REVIVE 2023

Sábado 22 de julio 2023

IGLESIA DEL MAÑANA: CULTO DIVINO

(Se sugiere predique el niño pastor)
Tema del Ministerio Infantil y del Adolescente

“Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me
seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la
tierra” (Hechos 1:8).

INTRODUCCIÓN
Cuando yo sea grande quiero ser______________________(El niño o niña
predicador(a) dice lo que desea estudiar). Esta es la respuesta que desean escu-
char los padres, otros familiares e inclusive nuestros maestros. Ahora yo te pre-
gunto amiguito: ¿Tú qué quieres ser de grande? ¿Qué te gusta y cuáles crees que
son tus dones para desarrollar? A ustedes los adultos tal vez les hubiera gustado
estudiar alguna carrera o haber aprendido otros oficios que, por circunstancias
de la vida, no pudieron lograr. Hoy les quiero decir que cada decisión que noso-
tros vamos a tomar y lo que ustedes los adultos ya tomaron, son como ladrillos
que contribuyen a la construcción de un futuro… y hablando de construcciones…
quiero mencionar algunos ejemplos: La Gran Muralla China, Yaxchilán, Palenque,
(Puede mencionar otras construcciones locales, nacionales o de otras partes del
mundo).
Estas construcciones son formidables y majestuosas ¿verdad? Ojalá que un día
podamos conocer algunas de ellas.

DESARROLLO
Pero mientras llega ese día, si es que llega, quiero tomar esos ejemplos para
hablar de la construcción de algo que es muy importante; tanto, que será lo único
que llevaremos al cielo. ¿Saben qué es? No es la casa, no es el auto, ni la ropa, ni
objetos terrenales. Es el carácter.
Pero… ¿Qué es el carácter? ¿Qué pensamos cuando decimos de alguien que
es un joven de carácter? Muchas personas confunden el carácter fuerte con per-
sonas agresivas, enojonas o malhumoradas. Tener carácter es poder controlar
tus emociones, tus decisiones, tus pensamientos, tus palabras, tus actos. Tener

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carácter es pasar de largo ante las tentaciones, es no tomar lo que sabes que te
hará daño, es no mirar lo que sabes que te afectará, es no decir palabras de las
cuales te vas a arrepentir, es decidir hacer lo correcto, aunque tu voluntad te pida
hacer lo malo. Es sinónimo de tener dominio propio y voluntad firme. Formar un
buen carácter es el trabajo de toda la vida. Está íntimamente relacionado con la
toma de decisiones. Desde que te levantas por la mañana comienza tu capacidad
de decidir. Debes decidir entre hacer lo correcto o dejarte llevar sin considerar las
consecuencias. Pero es importante recordar que ante cada decisión cosecharás
una consecuencia. Cada decisión que tomes irá forjando tu destino, un destino que
va más allá de esta vida; uno más importante: para tu vida eterna.
Por tanto, el joven de carácter es aquel que tiene principios nobles, y en ellos
permanece firme, aun cuando esta perseverancia fiel le exija sacrificios.
Cuando un joven no tiene carácter no escucha la voz de su conciencia y cambia
sus principios según su conveniencia.
El curso de toda tu vida depende de pequeños actos: “Siembra un pensamiento
y segarás un deseo, siembra un deseo y recogerás la acción, siembra la acción y
cosecharás la costumbre, siembra la costumbre y lograrás el carácter, siembra el
carácter y tendrás por mies tu propia suerte”. De pequeños pensamientos y accio-
nes va entretejiéndose la suerte de tu vida.

Entonces, ¿Cómo educo mi carácter?

En primer lugar: hay que adquirir ideales y principios. Después hay que acos-
tumbrarnos, con un ejercicio continuo, a obrar según nuestros nobles ideales en
cualquier circunstancia de la vida.
No hay mejor lugar para adquirir principios que en las Escrituras. En ellas encon-
trarás sabiduría del cielo que harán de ti un hombre o una mujer de bien.
A continuación, vamos a plantear unas preguntas cuyas respuestas ayudarán a
la formación de un buen carácter:

1. ¿Por qué es tan importante la construcción de nuestro carácter? “Los que

desean ser santos en el cielo, deberán primero ser santos en la tierra; porque
cuando dejemos esta tierra llevaremos nuestro carácter con nosotros” (Men-
sajes selectos, tomo 3, 217). ¿Notamos? Lo único que llevaremos al cielo es
nuesro carácter.

2. ¿Cómo podemos construir un carácter santificado?

Poniendo un fundamento seguro: “Padres, maestros, estudiantes, recordad
que estáis edificando para la eternidad. Cuidad de que vuestro fundamento
esté seguro”… Así permanecerá firme vuestra casa…” (Consejos para los

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maestros, 62).
El fundamento seguro es Cristo: “Pero una recompensa mejor que la terrena
aguarda a los que, basando su obra en la roca sólida, edifican un carácter
simétrico” (Consejos para los maestros, 62).

3. ¿Quiénes deben ayudar a construir el carácter de los niños, menores y jóve-

nes?
Veamos lo que dicen estas gemas: “La gran obra de padres y maestros es la
edificación del carácter, el procurar restaurar la imagen de Cristo en los que
han sido puestos bajo su cuidado…” (Consejos para los maestros, 60).
“Debe ser el objeto de todo padre, asegurar para su hijo un carácter bien
equilibrado, simétrico… Hay que echar un fundamento correcto, levantar una
armazón fuerte y firme, y luego, día tras día, adelantar la obra de edificar, pulir
y perfeccionar” (Consejos para los maestros, 103).
¡Qué gran responsabilidad y qué gran honor para los padres y maestros!

4. ¿Cuáles son los materiales y/o herramientas que se necesitan para la edifica-
ción del carácter?
Se han mencionado esos materiales y herramientas en la escuela sabática
y las tenemos acá en frente en la forma de ladrillos (se dirige a la “pared” de
ladrillos que se formó desde el viernes) Podemos ver acá:
• Cantar o alabar a Dios (Salmo 100:1).
• Estudiar la Biblia (2 Timoteo 3:16).
• Orar (1 Tesalonisences 5:17).
• Testificar con nuestro ejemplo (Proverbios 3:1-7).
• Predicar (Hechos 1:8).
• Y la base que inspira lo demás: La devoción personal.

5. ¿Qué características demuestran que nuestro carácter ha sido transformado?

“Se notará un cambio en el carácter, en las costumbres y ocupaciones. El
contraste entre lo que eran antes y lo que son ahora será muy claro e inequí-
voco… por la tendencia de las palabras y de los actos habituales en la vida
diaria” (El camino a Cristo, 57).
“El trabajo desinteresado por otros… No hay lugar para la pereza ni el egoís-
mo” (El camino a Cristo, 80).
“…Paciencia, valor e integridad constantes” (El colportor evangélico, 72).
Obediencia a la ley de Dios: “Nuestra edificación del carácter debe hacerse
de acuerdo con el modelo… La ley es la gran norma de justicia. Representa
el carácter de Dios … La armazón debe ser sólida. No puede aceptarse tra-

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bajo descuidado, porque arruinaría el edificio… Apartarse de las costumbres

y compañías del mundo” (Consejos para los maestros, 61).

CONCLUSIÓN
Amiguitos y hermanos presentes: Después de haber reflexionado en este tema
de gran importancia, les animo para que practiquemos lo que aprendimos a fin de
que reflejemos el carácter de Jesús ante nuestra familia primeramente; en donde
trabajamos y con nuestros vecinos, por que eso será el sermón más poderoso y
honesto que podremos predicar. Porque nuestro carácter es lo único que llevare-
mos al cielo.

LLAMADO
Quiero ver las manos de los padres y líderes de la iglesia que se comprometen
con Dios para representarlo dignamente mediante su carácter, de hoy en adelan-
te… Ahora, los jóvenes que desean cultivar un carácter que los lleve a ser jóvenes
íntegros, pueden levantar su mano… Invito a todos mis amiguitos presentes que
se pongan en pie si desean que Jesús sea su amigo, para que Él nos ayude a
construir un carácter simétrico y firme, con el que podamos ir al cielo y vivir con Él
por la eternidad.

OREMOS
(Ora por todos los padres, líderes, jóvenes, niños y adolescentes, para que Dios
nos ayude a construir un carácter puro y noble, conforme a su voluntad, para ir al
cielo como familias unidas).

Lesly Guzmán del Toro

Misión de Palenque

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