Theresa Berkley.
104 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 28
Detalle de putti
azotando, ambos del
Index librorum
Prohibitorum de Henry
Spencer Ashbee.

sentada en una silla debajo de ella "con el pecho, el vientre y el arbusto expuestos
. . manualizando su embelón", mientras Theresa Berkley le
abrochaba el trasero.29
El placer y el dolor se administraban simultáneamente desde
cada dirección. Los recortes en el diseño del armazón también
permitían simular la tortura o el placer de los pezones y los
genitales, al mismo tiempo que se recibía un azote o el látigo.
Theresa Berkley también tenía un sistema de suspensión -un
gancho y una polea en su segundo piso, para "subir a un hombre
por las manos", como parte de su equipo altamente especializado.

Tenía varas con una docena de látigos en cada una de ellas; una docena
de colas de gato de diferentes tamaños, algunas con puntas de aguja
trabajadas en ellas; varios tipos de cañas delgadas para doblar; correas de
cuero como tiras de carruaje, battledores, hechos de cuero grueso, con
clavos de una pulgada atravesados para acoplar, y curry-comb de pieles
duras insensibilizadas por muchos años de flagelación. Arbustos de
acebo, cepillos de aliaga, una planta perenne espinosa, llamada arbusto
del carnicero; y durante el verano, jarrones de cristal y porcelana, llenos
de un suministro constante de ortigas verdes, con las que a menudo
restauraba...
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 105

los muertos a la vida. Así, en su tienda, quienquiera que fuera con mucho
dinero, podía ser abofeteado, azotado, fustigado, flagelado, pinchado con
aguja, semicolgado, cepillado con acebo, cepillado con pieles, cepillado
con carnicero, peinado con aguijón, peinado con curry, flebotomizado y
torturado hasta que se le llenara la barriga.30

Aunque Theresa Berkley era predominantemente una


institutriz dominante (es decir, dominatrix), también era una
"Switch-Mistress", que en ocasiones se sometía, hasta cierto
punto, a recibir castigos de sus clientes además de darlos. Sin
embargo, "si eran glotonas", como señala Wilson, Theresa
Berkley "tenía mujeres dispuestas a recibir cualquier cantidad de
latigazos que el azotador quisiera, siempre que pagara un derecho
ad valorem". Los nombres de las mujeres que recibían castigos en
su establecimiento eran: Miss Ring, Hannah Jones, Sally Taylor,
One-eyed Peg, Bald-cunted Poll y una chica negra llamada Ebony
Bet'.
El sistema de aprendizaje del establecimiento de Berkley
permitía a las mujeres trabajar para ella mientras aprendían el
oficio. Adquirían conocimientos sobre psicología, juegos de rol,
equipo y técnicas, antes de convertirse ellas mismas en institutrices.
Hannah Jones, por ejemplo, figura en la lista de mujeres que
recibieron castigos en casa de Berkley. Más tarde se convirtió en
institutriz con el nombre de Griffiths.31
¿Qué hacía falta para convertirse en una gran Governess
Dominatrix, además de aprender las técnicas de la flagelación, el
bondage y los juegos de rol? Wilson habla de lo que hizo de la
Sra. Theresa Berkley una mujer "adaptada en todos los sentidos a
su profesión":

Poseía el primer gran requisito de una cortesana, a saber, la lascivia:


porque sin una mujer es positivamente lasciva, no puede mantener
mucho tiempo el afecto de ella, y pronto se percibirá que sólo mueve las
manos...
106 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

o sus nalgas por valor de libras, chelines y peniques. Podía presumir de


gran urbanidad y buen humor; estudiaba cada lujuria, capricho y deseo de
su cliente, y si tenía la disposición de satisfacerlos, su avaricia se veía
recompensada a cambio.32

El término "lascivia" encarnaba una auténtica apertura mental,


una actitud libertina hacia el erotismo. Esta mentalidad, junto con
la comprensión y la intuición de las mentes de sus clientes, eran
una parte importante del enfoque de la institutriz, tanto como las
habilidades técnicas de la ablación y demás.
Otra importante fuente de información sobre las institutrices
de la época procede del Index Librorum Prohibitorum ('Índice de
libros prohibidos') de Henry Spencer Ashbee, publicado en 1877
bajo el seudónimo de Pisanus Fraxi. Ashbee era, a ojos del público,
un consumado caballero victoriano. En su vida privada, sin
embargo, escondía una "erotomanía" secreta, coleccionaba
numerosas ediciones de libros eróticos e incluso alquiló
habitaciones en Gray's Inn Square para albergar su colección.
También se cree que Ashbee es el seudónimo "Walter" del libro
Mi vida secreta, basado en el desarrollo sexual y las aventuras de un
hombre en la época victoriana.33
A su muerte, Ashbee legó su enorme colección de libros y
material erótico al Museo Británico. El material erótico iría a parar
al tristemente célebre "Maletín Privado" del Museo Británico,
donde su contenido estaba "protegido" (es decir, restringido) de las
mujeres y las clases bajas, ya que en esta época se creía que
corromperían a las personas de mente y constitución débiles.
Cuando las actitudes sociales cambiaron en tiempos más
modernos, los libros prohibidos del "Private Case" se trasladaron
a la colección de libros raros de la Biblioteca Británica, donde
ahora pueden verse.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 107

Entre la colección de libros raros se encuentra la propia copia


de Ashbee de su Index Librorum Prohibitorum, que dedica una
parte significativa del espacio a discutir el tema de la
"Flagelación". Las fuentes de Ashbee fueron el "Prólogo" de la
Venus School-Mistress, escrito por Mary Wilson (del que ya
hemos hablado), y una carta manuscrita de su amigo y compinche
en París, Frederick Hankey. Esta carta manuscrita original aún se
conserva en la copia personal de Ashbee de su Index Librorum
Prohibitorum, y es una de las principales fuentes de información
sobre las institutrices (dominatrix) de la época.
El acceso al libro está restringido, no por parte de las mujeres y
las clases bajas, como ocurría históricamente cuando estaba en el
"Private Case", sino debido a su rareza y fragilidad. Una página de
esta carta muestra el garabato manuscrito difícil de leer de
Hankey (véase la FIGURA 29). La carta está fechada el 26 de mayo
de 1875, y su contenido parece responder a una petición de Ashbee
para que le escribiera con información sobre los establecimientos
de flagelación y las mujeres que los regentaban.
Aunque es difícil descifrar la letra, Ian Gibson hace un buen
intento en su biografía de Ashbee, The Erotomaniac.34 La carta
completa de Frederick Hankey (descifrada por Gibson) dice así:

El primer establecimiento conocido por mí en los últimos cincuenta


años en el que se practicó la vara en gran medida fue el de Mrs.
Collett en Tavistock Court, Convent Garden, desde donde se trasladó al
barrio de Portland Place - y luego a Bedford Street, Russell Square,
donde murió - Se sabe que George IV estuvo en su casa - Educó a una
sobrina en la misma línea, y que como Mrs. Mitchell llevó a cabo un
gran negocio en la misma línea, en varios lugares, y finalmente en St
Mary's Square, Kennington, donde murió.
FIGURA 29 Página de la carta manuscrita de Frederick Hankey a Ashbee. Copia personal
anotada del Index librorum Prohibitorum del propio Ashbee. Libros raros, Biblioteca
Británica.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 109

Luego vino la señora James, que había sido criada en la familia de


lord Clarincade -tenía una casa en Carlisle St, pero acabó retirándose
de los negocios con una buena fortuna-, una villa en Notthing Hill
[sic], y una casa en Quebec Street -con cuadros y joyas sin fin-.
Nadie ha superado en esta línea particular a la Sra. Theresa
Berkley, que vivió y murió en Charlotte St, Portland Place, nº 28. -
Pocos días después de su muerte llegó su hermano, que había sido
misionero durante 30 años en Australia, y descubrió que ella le había
legado 12.500 libras en fondos, además de otras propiedades, pero
cuando se enteró de la fuente de la que procedían, renunció a todo
derecho e inmediatamente regresó a Australia. Vance, de Saville Row,
su asistente médico, pero él también se negó a administrarla, por lo que
la totalidad fue legada a la corona. Ella nunca destruyó una carta, y el
Dr. Vance, como albacea, recibió varias cajas llenas, que permitió al
escritor examinar. Hace unos años, la señora Potter tenía un buen
negocio cerca de Tottenham Court Road, pero al ser condenada a
prisión por hacer que uno de sus clientes matara a una joven, se
arruinó. Había otras personas cuyos nombres y direcciones he
olvidado, todas ellas hicieron fortuna. El único establecimiento que
conozco en la actualidad está en Regent's Park, una pequeña y
encantadora villa presidida por una señora muy culta, muy versada
en...
misterios de birchen.
Su clientela es reducida pero selecta, compuesta por unas pocas
personas pertenecientes al más alto orden de la sociedad...
El abedul en la mayoría de estos lugares fue proporcionado por
una señora Potter que vive en Walworth -
En mi experiencia he conocido personalmente a varias damas de
alto rango que tenían una pasión extraordinaria por administrar la
vara, y
110 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Conocí también a la esposa de un clérigo, joven y bonita, que llevaba


el gusto hasta el exceso. Sólo he conocido a una a la que le gustara
recibirlo, y era de lo más bajo. Cuando la excitaba la bebida, se dejaba
azotar hasta que el trasero quedaba completamente en carne viva, En
el establecimiento que he nombrado en Regent's Park, hay dos chicas
muy jóvenes que pasan por todas las fases de una maestra de escuela y
azotan con una severidad espantosa...
Los programas que envían los "alumnos" son extraordinarios: a
algunos les gusta que les azoten de pequeños por la rodilla, a otros a
lomos de un sirviente, a otros que les aten con correas...
Una amiga de Hankey, que había sido institutriz en una familia de
Inglaterra, utilizó la vara con mucha habilidad.
Podría contar muchas anécdotas relacionadas con este asunto.
Escribo a toda prisa, salgo hoy para París.35

Ashbee añadió otras institutrices a la lista de Hankey cuando


escribió sobre ellas en su libro, lo que sugiere que también tenía
conocimientos personales sobre el tema. Entre ellas estaban la
señora Emma Lee (de nombre real Richardson), del 50 de
Margaret Street, Regent Street; la señora Phillips, del 11 de Upper
Belgrave Place en Pimlico; y la señora Shepherd, del 25 de Gilbert
Street. Ashbee señala que podría enumerar una serie de otras
institutrices que operan en la actualidad, si no fuera indiscreto
hacerlo. Es un tributo de respeto que los clientes mantuvieran la
confidencialidad de sus institutrices, no haciendo referencia a su
nombre hasta después de que se jubilaran o hubieran fallecido.
El título del Index Librorum Prohibitorum de Ashbee: siendo Notas
FIGURA 30 Frontispicio del Index librorum Prohibitorum - Índice de libros prohibidos.
Publicación privada de Pisanus Fraxi (seudónimo de Henry Spencer Ashbee) en 1877.
112 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Bio- Biblio- Icono-graphical and Critical, on Curious and Uncommon


Books es una referencia irónica a la lista de publicaciones prohibidas
de la Iglesia católica, también llamada Index Librorum Prohibitorum
(Índice de libros prohibidos). Entre los "libros prohibidos" de la
Iglesia Católica a lo largo de los años (y hasta la década de 1960) se
encontraban títulos de Galileo Galilei, Blaise Pascal, Jean-Jacques
Rousseau, Victor Hugo, Immanuel Kant, David Hume, René
Descartes, Voltaire, Casanova, Francis Bacon, Balzac, Émile
Zola, Gustave Flaubert, Marqués de Sade, Madame de Stael,
Alexandre Dumas, John Stuart Mill, George Sand, Martin Luther,
Jean-Paul Sartre, hasta la feminista Simone de Beauvoir. En
retrospectiva, estos "libros prohibidos" constituyen una lista de los
pensadores más innovadores e independientes de su época. Sin
embargo, en aquella época sus obras se consideraban una amenaza
para la doctrina y la ideología de la Iglesia católica. El frontispicio
del Index Librorum Prohibitorum hace referencia a esta historia
(véase la FIGURA 30) de prohibición y quema de libros. En general,
lo que una persona o institución prohíbe, quema, encierra, censura
o marca con una "X" roja, lo marca simultáneamente como
detentador del poder. Quienes más se afanan en prohibir libros e
información, indexan su propio sistema de creencias en torrente y
contradicción con la realidad. Censuran lo que resuena con algún
núcleo de verdad, y con ello un inmenso poder, en conflicto o
contradicción con la ideología que pretenden imponer -por la
fuerza- a todos los demás.
La censura parece haberse cobrado como víctima las memorias
de Theresa Berkley. Sus documentos autobiográficos, que iban a
ser publicados, aparecen en varias fuentes históricas y, al parecer,
fueron destruidos. Su publicación había sido muy esperada, y el
libro Venus School-Mistress incluía un anuncio del libro "en la
prensa":
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 113

The Autobiography of the late Theresa Berkley, of Charlotte St,


Portland Place, containing anecdotes of the present Nobility, and others,
devoted to erotic pleasures, with numerous plates.36

También se hacía referencia a las memorias como los "Papeles


de Berkley", ya que Berkley había guardado todos sus "papeles",
que incluían varias cajas llenas de cartas que le enviaban sus
esclavos y estudiantes castigados, entre los que se encontraban
"algunos de los más altos personajes del país". Todas las
referencias a nombres debían eliminarse para su publicación, y
Mary Wilson señaló que "no se expondrá el nombre de ningún
noble o caballero".37
A la muerte de Berkley, estas cajas pasaron a manos de su
albacea, el Dr. Vance.38 Sin embargo, la publicación se retrasó a
petición del Dr. Vance. Se esperaba que su muerte "permitiera a la
empresa, que posee los derechos de autor de su autobiografía,
publicarla".39 Sin embargo, al final los documentos fueron
destruidos.
Los factores que intervinieron en estos hechos son objeto de
hipótesis y especulaciones. Es evidente que Theresa Berkley
confiaba en su asistente médico, el Dr. Vance, y lo nombró
albacea testamentario. Es posible que el Dr. Vance fuera un
partidario privado (y posiblemente cliente) de Berkley en vida de
ésta. A su muerte, sin embargo, parece que trató de distanciarse de su
ocupación. Cuando el hermano de Theresa Berkley, un misionero
residente en Australia, rechazó la fortuna de 12.500 libras que le
había dejado su hermana (al enterarse de "su origen"), la cedió al
Dr. Vance, que también rechazó el dinero.
Berkley fue aparentemente traicionada póstumamente por el
Dr. Vance, cuyo comportamiento parece revelar dos caras; la cara
privada que mira con admiración y apoyo a Theresa Berkley - y la
cara pública
114 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

mirando con preocupación su reputación y el juicio de los demás.


Tal vez otros presionaban también al Dr. Vance durante su vida.
Los "nobles y más altos personajes de la tierra", que se contaban
entre los clientes de Berkley, tal vez quisieran evitar la publicación
de su autobiografía, por miedo a ser identificados por el "lenguaje,
estilo y sentimientos", y avergonzados así por sus deseos privados.40
O tal vez la amenaza de persecución o enjuiciamiento influyera en
la directiva del Dr. Vance de suspender la publicación, ya que,
después de todo, se pretendía que la publicación incluyera la
estampa de un hombre siendo abofeteado desnudo en su Berkley
Horse con su "embelón manualizado", entre otras
ilustraciones.
Los únicos fragmentos que aparentemente quedan de la
autobiografía y los papeles de Berkley son los que quedaron en su
descripción hecha por otros. Siempre es posible, por supuesto, que
en algún lugar de Inglaterra, escondido en un armario, una
persona relacionada en esta cadena, relacionada con la
composición tipográfica y la impresión, tenga una copia rescatada o
una prueba de imprenta escondida, a pesar de que todo el material
haya sido supuestamente destruido. Sólo nos queda esperar. Una
carta de sus papeles se reprodujo como "ejemplar único" en el
"Prefacio" de The Venus School-Mistress. Según Wilson, la carta era
de un "católico de muy buen humor y tolerante", un caballero
"que solía llevar cadenas para sujetarse mejor el cuello, las manos y
los pies al caballo". Escribe:

Dublín, enero de

1834. Querida

Señora,
Soy el "niño travieso" más incorregible, y he sido azotado por las
institutrices más notables de Londres, sin que me sacaran los vicios a
latigazos. El caballero que se hace llamar Brunswick me recomendó a
la señora Brown, y ella tenía un brazo bastante fuerte. Le llaman
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 115

"Bawdy Blue Eyes", me envió a la Sra. Wilson, de Mary-la-bone, y


no fue ninguna gallina. El viejo Jaunay, de Leicester Square, el
hotelero, propuso a la señorita Chalmers, y ella es una mano muy
experimentada. El Sr. Plume me invitó a cenar con el Forastero y el
Sr. G en la gentil y elegantemente amueblada residencia de Madame
Noyeau; pero ni siquiera su alta y robusta figura pudo causar suficiente
impresión en mi trasero; el que ellos designan como "Cara de Oveja",
deseaba que probara con Jones, de London Street, pero ella y todos
sus ayudantes estaban demasiado borrachos para romper una vara
conmigo. El capitán Johnson insistió en que visitara a Betsy Burgess,
que sin duda es inteligente, pero que ha abandonado el Diable au
Corps. Lord A y me envió a Gordon, pero ella había perdido la
dirección de la señora Potter y se había quedado sin varillas. Brookes,
el librero de Bond Street, me dio la tarjeta de las señoras Collet y
Beverley, y seguramente las encontré tan conocedoras como
cualquiera de Londres; pero incluso sus energías unidas me han
dejado inconquistable. Ahora, mi querida señora, he recibido una
recomendación de su amigo particular, el conde de G e, que me ha
hecho hervir la sangre de placer al describirme su caballo y su
encantador aparato para hacernos cosquillas a los niños traviesos.
Estaré con usted a principios de febrero, ya que el conde y yo iremos
juntos, en nuestros deberes parlamentarios; pero para evitar
malentendidos, le envío mis diez, de antemano:
Estar bien sujeto al caballo con las cadenas que traigo.
Una libra por la primera extracción de sangre.
Dos libras si la sangre baja hasta los talones. Tres
libras si llega a los talones.
Cuatro libras si fluye hacia el suelo.
Cinco libras si haces que me desmaye.

Soy, mi querida señora,


suyo incorregiblemente,
TROBENIUS O'FLUNKEY
116 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

La carta de O'Flunkey da una idea de cómo los Gobiernos


"corrían la voz" entre los posibles clientes: de boca en boca entre los
hosteleros, la aristocracia y los conocidos que compartían el amor
por el abedul y la figura femenina de autoridad.
Las Dominatrices no sólo dejaron su huella en los traseros de
la nobleza, sino también como talentosas practicantes y astutas
mujeres de negocios de su época. Desarrollaron sus
establecimientos comerciales con herramientas y equipos
especializados y perfeccionaron su oficio, adquiriendo y
transmitiendo sus conocimientos a las aprendices como un
cúmulo de sabiduría erótica femenina.
No eran "mujeres caídas", sino empresarias eróticas. Se
enriquecían con las artes de la cortesanía y la dominación, y eran
dueñas de sus vidas, su sexualidad, sus habilidades y su propia
imagen de sí mismas.

Notas finales
1 Texto latino anónimo, citado en Halldór Smith, J. E. 'Phyllis Rides
Aristotle' (2013) (http://www.jehsmith.com/1/2013/04/phyllis-rides-
aristotle.html),
2 de abril de 2013.
2 Jenofonte, Simposio, cap. 2, sec. 10.
3 Shakespeare, W. La fierecilla domada, Acto I, Escena 2.
4 Citado en Jones, M. 'Print of the Month: The Cully Flaug'd', British
Printed Images (BPI)
(http://www.bpi1700.org.uk/research/printOfTheMonth/
december2007.html), diciembre de 2007.
5 Shadwell, 'Virtuoso IV' en Williams, G. A Dictionary of Sexual Language C
Imagery in Shakespearean and Stuart Literature (Londres, 1994), pp. 513-14.
6 Troth, T. The Knavery of Astrology 12 en Williams, G. A Dictionary of
Sexual Language C Imagery in Shakespearean and Stuart Literature
(Londres, 1994),
pp. 513-14.
7 Jones, M. 'Print of the Month: The Cully Flaug'd', British Printed Images
(http://www.bpi1700.org.uk/research/printOfTheMonth/december2007.
html), diciembre de 2007.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 117

8 Oxford English Dictionary: 'To beat, whip, lash, trounce, drub', citando
British Apollo, nº 9. 3/1 (1708), citado en Jones, M. 'Print of the Month:
The Cully Flaug'd'.
9 Véase, por ejemplo: "Bridewell Prison and Hospital", London Lives 1690-
1800, Crime, Prison and Social Policy in the Metropolis
(http://www.londonlives.org/ static/Bridewell.jsp).
10 Ward, London Terrae-Filius l 22 en Williams, G. A Dictionary of Sexual Language
C Imagery in Shakespearean and Stuart Literature (Londres, 1994), pp. 513-
14).
11 New Canting Dictionary en Williams, G. A Dictionary of Sexual Language
C Imagery in Shakespearean and Stuart Literature, pp. 513-14.
12 Wilson, M. 'Prefacio de Mary Wilson' (esta edición data de 1836-77),
Venus School-Mistress o Birchen Sports (Birchopolis, 1917), p. 5.
13 Meibom, J. H. De usu flagorum in re Medica et Veneria, lumborumque C renum
officio De Usu (1638) reimpreso con el título en inglés: Tratado del uso de la
flagelación en asuntos venéreos (Birchgrove Press, 2010).
14 Bartholin, T. en Meibom, J. H. A Treatise of the Use of Flogging in
Venereal Affairs. (NB: El texto original en latín fue publicado en 1639,
traducido y reimpreso en inglés en 1718 por Edmund Curll, y muchas otras
veces).
15 Cleland, J. Memoirs of a Woman of Pleasure or Fanny Hil, reimpresión
(Wordsworth Classics, 2001), p. 161.
16 Véase el texto bajo el grabado "Flagelación", figura 13.
17 Véase la ilustración del libro impreso de Thomas Major (1763), según
Gravelot, de la colección del Museo Británico (ref. nº 1857,0217.83).
18 Conferencias de Moda: compuestas y pronunciadas con Disciplina de Abedul, por las
siguientes y muchas otras hermosas Damas, que han llenado con aprobación
universal, el Carácter de Madre, Madrastra, Institutriz, Doncella, Ama de
Llaves, Ama de Casa, Cc, Cc. Publicado originalmente hacia 1761 y
reeditado en 1872 por Library Illustrative of Social Progress nº 7. J.C
Hotten Publishing, Londres. También citado en Hurwood, B. J. The
Golden Age of Erotica (Sherbourne Press, 1965), p. 162.
19 Énfasis mío. Hurwood, B. J. The Golden Age of Erotica, pp. 162-63.
20 Dabhoiwala, F. Los orígenes del sexo: Una historia de la primera revolución sexual del mundo
(Penguin Books, 2012).
21 Ibid.
22 Mannix, D. P. El Club del Fuego Infernal: The Underground Classic (I
Books, 2001); Ashe, G. The Hellfire Clubs: A History of Anti-Morality
(Londres: Simon and Schuster, 2001); Lord, E. The Hellfire Clubs: Sex,
Satanism and Secret Societies (Yale University Press, 2010).
23 The Nocturnal Revels of King's Place and Other Modern Nunneries,
118 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Containing Their Mysteries, Devotions and Sacrifices (Londres, 1877).


24 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 6.
25 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 6.
26 Se ha supuesto que Mary Wilson es un seudónimo, pero en realidad se menciona
a una "Sra. Wilson" como institutriz durante este periodo, y una carta enviada
por un cliente reproducida al final del "Prefacio" de la Venus School-Mistress
de Trobenius O'Flunkey hace referencia en realidad a una Sra. Wilson de
Marylebone.
27 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 6.
28 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 7.
29 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 7.
30 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 6.
31 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 10.
32 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 6.
33 Walter My Secret Life (1877); véase también: Gibson, I. The Erotomaniac:
The Secret Life of Henry Spencer Ashbee (Londres: Faber and Faber, 2001).
34 Gibson, I. The Erotomaniac: The Secret Life of Henry Spencer Ashbee, pp. 45-47.
35 Gibson, I. The Erotomaniac: The Secret Life of Henry Spencer Ashbee, pp. 45-47.
NB: El autor ha examinado personalmente esta carta, de la que se ha
reproducido aquí por primera vez una página.
36 Anotado en el Index Librorum Prohibitorum de Ashbee (1877), nota 64.
37 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 8.
38 Wilson dice que el Dr. Vance es de Cork Street, y Hankey dice que Vance
es de Saville Row y era el asistente médico de Berkley. (Es posible que se
trasladara de Cork Street a Saville Row, por lo que ambas fuentes pueden
ser correctas).
39 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 8.
40 Wilson, M. "Prefacio de Mary Wilson", p. 8.
CHAP TER III

las principales damas del siglo


xxviii
UNDErgrOUND
--�-

DIsCrEtAs DOMINATrICEs Y ELlAs


ACtIvOs vANIshINg
A mediados del siglo XX, las Dominatrices profesionales llevaban a
cabo sus prácticas de forma muy discreta y clandestina. De hecho,
eran tan discretas que se han hecho muy difíciles de rastrear. No
existe casi nada de ellas en los registros históricos. Su
comercialización se realizaba principalmente de boca en boca
entre los amantes de las mujeres dominantes y los fetichistas. En
los años 50-60, su publicidad consistía en pequeñas tarjetas efímeras
colocadas en los escaparates de los estancos del Soho y en las
cabinas telefónicas.
120 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

EX MAESTRA DE ESCUELA (titulada) da clases particulares de


educación general, tardes y noches. Alumnos difíciles especialmente
bienvenidos. Disciplina estricta.1

Se utilizaban palabras como "estricto", "firme", "control" y


"disciplinario" para indicar que el anunciante era un especialista
en flagelación dominatrix.2
Algunas eran conocidas por un nombre, señorita o señora,
pero normalmente era un nombre falso que habían adoptado. De
hecho, en algunos casos una dominatrix utilizaba varios
seudónimos.
La mayoría de las Dominatrices trabajaban en un apartamento
privado. Tenían un guardarropa de atuendos fetichistas "extraños"
para ellas y sus clientes, junto con algunas piezas de mobiliario
personalizado y equipo para bondage y disciplina. En algunos
países, sobre todo en el norte de Europa, las Dominatrices
trabajaban en zonas rojas y se diferenciaban de las prostitutas por sus
botas hasta los muslos, su mirada dominante y el látigo en su
escaparate.
Intentar localizar a estas mujeres en la época anterior a las
publicaciones de revistas fetichistas resulta una tarea ardua. Al
jubilarse, una dominatrix solía vender su equipo y simplemente
desaparecía. Su nombre no tardó en desaparecer de la circulación,
desconocido para los nuevos inquilinos del apartamento. No se dejó
ninguna dirección ni se conoció ningún nombre "real" por el que
pudiera ser localizada. De hecho, lo único que quedaba de su
antigua existencia era su imagen y su recuerdo en la mente de sus
colegas, clientes y mujeres que trabajaban para ella. A menudo, sus
antiguos equipos y ropas seguían siendo utilizados por las
personas a las que los había traspasado.
Hay pocas vías disponibles para investigar estas primeras
Dominatrices fetichistas "bizarras" del siglo XX. Afortunadamente,
sin embargo, los editores de revistas fetichistas David Jackson (de
la revista DDI) y Bert Wibo
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 121

(de la revista Massad) había conocido a algunas de estas primeras


Dominatrices a mediados del siglo XX, o había oído hablar mucho
de sus operaciones a través de sus conocidos. Reconociendo la
futura importancia de este material, Jackson reunió lo que llamó
los "Archivos Domina". Estos archivos contenían valiosa
información biográfica sobre las primeras Dominatrices,
proporcionando detalles de dónde y cuándo habían operado, su
configuración y fotografías antiguas tomadas de ellas.
La otra fuente de información sobre las primeras Dominatrices
se encuentra en los periódicos, en alguna que otra ocasión en la que
una Dominatrix apareció en los titulares, como tras una redada
policial. El caso más famoso fue el de la Dominatrix holandesa
Monique von Cleef, que sufrió una redada en su casa de Newark,
Nueva Jersey, pocos días antes de la Navidad de 1965. La historia
saltó a los titulares de prácticamente todas las regiones de EE.UU.,
convirtiéndola en una celebridad notoria. Von Cleef fue
encarcelada, pero al final ganó un recurso ante el Tribunal
Supremo de EE.UU., al considerar que la policía había abusado
de sus poderes en el registro. Se trasladó a La Haya, estableció una
nueva "Casa del Dolor" y fue coautora de una biografía de su vida
(véase la sección posterior de este capítulo).
Antes de hablar de las historias de estas Dominatrices de
mediados del siglo XX, es importante señalar que muchas de las
fotografías de Dominatrices que circulan por Internet no son
Dominatrices reales en absoluto.

ELEgANTEs POsErs Y EL BIzArrE DOMINATrIx


Las elegantes fotografías de principios del siglo XX
supuestamente de Dominatrices que circulan por todo Internet,
son casi todas una bella ilusión fantástica de modelos puestas en
escena en el papel de Dominatrix, posando para fotógrafos de
estudios fetichistas comerciales.
122 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Uno de los principales operadores que producían imágenes de


dominación en torno al periodo art déco era el estudio Biederer y
su sucesor Ostra, con sede en París. Dirigido por el fotógrafo
checo Jacques y su hermano Charles Biederer, que emigraron a
París en 1908 y 1913 respectivamente, su estudio evolucionó
desde la imaginería convencional hasta el erotismo suave y lo que
podría denominarse "fotografía fetichista", gran parte de la cual
data del periodo de entreguerras de los años veinte y treinta (véase
FIGURAS 31 Y 32).
El estudio se refugiaba en un discreto taller, donde bailarinas de
music-hall y prostitutas parisinas ejercían de modelos para las
imágenes.3 Algunas representan escenas de tocador doméstico de
sensual disciplina, azotes y latigazos, mientras que otras tienen una
temática más fetichista, como la dominación y las escenas de
sumisión, con pesadas cadenas utilizadas para el bondage, y
escenarios que suponían una amenaza simulada para la mujer, en un
escenario de "damisela en apuros".
Las imágenes de Biederer están bellamente compuestas, con
una puesta en escena teatral y atuendos fetichistas y eróticos,
como cuero, corsés, medias con costuras, lencería y botas.
Abastecían bien al mercado de la erótica fetichista. A finales de la
década de 1930, los Biederer crearon una editorial llamada
"Éditions Ostra", que producía álbumes de series fotográficas que
se vendían en sets, incluyendo fotografía narrativa de exteriores,
sets de estudio, fotografía erótica para encargos de libros y trabajos
comerciales para la línea de venta por correo de productos de
lencería, fetichismo y bondage de Yva Richard. El estudio Ostra
también produjo un cortometraje titulado Dressage au fouet, en el que
aparecía una mujer vestida con lencería azotando a otra dama4 , y las
primeras películas de despedidas de soltero.
Algunas de sus fotografías son identificables por la monografía
"JB" (de Jacques Biederer) o "B" (de Biederer), o llevan el nombre
"Ostra" o un signo de interrogación dentro de un triángulo. La
gran mayoría de las
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 123

FIGURAS 31 Y 32 Modelos para Jacques Biederer, París (c. 1930).

Sin embargo, las imágenes fetichistas de Biederer y Ostra Studio


no estaban firmadas, y sólo se podían distinguir por su firma
estilística, así como por su mobiliario, atrezzo y modelos familiares.
Su historia tiene un trágico final: los hermanos, de ascendencia
judía, perecieron en Auschwitz. El legado de Biederer/Ostra, cuya
obra ejerció una gran influencia en artistas fetichistas como John
Willie e Irving Klaw, perduró mucho después de su muerte. Miles
de imágenes de los estudios siguen circulando, y se han reunido en
un maravilloso volumen publicado en francés titulado Les Éditions
Ostra: L'âge d'Or du Fétichisme.5 Las propias imágenes han
contribuido a formar e informar la imagen fetichista de la
"dominatrix" del siglo XX.
La otra parte del legado de imágenes de dominatrix fetichista
derivado de las fotos francesas era "Yva Richard", o más bien L.
Richard
124 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

y su costurera (y exhibicionista) esposa Nativa. De la venta de


lencería y disfraces pasaron a un negocio más lucrativo, el de la
ropa fetichista, los sets fotográficos, los accesorios y el
equipamiento para la disciplina y el bondage. Ostra Studio
producía sus catálogos de venta por correo, y Yva Richard también
vendía fotografía erótica fetichista.
La modelo para las fotografías y el catálogo era Nativa, una
mujer de gran figura que, al parecer, utilizaba seudónimos como
Miss Milado y Helios. Se la puede ver en numerosas fotografías
para Yva Richard, posando con botas de cuero de tacón de aguja,
corsés ajustados y guantes de ópera de cuero (véanse las FIGURAS 33
y 34). También llevaba un sujetador cónico con tachuelas y bragas
de acero, y posaba sujetando una fusta. (Más de una década
después, la pin-up y modelo fetichista estadounidense Bettie Page
adoptaría un atuendo similar en un encargo fotográfico para
Irving Klaw).
En Alemania, un hombre llamado Hans Rehfeld operó
abiertamente en Berlín durante 1930-32, y posiblemente desde
antes.6 Su producción es poco común, y mucho menos conocida
que la de las imágenes francesas de Biederer/Ostra y las de Nativa
para Yva Richard. Sin embargo, las imágenes fetichistas asociadas
a él fueron muy innovadoras para su época.7
El material europeo llegó a Estados Unidos y a manos de
Charles Guyette, "el rey del tanga", que tenía una tienda en el 116
East 11th Street de Nueva York. Además de vender productos a
través de su tienda, Guyette tenía un negocio de venta por correo,
que se anunciaba en London Life hacia 1934-1935.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 125

FIGURAS 33 Y 34
La modelo Nativa en
fotografías para Yva Richards,
París (c. 1930).

Fotografías - Coleccionistas: Tenemos estudios de vestuario de todo


tipo. Lencería, corsés, tacones, etc. Boxeadoras y luchadoras en acción.
También de otros tipos.8

También otros tipos" era una in-referencia al material


fetichista, entendido por los entendidos. Entre las obras que
Guyette produjo se encontraba un conjunto de imágenes de
"pony-play" con un cochecito de bebé modificado y convertido
creativamente en un carrito, y la mujer dominante vestida con un
uniforme de azafata modificado y mostrada domando a una po-
ny-girl (véanse las FIGURAS 35-37). Otras fotografías mostraban
escenas de dominación femenina sobre modelos masculinos, como
montar a un hombre con botas de tacón alto (véase la FIGURA 38),
y otra representaba una escena doméstica de adoración de los pies
(véase la FIGURA 39).
126 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURAS 35, 36 Y 37 Modelos en juego de ponis para Charles Guyette, Nueva York (c. década de 1940).

Existen pocos datos concretos sobre las actividades o la vida de


Guyette, pero se le consideraba una de las figuras centrales de los
círculos fetichistas clandestinos de Estados Unidos. Se dice
incluso que dirigía un club privado al que sólo se podía acceder
por invitación, denominado "American Social Circle", formado
por entusiastas del fetichismo clandestino.9 Al igual que los Monks
of Medmenham o el Hellfire Club en Inglaterra, es difícil dar
testimonio histórico de los rumores y la realidad que rodeaban al
club, en lo que respecta a sus actividades o a sus miembros. Sin
embargo, en agosto de 1935, Guyette fue detenido por enviar
publicaciones y material lascivo a través del Servicio Postal de
Estados Unidos y, según se informa, fue enviado a prisión durante
un año y un día.10
El impacto acumulativo del material fetichista de hacia 1930,
de Biederer/Ostra Studio, Yva Richard, Hans Rehfeld y Charles
Guyette, fue la creación de un estilo fetichista, un legado que
perdura hasta nuestros días.
Aunque sus nombres siguen siendo relativamente oscuros, las
revistas fetichistas y los ilustradores que les siguieron en América
son muy conocidos. Entre ellos se encuentra John Willie
(seudónimo de John Alexander Scott Coutts), de la revista
Bizarre (1946-59). Willie
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 127

fue responsable de la creación de la fabulosa damisela en apuros,


"Sweet Gwendoline", y de la agente secreta en el papel de
dominatrix, llamada U69.11 Gran parte de las obras de Willie
muestran a una mujer dominando a otra, que suele estar atada o
inmovilizada, y a menudo amordazada (véase la FIGURA 40).
Leonard "Lenny" Burtman estaba detrás de la revista Exotique
(1955-59)12 , que incluía fotografías de las modelos Tana Louise,
en su papel de dominatrix, y nada menos que Bettie Page. Las
ilustraciones corrían a cargo de Eric Stanton y Gene Bilbrew, que
también utilizaban el seudónimo ENEG, que era el nombre de
Gene deletreado al revés. También utilizaron los seudónimos
Bondy y van Rod en la década de 1950.13 A esta revista le siguieron
otras de Burtman. Otro nombre destacado

FIGURA 38 Y 39 Imágenes de época de una pareja modelando para Charles Guyette, Nueva York.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 129

fue, por supuesto, el productor y editor de fotografía Irving Klaw.


Juntos, estos personajes co-crearon la imagen moderna de la
Dominatrix y la estética "bizarra" (como llegó a denominarse).
Mientras que en el siglo XIX las flagelantes dominatrices llevaban
ropa y disfraces a la moda y satisfacían las peticiones de los clientes
de fetiches como pieles, guantes largos, lencería de encaje, etc., en
el siglo XX la dominatrix se puso el atuendo "bizarro" para crear su
imagen y su papel identificable. El nuevo vestuario de la dominatrix
consistía en corsés de cuero, botas de cuero hasta el muslo, guantes de
cuero y tacones de aguja. A medida que el látex/caucho se convertía
en un nuevo material utilizado para la ropa, éste también se añadía
rápidamente.
a "Su" lengua vernácula visual.

DENOMINACIóN DEL DOMINATRIX: ADOPCIóN DE


UN TíTULO A LA OCUPACIóN CRáTICA
El término "dominatrix" no se aplicó a la profesión hasta finales
de la década de 1960, en un contexto de libros de bolsillo sobre el
"sexo bizarro" clandestino, y se popularizó en el cine.
Uno de los primeros de estos libros de bolsillo fue el de
Michael Leigh, The Velvet Underground (1963), que exploraba la
subcultura de las actividades clandestinas de "sexo extraño", en un
estilo periodístico de burla (véase la FIGURA 42).14 El libro inspiró el
nombre de la banda estadounidense The Velvet Underground,
entre cuyos miembros se encontraba Lou Reed. Reed escribió la
canción "Venus in Furs" (Venus en pieles) en referencia a la novela
de 1870 de Leopold van Sacher-Masoch Venus in Furs (Venus en
pieles). La letra de la canción trataba de una relación entre ama y
esclavo, y hacía referencia a la adoración de las botas de cuero y a
los azotes.

FIGURA 40 (OPUESTA) Una dama de estilo


"bizarro" con látigo, de John Willie ( J. S.
Coutts). Acuarela y gouache (c. 1962).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 131

FIGURA 41 Expositor en la tienda de revistas Back Date, 1175 de la Sexta


Avenida, NYC (septiembre de 1958).

FIGURA 42 (IZQUIERDA) Martin Leigh, The Velvet Underground (1963).

FIGURA 43 (CENTRO) Bruce Rogers, The Bizarre lovemakers (1967).

FIGURA 44 (DERECHA) Myron Kosloff, Dominatrix (1968).


LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 131

Brillantes, brillantes, brillantes botas


de cuero Latigazo niña-niña en la
oscuridad
Viene en campanas, tu siervo no lo abandones
Huelga querida ama, y cura su corazón.15

Al parecer, el término "dominatrix" se acuñó por primera vez en


el libro de bolsillo de Bruce Rogers The Bizarre Lovemakers,
publicado en 1967 (véase la FIGURA 43). Poco después del libro de
Rogers, Myron Kosloff publicó Dominatrix (con ilustraciones de
Eric Stanton) en 1968 (véase FIGURA 44). Fue a través de estas
publicaciones que el término "Dominatrix" llegó a aplicarse a la
profesión.
La dominación se hizo más popular a raíz de la película
Dominatrix Without Mercy (Dominatrix sin piedad), de 1976. La
película narraba la historia de una modelo que, tras responder a
un anuncio en el que se le ofrecía una lucrativa suma de dinero,
aceptaba el papel de dominatrix en un salón de Nueva York.
Por la misma época se estrenó la película francesa Maîtresse (1975-
76). Rodada en París, fue dirigida por Barbet Schroeder y
protagonizada por un joven Gérard Depardieu y Bulle Ogier. (El
legendario artista británico Allen Jones diseñó el cartel
promocional de la película [véase FIGURA 45]). La película narraba
la relación de un hombre con una dominatrix profesional. El
toque de autenticidad lo aportaba una dominatrix real que actuaba
como asesora. Al parecer, sus esclavos eran los que aparecían en las
escenas de la película, y se dice que ella realizó la escena en la que
se clavaban clavos a través de la piel de los genitales de un esclavo.
(La actriz principal, Bulle Ogier, estaba fuera del plató y al
parecer no se enteró de la escena hasta que la vio en la película).
FIGURA 45 Cartel de la película Maîtresse (1975-76). Diseñado por el artista británico Allen Jones.
Colección de Reel Poster Gallery.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 133

Instantáneas de la vida real en el siglo XX: en el


tiempo, en el espacio y en el lugar
Todavía existen algunas fotografías de las discretas mujeres que
dirigían sus negocios de dominación en Londres, Nueva York, La
Haya y Herbertstrasse a mediados del siglo XX. Estas mujeres
entraron en contacto con editores de revistas y diseñadores de ropa
fetichista, y en algún momento fueron fotografiadas.
Las primeras imágenes de las décadas de 1950 y 1960 son
predominantemente en blanco y negro o sepia, hasta la llegada de
la película en color y las polaroids, momento a partir del cual se
conservan fotografías descoloridas y escaneados de artículos de
revistas, copiados y re-copiados. El registro resultante es
fragmentario, incompleto y no lineal en el tiempo. Sin embargo,
lo que sí hace es proporcionarnos "instantáneas" de las
Dominatrices en el tiempo, el espacio y el lugar. Junto con los
relatos de segunda mano de quienes alguna vez las conocieron,
tenemos una pequeña mirilla de cómo operaban estas mujeres en
su época y ubicación geográfica, en una carrera subversiva de
dominación femenina.

1960s ENgLAND: MIs DOrEEN DE LONDRES Y MIs


ANNE DE KENT
Inglaterra en la década de 1960 todavía era muy conservadora en lo
que respecta a la dominación pro- fesional. Gran parte de la
información de las Dominatrices de esta época proviene de segunda
mano de relatos de John Sutcliffe (de la revista AtomAge) y otros
editores de revistas que él conocía. Sutcliffe estaba en una posición
privilegiada para saber sobre las Dominatrices de la era de los 60, ya
que era el principal diseñador de modas de "atuendos bizarros" al
que acudían las Dominatrices para obtener su ropa hecha a
medida.
134 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Sutcliffe era un antiguo ingeniero aeronáutico con un "apego"


al cuero, diagnosticado como enfermedad mental en una época en
la que los fetiches se consideraban un trastorno psiquiátrico, y al
que se intentó "curar".17 Posteriormente sufrió un colapso
matrimonial y mental, se mudó de su casa con poco dinero a su
nombre y se convirtió en fotógrafo de bodas para llegar a fin de
mes. También era un apasionado del motociclismo, y se cuenta
que llevó a una amiga en su moto cuando se abrió el cielo y la dejó
empapada. Así que se pusieron a buscar cueros de motorista antes
de la siguiente salida. Al no encontrar nada adecuado para la
mujer, Sutcliffe compró una docena de pieles rojas en el Soho y le
confeccionó un traje él mismo en una máquina de coser que le
prestó su casera.18 Las pieles rojas de motociclista resultantes, con
un cinturón ancho y grandes botones de presión, al parecer
hicieron las delicias de la dama para la que habían sido
confeccionadas. Cuando otra amiga vio la singular creación,
también quiso un traje de cuero a medida, y así nació la idea de
una nueva empresa registrada como "fabricante de impermeables
para mujeres con asiento trasero".19 Había dado con un nicho de
mercado, creando cueros de motociclista para mujeres (incluidas
pilotos de rally), además de confeccionar catsuits ajustados y
extrañas piezas fetichistas para particulares en cuero y PVC.
Se dice que las creaciones de Sutcliffe influyeron en el diseño de
Jim Bates del catsuit que llevaba el personaje de Emma Peel
(interpretado por Diana Rigg) en la serie de televisión Los
Vengadores, que incluso podría haber sido confeccionado en el
taller de Sutcliffe.20 En cuanto al trabajo de diseño del propio
Sutcliffe, se encargó del vestuario de la versión teatral de Los
Vengadores y diseñó el traje de cuero todo en uno para el papel de
Marianne Faithful en La chica de la moto (1968).21
Los diseños de Sutcliffe eran populares entre los clientes
adinerados aficionados a los atuendos fetichistas extraños y, por
supuesto, las Dominatrices
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 135

de la época. Según Sutcliffe, una de las su nuevo atuendo.24


disciplinantes más solicitadas era la
señorita Doreen. La visitó
personalmente en su piso del West
End, que contaba con una mazmorra
hecha a medida (que Sutcliffe
consideraba asombrosa para la época).
Según Sutcliffe, la habitación de la
Srta. Doreen estaba especialmente
insonorizada para mantener la
discreción, y en ella había una picota
acolchada, un banco para azotes y una
silla de bondage, tapizada con afilados
pinchos.22 También tenía una
impresionante colección de látigos,
junto con otras piezas de su equipo de
disciplina y castigo.
La señorita Doreen tenía más
nombres que un agente de los servicios
secretos. Dependiendo de dónde y cómo
se anunciara, también era Miss Anne,
Miss Anita y Miss Tracey (véanse las
FIGURAS 46-48).23 Entre sus clientes se
encontraban algunos de los políticos y
hombres de negocios más importantes de
Gran Bretaña. De hecho, Sutcliffe recibía
en su taller a algunos de los clientes más
destacados de Miss Doreen, a los que
vestía con un traje de sirvienta francesa
de goma o con un extraño atuendo de
cuero todo en uno. Al parecer, estos
prestigiosos caballeros hablaban con
entusiasmo con Sutcliffe sobre la
señorita Doreen mientras les preparaban
136 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 46
Miss Doreen (alias Miss Anne, Miss Anita, Miss Tracey),
Londres (años sesenta).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 137

FIGURAS 47 Y 48 La Srta. Doreen en su piso del West End, Londres (años sesenta).

La aprendiz de la señorita Doreen era Nadine Day, que dio


testimonio de la extraordinaria colección de vestuario de la
señorita Doreen, que incluía ropa estrafalaria de cuero y vinilo,
atuendos exóticos para travestis y travestis, y una enorme colección
de zapatos y botas de tacón de aguja, incluidas tallas grandes para
pies de hombre que se adaptaban a sus clientes. Se deleitaba
enseñando a sus clientes a caminar como una dama con esos
zapatos de tacón de aguja.25 Una de las raras fotos antiguas de la
época muestra a la señorita Doreen recortando una atractiva
silueta, con las manos en las caderas, mirando hacia parte de su
colección de zapatos, mientras ella misma lleva un par de tacones
de aguja de infarto.
138 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Según se informa, sus servicios eran de "Dominatrix pura",


que nunca se extendieron a servicios sexuales o de
acompañamiento. Descrita como "todo venga, pero sin tocar", se la
consideraba una verdadera Dominatrix artesanal, talentosa y
profesional, y muy discreta.26 No compartía nada de su vida
personal con sus clientes, y recíprocamente mantenía su discreción
y privacidad.
La señorita Doreen cerró su negocio a finales de los años
sesenta, vendió su ropa y su equipo a su aprendiz Nadine Day,
antes de desaparecer de escena. Sufría algún tipo de enfermedad.
Se rumoreaba que padecía cáncer, pero se desconoce con exactitud
qué enfermedad sufría. Se cree que murió alrededor de 1973, y
quienes la conocieron la recuerdan como una de las mejores
Dominatrices que jamás haya ejercido, aunque desconocida fuera
del círculo clandestino de sumisos, entusiastas del bondage y la
disciplina y del travestismo que la conocieron.
Otra Dominatrix inglesa que tuvo conexiones con John Sutcliffe
de AtomAge fue Mistress Anne, que ejerció en la escena fetichista
clandestina desde alrededor de 1968. Vivía en una calle semi-rural
de Kent, y era tanto una Dominatrix de "estilo de vida" como
semiprofesional, dominando a su marido en su vida personal y
también haciendo sesiones pagadas con clientes. Tomando el rol
dominante en su relación, hacía que su marido se sentara
pasivamente en el asiento del acompañante mientras ella
manejaba por Kent y lo dirigía en servidumbre a ella, haciendo la
cena y atendiendo los quehaceres domésticos.27 Sin duda él
disfrutaba agradecido y excitado de ser dominado eróticamente
por su esposa alta y "al mando".
Una vieja y rústica casa de carruajes, que servía de garaje en su
propiedad, se convirtió en una mazmorra para Ana. Los altos setos
protegían el camino entre la finca y la casa de carruajes,
proporcionando a Anne un refugio seguro.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 139
140 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURAS 49, 50
(OPUESTO) Y 51
Mistress Anne de Kent,
Reino Unido.

La mazmorra albergaba material como una cruz de San Andrés,


un caballo de bondage, un potro de estiramiento y un sistema de
suspensión. Su colección de látigos, fustas, bastones, esposas y
otros dispositivos de SM y bondage se guardaba en un armario
lateral. En su mazmorra insonorizada, Anne recibía a unos dos o
tres clientes de pago a la semana, satisfaciendo así su sed de
dominación y contribuyendo a la economía doméstica.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 141

factura de gastos. Los empresarios sumisos oían hablar de Ana en


la clandestinidad de los entusiastas del fetichismo y la
dominación.
Alrededor de 1970, el devoto y sumiso marido de Mistress
Anne quería que le confeccionaran un traje fetichista especial para
su esposa. Se pusieron en contacto con John Sutcliffe para que se
encargara de esta tarea y colaboraron en el diseño previsto. El traje
brillante de aspecto mojado, de la cabeza a los pies, pasó a la
historia de AtomAge. Estaba bellamente detallado con cordones de
imitación, cinturón de charol, guantes de efecto mojado y una
capucha brillante con ojos de gato recortados. Anne apareció en el
número 3 de AtomAge luciendo el traje, resplandeciente con botas
de tacón alto con espuelas, que alargaban su ya de por sí alta
estatura (véanse las FIGURAS 49-51).29 Se transformó por completo
y se convirtió en un icono del estilo "bizarro".
La revista AtomAge estaba inundada de cartas de admiradores
de Mistress Anne, y Sutcliffe recibía peticiones a diestro y
siniestro de personas que querían sus datos de contacto. Sutcliffe
accedió como un favor a la Ama. Sin embargo, ante el incesante
aluvión de solicitudes, Sutcliffe ideó el "Sistema de Contacto" de
AtomAge, que permitía a los entusiastas del fetichismo ponerse en
contacto entre sí discretamente.

años 50, nuevo york y nuevo jerez: ANNE


LAUrENCE, JEAN FIsChEr Y MONIqUE vON CLEEF
La década de 1950 fue la era de las amas de casa y un entorno
mayoritariamente conservador. Las audiencias del Congreso sobre
el antiamericanismo y la "Lista Negra" tuvieron sus efectos sobre
cualquiera que pudiera ser considerado "subversivo", que estuviera
relacionado con la industria del entretenimiento o estuviera
implicado o conociera a gente del Partido Comunista. Los editores
de revistas fetichistas corrían el riesgo de ser procesados o
perseguidos en virtud de las leyes de "obscenidad". En el aire se
142 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
respiraba un verdadero temor, del que daban cuenta
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 143

en la escena clandestina. Paranoia o no, hacía que muchas


personas fueran precavidas y cuidadosas en sus relaciones con una
dominatrix. Había un círculo bastante cerrado de personas con
intereses comunes en el fetichismo y la dominación que se reunían
en fiestas privadas.
Anne Laurence era una dominatrix profesional conocida en el
círculo neoyorquino. Trabajó muy discretamente durante los años
cincuenta y principios de los sesenta en un cómodo apartamento de
Uptown Manhattan. Entre sus amigos íntimos se encontraban Bill
Fischer y su esposa dominante Jean, de Ossining, que eran buenos
amigos del artista fetichista John Willie, conocidos de Irving Klaw,
Leonard "Lennie" Burtman y Eric Stanton30 . Bill y Jean Fischer
solían visitar el apartamento de Burtman, donde Anne Laurence y
Jean hacían "Double-Domme" juntas, juntándose con clientes
esclavos para divertirse más.31 Jean Fischer no sólo era amiga íntima
de John Willie, sino que también parece haber influido en la
imagen que Willie tenía de la Dominatrix. En una obra de arte
bellamente representada, la Dominatrix lleva los característicos
guantes de manga ancha y el pelo castaño hasta los hombros de
Jean Fischer (véanse las FIGURAS 52-54). El entorno rural está
implícito en el poste de la valla (al que está atada la mujer), los
pantalones de montar y las botas de montar que lleva la
Dominatrix, como las que Jean solía llevar en su propiedad
semirrural de Ossining. Aunque Jean Fischer era una dominatrix
"de estilo de vida" (no profesional), sus habilidades y su técnica
eran de nivel profesional, y los hombres que eran dominados por
Jean le compraban botas hechas a medida o látigos trenzados a
mano en agradecimiento.
32
como regalos.
Fischer y Laurence eran muy amigos, según se dice "uña y
carne", y pasaban tiempo juntos en Nueva York.
FIGURA 52

FIGURA 53

FIGURAS 52 Y 53 Jean Fischer de Ossining, Nueva York.

FIGURA 54 (OPUESTA) Obra de arte de dominatrix con guantes característicos


parecidos a los que llevaba Jean Fischer, por John Willie ( J.S Coutts). Acuarela y gouache
(c. 1962).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 143

York. Laurence mantenía su apartamento del Upper West Side


con una mesa de restricción de metal ad- justificable entre otras
piezas de mobiliario bondage.33 Tenía una selección de paletas y
látigos, y su armario- ropero estaba equipado con una variedad de
atuendos bizarros, cuero, guantes, corsés, tacones de aguja fetiche
y botas.34 De forma bastante inusual para la época, Laurence
incluso tenía varios vestidos de goma de látex, que
144 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURAS 55 Y 56 Anne Laurence, Upper East Manhattan (c. 1960).

eran vanguardistas en aquella época, ya que el látex de caucho


acababa de empezar a utilizarse para la ropa. De esta época existen
algunas fotos antiguas de Laurence en su apartamento de
Manhattan, y una fotografía posterior en la que aparece de pie con
un bastón (FIGURAS 55 Y 56).
De hecho, imágenes de Laurence sin título circularon por las
revistas mucho después de su jubilación, que se produjo a
mediados o finales de los años sesenta. (Las revistas utilizaron su
imagen para ilustrar artículos o "cartas de los lectores", en su
mayoría ficticias, que procedían de los propios clientes de
Laurence y habían sido tomadas con su consentimiento como
recuerdo. Las fotografías llegaron a manos de las revistas eróticas.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 145

Los editores de revistas, que rara vez


tenían idea de quién era la
modelo/dominatrix, utilizaban las
fotografías con fines ilustrativos,
casi como querían y sin preocuparse
por los formularios de autorización
firmados. Las fotografías de Laurence
aparecen en publicaciones de Burmel
Publishing, House of Milan y
Jennifer Jordan sin atribución
alguna.36
Otra Dominatrix de Nueva York
de esta época era una bonita y joven
Dominatrix rubia holandesa
llamada Monique von Cleef, que
llegó a la escena neoyorquina a
principios de la década de 1960. Llegó
a la dominación tras haber trabajado
como enfermera, una profesión muy
utilizada (y bastante común) entre las
dominatrices, y fue fotografiada para
la revista Bizarre Life de Leonard
Burtman en 1963. Las imágenes se
tomaron en su apartamento de
Manhattan, con Von Cleef vestida
con el mismo atuendo de cuero FIGURA 57
La dominatrix holandesa Monique von
prestado que llevarían Tana Louise
Cleef en Leonard 'Lenny' de Nueva
y otras modelos en las revistas de York
Apartamento de Burtman en
Burtman (véase FIGURA 57).37
Manhattan (c. 1963).
Von Cleef se instaló en una gran
casa de 16 habitaciones en el 850 de
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LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 147

Street en Newark, Nueva Jersey, con salas de juego profesionales


equipadas para recibir a sus clientes de pago en el piso superior.
Pocos días antes de Navidad, Von Cleef sería objeto de una
espectacular redada por parte de detectives de la policía que
actuaban en connivencia con la división de "obscenidad" del
Servicio Postal estadounidense. La redada aparecería en los
titulares de todo Estados Unidos, como en la portada del
Bakersfield Californian: "EE.UU. ATACA A LA INDUSTRIA
ROJA: Detectives Invade House of Horrors" (véase la FIGURA
58).38
En los artículos aparecían fotografías de detectives de la policía
blandiendo los látigos de Von Cleef, junto a imágenes de la propia
Von Cleef. Al parecer, la policía se llevó dos coches cargados de
látigos, cadenas, grilletes y grilletes. Von Cleef fue encarcelada,
pero unos años más tarde ganó el caso ante el Tribunal Supremo,
que dictaminó que la policía había abusado de sus poderes de
registro y confiscación. Los casos judiciales constituyen una
lectura fascinante, que pone de relieve las cuestionables
actividades de la policía en la búsqueda de "actividades furtivas e
ingeniosas", incluidas las de "lascivia" en privado.

DETECTIvOS DE FErrTA Y "ACTIVIDADES DE


INGENIOUOS FUTUROS" DE "LEWDNEss" EN
PrIVATE
Los hombres que atacaron a Monique von Cleef eran una fuerza
conjunta de la división de "obscenidades" del Servicio Postal de
EE.UU., que trabajaba con los detectives de la policía judicial
estadounidense. En el estado de Nueva Jersey, los "actos lascivos"
son delito, incluso en privado.
El teniente detective Magnusson formaba parte de una
división especial de investigación que se ocupaba de la
"obscenidad" en la definición del día.
148 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 58 (OPUESTA) Bakersfield Californian,


22 de diciembre de 1965, con un artículo sobre la redada policial de Von Cleef.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 149

Su trabajo consistía en localizar pornografía y material sobre


"aberraciones" sexuales, como ellos las consideraban, incluida la
homosexualidad, el travestismo, el voyeurismo, el sadismo y el
masoquismo. Al parecer, Magnusson llevaba ocho años asignado a
la división de obscenidades y había participado en casi 600
investigaciones sobre "obscenidades".39
Al parecer, la investigación sobre Von Cleef se vio espoleada
por las publicaciones Flair y La Plume, vinculadas a James Beard,
con quien Von Cleef trabajaba, y que llevaban su discreta
publicidad:

N.Y.C - Señorita exótica, 30 años, 36-26-36. Extremadamente


interesada en ropa de goma, satén, lencería francesa, disciplina, etc, ;
Ansiosa por experimentar. Mantendré correspondencia con todos.
Escribir descriptivamente. Foto apreciada.40

El anuncio iba acompañado de una fotografía de Von Cleef y


del número de referencia 174 (utilizado por discreción y privacidad
dentro del sistema de contacto por correo, para los lectores que
deseaban ponerse en contacto con otras personas que compartían
sus intereses [fetichistas] especiales).
Tendiendo una trampa a Von Cleef, el equipo postal y policial
envió a la detective Magnusson como falsa clienta sumisa, que le
escribió solicitando una consulta remunerada, concertando una
cita para una hora y media de disciplina.
El testimonio del tribunal habla de la empatía y sensibilidad de
Von Cleef hacia las personas con intereses fetichistas y sumisos.41
Da la bienvenida a su invitado, saludándole con su nombre
anónimo de "Sr. S". Le coge el abrigo, le sirve una copa y le ayuda
a relajarse y a que le cuente sus intereses. Von Cleef le dice:
"¿Cómo puedo ayudarle si no quiere hablarme de usted? Le
pregunta por su infancia y adolescencia, y cuándo empezó a
gustarle que le azotaran.
150 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El detective Magnusson contestó que había tenido una


experiencia con una chica con la que salía y se dedicaba a la
flagelación, hasta el punto de que se excitaba sexualmente y
consumaba el acto sexual normal. A lo que Von Cleef aclara: "Pues
yo no tendré relaciones sexuales contigo". Se diferenciaba como
Dominatrix en sus servicios, estableciendo los límites de su
papel.42
Después de hablar de sus antecedentes personales y de su interés
y experiencia en la dominación femenina, entregó al detective un par
de zapatos de tacón alto de mujer y le dijo que quería que los
llevara puestos y se arrodillara en señal de sumisión cuando ella
volviera a la habitación. Soy la jefa", dice antes de abandonar la
habitación. A continuación, se puso zapatos negros de tacón alto,
medias de red y un "aparato de goma ajustado que parecía un
bañador", según el informe de Magnusson.43
Poco después, la policía irrumpió en la casa de Von Cleef y la
detuvo. Aunque no se había emitido ninguna orden de registro,
varios policías procedieron a registrar toda su casa, de 16
habitaciones, durante unas 3 horas.44 Entre su "botín", los
detectives se incautaron de ejemplares de la revista Flair, listas de
miembros y fotografías de los mismos, archivadores con miles de
nombres y direcciones privados, 4.500 piezas de correspondencia
y fotografías privadas de Von Cleef junto con cajas de correo sin
abrir.
En el tercer piso, el superior de la casa, la sala del calabozo, que
ella llamaba "La Torre", se apoderaron aparentemente de todo
menos de las cadenas sujetas al techo. Evidentemente, Von Cleef
tenía una caja de tortura terrorífica, que atrajo especialmente el
análisis y la atención de la policía. También tenía prendas de goma
roja, cadenas, paletas, látigos, correas, camisas de fuerza, ropa
acolchada, cinturones y dispositivos de inmovilización, y esposas,
que se presentarían como pruebas. De un pequeño
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 151

En la habitación se incautaron de prendas de goma y cuero. Más


tarde, en el juicio, dos psiquiatras testificaron por cada una de las
partes.
Como parte del caso del Tribunal Superior, uno de los puntos
más notables que se plantearon, de consecuencias para los actos
privados de todos, se refería a un estatuto que tipificaba como
delito no sólo la lascivia pública, sino también la lascivia privada.
La "lascivia" se definió como "la complacencia irregular de la
lujuria, ya sea en público o en privado". (El Estado contra Baledino).
Incluía los actos cometidos en privado con otra persona, que
tendían a "corromper la moral y las costumbres de la gente",
incluso cuando nadie más era testigo del acto.45 El Tribunal
Superior condenó a Von Cleef por "ocupar un lugar con fines de
lascivia y cesión", en el que infligir o recibir dolor con fines de
gratificación sexual era "lascivia".
El sistema de correspondencia de la revista Flair para los
entusiastas del BDSM y el fetichismo también fue objeto de
escrutinio judicial, con consecuencias de gran alcance para muchas
personas. En el juicio contra Von Cleef se presentaron ante el
tribunal los formularios de solicitud de ingreso en el club privado
Flair de cientos de personas. También se presentó como prueba un
cuaderno con anillas que contenía archivos maestros de nombres y
direcciones de corresponsales de varios estados, a veces
acompañados de fotografías.46 Se trataba de nombres de
estadounidenses corrientes que disfrutaban de la dominación y el
fetichismo en su vida privada, revelados ante el tribunal. Se
presentaron como pruebas cartas privadas dirigidas a "Mistress
Monique", escritas por hombres "esclavos" que declaraban querer
hacer todo lo que su Ama o Reina deseara.
Uno sólo puede imaginar las emociones de todas las personas
afectadas por el caso judicial de Von Cleef, que le habían escrito
con sus deseos más privados, o a otros en privado a través de la
correspondencia Flair
152 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

sistema. En busca de personas que compartieran o entendieran sus


intereses y los comprendieran, se encontraron con que su
correspondencia privada se utilizaba como prueba en un juicio. Sus
pasiones privadas eran condenadas (y vapuleadas) como "lascivas",
"aberraciones sexuales" y "desviadas".47 Las publicaciones que
trataban sobre actividades fetichistas o sadomasoquistas también
se consideraban "obscenas". (Cincuenta sombras de Grey, de E.
L. James, le habría acarreado grandes problemas si se hubiera
publicado en la década de 1960).
Von Cleef, que fue encarcelada por sus "crímenes", diría más
tarde de la redada que ella misma era una "típica Acuario, y
siempre van cincuenta años por delante de su tiempo".48 La historia,
como se demostró, le daría la razón. La redención parcial estaba aún
más cerca, ya que Von Cleef ganó el caso ante el Tribunal
Supremo en 1969, que declaró ilegal el registro policial. Por aquel
entonces, Von Cleef había abandonado los Estados Unidos y se
había establecido en los Países Bajos, en La Haya.

EL hAgUA, 1970s: MONIqUE VON CLEEF, sADOM


BEA Y MIsTrEss KENNy
Ámsterdam tenía fama de ser una de las ciudades más
sexualmente per- misivas del mundo, pero era La Haya la que era
conocida por las dominatrices. Estaba llena de clientes ideales
para Von Cleef: abogados, embajadores, diplomáticos y políticos.
Como cuenta la Ama Michelle Peters:

Ella [Von Cleef ] dijo que conoció esclavos de todo tipo y clase, pero no
quiso hablar de quiénes eran, especialmente los americanos. Pero sí dijo
que La Haya estaba llena de políticos y que como estaban tan cerca y las
embajadas y demás... . Entonces paró, supongo que eso respondía a la
pregunta.49
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 153

La "Casa del Dolor" holandesa de Monique von Cleef se instaló


en una bonita casa de Laan van Meerdervoort. Estaba situada al
norte de la estación central de La Haya y a poca distancia del
Palacio de la Paz. 50 Peters describió el lugar:

La casa en sí es como la mayoría de las de la calle, un edificio de piedra


encalado de cuatro plantas. La primera planta alberga su vivienda y una
zona de recepción donde entrevista a los nuevos esclavos. El segundo
piso está dedicado casi por completo a una mazmorra y está lleno de las
herramientas de su oficio. La tercera planta está prohibida, pero es su
tocador. El cuarto y último piso se utilizaba como almacén, ahora
convertido en otra mazmorra, completa con un jacuzzi. Y en cualquier
momento se pueden ver esclavas ocupadas limpiando la casa, sirviendo a
los invitados, proporcionando una excelente ayuda doméstica51.

Von Cleef quería sacar provecho de su fama y trabajó en una


biografía de su vida con Lyle Stewart, que se publicó en 1973 en
Syracuse, Nueva York, titulada The House of Pain: The Strange
World of Monique Von Cleef, The Queen of Humiliation: Una
autobiografía y un mensaje para todos los esclavos humanos.52
Fue el primer libro legítimo que se publicó sobre una dominatrix
en el mundo angloparlante. Como resultado de la publicidad y de
sus anteriores casos judiciales en Norteamérica, Von Cleef se
convirtió en una dominatrix famosa. Esclavos devotos acudían a
ella desde todo el mundo, y las Dominatrices novatas que deseaban
ser sus aprendices, pasaban su tiempo en la "Casa del Dolor".53 La
casa tenía fama de albergar sesiones masoquistas intensas, sesiones de
humillación (por las que Von Cleef era famosa), travestismo,
escenarios BDSM de temática médica y fetiches. También se
rumoreaba que se había practicado una castración real a un esclavo
que deseaba ser eunuco54.
154 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURAS 59 Y 60
Monique Von Cleef en su
"Casa del Dolor", La Haya
(años 70).
154 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 61
Sadom Bea,
La Haya (c.
1970).

Hay una Polaroid autografiada personalmente por Von Cleef de


esta época, regalada a David Jackson, y otra, una fotografía temprana
en color, que muestran algo de las habitaciones de su "Casa del Dolor"
durante la década de 1970 (véanse las FIGURAS 59 Y 60). Al parecer,
Von Cleef permanecería en el mismo lugar hasta mediados de los
años ochenta.55
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 155

Otros nombres en La Haya eran las dominatrices indonesias


Sadom Bea y Mistress Kenny. Bea había comenzado su carrera en
el "Club Samas" de Amsterdam en 1968 como su Ama de Casa
principal (apareciendo en su revista Club Samas de tamaño A5), y
se trasladó a La Haya en la década de 1970 tras el cierre del club.
Bea trabajó con otra Ama indonesia llamada Mistress Kenny en
un piso privado en Columbraast, así como en la "Casa del Dolor"
de Von Cleef. En 1973, sin embargo, Bea se trasladó a otro nuevo
establecimiento de bondage creado por la Dominatrix Mistress
Jenny, "The Eros Centre", y al mismo tiempo cambió su nombre
de "Bea" a "Sadom Bea". Fue fotografiada delante de su cruz de
San Andrés (véase la FIGURA 61).56 La proximidad del Tribunal
Mundial y la reputación de la ciudad como sede de conferencias
diplomáticas internacionales mantenían a Bea muy ocupada. Con
su látigo a punto, castigaba a sus clientes políticos y legisladores
para librarles de la culpa, del estrés y de sus indiscreciones.57
Su colega, Mistress Kenny, tenía un piso en Columbraast
desde el que trabajaba sobre todo por las tardes y los fines de
semana, al tiempo que hacía malabarismos con una carrera diurna
en el mundo "normal".58 La formación de Mistress Kenny era en el
campo de la medicina y la atención clínica, no muy diferente de la
formación de Von Cleef en enfermería. No es de extrañar que el
piso de Columbraast se mantuviera clínicamente limpio. También
se dice que estaba bien equipado para su época, aunque básico
para los estándares actuales (según el editor de una revista que la
visitó).59
Tras años compartiendo espacio, Mistress Kenny se mudó a
Rotter- dam a principios de los ochenta y montó su propio
espacio de juego de una sola habitación. Tenía tres paredes de falso
ladrillo rojo y una cuarta de papel de aluminio, con una gran rueda
de carreta antigua sujeta a la pared,
FIGURA 62 Miss Kenny, La Haya (c. años 70) en la portada de la revista DDI.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 157

y una pesada cruz de madera para bondage. Había montones de


palas, bastones, cultivos, mordazas, correas, esposas y capuchas,
que reflejaban los intereses de Mistress Kenny. Al parecer, tenía una
imaginación creativa para sacar el máximo partido de su espacio y
equipo con sus habilidades de dominatrix. Apareció en la portada
de la revista DDI en este espacio, con botas y ropa plateadas que
parecían de la era espacial, y una máscara de ojo de gato para
mantener el anonimato (ver FIGURA 62).
Mistress Kenny regresó a La Haya en 1990 y se instaló de
forma más opulenta en el barrio costero de Scheveningen. Instaló
su espacio con paredes grises suaves y suelo de caucho negro, con
espejos y hermosos muebles de bondage hechos a medida y
tapizados en cuero negro. Entre ellos, una cruz de San Andrés
acolchada, un trono convertible en silla bondage, un banco bondage
y un banco para azotes. Su equipo, adquirido a lo largo de dos
décadas de dominación, era impresionante y reflejaba su
compromiso a largo plazo con su profesión artesanal.60

hAMBURGO, 1970-80s: BrITA sChMErsE,


MIsTrEss gABy, NICOLE DE CArJE
En el distrito de St Pauli de Hamburgo (Alemania), las
dominatrices ocupan desde hace tiempo los escaparates de la famosa
franja roja adoquinada de Herbertstrasse (Herbertstraße). La calle
sigue existiendo en la misma función hasta el día de hoy, dividida
por una gran pantalla, con un mensaje que prohíbe a los jóvenes
entrar en la franja.
A finales de los años setenta, una dominatrix llamada Brita
Schmerse tenía una posición privilegiada en la Herbertstrasse.
Trabajando desde la primera ventana de la primera casa, justo
después de la entrada de la barrera, Schmerse trabajaba en el turno
de noche, mientras que su colega, Red Lola, hacía el turno de día.
158 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 63
Britta Schmerse,
Herbertstrasse,
Alemania
(c. finales de
los años
setenta).

cambio. El papel de dominatrix de Schmerse se diferenciaba


visualmente (y simbólicamente) de las prostitutas de los
alrededores por su atuendo distintivo. Mientras que los escaparates
vecinos mostraban a mujeres en lencería ligera y bikinis, Schmerse
iba vestida de cuero negro o de goma negra y roja (dependiendo de
su estado de ánimo), con botas hasta el muslo con cordones en la
parte delantera y un látigo de aspecto peligroso.61 "Zey are gut for
ze business" (son buenas para el negocio), decía con un brillo en
los ojos.62 Su equipo ayudaba a desempeñar el papel de atrezzo
teatral, simbolizando el "juego" que se ofrecía.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 159

FIGURA 64
Mistress Gaby,
Herbertstrasse,
Alemania (c.
1980).

Aunque en la Herbertstrasse trabajaban media docena de


dominatrices, con la competitividad y el orden jerárquico propios
de la profesión, Schmerse era aparentemente la dominatriz alfa de
su época. Tenía toda la confianza, experiencia, atuendo y
distanciamiento para el papel. Se conservan algunas fotografías en
blanco y negro de su trabajo, en las que aparece Schmerse "en
acción" con una esclava (véase la FIGURA 63).
En el número 28 de Herbertstrasse, alrededor de 1980, había una
dominatrix llamada Mistress Gaby, que destacaba en la
comunicación de la dominación visual a través de una imagen de
sí misma elaborada. Al parecer, manejaba
160 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

para lograr una expresión de frialdad, combinada con una mirada


de desdén, que señalaba su superioridad sobre cualquier hombre
sumiso que pasara por allí (véase la FIGURA 64). En una operación
que trastoca el papel de la mujer como pasiva-observada y del
hombre como activo-observador, Mistress Gaby no coqueteaba ni
provocaba, sino que comunicaba la osadía del peligro. Un hombre
sumiso tendría que aceptar el reto, entrar en la claustrofóbica
guarida de esta mujer dominante y someterse a su voluntad y su
látigo, estar a sus pies adorando sus botas de cuero hasta los
muslos y trabajar para ganarse su interés y su respeto. Todo esto
se transmitía con su mirada fría y severa. Para los que se
aventuraban a entrar, tenía una excelente reputación como
dominatrix con talento. Su mazmorra del piso de arriba era negra,
con un espejo en un lado y paredes con capuchas, camisas de
fuerza, ataduras para los brazos, látigos y una buena variedad de
equipo, teniendo en cuenta lo estrecho del espacio.
Los escaparates de las franjas rojas europeas tienen sus ventajas
y sus inconvenientes. Calles como la Herbertstrasse se benefician de
un flujo de clientes potenciales, lo que ayuda a asegurar que una
Dominatrix reciba un buen negocio. El formato de la habitación, sin
embargo, significa que su espacio sería típicamente muy pequeño en
comparación con las cámaras privadas profesionales de otras
Dominatrices. Con el tamaño adecuado para una cama, en lugar de
estar bien planeado para acomodar el equipo de una Dominatrix,
requeriría una colocación estratégica para acomodar artículos
como una cruz de azotes, una plataforma de bondage y un banco
de castigo inclinado dentro de los pisos de la Herbertstrasse. A
menudo el equipo sería multifuncional y versátil, con un número
reducido de látigos y utensilios de buena calidad. Una Dominatrix
en este entorno tenía que trabajar bien su espacio para asegurarse de
que no obstaculizaba su estilo, literalmente. (La expresión dice,
'apenas hay espacio suficiente para columpiar a un gato - de nueve
colas').
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 161

Es posible que los confines de un espacio pequeño y el hecho


de compartir con otras Dominatrices por turnos hayan llevado a
Mistress Gaby a mudarse a un nuevo lugar más grande en
Stressemanstrasse alrededor de 1982. Sin embargo, al parecer
volvió a la Herbertstrasse unos años más tarde, en 1984, pero se
marchó uno o dos años después, vendió su equipo a otra
Dominatrix y desapareció.
Las ventanas ofrecían a las dominatrices relativa libertad y
tran- siencia para entrar y salir de la industria, ya que el equipo se
podía compartir o pasar fácilmente. A diferencia de la inversión y
el compromiso que exigía un piso privado con un amplio
equipamiento, la Herbertstrasse permitía a las mujeres entrar y
salir de la dominación.
Una de estas Dominatrix que aparecía y desaparecía, quizás
para ayudar en sus estudios universitarios hasta un momento
determinado, era Nicole de Carje. Era sorprendentemente
atractiva y llevaba una peluca larga, con un fuerte maquillaje y un
disfraz de máscara de gato de cuero (véase la FIGURA 65). En 1982
se encontraba en la primera casa de la Herbertstrasse, en su
tercera ventana.63 Una posición privilegiada, cualquier hombre que
entrara por la barrera sería sorprendido primero por sus ojos, que
miraban desde su máscara. Vestida de cuero ajustado, con botas de
cuero negro brillante, guanteletes en los brazos, con un látigo
colgado de su taburete, a la vista y a la vez oculta, conseguía el
efecto dominatrix perfecto: ocultar y revelar.
La habitación de De Carje estaba decorada en rojo. Tenía una
mesa de bondage versátil, que funcionaba a la vez como potro de
estiramiento, así como un banco para azotes y una cruz de San
Andrés. Su pequeño equipo incluía látigos, paletas, esposas
bondage, equipo para enemas y delantales de goma, y al parecer
sólo trabajaba unas pocas noches a la semana, aquí y allá, mientras
asistía a la universidad. Desapareció en 1984. La Herbertstrasse
había proporcionado a De Carje, durante un breve
162 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

periodo, la posibilidad de trabajar de forma flexible en la dominación,


ganar dinero para sus estudios y desaparecer o trasladarse de forma
anónima cuando lo deseara.
A partir de la década de 1980, las imágenes e historias de las
Dominatrices se hicieron mucho más visibles, como resultado de
las innumerables revistas fetichistas que aparecieron. Esto permitió a
las Dominatrices promocionarse más fácilmente en su nicho de
mercado.
Las instantáneas de Dominatrices trabajando en diferentes
regiones durante el siglo XX proporcionan una visión de cómo las
mujeres adoptaron la elección de una carrera subversiva durante
esta época. Ya sea operando desde un discreto piso privado, desde
un espacio compartido o desde una ventana de un semáforo en
rojo, la "imagen" que emerge detrás de sus imágenes borrosas y
fragmentos de historias es la de la autodeterminación.
La ocupación de Dominatrix implica una inversión; en
términos financieros, en formación y adquisición de habilidades, y
en sopesar los riesgos y el estigma que puede suponer operar un
negocio de fetichismo y BDSM, teniendo en cuenta sus propios
valores y sistemas de creencias. Para el contexto conservador de los
años 50, 60 e incluso posteriores, era una elección profesional
valiente y audaz.
Mientras que el "trabajo sexual" solía enmarcarse en términos
generales como inherentemente explotador, conectado a diálogos
sobre trata de seres humanos, tráfico de drogas, cárteles de bandas y
mafias, y control, las historias de las Dominatrices ofrecen una
imagen mucho más compleja de las mujeres que ejercen el trabajo
sexual.
Las mujeres de mediados del siglo XX se labraron una carrera
y un oficio en su elección de la dominación profesional. No sólo
eran Amas en juegos de rol fantásticos, sino Amas de sus propias
vidas y carreras, en una época en la que la elección de su
ocupación era un tabú considerable.
También cabe destacar que las dominatrices del siglo XX se
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 163
formaron a partir del fetiche "bizarro" y contribuyeron a crearlo.
164 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 65 Nicole de Carje, Herbertstrasse, Alemania (c. 1982).


164 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

estilo. Aunque sus atuendos estaban influidos por las imágenes


fotográficas y de revistas de la mujer dominante en estilo
"bizarro", también influyeron en el estilo emergente de diversas
maneras. Anne Laurence se encargó un traje de pies a cabeza (en
el que participó activamente en el proceso de diseño con John
Sutcliffe, de AtomAge) que la convirtió en un icono de la moda
fetichista "bizarra". O en el caso de Jean Fischer, cuyos
característicos guantes, estilo y actitud parecen haber influido en
una de las imágenes de John Willie en Dominatrix. La fantasía
informaba a la realidad, y la realidad a su vez informaba (y
alimentaba) la fantasía. El extraño underground que habitaban y
vivían las Dominatrices influiría en la industria musical, la
industria de la moda y la imaginería erótica para siempre.

Notas finales
1 Henri, E. J. Kiss of the Whip (Londres: The Walton Press, 1961), p. 136.
2 Ibid.
3 Dupuoy, A. Les Éditions Ostra: L'âge d'Or du Fétichisme (Éditions Astarte
Publishing); véase: http://www.editionsastarte.com, 2007.
4 Véase el cortometraje de los hermanos Biederer bajo Ostra, titulado
Dressage Au Fouet en el sitio web Archive.org
(http://archive.org/details/1930sFrenchFetishStag
FilmSmWhippingDomination).
5 Dupuoy, A. Les Éditions Ostra: L'âge d'Or du Fétichisme.
6 Muchas gracias a J. B. Rund, de Belier Press (Estados Unidos), por su ayuda
con esta información.
7 De la correspondencia por correo electrónico con el Sr. J. B. Rund de Bélier
Press, 14 de agosto de 2013.
8 Véase 'Charles Guyette' en el sitio web Spanking Art
(http://spankingart.org/wiki/ Charles_Guyette).
9 Ibid.
10 Ibid.
11 La revista Bizarre se publicó entre 1946 y 1959, siendo el número 2 el primero
que salió a la venta. La dominatrix de "Sweet Gwendoline", U69, se llama
U89 en algunas versiones. Un libro muy bueno es la publicación de Belier
Press,
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 165

The Adventures of Sweet Gwendoline by John Willie, que ofrece una descripción
precisa de John Willie por J. B. Rund, y aclara gran parte de la información
incorrecta que circula por Internet, además de reproducir las ilustraciones
pertinentes con un alto nivel de calidad. También existe una publicación
Taschen: Kroll, E. (ed.) The Complete Reprint of John Willie's Bizarre (2
volúmenes) (Colonia: Taschen Books), que reproduce los números de
Bizarre Magazine de forma "casi" completa, y contribuye a poner a
disposición de todos estos números agotados. (Véase el perfeccionista
J. B. Rund reseña críticamente sus escasos errores en:
http://www.belierpress.com/ www/review.html)
12 Véase The Complete Reprint of Exotique: The First 36 issues, 1951-1957 (3
volúmenes) (Colonia: Taschen Books).
13 De la correspondencia por correo electrónico con el Sr. J. B. Rund, de Bélier Press, 14 de agosto de
2013.
14 Leigh, M. The Velvet Underground (Estados Unidos, 1963). El libro se
reeditó en Inglaterra con el título Leigh, M. The Velvet Underground
Revisited (1967), y un año más tarde con el título Bizarre Sex Underground
(1968).
15 Letra de la canción 'Venus in Furs', de Lou Reed, para The Velvet
Underground (grupo).
16 Rogers, B. Bizarre Lovemakers (Nueva York, 1967), citado en el Oxford
English Dictionary como "Dominatrix". No está claro si éste es
definitivamente el primer uso del término "Dominatrix", ya que hay cientos
de publicaciones clandestinas que no se pueden buscar en los recursos de las
bibliotecas. Sin embargo, al examinar los términos de "Dominatrix" en los
periódicos, el uso frecuente de la palabra sólo se produce después de 1967,
aumentando tras el estreno de la película Dominatrix Without Mercy.
17 Trunk, J. 'The Rubber Man: The History of John Sutcliffe and Atomage[,
Dressing For Pleasure: The Best of AtomAge 1972-1980 (eds Murray, D. y
Sorrell, S.) (Londres, Reino Unido: Fuel Books, 2010), p. 7.
18 Ibid.
19 Ibid.
20 Ibid.
21 Hodgkinson, H. 'King of Kinky', The Guardian, 11 de septiembre de 2010,
(http:// www.theguardian.com/theguardian/2010/sep/11/john-sutcliffe-
fetish-wear).
22 Jackson, D. 'Miss Doreen' en 'The Domina Files', Domination Directory
International Magazine, p. 88.
23 Ibid.
24 Ibid.
25 Ibid.
26 Ibid.
27 Mistress Anne en Jackson, D. 'The Domina Files', Domination Directory
International Magazine, pp.144-45.
166 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

28 Ibid.
29 Sutcliffe, J. AtomAge magazine (Volume 3) (Londres, Reino Unido, 1970).
30 Jackson, D. 'Jean Fischer: John Willie's Favourite Dominatrix' en 'The
Domina Files', Domination Directory International Magazine , pp. 60-61.
31 Ibid.
32 Jackson, D. 'Jean Fischer' en 'The Domina Files', Domination Directory
International Magazine, pp. 60-61
33 Jackson, D. 'Anne Laurence' en 'The Domina Files', Domination Directory
International Magazine, p. 93.
34 Ibid.
35 Ibid.
36 Ibid.
37 Jackson, D. 'Monique von Cleef ' en 'The Domina Files', Domination
Directory International Magazine, pp. 18-19, 112-13. (Véase la página 19.)
38 Bakersfield Californian, 22 de diciembre de 1965; algunos de los otros
periódicos de EE.UU. que publicaron la noticia el miércoles 22 de
diciembre fueron: Torture For Thrills Set-Up Uncovered', Capital Times
(Madison, Wisconsin); 'SADISM FOR SALE: Torture-Thrill House
Raided', The Morgantown Post (West Virginia); 'Bizarre Torture-for-Thrills
Den Uncovered: Many Sex Sadism Customers Said Well-Known Clients',
Brownsville Herald (Texas). Otros artículos aparecieron en: The Daily
Courier (Conellsville, Pensilvania); The Berkshire Eagle (Pittsburg,
Massachusetts); Raleigh Register Beckley (Virginia Occidental); The
Independent (Pasadena, California); 'House of Torture Raided', Daily Review
(Hayward, California); News Journal (Mansfield, Ohio); El Paso Herald Post
(El Paso, Texas); Sandusky Register (Sandusky, Ohio); 'Torture for Thrills
Operation Uncovered', The Daily Interlake (Kalispell, Montana);
'Nationwide Torture-for-Thrills Operation Uncovered in Mansion', The Port
Arthur News Port Arthur (Texas); Kingsport Times (Kingsport, Tennessee);
Oakland Tribune (Oakland, California), etc.
39 State v. Von Cleef, Et Al., Caso 102 N.J. Super. 102 (1968) 245 A.2d 495,
Estado de Nueva Jersey contra Monique von Cleef y James Albert Beard,
Tribunal Superior de Nueva Jersey, División de Apelaciones. Argumentado
el 27 de mayo de 1968; decidido el 2 de julio de 1968.
40 Ibid.
41 Ibid.
42 Ibid
43 Ibid.
44 Monique von Cleef contra Nueva Jersey (1969), 395 U.S. 814 (89 S.Ct. 2051,
23 L.Ed.2d 728), Monique von Cleef contra Nueva Jersey, nº 837. Sentencia de
23 de junio de 1969.
45 Estado v. von Cleef, Et Al. Caso 102 N.J. Super.102 (1968) 245 A.2d 495, Estado
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 167

of New Jersey v Monique von Cleef and James Albert Beard, Superior Court
of New Jersey, Appellate Division. Argumentado el 27 de mayo de 1968;
decidido el 2 de julio de 1968.
46 Ibid.
47 Ibid.
48 Mistress Michelle Peters 'Monique von Cleef 1925-2005' (disponible en:
http://
content.worldgroups.com/groups/Custom/M/MMPLibrary/moniquevon-
cleef.htm). Nota: Esta cita también puede haber aparecido en la
Autobiografía de Monique von Cleef: Von Cleef, M. The House of Pain: The
Strange World of Monique Von Cleef La reina de la humillación: An
Autobiography and Message to All Human Slaves (Nueva York: Lyle
Stewart, 1973).
49 Mistress Michelle Peters, 'Monique von Cleef 1925-2005'.
50 Jackson, D. 'Monique von Cleef ', 'The Domina Files', DDI, pp. 18-19, 112-
13 (véase p. 112).
51 Mistress Michelle Peters, 'Monique von Cleef 1925-2005'.
52 Von Cleef, M. The House of Pain: The Strange World of Monique Von
Cleef La Reina de la Humillación: Una autobiografía y un mensaje para todos los
esclavos humanos.
53 Jackson, D. 'Monique von Cleef ', 'The Domina Files', DDI.
54 Fuentes anónimas, y ver también: Artículo de David Jackson sobre Von Cleef. Op. cit.
55 Al parecer, Von Cleef renunció a su House of Pain para jubilarse. Sin
embargo, como señala Jackson, en la década de 1990 estuvo dando tumbos
por Holanda, Bélgica, Alemania y Estados Unidos. Hacia 1998 se trasladó a
Ostende, en la costa belga, y más tarde a Düsseldorf con una colega llamada
Lady Jane (ibíd.). Falleció el 4 de febrero de 2005 en Amberes por
complicaciones asociadas a la diabetes. Véase la necrológica de Bert Wibo
'Goodbye Monique von Cleef ' en:
http://content.worldgroups.com/groups/Custom/M/MMPLibrary/
moniquevoncleefobituary.htm
56 Al parecer, murió de cáncer en el hospital en 1990. Ibid.
57 Jackson, D. 'Sadom Bea', 'The Domina Files', DDI, p. 93.
58 Jackson, D. 'Mistress Kenny', 'The Domina Files', DDI, pp. 28-29.
59 Ibid.
60 Se entraba por una puerta lateral, bajando unas escaleras, para llegar a la sala de
recepción y calabozo de Mistress Kenny. Aquí permanecería hasta 1997,
retirándose del negocio por motivos personales tras una larga carrera en la
dominación, y vendiendo su equipo a colegas, pero conservando parte de su
vestuario y pequeñas piezas para su propia colección (ibid.).
61 Jackson, D. "Britta Schmerse", "The Domina Files", DDI, p. 39.
62 Ibid.
63 Jackson, D. "Nicole de Carje", "The Domina Files", DDI, p. 87.
CAPÍTULO IV

EL CONTEMPO
OCUPACIóN Y ARTES DEL
DOMINIO
--�-

dar un paseo por un tabú


Natasha Gornik, fotógrafa afincada en Brooklyn (Nueva York), es
una de las artistas más significativas a nivel internacional en el
ámbito del kink y la dominación. Se describe a sí misma como
una "experimentadora profesional".1 Participa en las escenas que
captura, evitando la posición tradicional del fotógrafo como
objetivo y distante. Su trabajo es muy personal y comprometido, y
Gornik escribe en su blog sobre sus experiencias en "una mezcla
diarística de mis palabras y fotografía sobre comida, sexo y un par
de cosas intermedias".
170 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Una importante colección de imágenes surgió cuando Gornik se


dispuso a participar en la fotografía de la dominatrix neoyorquina
Mistress Alex, que llevaba a su esclavo a Times Square. Lo que
surgió de esa sesión no fue sólo sacar a pasear al esclavo, sino sacar
a pasear un tabú. Aunque las actividades fetichistas y BDSM han
logrado una mayor aceptación y visibilidad en los últimos años, y
la moda se ha visto influenciada por la lengua vernácula de la
dominatrix, la exhibición descarada de su atuendo en público sigue
siendo un tabú. Las imágenes resultantes de la obra de Gornik
revelan las reacciones de los neoyorquinos de a pie con los que se
cruzan Mistress Alex, el esclavo y el fotógrafo, en su viaje por el
metro hasta Times Square, en pleno centro de Manhattan (véanse
las FIGURAS 66 Y 67).

FIGURA 66
Y 67
(OPUESTO)
Artista
Natasha Gornik,
Ama Alex C
esclava
I C II, NYC.
172 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El blog de Gornik sobre el acontecimiento registra "Exhibicionismo":

hay una emoción que se ha ido acumulando durante las semanas previas a
la experiencia y cuando Alex y yo nos encontramos en el ajetreado
mercado italiano de Flatiron se nos queda grabada en los ojos y estamos
hambrientos de ella. En este punto Alex no es sólo una musa, sino una
amiga íntima, así que hay un nivel de comprensión y confianza que me
parece ser ingredientes clave en este tipo de experiencia fotográfica y nos
dirigimos al baño para preparar y es un manicomio en el mercado los
seres humanos como hormigas y una vez en ella se quita su gabardina y
debajo es brillante y negro y látex y apretado y y ella grita dominación y
todo el mundo en la sala llena de gente se da cuenta y siento el cambio de
aire es palpable y claramente alimenta su hambre y justo en frente de mis
ojos ella crece cuatro pies más alto y se eleva por encima de las miradas y
yo inmediatamente me excito con todo esto y la fiesta comienza allí
mismo en el baño de señoras de Eataly. en la esquina de la 23 con la 5
ella le hace ponerse una capucha de cuero negro y un collar y caminamos
hacia el metro y puedo sentir la atención, pero ahora he empezado a
fotografiar y una vez que eso sucede es como si mi entorno se
desvaneciera y me acerco a mis sujetos y es muy concurrido en la ciudad
cerca de la hora punta y hemos elegido un camino superpoblado que nos
da aún más de un alto y estoy completamente centrado en Alex y esclavo,
pero puedo sentir las energías de todos los que se cruzan con y salimos en
Times Square que está más que lleno de gente y Alex y su mascota se
detienen a mirar a mi cámara y yo tomar algunas fotografías a
continuación, hacer una pausa y mirar a su alrededor por un momento y
la gente está tomando fotos de ellos con sus teléfonos y todo el asunto es
tan entretenido y seguimos por las escaleras correa del collar a la mano
enguantada a través de las calles y la tierra justo en el centro de todo y no
estoy tan interesado en las reacciones como lo estoy en nuestras acciones
y ella compra un perro caliente de un vendedor ambulante y lo empuja
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 173

por la garganta mientras Mickey Mouse y Elmo reparten folletos en el


Museo de Cera y esto me encanta, joder.

Característico del trabajo de Gornik, su objetivo no es


(simplemente) documentar, sino captar la esencia y la experiencia
de la escena a través de su cámara. Lo fascinante de las obras es
que la gente lleva elementos de atuendo fetichista como moda
cotidiana en Nueva York, sin atraer una segunda mirada. Los
promotores disfrazados reparten folletos y forman parte del lugar.
Sin embargo, una "Dominatrix", identificable y reconocible por su
atuendo de látex negro brillante y botas altas hasta la rodilla, que
(como dice Gornik) grita visualmente dominación, paseando a un
hombre de negocios encapuchado con una correa, atrae grandes
miradas y reacciones.
Normalmente, los más indignados son los que se excitan
espontáneamente y luego se avergüenzan de su propia lujuria (y de
sus implicaciones para su identidad erótica). Un comportamiento
similar se observa en torno a la homosexualidad, ya que los
activistas antigays más ruidosos a menudo se dan cuenta más
tarde y llegan a reconocer que ellos mismos eran homosexuales. Se
"odian" angustiados por la tumultuosa combinación de su propio
deseo y el choque con sus valores religiosos o culturales.
En las reacciones de los espectadores, Gornik capta la fasci-
nación, el humor, la diversión, el shock, la indignación moral, el
voyeurismo, la envidia, la curiosidad, la evasión. Ante sus ojos y su
cámara, el fenómeno de las personas que se convierten en turistas,
espectadores, voyeurs.
El abanico de respuestas que suscita la Dominatrix alimenta su
propio poder, su disfrute y la satisfacción de provocar esta reacción
alquímica allá donde pisa. A primera vista, nada en la
174 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El atuendo de la dominatrix o de su esclavo está tan lejos de la


aceptabilidad social. Ninguno está desnudo. Ambos están
completamente cubiertos. El esclavo lleva un traje de negocios
clásico, que es el epítome del atuendo de trabajo socialmente
correcto. La dominatrix lleva botas que, aunque en su día
procedían del underground fetichista "bizarro", desde entonces se
han convertido en un básico de la moda. Para determinar el poder
de las respuestas que suscita esta pareja, hay que centrarse en los
significantes que sus atuendos guardan en la mente y la
imaginación de la gente: el látex, la capucha, etcétera.
Mistress Alex y su esclavo no realizan ningún acto abiertamente
sexual, sólo interacciones de Dominación/sumisión. Mistress Alex
pasea a su esclavo con una correa, le da órdenes, se pide un perrito
caliente de un puesto y le da de comer un poco a su esclavo. Es el
mismo comportamiento con el que los neoyorquinos tratan a sus
hijos pequeños, o a los perros, en Central Park. Así que el choque
social está en que se trate así a un "hombre adulto", no en los
actos en sí. Esto se considera humillante para la posición de un
hombre, ya que se supone que un hombre debe estar a cargo y ser
respetado. La Dominatrix subvierte e invierte esta operación,
dándole la vuelta. Es Ella la que manda y es respetada, y es él el
que se ve rebajado. Esto no sólo ocurre visualmente ante los ojos de
los neoyorquinos, sino que el "esclavo" lo consiente claramente y
lo disfruta.
Mistress Alex y su esclavo "sobresalen" y, al mismo tiempo, se
sienten como en casa en la geografía cultural de Nueva York. El
punto de diferencia es, por supuesto, que este tipo de
comportamiento y atuendo normalmente se oculta, a puerta
cerrada. Las Dominatrices de Nueva York operan desde
mazmorras y tocadores BDSM domésticos, que suelen estar sin
señalizar, en lugares discretos, conocidos sólo por quienes
frecuentan y habitan su mundo.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 175

BЕТWЕЕN ТhЕ CrACKs, AND INТO ANOТhЕr


WOrLD
La mayoría no ofrece sexo (en el sentido convencional del
término) como parte de sus servicios, por lo que no entra en el
ámbito de las leyes sobre prostitución. Sus prácticas existen en una
zona gris, pero no suelen llamar la atención de la policía. La
mayoría son inteligentes, profesionales, cuidadosas y éticas en su
trabajo. Sólo en raras ocasiones se produce un problema que llame
la atención.
Sin embargo, la forma en que operan las dominatrices está
directamente relacionada con las leyes jurisdiccionales y su
aplicación. En lugares donde el trabajo sexual está despenalizado,
como en el estado de Nueva Gales del Sur en Australia, las
dominatrices trabajan desde un gran establecimiento de
mazmorras o tienen la libertad de establecer su propio negocio de
propietario-operador desde su casa. Scarlett Alliance señala que
"la ley se introdujo debido a la corrupción de la policía y, al
eliminar a la policía como reguladora, se ha conseguido atajar la
corrupción "3. (Añaden que, en su opinión, la policía es "reguladora
inapropiada" de la industria del sexo). La ley permite que las
dominatrices y otras trabajadoras del sexo tengan acceso a la salud
y seguridad en el trabajo, y que la educación sexual llegue mucho
más fácilmente a las trabajadoras del sexo. Un importante informe
de John Goodwin, del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo (Centro Regional de Asia y el Pacífico), apoya el
modelo de despenalización de lugares como Nueva Gales del Sur,
en Australia, y Nueva Zelanda.4
En otras jurisdicciones donde el trabajo sexual es ilegal, las
Dominatrices no están cubiertas por la terminología y pueden
operar, en términos generales. Aunque hay quien rechaza la idea
de que el trabajo sexual esté impulsado por la demanda, no cabe
duda de que es cierto en el caso de las Dominatrices. Al investigar
la historia de las Dominatrices y cómo las mujeres se dedican a
176 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
esta profesión, un
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 177

Una historia común que se repite una y otra vez es la de hombres


sumisos deseosos de pagar a una conocida para que les domine. Los
hombres fetichistas suelen querer cosas como opulentos abrigos de
piel, botas de cuero hasta los muslos o catsuits para satisfacer sus
deseos. Su adquisición cuesta mucho dinero. Además, algunos
aspectos de la domi- nación requieren habilidades y técnicas
complejas, que exigen formación o experiencia para llevarlas a cabo
con seguridad. El material de bondage también es caro, por lo que es
fácil comprender que se haya convertido en una profesión
especializada. La profesión de dominatrix se creó para satisfacer la
importante demanda (nicho).
En muchos casos, las dominatrices prestan "servicios" que la
novia o la esposa de un hombre no desean, pero que sin embargo
constituyen una profunda "necesidad" en la percepción del hombre.
Como dijo un hombre sumiso:

Intentaba por todos los medios enterrar mis deseos, fingir que no estaban
ahí, pero inevitablemente aparecían y me sentía culpable, entonces
intentaba volver a empujarlos hacia abajo. Pero no puedes, ¿sabes? Forma
parte de ti, de tu identidad y de tu ser. Supongo que es un poco como
cuando alguien gay intenta ser heterosexual. Es difícil vivir así. No es
honesto ni fiel a cómo eres. Así que al final se lo conté a mi mujer.
Estaba aterrorizado y esperaba que quisiera dejarme. Me esperaba lo
peor, me derrumbé y lloré varias veces, explicándoselo todo, cómo
empezó, cómo me afectó. Y sorprendentemente fue muy comprensiva.
No está interesada en azotarme ni en llevar cuero ella misma, pero le
parece bien que vaya a ver a una dominatrix profesionalmente, siempre
que sea dentro de esos límites y le diga cuándo voy. Y creo que ha sido un
gran alivio para los dos. Ella dijo que sabía, partes de ella, de mis
reacciones o fragmentos de conversaciones. Algunas partes le chocaron y
tuvo que asimilarlas. Dice que nunca lo entenderá del todo, pero que me
quiere...
178 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

y veremos cómo va. Y ambos estamos de acuerdo en que ha ido mejor


desde entonces. Parece que ahora estamos en un equilibrio feliz, y han
pasado tres años desde que se lo dije. Salió realmente, supongo que sí.5

En algunos casos, los hombres lo ocultan a su novia o esposa.


Algunos son solteros. Algunos se identifican como sumisos,
esclavos o masoquistas, otros como mariquitas, travestis u otras
identificaciones. La Dominatrix proporciona una mente abierta y
un espacio para explorar una amplia gama de identidades, deseos y
"necesidades" diferentes. Entre sus clientes hay políticos,
abogados, directores generales de empresas, artistas famosos,
obreros y empleados de todas las profesiones y condiciones
sociales. Es discreta y mantiene la privacidad de sus clientes.
La Dominatrix suele operar sin letreros en la puerta.
Escondida, normalmente en un piso, o en un gran "establecimiento"
dentro de un chalet o una nave industrial, que desde fuera parece
completamente "normal". Los clientes de la era contemporánea
obtienen la información de una Dominatrix a través de páginas
web, contactando con una Dominatrix o establecimiento por correo
electrónico o teléfono para concertar una "sesión" (cita). La
dominatrix habla con el cliente sobre sus deseos, necesidades y sus
propias condiciones. Se negocian los límites.
Muchos sumisos que acuden a ver a una Dominatrix describen
la esquina que doblan, las escaleras que suben, la puerta tras la que
se ponen nerviosos. El enfoque arquitectónico forma parte de su
memoria y representa una puerta a otro mundo. Mientras esperan
a que se abra la puerta, se encuentran en el umbral entre su vida
"normal" de presiones sociales y un universo alterado que
pertenece a la Dominatrix, en el que están sometidos a ella y
paradójicamente liberados para reconocer y "ser" su verdadero yo
(oculto).
El fotógrafo Ian Reid captó a una sumisa en la puerta
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 179

umbral de "Mistress Darcy" en Manhattan (ver FIGURA 68). Mistress


Darcy relata la demanda de Dominatrices en Nueva York como
una de las "ciudades más ambiciosas del mundo", en la que los
hombres trabajan duro subiendo la escalera corporativa y
necesitan un respiro del entorno y las presiones:

El sistema nervioso necesita entrar en un estado de reposo de vez en


cuando, y ceder el control bajo la dirección de una mujer hermosa y
poderosa puede ser el antídoto perfecto contra las exigencias de la ciudad
de Nueva York. La mayoría de las veces un esclavo llega listo para jugar,
pero a veces todavía arrastra estrés, distracciones o defensas del mundo
exterior; entonces tengo que facilitarle su propia sumisión antes de que
podamos jugar al nivel intenso q u e me gusta. Por eso el primer
momento es tan importante; aunque nunca sé exactamente cómo se
sentirá una persona cuando entra, puedo determinar su estado de ánimo
casi inmediatamente cuando llega. Por eso, ese primer momento siempre
es emocionante, tanto para mi esclavo como para mí.6

El dominio y la asertividad de la mujer permiten al hombre


liberarse de su papel social habitual de tener que tomar decisiones.
Ella le libera de responsabilidades. Dirige sus movimientos.
Decide su atuendo o desnudez, según el tipo de sesión. Le somete
a actos y procedimientos según su iniciativa. Explora, juega, se
complace en el proceso y el papel. Es libre de perderse en este "otro
mundo", sometido a una mujer poderosa. Ya no es John Smith,
director de la subdivisión del quinto piso de tal o cual empresa.
Durante ese tiempo, sólo es el sumiso, el esclavo, el colegial o el
mariquita de la Ama, según su identificación interna. Su papel
"exterior" se le quita durante un periodo de descanso.

FIGURA 68 (OPUESTA)
Ian Reid, Thrill (Mistress Darcy deja entrar a
su esclava en su discreta guarida), 2013,
Nueva York.
180 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
180 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

EL IDEAL DOMINATrIx Y LOS IDEALES DOMINATrIx


Hay dominatrices de todas las edades, razas y formas. No hay un
"tipo" de mujer que sea Dominatrix. En el transcurso de la
investigación para este libro, la Dominatrix más joven que
encontré tenía 21 años y la mayor 76. (La media de edad se sitúa
en torno a los 25-45 años). (En última instancia, el éxito de una
dominatrix no depende de su edad, sino de su atractivo y poder
eróticos, su intuición de las necesidades de sus clientes, sus
conocimientos, habilidades, técnica y sabiduría, así como de su
marketing pragmático y la gestión de sus clientes.
Cada Dominatrix asume un nombre y una identidad propia,
que suele ser un "súper yo" más que un falso yo. Toma los rasgos y
las ideas de una mujer poderosa que resuenan en ella, y modela su
identidad de Dominatrix de una manera que está conscientemente
en sintonía con el deseo masculino, así como con el suyo propio.
Este papel tiene algo de místico y de experto en el ámbito
psicosexual, que se nutre de influencias históricas y míticas. A
menudo el nombre elegido por una Dominatrix reflejará esto,
evocando su propio ideal romántico de la mujer dominante (y de
sí misma). (Se trata con más detalle en el Capítulo V, "Artes de los
Siete Reinos - Arte de la Mujer Sublime y Poderosa").
La artista Kate Peters emprendió una serie icónica de trabajos
fotográficos sobre las dominatrix, que ocupó los titulares de
periódicos de todo el mundo.7 Su serie "Yes Mistress" surgió a raíz
de un encuentro casual con una dominatrix, que despertó su
interés (véanse las FIGURAS 69-71). Quería ver adónde la llevaría y
si podía dar sentido a su mundo y a las complejas cuestiones
planteadas. Peters afirma: "Quería crear imágenes abiertas y
evocadoras. Mirar más allá de los estereotipos para producir una
serie que fuera psicológicamente convincente para el espectador".
Juegos de rol y fantasía
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 181

forman una gran parte del trabajo de Dominatrix y siempre he


admirado la forma en que un actor puede meterse en otro papel y
luego volver a la realidad en un instante... . ¿Cuánto podría
revelar, si es que puedo revelar algo, detrás de las "máscaras" o son
las propias máscaras las que son más reveladoras?
Como parte de esta obra de arte, Peters había retratado a estas
mujeres fuera de su mundo de mazmorras, colocándolas en un
entorno de estudio fotográfico de luz blanca y brillante, poniendo
su mascarada bajo los focos, iluminando su armadura.
Lo que los retratos de Dominatrix de Kate Peters parecen
revelar es que la Dominatrix no es simplemente una mujer vestida
con un papel, sino que se convierte en la mujer que se propuso
interpretar o "ser".
Muchas Dominatrices experimentadas darán fe de esto; que
con el tiempo, después de más y más "sesiones", ya no estaban
prestando un "servicio" como Dominatrix, sino que se
convirtieron en Ella. Aunque podían despojarse un poco del papel
en su vida "normal", con amigos y familia, esa parte de ellas era
Ella para siempre.
Al principio, cambian entre ellas y su papel de Dominatrix,
como una máscara que se adopta y se quita. Sin embargo, cuando
se les dejó desarrollar su práctica de Dominatrix de forma creativa,
dándoles relativa libertad para desarrollar su propio estilo, llegaron
a disfrutar de partes del papel de Ella, y gradualmente, con el
tiempo, se integraron más. La dominación asertiva que formaba
parte de su papel se utilizó para posibilitar actividades
empresariales o educativas, así como el contrapeso de la crianza
femenina que también forma parte (una parte ignorada) de ser
una Dominatrix.
Los retratos de Peters muestran a mujeres que son dueñas de sí
mismas y de sus vidas, ya sean Dominatrices o no. Tres de los
retratos ilustrados en este libro, de Mistress Absolute, Madame
Caramel y Mistress Jezabel, son Dominatrices londinenses
experimentadas que disfrutan de su trabajo.
182 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

papel. Se sienten tan cómodas bajo la luz del estudio como dentro
de su mazmorra, y su atuendo fetichista individual refleja sus
propios gustos como Dominatrices.
Mistress Absolute lleva su chaqueta de montar favorita de
látex y goma (de Breathless en Londres), con un elegante escote
que expone exactamente todo lo que quiere de sí misma, de pie y
con las manos en las caderas (véase la FIGURA 69). Su identidad de
dominatrix no dista mucho de su identidad en la vida real, y ambas
las aborda con confianza y un sano sentido de la diversión y el
humor. Está realizando un doctorado sobre el tema del cornudo y
ha cambiado su nombre en la vida real por escritura pública para
integrar su identidad de Ama en el centro de su nombre. Mistress
Absolute participa activamente en clubes y eventos de la escena
fetichista (incluyendo la dirección del "Club Subversion" y
vacaciones de Dominatrix en "Domme Trips" con colegas
Dominatrices y sus esclavos).
Madame Caramel es una dominatrix deliciosamente curvilínea
que dirige un club conocido como "Club Látigo Negro" y se
identifica como "Ama Negra Superior" (véase FIGURA 70). Entre
sus aficiones está aprovechar al máximo sus generosas caderas y
nalgas para sentarse sobre los "enclenques" esclavos blancos, que
la adoran.
Mistress Jezabel es famosa entre los sumisos que adoran el look
'al- ternativo', con su intrincado arte corporal y piercings (ver
FIGURA 71). Es muy inteligente y simpática, cursa estudios
universitarios superiores además de ser dominatrix, y se la ve en
eventos fetichistas luciendo a menudo vestidos de goma de látex
personalizados de colores brillantes como rosa, naranja, morado y
turquesa.
Es interesante observar que, al igual que las cortesanas
"disciplinantes del abedul" del siglo XVIII atrajeron a retratistas
como modelos, Mistress Jezabel también atrajo las atenciones de
uno de los grandes
FIGURA 69 Artista Kate Peters, Mistress Absolute (serie Yes Mistress), 20 x 24",
impresión a mano tipo C de edición limitada.
FIGURA 70 Artista Kate Peters, Madame Caramel (serie Yes Mistress), 20 x 24",
impresión a mano tipo C de edición limitada.
FIGURA 71 Artista Kate Peters, Mistress Jezabel (serie Yes Mistress), 20 x
24", impresión a mano tipo C de edición limitada.
186 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

retratistas de la nueva generación en Inglaterra, Stuart Pearson


Wright (véase FIGURA 72). Al parecer, se acercó a Mistress Jezabel
sin saber que era una dominatrix, tras haber visto sus fotografías y
tatuajes en una página web de body-art, y se dirigió a ella para que
modelara para él.8 Como artista del retrato al óleo, Pearson
Wright estaba especialmente interesado en los retos técnicos de
retratar tatuajes en la piel dentro del medio pictórico, así como en
sus cualidades estéticas. El retrato al óleo resultante de Mistress
Jezabel en un marco de formato oval tiene las cualidades del retrato
tradicional, con la belleza contemporánea del nuevo mundo de la
"Diosa fetiche". El cuadro se expuso junto con otros retratos, como
el de la famosa actriz Keira Knightley. No todas las Dominatrices
pueden (ni quieren) vivir con su identidad tan integrada en sus
"vidas reales", y es un reflejo de una sociedad más abierta que
algunas puedan hacerlo mientras cursan estudios universitarios
avanzados o organizan eventos fetichistas en Londres (que cuenta
con una fuerte subcultura BDSM y fetichista que las apoya en sus
intereses y búsquedas). Cuando Kate Peters estaba haciendo
retratos para su serie "Yes Mistress", varias Dominatrices no
pudieron participar o que se mostraran retratos de ellas, debido a
preocupaciones por su privacidad y para proteger a su familia o
conocidos.
de estar expuestos a su trabajo.
Como parte de la investigación para este libro, varias
Dominatrices describieron enfrentamientos o incluso rechazo
total por parte de miembros de su familia cuando "revelaron" su
ocupación. Esto se debe al juicio social de las trabajadoras del sexo
en general, que choca con los valores religiosos y morales, así
como a la ignorancia sobre lo que realmente hace una
Dominatrix.
Existen muchos estereotipos en torno a las Dominatrices,
pocos de los cuales son ciertos. A muchos les interesará saber que
las únicas tendencias reales
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 187

FIGURA 72
Artista Stuart
Pearson Wright,
Retrato de Mistress
Jezabel, óleo sobre
lienzo con marco
oval.

que son ciertas son que las Dominatrices tienden a tener una
inteligencia superior a la media, ser abiertas de mente,
independientes, estar interesadas en la sexualidad y tener fuertes
ideales.
En una encuesta realizada por la socióloga Danielle Lindemann,
se descubrió que el 39% de las Dominatrices de Nueva York
tenían un título universitario o superior.9 Es un tópico (pero hay
algo de verdad en él) que muchas Dominatrices estudiaron o
estudian psicología. Otras asignaturas populares son historia,
literatura, género y sexualidad, y salud y medicina. Dominatrices
con orígenes menos privilegiados,
188 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

que puede haberles disuadido de cursar estudios superiores, muestran


una gran "inteligencia callejera" y suelen tener un alto coeficiente
intelectual. Fuera del mundo académico, las Dominatrices suelen
estudiar trabajo corporal sexológico, tantra, shibari japonés y bondage
con cuerdas al estilo occidental. La gran mayoría tiene formación
médica en reanimación y primeros auxilios básicos.
Los clientes de una dominatrix son, con diferencia, hombres.
Aunque un pequeño porcentaje minoritario son mujeres o una
pareja. (ver imagen de Natasha Gornik - Reino VII)
Las dominatrices se dedican profesionalmente a la dominación
desde distintos ámbitos y trabajos. Los más comunes son cuatro:
una formación médica/terapéutica, una formación
educativa/institucional, una formación teatral/espectáculo o una
formación en artes eróticas/trabajo sexual.
Alrededor del 5% de las Dominatrices nacen varones y son
travestis o transexuales. Aportan su propia experiencia y un punto
de vista único para entender el género y la sexualidad.
Posiblemente lo que más distingue a las Dominatrices es que
son de mente abierta y tienen fuertes ideales. Una proporción
mucho mayor que la población general es vegana o vegetariana, y
lo es debido a sus creencias sobre el trato a los animales. (Como
diría la Dominatrix inglesa Mistress Absolute, irónicamente:
"Bueno, tengo que ser amable con algo"). Las Dominatrices que
comen carne a menudo lo hacen con una conciencia
aparentemente elevada del sacrificio del animal como alimento y
del uso ritual de la carne. Con una tendencia a tener el control,
esto se extiende al ámbito de la comida y lo que entra en su
cuerpo. Esto hace que la vida sea interesante para los chefs y
proveedores de catering de las convenciones de Dominatrix.
Las dominatrices basan sus prácticas BDSM en ideales éticos,
y adoptan prácticas que son "Seguras, Sanas y Consensuadas"
(SSC), o
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 189

Risk-Aware Consensual Kink", que se abrevia como "RACK".


Estos conceptos se basan en el consentimiento informado y la
conciencia del riesgo. Las dominatrices intentan educar e
informar a sus clientes sobre los riesgos y tienen en cuenta la salud
y la seguridad en sus juegos. También suelen rechazar o modificar
determinadas formas de juego teniendo en cuenta las condiciones
médicas, la medicación, el estado físico y la edad de la persona, y
mitigan el riesgo en la medida de lo posible. Como la confianza es
tan importante en el juego BDSM, las Dominatrices se atienen a
un nivel de comportamiento y juicio que fomenta la confianza.
Las dominatrices discuten con sus clientes los límites de lo que
no están dispuestas a "aceptar" en las sesiones. Esto puede significar
evitar marcas. Puede estar relacionado con niveles de dolor, fobias
o contenidos concretos que el cliente no esté dispuesto a recibir.
Lo que resulta atractivo, excitante o productivo para superar los
límites en una sesión para una persona, puede no serlo para otra.
Por ejemplo, ciertos tipos de humillación pueden ser
profundamente excitantes y enfatizar la relación
Dominante/Sumiso para algunos, mientras que para otros puede
ser psicológicamente angustiante en extremo y desencadenar
traumas infantiles. No existe una "talla única" cuando se trata de
dominar a una persona.
Una Dominatrix establece una "palabra de seguridad" con su
cliente, que suele ser una palabra como "Piedad", o utiliza el
"sistema del semáforo", en el que "rojo" significa parar,
"ámbar/amarillo" significa acercarse a un límite y "verde" significa
que todo está bien. A medida que conoce bien a su cliente, este
sistema puede resultar menos fiable, ya que llega a comprender
sus límites, umbrales de dolor, sensibilidades y fobias.
190 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

la formación y la educación de un dominio


Formarse como Dominatrix profesional lleva un año o más, y
normalmente se hace sin cobrar. Aquellos que aspiran a la
ocupación de la dominación profesional a menudo toman un
aprendizaje formal con una Ama establecida de alto nivel, o
dentro de un establecimiento de disciplina. Muchas personas
ajenas al mundo del BDSM se sorprenden al oír que existe algo
parecido a un curso universitario de Dominación. Sin embargo, las
habilidades, la técnica y la comprensión psicológica requeridas por
una Dominatrix profesional ciertamente justifican un aprendizaje
de tal duración, que cubre áreas como el bondage, la suspensión, el
castigo corporal, el travestismo y la transformación, etcétera.
En Australia, las aspirantes a Amas "novatas" suelen hacer
prácticas en una de las "casas" de dominación. Uno de los
establecimientos más conocidos y mejor considerados es Salon
Kitty's en Sydney. En sus 28 años de historia ha dado a luz a un
número significativo de Dominatrices exitosas y talentosas, y
realizar una pasantía allí le granjeó el respeto de colegas y clientes
de todo el mundo.
Salon Kitty's se fundó en octubre de 1985, cuando varias Amas
buscaban un lugar donde llevar a cabo sus sesiones, y se reunieron
con un empresario en una mansión victoriana de la antigua zona
de Victoria Street de Sydney.10 Las casas de bondage habían sido
anteriormente en su mayoría "pequeños locales de mala muerte
escondidos en los suburbios de Sydney". En cambio, Salon Kitty's
pretendía tener un establecimiento estable y profesional,
coincidiendo con una nueva iluminación en lo que respecta a los
servicios psicosexuales en Australia.11
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 191

FIGURA 73
Ama Amanda
Dwyer, dueña de
Salon Kitty's.

Unos cuatro años después de su creación, se hizo cargo de la


propiedad la Ama Amanda Dwyer, que dirigió el establecimiento
durante la mayor parte de su vida útil (véase la FIGURA 73). Había
sido aprendiz de Ama en 1986, y después de viajar al extranjero y
de trabajar en Petersham, Nueva Gales del Sur, como Dominatrix
y sumisa, se convirtió en la propietaria de Salon Kitty's en 1989.12
En 1990 se trasladó al barrio de Surrey Hills, a sólo 6 minutos en
taxi del centro de Sydney.
El establecimiento llegó a ser la casa de dominación más
conocida de Australia, y un campo de entrenamiento para
Dominatrices.

FIGURA 74 (SOBRESALIENTE) "Red


Dungeon Room" de Salon Kitty, Sídney,
Australia.
FIGURA 74
194 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Lo que lo diferenciaba de los demás era la profesionalidad y


limpieza de sus salas, y las excelentes mujeres que trabajaban en
ellas. Dos terrazas victorianas contiguas fueron reformadas y
equipadas especialmente para satisfacer las necesidades de las
dominatrices, las sumisas y sus clientes. Sus cámaras incluían una
famosa "Habitación Roja" de estilo mazmorra, con equipamiento
matizado que incluía una silla de parto, adaptada a tal fin, y un
banco de bondage con rejilla de estiramiento (véase la FIGURA 74).
Otras salas albergaban bondage y disciplina, suspensiones
complejas (la "Sala de Latón"), y algunas de ellas estaban
acondicionadas como un tocador de apariencia realista, además de
un gran armario con uniformes, atuendos de travestismo y
fetichismo, pelucas, zapatos y medias para transformaciones y
juegos de rol. Su propietaria, Mistress Amanda Dwyer, había sido
durante mucho tiempo una activa defensora de la seguridad y el
asesoramiento de las trabajadoras sexuales, e impartía talleres sobre
prácticas seguras y cuestiones de higiene en las actividades
BDSM.13 Las mujeres que aprendían allí estaban, por tanto, bien
formadas en todos los aspectos del BDSM, la seguridad, la higiene
y la esterilización, y las instalaciones contaban con la aprobación de
las autoridades, incluidos los departamentos de sanidad. Sin
embargo, conseguir la comprensión del público y de las
autoridades no fue cosa de un día para otro. Amanda escribió una
columna de consejos para una publicación local, Naughty Sydney,
durante 11 años, hasta que la censura australiana de la época le
impidió tratar temas auténticamente BDSM.
bajo la clasificación de esa publicación en particular.14
El aprendizaje emprendido en Salon Kitty's fue riguroso no sólo
en lo que respecta a la formación, sino también a la hora de
sobrevivir al "orden jerárquico" y a la dinámica de poder que
conlleva un establecimiento de mujeres dominantes, así como a las
elevadas expectativas del aprendizaje profesional. Las mujeres que
querían ser aprendices tenían que solicitarlo formalmente y ser
entrevistadas para evaluar si eran aptas. Las que eran aceptadas
solían renunciar y abandonar
196 LALA
HISTORIA Y LAS
HISTORIA ARTES
Y LAS DEDE
ARTES LALA
DOMINATRIX
DOMINATRIX 195

sólo a medias, o ser en algún momento despedida y recontratada


por Mistress Amanda Dwyer.15
Salon Kitty's cerró en 2013, cuando su propietaria, Mistress
Amanda Dwyer, dijo: "No hay enfermedad, no hay tristeza, no
hay dificultades financieras, sólo es hora de pasar a otra fase de la
vida".16 El equipo de Salon Kitty's se vendió a otras Dominatrices que
trabajaban allí y en una subasta bastante notable celebrada en
Lawson's. Bajo el martillo había artículos que incluían capuchas de
cuero tachonado, instrumentos quirúrgicos enmarcados, frascos de
caña, dispositivos de estimulación eléctrica, esposas de metal, una
picana y un collar eléctrico para perros. Bajo el martillo había
artículos como capuchas de cuero tachonado, instrumentos
quirúrgicos enmarcados, botes de caña, dispositivos de
estimulación eléctrica, esposas metálicas, una picana y un collar
eléctrico para perros, y la propia caja de látigos de Mistress
Amanda.17
El entrenamiento en Salon Kitty's u otros establecimientos
suele consistir en hacer el trabajo de limpieza y esterilización, hacer
recados para las Amas mayores y, en general, ser lo más útil
posible con la esperanza de que una o más Dominatrices
experimentadas tomen al aprendiz bajo su tutela. Las aprendices
van a las sesiones de las Dominatrices experimentadas y las
ayudan pasándoles el equipo. Observan todo lo que sucede y
absorben tanta información y técnicas como les es posible. Se
llevan a cabo sesiones de formación más formales sobre cómo
utilizar un flogger, cómo azotar con vara, cómo administrar un
enema, cómo utilizar dispositivos eléctricos de forma segura, etc.
Con el tiempo, los aprendices van adquiriendo experiencia y
aprenden a usarlos. Sólo con el tiempo los aprendices se
involucran gradualmente más en sesiones de co-dirección junto a
Dominatrices experimentadas, aprendiendo a "mantener el espacio"
en un modo de dominación femenina, participar en la restricción,
el descenso del esclavo, el juego de poder psicológico y el uso de
las técnicas y habilidades que adquieren durante el entrenamiento.
La mayoría de los aprendices también aprenden
experimentando ser un "sumiso", recibiendo ellos mismos los
mismos tipos de tratamiento que las Dominatrices dan a sus
clientes. Se trata de un aprendizaje en los dos extremos del palo.
196 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Recibirían el bastón, además de aprender a bastonearse a sí


mismos.
Muchos aprendices también complementaban su aprendizaje
con la lectura de libros relacionados con las actividades BDSM y la
dinámica de las relaciones, viendo actividades y técnicas en vídeo y
participando activamente en los eventos de la "escena fetichista".
Como diría Domina V:

Mi aprendizaje de Ama fue una experiencia que nunca olvidaré. Creo


que el hecho de haber pasado por un aprendizaje de peluquería cuando
era más joven me ayudó a entender el significado de una formación
disciplinada. Durante mi tiempo allí, vi a muchas mujeres ir y venir.
Muchas de ellas nunca duraron porque su enfoque era demasiado
relajado y era un trabajo duro... pero la formación era insuperable.

Domina V utilizó su formación para convertirse en una


Dominatrix altamente profesional con sus propias cámaras
bellamente equipadas en Londres, y más recientemente en
Brighton. De hecho, Domina V utilizaría ambos aprendizajes -
peluquería y Dominatrix - para informar sus prácticas, operando
(junto con sus prácticas basadas en mazmorras) un "Fluffy
Boudoir" especializado, que ofrece "un lugar seguro para
mariquitas" (ver FIGURA 75). Aporta su experiencia en maquillaje,
peluquería, travestismo, transformación de género y la psicología de
diversas identificaciones sexuales y de género a sus sesiones y a su
trabajo. Algunas Dominatrices también utilizaron Salon Kitty's
para su trabajo y desarrollo más que para su aprendizaje. Mistress
Tokyo es una Dominatrix de renombre internacional que es
particularmente experta en cuerdas japonesas shibari, bondage y
suspensión, látex y juegos médicos (entre muchas otras áreas). Al
principio fue aprendiz en una casa conservadora más pequeña
llamada "La Casa de la Dominación", antes de que

FIGURA 75 (OPUESTA) Domina V en su


mullido tocador - Un lugar seguro para
mariquitas
198 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 76 Mistress Tokyo jugando en su mazmorra, Sydney, Australia.

Más tarde trabajó en el Salon Kitty's de Sídney. Las experiencias


que vivió allí le sirvieron de trampolín para su desarrollo
profesional, y más tarde creó su propio e impresionante espacio de
juego cerca del distrito financiero central de Sídney, que refleja la
evolución de su propio estilo e intereses (véase la FIGURA 76). Su
"Sala Industrial" cuenta con un elegante equipamiento de los años
50, que incluye un auténtico sillón de dentista y un quirófano de
acero inoxidable. Su "Sala de Arte" cuenta con un anillo de
bondage japonés permanentemente instalado y fotografías
artísticas de las creaciones de bondage japonés de la Ama,
captadas por el fotógrafo Lucas Messerer.
Para estas dos Dominatrices, el Salón Kitty's fue un peldaño en
su camino de aprendizaje y desarrollo de su propio estilo.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 199

e intereses dentro del abanico de actividades y especializaciones


que existen en la profesión artesanal.
En Adelaida, al sur de Australia, Fetish Palace (antes "The
Purple Palace") ofrece un riguroso curso de formación de dos años
para aspirantes a Dominatrices. Como informa Mistress Electra
Amore:

Formarse como Ama Profesional es un compromiso de dos años, en el


que la primera parte del primer año se dedica a aprender los fundamentos
de la industria y, básicamente, a estar a disposición de todos los que
trabajan en el establecimiento. Es durante este periodo cuando se
determinará si la dama elegida posee las cualidades necesarias para
convertirse en una Dominatrix Profesional. En la segunda parte del
primer año, se espera que la Ama en formación ayude en sesiones con
otras Amas y empiece a dirigir ella misma sesiones básicas. Si al final del
primer año se han cumplido todos los requisitos, entonces y sólo
entonces se le concede usar un título de su elección, pero nunca antes. El
segundo año es un periodo de tiempo en el que la tutoría prevalece sobre
la formación, y es cuando la Ama en formación consigue establecer su
propio estilo y dirigir sesiones por sí misma.18

Las habitaciones de Fetish Palace están especialmente equipadas


para ofrecer toda la gama de actividades relacionadas con el oficio
de dominatrix, desde el travestismo, el "entrenamiento de zorras",
el culto y la elevación de la mujer, los juegos médicos, los
escenarios de mazmorras y fantasías, el masoquismo y los castigos
corporales (véase la FIGURA 77).
La propia experiencia de Mistress Electra Amore incluye haber
trabajado en Londres y con Lady Riva en Alemania, donde estuvo
expuesta a los matices y prácticas culturales de cada país.
Inglaterra, informó, tiene una escena muy específica de castigo
corporal (PC), con "spankees" femeninas recibiendo castigo y
Dominatrices en el papel de Head Mistress o Work Boss,
administrando la disciplina. Este
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 201

la "escena" tradicional inglesa de CP con el equipo tradicional de


castigo escolar se lleva a cabo además de (y a menudo separada
claramente de) la dominación de estilo mazmorra. Alemania se
centra más en las prácticas y el fetiche del látex y el caucho, y en
los juegos de bondage, que ella incorporaría en su aprendizaje,
añadiendo a sus propias prácticas y experiencia, y a su vez
transmitiría a los nuevos aprendices.
La mayoría de las Dominatrices afirman que su formación no
es simplemente un aprendizaje puntual, sino un compromiso a lo
largo de toda la carrera para aprender y adquirir nuevas
habilidades. Una de las razones por las que tantas Dominatrices
disfrutan trabajando juntas en establecimientos (aparte de los
beneficios de la seguridad y el pragmatismo de compartir costes)
es el rico entorno de intercambio de conocimientos, habilidades e
ideas.
Algunas Dominatrices son autodidactas o tienen experiencia
en la escena del estilo de vida, aunque esto es menos común entre
los profesionales respetados de alto nivel. (Un pequeño número
constituye la excepción a esta regla, sobre todo en Londres, donde
no hay casas en las que formarse debido a las leyes inglesas sobre
el trabajo sexual).
Uno de los problemas del sector es la presencia de las llamadas
"falsas dominatrices", término utilizado para describir a las
mujeres que se instalan con un sitio web, sin formación ni
experiencia, y con muy poca idea de lo que hacen. Estas mujeres
no suelen durar mucho, ya que los clientes esclavos no tardan en
darse cuenta de su falta de experiencia e incompetencia. Como
dijo una dominatrix, "cualquier mujer con un novio diseñador de
páginas web y algunas buenas fotografías puede establecerse
haciéndose pasar por experimentada. Empañan el sector y dañan
el nombre de la profesión".
Esta preocupación por las mujeres sin formación ni
conocimientos que pretenden ser "dominatrices profesionales" se ha
convertido en un problema mayor en la era de Internet. Tampoco
hay una solución fácil al problema. No hay

FIGURA 77 (OPUESTA) Cuntress Gabrielle y


Mistress Electra Amore, Fetish Palace, Adelaida.
202 LAHISTORIA
HISTORIAYYARTE DE LA DE
LAS ARTES DOMINACIÓN
LA DOMINATRIX 203

Ciertamente no existe un organismo regulador de las Dominatrices.


Es una industria clandestina cuyas prácticas son matizadas y
transmitidas por profesionales veteranos, y como tal la experiencia
de prácticas en una casa de dominación o bajo el ala de una
Dominatrix veterana muy respetada forma parte del currículum vitae
de muchas Dominatrices en la comercialización de sus habilidades
y experiencia.
Los esclavos a menudo comentan que buscan a una Dominatrix
cuyo nombre haya estado en circulación durante un tiempo,
habiendo visto su publicidad durante unos años, antes de visitarla.
Algunos comparten sus recomendaciones de boca en boca y a
través de foros de Internet. También se fijan en quiénes son los
contactos y socios de la Dominatrix en su sitio web, para medir sus
alianzas profesionales y lealtades con otras personas bien
consideradas. Examinan su equipo y configuración en su sitio
web, lo que puede dar una indicación de su profesionalidad y
compromiso con su oficio.

espacio y equipo
En el siglo XXI, la profesión de dominatrix es cada vez más
sofisticada en cuanto a equipamiento y configuración. Esto se debe
en parte a la disponibilidad de material BDSM en tiendas y en
Internet. Mientras que antes era muy difícil adquirir capuchas de
cuero y equipo de bondage, Internet y los envíos internacionales
han eliminado las barreras para que las Amas se establezcan
profesionalmente.
Algunas Dominatrices se instalan dentro de un espacio
doméstico o "boudoir", que puede ser preferido por la feminidad
del "espacio de la mujer" como a ella le gusta que se instale, y por su
sentido comparativo de la realidad. A menudo se instalan con un
escritorio o una mesa para permitir escenarios versátiles como
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 203

FIGURA 78
Artista Phil Miller,
Mistress Morrigan en
su mazmorra, 2013.

como Directora o Jefa de Oficina.


Sin embargo, la forma más omnipresente de "espacio de juego"
profesional para una Dominatrix es la "mazmorra". El término se
refiere al entorno de fantasía del encarcelamiento simulado, en el
que la Dominatrix mantiene a su cliente cautivo y a su merced. Es
en parte teatro y en parte espacio de trabajo. Algunas
Dominatrices optan por enfatizar la puesta en escena dramática
como telón de fondo cambiante y estético, mientras que otras
adoptan un enfoque pragmático de su espacio como un taller de
herramientas comerciales con estantes de equipos dispuestos para
facilitar el acceso. No es raro que una dominatrix gaste decenas de
miles de libras en equipo y atuendo.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 205

Los colores "mazmorras" más habituales son el negro, el rojo,


el morado o el burdeos. Están relacionados con la psicología del
color y los efectos excitantes de los tonos rojos, la siniestra
oscuridad del negro y las asociaciones regias y espirituales de los
tonos morados. El artista londinense Phil Miller ha realizado un
trabajo fotográfico sobre el "espacio de juego" de las dominatrix,
revelando los ambientes íntimos de estas mujeres, normalmente
inaccesibles al mundo exterior. Su retrato de Mistress Morrigan la
muestra con un atuendo negro de dominatrix sobre el fondo
atmosférico de su mazmorra con una rueda de bondage giratoria y
una jaula (véase la FIGURA 78). Está de pie, con las manos en las
caderas y un lenguaje corporal dominante. En otras fotografías de
su serie sobre Dominatrices, Miller capta la escondida "Guarida
de la Dama", situada cerca de King's Cross y St Pancras en Londres,
con su equipamiento a medida y su decoración orientalista (véase
la FIGURA 79).
Aunque cada espacio de juego de Dominatrix es individual,
hay algunas tendencias que tipifican la configuración del espacio.
Éstas reflejan los requisitos prácticos de las actividades que se
llevan a cabo en un espacio de juego, así como las convenciones
que han evolucionado con el tiempo. Las piezas de equipamiento
más comunes son las siguientes:

� BANCO DE BONDAGE HORIZONTAL


Para tumbar horizontalmente a un cliente sumiso y atarlo con
correas. Suelen ser de acero para que sean más resistentes y
soporten el peso del cuerpo, con puntos de fijación de correas
de cuero o cuerda para sujetar al sumiso. Entre las variantes
más comunes se encuentran los "estiradores" y los armazones de
acero que se extienden hacia arriba para sujetar más ataduras, o
para elevar las pinzas de los pezones para causar dolor o
resistencia, y para proporcionar un marco de apoyo para
pisotear a los esclavos con tacones de aguja o descalzos.
Muchos bancos bondage
206 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

FIGURA 79 (OPUESTA) Imágenes de mazmorras,


artista Phil Miller, "Lady's Lair", Londres.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 207

están acolchados con cuero o vinilo, que pueden limpiarse


después con un desinfectante. Algunos están tapizados como un
"banco de goma" para jugar con látex y goma, para satisfacer los
fetiches de goma.

� MARCO DE ORIENTACIÓN VERTICAL


La más común es la omnipresente cruz de San Andrés, que
tiene forma de "X", aunque también puede ser angular, y sobre
la que se sujeta al cliente. (Su forma evita la cruz "+" cristiana
de la crucifixión.) Suelen ser de acero o madera. Otra pieza
popular del equipo orientado verticalmente es el poste de
flagelación, derivado del dispositivo histórico utilizado para el
castigo público. Las ruedas de bondage también son populares,
sobre todo en los países asiáticos en los que la gran rueda de un
carro se adaptó tradicionalmente al entorno de la mazmorra, y
en tiempos más recientes se ha convertido en una rueda de
bondage giratoria técnicamente avanzada. Algunas
Dominatrices también tienen una estructura vertical en forma
de "telaraña" a la que se puede atar un sumiso, jugando con el
papel de la Dominatrix como araña femenina y tejedora.

� BANCO DE FLEXIÓN Y DE RODILLAS


El banco de castigo corporal arrodillado ("banco CP") es un
armazón diseñado para colocar las nalgas del sumiso en el aire,
en ángulo para el castigo. (A veces también se utilizan para la
penetración anal, sin embargo, con los hombres es más común
utilizar para este fin un banco, silla o arnés "ginecológico"
colocado hacia arriba, que es un ángulo más cómodo en
general para el juego anal). Suelen estar acolchados, con una
superficie de cuero o vinilo para mayor comodidad, sobre todo
en las rodillas. Suelen tener correas de sujeción de cuero o
puntos de fijación para la cuerda. Más tradicionales
208 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Los bancos de estilo inglés pueden prescindir de las ataduras


en favor del aspecto más realista de un caballo de gimnasio
antiguo. Las variantes del banco inclinado incluyen en su lugar
una picota, o "cepo", para encerrar la cabeza de la víctima a
través de un agujero, junto con sus muñecas, para encarcelarla
y castigarla.

� JAULA
Las dominatrices a menudo tienen una de una amplia gama de
jaulas para adaptarse a sus propósitos y espacio. Puede tratarse
de una jaula grande para pájaros, una jaula de celda de pie, una
jaula horizontal de cuerpo entero para dormir y
encarcelamiento horizontal a largo plazo, o una restrictiva "jaula
para cachorros", por nombrar las formas más comunes.
Algunas jaulas también están diseñadas para la suspensión, de
modo que la jaula puede levantarse del suelo con un
"prisionero" dentro, y su naturaleza oscilante aumenta la
intensidad del cautiverio. También existen diversos tipos de
ataduras, como grilletes, que también pueden fijarse a la pared,
o jaulas de acero para la cabeza, y jaulas para el pene o
dispositivos de castidad, que utilizan el enjaulado. El metal de
acero es el material preferido para las jaulas, por su sensación
de fuerza fría e ineludible.

� SILLA THRONE
Para que la Dominatrix se siente encima, como se explica en la
siguiente sección sobre las "Artes de los Siete Reinos - Arte de
la Mujer Sublime y Poderosa".

� SILLA DE BONDAGE E INTERROGATORIO


Una silla fuerte con correas de bondage para sujetar a la sumisa
a ella, en posición sentada. Suelen tener una base en forma de
V para separar las piernas y permitir el acceso a los genitales.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 209

y la región anal, y aumentando la sensación de vulnerabilidad.


Algunas Dominatrices tendrán un trono multifuncional que se
convierte en una silla bondage, para aprovechar al máximo un
espacio pequeño o un equipo limitado. Mientras que otras
prefieren mantener estas sillas completamente distintas
simbólica y funcionalmente, manteniendo una silla de trono
real para sí mismas, y una silla de bondage e interrogación de
aspecto aterrador para atar a un esclavo. La silla de
inmovilización suele ser de acero, para que un esclavo que "se
agache" mientras sufre dolor en la silla no pueda volcarla
accidentalmente. También existen sillas de madera bien sujetas
para este fin y diseño.

� CAJA/ARMARIO DE PRIVACIÓN SENSORIAL


Se trata de un mueble diseñado para encerrar al cautivo en un
espacio reducido con intensidad psicológica y privarle de sus
sentidos de la vista, el oído, etc. Un elemento de este efecto es la
experiencia de privación sensorial en forma de capullo oscuro o
útero, que puede amplificarse con paredes blandas y acolchadas
que también silencian el sonido. Otras son de superficie dura y
enfatizan la incomodidad física, el aprisionamiento y el
castigo. La ausencia o distancia de la Dominatrix, de ser
"dejado solo", también puede llevarse a casa. La privación de los
sentidos aumenta la sensibilidad y la concentración, de modo que
el tacto, por ejemplo, se vuelve más intenso. Los efectos de la
privación sensorial pueden hacerse más intensos con el tiempo,
produciendo estados alterados de conciencia, estados similares a
la meditación o, paradójicamente, un aumento del miedo. En
la religión chamánica, los chamanes suelen buscar un espacio
similar a una cueva para prepararse para los ritos de trance y
éxtasis; la dominatrix también aprovecha este potencial para
someter a su sumiso a la privación sensorial. Otras piezas de
210 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El equipo utilizado por las Dominatrices para lograr este


efecto son las bolsas para el cuerpo o sacos de dormir, y las
capuchas restrictivas o máscaras de gas. De hecho, las
capuchas de cuero o goma son la forma más común de equipo
de privación sensorial. También son populares las modernas
"camas de vacío" de látex y caucho, en las que la persona está
envuelta en caucho y se le succiona el aire, de modo que queda
inmovilizada con sólo un orificio para respirar.

� MARCO/PUNTO DE SUSPENSIÓN
La mayoría de las Dominatrices "artesanales" tienen algún tipo
de marco de suspensión o punto de suspensión. Éstos están
dispuestos con respecto al espacio particular desde el que
sesionan, en cuanto al tipo de bastidor de suspensión que son
capaces de encajar dentro de su habitación. Por lo general, la
suspensión profesional está hecha a medida en acero para
adaptarse a la altura de los montantes de la habitación.
Algunas Dominatrices pueden utilizar una viga estructural
existente dentro de la arquitectura interna del espacio.
Cualquiera que sea el sistema de suspensión, a menudo se
instala con la ayuda de un ingeniero estructural o un técnico,
teniendo en cuenta la resistencia necesaria. El punto de
fijación y la configuración de la suspensión no sólo deben
superar con creces el peso de la persona suspendida, sino que
también deben tener en cuenta la carga dinámica de una
persona en movimiento. Hay que tener en cuenta los sistemas
de desconexión de emergencia, para bajar a una persona de
forma segura y rápida de la suspensión en caso necesario. Junto
con el armazón o aparejo de suspensión propiamente dicho, hay
un equipo resistente o una cuerda de suspensión y mosquetones
especiales, diseñados para tal fin. El equipo se revisa
periódicamente y se sustituye en un momento determinado de
su vida útil, por motivos de seguridad.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 211

� BANCO/SILLÓN ANGULADO GINECOLÓGICO


Para el juego anal en particular, muchas Dominatrices tienen
un banco o silla ginecológica que está inclinada con las piernas
en estribos para el acceso. Las alternativas a esto incluyen un
"arnés de asiento" suspendido, que suele ser de cuero y de
altura ajustable para el juego anal. Permiten acceder al punto
G masculino mediante la penetración y estimulación anal, y la
posición en ángulo con las piernas abiertas puede dejar a la
persona inundada de sentimientos de sumisión.

� EQUIPO MÉDICO QUIRÚRGICO Y DE TORTURA


SIMULADA
Muchas Dominatrices tienen una sala o área médica especial
en su espacio de juego. Esto refleja tanto la enfermera de
fantasía como los escenarios médicos, que enfatizan la
sensación de "corporalidad" (véase el Capítulo V, "Las Artes
de los Siete Reinos"), y proporcionan un banco de exámenes y
procedimientos, y un área clínicamente estéril para jugar.
Algunos de los equipos médicos comunes utilizados por
muchas Dominatrices incluyen kits de enema, espéculos,
consoladores, agujas estériles desechables, rueda de
Wartenberg, mordazas dentales metálicas, sonidos uretrales
esterilizados profesionalmente, catéteres y otros objetos similares.
Algunos utilizan un banco médico quirúrgico, una silla de
dentista o un banco de conversión ginecológico como equipo
para sujetar a un "paciente" sumiso. El aspecto psicológico del
juego también puede acentuarse mediante el uso de equipos de
inmovilización psiquiátrica, camisas de fuerza y bancos de
inmovilización. Las Dominatrices también suelen coleccionar
material médico "curandero". Las "varitas violetas" (o
"dispositivos de rayos violetas"), por ejemplo, son dispositivos
electromédicos diseñados para curar supuestamente toda una
serie de dolencias médicas de la historia (incluida la dolencia
imaginaria de la "histeria" en las mujeres). Constan de una
212 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
unidad de control
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 213

con un juego de disyuntores, una bobina y un condensador, y


un juego con una variedad de electrodos de vidrio de diferentes
formas. Estos electrodos producen un característico resplandor
violeta-púrpura en la oscuridad y emiten un zumbido cuando
se utilizan, con una sensación de pinchazo y chispas en la
piel.19 Las máquinas históricas de época deben ser
reacondicionadas de forma segura por un experto, como un
electricista especialmente cualificado, y revisadas
periódicamente. Los juegos eléctricos eróticos modernos
también han ganado popularidad, hasta el punto de que ya se
pueden adquirir en los sex-shops habituales, con cajas de
alimentación y una gran variedad de accesorios y almohadillas
conductoras de la electricidad. Uno de los artículos más
utilizados con fines eróticos y de tortura simulada son las
pinzas para pezones, que a menudo se combinan con pesas (que
también pueden utilizarse para sujetar una corbata atada
alrededor de los genitales masculinos en la base de los
testículos).

� EQUIPO PARA CASTIGOS CORPORALES


La mayoría de las Dominatrices tienen una serie de equipos de
castigo corporal, derivados de los castigos históricos y del
adiestramiento de animales. Entre ellos se incluyen látigos,
azotes, bastones, palas, correas (y estrobos), tátigos, fustas, etc.
Muchos intentan reproducir utensilios históricamente exactos
de prisiones o escuelas. Muchos intentan reproducir con
exactitud histórica utensilios de prisiones o escuelas. (Véase el
capítulo V, "Las artes de los siete reinos").

� PEQUEÑOS GRILLETES DE ESCLAVITUD Y SUJECIÓN


Uno o varios tipos de collar de esclavo es una de las piezas más
comunes del equipo de una Dominatrix para su "esclavo" sumiso.
Pueden ser de cuero (lo más habitual), goma gruesa o metal.
Algunos están diseñados para restringir la cabeza y el cuello en
214 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
una posición determinada, conocidos como "collares
posturales". Pueden ser
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 215

utilizarse con correa, acentuando la relación de adiestramiento


de forma animalista.
Otras piezas del equipo de esclavitud son las esposas para
muñecas y tobillos, normalmente de cuero o de acero
(incluidas las esposas de policía o los grilletes pesados). Se
utilizan barras metálicas para forzar la apertura de las piernas.
También son populares las chaquetas de cuero o goma, o los
trajes corporales, para intensificar la sensación de
aprisionamiento y sumisión. Las mordazas bucales tienen
diferentes formas y formatos, como mordazas de bola,
mordazas de broca, mordazas inflables, etc. Las mordazas
frontales se suelen utilizar cuando el esclavo está tumbado boca
arriba, para poder soltarlo rápidamente por delante si tiene
dificultades para respirar. Cuando un sumiso está amordazado
de tal forma que no puede comunicarse, se utiliza una señal
especial (gesto con la mano) para indicar que hay algún
problema. Cuando un esclavo está amordazado y atado, la
Dominatrix tiene mucho cuidado de no salir nunca de la
habitación con él en ese estado, por si tiene alguna dificultad.

� TRAVESTISMO Y DISFRACES EXÓTICOS


La mayoría de las Dominatrices tienen un guardarropa
considerable tanto para ellas como para sus clientes. Esto
incluye elementos de lencería, medias, zapatos de tacón de
aguja y botas fetichistas, y prendas de goma de látex o cuero
fetichistas, como faldas, catsuits, corsés, etcétera. También son
habituales los disfraces y uniformes, como los de criada
francesa, uniformes escolares y uniformes de enfermera. Una
zona de pelucas y maquillaje cosmético con paquetes de
pestañas y pinceles y aplicadores esterilizados subraya la
transformación del "cambio de imagen". Estos espacios ponen
de relieve las artes femeninas de la cosmética, los perfumes y
las herramientas de seducción erótica.
216 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Esta lista no pretende ser exhaustiva: siempre hay piezas de


equipo individual y subespecializaciones que las Dominatrices
practican. Sólo pretende dar una idea de algunas de las formas
más comunes de equipo utilizado por las Dominatrices en la
práctica de sus "Artes del Reino".

Notas finales
1 Natasha Gornik, véase el sitio web: http://www.natashagornik.com/about-contact/
2 Agradecimiento a David Jackson, de la revista DDI, que utilizó esta frase.
3 Alianza Scarlett (http://www.scarletalliance.org.au/laws/nsw/).
4 Goodwin, John. Sex Work and the Law in Asia and the Pacific: Laws, HIV
and Human Rights in the Context of Sex Work', UNDP Asia-Pacific Regional
Centre and UNFPA Asia-Pacific Regional Office, in partnership with
UNAIDS, Asia Pacific Network of Sex Workers and others (2012)
(viewable at: http://maggiemcneill.files.wordpress.com/2012/04/hiv-2012-
sexworkand- law.pdf ).
5 En conversación con el autor.
6 En correspondencia por correo electrónico con el autor.
7 Llewelyn-Smith, J. 'Tough love: the lives and times of the Dominatrix' en el
Telegraph 13 de diciembre de 2009.
(http://www.telegraph.co.uk/culture/6798038/ Tough-love-the-lives-and-
times-of-a-dominatrix.html) y Williams, H. 'Unleashed: The secret world
of Britain's Dominatrices' en The Independent 20 de noviembre de 2011.
(http://www.independent.co.uk/life-style/love-sex/fanta- sies-
fetishes/unleashed-the-secret-world-of-britains-dominatrixes-6263209. html)
8 En correspondencia por correo electrónico con la autora, Mistress Jezabel.
9 Lindemann, D. citado en Glass, C. 'The Dungeon Economy', New York
Press, 2 de marzo de 2011; véase también su libro Lindemann, D.
Dominatrix: Gender, Eroticism and Control in the Dungeon (Chicago:
University of Chicago Press, 2012).
10 Información del sitio web de Salon Kitty
(http://www.salonkittys.com/salonkit- tys/about.shtml#aa).
11 Ibid.
12 En correspondencia privada por correo electrónico con Mistress Amanda
Dwyer de Salon Kitty's, Sydney.
13 En una etapa anterior de su carrera, Amanda Dwyer publicó el Manual para
trabajadoras del sexo, financiado por el Gobierno, para el SWOP (Sex
Workers Outreach Project).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 217

educación y asesoramiento sobre prácticas seguras y cuestiones de higiene en el


BDSM. Dirigió talleres para SWOP y otros grupos en los que enseñaba a las
trabajadoras del sexo prácticas seguras de BDSM. Fue "portavoz" de la New
South Wales Parlour Industry Association a principios de la década de
1990, en representación de la industria del sexo en Nueva Gales del Sur, y
siguió participando en calidad de asesora de varios miembros del Parlamento
australiano en cuestiones legislativas.
14 En correspondencia por correo electrónico con Mistress Amanda Dwyer de Salon Kitty's.
15 Investigación personal y conocimiento de numerosas Dominatrices de Salon
Kitty's y ex-Salon Kitty's.
16 Sitio web de Salon Kitty (http://www.salonkittys.com/), consultado en agosto de 2013.
17 Subasta Lawsons, 'Salon Kitty's' 12 de abril de 2013
(http://www.lawsons.com.au/asp/
searchresults.asp?explicit=true&pg=1&st=D&sale_no=7926A&ps=100&).
18 En correspondencia privada por correo electrónico con Mistress Electra
Amore de Fetish Palace, Adelaida.
19 Consulta el sitio web Nick and Morphia para obtener información sobre las
varitas violetas (http://www. nickandmorphia.com/indexHow.asp).
218 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

CHAP TER V

LOS SIETE ARTEs rEALM

--�-

Las propias Dominatrices a menudo ofrecerán una lista


abrumadoramente larga de la A a la Z de áreas y actividades a las
que se dedican, enumerando todo tipo de prácticas y fetiches. Otras
Dominatrices se especializan en áreas particulares de las que
disfrutan y tienen formación especializada y equipo para
atenderlas, centrándose en un nicho dentro de un nicho.
Después de observar y participar con Dominatrices
profesionales durante cuatro años, surgió un patrón distintivo de
prácticas y variaciones sobre estos temas. Las he caracterizado
como las "Siete Artes Reales" del oficio de Dominatrix:
216 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

� REALM 1
El arte de la mujer sublime y poderosa

� REALM 2
El arte de someter al hombre

� REALM 3
El arte de esclavizar, atrapar y encerrar

� REALM 4
El arte de la disciplina, el adiestramiento y el castigo

� REALM 5
El arte de lo corporal y lo "extracorporal

� REALM 6
El arte del travestismo y la subversión

� REALM 7
El arte del fetiche y la fantasía

--�-

Las imágenes que acompañan a Realm 1-6 son obra de Lucina


Nathanael y Nuît d'Or, artistas visuales, jugadores y amantes,
afincados en Londres. Ellos escriben:

LUCINA NATHANAEL: "Si se presentara como basado en una


colaboración artística resultaría extraño, ya que de alguna manera es
una historia a medias. Hemos colaborado artísticamente porque se ha
convertido en una expresión de nuestra relación. Nuestra relación se
convirtió en amor nacido de un encuentro, cuya naturaleza es un tema
clave de este libro (el macho busca a la dominante
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 217

mujer, la hábil dominatrix utiliza su arte y su poder, baja al


hombre en sumisión, etc. la relación resultante se basa en múltiples
conexiones, la colaboración es una expresión de y desde nuestra
relación)".

NUÎT D'OR: "La génesis de nuestra colaboración es doble: Como artista


y dominatrix, rápidamente me propuse cultivar y guiar el talento
de lucina como fotógrafa. Por mi parte, lucina ha sido tanto mi
musa como mi sumisa/mentora/amante y las imágenes que resultan
de nuestras sesiones son 'huellas' y 'momentos suspendidos' en un
medio nuevo para mi práctica como artista visual."

El par de imágenes Realm 7 son de la artista afincada en Brooklyn,


Nueva York, Natasha Gornik, y documentan una experiencia
íntima con una pareja de Domme Jaguar, con sede en Ciudad de
México, de la que reproduzco un fragmento del texto que la
acompaña:

NATASHA GORNICK: "Sumisión... la habitación olía a sexo y no


se había tenido sexo era el olor de la sumisión y la dominación y
querer y recibir y dar y fetiche y mirando y la intimidad y la
confianza y me siento aquí en mi pequeña silla verde mirando las
imágenes en la pantalla de mi ordenador grande y llegar a uno y
inmediatamente empiezo a dolerme y a palpitar y mis párpados se
vuelven pesados y mis antebrazos flaquean y me emociono tanto y me
pongo tan inmensamente cachonda y vuelvo al momento en que lo vi
con mis ojos y mi respiración había sido pesada como la de ellos y lo
deseaba tanto que no sé qué...". . ."
��
rEALM 1
el arte de la mujer sublime y poderosa

En el corazón de la dominación femenina está el elevado estatus de


la Dominatrix y su posición de autoridad femenina. Las
dominatrices encarnan a mujeres sublimes que imprimen su poder,
atractivo y conocimientos especiales a los hombres. (Como dicen las
sirenas, "todo lo que sucede en esta fértil tierra, lo sabemos"). La
Dominatrix es, en cierto sentido, una hechicera de lo psicosexual.
La Dominatrix utiliza un nombre que es a la vez seudónimo,
nombre artístico y alter ego. Protege su anonimato y su identidad
en la vida real, al tiempo que le permite vivir una superversión de
su identidad.
y desarrollar su identidad de Dominatrix.
Entre los títulos más frecuentes se encuentran Mistress,
Maîtresse, Herrin o Lady; títulos formales de Madame, Miss, Ms
(o Mz); o de Domina, Goddess, Empress, Queen; que denotan un
cierto tipo de énfasis dentro de su papel y sus prácticas. Los
nombres elegidos a menudo tienen un sabor místico femenino,
elementos exóticos o extranjeros, y un acento de poder.1
Al construir un nombre, una Dominatrix puede recurrir a la
mitología, a personajes de la literatura y el cine, a nombres
relacionados con su filiación cultural, así como examinar el sonido y
las cualidades escritas de su nombre. El uso de mayúsculas en la
primera letra de Dominatrix es un elemento muy importante de
"Su" dirección.
Junto con su título y nombre de Dominatrix, construye un yo
en su estilo adoptado, sus imágenes fotográficas y escritos de
autoexpresión y autopromoción, en los que puede hacer hincapié
en intereses y habilidades particulares, y atrae a los clientes a su
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 219
red.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 219

Por parte del hombre, al entrar en contacto con una


Dominatrix, en su espacio de juego y ofreciendo tributo (dinero),
deja al descubierto su deseo y, con sus acciones, reconoce el poder
de la sublime mujer sobre él. Se pone en sus manos, en un gesto
de gran confianza.
La Dominatrix se sitúa por encima de él en estatus y poder.
Ella puede sentarse literalmente en una silla de trono, enfatizando
su elevación. Como mueble ritual, el trono se remonta muy atrás
en la historia, al asiento que ocupaban las diosas en los templos y
santuarios del mundo griego y romano, y de muchas otras culturas
de todo el mundo. Su apariencia juega con asociaciones regias,
reverentes, autoritarias y espirituales, en las que resuenan y
repican los arquetipos femeninos: Noble Dama, Emperatriz,
Guerrera, Diosa, Reina.
El ritual de un hombre que se presenta ante una Dominatrix -
sintiendo la energía de su poder en la habitación, arrodillándose
vulnerable ante ella, de una forma que subvierte los roles sociales
de género establecidos- es suficiente en sí mismo para causar
efectos de profunda excitación y anticipación en el hombre que se
somete. Por lo general, ordena al hombre que se desnude, de
modo que quede completamente vulnerable ante ella. Su
excitación visible evidencia el poder de Ella sobre él.
La dominatrix tienta al hombre. La palabra "tentar" está tomada
del personaje de Tántalo en la mitología griega, un hombre que fue
castigado con fruta madura colgando justo fuera de su alcance y
en un charco de agua que se retiraba cuando iba a beberla, para
toda la eternidad. La Dominatrix es como una fruta madura fuera
de su alcance, encima de él, tan cerca que puede olerla, lo que
aumenta aún más su deseo por ella.
Hay diferentes formas de poder que una Dominatrix explota o
enfatiza, ya sea su belleza física, sus curvas de mujer, su fuerza
física, su conocimiento místico y su habilidad para intuir
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 221

sus deseos y necesidades mejor que él, y de hecho un cóctel de


estos ingredientes constitutivos.
La Dominatrix proyecta su fuerza mediante su lenguaje corporal
animal y sus posturas. Cuando habla, lo hace con la voz de la
dominación (ya sea alta e imperativa, o confiadamente calmada e
instructiva). Cuando se mueve, lo hace controlando la interacción
entre cercanía y distancia, el poder de la intimidad y el poder del
deseo.
Su estatus elevado también puede ser paralelo a la altura en
estatura física, llevando zapatos de tacón alto o botas, anulando o
anulando la discrepancia física entre la altura del género femenino
y masculino. El zapato es también en sí mismo un objeto fetichista,
con tacón de aguja, que la dominatrix utiliza con un efecto
elevado.
Lleve lo que lleve o sostenga lo que sostenga, no sólo está en el
equipo o atuendo en sí, sino en la forma en que lo lleva y lo posee,
su confianza y fuerza interior, sabiduría y belleza reflejadas hacia el
exterior, ahí reside el poder de la Dominatrix.
A menudo se hace referencia a una Dominatrix como una
"mujer superior", que posee características alfa. Está elevada en la
jerarquía y mira al macho sumiso por encima del hombro. En
todos los animales sociales, la jerarquía afecta al comportamiento,
por lo que los miembros inferiores alteran su mirada y su posición
en presencia de los miembros de mayor estatus, un efecto que la
Dominatrix utiliza en su propio reino para imponer la sumisión.
La Dominatrix experta puede determinar la posición y el
estatus del hombre que tiene delante mediante la inspección, el
interrogatorio, la intuición y el juicio. Lo mide, física y
psicológicamente, analizándolo y calculando cómo jugará con él,
cómo lo utilizará y cómo lo desarrollará, y lo que percibe que
"necesita".
Mantiene al hombre bajo su hechizo, en la espera y la
inquietud, en el deseo y la devoción crecientes de estar bajo el
poder, la autoridad y la sabiduría femeninos.
FIGURA 80 (OPUESTA) Lucina Nathanael,
Venus en pieles o el homenaje de Maîtresse
Nuit a La mujer ideal de l von Sacher
Masoch, 2013.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 223

��
rEALM 2
el arte de rebajar al hombre a la sumisión

Complementario a la elevación de la Dominatrix como mujer


sublime, está el rebajamiento posicional del hombre, en servicio y
obediencia a Ella. Hay una serie de papeles de estatus inferior en
los que se le puede incluir, y entre las formas más comunes están
la de sumiso, sirviente, mariquita o esclavo. La psicología de cada
individuo y la interacción con una Dominatrix en particular
funcionarán a través del poder
dinámicas y relaciones de roles que se sugieren.
Es importante destacar el balancín en juego, que oscila como
las pesas de la justicia. En un lado de la balanza, la dominatrix
subraya el bajo estatus del hombre. Por otro lado, lo privilegia con
sus atenciones y su proximidad, invirtiendo su energía en entrenarlo.
De este modo, se convierte en un "esclavo privilegiado". El arte de la
Dominatrix consiste en manejar y equilibrar estos dos elementos: la
rebaja de estatus y el privilegio de la proximidad.
Algunos de los métodos para rebajar al sumiso incluyen
elementos de humillación, un terreno que hay que pisar con
cuidado y pericia, ya que lo que para algunos es un juego de rol
sexualmente excitante y excitante, para otros puede ser realmente
hiriente y psicológicamente dañino. Hasta qué punto y de qué
forma ella le rebaja de estatus es un tema que se deja a la intuición
y/o al acuerdo consensuado, y el sumiso, en última instancia,
conserva el poder y consiente su trato hasta el punto en que él
puede utilizar una "palabra de seguridad" ("piedad" o "rojo" se
utilizan habitualmente para detener el juego), o incluso
abandonarla en la medida en que él sea un cliente.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 223

Utilizando su intuición y su comunicación, evalúa hasta dónde


puede o debe empujarle y jugar con él. Hay cosas que a una persona
le encantaría hacer, pero que a otra le resultaría muy embarazoso y a
otra demasiado difícil, debido a las diferencias psicológicas que
surgen por los efectos de la educación y los tabúes culturales.
En el extremo más suave del espectro, ella puede burlarse y
mofarse de él, recordándole verbalmente que es su "sumiso" o
"esclavo", que tiene que obedecerla y demostrarle su valía. En el
extremo más extremo del espectro, un hombre puede ser sometido
a un intercambio de poder muy intenso en el que se le degrada a un
humilde estatus de desprecio, que es adecuado para aquellos que
encontrarían esto poderosamente erótico y paradójicamente
placentero.
Este juego no sólo es individual, sino también cultural.
Cualquier dominatrix experimentada informará anecdóticamente,
y el cliché corre (pero algo de verdad hay en ello, aunque sea
políticamente incorrecto), que los clientes de etnia india a
menudo desean estar en servidumbre para lavar, masajear y adorar
los pies, ya que los pies tienen una asociación especial en la cultura
hindú como algo bajo, y la sumisión se demuestra por las castas
inferiores, o hacia los de mayor jerarquía, gurús, dioses y diosas,
tocando los pies.
Los clientes franceses pueden disfrutar del "juego del
cachorro", en el que son tratados como un caniche u otro perro,
normalmente regañado y reprendido, pero sobre el que se
prodigan atenciones, culturalmente por parte de las mujeres. Una
fantasía común en Inglaterra entre una generación particular es el
juego de rol de la escuela pública, derivado de la experiencia
genuina de la infancia y la adolescencia, para ser tratado como un
colegial, regañado y castigado por una figura de Head Mistress o
Governess.
Tales deseos constituyen sólo una pequeña parte del juego y los subtipos de
224 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

perfiles de clientes, y no deben tomarse como clasificación de una


nación. Sin embargo, ofrecen una visión del grado en que los
elementos de humillación tienen una base cultural e informan el
juego psicosexual.
El deseo rara vez es políticamente correcto en su constitución.
Crece en el terreno fértil de lo prohibido, lo temido, lo vergonzoso y
lo tabú, en su tipo de suelo local. La dominatrix media entre elementos
culturales y viajes en el tiempo, trayendo ecos de voces y accesorios del
pasado al presente. Puede percibir la resonancia en las reacciones, los
ojos, la respiración, la docilidad, la excitación y la excitación de su
sumiso.
El rebajamiento y la humillación del sumiso conllevan un
envejecimiento inverso y una especie de infantilismo. La
Dominatrix coloca a su sumiso por debajo de Ella para que reciba
instrucción y aprendizaje (como un aprendiz de su Superiora o un
niño de su madre).
Al hacerlo, ella lo desaloja de la antigüedad y los roles sociales
normales de la vida cotidiana, un levantamiento de la
responsabilidad y las expectativas sociales depositadas en un hombre
dentro de su cultura. Despojado de control y autonomía, su único
propósito pasa a ser recibir, escuchar, obedecer, responder, ceder,
sentir, experimentar. Puede disfrutar de la presencia de su
feminidad y sexualidad, excitarse y sentirse envuelto e inmerso en
su poder.
Su papel de subordinación a Ella se simboliza cuando la
Dominatrix le pone el collar, de forma ritual, al principio de la
sesión. Puede ponerle una "capucha de cojo" de cuero, que ayuda a
despersonalizar al hombre en objeto y esclavo, logrando un poderoso
efecto transformador.
Los elementos del juego de roles que enfatizan la posición baja
del hombre pueden incluir "posiciones de esclavo", en las que se le
entrena para adoptar posiciones específicas de servidumbre.
Arrodillarse con las manos hacia arriba sobre el regazo y la cabeza
baja es una posición de esclavitud habitual. Otra es estar
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 225

FIGURA 81 (OPUESTA) Lucina Nathanael,


Heel, 2011. Edición limitada de impresión fotográfica.
226 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
226 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

colocado a cuatro patas con las piernas abiertas, como un animal


listo para ser inspeccionado.
Su posición humilde puede acentuarse tumbándolo
completamente postrado en el suelo con las manos hacia arriba. El
simbolismo de la colocación de las manos tiene el precedente
histórico de mostrar las manos sin armas, vulnerables,
demostrando sumisión. En el ritual religioso, las manos hacia
arriba, hacia el cielo (y la Diosa), representan la disposición a
recibir y experimentar la conexión con lo divino.
Una Dominatrix dirige a un hombre a la sumisión no sólo en
su postura, sino también en sus acciones. Puede ponerle a prueba
haciéndole trabajar en tareas de baja categoría (pero relacionadas
con ella y a su servicio). Puede hacer que su "hombre rebajado" le
pele uvas y se las dé de comer. Puede obligarle a mantenerla fresca
a ella y a los invitados abanicándose con un gran abanico
ornamentado, mientras va vestida como una esclava.
Puede hacer que le sirva a ella y a sus amigos comida o
cócteles, o que abra la puerta con un disfraz de mayordomo u otro
atuendo. Puede cosificarlo convirtiéndolo literalmente en un
mueble, como una mesa humana o un escabel humano. Puede
colocarle en una postura fija y retarle a que se mantenga
congelado en esa posición, como una obra de arte escultórica, para
exhibición y entretenimiento.
Puede utilizarlo como "criado", vestido con un delantal y un
atuendo de su elección, para tareas como limpiar y quitar el polvo.
Después inspeccionará su trabajo y evaluará su rendimiento y
aspecto. Una dominatrix puede utilizar a su sumiso como
masajista, dándole masajes en los hombros, la espalda o los pies.
Además de la servidumbre, la Dominatrix acentúa su
inferioridad física, pisoteándole literalmente. Algunas
Dominatrices son capaces de pisotear a un hombre con sus
tacones de aguja, con
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 227

reducción de su peso agarrándose a un soporte, y precaución y


conocimientos especiales utilizados en la colocación de su peso en
relación con los órganos y la caja torácica de su sumisa.
A algunos sumisos incluso les gusta que luche con ellos una
Dominatrix fuerte, y fantasean con ser dominados por una mujer
poderosa. Utilizando su fuerza y sus agarres, le obliga a ceder y, al
hacerlo, demuestra su superioridad física sobre él. La demostración
de su fuerza superior suele tener lugar al principio de la sesión,
marcando la pauta para la sumisión del hombre perdedor a la
dominatrix ganadora.
Una Dominatrix puede enfatizar su superioridad en términos
de selección de pareja, cornudando a su sumiso, describiendo
cómo no es digno como pareja sexual para ella, y relatando sus
hazañas con parejas que ella desea y selecciona, que puede ser un
hombre dominante fuerte al que se refiere como "toro".
A algunos sumisos les excita ser utilizados como esclavos
financieros y "cerdos del dinero" para proporcionar dinero y
regalos a su Dominatrix superior, para ganarse su atención y
afecto, su sonrisa y su deleite.
Dentro de los juegos de degradación intensa, algunas
Dominatrices utilizan a un hombre deseoso y dispuesto como
"esclavo de aseo", lo que sería chocante para muchos miembros
del público, pero atrae poder y excitación precisamente por la
inaceptabilidad social y el tabú. Para estos esclavos es el máximo
privilegio recibir del propio cuerpo de una Dominatrix de esta
manera. Al recibir su saliva, su orina (llamada "lluvia dorada"),
etc., el esclavo comparte lo que ha salido de los orificios sagrados
de su cuerpo.
Algunas Dominatrices también pueden utilizar esclavos para
su propio placer sensual, haciéndoles realizar "servidumbre oral" o
para llevarla a
228 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

El orgasmo. Esta no es un área en la que participen muchas


Dominatrices, debido a la intimidad del acto, y en la historia más
reciente la preocupación por las infecciones de transmisión sexual
ha alterado en gran medida el grado y el método en el que esta área
del juego se lleva a cabo, disminuyendo su popularidad entre la
mayoría de las Dominatrices y aumentando el uso de barreras
dentales (una fina hoja de látex del tamaño de un pañuelo de
papel extendida sobre la zona de la vulva), como parte de las
prácticas de sexo seguro. Más comúnmente, se puede ordenar a un
esclavo que "adore" una parte del cuerpo de la mujer, y que
masajee sus pies, o bese sus pies, o piernas, como ella le indique.
Al sumiso también le puede gustar que le enseñen su posición
más baja delante de otros, o incluso en público. Algunos de los
"eventos especiales" que las Dominatrices organizan con frecuencia
son las fiestas de té Dominatrix, en las que un esclavo puede ser
objeto de burlas, recibir órdenes, ser obligado a obedecer y
complacer a varias Dominatrices, o ser forzado a interactuar entre
sí.
A algunos esclavos les gusta ser humillados públicamente
delante de los demás. Pueden organizarse juegos como simulacros
de "subastas de esclavos" o "caza de cazadoras/esclavas" (una
especie de paintball unidireccional). O se le puede dominar
públicamente saliendo de compras, cenando o en un bar, dándole
órdenes y haciéndole caer y adorar su pie con besos.
Su posición servil provoca una excitación erótica por el
derrocamiento subversivo de las normas sociales y por la muestra
de devoción inquebrantable a la mujer sublime.
��
rEALM 3
EL ARTE DE LA BONDAgE, LA ENTRADA Y EL ENCLAvAMIENTO

Para amplificar los efectos de poder sobre un sumiso, la Dominatrix


utilizará con frecuencia formas de esclavitud y aprisionamiento, ya
sean físicas o psicológicas.
Uno de los símbolos más omnipresentes de la esclavitud es el
collar de esclavo, que la Dominatrix pone a su cliente,
simbolizando la transición a la esclavitud. Además, la Dominatrix
obtiene el consentimiento verbal de su esclavitud y obediencia a
Ella.
Estar sometido no es sólo estar atrapado, sino "pertenecer" y
"ser retenido". Hay un elemento de propiedad en el acto de
esclavitud: "Ahora eres mío. Me perteneces (a mí)".
En este sentido, la esclavitud puede ser casi puramente
psicológica y simbólica, acordada y comprendida por el sumiso, y
ser suficiente para retenerlo y atarlo a la Dominatrix y a su reino.
Sin embargo, a menudo la Dominatrix (y su cliente) utilizan formas
más intensas y restrictivas de esclavitud física y emocional. Se
pueden atar grilletes al hombre: arneses, esposas para las muñecas,
esposas para los tobillos, etc., en materiales tan diversos como
cuero, goma, cuerda, seda, hierro o cadena.
Muchas formas de esclavitud se derivan de contextos
carcelarios. Los grilletes y los grilletes pesados, que se han utilizado
tradicionalmente para mantener a los prisioneros de alto valor en
una esclavitud ineludible, tienen un fuerte efecto psicológico, con
la fuerza sólida y la frialdad del hierro.
230 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

sobre la piel. También pueden utilizarse las esposas de la policía y


de los detenidos, guardadas bajo llave.
Muchas Dominatrices también utilizan celdas en las que
retienen a sus prisioneros, o jaulas para esclavos, que pueden ser
verticales, horizontales o con forma de jaula ornamentada.
Una de las formas más comunes de bondage es el cuero, que
constituye una gran proporción de los collares y esposas que llevan
los esclavos. Las correas de cuero se colocan cómodamente
alrededor del cuerpo del hombre, se tensan y se sujetan con un
cinturón, o incluso se bloquean. También se utilizan camisas de
fuerza, con asociaciones carcelarias y psiquiátricas. Los brazos de
un hombre pueden estar sujetos a la espalda, lo que le impide
defenderse y le hace más vulnerable, y no puede tocarse a sí
mismo.
El cuero puede utilizarse para sujetar a un sumiso a un mueble
o equipo, como un "banco bondage" en el que está tumbado y
sujeto, sin poder moverse; atado, sentado en una silla de
interrogatorio, o arrodillado e inclinado sobre un banco de azotes,
o de pie con las piernas abiertas sobre una rueda bondage o una
cruz de San Andrés.
En este tipo de esclavitud, con la libertad de movimiento
restringida, el sumiso experimenta una sensación de impotencia y
vulnerabilidad que favorece la sumisión, de modo que siente que
no tiene otra opción que dejarse llevar y aceptar su destino a
manos de la Dominatrix, aceptar que está completamente a su
merced. La Dominatrix puede inspeccionar cada parte de él, jugar
con él, aplicarle estímulos en forma de dolor o placer, y como está
sometido, no puede detenerla. En la esclavitud, acepta que ya no
tiene el control y se ve obligado a consentir y ceder. Mientras está
atrapado en la esclavitud, paradójicamente es libre. Es decir, libre
para olvidarse de las preocupaciones, inquietudes y tensiones
laborales y familiares. Libre para centrarse en el momento, en sus
respuestas y experiencias psicológicas y físicas.
FIGURA 82 Nuit d'Or, le Noir 9, 2011. Impresión fotográfica en edición limitada.
232 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Algunas formas de bondage implican lo que se conoce como


"depri- vación sensorial" y encajonamiento, cerrando o limitando
la entrada de los sentidos de la vista, el olfato, el oído y/o el tacto,
creando un efecto similar al de un capullo, que recuerda al
entorno del útero. Una de estas piezas del equipo es una bolsa de
cuerpo o saco de dormir, normalmente de cuero o de goma de látex
gruesa. La Dominatrix cierra la cremallera del hombre, desde los
pies hasta la cabeza, y también puede tener correas adicionales
para ceñirlo o sujetarlo a un banco. Puede colocarse una capucha
de cuero o goma sobre la cabeza, con orificios de respiración a
través de los cuales la Dominatrix puede vigilar la respiración de su
sumiso, o incluso controlar su respiración. El hombre queda atado e
indefenso, contenido en la apretada materialidad que lo envuelve
como una segunda piel.
Es libre de "flotar" en el "subespacio", como suele decirse.
Muchos dicen experimentar una sensación de relajación y paz más
profunda que nunca. Las camas de látex al vacío están formadas
por láminas de caucho sujetas a un armazón que permite aspirar el
aire, con un tubo para que el sumiso respire.
Algunas mazmorras están equipadas con una caja o armario de
privación sensorial de elaborada construcción, con acolchado,
orificios de ventilación y sujeción integrados en su ingeniería, para
meter a un sumiso. (Ni que decir tiene que este tipo de sesiones
no son adecuadas para quienes sufren claustrofobia).
Una Dominatrix también puede manipular el uso del
encasement bond- age, la incapacitación y los estados de sumisión
profunda, para combinarlos con la suspensión. Alternativamente,
el bondage con cuerdas y/o la suspensión pueden llevarse a cabo
mientras el cuerpo del sujeto está expuesto y accesible. En
cualquier caso, se trata de un ámbito en el que entra en juego la gran
pericia de la Dominatrix, con el riesgo asociado y las consecuencias
que ello conlleva.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 233

peligro. Las Dominatrices experimentadas mitigan este riesgo a


través de su conocimiento en el uso de puntos extra de
aseguramiento para salvaguardar en caso de cualquier falla del
equipo o de la cuerda. Ella puede tener una "liberación rápida" de
emergencia, desde donde él puede ser bajado de la suspensión con
rapidez si es necesario. A menudo se asegurará de que otra
persona esté presente para ayudar a soportar el peso y el apoyo, o
en caso de que el cliente se desmaye y necesite ser bajado de forma
segura.
La Dominatrix tiene en cuenta las condiciones médicas
preexistentes que pueda tener el cliente, cualquier medicación que
pueda estar tomando, antes de aceptar participar en tales
actividades. Mitiga los riesgos previsibles, rechazando si es
necesario una solicitud de sesión que considere inapropiada e
inaceptable en su nivel de riesgo para una persona. Debe conocer
la anatomía humana y la localización de las terminaciones
nerviosas. Observa atentamente los signos de circulación
dificultosa, de frialdad en las extremidades, escucha la regularidad
de la respiración, etc., lo que requiere una formación especializada
en bondage.
Existen varias formas de bondage con cuerdas. El estilo japonés
de bondage con cuerdas (conocido como shibari) utiliza una
economía de nudos para mantener la eficacia, la rapidez y, sobre
todo, la espontaneidad, en palabras de la artista de las cuerdas
Satomi Zpira.2 Mientras que los estilos occidentales de bondage
pueden ser estéticamente más complejos e implicar nudos más
complicados, señala.
En los últimos tiempos, el bondage con cuerdas se ha
reconocido cada vez más como una "forma de arte". Sin embargo,
sus orígenes se remontan a las antiguas artes marciales japonesas
de los samuráis guerreros, utilizadas para capturar y detener a los
oponentes. El arte marcial Hojo¯ jutsu, que se desarrolló durante
la Edad Oscura del periodo Sengoku Muromachi (c. 1467-1600),
desarrolló técnicas de esclavitud con cuerda que utilizaban la
234 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
cuerda para mutilar y matar.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 235

lesionar al captor, creando daños permanentes en los nervios (éste ya


no es el objetivo del bondage moderno, de hecho los daños en los
nervios se evitan específicamente, se consideran imprudentes,
peligrosos y señal de que una persona no sabe lo que está
haciendo).3 En su uso contemporáneo, el bondage con cuerda ha
evolucionado hacia la restricción y el placer eróticos, el disfrute
psicológico y físico de estar atado (para el sumiso atado) y en el
tejido, el anudado en el placer estético y rítmico (para la persona
que domina, la cuerda y el aparejo).
La escritora y educadora sexual Midori señala que,
históricamente, los japoneses utilizaban cuerda de bambú porque
era abundante, barata, de rápido crecimiento y adecuada para la
fabricación de cuerdas, mientras que el cuero era un bien escaso en
la nación insular de Japón, y el metal no era factible en la Edad
Media japonesa. La tradición de la esclavitud con cuerda continuó en
el periodo Edo, señala, como un método pragmático de gestión de
criminales y prisioneros, codificado con sutiles variaciones de
colores de cuerda y métodos de atado para reflejar el rango del
capturado, el nivel delictivo, etc.4
Con el tiempo, los teatros japoneses de entretenimiento
Kabuki -entonces mucho más subidos de tono que su asociación
actual- incluirían imágenes sexuales (nureba) y escenas de tormento
(semega), que se filtraron en las obras de arte ukiyo-e -o "imágenes
del mundo flotante"- y en el arte de Seiu Ito. Su obra, influida por
la fascinación infantil por los cuentos de princesas cautivas, se
combinó con los intereses del BDSM para crear imágenes
fotográficas de mujeres cautivas y castigadas, a partir de 1919.5 Las
imágenes de Ito influyeron en generaciones de artistas gráficos,
fotógrafos y artistas de la cuerda que les siguieron, asegurando que
el bondage japonés con cuerda entrara en el ámbito erótico, fuera
absorbido por las representaciones teatrales de shibari y los
espectáculos de suspensión en los clubes de bondage, y por la escena
BDSM. Cuando las imágenes japonesas de
236 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

La esclavitud con cuerdas shibari entró en el mundo occidental y, al


mismo tiempo, en la lengua vernácula y las prácticas del oficio de
dominatrix.
El artista fetichista John Willie fue uno de los principales
responsables de la propagación de las imágenes de bondage con
cuerdas en Estados Unidos a través de sus "extrañas" ilustraciones y
caricaturas de la "dulce Gwendoline", que inevitablemente acaba
atada como una "damisela en apuros".6 Irving Klaw respondió al
deseo de sus clientes de imágenes de bondage, produciendo trabajos
fotográficos en los que aparecían personajes como Bettie Page
atada con cuerdas. (Paula Klaw, la hermana de Irving, se encargó
de atarla)7.
El deseo de los clientes de experimentar escenarios de bondage
con cuerdas, y los propios deseos de las Dominatrices de
experimentar con este medio, llevaron a algunas a buscar clases
avanzadas de bondage shibari con cuerdas viajando a Japón para
aprender de los nawashi (Maestros del bondage), o de clases o
tutorías ofrecidas por artistas locales de las cuerdas dentro de sus
comunidades BDSM. Estos conocimientos se adaptaron a sus
propias prácticas profesionales en las mazmorras y se transmitieron
a otras Dominatrices.
Mientras que los nawashi y los artistas de las cuerdas pueden
practicar su maestría artesanal para la demostración y la actuación
en modelos femeninas japonesas típicamente menudas, el uso de
la Dominatrix tiene algunas diferencias en cuanto a su método y
propósito. La Dominatrix trabaja con tipos de cuerpo
"cotidianos", que pueden no estar acostumbrados al bondage, y se
enfrenta a diferentes preocupaciones en términos de seguridad,
tolerancia y peso. Su enfoque puede ser técnico, estético y creativo,
pero también se centra en el juego de poder y la experiencia de su
sumiso atado con cuerdas como su principal preocupación; atado e
indefenso, atrapado en la "red" de la Dominatrix, controla a su
sujeto en todo momento.
No todas las Dominatrices practican el shibari o la esclavitud
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 237
con cuerdas, que requiere gran destreza y entrenamiento para su
práctica - puede que no tenga acceso a expertos para adquirir
conocimientos, o que el área no le interese.
238 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

ella o ella puede preferir bondage de cuero o fijaciones de acero.


El bondage también puede ser psicológico más que físico. Hay
una serie de formas especializadas de esclavitud psicológica que
los clientes buscan, como el chantaje consentido, los contratos
vinculantes, la hipnosis erótica y el control mental.
Por lo general, un cliente se pone en contacto con una
Dominatrix buscando específicamente ser chantajeado, lo que
entra dentro de su fantasía erótica, en la que él proporciona
deliberadamente información privada sobre sí mismo que quiere
que ella utilice en su contra. Puede tratarse de información
"inventada" (falsa) que él ha construido para la batalla psicológica
sin que en realidad suponga un riesgo real para él, pero con la
Dominatrix suponiendo que lo es, y ambas partes siguiéndole el
juego. O puede ser información real sobre él (su nombre real,
dónde trabaja, el número de teléfono de su casa) y normalmente
las "apuestas" aumentan con el tiempo, ya que ella puede recibir
más información que suponga una mayor amenaza. La
Dominatrix juega con el poder del chantaje sobre él,
proporcionándole una forma de esclavitud para obligarle a asistir a
sesiones, realizar acciones, comprarle regalos o pagarle tributos.
Para su cliente es enormemente erótico sentirse bajo el control
psicológico y la compulsión de la Dominatrix.
Una de las razones por las que estos clientes buscan a una
Dominatrix para este servicio de "dominación financiera" o
"chantaje" es que suele haber una mayor confianza subyacente en la
ética y la profesionalidad al buscar a una Dominatrix establecida y
bien considerada, así como su profundo conocimiento de la
psicología que se disfruta en este tipo de juego. Normalmente, un
esclavo chantajista busca a una jugadora inteligente y sofisticada,
que pueda desarrollar giros inesperados en el juego de poder,
amenazas creíbles de exposición y retos estimulantes para que Ella
actúe, aprovechando la amenaza de chantaje.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 239

En las fantasías de hipnosis erótica, la Dominatrix utiliza


formas de "control mental" como medio de esclavitud. Esto
incluye técnicas de relajación profunda, estados alterados de
conciencia y estados de trance, manipulando el tono y el ritmo de
su voz, junto con técnicas de sugestión y programación
neurolingüística, para ayudar al sumiso a actuar de la forma que Ella
desea. Las técnicas de hipnosis erótica pueden aflojar las
inhibiciones y las barreras mentales, centrar toda la atención del
sumiso en una tarea o reto y llevarlo a un nivel más profundo de
entrenamiento de la obediencia.
Un sumiso también puede estar atado por servidumbre
contractual, en forma de "contrato de esclavitud", en el que el
hombre firma su aceptación y acuerdo de propiedad, servidumbre y
servicio a la Dominatrix, que también se responsabiliza de su
esclavo por el acuerdo. Los efectos de la esclavitud pueden
reforzarse y legitimarse mediante la firma con sangre, con testigos
presentes, como parte de una ceremonia de esclavitud contractual.
Uno de los aspectos más interesantes de la servidumbre
contractual es que coincide en gran medida con la construcción
social del matrimonio, destacando, de hecho, la "servidumbre" del
matrimonio. Esto puede incomodar a quienes están casados, pues
reconocen que se han sometido a otra persona, algo que el
lenguaje y el simbolismo ligados al matrimonio revelan
claramente.
Se habla en broma del matrimonio como una "trampa" o una
"jaula". Los anillos de boda se describen como "las esposas más
pequeñas del mundo". Los españoles juegan con "esposas", que
significa cónyuge en singular y esposas en plural. La despedida de
soltero de un hombre se presenta a menudo como su "última
noche de libertad" con los chicos.
Con frecuencia se contrata a una figura de dominatrix (aunque
más comúnmente a una stripper de imitación de dominatrix) para
una despedida de soltero, juego
240 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

con nociones de libertad, esclavitud y control. Una de las


decoraciones humorísticas más populares para las tartas de boda
representa a un novio con una bola y una cadena atadas a su tobillo,
y una novia sosteniendo triunfante la llave. También es interesante
que un regalo habitual en la luna de miel sea un par de esposas de
peluche rosa para que los recién casados "jueguen" con la
esclavitud sexual de su recién formado matrimonio.
Los verdaderos motivos que subyacen a un matrimonio
socializado quedan ocultos, o dulcemente cubiertos, por el ritual de
la ceremonia nupcial. En la sociedad occidental, la boda está
impregnada de fantasías imaginarias con flores, un vestido blanco
y una tarta de varios pisos. Debajo de todo el glaseado, se
esconden deseos (reconocimiento público del compromiso, estatus
elevado, contratación de exclusividad sexual sobre el otro, deseo o
legitimación de hijos, apoyo emocional, apoyo financiero,
propiedad conjunta, evitar la soledad) que sólo pueden esbozarse o
gesticularse ligeramente, y que rara vez se discuten abierta y
honestamente. Por el contrario, la Dominatrix obliga a su esclavo
a ser honesto y desnudar sus deseos y motivos. Ella construye la
forma de esclavitud y su estructura de una manera adecuada para
él, y para Sus propios deseos y voluntad de acomodarse, expuestos
honesta y abiertamente. La negociación y la discusión de los
límites preceden o forman parte del acuerdo de esclavitud. El
contrato de esclavitud establece los términos del acuerdo para
ambas partes, las expectativas y los papeles que ambos deben
desempeñar, los "términos de la esclavitud", de forma abierta y
directa, mutuamente.
consentido.
La Dominatrix reconoce el doble aspecto del bondage de
dominación. Aunque ata y atrapa al sumiso, también impone
responsabilidades a la parte dominante. La esclavitud impone a la
Dominatrix el "deber de cuidar" al sumiso cuando se encuentra en
estado de vulnerabilidad.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 241

Algunos se sorprenderán al saber que en una parte significativa


de los casos, la esposa de un cliente casado es a menudo
consciente de que su marido está viendo a una Dominatrix. Las
esposas que conocen bien e íntimamente a su marido suelen ser
conscientes de una "desalineación" de los deseos sexuales dentro de
un matrimonio por lo demás feliz, y si no desean participar o
gratificar los deseos de su marido, pueden sentirse aliviadas de que
su marido acuda a una Dominatrix profesional para este fin.
Puede que ella haga la vista gorda. O puede ser abiertamente
discutido y acordado en consideración de otros factores que la
esposa gana con el arreglo.
Una esposa puede aceptar que su marido acuda a una
Dominatrix una vez al mes dentro de ciertos límites, de acuerdo
con que ella disponga de dinero para gastar en sí misma,
controlando y beneficiándose del ar- rangement. También puede
existir la seguridad de no quebrantar la fidelidad sexual del
matrimonio, ya que las Dominatrices no suelen mantener
relaciones sexuales con sus clientes.
Hay casos de esposas que incluso se reúnen para conspirar con
la Dominatrix, planificando el castigo o el tratamiento del marido
en una sesión, como entrenarlo para que sea más atento con su
mujer y ayude más en las tareas domésticas. Como escribió
Alexandre Dumas, "Les chaînes du mariage sont si lourdes qu'il faut être
deux pour les porter; quelquefois trois." (El matrimonio es una cadena
tan pesada que hacen falta dos personas para llevarla; a veces tres).
La dominatrix (o las esposas dominantes) también juegan
conscientemente con las nociones de fidelidad sexual en el
bondage a través de la esclavitud de castidad, en la que los genitales
del hombre se encierran en un dispositivo de castidad, como una
"jaula para pollas" de metal o un dispositivo de metacrilato
moldeado con diferentes tamaños adaptables de anillos de base.
Naturalmente, la mujer superior tiene las llaves, al ver que el
hombre sumiso está encerrado.
242 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

durante un periodo de tiempo hasta que ella decida liberarlo.


Un comentario que suele hacer una Dominatrix a otra es "si
controlas la polla, controlas al hombre". La Dominatrix es experta
en el arte de controlar al hombre mediante la provocación y la
negación, de restringir el acceso del esclavo a tocarse o a
experimentar un orgasmo, a menos que le plazca a ella y así se lo
ordene.
Esta forma de control puede acentuarse con "ataduras de polla
y pelotas", en las que el pene y los testículos del hombre se atan con
cuerda o cuero, o "puertas del infierno", con varios anillos de
cuerda o cuero que envuelven el pene a intervalos a lo largo de su
longitud. El nombre de "puertas del infierno" se debe a que, a
medida que el hombre se excita y su miembro se hincha, los anillos
o "puertas" se aprietan más, por su propia voluntad. Una funda de
cuero con alfileres, colocada alrededor del pene, también consigue
lo mismo, pinchándole sólo si está demasiado excitado.
En la negación y la creciente frustración, su excitación
aumenta, haciéndolo cada vez más deseoso y desesperado por
complacer, asegurándose de que Ella lo mantiene bajo su poder y
control.
��
rEALM 4
EL ARTE DE LA DIsCIPLINA Y LA PENA

Entre las prácticas más conocidas de la Dominatrix están la


disciplina y el castigo. En el espacio de juego de la Dominatrix, las
normas sociales y la ley se sustituyen por las propias normas y
expectativas de la Dominatrix. Su posición de poder y sus
derechos de prerrogativa se ven acentuados por la autoridad y la
disciplina que le impone, que constituye la estructura para el
aprendizaje y el adiestramiento en la obediencia.
El castigo puede conseguir varios fines. Demuestra los
derechos prerrogativos y el poder de la Dominatrix como
autoritaria. Actúa como consecuencia y elemento disuasorio de la
desobediencia y el comportamiento incorrecto o inadecuado.
Efectúa una retribución y también puede ayudar a mitigar la culpa del
sumiso por defraudar a la Dominatrix y/o a sí mismo, ofreciendo una
especie de liberación catártica en el dolor, haciendo borrón y
cuenta nueva.
Las formas de castigo se parecen a las que se utilizan en
entornos domésticos, como las figuras parentales, o en
instituciones como escuelas, el ejército y las prisiones. El castigo
puede consistir en la supresión de privilegios, el aislamiento en un
rincón, jaula o armario, alguna forma de humillación o trabajo, la
supresión de privilegios, o en forma de castigo corporal y dolor.
La Dominatrix está especialmente asociada a la imposición de
castigos corporales como disciplinadora. Es una forma de juego
que resulta especialmente excitante para algunas personas que han
interiorizado fantasías relacionadas con rituales de castigo de su
infancia y adolescencia,
242 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

que se mezclaban con la atracción por una figura de autoridad


femenina de la que ansiaban estar cerca.
Los recuerdos de castigos corporales en la juventud que "se
quedan grabados en la memoria" suelen describirse como
"emocionantes". La palabra "thrill" significa tener una sensación de
excitación o placer repentinos, o una oleada de temblor nervioso, y
deriva del término inglés medio "thirl", que significa "atravesar o
penetrar".
El preludio del castigo, y el acto mismo del castigo, inundan el
cuerpo con un cóctel de sustancias químicas corporales, hormonas
y endorfinas, y una interacción emocional de miedo, excitación,
trepidación, humillación y dolor. Si lo que se castiga son las
nalgas, se refuerza el "tabú" al implicar y exponer en el juego una
parte del cuerpo habitualmente privada, con un efecto psicológico
añadido, y combinado con la experiencia del dolor y el aumento
del flujo sanguíneo a la región genital proximal. Los efectos no son
sólo los experimentados en el momento, sino las sensaciones
persistentes, el procesamiento psicológico del suceso y las burlas,
intrigas y alabanzas de los compañeros sociales en torno al castigo
corporal recibido. ¿Cuántos golpes te dio la señorita? ¿Con qué
fuerza?", relataba un antiguo alumno. Los hombres relatan vívidos
recuerdos, con gran detalle, sobre experiencias infantiles y
adolescentes de disciplina que implican castigos corporales con
profesores, madres, institutrices y otras figuras de autoridad, y a
menudo buscan reproducir escenarios similares con una
Dominatrix. Idealmente, estas sesiones evocan el estado de
ánimo, el contenido, el lenguaje y el ritual del castigo corporal, y
provocan una emoción renovada que resuena con experiencias y
anhelos anteriores, oscilando entre el pasado y el presente.
el presente.
En Inglaterra en particular, el castigo corporal es un elemento
particularmente popular que los hombres buscan para jugar al rol
con las Dominatrices,
FIGURA 83 Lucina Nathanael, Tacones y látigo, 2011. Impresión fotográfica de edición limitada.
244 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

que puede desempeñar el papel de directora, maestra, institutriz, tía


estricta, etc. Los juegos de rol son especialmente solicitados por
quienes estuvieron expuestos a castigos corporales en un entorno
doméstico o en la escuela. Esto puede implicar el uso de
instrumentos como la zapatilla (zapatos), la correa de la paleta, la
regla de madera, el cinturón o el bastón. Los azotes en las nalgas
también se utilizan con frecuencia como castigo y/o preludio o
"calentamiento" antes de utilizar instrumentos más duros.
Funcionalmente, las nalgadas ayudan a preparar las nalgas para
soportar un castigo más doloroso al aumentar el flujo sanguíneo
en la región, lo que se asocia con un color rosado. Las
dominatrices a veces describen la aplicación de una "capa base"
antes de utilizar un instrumento y castigo más serio, como una
vara.
Desde el punto de vista sensual, los azotes implican contacto
piel con piel y proximidad. Los azotes por encima de las rodillas,
en particular, suelen ser muy excitantes por la intimidad y la
subversión que supone, en un contexto adulto, estar tumbado sobre
el regazo de una mujer, mirando sus piernas. En lo que respecta a
los instrumentos, se pueden utilizar muchos y de muchos tipos, y
la Dominatrix da golpes con conciencia y conocimiento de sus
efectos, para marcar (o evitar) las piernas de la mujer.
marcas), y con un ritual en torno a su aplicación.
Normalmente, puede anunciarse el castigo de un número
concreto de golpes, como seis golpes como castigo por una
infracción. Además de enfatizar su autoridad judicial para decidir
el número, ayuda al sumiso a prepararse mentalmente para su
castigo y el número que debe recibir, haciéndolo más "manejable"
para él. O, si se va a administrar un castigo más largo, la
Dominatrix suele trabajar en "series" (grupos de una docena, o
grupos de diez, si se trabaja en "decimales"), seguidas de una
pausa antes de la siguiente.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 245

Puede pedirle que cuente los golpes y que le dé las gracias por
cada golpe, o al final de cada serie. Y, si desea ser amable, la
Dominatrix puede frotarle el trasero entre series, o utilizar piel
sintética o un plumero para frotarle el trasero dolorido. Este trato
aparentemente amable no sólo alivia y demuestra cariño (en
contraste con el duro castigo), sino que ayuda a volver a
sensibilizar su piel y sus terminaciones nerviosas para que
experimente mayores sensaciones, y estimula la producción de
endorfinas.
El castigo corporal puede administrarse en la atmósfera de la
mazmorra de la Dominatrix, o en un juego de rol como una
escena de castigo escolar, donde los implementos generalmente
serán auténticos a lo que se usaba históricamente (es decir, la vara
torcida de la escuela, la regla, etc.). En Escocia, el "tawse" era
utilizado por los profesores para castigar a los alumnos y mantener
el orden y la autoridad en las clases mediante su presencia visible
como amenaza. Estaba formado por una tira de cuero dividida en
dos (o más) colas, de cuero de color tostado o marrón oscuro. El
fabricante más famoso fue J. J. Lochgelly de Fife, y este
implemento sigue siendo popular entre los hombres de Escocia y
entre las Dominatrices que dan cabida a los castigos corporales
tradicionales (o "CP", como se le conoce en inglés).
comúnmente abreviado).
Los elementos rituales y disciplinarios del castigo corporal
también pueden representarse en contextos distintos de los
escolares, como los juegos de rol domésticos que implican azotes,
así como el uso de otros instrumentos, como un cepillo de madera
para el pelo, una cuchara de madera, una zapatilla o un cinturón.
Las fantasías más comunes son las de naturaleza regresiva, como
interpretar a un niño que es sorprendido masturbándose y
castigado en un "contexto freudiano" por su madre, tía o institutriz,
o castigado por no hacer los deberes, etc.
Otras fantasías introducen los castigos corporales en la
246 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

adulto presente, como por ejemplo que una "jefa" empleadora


llame a cuentas a un empleado varón por comportamiento
inadecuado, como acoso sexual o falta de respeto a compañeras o
empleadas, lo que instaura un clima de imposición del respeto a la
mujer. Otros motivos de castigo pueden ser los continuos retrasos
en el trabajo, la comisión de un error importante, la malversación
de fondos, el espionaje empresarial para un competidor, etc., en los
que se amenaza al hombre con despedirlo, denunciarlo a las
autoridades y ponerlo en evidencia. La alternativa es someterse a su
régimen poco ortodoxo de disciplina y castigo corporal,
restableciendo una antigua práctica tradicional, que por supuesto
se ve obligado a aceptar.
Los temas institucionales y los regímenes de disciplina
también aparecen con frecuencia en las distintas culturas, como
los escenarios carcelarios o el castigo corporal en un barco tomado
por mujeres piratas. Otra asociación fantástica con la dominación
femenina es la de un hombre que naufraga en una isla habitada
por mujeres amazonas, que utilizan el castigo corporal para
mantener a una fuerza esclava masculina en la obediencia y el
trabajo.
Una especialización rara pero constante del castigo corporal,
que se distingue por su dureza y severidad, se conoce como "castigo
judicial". Normalmente, este tipo de castigo judicial es buscado y
solicitado específicamente por un cliente, que se pone en contacto
con la Dominatrix y esboza en el guión su deseo de una sesión de
este tipo, que debe ser tan auténtica, precisa y bien ejecutada como
sea posible para satisfacer sus necesidades. A diferencia de las
sesiones normales, si tiene experiencia, es común que pida "sin
piedad", es decir, que se elimine una palabra de seguridad que
normalmente rige las sesiones. Quiere que la Dominatrix aplique el
castigo completo sin importar lo que él diga o grite, con la
inevitabilidad del castigo completo, su ineludibilidad.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 247

y realismo. El "castigo judicial" suele escenificarse como un


"acontecimiento especial", planificado y anticipado de antemano,
que forma parte de la excitación y la preparación psicológica, y a
menudo con asistentes adicionales (como los amigos o colegas de
la Domiatrix a los que se pide que asistan) que proporcionan un
elemento de "espectáculo público" al castigo judicial.
Ritualmente, el castigo judicial consta de dos partes. En
primer lugar, el juicio y la sentencia, en la que se lee en voz alta el
delito y se anuncia el método y el número de golpes de castigo.
En segundo lugar, se vuelve a traer al hombre para que reciba el
castigo. Temporalmente, se trata de dos hechos separados, y
pueden implicar el ingreso en una celda o el uso de grilletes y
cadenas, en una sala diferente, durante un periodo de tiempo.
La sentencia (normalmente acordada previamente en una
comunicación "fuera de sesión" antes del día) puede ser, por
ejemplo, 100 golpes administrados con un bastón dragón. Se trata
de un castigo muy grave, que implica un alto nivel de dolor físico, y
debe considerarse como una "prueba" que hay que soportar. Este
tipo de sesiones de castigo judicial son mucho más raras que otros
tipos de sesiones, y constituyen una petición de nicho particular,
pero merece la pena destacarlas en contraste con otras.
El talento de una Dominatrix reside en su habilidad y destreza
profesional para manejar un instrumento como un bastón de
dragón, "recto y verdadero", y bajarlo con confianza y fuerza hasta
un nivel "judicial". Se pone a prueba su competencia tanto como se
pone a prueba la resistencia de su prisionero/criminal. En este
sentido, es una "experiencia cumbre" para ambos: para la Dominatrix,
que logra una flagelación brillantemente ejecutada con tantos golpes,
y para el hombre, que la recibe. El acontecimiento, al que
normalmente asisten otras personas, es un espectáculo que el
receptor revive en su memoria y fantasía durante mucho tiempo en
el futuro. Como dijo una dominatrix,
248 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Lo hace una vez, paga el precio y se queda con el recuerdo durante


cinco años".
Estas fantasías contienen elementos de masoquismo. El
término "masoquismo" fue utilizado por el psiquiatra austriaco
Krafft-Ebing en Psychopathia Sexualis (1886), y deriva del nombre
del autor Leopold van Sacher Masoch, que escribió Venus en pieles
(1870) (sobre el deseo y la relación de un hombre con una mujer
dominante vestida con pieles que le azotaba). El término
"masoquismo" es, de este modo, un término psiquiátrico para una
fantasía en la ficción que su autor compartía en la vida real. Con
frecuencia, un masoquista desea ser castigado por una mujer fría y
deseosa, y así se perpetúa la historia. Su "frialdad" no sólo reside
en su capacidad para castigar despiadadamente al hombre, sino en
su aparente ajenidad al ardiente deseo que él siente por ella. (Ella
lo desea, pero no demuestra deseo por él, por eso es "fría").
Se podría argumentar que, al castigarle violentamente, su vio-
lencia demuestra pasión. Sigue siendo severa, capaz de castigarlo
violentamente, y disfruta haciéndolo. Esto es lo que busca el
masoquista, ser castigado por una mujer fría y hermosa que
disfruta castigándole. Al recibir el castigo, él puede perderse en la
objetivación, en Ella. Él toma de su pasión y disfrute que él
significa algo para Ella - porque tienes que preocuparte lo suficiente
por alguien para molestarte en gastar energía y trabajo para
castigar a alguien. Cuanto más violentamente la castigue, más
orgulloso se sentirá él de hacer aflorar esa veracidad en ella y de que
ella disfrute con él. Sus golpes de látigo o bastón (etc.) sobre él
son una extensión de su mano. Un masoquista no sólo quiere
dolor; quiere que se invierta en el ejercicio del dolor sobre él.
Una parte divertida de la interacción entre la dominatrix y el
masoquista es que, normalmente, el masoquista intenta estipular
muchas...
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 249

detalles y detalles de cómo quiere su castigo. Esto le quita a la


Dominatrix el placer de dominar, por lo que normalmente crearía y
controlaría el castigo en la dirección que ella desee y considere
adecuada (aunque dentro de los límites negociados).
Las dominatrices a menudo se quejan de lo controladoras que
son las masoquistas. Quiere que le haga daño con frialdad, y que
disfrute haciéndolo, pero quiere que le haga daño como él quiere,
sólo que así, así de fuerte, así de golpes, no así, llevando este tipo
de atuendo'.
Aunque en este sentido hay un choque de control entre el
masoquista y la Dominatrix, donde se alinean y se unen es en su
mutua absorción e interés por el esteticismo, la belleza, la puesta en
escena, la artesanía y la ejecución del castigo. La Dominatrix
disfruta del reto creativo y de la oportunidad de utilizar su talento
artesanal y su técnica experta. Mientras que el masoquista disfruta
de la gratificación de un juego de poder y un castigo teatral y
cuidadosamente detallado para cumplir la fantasía que tiene en
mente.
Un masoquista, sin embargo, a menudo criticará una sesión,
de una manera que ningún otro tipo de cliente (sumiso) se
atrevería, y expresará su frustración por cualquier pequeño detalle
que no sea como él había previsto, molestando a su vez a la
Dominatrix, una situación que puede ser bastante divertida para
reflexionar como una batalla.

Masoquista: 'Ha sido una buena sesión en general, pero me gustaría que
tuvieras más maquillaje en los ojos, y que mantuvieras más tiempo la
mirada reflejada en el espejo cuando me mires, y luego cuando me pegues
quiero que lo hagas más como...'.

Dominatrix: [interrumpiéndole] 'Yo soy la Ama y quiero castigar


como me apetezca, no como tú me dictes según tus reglas. Querías
que llevara cuero y que te pegara fuerte y
250 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

disfrutar, ¡y eso es lo que hice! Deja de intentar ser el primero desde


abajo, ¡y sé agradecido! Si quieres ser mi esclavo, tienes que ser más
sumiso y humilde".

Masoquista: 'Soy agradecido y humilde. Eres hermosa, maravillosa,


¡oh, la mirada en tus ojos, deliciosa! Es sólo que si pudieras ser más
persistente en tu mirada, hacer una pausa y luego...' (Se interrumpe
cuando la Dominatrix lo echa por la puerta, seguido de frustración
por ambas partes, que se suaviza a cariño mutuo por ambas partes, lo
que finalmente lleva a un compromiso y a programar otra sesión).

Un masoquista puede llamarse a sí mismo "esclavo" de la Ama,


y aspirar a ser vinculado formalmente en un contrato de
esclavitud, pero una Dominatrix dirá que fracasa en ser un
"verdadero esclavo" porque en última instancia le gusta intentar
controlar la fantasía. Quiere estar a merced de la Dominatrix, pero
de la forma en que fantasea. Por esta razón las Dominatrices
hacen una distinción particular al describir a un cliente como un
esclavo masoquista, en oposición a un sumiso o "verdadero
esclavo".
El término "masoquismo" suele ir unido al de "sadismo", como
en la expresión "sadomasoquismo", como si ambos formaran una
pareja natural. En realidad, se trata de dos especies diferentes y no
necesariamente totalmente compatibles o compatibles, por
razones que se expondrán más adelante.
Krafft-Ebing tomó el término "sadismo" del autor Marqués de
Sade, que obtenía placer libertino infligiendo dolor. El verdadero
sádico se complace en el poder y la dominación absolutos de
infligir dolor a una víctima involuntaria.
Un chiste que circula entre los practicantes del BDSM es el
siguiente: Un masoquista se acerca a un sádico dominante y le dice:
"Castígame, hazme daño, quiero que me hagas daño". El sádico le
mira y le responde: "¡No!".
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 251

La gracia del chiste (perdón por el juego de palabras) es que el


sádico obtiene su placer de herir a una víctima que no quiere, y en
el caso de un masoquista que quiere el dolor, el sádico obtiene el
mayor placer del poder al negárselo al masoquista y elegir no
castigarle, frustrando a su vez (y de esta forma hiriendo) al
masoquista.
Algunas de estas cuestiones se tratan en el ensayo de Gilles
Deleuze sobre "Frialdad y crueldad",8 sin embargo, la adición de
los intereses artesanales de la Dominatrix profesional es una faceta
adicional que no se ha explorado.
La parte del "sádico" a la que la Dominatrix profesional puede
ser fiel consiste en sentir placer en los momentos de poder absoluto.
Sin embargo, son "momentos" (o minutos) porque la Dominatrix
en su modo profesional está simultáneamente absorbida y atraída
por el cuidado, la ética, el deber, la empatía, la supervisión y el
"control" de su sumiso, preparada para detenerlo y atenderlo si se
mete en problemas de algún tipo. De hecho, ser empática e
intuitiva a la hora de leer y relacionarse con los deseos de su cliente
sumiso, y saber en qué nivel de dolor se encuentra el cliente, es
parte de lo que hace a una buena Dominatrix.
Por esta razón, es raro encontrar una Dominatrix
verdaderamente "sádica", y mucho más común encontrar una
Dominatrix que tenga una "vena sádica". Es decir, disfruta
"alimentándose" de períodos fugaces en los que puede deleitarse
sintiendo poder absoluto y goce sádico. Puede venderse a sí
misma como - y pretender ser - una "sádica pura", por el atractivo
comercial percibido. Lo que realmente quiere decir es que es capaz
de hacer mucho daño a un sumiso, si eso es lo que busca, sin
inmutarse, y disfrutar haciéndolo.
Una "verdadera sádica", sin embargo, querría que sus víctimas
no estuvieran dispuestas, y querría castigarlas de formas y a niveles
que ellas no quisieran, sin dejar de preocuparse por su seguridad
(lo que no haría
252 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

de que permanezca mucho tiempo en el negocio). Y, de hecho, la


mayoría de las Dominatrices tienen partes iguales de sadismo y
empatía, encarnadas por el "diablo" y el "ángel".
Después de toda esta charla sobre las tendencias masoquistas y
sádicas, y el extremo más extremo del espectro de la intensidad del
juego, debe tenerse en cuenta que muchas sesiones sólo tienen lo que
podría considerarse un nivel de dolor "leve a medio". Algunas
sesiones entre una Dominatrix y su cliente incluso tienen poco o
ningún dolor. El castigo puede adoptar otras formas, como el castigo
y la retirada de privilegios, la humillación o el trabajo, como
consecuencia inventada por la Dominatrix de las faltas del sumiso.
El castigo también puede utilizarse sólo simbólicamente, o con un
efecto ritual, como en un juego de rol en el que los golpes de vara
que se dan son literalmente golpecitos, simulando que se ha
producido un castigo. La idea del castigo también puede utilizarse
como pretexto para un tratamiento sensual, como una azotaina
suave y sensual, para obtener placer en lugar de dolor.
Una Dominatrix también puede castigar debido a su deseo en el
día, para utilizar a su esclavo (de una manera que él disfruta porque
le gusta complacer) con el fin de aliviar su estrés y como una
salida - de una manera controlada y responsable idealmente. O
para castigar a su esclavo como una "experiencia cumbre", con la que
busca llevarlo a un profundo nivel de sumisión, éxtasis y subidón
de endorfinas.
El castigo físico no es un elemento necesario para todas las
sesiones (o clientes a recibir), y a menudo es suficiente para su
sumisa saber que podría castigar, con el fin de ayudar a mantener
aún más su autoridad.
Como descubrirían los maestros de escuela en Escocia, tener
un azote en el hombro, visiblemente a la vista, era a menudo
suficiente para mantener la autoridad y la obediencia por sí
mismo, sin necesidad de blandirlo (a menos que fuera "necesario"
por mal comportamiento).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 253

Las dominatrices también utilizan instrumentos como la fusta


para corregir y adiestrar a los hombres. La modificación del
comportamiento y el adiestramiento disciplinario se parecen
mucho a la metodología de adiestramiento de otros animales
sociales. Dentro de las relaciones y el matrimonio, el
adiestramiento de los hombres suele relacionarse con el
entrenamiento para que ayuden en las tareas domésticas o para que
dejen la tapa del váter bajada. De las mujeres que asumen un papel
más dominante de lo que es socialmente normativo, puede decirse
a sabiendas que son las que "llevan los pantalones en la relación",
o que "lo tienen dominado". Debido a las diferencias darwinianas
entre los géneros y a sus estrategias evolutivas alternativas (así
como a las diferencias hormonales, los impulsos y los roles
sociales), las mujeres están en una posición especialmente
poderosa para aprovechar la formación de los deseos de los
hombres, y lo hacen consciente e inconscientemente en la sociedad
humana. De hecho, algunos evolucionistas creen que la mayor
inversión y provisión masculina se aprovechó de las "huelgas
sexuales" para movilizar a los hombres a cazar y proporcionar
proteínas importantes para el creciente tamaño del cerebro del
feto humano, y a las hembras de las que tanto dependen las crías
durante un periodo prolongado de tiempo y desarrollo del
aprendizaje, en comparación con otras especies.
9
especies animales.
Los chistes y estereotipos populares juegan con la disposición
de los hombres a alterar su comportamiento cuando persiguen a
una mujer deseada. ¡En el libro de Alexandre Dumas, Los
mohicanos de París, se acuña una expresión: "Cherchez la femme!
(¡Busca a la mujer!). En otras palabras, si un hombre se comporta
de forma extraña, busque a una dama o amante detrás de su
comportamiento alterado. Habrá una mujer a la que intenta
impresionar mediante actos de esfuerzo que no son característicos
de su personalidad y sus patrones cotidianos.
Movilizar los esfuerzos y la preparación de los hombres para cambiar su
254 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

cuando persigue el afecto (y la satisfacción) de una mujer, es un


componente importante con el que la Dominatrix trabaja para
adiestrarlo. Por grados de provocación y negación, ella lo controla y
mantiene sus esfuerzos para actuar y complacerla reabastecidos de
nuevo con su lujuria. Es una experta en grados de gratificación
parcial, amplificando el efecto de la más pequeña caricia, la
concesión de permiso para besar la punta de su zapato o el
dobladillo de sus medias cosidas.
Muchas Dominatrices obtienen su título de "Amante Cruel" no
sólo por el dolor que son capaces de infligir si lo desean, sino por
la forma en que niegan a su sumiso su gratificación, a pesar de su
intenso anhelo. Como en el adiestramiento pavloviano de perros,
la presencia de Ella le hace salivar, anticipándose a los bocados que
le lanza. Ella, sin embargo, lo deja anhelante y con ganas de más.
��
rEALM 5
EL ARTE DE MANIPULAR EL CUERPO Y EL
"FUERA DEL CUERPO
Algunos de los oficios expertos que la Dominatrix aprende a través
del aprendizaje y el entrenamiento pertenecen a las áreas del juego
sensorial, la "tortura" simulada, el juego médico y el juego anal.
Hay un aspecto profundamente corporal y corpóreo en muchos de
los "juegos" de las mazmorras, en la colocación del cuerpo sobre
diversas piezas del equipo y en su sometimiento a examen e
intervención. Esto explica gran parte del "misterioso"
equipamiento de sus mazmorras y de las estanterías y armarios de
la sala médica.
El equipo y sus usos proceden de una ecléctica gama de fuentes,
incluidos aparatos y dispositivos médicos modernos y antiguos,
cajas de electroestimulación y accesorios, varitas Violet, máquinas
de luz y sonido, pinzas para pezones, sonidos uretrales,
consoladores y plugs anales, agujas estériles desechables, guantes
médicos de látex, catéteres, hisopos con alcohol, grandes cajas de
pinzas, velas para juegos de cera, máquinas de hielo... y la lista
continúa.
Además de los deseos masoquistas ya mencionados (véase la
sección anterior sobre el castigo corporal), hay varios motivos y
objetivos en juego al utilizar estos equipos.
En primer lugar, el dolor ejercido por la Dominatrix enfatiza
el estado vulnerable e indefenso del hombre, favoreciendo su
estado de sumisión. Puede dejar de lado las preocupaciones y
tensiones mundanas y ser arrastrado bruscamente hacia la
concentración y el miedo, y hacia el momento con su Dominatrix.
En
256 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

al mismo tiempo evidencia el poder de la Dominatrix sobre él,


para violar los límites normales, infligir dolor, de hecho su vida está
en sus manos (y en su confianza), en su estado corpóreo y
vulnerable, escalando el intercambio de poder entre ellos.
En segundo lugar, hay un elemento de juego sensorial, de
experimentar diferentes tipos de sensaciones en el cuerpo, ya sean
pinchazos de una rueda de Wartenberg, cera caliente goteada
desde una altura controlada, uso de cubitos de hielo en el cuerpo,
una pluma, electricidad, inserciones, etcétera. Esto sirve para
empujar al hombre a un modo pasivo, experiencial y sumiso/
receptivo, tomando y experimentando lo que la Dominatrix está
efectuando sobre él.
En tercer lugar, la combinación de miedo y amenaza corporal
provoca una serie de respuestas hormonales y bioquímicas en el
organismo. Esto incluye la activación del sistema nervioso
(destinado a llevar al cuerpo a una respuesta de miedo, lucha y
huida) con cortisol y adrenalina, y endorfinas (morfina endógena),
lo que provoca la sensación de experimentar un "subidón", como
se describe con frecuencia. La respuesta bioquímica, combinada
con los elementos psicológicos de sumisión y miedo de este tipo
de juegos, puede llevar al hombre a lo que se conoce como un
profundo "espacio de sumisión", a menudo abreviado como
"subespacio". Después, la persona suele decir que se siente como si
estuviera "flotando" o "volando", o como si estuviera saliendo o
fuera de su cuerpo, lo que provoca un estado de euforia y felicidad.
Estos efectos pueden ser bastante duraderos, dependiendo del
individuo y del tipo de juego, y a menudo se necesita tiempo
después para que el sumiso "vuelva a la tierra", o para "despegarse
del techo", como lo describió un sumiso.
En este sentido, el arte de la dominatrix tiene correlatos con los
conocimientos tra- dicionales del chamán, que desde la antigüedad
practicaba
FIGURA 84 Nuit d'Or, Animación suspendida, 2011. Impresión fotográfica en edición limitada.
258 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

conocimiento de la inducción del viaje extático, descrito como


ascensión o vuelo. Algunas Dominatrices están más involucradas
en esta área que otras, y los efectos pueden ser amplificados por
otras técnicas de privación sensorial o sobrecarga sensorial, y
ritmo musical utilizados en conjunto.
Cada dominatrix tiene sus propios intereses particulares en
relación con el equipo y las técnicas que le gusta utilizar. Algunas
disfrutan utilizando cajas de 'electro-sexo', con anillos de goma
conductibles e insertables, e incrementan la corriente eléctrica de
forma controlada y precisa. A algunos les gusta "jugar al piercing",
es decir, insertar agujas estériles desechables dentro y fuera de las
capas epidérmicas superiores de la piel, estimulando las
terminaciones nerviosas. (No se trata de perforaciones punzantes,
y no debe experimentar con ellas alguien que no sepa lo que hace,
debido a los riesgos de que una persona incompetente golpee un
órgano o arteria, así como de infecciones y virus transmitidos por
la sangre. Esto debe hacerse correctamente, con material estéril,
algodón con alcohol estéril, guantes médicos, agujas
correctamente desechadas en un contenedor de objetos punzantes
y gasas para curar heridas, etc. También es importante saber si la
persona toma anticoagulantes u otra medicación, o si es hemofílica,
lo que le impediría jugar).
Aparte del potencial de dolor controlado de su equipo
especializado, también se hace hincapié en lo corpóreo -corporal-,
incluyendo artículos y técnicas médicas. Entre ellas se incluye la
administración de enemas, para limpiar el recto y el colon con
agua, lo que puede tener un efecto erótico y mejorar la sumisión.
Algunas Dominatrices también están entrenadas en el uso de
sonidos uretrales - esterilizados y utilizados con una bolsita de
lubricante médico para entrar en la uretra, utilizando la ayuda de la
gravedad (en lugar de la fuerza) para hacer sonar la uretra cada vez
con más fuerza.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 259

tamaño de los sonidos, hasta alcanzar un tamaño máximo de


anchura del sonido. Algunos utilizan sondas urinarias para vaciar
la orina de la vejiga.
Un número sorprendentemente alto de Dominatrices tienen
formación en enfermería o medicina de algún tipo, además de su
aprendizaje en las mazmorras.
La tortura de pezones (abreviada "TN") o el juego con los
pezones, en su forma más suave, es un área popular para muchos
clientes - y Dominatrices. Aparte de la propensión a aplicar dolor
fácilmente sujetando o retorciendo los pezones, la estimulación
del pezón puede aumentar la excitación sexual. Estos efectos del
juego con los pezones aumentan anecdóticamente en los hombres
con la edad, y muchos afirman sentir mayor placer con la
estimulación de esta zona erógena.
El juego anal es una actividad popular para muchos hombres
debido a su constitución bio- lógica, con la estimulación de la
próstata logrando un efecto erótico. Esto puede incluir que la
Dominatrix utilice un dispositivo médico como un espéculo anal
para estirar y ensanchar cuidadosamente el recto, o, utilizando
guantes médicos, puede realizar digitación anal, introduciendo un
número creciente de dedos, e incluso - fisting. También se pueden
utilizar insertos esterilizados con preservativos de látex para fines
similares, como consoladores, vibradores o consoladores con correa
en los que la dominatrix lleva un arnés para penetrar activamente
al sumiso. Estas experiencias pueden combinar el placer y el dolor,
así como la sensación psicológica de sumisión y "prostitución", que
interfiere con los sentimientos de vergüenza o tabú de la educación
social y cultural. Las mordazas pueden utilizarse para llenar la boca
y amortiguar los sonidos y las protestas, aumentando el placer de
la sumisión. Existe un gran número de mordazas bucales,
incluidas las mordazas de bola, las bolsas de mordiscos y las
mordazas dentales. Debido al riesgo de problemas potenciales con
la respiración, una Dominatrix se asegura de que puede quitar la
mordaza rápidamente si es necesario, y no deja que la víctima se
260 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX
quede dormida.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 261

a un sumiso desatendido mientras tenga una mordaza en la boca o


esté atado. Si su capacidad para comunicar su palabra de
seguridad se ve obstaculizada por una mordaza, la Dominatrix le
asigna un gesto alternativo con la mano o algún otro medio para
comunicarle que está al límite o en apuros. Por estos medios, se
establece una conexión íntima y de confianza entre la Dominatrix
y el sumiso. Una Dominatrix experimentada también puede
utilizar máscaras de gas y formas de control de la respiración para
aumentar el control y la conciencia de la respiración del sumiso.
La gama y las áreas de equipos y técnicas que puede incorporar
una Dominatrix son amplias, individuales y se amplían
continuamente con nuevas invenciones o adaptaciones. Es
estimulante tanto para el cliente como para la Dominatrix que ella
"juegue" con nuevas ideas, combinaciones y equipos, de una manera
controlada, entrenada y consciente de los riesgos. Este tipo de
actividades, que normalmente se combinan con otros ámbitos
relacionados, como la dominación psicológica, la restricción, el
juego de roles, el fetichismo, etc., a menudo se convierten en
experiencias intensificadas de "espacio sumiso", subidones físicos y
estados alterados de conciencia, como estados de trance y éxtasis.
El sumiso suele disfrutar de la sensación de lo corpóreo y de
que le hagan centrarse en la corporalidad y las sensaciones
corporales. También puede haber un elemento regresivo, como la
indefensión de un recién nacido o un bebé, que depende de una
figura femenina poderosa para que se ocupe de su cuerpo y su
supervivencia. Este elemento, en su forma más explícita, puede
hacer que un cliente solicite la sensación de que le pongan
pañales, o algún otro elemento del "juego del bebé adulto". Sin
embargo, incluso sin un interés tan específico, la experiencia de
centrarse en la corporalidad y la conciencia corporal puede generar
una sensación de libertad y paz.
La intensidad de lo que un sumiso puede llegar a vivir con sesiones
de gran potencia por parte de la dominatrix, entrelazando su poder
con el de la dominación.
262 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

y el momento oportuno, es comparable a lo que generalmente se


describe como una "experiencia cumbre". A menudo se atribuye
una dimensión espiritual, de sentirse como si se viajara a los cielos,
y se forma un fuerte vínculo íntimo con la Dominatrix que actúa
como guía a través de este proceso. Para la propia Dominatrix, es
un tipo especial de sensación mágica ser capaz de instigar estas
sesiones y experiencias con su talento, y es profundamente
gratificante estar presente con la persona en su experiencia.
vulnerabilidad y viaje.
Algunas de las sesiones más profundas suelen requerir más
tiempo y "cuidados posteriores" para ayudar a la persona a volver a
la normalidad. Estas sesiones profundas requieren una mayor
inversión económica y de tiempo por parte del cliente. El hecho
de que estas experiencias sean posibles es un tributo a su forma de
arte y a su aprecio por parte de los clientes.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 263

��
rEALM 6
EL ARTE DE LA CrOss-DrEss, LA
TrANsFOrMACIóN Y LA sUBVErsIóN DE
géNEROs

El travestismo y la subversión de género son posiblemente las


áreas más incomprendidas de las artes y la experiencia de la
Dominatrix. Parte de la razón por la que es tan incomprendido es
que hay muchas, muchas identidades - en términos de título,
papel, identificación de género, nivel y grado de travestismo y
transformación, y así sucesivamente.
Por ejemplo: "mariquita", "doncella mariquita", "zorra
mariquita", "travesti", "chica", "señora", "travesti" (o "TV" para
abreviar), "transexual", "drag queen", "amante de la ropa de mujer",
"andrógino", "eunuco", "lady-boy", "zorra" o "esclavo de
feminización forzada". Algunos pueden identificarse estrictamente
con una sola de estas categorías, mientras que otros pueden
identificarse con múltiples títulos y categorías.
La Dominatrix proporciona un "lugar seguro" para que las
personas puedan explorar el travestismo, la sisificación y la
identidad de género diferente, de una manera comprensiva y
afectuosa. Una persona puede sentir que no puede explorar
cómodamente su deseo o identidad, travestirse o usar ropa
femenina, debido a la percepción de que será mal visto, o
estigmatizado y mal juzgado por la sociedad en la que vive, su
familia, novia, esposa, hijos, padres, compañeros de trabajo y
vecinos.
Un cliente individual puede querer explorar el travestismo y
aprender a maquillarse, elegir ropa de mujer que le siente bien,
junto con una peluca, en un entorno seguro. Algunas dominatrices
FIGURA 85 Lucina Nathanael, Intimidad, 2011. Impresión fotográfica de edición limitada.
264 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

incluso tienen formación en maquillaje artístico o han seguido


cursos de formación para perfeccionar sus conocimientos en
cambios de imagen profesionales. El cliente disfruta viéndose
transformado en el espejo, ante sus ojos, volviéndose femenino, y
algunos adoptan una identidad y un nombre femeninos. La
Dominatrix es capaz de enseñarles a maquillarse, ya sea en un papel
de hermana mayor o de Dominatrix fuerte, dependiendo de la
persona. También puede enseñarles a comportarse, a caminar con
tacones altos, ya sea muy elegantemente como "una dama" o como
una "zorra", dependiendo de la persona. El atuendo puede ser muy
refinado y propio de una dama, o sexualmente provocativo y
"guarro".
Algunos travestis intentan "hacerse pasar" por una mujer en
público mediante una transformación completa lo más realista
posible. Esto suele incluir maquillaje cuidadosamente aplicado
para cubrir la sombra de la barbilla, junto con una peluca con un
peinado femenino popular. Se les viste con ropa de mujer de aspecto
"cotidiano", lencería, rellenos mamarios (a menudo denominados
"filetes de pollo" por su forma y textura, que se introducen en el
sujetador de la mujer para imitar los pechos) y medias. El look se
remata con zapatos clásicos de mujer (en una talla más grande
para que queden bien). El objetivo es, pues, mimetizarse lo más
posible con un papel femenino, "pasar" por - ser "tomado" por -
una mujer.
Otros se identifican c o m o "TV" (travesti) y quieren ser vistos
como un hombre vestido de mujer. Suelen disfrutar con el
exhibicionismo del travestismo, maquillándose de forma exagerada
con un delineador de labios llamativo, pestañas postizas y
maquillaje de ojos espectacular, y peinándose a lo grande con
tacones de aguja o botas. Suelen querer confraternizar con otras
TV y les gusta socializar y asistir a fiestas como TV. A menudo
adoptan un nombre de "corista", dramático o glamuroso, o incluso
una versión femenina del nombre de un hombre.
Uno de los otros papeles distintivos que las Dominatrices a menudo
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 265

facilitar es el cliente que se identifica como "mariquita", en un


papel feminizado y sumiso. Uno de los elementos básicos del
vestuario de la dominatrix para sus clientes es un conjunto de
"mariquita", que es una adaptación de fantasía del clásico uniforme
de doncella francesa. Puede ser blanco y negro (tradicional), rosa o
amarillo pastel, con muchos volantes exagerados, capas de falda y
adornos de encaje. La doncella-sissy también suele llevar bragas con
volantes, recibe un nombre muy femenino y se le manda limpiar o
quitar el polvo con un plumero, preparar tazas de té y otras tareas
similares a las de una criada. La Dominatrix regañará a la sissy-
maid por hacer las cosas mal o por parecer demasiado guarra o,
por el contrario, puede que la admire, le enseñe a hacer reverencias
y otros actos que enfatizan la sumisión y el papel de sissy-maid. A la
sissy-maid se le llama "ella" y adopta un nombre femenino.
La eliminación de la pesada imposición de género, de la
hipermasculinización, puede suponer un enorme alivio, y es
interesante que el personal del ejército busque con tanta
frecuencia el travestismo cuando está de permiso militar. Esto
puede deberse al entorno artificialmente hipermasculino, del que
buscan reequilibrarse en el espacio femenino, queriendo ponerse
un atuendo rosa con volantes en un entorno de tocador femenino.
Monique von Cleef, la conocida dominatrix, también señaló la
frecuencia con la que los ingenieros se transforman en travestis o
travestis, lo que puede deberse a una razón similar.
Aparte del travestismo y las identidades afeminadas está la
pura "follada de género" carni- valesca y subversiva de las artes del
reino de la Dominatrix. Como parte de la dominación femenina,
una Dominatrix puede demostrar su control y poder sobre un
hombre obligándole a llevar elementos de atuendo femenino,
como ponerle lencería femenina de encaje o satén, o zapatos de
tacón alto. Puede pintarle los pezones con carmín para
enrojecerlos, junto con los labios, en un acto de intimidad y
subversión.
266 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

de los roles de género. El mensaje es: 'Te controlo y puedo hacer


lo que quiera contigo. Ahora estás en mi entorno, bajo mis reglas".
De este modo, la dominatrix juega con el tabú y saca ritualmente a su
cliente del ámbito del mundo cotidiano, con lo que lo desaloja de
sus normas sociales fijas.
Al cliente se le pueden dar elementos femeninos, en lugar de
hacerlo completamente femenino, de modo que los elementos
femeninos coexistan con su identidad masculina, convirtiéndolo en
una especie de andrógino. Hay un profundo reequilibrio en este
juego de géneros. En el taoísmo y el tantra, los elementos
masculino y femenino son el "yin y el yang", y mezclados en unión
crean el equilibrio en el universo. Cada individuo puede tener
elementos de ambos géneros en su interior, en su personalidad y
atributos. Sin embargo, la sociedad impone una lealtad binaria
artificial a una identificación de género fija y el cumplimiento del
papel de género que conlleva. La Dominatrix desafía las reglas
sociales y las normas artificiales impuestas a los individuos
mezclando atributos y revelando ambos en su alquimia. Ninguna
parte de la identidad social de género tiene por qué llevarse a cabo en
su espacio. El individuo es libre de considerar su identidad sexual
y de género y su papel desde cero, sin el peso del papel
socialmente esperado.
El papel de Dominatrix es en sí mismo una identidad que
combina atributos sociales y atuendos femeninos y masculinos.
Aunque las mujeres pueden llevar pantalones desde hace más de
un siglo, antes las mujeres vestían vestidos y corsés, y los
pantalones eran el atuendo de los hombres. Los pantalones de
cuero que suele llevar una dominatrix, combinados con una
mirada poderosa y "dura" (que implica castigo), podría decirse que
se inclinan hacia lo que tradicionalmente era un papel social
masculino. Llevando un "strap-on", adopta además el apéndice
masculino como falo, sujeto por un arnés a su cuerpo. En contraste,
la
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 267

El pintalabios y el maquillaje de la dominatrix, su atuendo, como el


corsé, la lencería, las medias, los tacones altos y la ropa ceñida al
cuerpo que muestra sus curvas, enfatizan su forma feminizada. De
hecho, la mujer poderosa ha desafiado históricamente los roles
tradicionales de género en los que la mujer debía ser sumisa y
obediente. En la historia y la mitología se pueden citar mujeres
fuertes que subvirtieron las expectativas sociales sobre el papel de
la mujer, como Margaret Thatcher (la "Dama de Hierro"),
Virginia Woolf, Juana de Arco, etcétera.
Parte del juego de la dominatrix también puede incluir la
dominación sexual de su sumiso mediante el uso de su arnés, con el
que penetra analmente a su cliente. Haciendo que su sumiso sea "el
de abajo", le obliga a adoptar el papel de sumiso, experimentando
una penetración que suele ser un elemento importante de la
experiencia sexual de la mujer según las normas sociales: "ser
follada".
La construcción de la anatomía masculina permite estimular la
próstata de forma placentera (el punto a menudo denominado
"punto G masculino") mediante la penetración y la inserción de un
consolador. La dominatrix también suele adornarse con guantes de
goma y penetrar digitalmente a su sumiso con los dedos. Incluso
puede llegar a prepararle para el "fisting", en el que la mano no
suele colocarse en forma de puño cerrado, sino que los dedos
quedan en extensión y se juntan en un manojo para introducir los
cuatro dedos y el pulgar. Esto se consigue con un entrenamiento
cuidadoso y mucho lubricante adecuado para evitar desgarros en el
conducto anal.
En algunos países, los "poppers" o "aromas" (nitritos de alquilo,
que se venden en viales en los sex shops) se utilizan para relajar los
músculos del esfínter anal para el juego anal. La legalidad de los
poppers varía según el país. Los efectos suelen durar unos minutos
y aumentan la sensación de excitación y sumisión, además del mareo.
(Los consejos médicos recomiendan no utilizarlos
268 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

junto con fármacos como la Viagra (Sildenafilo) u otros


vasodilatadores, debido a la interacción, que podría provocar una
disminución de la presión arterial y, en raras ocasiones, un
derrame cerebral o un infarto de miocardio. También son
populares en la "cultura gay".10) Este libro no respalda el uso de
poppers, que pueden aumentar el riesgo y no ser legales en algunos
países, sino que simplemente describe las realidades, para el
registro histórico, de su uso por parte de algunos clientes de
Dominatrices (y en juegos BDSM privados consensuados).
Debido al estigma social de que un hombre se vista de mujer y
reciba penetración anal, a algunos clientes les gusta que la
Dominatrix los vista de mujer y los penetre por la fuerza mientras
están atados e indefensos. La "feminización forzada" permite al
cliente negar la responsabilidad de su deseo, por el que
supuestamente se ve "forzado a ello".
Otro tipo de juego que solicitan algunos sumisos es el "juego
bisexual forzado", es decir, la interacción bisexual forzada con otros
hombres. Este tipo de juego permite a un individuo bisexual u
homosexual explorar su deseo en un entorno seguro y supervisado,
y de forma que su malestar psicológico, represión sexual y
culpabilidad por su educación social se alivian al ser
supuestamente "obligado" a jugar por la Dominatrix. Así, el
sumiso puede afirmar: "Lo hice porque ella me lo ordenó". Por
otra parte, las actividades en las que un sumiso no participaría
voluntariamente, pero que se ve obligado a realizar, pueden ser
una prueba de su total y absoluta sumisión y obediencia a su Ama.
La Dominatrix proporciona una apertura "sin trabas" a las
identificaciones y juegos de género y sexualidad, en la que sus
clientes pueden liberarse de la imposición y el peso de los binarios
y normativas de roles sociales masculinos/femeninos y explorar su
propia identidad y deseo en un entorno seguro.
��
rEALM 7
el arte de la fetichismo y la fanatización

Prácticamente todas las sesiones están impulsadas en última


instancia por un juego de fetichismo y fantasía.
Un fetiche es algo encantador y embrujador, en lo que se
invierte poder... y se puede tocar. Más concretamente, un fetiche
erótico es algo que excita a una persona y que valora mucho, de
una manera que a los demás les parece una inversión excesiva: "Sé
que sólo es un pie / una media / una falda de goma... pero, a pesar
de todo, para mí tiene ese poder". (Como teorizó Octave
Mannoni, "Je sais bien, mais quand-même".)11
Algunos de los fetiches más comunes de la materialidad son
las ropas brillantes de látex o cuero. Son como una piel, una
segunda piel. Las pieles también son un fetiche popular (se
hicieron famosas en el libro de Von Sacher Masoch, Venus in
Furs), al igual que la cachemira -ambas forman parte del pelaje
del animal-, con cualidades de suavidad, textura y calor corporal.
El fetichismo de pies es enormemente común, aunque sus
especificidades difieren: a algunos les gusta acariciar y besar el zapato y
el tacón de aguja, a otros los pies fornidos. A algunos les gustan los pies
desnudos y limpios, a otros les entusiasma la idea de unos pies sucios
que han caminado por la suciedad, o unos pies sudorosos que han
estado todo el día apretados en unos zapatos, caminando de un lado
a otro acalorados y malolientes.
Un fetiche no es sólo un objeto, sino que puede ser una
historia con puntuación dramática, una fantasía que tiene la
puntuación sensorial como su choque agudo (arresto). Por ejemplo,
un juego de rol de fantasía puede implicar una historia que llega a su
clímax con el bastón en el trasero (para un fetichista del bastón),
270 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

la aplicación de calor o ser quemado (para un fetichista del calor),


ser pellizcado en el brazo (para un fetichista de los pellizcos) o
hacer estallar globos contra el cuerpo (para un fetichista de los
globos de goma). En todos estos casos, no es sólo el objeto en el
que se basa el fetiche (el bastón, el hierro candente, los dedos de la
mujer, el globo), sino su "transporte", es decir, el hecho de llevarlo
y empuñarlo, dentro de una narración que se acerca cada vez más
y que, en su clímax, está salpicada de secuelas persistentes que se
repiten una y otra vez.
El lenguaje verbal que la Dominatrix emplea en torno al
fetiche juega con la anticipación y se detiene en la idea y las
cualidades del fetiche, desarrollando su magia con una narrativa de
poder y dirigiendo la visión y el tacto.
Las personas que no se identifican con un fetiche pueden
sentirse completamente desconcertadas por cómo alguien puede
estar tan absorto y ensimismado con una cosa. Los fetiches, sin
embargo, abundan en todo aquello a lo que en la vida dedicamos
una inversión desproporcionada (tiempo y dinero), a lo que
atendemos y guardamos con adoración. El bate de béisbol o de
cricket autografiado, comprado en una subasta, colgado en la
pared y contemplado, la historia del juego y del jugador contada a
su alrededor. La reliquia religiosa, unida a la memoria de un santo,
elevada y atesorada. Todas estas cosas son sólo "cosas", su estatus
procede del poder que ejercen sobre nosotros psíquica y
mágicamente, y del poder que invertimos en ellas a cambio. Una
persona puede responder que no se excita con sus recuerdos
deportivos o su reliquia religiosa (o el coche que se pasa todo el fin de
semana puliendo). Esto puede ser cierto, y yo lo aclararía como
"fetiches de fijación" más que como fetiches sexuales, pero apunta
a la similitud de la estructura, la materialidad, la elevación y la
sobreinversión, que revelan el poder que tiene sobre ellos y que
invierten en ello.
Hay varias "causas" de los fetiches que pueden deconstruirse.
FIGURA 86A Y 86B Natasha Gornik, Domme Jaguar y pareja.
Impresión fotográfica de edición limitada.
272 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Se trata de la sustitución, el condicionamiento clásico, la impronta


y los entrecruzamientos neuronales en la estructura del cerebro,
muchos de los cuales pueden producirse a una edad temprana y, a
menudo, antes de la adolescencia.
La teoría de Sigmund Freud propone que 'el fetiche es
sustituto del falo', en la que la formación del fetiche está vinculada
al procesamiento por parte del niño de la falta del pene de su
madre, y desautoriza su percepción. Sustituye el fetiche por una
'señal sobre la amenaza de castración y una protección contra ella'.
Mientras que algunos fetiches bien pueden remontarse de tal
manera a la sustitución, sigo sin estar convencido por el resumen
falocéntrico de todos los fetiches como sustitución del falo.
Los fetiches no se producen necesariamente por la misma
estructura de procesos, edad o etapa de desarrollo. Se puede
"crear" un fetiche leve en una persona mediante el
condicionamiento clásico y la asociación, lo que sugiere que los
mismos procesos también pueden estar en juego en fetiches
anteriores. El condicionamiento clásico implica la asociación de
una cosa en presencia de otra (y vinculada a ella). El experimento
más famoso al respecto es el llamado "perro de Pavlov", en el que
el científico hacía sonar una campana antes de dar de comer a
unos perros. Con el tiempo, los perros se condicionaron a asociar
el sonido de la campana con la comida que se les iba a presentar, y
salivaban al oír la campana en antici- pación de la comida. Si un
objeto se relaciona y asocia con una "cosa", sobre todo si la
estructura de gratificación y objeto se repite, el objeto se convierte
en un desencadenante de la excitación sexual anticipatoria
(equivalente a la salivación de los perros ante la comida),
y por estos medios se convierte en "un fetiche".
Ha habido hombres sumisos que se han encariñado
especialmente con su Dominatrix, y cuando ella se retira quieren
que la próxima nueva Dominatrix a la que visiten para sesiones lleve
una peluca que reproduzca
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 273

Su peinado, el mismo collar gargantilla, o zapatos, o guantes que


solía llevar su Dominatrix retirada. Cuando la nueva Dominatrix
se pone el artículo, éste tiene un poder inmediato y un efecto
excitante sobre ellos. Curiosamente, esto muestra los elementos del
apego, el condicionamiento asociativo, la transición y la sustitución,
con los que se está jugando.
Un fetiche se describe a menudo como "perversión", y alguien
que tiene un fetiche (o fetiches) se describe como "pervertido". Se
trata de una descripción metafórica acertada e intuitiva de lo que, en
algunos casos, puede implicar un "cableado cruzado" neuronal y un
"diálogo cruzado" en los circuitos cerebrales. El conocido
neurocientífico Vilayaner Subramanian Ramachandran ha
propuesto que, dado que parte de la corteza cerebral asociada al
"mapa del pie" se encuentra junto al "mapa de la región genital", la
frecuencia del fetichismo por los pies entre la población puede
guardar cierta relación con la proximidad y la comunicación
cruzada entre estas zonas vecinas dentro de la estructura
cerebral.12
Es mucho más frecuente que los hombres tengan fetiches que
las mujeres, lo que puede no deberse a lo que Freud creía (a la
negación del falo materno), sino más bien a las diferentes
estructuras cerebrales de hombres y mujeres en cuanto a materia
gris y materia blanca. A muchos les parecerá interesante que,
mientras el lema de la educación escolar de los años 90 de "las
mujeres pueden hacer cualquier cosa" (que hacía hincapié en la
igualdad de género implicando la igualdad de inteligencia y
cerebro), al mismo tiempo restaba importancia a las diferencias en
el cerebro humano, su estructura y procesamiento entre hombres y
mujeres. Las mujeres tienen de media mucha más materia blanca
en el cerebro (diez veces más que los hombres) y neuronas más
compactas, mientras que los hombres tienen más materia gris (6,5
veces más que las mujeres). Hay que seguir investigando cómo
puede afectar esto al desarrollo de los fetiches.
274 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

desarrollándose predominantemente en hombres.


La experiencia cultural también influye mucho en el fetichismo,
y los dominicanos afirman que una elevada proporción de sus
"esclavos de los pies" son de ascendencia india.
Como ya se ha dicho, en la cultura hindú, los pies y los zapatos
se consideran impuros, por estar en contacto con la suciedad y la
tierra, y alejados de los cielos. Los hindúes evitan apuntar con los
pies a nadie, o dentro del templo, extenderlos hacia el altar o hacia
sus compañeros de culto. Tocarse los pies es mostrar inferioridad,
por lo que los estudiantes tocan los pies de su gurú, el hijo a su
padre o mayor, demostrando obediencia y sumisión. Se quitan los
zapatos antes de entrar en un templo y se cambian por zapatos de
madera, cambiando lo impuro por lo limpio con un efecto ritual.
Los pies de las personas más sagradas, dioses y diosas, son
sagrados y se denominan "pies de loto". Las Dominatrices
informarán de que los clientes hindúes suelen visitarlas para
sesiones dedicadas por completo a la "adoración de los pies" y a
besar, acariciar y masajear los pies sagrados de la Dominatrix.
Los tabúes y costumbres culturales ofrecen una idea de cómo
ciertos fetiches son más comunes en determinadas culturas y se
entretejen con el fetichismo y la fantasía.
Observando muchos fetiches y escuchando muchos relatos de
fetiches, aunque cada uno es individual, me ha llamado la atención
un patrón. Ese patrón es:
1 Un encuentro(s) con una vista cautivadora.
2 La experiencia es emocionante y escalofriante, con
resonancia física y emocional (a menudo acompañada de
informes de que les hace sentir "divertidos", estimulados,
excitados).
3 Fijación de repetición y repetición, a la vista (y en el sitio)
de la reacción y la "cosa".
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 275

4 La respuesta y la gratificación de revivir la emoción


refuerzan y reafirman su efecto.
5 El poder del fetiche formado y sus efectos se veneran, se
arraigan en la imaginación y se buscan en proximidad al
deseo.
Al observar este "camino del fetiche", la propia Dominatrix
puede convertirse en un fetiche encarnado; una visión cautivadora
(y amenazadora), que supervisa una experiencia emocionante y
escalofriante con resonancia. Con el tiempo, la visión de la
Dominatrix es suficiente para provocar un "efecto fetiche" en su
cliente. Al adornarse con materiales que favorecen el fetichismo
(medias de goma, cuero o seda de "segunda piel", tacones de aguja
altos y herramientas afiladas), combina materiales cómodos con
puntos afilados de peligro y amenaza. Utiliza los fetiches
individuales de un hombre como poder, y desarrolla otras capas
narrativas en torno al fetiche y la fantasía.
Como un hombre está tan completamente "envuelto" en su
propio fetiche, que es una sobreinversión y una sobrevaloración
admitidas (en comparación con su valor cotidiano para los demás),
a menudo puede sentirse solo y anhelar compartir y explorar su
fetiche con otra. Es una de las razones por las que busca y se
siente aliviado al estar en compañía de una Dominatrix. Ella no
sólo adopta el juego con su fetiche, sino que sostiene su poder, ve
su magia, y él se siente comprendido. Mientras otros no lo ven,
Ella lo ve y lo comprende.
Estrechamente relacionado con esto está el arte de desarrollar
escenarios y narraciones en torno al fetiche: "la fantasía". Esto es
algo en lo que la Dominatrix es a menudo muy experta: crear un
"romance del fetiche", que es el juego de rol de la fantasía. En la
fantasía, el fetiche se exhibe triunfante, entretejido en una escena
de verosimilitud y trama narrativa.
276 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Algunas fantasías reproducen directamente experiencias y


adaptaciones de experiencias relacionadas con el fetiche. Fantasías
escolares de castigo corporal en las que un alumno es castigado
con una vara por una profesora, con el pelo recogido en un moño,
falda lápiz y blusa blanca, de aspecto severo. Un niño es
sorprendido por su institutriz masturbándose con una revista
picante y castigado con una azotaina por encima de la rodilla, con
ella en falda lápiz y medias de tirantes, que él contempla mientras
es castigado.
Otras fantasías son, bueno, más fantásticas. Una cyborg
alienígena vestida de goma secuestra a un hombre y le somete a un
examen médico y a experimentos, atontándolo para que sea su cobaya
humana. O un hombre varado en una isla ocupada por mujeres de
aspecto amazónico que duermen en capullos de seda y mantienen
a los hombres como esclavos.
No es de extrañar, pues, que los fetiches aparezcan con tanta
frecuencia en las películas. Las pieles mojadas y brillantes como el
caucho de los alienígenas y los capullos similares a úteros (como
espacios de privación sensorial) representados en Alien, la piel de
Barberella (y las escenas de tortura), el catsuit de cuero de Emma
Peel en Los Vengadores, la silla bondage garrotte empuñada por
una mujer en James Bond.
La propia dominatrix es una encarnación de la fantasía
masculina (submisiva), formada e informada por sus
imaginaciones eróticas, que financian sus actividades profesionales
y artísticas, así como el material, el vestuario y el equipo de su
juego.
Mientras que gran parte de la dominación femenina enfatiza el
poder de la Dominatrix, su autonomía, su control sobre el juego;
su cliente tiene el poder tanto de "salirse" o cesar la sesión
mediante el uso de una palabra de seguridad, como de votar con
sus pies en términos de a quién ve y busca. Por esta razón, una
Dominatrix siempre debe tener en cuenta el fetiche y la fantasía
del cliente como una parte importante de su poder en el juego.
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 277
O, como una Dominatrix le dirá a menudo a un aprendiz en prácticas:
278 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

Nunca olvides el fetiche de un hombre. Vuélvelo a inventar, juega


con él, defiéndelo y nunca te canses de él... ¡porque él nunca lo
hará!".

Notas finales
1 Wilson, A. 'German dominatrices' choice of working names as reflections of
self constructed social identity', Sexuality and Culture, vol. 9, nº 2 (2005),
pp. 31-41 (véase p. 40).
2 Satomi Zpira en entrevista y actuación el viernes 18 de diciembre en La
Domaine, Lyon, Francia (visible en YouTube: http://www.youtube.com/
watch?v=a0o7zVo2Pbo).
3 Satomi Zpira en entrevista y actuación el viernes 18 de diciembre en La
Domaine, Lyon, Francia (visible en YouTube: http://www.youtube.com/
watch?v=a0o7zVo2Pbo) y Midori The Seductive Art of Japanese Bondage
(US: Greenery Press, 2001), p. 14-16.
4 Ibídem, p. 15.
5 Ibídem, p. 16.
6 Véanse, por ejemplo: Revista Bizarre (1946-52) y carta de John Willie
fechada el 28 de febrero de 1950[?], pp. XIII-XVII en Willie, J. The Adventures
of Sweet Gwendoline (Nueva York: Bélier Press, 1999) con introducción de
J. B. Rund.
7 Véase Leonard, G. y Klaw, P. 'About Irving Klaw: Interview with Paula
Klaw 1980', publicado originalmente en High Society (1980) (republicado en:
http://www. americansuburbx.com/2013/05/interview-about-irving-klaw-
interview-with- paula-klaw.html).
8 Deluze, G. 'Le Frois et le Cruel', Présentation de Sacher-Masoch (Editions de
Minuit, 1967); reeditado en inglés como: Masochism: Deleuze / von Sacher
Masoch (Nueva York: Zone Books, 1991).
9 Véase, por ejemplo, Knight, C. Blood Ties: Menstruation and the Origins of Culture
(New Haven, CT: Yale University Press, 1995).
10 Romanelli, F. y Smith, K. M. 'Recreational use of sildenafil by HIV-positive
and -negative homosexual/bisexual males', Ann Pharmacother, vol. 38: 6
(2004),
pp. 1024-30.
11 Mannoni, O. "Je sais bien, mais quand-même...". Clefs pour l'imaginaire ou l'autre
scène. (París: Editions du Seuil, 1969), pp. 9-33.
12 Ramachandran, V. S. y Blakeslee, S. Phantoms in the Brain: Probing the
Mystery of the Human Mind (William Morrow Paperbacks, 1999).
LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX 279

AF TERWORD

AsCENtO DESDE EL MUNDO

--�-

Tras haber pasado gran parte de los últimos cuatro años en el


"submundo" de las mazmorras de las dominatrices y en los interiores
oscuros y artificialmente iluminados de museos y bibliotecas, por fin
he llegado al final de mi viaje documentando la historia y las artes de
la dominación.
Después de todo lo que he aprendido sobre su mundo y sus
prácticas, las Dominatrices no han perdido nada de su mística. Siento
una gran admiración por estas damas altamente independientes,
talentosas y librepensadoras que han hecho de la dominación su
ocupación artesanal profesional. En los pocos años transcurridos
desde que comencé mi viaje, todas las mazmorras de Fitzroy (donde
empecé) se han trasladado o han cerrado, al igual que el Salon Kitty's
de Sydney, señalando algo así como el fin de una era en Australia.
AF TERWORD 279

Como todos los finales, también es un principio, con la apertura


prevista de nuevas casas y el ascenso de la próxima generación de
Dominatrices para influir en la "escena" emergente.
La dominación profesional se ha vuelto más "out" que nunca, al
igual que la vestimenta "fetichista", con artistas de la talla de Rhianna
y Lady Gaga llevando goma de látex en sus vídeos musicales y sobre
el escenario en ceremonias de premios y actuaciones en directo.
Cincuenta sombras de Grey (que vergonzosamente aún no he leído)
llegó unos años después de mi viaje y parece haber convertido la
sumisión erótica en una fantasía femenina dominante. Sin embargo,
se ha escrito tan poco sobre el tema de la dominatrix que pocos
conocían la ocupación profesional fuera de los estereotipos, ni la
ardua formación o las complejas prácticas que estas mujeres se
proponían emprender.
En muchos sentidos, la dominación profesional supone un desafío
para las feministas que defienden una perspectiva contraria al trabajo
sexual y que lo tachan de explotación inherente de la mujer. Como
muestra esta historia, el oficio de la dominación parece haber surgido
de los rituales y el culto a una diosa poderosa, a la que los hombres
rendían tributo y ofrendas de devoción. Al parecer, las prácticas de
sumisión, dolor y éxtasis eran supervisadas por poderosas
sacerdotisas. Entre los primeros textos asociados a un autor registrado
se encuentra la "literatura dominatrix" dedicada a la diosa Inanna,
vinculada a la alta sacerdotisa Enheduanna, tal y como se recoge en
placas de arcilla. Más tarde, en los primeros tiempos de la historia
griega, tenemos fragmentos de poesía en papiro de una belleza
intrigante, en devoción a la diosa Afrodita por la poetisa Safo (de la
isla de Lesbos, en el Mediterráneo). Los nombres de estas influyentes
mujeres se conocieron mucho después de su muerte.
Tras el derrocamiento de las diosas por el monoteísmo patriarcal,
el "saber de las mujeres" sagrado se trasladó a las prácticas seculares
de las trabajadoras del sexo. Parecen haber sido "empresarias
eróticas".
280 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

y artesanas de mente abierta, que adaptaban sus operaciones,


herramientas y ofertas al profundo deseo de los hombres de someterse
a una poderosa figura de autoridad femenina. La profesión de
Dominatrix puede haber surgido de los burdeles convencionales, pero
parece haber evolucionado rápidamente hacia su propio nicho
altamente especializado. La dominación profesional no tiene que ver
con el sexo en sí, sino que se centra en el ámbito psicosexual,
liberando la presión y la represión de la identidad social y permitiendo
la libre exploración del yo sumiso del individuo.
Al leer sobre algunas de estas mujeres en la historia, y su inge-
niosa auto-mercadotecnia y manipulación de su propia identidad
autoconstruida, uno no puede evitar sentir cierta admiración por
ellas. Desde las "fustigadoras", que llevaban mangos codificados por
colores para ayudar a sus clientes a elegir la vara correcta, hasta las
"disciplinadoras del abedul", que trataban de controlar su propia
imagen y las imágenes de ellas con mecenas aristocráticos (que las
convirtieron en las primeras "celebridades" del siglo XVIII), pasando
por la época dorada de las institutrices, como Theresa Berkley, que
inventaron equipos adaptados a su propósito (azotar). Estas mujeres
alcanzaron la independencia económica y la movilidad de clase en una
época en la que las únicas opciones disponibles para ellas eran
"casarse" o dedicar largas horas a trabajos pesados.
Ofrecían un servicio erótico, sí, pero también desarrollaban un
oficio muy especializado con sus propias competencias, técnicas y
conocimientos especiales. Y "juego". La palabra "juego" es
especialmente importante, porque apunta a la naturaleza intuitiva,
receptiva, experimental, teatral y trans-formativa de su trabajo. Al
observar las "sesiones" desde dentro, pronto se hizo evidente por qué
nadie había abordado el oficio de dominatrix ni se había puesto a
registrar su complejidad y profundidad.
Hay mucha ignorancia sobre lo que hace la Dominatrix, y está
sujeta a muchos estereotipos. Si hay algo que
AF TERWORD 281

Sin embargo, lo que salta a la vista al observar a las Dominatrices es


su individualidad y la construcción de su propia identidad. Aunque
por supuesto satisfacen la demanda erótica y comercial de la fantasía
masculina, las Dominatrices construyen activamente su identidad,
que resuena con su propio sentido personal de la mujer sexual
poderosa. Eligen un seudónimo, crean su "yo" Dominatrix, instalan el
equipo de forma que se adapte a sus propias preferencias: para la
función, la exhibición y el acceso a sus "herramientas", para la estética
cambiante, como espacio de "otro mundo" y como teatro
transformador. Cada una aporta sus propios intereses y pasiones a sus
prácticas profesionales.
Cuando la gente piensa en una "Dominatrix", piensa en una zorra
vestida de cuero negro. Y aunque ciertamente las Dominatrices llevan
ese atuendo y pueden actuar como "perras", la historia demuestra que
el estilo "extraño" sólo apareció en el siglo XX, unos cientos de años
después de la historia de la Dominatrix. Hoy en día, es igual de
probable encontrar a una Dominatrix vestida con una colorida goma
de látex que se adapte a su personalidad, con un uniforme que le
divierta, con corsés victorianos y medias de tirantes con costuras, con
atuendo doméstico o de oficina, o con cualquier otra cosa que le
apetezca. Las dominatrices tienen en cuenta las fantasías de sus
clientes, pero hay una generosa cantidad de su propio gusto personal
en lo que lleva puesto y en su selección de vestuario.
¿Es la dominatrix un arquetipo feminista? Quizá sea ir demasiado
lejos. Sin embargo, no es la "víctima" explotada que los escritores
feministas presentarían como todas las trabajadoras del sexo.
Curiosamente, las dominatrices también están muy representadas en
la defensa de los derechos de las trabajadoras del sexo. En la campaña
de Australia Meridional por la despenalización del trabajo sexual,
muchas de las mujeres que trabajan con grupos de trabajadoras
sexuales son Dominatrices en ejercicio o ex Dominatrices. En
Canadá, el principal desafío constitucional al trabajo sexual en el caso
Bedford contra Canadá tuvo como protagonista a la demandante
Dominatrix Terri-Jean Bedford (también conocida como Madame
de Sade).
282 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

junto a otras dos trabajadoras del sexo, y comparecía regularmente


ante el Tribunal Supremo completamente vestida con su piel fetiche
y con una fusta. Los demandantes argumentaron que la ley privaba a
las trabajadoras del sexo de su derecho a la seguridad al obligarlas a
trabajar en secreto. Las dominatrices están acostumbradas a desafiar
habitualmente a la autoridad masculina, mostrando su propio poder y
fuerza, y es esta experiencia la que muchas han afirmado que les ha
ayudado a tener la confianza necesaria para implicarse en desafiar las
percepciones de la gente sobre el trabajo sexual y luchar por leyes que
otorguen a todas las trabajadoras del sexo derechos a un lugar de
trabajo seguro y saludable. Afirman que los modelos que criminalizan
el trabajo sexual no hacen más que llevarlo a la clandestinidad y a las
sombras, donde los profesionales del sexo no pueden acudir a la
policía por cualquier preocupación o por la violencia de sus clientes
mientras su trabajo sea ilegal. Muchas trabajadoras del sexo han
sufrido personalmente la corrupción, el chantaje y el estigma de la
policía. En algunas partes de Asia se han producido incidentes en los
que se ha detenido a mujeres que llevaban preservativos y éstos se
han utilizado como prueba de prostitución en procedimientos
judiciales, por lo que han tenido que seguir ejerciendo su trabajo sin
llevar preservativos por miedo a que los clientes les denunciaran.
de la policía.1
En todo el mundo, las trabajadoras del sexo buscan la
despenalización y los derechos humanos a los que tienen derecho
todas las profesiones. Aunque las dominatrices no suelen ofrecer
relaciones sexuales como parte de sus servicios, están totalmente
alineadas con otras trabajadoras del sexo en esta lucha. Esa lucha es
para que un adulto con consentimiento elija lo que desea hacer con su
propio cuerpo, para poder realizar su trabajo en un entorno seguro,
tener acceso a la seguridad y la salud en el trabajo, pagar impuestos
como cualquier otro ciudadano y poder ponerse en contacto con la
policía sin temor a prejuicios, persecución o procesamiento.
Aunque los legisladores contrarios al trabajo sexual argumentan
que la despenalización del mismo apoya la trata de seres humanos,
estas dos formas de trabajo son tan distintas entre sí como el sexo
AF TERWORD 283
consentido lo es de la violación. Una es la elección de un individuo
284 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

sobre lo que desea hacer con su propio cuerpo. La otra es la trata y la


violación del individuo sin su consentimiento. Las dominatrices y
otras trabajadoras del sexo abogan por un "modelo empoderado", que
hace hincapié en el derecho del individuo a elegir lo que desea hacer
con su propio cuerpo y a acceder libremente a información y apoyo,
libre de estigma y opresión.
El riesgo de explotación se encuentra en otras formas de trabajo,
como, por ejemplo, la que más recientemente ha aparecido en los
titulares: los trabajadores de la confección textil de Bangladesh. La
solución no es ilegalizar a los trabajadores del sector textil. La
solución no es ilegalizar a los trabajadores del sector textil, sino
garantizarles un salario justo y unas buenas condiciones de trabajo, así
como el acceso a agencias que puedan ayudarles a salvaguardar la
salud y la seguridad en el lugar de trabajo.
Mientras los reformistas contrarios al trabajo sexual afirman que
todo trabajo sexual es intrínsecamente explotador, las historias y las
vidas de las Dominatrices demuestran que, al contrario, las
trabajadoras del sexo pueden ser empresarias eróticas astutas, que se
sienten atraídas a la ocupación por su interés en la sexualidad, su
mente abierta, la oportunidad de dirigir su propio negocio
independiente y de obtener beneficios de su oficio y su trabajo.
Las Dominatrices no inventan la necesidad ni la demanda
comercial. Los hombres sumisos buscan atentamente a la Dominatrix
comprensiva que pueda satisfacer sus deseos y su "verdadera
identidad".
La Dominatrix asume este papel con dedicación y
profesionalidad, con un equipo especial diseñado para soportar el
peso de sus clientes, y herramientas adaptadas a su trabajo que son
tan especializadas como en cualquier ocupación "artesanal". También
es interesante que, aunque se hace mucho hincapié en la capacidad de
la Dominatrix para infligir dolor, es igual o más importante su
capacidad para conceder clemencia. Es conquistadora, sí, pero
también redentora y sanadora.
Los clientes entrevistados en el curso de esta investigación hablaron
de salir de una sesión de Dominatrix sintiéndose en paz, revividos,
AF TERWORD 285
aliviados, liberados. Hablaron de haber sido llevados en un viaje, a lo
largo de múltiples
286 LA HISTORIA Y LAS ARTES DE LA DOMINATRIX

En las sesiones de formación, los participantes aprendían más sobre sí


mismos, sobre su deseo, sobre los matices de su mente y su cuerpo, y
adquirían sabiduría y perspicacia a partir de su experiencia. Cuanto
menos prescriptivos eran, más solían sacar provecho de la experiencia.
Al compartir sus intereses y experiencias, pero abriéndose a nuevas
experiencias a medida que se forjaba la confianza, daban rienda suelta
a la Dominatrix para que los llevara intuitivamente a algún lugar
nuevo. El término "emprender un viaje" fue utilizado repetidamente,
una y otra vez, por diferentes clientes de todo el mundo.
Sus clientes depositan un gran nivel de confianza en la
Dominatrix, una confianza que ella considera sagrada, y la mayoría
son muy cariñosos y éticos (aunque inevitablemente hay algunas
manzanas podridas). (Es un aspecto del trabajo de la Dominatrix que
rara vez se reconoce, su compasión y misericordia, que va a la par de
la imagen estereotipada de "perra sádica".
Cuando me acercaba al final de la redacción de este libro, fue en
Hanoi (Vietnam), durante un año sabático, donde me encontré con la
Diosa de la Misericordia (Kwan Am o Guanyin), que tiene oídos
para el sufrimiento de todos y manos tendidas para ayudar. Me
pareció bastante irónico que este libro comenzara con la diosa
dominatrix Inanna, excavada en las profundidades de las arenas de la
antigua Mesopotamia, y terminara con la deidad viviente de la Diosa
de la Misericordia.
La petición de "piedad" aparece en las sesiones de BDSM, en la
literatura y constituye la "palabra de seguridad" para muchos esclavos
de todo el mundo que gritan: "¡piedad, Ama! La Dominatrix es el
arquetipo de una mujer todopoderosa que no sólo muestra crueldad,
sino también compasión y misericordia.
Tengo la esperanza de que este libro -a pesar de sus defectos, su
lenguaje difícil, su apresurada impresión privada entre semestres
académicos- ayude a llenar el actual vacío de conocimiento sobre lo
que hace una Dominatrix y su larga y sagrada historia. En la medida
de lo posible, he incluido fuentes y referencias originales para que
otros puedan llevar a cabo su propia investigación y contribuir a esta
rica historia.
AF TERWORD 287

(hasta ahora descuidada y enterrada literalmente en los infiernos). Ha


sido un "ascenso desde los infiernos": desde las arenas antiguas, los
depósitos de los museos, las cámaras acorazadas de las bibliotecas, los
archivos del fetiche subterráneo, todo ha salido a la superficie.
En el momento en que este libro entra en imprenta, estoy a punto
de emprender un vuelo migratorio a través de los hemisferios y hacia
la luz del mundo superior. Como todos los viajes a tierras extranjeras,
inevitablemente adquieres algunos recuerdos de tu viaje. Dentro de
mi propio equipaje hay sin duda algunos objetos traídos del mundo
de las Dominatrices. (Esperemos que pasen desapercibidos para el
personal de seguridad del aeropuerto).
Si alguien de los que están leyendo este libro tiene en su poder el
"tesoro enterrado" de las Memorias de Theresa Berkley,
supuestamente destruidas, o cualquier otro documento importante
escondido, por favor, no dude en ponerse en contacto conmigo de
forma anónima con el material que desee compartir. Este libro puede
servir para "sacudir algunas jaulas". Y me encantaría actualizar la
publicación dentro de diez años con más información e imágenes que
puedan estar guardadas en desvanes, cajas y armarios antiguos.
Hasta entonces, espero que hayan disfrutado de esta colección
especial de imágenes y conocimientos sobre la Dominatrix histórica.

Anne O Nomis, 2013

Nota final
1 Goodwin, John. Sex Work and the Law in Asia and the Pacific: Laws, HIV
and Human Rights in the Context of Sex Work', UNDP Asia-Pacific Regional
Centre and UNFPA Asia-Pacific Regional Office, in partnership with
UNAIDS, Asia Pacific Network of Sex Workers and others (2012)
(viewable at: http://maggiemcneill.files.wordpress.com/2012/04/hiv-2012-
sexworkand- law.pdf ).
RECONOCIMIENTOS

A David Jackson de la revista DDI (Domination Directory International),


que utilizó el término "entre las grietas" para describir la forma en que operan
las Dominatrices, y que me proporcionó material maravilloso de sus décadas de
conocimiento y de los "Domina Files" que ha construido. Y también a Bert
Wibo de la revista Massad.
Gracias al Sr. J.B Rund de Bélier Press, por compartir conmigo el
magnífico trabajo artístico de John Willie sobre el tema de la Dominatrix, y
por permitirme incluirlo en mi libro.
A David Wengrow, del Instituto de Arqueología de la UCL, que fue
quien me propuso aplicar mi estudio arqueológico y mis conocimientos de
los ritos antiguos a la dominatrix moderna, además de indicarme la dirección
de las esculturas Min del Museo Ashmolean. Gracias a Stephanie Dalley por
la correspondencia por correo electrónico y la referencia de la traducción
sobre el keppû de Inanna (que pronto trataré como tema de mis estudios
académicos).
Gracias al personal de la colección de libros raros de la British Library,
incluida Helen Peden (conservadora de Printed Historical Sources 1801-
1914) por permitirme acceder a la copia anotada del Index Librorum
Prohibitorum (Índice de libros prohibidos) de Ashbee para mi investigación.
A British Library Imaging Services, y a Alex White por su ayuda en la
obtención de imágenes en los artículos que seleccioné sobre la historia de las
institutrices flagelantes en Inglaterra.
Gracias a Maureen Goldsmith, del Penn Museum, por ayudarme a
obtener la maravillosa imagen del "Disco de Enheduanna", y a Monica, del
Oriental Institute de Chicago, por su ayuda con el "Sello cilíndrico de
Inanna/ Ishtar". A Chris Sutherns por su ayuda en la obtención de imágenes
de las colecciones del Museo Británico, de las que aquí se ilustran varias
obras de diversos periodos. A Bruce Marchant, de Reel Poster Gallery, y
Andy Johnson, de AJ Photographics, en Londres, por la maravillosa
impresión vintage de Maitresse.
Un agradecimiento a las maravillosas Amas que ayudaron en sus diversas
formas con mi conocimiento, y mis sinceras disculpas si he dejado a alguien
fuera de este
AGRADECIMIENTOS 287

lista por error o memoria forzada. En Melbourne, Australia, a Darren, Mistress


Cleo, Mistress Electra Amore, Mistress Victoria, Mistress Vervain, Mistress
Syrine, Mistress Violet, Mistress Magenta, Mistress Tova, Lady Ambrosia
Noire, Mistress Amara Dolce, Mistress Kay, Mistress Vianne, Mistress
Vera, Mistress Elizabeth, la sumisa Isabella y Mistress Alex Vicia. Y a
Cedric, que en realidad no merece mención siendo indigno como es. Por
Mac. En Sydney, Australia, a Mistress Tokyo, Mistress Amanda Dwyer y a
las maravillosas mujeres del Salon Kitty's que conocí durante mi visita, entre
ellas Mistress Orlarne, Mistress Saskia, Mistress Imperia, Mistress Devonia,
Mistress Phaedra, Mistress Tahlia, Mistress Coco, Mistress Pearl, Mistress
BelleStar, Mistress Minette y Mistress Eris, sin olvidar a Leslie, "Mistress of
phones". A Cuntress Gabrielle en Adelaide, que con Mistress Electra hacen
un dúo maravilloso en el Fetish Palace. A Maitresse Danielle en Cannes. A
Lady Riva en Warwickshire. En Londres - a Maitresse Nuit, Mistress True
Severity, 'Mistress' Jean (sabes que deberías estarlo), Mistress Absolute,
Domina V, Mistress Jezabel, Mistress Alice Malice, Miss Myers, Mistress
Eva Meinhof, Mistress Fiore, Mistress Kulit, Mistress Leia Ann Woods,
Goddess Sophia, Mistress Morrigan Hel, Miss Greta Muse, Mistress Akella,
Mistress Heelena, Mistress Arella, Mistress Vanessa, Mistress Claudia,
Goddess Cleo, Madame Caramel y Mistress Esme. A Mr G (Agente G), little
john, Scottish hugh, odysseus y a james.
A Madame deSade (Terri-Jean Bedford) por su lucha en Canadá. A los
trabajadores que luchan por la causa en SWAGGER, en Australia
Meridional. A Catherine Healy en Nueva Zelanda por su apoyo, y a los
trabajadores y trabajadoras que luchan en todas partes por su derecho a
trabajar dentro de su oficio, sin prejuicios ni acoso.
A mis maravillosos amigos Sophie, Mesh y Steven por su incansable apoyo
a mi trabajo y a mi espíritu. A mis amigos de escena: Sir Stephen, Evie, Andy,
Lil Miss Anna, Jonathan y compañía. A Claire.
Y por último, pero no por ello menos importante, a mi correctora Bianca, a
mi editorial Mary Egan Publishing de Nueva Zelanda, a mi fabulosa
diseñadora Anna Egan-Reid, a la "mujer maravilla" administradora Sophia
Egan-Reid y a su "diosa madre" Mary Egan.
Retrato de Anne O Nomis
Kristyna Hessova Fotógrafo

SOBRE EL AUTOR

ANNE O NOMIS (juego de palabras con "Anónimo") nació en las


Antípodas. Es licenciada en Arte Comparado y Arqueología por el
University College de Londres (UCL) y trabaja como historiadora,
asesora y conservadora de arte contemporáneo y antiguo.
Nomis realizó un entrenamiento clandestino en una de las
mazmorras más importantes de Australia bajo la tutela de unas 15
Dominatrices, y llevó a cabo una investigación independiente en la
Biblioteca Británica, el Museo Británico y la "escena" clandestina durante
un periodo de cuatro años.
Actualmente escribe dos libros de ficción y tiene previsto continuar
sus estudios para obtener un doctorado especializado en cultura material,
rituales y mitología del Próximo Oriente antiguo, y en los orígenes de la
civilización primitiva.
Nomis vive entre Melbourne y Londres.

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