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COMUNIDAD FRANCISCANA

NOVICIADO SAN LUIS OBISPO


ESQUEMA DE ADORACION AL SANTISIMO

TEMA: LA PAZ

1. Monición

Queridos hermanos, en este jueves sacerdotal, el Señor nos regala la


oportunidad de encontrarnos con Él en el santísimo Sacramento del altar, y así
poder experimentar uno de los mayores fruto del resucitado, como es la paz;
que al igual que los Discípulos podamos acoger este regalo que el Señor nos
da y así ser verdaderos instrumentos de paz en un mundo que se debate en la
violencia, en los odios y rencores, por eso en esta hora santa dejemos que
nuestro corazón este regalo de amor.

2. Exposición del Santísimo Sacramento

Canto

3. Oración Franciscana: Oración Franciscana por la Paz

¡Señor, haz de mí un instrumento de tu paz!


Que allí donde haya odio, ponga yo amor;
donde haya ofensa, ponga yo perdón;
donde haya discordia, ponga yo unión;
donde haya error, ponga yo verdad;
donde haya duda, ponga yo fe;
donde haya desesperación, ponga yo esperanza;
donde haya tinieblas, ponga yo luz;
donde haya tristeza, ponga yo alegría.
¡Oh, Maestro!, que no busque yo tanto ser consolado como consolar;
ser comprendido, como comprender;
ser amado, como amar. Porque dando es como se recibe;
olvidando, como se encuentra; perdonando, como se es perdonado;
muriendo, como se resucita a la vida eterna. Amén

Lectura Del santo Evangelio según San Mateo: 28,16-20

En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea y subieron al monte en el


que Jesús los había citado. Al ver a Jesús, se postraron, aunque algunos
titubeaban. Entonces, Jesús se acercó a ellos y les dijo: "Me ha sido dado todo
poder en el cielo y en la tierra. Vayan, pues, y enseñen a todas las naciones,
bautizándolas en nombre del Padre y del Hijos y del Espíritu Santo, y
enseñándolas a cumplir todo cuanto yo les he mandado; y sepan que yo estaré
con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo". Palabra del Señor.
Palabra del Señor.
Canto
Silencio
REFLEXION
La Iglesia es misionera por naturaleza, evangelizar es su identidad. Antes de subir
al Cielo, Jesús dejó a sus discípulos un mandato que es una llamada esencial
para todos los cristianos: «El Espíritu Santo vendrá sobre ustedes y recibirán su
fuerza, para que sean mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y
hasta los confines de la tierra». En su mensaje para la Jornada Mundial de las
Misiones 2022, que se celebra el domingo 23 de octubre, y que ha tomado como
tema las palabras de Jesús, el Papa Francisco ofrece algunas reflexiones sobre
las palabras clave que describen la vida y la misión de los discípulos.
El Papa Francisco cita las palabras de San Pablo VI en la Evangelii Nuntiandi:
"Evangelizar nunca es para nadie un acto individual y aislado, sino profundamente
eclesial". Luego observa que los discípulos son enviados por Jesús al mundo no
sólo para “realizar la misión, sino también y sobre todo para vivir la misión”; “no
sólo para dar testimonio, sino también y sobre todo para ser sus testigos". Los
misioneros de Cristo no son enviados a comunicarse a sí mismos, a mostrar sus
cualidades o capacidades persuasivas o sus dotes de gestión, sino que tienen el
altísimo honor de ofrecer a Cristo en palabras y acciones, anunciando a todos la
Buena Noticia de su salvación con alegría y franqueza, como los primeros
apóstoles.

Francisco recuerda a San Pablo VI cuando advertía que "El hombre


contemporáneo escucha más a gusto a los que dan testimonio que a los que
enseñan", y por ello afirma que para la transmisión de la fe es fundamental "el
testimonio de vida evangélica de los cristianos", pero que "sigue siendo necesaria"
el anuncio de la persona y el mensaje de Cristo. Escribe en el mensaje: En la
evangelización, por tanto, el ejemplo de vida cristiana y el anuncio de Cristo van
juntos; uno sirve al otro. Son dos pulmones con los que debe respirar toda
comunidad para ser misionera. Este testimonio completo, coherente y gozoso de
Cristo será ciertamente la fuerza de atracción para el crecimiento de la Iglesia
incluso en el tercer milenio. Exhorto por tanto a todos a retomar la valentía, la
franqueza, esa parresia de los primeros cristianos, para testimoniar a Cristo con
palabras y obras, en cada ámbito de la vida. por eso todo discípulo misionero de
Cristo está llamado a reconocer la importancia fundamental de la acción del
Espíritu, a vivir con Él en lo cotidiano y recibir constantemente su fuerza e
inspiración. Es más, especialmente cuando nos sintamos cansados,
desanimados, perdidos, acordémonos de acudir al Espíritu Santo en la oración,
que —quiero decirlo una vez más— tiene un papel fundamental en la vida
misionera, para dejarnos reconfortar y fortalecer por Él, fuente divina e
inextinguible de nuevas energías y de la alegría de compartir la vida de Cristo con
los demás.

Queridos hermanos y hermanas, sigo soñando con una Iglesia totalmente


misionera y una nueva estación de la acción misionera en las comunidades
cristianas. Y repito el deseo de Moisés para el pueblo de Dios en camino: «¡Ojalá
todo el pueblo de Dios profetizara!» (Nm 11,29). Sí, ojalá todos nosotros fuéramos
en la Iglesia lo que ya somos en virtud del bautismo: profetas, testigos y
misioneros del Señor. Con la fuerza del Espíritu Santo y hasta los confines de la
tierra. María, Reina de las misiones, ruega por nosotros.

Silencio

Canto

4. Preces

5. En este Dia en que oramos por la Jornada de las Misiones sabemos que Dios
responde a aquellos que lo llaman día y noche. Llamemos a Dios, nuestro Padre, por
las necesidades de la Iglesia Universal, diciendo:

R/ Señor de amor escúchanos

 Por la iglesia en misión en el mundo, que podamos ser recordados que


cada uno de nosotros es una misión. Que nuestra fe en Jesucristo nos
envíe para darnos a nosotros mismos y construir relaciones que dan vida.
Roguemos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

 Por los misioneros, santos y mártires, hombres y mujeres de fe que dan


testimonio del Evangelio en todas las áreas del mundo, que su ejemplo de
amor y misericordia guiará a la Iglesia Universal en discipulado misionero.
Roguemos al Señor. Señor, escucha nuestra oración.

 Por las comunidades de fe en las fronteras más lejanas, especialmente


aquellos viviendo y dando ministerio en la Región Amazónica, que, a través
de nosotros, Dios asegurará los derechos de Sus elegidos, y velará por que
se les haga justicia rápidamente. Roguemos al Señor.

 Señor, escucha nuestra oración. Por esta comunidad local de fe, facultada
por Renueva mi Iglesia para hacer discípulos a través del testimonio del
amor de Jesús, que siempre empecemos con oración, el alma de la misión,
a medida que llegamos a las periferias de nuestra comunidad. Roguemos al
Señor. Señor, escucha nuestra oración.
ORACIÓN
Concédenos, Señor, el espíritu de tu amor, a fin de que, alimentados con el
Cuerpo y la Sangre de tu Hijo, fomentemos entre todos los hombres dispuestos a
anunciarte y dar a conocer el Evangelio que es palabra de vida, que él mismo nos
dejó. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Tantum ergo
Bendición final

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