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Este documento describe los océanos como el planeta agua, cubriendo tres cuartas partes de la superficie terrestre y albergando innumerables historias y formas de vida. Se habla de una ficción en la que en el año 2100 un grupo de criaturas abisales se ve obligado a abandonar su hogar en la grieta oceánica más profunda y emprender una búsqueda de un nuevo hogar.
Este documento describe los océanos como el planeta agua, cubriendo tres cuartas partes de la superficie terrestre y albergando innumerables historias y formas de vida. Se habla de una ficción en la que en el año 2100 un grupo de criaturas abisales se ve obligado a abandonar su hogar en la grieta oceánica más profunda y emprender una búsqueda de un nuevo hogar.
Este documento describe los océanos como el planeta agua, cubriendo tres cuartas partes de la superficie terrestre y albergando innumerables historias y formas de vida. Se habla de una ficción en la que en el año 2100 un grupo de criaturas abisales se ve obligado a abandonar su hogar en la grieta oceánica más profunda y emprender una búsqueda de un nuevo hogar.
“Qué inadecuado resulta llamar Tierra a nuestro planeta cuando claramente
es océano”, decía Arthur C Clarke, escritor y científico británico. Esas tres cuartas partes de superficie cubiertas de agua albergan infinidad de historias, algunas realmente maravillosas.
Te invito a conocer algunas de ellas de la mano de DEEP
En el año 2100, un excéntrico grupo de criaturas abisales se ve forzado a abandonar su hogar en la grieta más profunda de los océanos. Tienen como misión encontrar un nuevo hogar. A partir de entonces vivirán las más extraordinarias aventuras en busca de un nuevo lugar que habitar.
Lee el siguiente artículo y responde a las preguntas que están a
continuación: Conferencia de los Océanos: Los mares han dicho basta | Planeta Futuro | EL PAÍS Los mares han dicho basta "Hasta hace muy pocos años, pensábamos en el océano como algo enorme, casi inagotable o imperturbable. Un lugar del que podíamos sacar de todo, y al que podíamos tirar lo que nos sobraba o ensuciaba la tierra firme. Hoy pagamos el precio de nuestra ignorancia". La oceanógrafa y exploradora estadounidense Sylvia Earle resumía en el primer día de la Conferencia de los Océanos organizada por Naciones Unidas en Nueva York el cambio de mentalidad que ha dado lugar a esta reunión: el océano sufre las consecuencias de la acción humana, y el ser humano ya empieza a sentir los efectos de ese sufrimiento. Contaminación marina de todo tipo, acidificación y aumento de la temperatura de las aguas, sobreexplotación de los bancos de animales marinos... Esa concepción de los mares como una fuente inagotable de recursos —incluyendo perforaciones y minería submarinas— y cubo de la basura global de la que hablaba Earle empieza a pasar factura. Los peces repletos de plástico y la subida del nivel del mar que ahoga a las zonas costeras son algunos de los problemas más visibles. Hay otros, como el efecto que todo esto tiene sobre el clima y el funcionamiento del planeta, que aún están por describir del todo. Porque sabemos mucho más sobre los mares que hace unas cuantas décadas, decía Earle. Sabemos que genera oxígeno, almacena carbono, regula la temperatura y el clima y define la química del planeta. Y aunque nos falte mucho por saber sobre el protagonista principal de la vida en la Tierra —menos aún sabemos sobre lo que ocurre en sus profundidades— sí empezamos a ser conscientes de que lo que le pase nos afecta. Y mucho. Que se lo pregunten si no a los habitantes de las pequeñas islas que ven cómo se agota la pesca de la que viven, la porquería ensucia sus playas y espanta el turismo, y el mar les comienza a ahogar literalmente.
1. ¿Te parece importante el océano? Indica algunas razones para
justificar tu respuesta
2. Enumera los problemas que tiene el mar que aparecen en el texto.
3. ¿Qué beneficios, según el texto, nos proporcionan los mares y