Jerusalén y quien tendría la autoridad para enviar
la carta.
SIETE VERDADES PARA TI
EN MEDIO DE LA PANDEMIA
Una pastoral para la iglesia, desde la epístola
de Santiago en tiempo del Covid-19
Aiko Nobara Cristancho Torres
Es la epístola de Santiago una guía para el día de hoy, en el
que vivimos quizá la situación más extraña que algunos
pudieron experimentar, por causa del Covid-19 y del
confinamiento.
Santiago, el medio hermano de Jesús, a quien se le atribuye
esta carta y quien se identifica como “siervo de Dios y del
Señor Jesucristo”. * Existen algunas otras opciones de la
autoría, como Santiago, el hijo de Alfeo y hermano de Mateo
(Mat. 10:3); Santiago, “el de Judas” (Luc. 6:16), pariente
del apóstol Judas, no el Iscariote; Santiago, el hijo de
Zebedeo y hermano de Juan (Mat. 10:2); y Santiago,
“el menor”, o “el pequeño” (Mat. 27:56) . No obstante,
el más probable es el hermano de Jesús, por ser quien
después de la ascensión, toma la directiva en la iglesia de
Página 1 Tiempo de pensar
Santiago se dirige a las personas que están en la
diáspora (1:1), más exactamente los judíos y
cristianos esparcidos y en persecución,
probablemente desde el martirio de Esteban. Él
escribe a los hermanos regenerados que están lejos
entre sí, con un sinsabor en su unidad; algo muy
similar a lo que actualmente vivimos, porque no
nos es posible congregarnos y en ocasiones ni
siquiera vernos.
Nuestra realidad son las calles desoladas, las oficinas
vacías, los carros muy quietos, la falta de ingresos y
las casas con toda la familia en pleno. Para otros la
falta de alimentos, de vivienda, de atención médica, l
os seres queridos que fallecen y de los que no
podemos despedirnos. En mayor o menor medida,
todos estamos pasando por una prueba en medio
de esta situación, y es precisamente así como la
denomina Santiago en su escrito (1:2).
Es por eso, que resulta oportuno hablar acerca de
siete verdades teológicas, bíblicas y pertinentes que
esta carta nos enseña, y que pueden iluminar este
escenario en particular, dándonos una guía para
caminar como Cristo desearía que los hermanos de
hoy lo hiciéramos, gozándonos por el fruto de
paciencia que dejará en nosotros este tiempo de
cuarentena (1:3), fruto que nos ayudará a llegar a
ser prefectos, completos, íntegros y maduros (1:4)
www.miteología.com

1. El favor viene de Dios (2:1-13)
Algunas veces tenemos una tendencia a mostrar preferencias
por las personas que tienen más dinero o mayor poder
adquisitivo, que tienen joyas y que visten muy bien. Ahora
mismo muchas personas, dentro de la iglesia y fuera de ella,
han volcado sus esperanzas en aquellos con mas dinero o mas
poder para asegurar su bienestar en esta cuarentena. Sin
embargo, el llamado de Santiago es a no mostrar favoritismo
por aquellos de quienes puedo obtener algún beneficio,
porque mi seguridad no debe estar en los adinerados, sino en
Cristo que es la confianza de nosotros, para los días mas
oscuros. La fe en Cristo, es incompatible con el favoritismo, y
esta fe me exige que sea imparcial y que mi dependencia sea
solo del Señor; cuanto más ahora, que es el escenario perfecto
para demostrarle a Cristo Jesús, que lo que él ha destinado
para mí es suficiente.
El amor se opone al favoritismo que es una afrenta para los
pobres, porque justamente es nuestra misión defender al
desvalido, al perseguido injustamente, al injuriado, al denigrado,
al afrentado por su fe y su esperanza, al ultrajado en sus
creencias y derechos ; para que entonces hallen justicia, y amor
en nosotros, porque amarlos como a nosotros mismos es
nuestra consigna, pues han sido los elegidos para que su
“confianza en Dios sea su verdadera riqueza y para que reciban
el reino que él ha prometido a los que lo aman.”
el nombre de Cristo es deshonrado y habremos perdido la
oportunidad de alcanzarlos.
3. Las palabras que causan dolor (3:1-12)
El pensamiento de Santiago en esta porción es claro,
cuando de nuevo inserta el ideal de hombre “perfecto”,
aquel que no ofende con sus palabras, que sí es capaz
de refrenar su boca, también es capaz de refrenar todo
su cuerpo, pero pareciera ser un argumento inverso y lo
reafirma con su ejemplo, que es el de las gigantescas
naves que son gobernadas por un timón muy pequeño.
Un interrogante válido sería ¿Por qué si la lengua que
es más pequeña, es más difícil de dominar, que el cuerpo
que es mayor y más grande? ¡Porque la lengua es el
mayor de los miembros! Porque es la directamente
relacionada con lo que hay en el interior de tu corazón
(Lc 6:45). Es tiempo de limpiar el corazón y de limpiar
los discursos que manan de él. Porque es en la presión
de la continua convivencia, cuando brotan las palabras
incontrolables que dañan e infringen heridas sobre
aquellos que también batallan con el encierro, y que
siguen con esas luchas internas que no conocemos.
La benignidad, y las palabras dulces harán mas llevadera
la incertidumbre del futuro que ahora vislumbramos con
dificultad.

2. Tus buenas obras me muestran tu fe (2:14-26)

Santiago presenta una relación constitutiva entre las obras y la
fe, y para que este vínculo se produzca en el presente, se
necesita que esta última no se estanque, que crezca, que madure
y que se perfeccione.
Oh cuan magnifica fe, que no se frustra por las circunstancias,
sino que batalla por mostrarse en medio de los más grandes
conflictos, a través de las buenas obras que son la consecuencia
de una fe que es genuina, verdadera y eficaz; que esta viva y da
vida a los demás, que se compadece por las necesidades reales
de los que padecen hambre, frío y dolor; una fe inseparable de las
obras de las que ahora estamos tan necesitados. Proveer alimentos,
cobijo, techo, trabajo digno y hasta un medio de comunicación
eficiente, es la buena obra por la que se hará evidente nuestra fe,
y que llevará gloria al nombre de Dios.
Que nuestra vanidad no nos ciegue ante el sufrimiento de
nuestro prójimo, porque si los pobres oyen el mensaje de la
salvación, el evangelio del amor de Jesús, la promesa del cuidado
constante de Dios; y luego, reciben de parte de los miembros de la “El amor se opone al favoritismo,
iglesia, frialdad, indiferencia, falta de interés y de cuidado, entonces que es una afrenta para los pobres”

Página 2 Tiempo de pensar www.miteología.com


“El que es verdaderamente sabio,
dedica su vida fundamentalmente
a la paz.”
4. La verdadera sabiduría (3:13-18)
Quien posee una verdadera sabiduría la demuestra a través de
su buena conducta y de su gentileza. Del mismo modo que las
palabras manifiestan la condición del corazón del creyente, así
también la sabiduría que es provista por Dios, se expresa en
acciones de justicia que corresponden al obrar de Dios en el
cristiano, que no se deja dominar de los celos, la amargura y las
peleas.
Como consecuencia de la sabiduría de Dios, sus hijos la
expresamos en pureza de cuerpo y de espíritu, ahora cuando
a fornicación está a una app de distancia, y cuando los sitios
pornográficos de la red han decidido no cobrar sus suscripciones;
la expresamos siendo pacificadores, porque el que es
verdaderamente sabio, dedica su vida fundamentalmente a la
paz. Siendo amables, con los que están en casa, con los que nos
sirven, con los que laboran, siendo bondadosos con los que
tienen carencias, compasivos con los que nadie quiere
compadecerse, vivir el fruto del Espíritu Santo, es lo que nos
hace coherentes con la palabra, constantes; manteniendo
nuestro compromiso y nuestros principios.
Página 3 Tiempo de pensar
5. Permisiones dolorosas (4:1-10)
A través de los cuestionamientos al inicio del capítulo
cuatro, se evidencia que se han producido contiendas
y dificultades entre los creyentes; y la razón por la que
existen estas enemistades entre ellos, es por causa de las
dolorosas permisiones que se dan, al establecer una fuerte
amistad con el mundo.
¿Cómo es tu relación con el mundo? Si hoy te preguntas
por qué, aunque somos hijos de Dios y creyentes, aún
hay contiendas en nuestros hogares, la respuesta está
en esas permisiones. Las grietas en tus relaciones más
valiosas, se han profundizado por la relación que aun
tienes con el mundo, con sus valores y sus estándares
que nos permean de codicia, de envidia, de pleitos, y
de deleites pecaminosos. Es por eso que hoy hago un
llamado a separarnos de las prácticas inmorales que
hemos cultivado por años y que se han expuesto bajo la
presión del confinamiento y la convivencia constante y
forzada. Prácticas que no solo han dañado a aquellos
con quienes estamos en casa, sino que también han
dejado impresiones dolorosas en nuestro propio corazón.
El permiso más amplio que tal vez nos hemos otorgado es
el del orgullo, el de obsesionarnos con nosotros mismos,
y el de complacernos a toda costa. Contrario a tomar la
cruz y seguirle, para salvar las relaciones que tenemos
con quienes más amamos; hemos dado un lugar muy
cómodo a la soberbia. En definitiva, el orgullo es nuestro
mayor problema, éste no puede ser domesticado, es sutil,
pero se incrementa gradualmente, nos independiza de
Dios y de sus propósitos. Por eso hoy nos exhorto a
perseverar en la humildad; el Señor resiste a los soberbios
y da gracia a los humildes.
“El orgullo es nuestro mayor problema”
6. Juicios que condenan (4:11-12)
Aunque hay un distanciamiento físico-social, la
comunicación no ha cesado, y gracias a Dios por la era
de la comunicación. Empero deberíamos preguntarnos
el fin de todas nuestras comunicaciones, virtuales o no,
porque como el contacto físico ha disminuido, las
murmuraciones han aumentado. No agrada el corazón
de Dios vestirnos de jueces y condenar a otros por
pecados distintos a los nuestros.
www.miteología.com
 7. El pecado de la presunción (4:13-17)

Mas allá del presente, está la ilusión del mañana, y es la que a

muchos nos mantiene esperanzados. Soñar con que podremos
hacer esto o aquello, ir a determinado lugar, encontrarnos con
aquella persona que tanto echamos de menos y de la que
estamos lejos porque las ciudades y hasta los países se cerraron,
poniendo así distancias infinitas entre millones de personas.

“Ciertamente nuestra vida es neblina

que se desvanece y el único lugar
en el que podemos hallar refugio
es en los planes del Señor”

Ahora bien ¿Qué tanto muestra de nuestro corazón, hacer

estos planes de los que a veces sacamos al Señor? Porque el
pecado de la presunción es hacer planes para mañana en los
que no hemos tenido en cuenta a Dios; alardeando del futuro,
y en el peor de los casos deseando volver a la normalidad. Pero
si algo nos enseñó el coronavirus, es que no podemos volver a
la normalidad. La falta de cuidado de la creación, el abuso de la
tierra y de sus beneficios, no pueden seguir en continuidad como
hasta ahora venían haciéndolo. Ciertamente nuestra vida es
neblina que se desvanece y el único lugar en el que podemos
hallar refugio es en los planes del Señor, solo ahí encontramos
seguridad para el mañana del que no tenemos ninguna pista.
Es en su voluntad y en sus designios que está firme nuestra
libertad.

Podríamos extraer muchas más enseñanzas prácticas de esta

espístola, porque entre más hondo cavamos, mayor es la fuente “Esta cuarentena que será,
de agua que brota; pero ahora es tu tarea allí en casa, no solo si nosotros así lo decidimos,
atesorar más conocimiento bíblico, sino también vivir más cada el mejor marco para
instrucción; que como en un espejo, podamos reflejar la belleza de perfeccionar y experimentar
Cristo en todo lo que hacemos y en todo lo que somos; en esta
una vida brillante,
cuarentena que será, si nosotros así lo decidimos, el mejor marco
para perfeccionar y experimentar una vida brillante, llena de la obra
llena de la obra de Dios en ella.”
de Dios en ella.

Página 4 Tiempo de pensar www.miteología.com