ESCENA V

CABALLERO: (el caballero aparece por la izquierda)

di, pastora, ¿no es así? La chica que conocí esta mañana.

MARION: Por Dios, si continúa, le brindará una gran cortesía.

CABALLERO: En verdad, querida amiga, no lo digo con mala intención, sino que voy allí a buscar
un pájaro que lleva una campanita.

MARION: Ves este seto, creo que lo encontrarás cerca, hace un minuto que lo vi volar.

CABALLERO: es por tu honor

MARION: seguramente sea así

CABALLERO: En verdad, si fueras tan justo renunciarías al pájaro y ganarías un amigo

MARION: Por Dios, vete porque estoy asustando por el miedo.

CABALLERO: ¿De quién?

MARION: Por Robin la verdad

CABALLERO: ¿Por él?

MARION: ¡Por supuesto! Si se supiera, se olvidaría de todo nuestro amor, y no hay nadie que
ame tanto.

CABALLERO: No hay nadie a quien debas tener miedo si estás conmigo.

MARION: Caballero, pronto los tendremos sobre nosotros, vete y déjame en paz, no tengo
tiempo para escuchar tus súplicas. Déjame con mi rebaño de ovejas.

CABALLERO: En verdad se ha terminado cualquier discusión contigo.

MARION: Pues vete. Además, algunas personas se ponen de tu lado, madre mía, nunca te
dejan ir.

CABALLERO: adiós mi pastorcilla y quédate. Ahora me presionaré para soportar (el caballero le
da la espalda a Marion y ve a Robin tratando de atrapar al halcón en el seto),

¿por qué mi Halcón muere así? el hombre que te dejó sin aliento. Haría un buen servicio
dedicando su tiempo

ROBIN: Vaya crimen hacerlo, tenía miedo de que se escapara.

CABALLERO: Pagaras por eso, recibiendo esta bofetada. Lo estrangulaste muy bruscamente.

ROBIN: boohoo! Dulce cielo boohoo! Buena gente.

CABALLERO: gritarías y luego te pondrías esto en la oreja

MARION: Madre mia! Escuche a robin, Creo que le están atacando.

(Corrió en dirección al seto para ayudar a Robin)

Vi que mis ovejas se habían ido. ¡Pobre de mí! ¡Vi al Caballero! Temía que hubiera sido
golpeado por mi culpa. Robin, querido amigo, ¿qué te pasa?

ROBIN: En verdad, querida amiga, me mató bastante

MARION: Por Dios, Robin, no has hecho bien en hacerlo pedazos.

CABALLERO: ¿Qué pasa con el daño que me hizo? ¿y mi halcón?

MARION: nunca ha sabido a sostener a esos pájaros. ¡pero por favor, caballero! Perdónalo.

CABALLERO: lo haré si te vienes conmigo

MARION: No lo pienso hacer.

CABALLERO: Muy bien. No deseo ninguna otra mujer, y deseo soportarte en este corral.

MARION: Me harías ponerme violenta de hecho. Robin, ¿puedes ayudarme?

(el caballero se lleva a Marion a la fuerza. Robin se sienta llorando en el montículo, con la
cabeza entre las manos.)

ROBIN: porque estoy todo derrumbado. ¡Mis primos llegarán demasiado tarde! Marion me
perderá.