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'Las Hombres hacen la historia". No, la historia también hace a los hombres y moldea su destino"
F. Braudel.
taban de buscar nuevos símbolos de identificación los Martínez Durán. Todos ellos miembros de las re-
nacional, alavez que intentaban sentar nuevas ba- des familiares estudiadas por nosotros en otros tra-
ses para hacer coincidir las fronteras del Estado con bajos de investigación.a
la nación, mediante nuevas fórmulas de participación
popular y democratización del Estado.2 Su primer actividad conjunta como estudiantes
de secundaria fue la protesta en contra del régimen
Nos interesa conocer por qué en Guatemala las de Estrada Cabrera, oponiéndose a la llegada del Se-
élites intelectuales de la época seleccionaron una tra- cretario de Estado norteamericano Dr. Knox. Poste-
ma narrativa muy vinculada al positivismo y espe- riormente lideraron varias huelgas contra el régimen
cialmente influenciada por el pensamiento racial eu- de Estrada Cabrera y recondujeron la famosa "Huel-
ropeo y su vertiente latinoamericana, y cómo este ga de Dolores" en 1913.
discurso ejerce una enorme influencia en las élites de
pode4 convirtiéndose en el hegemónico durante toda A partir de la primera Guerra Mundial, el grupo
la primera mitad del siglo XX, alcanzando un fuerte se dispersó para ingresar en la Universidad de San
protagonismo en las décadas de 1970-80, como me- Carlos, sin que ello supusiera su disolución, ya que a
canismo ideológico de justificación de un Estado partir de esté momento empezarían a realizar un sin-
contrainsurgente y de un sistema de dominación tra- número de actividades coniuntas. Resulta interesan-
dicional y clientelar. te observar el destino de estas élites que se congrega-
ron básicamente en cinco facultades: Odontología,
Esta ponencia forma parte de una investigación Farmacia, Medicina, Derecho y Bellas Artes'
de largo alcance sobre el pensamiento racial, el ima-
ginario de la nación y la visión del indio en Guatema- En L919, ya se encontraban unificados en contra
la, de un equipo de investigadores de la UAM y de de la dictadura y acordaron realizar un programa
Guatemala. político cuyas bases descansaban en la lucha por la
iibertad y la erradicación de la tiranía, el deseo de la
a) La génesis sociopolítica de la generación del 20. unificación de América Central y cierta protesta con-
tra Ia permanente injerencia norteamericana en los
Esta generación surge en Guatemala aglutinando asuntos internos del País.
a una serie de estudiantes, doscientos aproximada-
mente, de las élites urbanas capitalinas, que se cono- Una de sus metas principales, siguiendo el ideario
cieron y estudiaron durante varios años y varias pro- liberal de la época, era la formación de ciudadanos
mociones, cuatro al menos, en el Instituto Nacional libres y de patriotas centroamericanos. Hablaban en
Central para Varones de la capital de Guatemala. El nombre de los intereses centroamericanos, contra el
nombreáe "Generación del 20", fue puesto por Mi- Estado norteamericano y a favor de la creación de
guel Ángel Asturias y otros miembros del grupo, en una ciudadanía resPonsable.
París en 1927.
La proclama firmada por los 200 miembros, que
Epaminondas Quintana, en su libro La Genera' posteriormente tomará el nombre de Ia generación
ción del20, describe cómo la mayor parte de ellos ie 1920, circuló en los diferentes departamentos de
eran capitalinos, "... descendían de los grandes seño- la república y tuvo un alcance nacional' A partir de
res, hiios de familias ricas de entonces y muy poco entonces ya despuntan algunos líderes del grupo es-
de la clase indígena... y algunos hiios de profesiona- tudiantil que organizan una manifestación el 11 de
les pueblerinos."3 El denominador común del grupo, marzo y réúnen a mas de 30 mil personas, Clemente
a juicio del autor, era "ser perconas ilustradas y am- Marroquín Roias, Agripino Zea, Francisco Villagrán,
biciosas ino como los indios, siempre conformes con fosé Domingo Carrillo, entre otros.s
su triste suerte!"
En realidad la coyuntura política que los unificó'
Ingresaron en el Instituto entre 1911 hasta 1916 y durante todo el proceso de desgaste de la dictadura
se mantuvieron hasta su graduación e incorporación hasta su caída, fue la fundación del partido Unionista'
a la universidad en los años 20. En palabras textua- En torno al unionismo coincidieron como movimien-
les de Quintana, en el Instituto aprendieron a ser ciu- to social y posteriormente como partido político'
dadanoi y libres. Entre los graduados, que cita Quin- Creemos que es en estos momentos, cuando se vin-
tana, cabe destacar, entre otros a: |osé Falla, Ernesto culan a un grupo de redes familiares de la oligarquía,
que fueron los fundadores de dicho partido y cuyos
Viterri, forge García Granados, Ramón Aceña y Car-
líderes principales fueron Eduardo Camacho, Miguel de estas élites intelectuales se aglutinó desde sus di-
Co.bos Batres, |osé piñol, |osé Azmitia, ;uis versas disciplinas -el derecho, la medicina, farmacia,
Beltanena, forge García Granados y
Julio Biancchi _ literatura y bellas artes- en torno a estos órganos de
casi todos ellos emparentados ente sí a-távés de la red de
difusión, y su influencia en la opinión pú6lica fue
los Batres fuzúy de los Casüllo Azrnitia importante a lo largo de estas dos décadas.8
El programa del partido unionista, en la página Las dos primeras publicaciones del grupo son
22, rcsume bastante bien los objetivos del grúpa Tiempos Nueuos y Electra. La primera reüsta se sub-
titulaba "Diario de la juventud independiente',, y su
"Dedicar todos nuestros esfuerzos para obtener por editor fue Clemente Marroquín Rojas. El objetivo de
medios pacíficos dentro de la más ásfiicta obedien_ la publicación era, según et óditoriáI, ,,La reconstuuc-
cia a las leyes, eI resurgimiento pronto, pero estable, ción nacional con todos aquellos que demuestren la
iusto y popular de In antigua nación centroamerica_ pureza de sus intenciones y su buena uoluntad.,,
na".
Tiempos Nueuos salió a la luz el 28 de abril de
"Tiabajar, dentro del orden legal, porque el eierci- 1920, expresando sus metas: "Ia libertad sea un he-
ci.o de los derechos y el cumplimiento ae Us obtiga- cho en todas sus manifestaciones,la conuiuencia so-
ciones que la forma republicana y democrática re_ cial posible dentro de un orden jurídico nunca alte-
quiere para ser eficaz y sinceros, así por parte de las rado; porque la Patria sea amada con ualor y entere-
autoridades, como por la de los ciudadanos, pues de za y Wrque la iusticia encuentre satisfacción plena
otra manera la unión es imposible,,. en la resolución de bs tribunales".
Luz Méndez de la Ve ga, Miguel Angel Asturias, Flavio na Gabriel Mistral, órgano de expresión de las muje-
Guillén, Carlos Wyll Ospina y Rafael Arévalo res, quienes mantendrán sus columnas de debate.
Martínez, ensayistas como Adrián Recinos, Federico
H:rnández de León, entre otros. Los temas aborda- En esta revista se incide más en la educación como
dos son de carácter cultural, poemas, ensayos litera- medio fundamental para vencer el atraso y apatía del
rios de autores extranjeros y corresponsalías de pueblo, y continúan preguntándose sobre las bases
Asturias desde México. ón que debe sustentarse una nacionalidad común.
Exisle una ética regeneracionista en temas sociales,
Studium posee mas interés para nosotros por su como alcoholismo, prostitución, comrpción, etc. Ha-
largo recorrido desde 1921 hasta 1'942. El directorio ciendo un recuento sobre el número de artículos es-
de ista revista incluía a bastantes miembros funda- critos, escritores y temáticas abordadas, nos encon-
dores de la generación del 20, y se hallaba muy vin- tramos que Eduardo Mayor Delgado escribe 18 arti
culada a la vida universitaria. Una de sus metas era culos y lá temática versa sobre regeneración política
divulgar el pensamiento de la época y crear una con- de la iación, la libertad y la ciudadanía; Federico
ciencia sobre la importancia de crear la nacionalidad Mora escribe 17 artículos sobre psicología, medicina
centroamericana. La tendencia de la revista es muy forense y emancipación de la muier; Alfonso Orantes,
heterogénea, pues va desde temas médico-sanitarios, once artículos sobre la juventud y la mujer; alavez
adelantos científicos y tecnológicos, temas universi- que vuelve a llamar la atención el colectivo de muie-
tarios y de educación ciudadana, hasta temas centro- ris de la época, que escribe diez artículos sobre te-
ameriCanos y de crítica literaria' En esta revista vol- mas feministas.lo
vemos a encontrar una reproducción de artículos de
fosé Vasconcelos y de Ingenieros, lo que nos confir-
b) Elementos o rasgos característicos de la Ge-
ma la idea de que eran pensadores conocidos y leídos neración de 1920.
por esta élite intelectual.e
a) Es una generación que surge en el contexto
La revista se interrumpió durante la dictadura de histórico de dos dictaduras. Por tanto, su meta apa-
Ubico y volvió a aparecer L l. años mas tarde, en 1941, rece asociada a la lucha contra las dictaduras y a la
renovada con nuevas plumas como Carlos Martínez regeneración de la patria con los ideales del unionis-
Duran, Del Valle Matheu, César Brañas, Manuel mo centroamericano.
Galich, |osé Castañeda, Augusto Monterroso, además
de Miguel Angel Asturias, Carlos Wlld Ospina y el b) Su composición étnica es totalmente ladina y
"Grupo de Mujeres Gabriela Mistral". básicamente de la capital. La extracción social de sus
miembros es variada, aunque parecen predominar las
La revista Vida, fundada en 1925 por el grupo del clases medias capitalinas y miembros destacados de
mismo nombre, es la última que aparece en esta dé- las élites familiares de la oligarquía.
cada y que la generación del 2O se la atribuye. Este
nuevo colectivo pretende ser un grupo cívico que lu- c) El mayorrasgo de unidad en todos ellos es el
cha por la ciudadanía y por la creación de una patria haber estudiado la secundaria en el mismo centro, EI
mejor. El directorio lo forman viejos miembros de la Instituto Nacional Central para Varones, haber parti-
generación, como Clernente Marroquín y otros de cipado en las Huelgas de Dolores y haberse opuesto
reciente incorporación. a la dictadura de Estrada Cabrera. Sin embargo, no
existe el mismo consenso en ellos respecto a la dicta-
La doctrina de la revista continúa en la tónica del dura ubiquista, con la que algunos colaboraron acti-
grupo - es centroamericanista o partidaria del unio- vamente.
nismo, pretende restablecer los valores de la demo-
cracia, ideales de libertad y justicia, e incorporarán d) Ideológicamente son claros herederos del libe-
por primera vez. en su ideario la noción de igualdad, ralismo decimonónico y el positivismo spenceriano,
aunque no precisan el significado del término' Valo- en la exaltación de valores como la libertad frente a
ran positivamente el rol que juegan las élites intelec- la igualdad, el culto alaraz1n frente a la religión, su
tualés en la formación de la patria y la nación y en el afáñ por el progreso y creencia ilimitada en la cien-
poder "redentor de las ideas". cia, su culto a los intelectuales y a la cultura como
factores de modernización, la educación como reme-
Se mantiene el espacio abierto para temas de dio de todos los males, su fe en el evolucionismo so-
mujeres, aglutinadas en torno a la Sociedad Femeni- cial spenceriano, en donde la raza se convertía en
tende ser una contribución al análisis sobre los oríge- todo qué recomendaciones plantea para resolverlo'
nes, condiciones psicológicas, sociales, iurídicas y Podemos dividir el libro en dos partes claramente dife-
económicas de esta raza vernácula que es el indio. Acto renciadas en contenido, y en influencias exógenas de
seguido pone de manifiesto que su grave preocupación pensadores europeos y latinoamericanos. Los capítu-
es la incapacidad que ha tenido Guatemala para sentar ios relacionados con la descripción de las razas
las bases de la construcción de la Nación. Esta autóctonas, las leyes de herencia del indio, la psicolo-
preocupación se va acrecentando a lo largo de todo el gía del indio y sus lastres o problemas, se encuentran
libro y a mi juicio constituye uno de los aspectos más ñuy influidós por las teorías racialistas y por las
interesantes y sobresalientes del pensamiento del autoryde corrientes del determinismo etnoambientalistas, pro-
gran parte de lageneración del20.13 pias de los autores europeos como Gobineau, Thine,
Le Bon, o por latinoamericanos como Ingenieros,
Como bien dice Brañas en el prólogo del segundo Gamis o Bunge.ls
libro de Muñoz, ya resulta una novedad y un hecho
bastante insólito que un autor guatemalteco se ocupe Estos pensadores han fundamentado sus teorías en
del problema del indio y de la nación. Según Brañas, un pensamiento etnocentrista y cientificista, conside-
solo cinco autores se habían preocupado de estos temas ranáo que sólo hayun concepto de cienciayde progreso:
a lo largo del siglo XIX y principios del XX. Ello aqueilá que se deriva de los conocimientos biológicos
evidencia unavez mas la invisibilidad del indio, como y áe las Ciencias naturales. Consideran que los valores
actor social a lo largo de la historia Guatemalteca, óccidentales son los únicos válidos para el resto de la
como protagonista de la historia y como uno de los humanidad, V Por ende que éstos poseen valor
colectivos en la construcción de la nación.ra universal.16
Muñoz se preocupa por plovocar a otros miembros La segunda parte del libro -relacionada con la ex-
de la generación del 20,y al resto de los ciudadanos plotación del indio, las leyes de la vagancia de los
guatemaltecos, a reflexionar sobre las consecuencias lrabajadores y la riqueza del indio, así como las con-
iangrientas de los conflictos sociales, haciendo clusiones- pareciera tener una influencia de pensado-
preguntas que aún los científicos sociales actuales nos res mexicanos o peruanos, inspirados en las teorías de
cuestionamos: la mestizofilia, tan en boga en la época en pensadores
como justo Sierra, Pimentel, Molina Enríquez o
cPor qué el indígena no es ciudadano de pleno Vasconcelos, que, sin romper con el positivismo liberal
derecho?
y con la influencia Comptiana y Spenceriana, dan la
vuelta a muchas de las teorías de sus inspiradores, y
aPor qué no se le ha podido incorporar a la civiliza-
ción occidental? consideran que el mestizaje entre indígena y español
fue algo inevitable y positivo, fruto del cual se forjó la
ZPor qué los guatemaltecos no hemos sido capaces base de la identidad nacional. A juicio de estos otros
de construir un proyecto de nación homogénea? autores, lafusión o el cruce entre ambos grupos raciales
ha sido el fundamento del nacimiento de las naciones
iPor que ciertos guatemaltecos se empeñan e¡ y de la identidad nacional.
plantear lá desaparición, el exterminio o la mejora-de
la raza de los indígenas, como soluciones a todos los De estos teóricos )uárezMuítozestá mucho menos
males del país? influido, sobre todo en el tema del mestizaje, no así en
su preocupación por forjar patria, por redimir al
A su juicio, la clave de este problema ha sido la
indigena e incorporarlo a la nación y por sugerir
incapacidad de incorporar al indio a nuestra civiliza-
fórmulas políticas y iurídicas que solucionen el pro-
ción. Bl problema del indio -afirrna- es el problema de
blema dei indígenay lo conviertan en ciudadano del
la nación y lo expone con una claridad meridiana al
pleno derecho. Desde esta segunda vertiente, puede
final del prólogo: " No nos cansaremos nunca de repetir
que es de urgencia ttatar este asunto: Guatemala no
óonsiderársele un antecesor del pensamiento
1erá nunca una nación, si no resuelve el problema
indigenista en Guatemala.
indio, como debe'.
Empecemos analizando qué piensa nuestro autory
Thl vez lo más interesante y contradictorio sea cómo otros pinsadores de la generación del 20 acerca de la
luárez Muñoz lo ve, cómo lo analiza y sobre raza india y de su determinismo moral y psicológico'
a. La Degeneración del indio, causas y conse- por el íbero. La una uiciosa y haragana; la otra ser-
cuencias uil y sumisa por su condición esclaaizada; y esto
unido a las características peculiares y propias de
Para Muñoz, el problema de la razaindia no es los indios tendremos un producto sui géneris, que no
una cuestión estrictamente biológica, genética o ha podido y no puede, constituir un pueblo de aspi-
ambientalista como lo es para buena-parte del raciones eleuadas".
determinismo cientificista de Gobineau, Taine o Le
Bon. Tbmpoco acude a la idea de que es una raza Resulta evidente el destino de esta herencia fatal.
inferior, como lo hicieron algunos de sus contempo- fruto del mestizaje desafortunado entre razas dege-
ráneos, entre ellos, Asturias y Epaminondas neradas y viciosas. Para f. Muñoz, la mezcla nefasta
euinia-
na. Considera que la causa de la inferioridad áe esa entre español e indígena viene más determinada por
raza vernácula viene provocada por el cruce nefasto la raza española que por la indígena, pues los espa-
con otros prreblos, especialmente el español, por la ñoles ya eran una raza degenerada a su llegada a
privación de libertad y la sumisión a lá que ie vio América, y fueron ellos los que transmitieron carac-
sometido con la conquista y colonización dé los espa- teres morales y mentales inherentes a su personali-
ñoles. Este hecho fue lo que determinó su conducti y dad, dando un producto muy deficiente, como fue el
su carácter. criollo y el mestizo, por lo que "nada b,ueno podía
salir de esta tatal herencia".
Para Muñoz, el mestizaje es la causa de gran par-
te de los males de la nación y del indio, asi comb el Es muy clara la influencia de las teorías racialistas.
causante del condicionamiento psicológico posterior. especialmente en la idea que el nacimiento y muerte
Según sus propias palabras, el mestizaje piovocó la de una civilización viene provocada desde el momen-
herencia de una raza viciosa y haragana. to en que inicia la hibridación, no porque ésta sea
negativa en sí misma, sino por el hecho de que pro-
"Este cruce ineaitable... formó otra clase de crio- voca una adulteración de la raza y alteracién de las
llos, mezcl.a de españoles un tanto degenerados, con sangres, lo que indudablemente conlleva a la deca-
Ia uida de molicie en España seguía entonces, y Ia dencia de la civilización.r8 Como bien dirían estos
raza aborigen, pura, en cierto modo, pero anastran- autores, la degeneración de una nación se produce
do para los descendientes toda la heiencia que con- por el cruzamiento de sangres como resultado de esa
seraaran de los primitiuos mayas y todos las uicios atracción fatal. Fruto de la confusión racial se produ-
que en línea recta I¿s uino de la penínsuln. indolcn- ce el atraso y la inferioridad de las razas y de algunos
te y orgullosa". pueblos, como el africano, americano o asiático.le
Aquí la influencia de Gobineau y de otros autores Asturias interpreta la degeneración de la raza in-
de la época se deja sentir en la idea de que la fusión dígena desde otra óptica. Se pregunta si los indíge-
de razas y la mezcla es el principal motivo de la caída nas meioran o se degeneran con el tiempo y, a través
de la civilización occidental, pues provoca la degene- de sus estudios fisiológicos, anatómicos y psicológi-
ración de la especie. para Góbineáu, el problerña no cos, llega a la conclusión, que:
reside en la hibridación, que el conde considera como
algo inevitable y, en algunas ocasiones enriquecedor "En rigor de uerdad, el indio psíquicamente re-
-tal como opina Young. El problema radica en que úne signos indudables d.e degeneración; es fanático,
estas razas mixtas no eran fértiles ni positivas, sino toxicómano y cruel" (y, continúa opinando que, por
que ya estaban degeneradas, y la fusión de ambas su etiología) "resulta eaidente la decadencia de la
produjo una degradación mayor porque las razas se raza indígena".
adulteraron, y esa alteración de las sangres fue lo que
provocó una progresiva degeneracién.l? Veamos lo que Entre las múltiples causas que enumera, la mayor
plensa nuestro autor: parte de ellas son de índole económico y social, la
mala alimentación, la falta de higiene, el excesivo tra-
, "Zamfus y mestizos dieron existencia después de bajo, el casamiento prematuro, las enfermedades, el
Ia conquista a la raza indígena actual, en una infor- alcoholismo y ya apunta al punto central que va a ser
me mezcolanza que diera frutos a un conglomerado el núcleo central de su tesis: La falta de cruzamien-
de seres pasiuos, esclaaos por atauismos, sin ideales, úo. Este argumento -que retoma de l,e Bol, Renan, e In
sin estrella polar... Nada bueno pudieron producir genieros lo lleva¡á a afirmar que el principal problema de
la raza española degenerada ni Ia negra subyugada los indios ha sido la falta de cruzamiento, y afirma:
olos inüos se han gastado ellos mismos, su san- zas puede modificar sus condiciones de inferioridad.
gre no ha hecho a través de incontables generaciones, Sin embargo paruluárez Muñoz, este determinismo
sino girar en un circulo... Hace falta sangre n¿Ieva, biológico puede ser subsanado por medio de la educa-
corrientes renovadoras que resatzan la fatiga de sus ción y obas medidas, como lo veremos mas adelante.
sistemas, uida que bulla pujante y armoniosa'z0
Con relación a este tema f . Muñoz afirma:
A juicio deAsturias, éste es elverdadero problema:
*Pero al tífrica no llevó España indios pata mez-
"el estancamiento en que se encuentra laraza indígena,
su inmoralidad, su inacción, su rudomodo depensa4 clarlos; en cambio a América sí ttaio negros pan formar
tienen origen en la falta de corrientes sanguíneas que esta otra rama producto de sus combinaciones
le impulsen con uigoroso anhelo hacia el progreso". criminales: la zamba... y desde luego que los nuevos
productos participaron del colory de las condiciones
Miguel Ángel Asturias no acusa a los españoles de meramente físicas, debe suponerce que así mismo
causar la degeneración de latazaindia, ni la atribuye participanín de las condiciones morales y mentales de
a la fusión de sangres negativas entre dos grupos con las razas qiue obraron en el cfuce".23
escasa vitalidad. Revelando una mayor influencia de
Le Bon y Renan, Asturias parte del supuesto que el
indígena es una raza estancada porque la fusión de su
sangre está agotada, y de ahí procede su degeneración.
Pero Asturias va mas allá que Muñoz al afirmar que
esa degeneración no es fruto de la historia, ni del cruce
con los españoles, sino -como dirían Renan o Gobineau-
fruto del cruzamiento entre ellos mismos. Es la fusión
de sangres mezcladas lo que ha producido la decadencia
de la cMlización y la emergencia de una raza inferior
que procede de una civilización primitiva o atrasada.
En su descripción de la civilización indígena, considera
que:
ca de las dictaduras de Estrada Cabrera y de Ubico, este tema y tratan de dar soluciones políticas, jurídi-
así como la influencia de los pensadores de la genera- cas y morales para devolverle su dignidad perdida.
ción del 20, muy condicionados por el positivismo y
las corrientes racialistas de la época, 1o que obstacu- Sin embargo, en el caso de luárez Muñoz, este
lizólaconstrucción de un proyecto de Nación Mesti- afán de redención va mas allá de la recuperación de
za. Fue esa repugnancia por el mestizaje, por el cru- sus costumbres, del saneamiento de su vida, de la
ce de razas, esa desvalorización de lo mestizo, como devolución de sus riquezas y de su dignidad como
raza inferior, impura o degradada lo que obstaculizó ciudadano. Imbuido por su marco teórico determinista
la búsqueda de soluciones que crearan una concien- sobre la degradación inevitable de las razas y la inca-
cia de identidad nacional.2e pacidad de civilizarse por medio de la educación,
aculturación o ladinización, acude a la creación de
Resulta interesante cómo los autores europeos mitos de origen para salvarle del determinismo
influyeron tanto en los autores guatemaltecos, posi- innatista. Así. le hace descender, en sus orígenes, del
blemente por influjo de la emigración alemana de la pueblo Ario. Resulta curioso como' de una manera
época, que debieron generalizar estas lecturas y con- áparentemente disimulada, pero bastante firme, plan-
vertirlas en parte del imaginario colectivo de la iden- téa que los mayas no fueron nunca una raza inferior
tidad del "guatemalteco". porque descendían del pueblo Ario.
Esta corriente de pensamiento, que se convierte Después de hacer una larga disquisición sobre la
en hegemónica durante todo el período estudiado, grandeia de los maya y de su peregrinación hacia el
resulta una característica muy específica del pensa- óontinente americano, llega a aJirmar que los descen-
miento social guatemalteco y va a influir notablemente dientes del pueblo Maya, antes de atravesar el estre-
en la polarización de la sociedad en categorías anta- cho de Bering, emparentaron en línea directa con el
génicas indio-ladino, en el imaginario acerca del te- pueblo Ario, su antepasado. fustifica su pérdida de
mor hacia el indio sublevado y en su deseo de exter- iinaje y ascendencia aria, en la peregrinación hacia el
minio, pero sobre todo, en la incapacidad de imagi- nuevo continente y en las modificaciones y cruces
nar un proyecto de nación mestiza. con otros pueblos a lo largo de la historia. Opina que
fue en ese mestizaje migratorio en donde se fueron
Esta ideología dominante que se convirtió en modificando sus costumbres y sus rasgos psicológicos,
hegemónica durante toda la dictadura de Estrada hasta convertirse en una raza indolente y perezosa'3l
Cabrera y de Ubico, funcionó como un hábil meca-
nismo de justificación para la aplicación de la ley de Esta interpretación sobre la fortaleza y vitalidad
mandamientos, de la ley de vagos y maleantes y de del pueblo Maya y de su descendencia directa del
toda la reglamentación contra el indígena para seguir pueblo Ario, es lo que le lleva a afirmar que la dege-
obteniendo mano de obra semi-gratuita. Además, re- neración se produce por el contacto o fusión de san-
forzó un sistema de dominación excluyente, autori- gres con otros pueblos, especialmente con el español
tario y patriarcal, es decir una dictadura basada en la áel que se produce una mezcla tan degradada que
hegemonía de los que Brañas denomina la cultura resufta la principal causante de todos los vicios y males
del blanco, como una cultura y una raz¿l superior. Induda- del indígena actual. De nuevo vuelve a considerar
blemente las teorías racistas enboga eran más permeables que el mestizaje con una raza viciosa e indolente,
y se prestaban mejor que ninguna otra al mantenimiento como la española, es la principal causante de la dege-
de una dictadura férrea como la ubiquista.3o neración del indio y de su estructura de personali-
dad. Este planteamiento innatista es lo que le lleva a
b. La Redención del indio para luárez Muñoz y afirmar que los mayas como pueblo no se sustraieron
la generación del 20. a las leyés de la herencia física y psíquica, a pesar de
que en sus inicios eran una raza superior por sus orí-
Iralvez lo novedoso del pensamiento de |. Muñoz genes míticos.
resida en su afán de salvar al indio, de regenerarlo y
convertirlo en un actor de la nación, en un ciudada- Sin embargo, no sigue a la corriente racialista en
no de pleno derecho. Es este punto común, del considerar, por ende, que es lna taza inferior con
regeneracionismo, uno de los elementos que más imposibilidad de salir de su atraso. En ningún mo-
unifican a la generación del 20. Suponemos que por mento bajara la hipótesis de la desigualdad de las ra-
influio de la generación del 98 y posteriormente del zas, de la inferioridad de la raza maya o de la necesi-
27 , casi todos ellos muestran su preocupación por dad de mejorar lataza, como harían muchos de sus
contemporáneos de la generación del 20 como como el español, pues la fusión de ambas razas va a
Asturias, Brañas, Epaminondas Quintana, etc. La producir una síntesis superior: el mestizo.s3
originalidad de su pensamiento reside en tratar de
hacerlos descender de los pueblos caucásicos, como En lugar de buscar argumentos teóricos como los
raza superior, y en considerar que los españoles y la de Molina Enríquez, Pimentel o Sierra, o sin ir más
fusión de las sangres impuras y con escasa vitalidad, lejos, los planteamientos de Vasconcelos, que hubie-
fueron los responsables del atraso y de los vicios del ran podido servir como sustrato ideológico para la
indígena actual. formación de un proyecto de identidad mestiza o de
nación homogénea, rechazan el mestizaje y propo-
Aquí nos encontramos con un elemento que es nen soluciones diversas como las que a continuación
muy peculiar del pensamiento social de la época de presentamos.
los 20 y los 50 en Guatemala y que no coincide con
las corrientes mestizas en boga en toda Latinoamérica; Paraluátez Muñoz, la formación de una verdade-
la mestizofilia o la raza cósmica, como elemento de ra nacionalidad positiva, exige que el indígena se in-
valoración del mestizaje y de la fusión como factor corpore plenamente a la ciudadanía y obtenga en la
cohesionador de la nación. Para este autor y para otros práctica los mismos derechos y obligaciones que cual-
muchos de la generación del 20, el mestizaje fue el quier habitante de Guatemala. A lo largo de toda su
responsable del atraso y de la incapacidad de crear obra muestra una obsesión por la idea que el indio
una nación homogénea. Recordemos cómo la visión sea considerado como ciudadano de pleno derecho,
de Valle y, sobre todo, de Batres |áuregui era una vi- dado que es la principal fuente de riqueza y de traba-
sión tendente a integrar al indígena por la vía de la jo del país, y por ello debe de poseer los mismos dere-
ladinización, de la occidentalización o de la chos que el resto de los ciudadanos.
aculturación. Estos autores, imbuidos por el pensa-
miento de Sarmiento de civilización o barbarie, con- "Precisamente por esta conuicción es que desde
sideraban que la educación y la ladinización permiti- hace algún tiempo aenimos predicando que se con-
rían la integración de " esa raza indolente".32 sidere al indio como ciudadano con iguales derechos
y deberes, para que se le tome en su condición de
Sin embargo, mientras otros autores en América elementos de riqueza, con todas l^as atribuciones que
Latina, especialmente en México y Perú, abogaban rodean al hombre libre".3a
por la valorización del mestizaje como elemento for-
jador de la patria y de la nación -equiparando al mes- El gran aporte de Muñoz es creer que la vía para ad-
tizo con la mexicanidad o la peruanidad, o el gaucho quirir los derechos plenos de ciudadanía no es ladiniándolo
con lo argentino- el pensamiento social guatemalteco o haciéndolo perder zus costumbres; menos aún como otros
culpó o responsabilizó al mestizaje como el causante autotres, eliminándolos o mejorando la especie a través de
del atraso y la barbarie del indígena. No propuso un la inseminación con sangre nueva.
proyecto de nación mestiza o ladina, como otros mu-
chos autores plantean, sino que prefirió proponer un Considera que el indígena debe ser incorporado
proyecto de nación eugenésica, de blanqueamiento al progreso y a la civilización, pero desde su propia
de la nación y de exterminio del indio, que fue la co- cultura e identidad, a través de una educación, de
rriente mayoritaria de la época; En esta época, sólo una legislación que impida los abusos y los males que
Juérez Muñoz plantea la incorporación del indígena le aquejan: el alcohol, las enfermedades, el excesivo
como ciudadano de pleno derecho y como uno de los trabajo, la ausencia de tierra. Su contribución para
actores principales en la construcción de la nación, pero la época es plantear una legislación especial y especí-
apoyado con argumentos de corte racialista o innatista. fica para este colectivo que les garantice plenamente
"su condición de ciudadanos". Estas leyes especia-
luárez Muñoz en ningún momento acude a argu- les, que deben incorporarse al derecho positivo y a la
mentos de ladinización, ya en boga en el siglo XX. constitución, son a su juicio la mejor forma para sa-
Tampoco plantea, como lo haría en su momento car al indígena de su condición de atraso y
Molina Enríquez, que el mestizaje es la base para la marginación.
creación de la nación mexicana y que esta nueva raza,
con un nuevo corazón y una nueva cultura, va a ser Es aquí donde rompe con el determinismo innatista
el fundamento de la mexicanidad. Tampoco argumen- y propone la redención del indio por medio de la edu-
ta, como lo hace Vasconcelos o Justo Sierra, sobre la cación, de una legislación especial, unas leyes pro-
necesidad de valorar tanto el período prehispánico tectoras hasta alcanzar su nivelación en materia de
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Elites, Familias y Redes de Poder en las Sociedades Mesoamericanas
trabajo, sanidad e instrucción. Pero lo más novedoso Lo mismo se ha hecho con otros autores de la época,
resulta la ley de adquisición de tierras. Según Muñoz, descontextualizando sus textos, el periodo histórico
el indio puede regenerarse, redimirse y formar parte de y la coyuntura política en el que se desenvolvían.31
la nación, si se le incorpora plenamente al ejercicio de
la ciudadanía a través de la adquisición de la tierra.3s Sin embargo supone una novedad, e incluso un
acto de valentía, plantear en plena dictadura que al
Lo expresa en los siguientes términos: indígena debe de dársele tierras y abolir los manda-
mientos y la ley de vagos y maleantes. Supone un
" Cuando al indio se le considere tratado de dite- acto de valentía ir en contra de la corriente eugenésica
rente maneru de cómo lo es en la actualidad en su o de exterminio del indio y no plantear una vía inter-
difícil problema del trabaio; cuando note que tiene media, como la ladinización o asimilación del indíge-
derechos que le son respetados y que se le concede na a la cultura occidental, sino plantear el respeto a
un puesto en el conuiuir social, que ya no es paria, la cultura y a sus costumbres, y desde ahí INCOR-
que se le toma en consideración, que ya no es cosa PORARLOS COMO CIUDADANOS. Pero sobre
sino un ser humano con sentimiento y uoluntad, con todo supone un acto de heroicidad plantear en esos
aspiraciones y anhelos, CIUDADANO DE UNA NA- momentos una legislación que devuelva la tierra a
CION, a la cual engrandece con la fuerza de su mús- los indios. Tierras, afirma Muñoz, "que antes fuercn
culo y fecunda con el dolor de su uientre, entonces de ellos" y añade:
habremos hecho el MILAGRO DE INCORPORAR-
LO A NUESTRA CIWLIZACIÓN porque entonces " Hagamos propietarios a los indígenas... Si he-
será nuestro heÍmano".36 mos de trabaiar por formar en nuestro pueblo el sen'
timiento de un nacionalismo rcal y positiuo, tome-
Resulta muy interesante el párrafo porque huye mos este medio que se nos presenta para lograrlo...
del concepto clásico de ciudadanía del siglo XIX y de Está en la conciencia de todos que no tenemos otro
principios del siglo XX, sobre la necesidad de homo- medio meior para constituimos en una positiaa na-
logar y homogeneizar al indígena a través de la edu- cionalidad"ss
cación y de la pérdida de su cultura por la vía de la
ladinización. He aquí el planteamiento revolucionario de f .
Poco se ha estudiado estavertiente de pensamiento En casi todos los países vecinos o del continente
de luárez Muñoz y mucho se ha hablado de su racis- americano, los movimientos sociales e intelectuales
mo y de la infravaloración psicológica del indio. A están diseñando distintos modelos de forjar patria y
nuestro juicio esto ha sido provocado al sacar a los de formular la nación. Es el momento de los grandes
autores de su contexto histórico, social y político y aportes de Molina Enríquez en México, de Mariátegui,
por seleccionar frases o párrafos fuera de contexto. |osé María Arguedas y fosé de la Riva Agüero en Perú,
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Marta Elena Casaus Arzú
de G. Freire, A. Torres, y O. Vianna en Brasil de Tamayo las identidades colectivas que tanto han influido en la
yAlcidesArguedas en Bolivia.ao Resulta imposible qúe posterior historia contemporánea guatemalteca. Entre
las élites urbanas guatemaltecas no estén pensando qué otras razones porque la eterna pregunta sigue rondando
modelo de nación necesita Guatemala. en nuestra cabezay en la de muchos intelectuales que
escriben en la prensa. ¿Los indígenas forman parte de
Cuándo reflexionan al respecto, el primer problema la nación?, cDe qué nación estamos hablando y qué
que les aparece es el indio. óQué hacemos con el indio?, nación queremos construir?a2 Y para ello resulta
óDónde lo colocamos en la configuración de la nación?, indispensable conocer qué modelos nuestms
cQué papel debe de jugar? Y emerge, no como sujeto élites intelectuales en las décadas del 20 y 50 y preguntamos
histórico, no como actor principal de la nación, por qué resulta inüable, a estas alturas, tratar de formular
APARECE COMO PROBLEMA, no abordado en el un proyecto de nación mestiza.
pasado, disimulado o codificado como objeto de trabajo,
inüsibilizado como ciudadano de pleno derecho y, para En este epígrafe preguntaríamos a los diversos
muchos, como un grave problema de dificil o imposible autores, áA qué se refieren cuando hablan de Nación?
solución. óCómo la imaginan y la proyectan?
De ahí que sea el momento de empezar a buscar ParaluátezMuñoz resulta evidente que es un tema
soluciones, dar recomendaciones, sugerir ideas de cuiál central y resume su principal preocupación expresada
debe ser su grado de integración, asimilación o incor- en el prólogo de su primer libro. A lo largo de todo el
poración a la nación. Por ello, y por la influencia de ensayo trata de buscar diversas fórmulas para
las teorías racialistas y, en menor medida, de la INCORPORARAL INDIO, con el objeto de que cons-
mestizofilia y también por influencia del tituya parte importante de la NACIÓN. Él considera
regeneracionismo español, se empiezan abuscar solu- que sin esa incorporación plena, no habría progreso ni
ciones para el prqblema_delrndtlq, pero que en el fondo civilización. En este sentido su concepción de nación
son reflexiones o imaginarios de lo que puede ser la difiere de las teorías racialistas de su primera parte y
construcción de LA NACIóN. Es ésta la gran se acerca más a la influencia del pensamiento mexicano,
preocupación de la generación del20. Todos ellos, o al tratando de buscar las bases para la construcción de
menos muchos de ellos, se lamentan de la ausencia de un proyecto de nación homogénea.
cohesión política social y de la escasa conciencia de
una identidad nacional. El clamor por la nación y su Resulta curioso que nuestro autor, conocedor del
incapacidad de imaginarla y forjarla, es un elemento pensamiento mexicano, no recurra a las teorías de la
común a todos estos autores. Sin embargo las solu- mestizofilia y no plantee la solución del problema in-
ciones para resolver este dilema son múltiples y varia- dígena a través de la creación o de la fusión en el
das y difieren mucho de las tomadas en otros países. mestizo, como síntesis cultural. Tbmpoco parece ser
De ahí el condicionamiento posterior en el tipo de partidario, como fue Riva Palacios, de considerar el
Estado y en las múltiples formas de exclusión que se mestizaje como la síntesis de la mexicanidad, ni habla
produjeron en la sociedad guatemalteca. en términos chapines de que sea el ladino el sujeto
histórico llamado a fundar la identidad nacional.
Es por ello que nos parece de vital importancia
analizar el imaginario de nación de esta generación y Thmpoco parece considerar en ninguno de sus li-
trazar cuál fue el modelo hegemónico que se impuso a bros que el mestizo sea el llamado a formar la nacio-
lo largo de las décadas del 20 y J0, porque sólo así nalidad guatemalteca, como la plantea Molina
podremos comprender el posterior desarrollo histórico Enríquez y tantos autores mexicanos y peru¿rnos.
y político de la sociedad y del estado guatemalteco, y Mucho menos, toma las tesis de Vasconcelos, ya coru>
sólo así podremos tratar de explicarnos cómo se cidas y divulgadas en el vecino país sobre la quinta raza,la
construyeron las identidades colectivas, muchas ve- raza cósmicE una sÍntesis superior salvadora de la huma-
ces contrapuestas y enfrentadas en categorías nidad y destinada a susütuir a la raza blanca.
binómicas y antagónicas.ar
Para nuestro autor la exaltación del mestizaje o de
Por ello, considero indispensable un profundo co- la ladinidad no fueron los modelos o los caminos su-
nocimiento de este período y del pensamiento social de geridos para la formulación de un proyecto de nación
la época y de sus intelectuales orgánicos. Sólo así homogénea. Tbmpoco lo fue para otros autores de la
podemos explicar el modelo de nación que se forjó, el época como Miguel Angel Asturias, H. Espinosa
tipo de Estado que se configuró y la construcción de Altamirano o Epaminondas Quintana.
Cesar Brañas, en el prólogo del libro de Muñoz eugenésicaas, del exterminio o invisibilización de Ia
aQué hacemos con eI indio? (un título muy significa- raza indígena, frente a los partidarios del blanquea-
tivo), entendía por nación homogénea, en fundir una miento de la nación hegemonizada por el grupo blan-
nación con un solo espíritu de patria, y una concien- co-criollo en el poder, tal y como proponían algunos
cia de t:omunidad de destino, en un cuerpo de cultu- intelectuales de la dictaduraubiquista, Muñoz se alza
ra como ha hecho Rusia. Enseñando al indio a asu- con una propuesta novedosa y renovadora para su
mir la cultura blanca. época, a contrapelo de las teorías racistas en boga, y
pienso que salvando las distancias podemos denomi-
f. Muñoz, bastante obsesionado con la mentali- narlo como un proyecto de nación multicultural.a6
dad del momento acerca del blanqueamiento de la
nación o del exterminio del indio -argumento que En este proyecto, al indÍgena no se le extermina ni
refuta en varias ocasiones a lo largo del libro-45 se se le integra, ni se le ladiniza. El vocablo no aparece
lamenta con cierta amargura o tristeza del hecho de ni una sola vez mencionado. Se le incorpora, y esto
que Guatemala no sea una nación y considera que no se logra haciéndole partícipe de todos sus derechos
lo somos "por nuestra propia incapacidad de com' de ciudadanlaaT . Lo que quiere Muñoz es que dejen
prender, respetar e incorporar a la población indíge- de ser ciudadanos imaginarios y de estar formalmen-
na". Se lamenta de la incapacidad que hemos tenido te homologados por las mismas leyes, sin que ello
los guatemaltecos para forjar una identidad nacional, suponga en la práctica el gozar de los mismos dere-
que llama, nacionalismo positivo, y opina que no so- chos. Lo más importante es que considera que esta
mos una nación en el sentido étnico porque no procura- ciudadanía debe de estar fundamentada en la elabo-
mos convertir a Guatemala en un conglomerado unifor- ración de una legislación especial que frene los abu-
me que siente las bases de una verdadera nacionalidad. sos y remedie los males del pasado, para garantizar a
los indígenas derechos específicos, como puede ser la
Plantea la necesidad de hacer un esfuerzo común educación en su propio idioma, un respeto a sus cos-
"de incorporar al indígena y de absorber toda ln canti' tumbres y a su cultura, una profunda tolerancia ha-
dad de progreso, dc cultura y de ciuilización que nos cia su cultura y su religión.
toca". Considera que es una locura desentenderse de
la población indígena, como otros autores pretenden, Pero nuestro autor no se queda simplemente en
porque éstos no poseen el mismo progreso, y cree que una posición multicultural basada en el respeto a los
es necesario valorar la cultura indígena, respetar sus derechos del Otro y en el reconocimiento de su dife-
costumbres y religión, dotarlos de tierra para cultivar, rencia étnico cultural. Considera que el respeto a la
proporcionarles educación en su propio idioma, es de- diferencia y el pleno reconocimiento de sus derechos dife-
cir incorporarlos plenamente como ciudadanos. renciados no les asegura el ejercicio pleno de su ciudada-
nía, porque el voto y el reconocimiento de la pluralidad
Resulta interesante resaltar que para él la incorpo- cultt¡ral no son el elemento clave, porque el poder político
ración a la ciudadanía y a la construcción de la nación no se consigrre si no se posee igualdad económica.
pasa por la dotación de una educación, de una legisla-
ción especial y sobre todo de la adquisición de tierras. De ahí que afronte el problema central en su libro:
Sólo así se puede contribuir "en la formación de un el derecho a la diferencia debe ir acompañado de una
todo homogéneo que constituya una nación".aa igualdad económica, y esa igualdad pasa por el repar-
to de las tierras laborales que -como opina Muñoz-
Este planteamiento difiere sustancialmente al de les permita convertirse en propietarios y miembros
la nación homogénea por la vÍa del mestizaje y de la de pleno derecho de la nación guatemalteca, elemen-
hibridación cultural. No hay ninguna mención a que to fundamental para el progreso de las naciones'48
la homogeneidad se alcance por un proceso de
ladinización. Tampoco, como opina Tbracena, pare- Así pues la nacionalidad positiva, para Muñoz,
ce que en los autores estudiados exista un proyecto pasa indefectiblemente por la adquisición de la ciu-
de nación ladina, ni una propuesta integracionista o dadanía plena y diferenciada, por el reparto de la tie-
asimilacionista como condición para la adquisición na y de la riqueza y por el pleno reconocimiento de los
de la ciudadanía y para la fundación de la nación. derechos individuales, sociales económicos y cultura-
les de todos los grupos sociales que habitan la nación.
No, éste no es el proyecto de J. Muñoz, ni de otros
autores de la generación del 20, a los que hemos es- Solo así desde una óptica multicultural y a través
tudiado. Frente a los partidarios de la nación del ejercicio de la interculturalidad, cultivando los va-
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Elites, Farnilias y Redes de Poder en las Sociedades Mesoamericanas
indígenasya eran una civilización en decadenciay que Las soluciones que propone son bastante más
desde entonces no han hecho más que degenerar, superficiales y menos elaboradas que las de Muñoz,
debido a la incapacidad de los indios para adaptarse al que plantea soluciones juúdicas, sociales y políticas
nuevo medio físico y cultural. Contrariamente al de largo alcance. Para Asturias, resulta muy difícil
planteamiento de Muñoz, Asturias considera que la alcanzar la homogeneidad racial, cultural y lingüísti-
civilización indígena es una cultura atrasaday su raza cade un país como Guatemalaque cuenta con porciones
es inferior, tanto en los aspectos físicos, como en los sociales de civilización decadente y cultura retrasada
psicológicos. como la indígena, y de civilización o cultura superior
como la mestiza. s7
Su principal preocupación no se centra en la des-
cripción física o psicológica del indio antes menciona- Argumenta que la civilización hubiera podido ser
da, sino en tratar de probar la hipótesis sobre las causas una solución pero que existieron obstáculos históri-
por las que el indio se ha ido degenerando a lo largo de cos, sociales y culturales que lo impidieron: las prohi-
la historia y por qué su civilización se encuentra en biciones legales de los españoles, las diferencias de
decadencia. Con una clara influencia Leboniana, civilización, la separación entre indios y españoles, etc'
plantea que una de las principales razones fue la Descarta esta posibilidad diciendo que "el cruzamien-
incapacidad de las razas inferiores de adaptarse al to es más factible cuando se encuenttan pueblos que
medio. En el capítulo ! sobre la sociopatía del indio, poseen un grado de ciuilización patecida".s8
recurre a todas las premisas del positivismo y del
evolucionismo spenceriano al comparar a los pueblos Contrariamente a los autores contemporáneos
y civilizaciones con el organismo humano y con la mexicanos partidarios de la mestizofilia, no asume esta
evolución de las plantas. Mediante la aplicación posición ni la propone como fórmula para mejorar la
mecánica de este símil, llega a la conclusión que la patria y construir la nación, posiblemente por partir
rcza indígena, a lo largo de la historia, en lugar de de las tesis lebonianas de la inferioridad intrínseca del
progresar y civilizarse ha sufrido un proceso gradual e indio y de su fatal e inevitable degeneración.
irreversible de degeneración física, fisiológica y
psicológica. En un pánafo muy esclarecedor, plantea por qué
los indígenas no pueden constituir la base sobre la
Con similares argumentos propios de Taine y Le que descanse la nación:
Bon55, considera que el indio "psíquicamente reúne
los signos indudables de la degeneración, es Íanático "sociedades que presentan anomalías tan ptofun-
toxicómano y cruel"y ello es lo que provoca "la deca- das en su desarrollo, que se les ve caminat en sentido
dencia de Ia raza indígena'. de menos; cuyo malestar moral y desconcierto econó-
mico son extremos; sin conciencia iurídica y falta de
Al igual que los teóricos europeos de la época, salud intelectual ymoral, no puede setla base sobrela
considera que esta degeneración es irreversible y no que descanse el futuro de una Nación, que' como
puede ser subsanada por medio de una legislación Guatemala, aspim juskmente a caminos de petfrcciona-
adecuada, de la educación o de la modificación de sus miento que le lleuan a uiuir una ralidad meiot'.
costumbres. A su juicio, éste es un hecho que no tiene
fácil resolución a corto plazo. De ahí su propuesta final Creo que este párrafo expresa con una claridad
de solucionar "el problema del indio". Las causas meridiana cual era la preocupación de la generación
aducidas de la degeneración son la alimentación, la del2O acerca del "problema del indio". No era una
falta absoluta de higiene, excesivo trabajo, endemias preocupación por su estado de pobreza o por su situa-
tropicales y enfermedades, alcoholismo, la miseria y la ción de marginación política y de exclusión social, no
última y más importante a su juicio es, la falta de era porque de pronto hubieran decidido visibilizarlo y
cruzamiento.56 convertirlo en ciudadano de pleno derecho, no era por
una preocupación social o moral.
Sus propuestas para redimir al indio y lograr su
regeneración son varias: la educación, la higieniza- El "indio" emerge de nuevo como problema al re-
ción, la erradicación de las enfermedades, aunque se flexionar sobre la Nación y al tener que pensar en qué
muestra escéptico y considera que sólo se puede atajar lugar o qué papel se le iba a asignar en la construc-
el mal, pero no resolverlo. Con el pesimismo propio de ción de la nación y si éste podía o debía ser actor
los teóricos del racialismo, cree que sólo se puede principal en la formulación de la nacionalidad. En esta
retardar su degeneración, pero no resolver el problema. coyuntura histórica, las identidades colectivas
Veamos cual es la propuesta de Asturias y de otros Aquí la influencia de Renan y de Theociste, y otros
de la generación del 20 al respecto. autores racialistas latinoamericanos como Ingenieros
y Gamio, resultan evidentes. Ya Renan pensaba que el todo homogéneo que represente al conjunto de la
meior medio para regenerar a las razas inferiores era el población? éCómo sentirse identificados con la raza
aporte de una sangre de calidad superior y planteaba indígena? áCómo constituir un conglomerado étnico,
ya las bases de un proyecto eugenésico. 60 En el fondo, racial, cultural y civilizatorio? aQué papel y qué lugar
lo que estos autores y sus adaptadores latinoamerica- se le adjudicará al indio?
nosestánplanteando es un nuevo modelo de sociedad
y de Estado -están imaginando un proyecto de nación. Resulta difícil en esta etapa invisibilizarlos como
en el pasado, no resulta fácil omitir su presencia y su
Para casi todos ellos, como para Asturias y Quin- protagonismo después de la revolución mexicana, no
tana, la mejor fórmula para transformar la sociedad y parece razonable retrasar por más tiempo la formación
evitar la degeneración y el declive de la cMlización, es de la nación en un momento cuando otras experien-
la eugenesia, la mejora de la especie a través del cias como la boliviana, peruana, brasileña o mexica-
cruzamiento con razas superiores. Ya otro autor de la na, estiin llevando experiencias similares de búsqueda
época, Theociste, plantea claramente en sus escritos de la identidad nacional. Resulta difícil no reflexionar,
esta opción: en este período sobre los fundamentos de la nación, en
un país en donde raza y etnia, raza y nación se
"El segttndo medio de acción sobre la sociedad es la encuentran inextricablemente unidos.
eugenesia o el mejoramiento de la especie. Una
aplicación importante de los descubrimientos de la Sin lugar a dudas son múltiples las soluciones
frsiología y del principio de la selección, podría lleuar a apuntadas por la generación del20, pero el proyecto
la creación de una raza superior que tuuiera derecho a de nación eugenésica surge claramente vinculado a
sino las dictaduras de Estrada, Cabrera y de Ubico, a las
-goberna4 no solamente en uirtud de su ciencia,
en la superioridad misma de su sangre, de su cerebro y élites de poder y a las é[tes intelectuales de la genera-
de sus neruios." ción del 20, quienes en un porcentaie representativo
apostaron por el blanqueamiento de la nación y la
Aquí el planteamiento paretiano de que ciencia, regeneración del indio por la vía del cruzamiento.
fuerza física y moral e inteligencia son la base para la Asturias, como otros autores de su época, apostó por
formación de las élites políticas modernas queda ple- esa solución, que a mi juicio se convirtió en el nuevo
namente justificada. Y ipor qué no! Se adaptaba per- discurso hegemónico de dominación.
fectamente a las necesidades de un país gobernado por
una oligarquía de criollos, que se consideraban blancos "sangre nueva, he aquíla diuisa para salvar al indio
y sin mezcla de sangre, un país incorporado a la de sus estado actual. Hay que contrapesat sus
economía cafetalera que necesitaba abundante mano defrciencias rttncionales, sus uicios motales y sus can-
de obra barata y un nuevo lenguaje de dominación, el sancios biológicos. Hay que volverlo a la uida pata que
racialismo, así como un nuevo modelo de nación, la aduieña en esta hora de conmociones, Ia obligación que
nación eugenésica. A esta nación no puede incorporarse tiene de contribuir al triunfo de los ideales que la
Humanidad se esfiterza por alcanzar EI estancamiento
los indígenas, hace falta un blanqueamiento, un
en que se encuentta la raza indígena, su inmotalidad,
mejoramiento genético de la especie, antes de pensar
su inacción, su rudo modo de pensa4 tienen otigen en la
en incorporarlos como una matriz cultural propia a la
falta de corrientes sanguíneas que la impulsen con
nación. De ahí que para Asturias esta solución 61
uigoros o anh elo de progres o"
represente un remedio heroico, una solución radical
que resueiva deraízel problema indígena y que "lleve
A modo de reflexión final nos preguntaríamos: áde
al afianzamiento de las libertades y a Ia Íormación de qué modelo de nación están hablando los dos autores
Ia nacionalidad guatemalteca. "Su propuesta es clara: estudiados? De un modelo de nación racial, basada
'lPara resolver el problema actual del indio, al par que exclusivamente en laraza como elemento constitutorio,
abrir escuelas, se necesita transfrtndir sangrc nueua de una nación cultural que, como opina Renan y otros,
en sas venas... Sangre nueva, he ahí la diuisa'. incorpora lataza, al lengua, la religión, la geografía y
62. O están
sobretodo un pasado y un linaje común
A Miguel Ángel Asturias, como a otros autores, lo refiriéndose a un modelo de nación cívico política,
que les preocupa no es el problema del indio, sino el basada en la existencia de un territorio, una legislación
modelo de nación. iQuiénes van a ser los actores de y educación común, así como en la incorporación de
este conglomerado? ¿Cómo se van a fundir en un todos los habitantes a los derechos de ciudadanía.63
A nuestro juicio están hablando de dos modelos co, supone una necesidad de asegurar el vínculo entre
opuestos. f. Muñoz basa su imaginario en conceptos raza y nación, a poder ser "blanca" por definición.
cívico-políticos, que presuponen la representación de
los derechqs de todos los ciudadanos, incluyendo los Este nuevo discurso de dominación se impone
derechos culturales. Está planteando que la nación como el hegemónico durante un largo período y no
viene determinada por las leyes, la educación y los desaparece del imaginario racista de las élites de po-
derechos de ciudadanía, pero que éstos se adquieren, der hasta la actualidad. No resulta casual que en mi
no por la vía de la asimilación o simplemente de la encuesta, las soluciones eugenésicas y del extermi-
homogeneización, sino por el respeto y la tolerancia nio del indígena representen un porcentaje del 15%
a sus derechos específicos. En otras palabras está de la muestra, y que en la actualidad formen parte de
hablando de una nación multicultural. la opinión pública en la prensa nacional.6a
Por el contrario, el modelo propuesto por Asturias Para finalizar citamos la respuesta de uno de nues-
está fundamentado en una tipología de nación étnica, tros entrevistados partidarios de la mejora delaraza,
más bien racial, eugenésica, en donde la nación se que a la pregunta sobre las propuestas para integrar
forja por la fusión de sangres y por el cruzamiento indígenas respondió:
con razas superiores, por la vía de la homogeneización
racial. Ello supone poner el énfasis en un modelo de "I-a única soluciónpm Guatenula a meiorar la raza
nación étnicamente blanca, con hegemonía de la cul- y traer sementnLes arios pra me¡orarla. Yo tuae en mi
tura blanca u occidental. Una nación en donde los finca durante muchos añcs a un ad,ministrador alcmán
ancestros comunes no deben ser los españoles y los y por cada india que prma fu Iepgg fu atra 20 ülnres" .
mayas, sino los alemanes o aust¡iacos, y en donde las
élites blancas criollas y ladinas deben conducir los Esta respuesta es muy ilustrativa de la ügencia del
destinos de Ia nación. Este proyecto eugenésico, que planteamiento eugenésico, de las décadas del 2O y 30
se convierte en hegemónico durante el período de Ubi- en Guatemala, en el imaginario de la élite de poder.
Citas y Notas
' Sobre este tema véase los análisis de L. Stone, El pasado y el Presente, México, Siglo XXI, 1981; P. Berger y Th.
I-uckman, La construcción de la realidad social, Buenos Aires, Amorrortu, 1972, y L. Lomnitz, Redes social¿s,
cultura y poder. Ensayos de antropología latinoamericana, México, Flacso, 1994. Especialmente el concepto de redes
sociales en M. Bertrand, "De la famitia a la red de sociabílidad", en Reaista Mexicana de Sociología, No 2, Vol 61,
abril-junio 1999, pp. 107-I35.
2. Este período de iglO a 1945 responde a la emergencia de los populismos en América Latina y de la búsqueda de
mecanismos de inclusión a nuevos actores sociales, como campesinos obreros, etc. Véase O. Ianni, La formación del
Estado Populista, México, ERA, 1980; así como los trabajos de A. Smtih sobre l¿ ldentidad Nacional, Madrid,
kama, L997; G. Elley y G. Suny, Becoming National, a reader, Oxford, Oxford University Press, 1996, sobre la
conformación de la nación y el Estado modemo.
Quintana, La Historia de Ia Generación del20, Guatemala, Tipografía Nacional, 1971.
3. Véase E.
a.
Véase M. Casaús Arzú, GuatemaLa Linaie y Racismo, Guatemala Flacso, 1995, y Teresa García Giráldez, "La emigra-
ción vasca e4 Centroamérica. Las redes familiares como estructuras de poder", Madrid, tesis doctoral' UAM, 1993-
fosé Barnoya, "Los doscientos pechos y las cuatrocientas nalgas", en Revista Monográfica de la
5. Sobre este tema véase
USAC, con motivo del Centenario de la Huelga de Dolores, Guatemala, USAC, 1998.
6. Sobre este tema véase la interesante tesis de Teresa García Giráldez sobre "Nación cívica, Nación étnica en el pensa-
miento político cent¡oamericano del siglo XIX", ponencia presentada en el II Congreso de Historia de Centroamérica,
Costa Rica, 1996.
T.Sobre la importancia de la Huelga de Dolores como movimiento de protesta contra la- dictadura, así como el himno
estudiantil la Chalana y la publicación del No nos tientes, véase el número especial de la revista de la USAC, en el
Centenario de la Huelgá de Dolores, Guatemala, 1998, especialmente los artículos de David Pinto Díaz, fosé Barnoya
García, así como el de"Carlos Guzmán Bockle¡ "La Huelga de Dolores que vivió con mi generación, L947-L977". Es
digno áe destacar la novela de M. A. Asturias, Viernes de Dolores, Losada, Buenos Aires, L972, en la que relata gran
parte del ambiente festivo de la época.
101
Revista de Historia No.13. IHNCA. 1999
Elites, Familias y Redes de Poder en las sociedades Mesoamericanas
8' Recordemos que varios de los ft¡ndadores de-estas revistas en la década del 20 van a ser los editores y directores de la
prensa nacional a partir de 1945, periódicos como EJ imparcial, Prensa Libre, La Hora, creando una corriente de
opinión muy influyente en las élites de poder capitalinas. Sobre este tema véase E. Quintana, El Ocaso dc una Gene-
ración que hizo Historia, Guatemala, Marroquín hnos, 1976.
e En la revista Studium del 10 de junio
de 7922, encontramos el artículo de José Vasconcelos; et l0 de leptiembre de
L923 aparece un interesante debate entre /uan Ortos Gonzálezy losé Ingenieros.sobre la nación, así como ótro artículo
de Espinosa Altamirano acerca de los problemas raciales en América Central. Esto nos permite confiráar h influencia
de estos pensadores en el imaginario de las élites de la generación del20, no como un hecho aislado, sino como parte
de la trama narrativa en el discurso hegemónico de la época.
r0'La revista Vida funciona desde
el 12 de septiembre de 1925 al 12 dejunio de 1927. Los directores de la misma fueron:
Clemente Marroquín, Ca¡los Rendón Barnoya, Federico Mora y Eduardo Mayora. El tema básico es la regeneración
moral de la sociedad, la unión centroamericana, la eugenesia como solución a los males del país y.Ia ampliáción de la
ciudadanía a las mujeres. Es especialmente interesante la Sección de la Sociedad Gabriela tvtistral, en dónde se deba-
ten temas feministas. Véase Revista VIDA, lZ de diciembre del925.
rr'Sobre los principios rectores del
liberalismo decimonónico y la influencia del positivismo, ver Charles Hale, "Las ideas
políticas y sociales en América Latina 1870-1930" en L. Bethell, Historia de América Latina, vol. 8. Cambridge
University Press, 1991; publicada también en español por Barcelona, Crítica, 1991. Así como Ch. Hale, El liberulismo
mexicano en Ia época de Mora, 1821-1853, México, siglo XXI, L972.
r2'Resulta interesante como E.
Quintana, haciendo una reflexión sobre cuál era el credo de esta generación, opina :
"Amor a la patria, amor por la cultura y la instrucción, patriotismo guatemalteco y amoi por Ia unidad de
Centroaméric¿". Estos constituyen los ideales de la generación del 20. Yéase La Historia de Ia Gene¡ación..., op. cit.
. p. 372 y sigs. Por nación está entendiendo: "La unidad. de ciudadanos de buena fe capaces de foriar una patria nueaa
en donde el indio tenga cabida en el futuro',.
'3J. Fernando luárez Muñoz, El indio guatemalfeco, ensayo de sociología nacionalista, Guatemala, Tipografía Nacio-
nal, 1931. Otros autores de la generación de L92O, como Miguel Angel Asturias, Epaminondas Quintana, Horacio
Espinosa Altamirano, Cesar Brañas, Carlos Samayoa Chinchilla y David Vela, que los analizaremos con menor detalle,
manifiestan esta misma preocupación y sus ensayos pretenden reflexionar sobre donde o como hacer con el indio y la
naóión. Véase M. A. Asturias, El probbma del indio..., tesis doctoral, Guatemala 1923, etc. Así como "La importancia
del factor económico en la regeneración de Centroamérica, algunas ideas para su mejor comprensión", en Revista
VIDA, 12 de septiembre d,e L925, y los editoriales del 3 y 31 de octubre de 1925.
¡aVéase el prólogo de Cesar Brañas a la segunda parte del libro de
Juárez Muñoz, publicado en 1946. A pesar de no
aparecer citado en el libro de Epaminondas Quintana, La Historia de la Generación de 7920, como uno de los
fundadores de la generación, posiblemente por tener más edad que el grupo fundador, sí está ligado profesional,
política y afectivamente a ellos por ser compañero de trabajo en el periodismo, por su contribución literaria, por sus
actividades políticas y por su amistad con muchos de ellos, tal y como lo relata Cesar Braúas y Flavio Guillén en el
prólogo. Nosotros lo hemos vinculado a esta red de étites intelectuales urbanas, por su pensamiento y por la influencia
común de las corrientes racialistas y mestizófilas, así como por su posible vinculación con las redes teosóficas de la época.
rs Sobre
estos autores, véase el libro de R. Graham, The idea of race in Latin America, 1870- 1940, Austin Univérsity
Press, 1990, y sobre su enorrne influencia en todo el continente latinoamericano, especialmente Sarmiento, Ingenieros
y Bunge -éste último, claro partidario del blanqueamiento por la vía de la eugenesia.
t6A juicio de Todorov, este grupo de autores europeos, muy
influidos por el cientificismo y el positivismo de la época,
elaboran una doctrina de las razas superiores e inferiores que él denomina teorías racialistas, definiéndolas como un
conjunto coherente de proposiciones que apoyadas todas en el determinismo científico, consideran la existencia real
de las¡azas y la ierarquizaciín de las mismas en inferiores y superiores según se acerquen al tipo ideal europeo
caucásico. Consideran que hay un determinismo causal entre lo físico y lo moral y una jerarquía única de valorei. A
este corpus de teorías lo denomina racialismo o determinismo cientificista; otros autores, como Hale, lo denominan
teoría racial o positivismo decimonónico.
'7'Véase !. Young, Colonial desire, hibridity in theory, culture and race-London, Routledge, 1995, pp.l00 y sigs. Así
como Todorov, Noso/ros y los Otros, México, siglo XXI, 1991 pp. 161 y sigs; M. Banton, RaciatTiáories, -Camlridge
University Press, 1,987.
rs Para
Gobineau, como para Muñoz, existe una estrecha relación entre raza y civilización; para ambos, las razas no
vienen determinadas por el medio ambiente o por el clima, como pensaría Espinosa Altamiráno, sino por la mezcla de
s_angres. "I-os pueblos se degeneran más que a consecuencia y en proporción a las mezcl,as que súften,,... La aida
_no
de una raza está hecha de una serie infinita de mezclas, y, por ende, tle mancillas", en T Todorov, Nosotros y los
Otros, México, siglo XXI, 1991, p.164.
re'Véase R. Young, Cobnial desires..,,
op cit, y M. Banton, RacialTheories, Cambridge University Press, 1987.
20M. A. Asturias, El problema del indio, tesis de grado,
op. cit. p.7. A nuestro juicio, la influencia de las teorías
eugenésicas desplazan el proyecto de integración por la vía de Ia ladinización del siglo XIX y se convierten en el
discurso y la política hegemónica a lo largo de las décadas del 20 y 30. Los interesantes debates de Ia prensa nacional,
especialmente el de Carlos Samayoa Chinchilla con Ramón Aceña Durán , 'Algo más acerca del indio", El Imparcial,
r02
Revista de Historia No.13. IHNCA. 1999
Marta Elena Casaus Arzú
28 de enero, 1937, resultan enormemente esclarecedores al respecto. En EI Impareial, 11 de febrero de 1950, "Una
inmigración activa y de aspiraciones ayudaría a la regeneración nacional", se habla del lastre que representan los
indígenas y de que el "cruzamiento y la imitación de costunbres, generaría la redención del indio y nos daría una
mejora de la raza". Los artículos de Eduardo Mayora en la revista Vidc, "Nuestro modo de sel esbozo psicológico",
Revista No 4, 3 de octubre de 1925, en la que claramente aboga por una solución eugenésica para solvent¡u los males
de la nación. Sobre la importancia del pensamiento eugenésico en América Latina, véase: N. Leys Stepan, The hour of
eugenics, race gender and nation in Latin America, Ithaca, Cornell University Press, 1991.
2¡.Este mismo concepto es utilizado por Manuel Gamio en su artículo sobre "EI mestizaie eugenésico en la América Indo-
Ibérica", en la revista Analcs de ln Sociednd de Geogratía e Historia de Guatemal.a, Tomo IV, un. 3, marzo 1930, pp.
333-337 . Gamio, socio honorario de la revista, afirma que existe una dicotomía entre la civilización moderna y la raza
blanca y la mayoría de raza indígena. La solución a este problema radica en la aplicación de la eugenesia. De la misma
manera M. A. Asturias vincula la civilización moderna a los mestizos o ladinos y la atrasada a la población indígena.
Véase, M. A. Asturias, El probLema social d¿I indio... p. 74 y sigs.
z.Véase la interesante y aguda obra de Ch. Hale acerca del "El pensamiento racial en América Latina", op. cit, y especial-
mente en los intelectuales del Porfiriato, en su libro Justo Siena, un liberal dcl porfiriato, México, FCE, 1997.
¡.Véase
luárez Muñoz, El indio guatemalteco..., op cit, p. 49. Si bien su primera parte está muy vinculado al positivismo
de la época, posteriormente da. un vuelco a su pensamiento, probablemente imbuido por las ideas teosóficas del
momento y a su relación con otros escritores teósofos como Flavio Guillen, Arévalo Martínez y Carlos Wyld Ospina,
los dos últimos fundadores de varias sociedades teosóficas y editores de la revista Estud.io, 1922. Yéase la No I, p.1,
marzo L922. Las ideas vertidas en este párrafo eran muy propias de la teosofía.
2a
Sobre estos temas, cabe mencionar el artículo de M. Quiiada, "En torno al pensamiento racial en Hispanoamérica: una
reflexión historiográfic a", en Estudios interdisciplinarios de América Latina y el Caribe, Universidad de Tel Aviv, vol.
3, enero-junio, 1,092, pp. 110-129. Octavio Lanni, Clase e Nacao, Brasil, Petropolis, 1986 y'A question racial no
Brasil", en Desigual.d.ad.racial no Brasil contemporaneo, MGSP ed. Belo Horizonte, 1991,
25.Véase H. Espinósa Altamirano, Et tibro del Buen Ciudadano, Guatemalá, 1950. Este autor poco conocido fue- miem-
bro fundadof de la generación y contribuyó con la revista editada por un grupo de intelectuales universitarios llamada
Studium, fundada 7n t92O. Escribe varios artículos sobre derecho internacional y sobry el desequilibrio racial en
Centroamérica. La obsesión por el tema de la ciudadanía es recurrente a lo largo de fines del siglo XIX y principio-s del
siglo XX. Encontramos que ñafael Estrada Cabrera envía a hacer a Barcelona, a la Librería Parea, en mayo de 1915'-un
breviario de conducta titulado, "Reglas y preceptos para llegar a ser modelo de ciudadanía", extractado del libro
titulado EI perfecto ciudadano, de piblo óoumer, editado por M. Parera. Se hizo un tiraie de 50.000 ejemplares, para
"formar a los jóvenes ciudadanos de la noble república de Guatemala"'
26.Véase M. A. Aituria s, El probbma social del indió..., op cit. p. 57 y sigs. El artículo de Marcia Vázquez de Shwank, acerca
del "Indígena en la narrativa Asturiana", en Cultura d.e Guatemala, vol III, Guatemala, Agosto de 1997, apunta en la
misma dirección, frente al de Arturo A¡ias en este mismo volumen que opina como Asturias en Hombres d.e Maí2,
reconstituye h identidad ladina e indígena. Véase Cultu¡a de Guatemala, I Congreso de Estudios Mayas, Agosto, 1997'
27'M. A. Astürias, El probtema social del Indio"., op. cit-, p- 61
28.por nación homogénea no estamos entendiendo I-o que lós autores de la época definen com_o "una nación racialmente
homogénea', o po"r la idea de una homogen eización racial por la vía del mestizaje. Por nación homogénea entendemos
y
el proóeso histérico político ocurrido entre 1920 y 1930 de intentar la integración del indígena y hacerlo ciudadano
miembro de la nación. Un intento de valoración e integración de los valores indígenas para la construcción de un
proyecto nacional, de síntesis cultural. Véase los artículoi de Mónica Quijada, "La nación reformulada: México, Perú
y argentina 1900-1930", en A. Annino, L. Castro, y F. X. Guerra, De los imperios a las Naciones: Iberoamérica,
Madrid, Ibercaja, 1994.
2e.Si bien hay una línea que aboga por la integración vía la ladinización, la acultu¡ación o el-mestizaje, gran parte de los
autores están pe¡sandb que el mil de la naiión y la incapacidad de formular un proyecto homogéneo se encuentra-en
la fusión de razas y en elhestizaje y esto se trad'uce en tódo el pensamiento de la época e influye hasta nuestros días'
3o.Sobre este tema, b. ne I-eOn ÁagOn, La Caíd.a de un régimen, lorge ubico, Guatemala, Flacso, 1995; Carlos
Samayoa Chinchilla EI dictador y ito, ueríd.ico relato sobre ia aida del general Ubico, Guatemala, Ed'
Piedra Santa,
1967;-así como los debates upur"óidor en, El Imparcial, Nuestro Diario Tiempos y Nuea2* Especialmerrte relevante es
la discusión entre Aceña Ouian y Samayoa Chinchilla, sobre el papel que debía ocupar el indígena en la construcción
de la nación y en la ampliación de la ciudadanía.
1931, p. 42 y sigs. Este
3r.Véase
J. Muñoz, EI ináio Guatemalteco, Ensayo de sociología nacionalista, Guatemala,
mismo razonamiento es compartido por otros autores latinoamericanos como Alcides Arguedas en Bolivia, Bunge
e
Ingenieros en Argentina, o F. pimentél en México. Resulta interesante los comentarios de la revista Studium, en donde
de los libros mas leídos
consideran a ¡ose tngeníeros como el pensador de mayor relevancia latinoamericana. En la lista
aparece este autor con Sociolagía Argentina y las Fuenas Mora!q'..
i2.sobre este tema véase M. casaúi, "El pensamíento racial y la nación", III congreso centroamericano de Historia, san
Guatemala, op. Cit; y A',Tar-acena, Inuención criolLa'
losé, Costa Rica, 1.996; E. Barillas, Ei problcma det indio en
sueño ladino, pesadill-a indígena, Los Ntos de Guatemal.a de l.a región a Estado,1740-1850, Guatemala, CIRMA,1997'
103
Revista de Historia No.13. IHNCA. 1999
Elites, Familias y Redes de poder en las sociedades Mesoamericanas
53'Molina Enríquez,
revirtiendo las tesis racialistas de la degeneración de la fusión de sangres, considera que
el mestizo es
una raza superior a la española e indígena, por tener uni m"yor energía y vitalidad y pó.
,áb".r" adaptar -"jo,qu" to,
otros. dos 8rupos raciales. ello ei por lo que el mestizó prerotáerl e tmponánl Ia nacionalidad mexicana,,. El
-"Por
mestizo a su juicio es el hombre destinado idetentar el poder de México. Las tesis Molinianas
serán llevadas a su
máximo exponente con Vasconcelos para quien, fruto de li fetiz fusión entre españoles
e indígenas ," un"
nueva síntesis superior a la anterio¡, ia razá cósmica; en palabras textuales: "es-esta
á-iiilus¡a,
mezcl.a dí ,ongr"r,"ng"nJrurá
de estirpes donde debemos de buscar elrasgofundamentai*ta idiosincraciaiberoamericana,,,p.2g,
enl.Vasconcelos,
-.!-a razaMuñoz,
3_aluárez
Cósmica, México, Espasa Calpe, 1996.
EI indio guatemalteco..., op. cit., pp. 97 y 9g.
35
E¡t esta segulda parte del libro la influencia de -aitorei mexicanos es muy fuerte. ya
Vicente Riva palacios , en El
contrato social, hablaba de la creación d9 un pueblo único y de una nacionalidad propia
basada en una raza, los
mestizos' Thmbién Molina Enríq-uez pensaba qui la redención del indio no era posiblelin
un reparto de tierras. sobre
este tema véase la interesante obra de A. Besave Benítez, Mérico Mestizo, ¡iaus¡s
del nacionalismo me*icano, en
torno a la mestizoofilia dc Andrés Molina Enríquez, México, FCE, 1992; así
como la obra de D. Bradin g, Loi-oiij"n",
del nacionalismo mexicanq México, ERA, 19gJ.
56J' Muñoz, El indio
guatemalteco...,
_op.
cit., p. r42 y 143. De los autores estudiados hasta el momento, y de los autores
trabajados de la generación del 20, l. Muñoi, como sociólogo, es el úrico que se aparta del positivismo é int"ntu p"nru.
en un proyecto de nación,homogénea, mediante la reform-ulación de la nación y lu incotporación
del inai!"na'"omo
suieto histórico de pleno derecho, en igualdad de-condiciones que el resto de loi ciudadanos.
Es en este punto donde
sus presupuestos varían sustancialmente de los de Ia generacién del 20. Puede haber sido
pensamiento mexicano, como de la teosofía, que va i modificar sustancialmente
fruto de la influencia del
todo el pensamiento ae ü ápoca.
Véase M' Casaús, "LaYoz de,las mujeres guatemaltecas en la década del20", acerca
de la influencia de la teosofía en
la creación de nuevas redes de sociá¡itaia y en la generación de opinión p,iuti"u ciudaJana.
37f' R' González Ponciano,
en^"E¡ag sanglej nó estániim¡ias, Modernidad y pensamiento civilizatorio en Guatemala,,,
en C' Arenas, Ch. y G, Palma, ¿Racismo a d.ebate'en Guatemaú'i, Guatemala, Avancso, 1999. plantea la
posición de Juárez -Hale
Muñoz, como adalid de la degeneración de la raza indígena, según el ái*io ¿" sesiones de Guate-
mala, en 1924, desconociendo el resto de su-peñsamiento, dirigido hacia úna ionñulación incluyente
del ináíg-na y
abogando por su incorporación plena a la ciudádanía. Lo que no-cabe duda, y en eso coincidimos
áon eoncianá,? q,re
la solución para la mayor parte de las élites intelectuales áe h época pasabipor la eugenesia. por ello no coincidimos
con Palmer, en su afirmación de que en Guatemala la solución eúgeneiica no iue reteva"nte; al contrario fo.r¿ purt.
A"l
discu¡so hegemónico durante más de dos décadas. Vease S. Palmer, "Racismo intelectuaí en Costa Rica, 1g7b-1920,,,
en Mesoamérica, No 31, junio 1996, p.p. gg-121.
3E\ota Muiroz, El indio guatemalteco...,óp.
l' cit., p.t72 y 73. Eneste punto la similitud con los presupuestos de Molina
Enríquez- es- muy gttt{", ya que este autor ensu úliima fase rompe con el positivismo y
plantea la necesidad de
entrega de tierras a los indígenal Para hacerlos propietarios y miembros de la náción
mexicaná. Solo así podrá confor-
m¿use una verdadera nacionalidad. Véase A.
F * Benitei, México Mestizo...,op. cit., p. 84 y sigs. La lnfluencia se
deja sentir enluárez. Resulta interesante la influencia de M. óarnio enluárezMuñ'oz sobre Ia uiilir"u"ion ¿"i¿á.r"pt"
de nacionalidad positiva. Coincide con el capítulo lI, "Las Patrias y nacionaliddes de
América Latina,, del libro de
_-
Gamio, Farjando Patria, México, pornia, LSSZ, pp. i-tl.
3e'Así lo manifiestan en la literatura Miguel angei Asturias, Rafael Arévalo Martínez y FlavioGuillén, en el ensayo;
Epaminondas Quintana, Espinosa Altamirano,.-cardoza y Aragón, en el periodisro; lviuoáquín
Roja.s Hernández de
León, Samayoa Chinchilla.y David Ve-la, y casi todos loiautoies citados'anterior.""t",
trre también escribían en la
prensa y en las revistas editadas por el grupo generacional.
a0
sobre este tema véase Thnmas skidmoré, 'T.,aáal ideas and social policy in Brazil, 1g70-1940,,,
en Graham, The idea
of race in Latin america.,.,.o1t.
"i!.j F.yf.octavio rarui,
Palti, "Imaginación históricae identidad nacional, Argentina y Brasil, siglo
Plg"t'washington, LASA,I.985; Raca y Naciao... op. cit., sobre Brasil, ¿é
IX"'
formación de una cultura nacidnal indoamericana enPerú, I. vr. Á.gu.áu, ,-Zo
y sobre Bolivia, M. Irurozqui, La armonía de Las
desigualdades, elites y.conflicto de poder en Boliaia 1gB0-1.9.2ó, Madrid, csl y'cBS,1994.
ar'véase los artículos en
la prensa diaria de Mario. Rob.erto_Morales y Estuardo iapeta,'sobre la Nación,
identidades híbridas, el mestizaje y la multiculturalidad. Nos da una idea los mayas, las
de fa polémica existente entre mayas y
ladinos en torno al modelo de nación y la reforrnulación de las identidades colectivai.
M. Casaús Arzú, ,,Los proyectos
de integración social del indio y-el im-aginario nacional de las élites intelectuales guatemaliecas,
siglo XIX y XX,,, en
Reaista de Indias, No 217, sep-dic. 1999, pp. 7TS_g13.
. Como
a2
dice E' Florescano, en su libro Etnia,'Estado y Nación, México, Aguila4 1997.
Nuestr-o país, al igual que México,
fue.una. sociedad tejida con hilos de diferentes cllt,rrus, unu éorá"iui q"" rüur"¿ decisivamente el ser
nacional, una experiencia independiente que,alejó a los áiu"ruot "*p"ri"i.iu
actores sociales y una historia contemporánea que
rechazó los componentes de la nación tratándo de imponer su propio modelo.
._
4r'Qtps autores de la generación
del 20 también discuten el temain la prensa diaria; especialmente relevante es el
debate mantenido entre C' Samayoa Chinchilla, R. Aceña Durán,
J. Arzui M. Cáceres y A. Goubaud, en El Imparcial,
enero-febrero'1937. M. Gamio en su afículo aparecido en Guaiámala sobre "El mesiizaje
eugenésico..., op. cit., en
ra4
Revista de Historia No.13. IHNCA. 1999
Marta Elena Casaus Arzri
1930, no se muestra partidario de las tesis en boga en esos momentos acerca de la inferioridad del indio y de aquellos
que "sugieren su extinción para que el predominio de los blancos sea absoluto"; considera que estas-posiciones son
inhumañas y salvajes, pe.o il heiho de-mencionarlas es una prueba de que eran ideas y corrientes de pensamiento
comunes en el imaginario de la época.
4A nuestro juicio, cón estas palabras, luárez Muñoz está planteando que una nación debe componerse de aspectos
cívico-pohficos, pero respetando los aspectos étnicos y culturales, y lo dice claramente a lo largo de sus libros.-Y es
más, añade que solo así podemos llegari constituirnos en una nación homogénea. En este sentido, y por lo investigado
hasta el momento, que es él único autor que plantea una reformulación de la nación sobre la base de una
singularización de los"r"".os
valores propios de cada cultura y a partir de ahí de la síntesis de ambas.
a5
Por-nación eugenésica estamoi entendiendo el imaginario de nación que se proyecta a principios del siglo XX, en
algunas sociedldes latinoamericanas, en donde los factores biológicos y la herencia genética van a tener una enollne
inhuencia en la formación de la raza,la personalidad y la nación. Al partir del supuesto de la inferioridad genética del
indígena, ni la educación, ni la historia pbdratt redimii a las razas inferiores; únicamente el cruzamiento, la mezcla con
razai superiores, la eugenesia, podrá sólventar el problema. Como opina N. L. Stepan,TheHour of..., op.cit. p-105'
Durante los años 20 y30, dii"urto de la raza y il gé.tero se ligó a la construcción de la identidad nacional'
6.Nos sumamos al conóepto "lde multiculturalismo átaUórado por Carlos Giménez, Guía de conceptos sobre, migración,
racismo e interculturai¡dod, ¡vlad¡d, la Cueva del Oso, ls57 y de w Kimlyca, Ciudndanía multicultural, Barcelona,
Paidos, 1996.
47.Las últimas teorías de la ciudadanía plantean de cara a las minorías étnicas y a la migración,_o a los países pluriculturales,
que se hable de incorporación, y sé abandone las viejas teorías integracionistas-y asimilacionistas. Sobre este tema,
véase: E. Lamo de espinosa ,'óufuura, Estad.os y Ciudad.anos: (Jna aproximación cl.multicultutalismo en Europa,
Madrid, Alianza, 1gg5j M. PérezLedesma, (comp.), Ciudadaníay Democraci¿, Madrid, Ed. Pablo lglesias,2000'
as.En este sentido la influ'encia de los pensador"s mexicattos es indudable, sobre todo la de Molina Enríquez para quien
resulta necesario la elaboración de un pacto social que revalorice la cultura indígena y permita a los indígenas Ia
adquisición de tierras. M. Enríquez, Loi Grandes probl.emas nacionalcs, México, 8RA,1981-
ae.Véase el planteamiento de Ch.'Taylor sobre la diierencia profunda y Ia identidad comp^artida en, "The politics of
recognition,,, en A;tC;t.utt, iÉa.), Multiculturalism, brinceton-University Plelsr L994; así como
la "Guía de
Hoy: Reflexiones y Perspectiaas
Interculturalidad,,de óarlos Giménez, en M. Casaús y Carlos Giménez, Guatemala
interdisciplinarias, Madrid, AECI- UAM' 2000.
so.Véase el concepto de Estado contrainsurgente de E. Torres Rivas y G. Aguilera, Desde ^--,- el- autoritarismo a La Paz'
pai pocter Guatemala, Flacso, 1998'
Construyendo l" ito dcmoctacia enbueteiata: El fin del conlrainsurgerzfe,
51.por nuestra investigacíón no podemos coinciáii"án los pl'anteamientos de S. Palmer de que la eugenesia y el racismo
consideramos qtre formó
fueron irrelevantes en el peniamiento de las élites inteléctuales guatemaltecas; al contrario,
y la g".t"tu"iátt de opinión pr:r"Utica en la pre-nsa y en-las revistas de estas décadas,
parte del discurso hegemónico de
los planteamientos.de
debido a la influencia del pensamiento eugenésico laiino-americano. Coincidimos más con
estudio introductiuo
Gonzáiezponciano, y con Oante Liano, (ed.i, M. A. Asturi as, La arQuitectura de l"a Vida Nueaa,
Bulzoni, 1999, que constituye un excelente estudio introductorio acerca de los principales
y ed.ición faeimilar, Roma,
juveniud. También coincidimos con D. Liano acerca de la enorme
sustratos filosóficos de Asturias en su etapa de
Nosotros añadiríamos a éstos, el regeneracionismo espa-
influencia de Rodó e Ingenieros en todos eitos pensadores.
en pensadores como
ñol por la vía de A. posáda, Unamuno y más taide Ortega y Gasset,-y Ia influencia de la teosofía
tema, M. E' Casaús, "Lavoz
Oscar Wyld Ospina, Flavio Guillén y la Sociedad de Muj-eÁ Gabrielá Mistral. Sobre este
de las múieres guatemaltecas en la década del 20", en p¡ensa'
52.M. Gamio, en un artículo publicado en Roma titulado iComentarios sobre la evolución de los pueblos latinoamerica-
homogeneizar étnicamente a las
nos,,, Roma, Instituto poligráfico dello Stato, 1932, p.11, plantea la necesidad de
fobláciones' heterogéneas i puru ello sugieré "... afiaer
a iarios millones de europeos que carezcan de preiuicios
el tipo étnico para que
]ai¡a,tes... a fin d.e iacer más'fácit el crucb con Los el.ementos indígenas y obtener cuanto.antes
La mayoría de la población se uuelaa mestiza y por la tanto de
.estructura
homogénea" '
53.para Thine, el origen de la raza no es otra qtt" la adaptación- al medio. En palabras dt Taine: "un clima y una
situación diferentes, determinan en el animal y
"otá hombre, necesidades distintas y, por ende, un sistema de acciones
y iirrarÁente, uno dá . itstintos "n
difeíentes"."t A juicío de Taine, los factores que más influyen en el hombre son
"pit"J.r
el clima, los elementos geográficos, tas circunsiancias pálíticas y las condiciones sociales.
Todo ello produce las-facul-
k, y poí ende de ,rna naciOn. Le Bon modifica la ierarquía de las causas, considerando que
tades inherentes de una'ra
es la herencia, la sangre, lo qü" fo decide todo. Véase Todorov, Nosotros y.'..,
p. 184 y sigs.; C. Samayoa Chinchilla'
,Algo más acerca ¿el i"n¿io", ÉI Imparciat, 28 áe enero, 1937; M. A Asturias, El problema social"', op' cit', p' 84 y sigs'
'Turu""nu
5a.Es aquí donde no coincidimos con autores como A. e L Rodas, acerca de la COnStrucción de un proyec-
como actores políticos, fueron
to de nación ladina a fines del XIX v prinóipioi á"f xx. El mestizo y el ladino,
sotución que se imagine respecto al problema
prácticamente inexisientes a lo targo ae estas décadas. Cualquier
del indio no pasa por el mestizaie, sino p.;i";;;;;sia o hibridación genética'envezde cultural' Durante la
década d,el20 y 30, es un vocablo qu" .uri ; ;;;;;"" mencionado,
y él mestizaie como solución integradora
menos.
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Elites, Familias y Redes de poder en las sociedades Mesoamericanas
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