enero 16, 2011raldazDeja un comentarioIr a los comentarios
Ire o.
Este escrito se lo dedico a mi querida cuñada Baba Ewin Ala.
Un hombre es Rico si tiene a DIOS en su corazón…
Si intentamos definir la palabra Dios, lo podemos ver en la Wikipedia
como:
Para el concepto de «dios» en el contexto de las religiones politeístas,
véase deidad.
Para lo cual luego vemos: Una Deidad o un Dios es un ser postulado
sobrenatural, normalmente (aunque no siempre) con un poder importante, adorado, concebido como santo, divino o sagrado, tenido en alta estima y respetado por sus adeptos y seguidores.
El concepto teológico, filosófico y antropológico de Dios hace
referencia a una suprema deidad. Dios es el nombre que se le da en español a un ser único omnipotente y personal en religiones teístas y deístas (y otros sistemas de creencias) quien es: o bien la única deidad, en el monoteísmo, o la deidad principal, en algunas formas de politeísmo, como en el henoteísmo.[1
En la cultura Yorùbá “Lùkùmí” cuando hablamos de Díos, nos
referimos a Olodumare, y es de el que nacen o se reprodujeron las demás divinidades, por ende, para poder comprender la fé indígena Yorùbá debemos hacer a un lado nuestras creencias Occidentales basadas en el Cristianismo, donde se ha explicado que el Universo es manejado por un Dios supremo que a final de cuentas no depende de la ayuda de ningún “emisario”.
En la tradición Lùkùmí se puede evidenciar, como muchos de ustedes
han podido leer en varios lugares, que los negros esclavos producto de la necesidad y el temor al maltrato de sus amos esclavistas, reprodujeron su fe, sobre las divinidades Católicas.
El sincretismo religioso es un proceso, generalmente espontáneo,
consecuencia de los intercambios culturales acaecidos entre los diversos pueblos. Es un proceso en el que se intenta superar una situación de crisis cultural producida por la colisión de dos tradiciones religiosas diferentes. Es un intento por conseguir que dos tradiciones culturales diferentes sean capaces de crear un ámbito de cohabitación en armonía. Su característica principal es que se realizar a través de la mezcla de los productos culturales de las tradiciones coincidentes. Quien es cristiano y me lee, sabe que la Biblia reza lo siguiente:
Éxodo 20-1:
“Y habló Dios todo esto, diciendo: Yo soy Yahvé, tu Dios, que te ha
sacado de la tierra de Egipto, de la casa de la servidumbre.
No tendrás otro Dios que a mí. No te harás esculturas ni imagen
alguna de lo que hay en lo alto de los cielos, ni de lo que hay abajo sobre la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. NO TE POSTRARÁS ANTE ELLAS y no las servirás, porque yo soy Yahvé, tu Dios, un Dios celoso, que castiga…y hago misericordia hasta mil generaciones de los que me aman y guardan mis mandamientos.”
De acuerdo a esto, para el cristiano, es un veto o está muy mal que
hagan procesión a imágenes, estatuas o asociar a su Dios Yahvé, con cualquier imagen de Santos e incluso vírgenes.
Aun así, vemos este comportamiento en los practicantes de la Iglesia
Católica, contrario a los que practican las formas protestantes como es el Evangelio, quienes se autodenominan también “Cristianos”, aunque los primeros se les llama Católicos un concepto más dirigido a la forma de culto (dirigida a un todo, “La iglesia Universal”) de allí la palabra Católico … Lo extraño de esto es la eterna lucha que hay entre las distintas “doctrinas de fe” de los creyentes en Cristo, y más incisivos se vuelven cuando se tratan de culturas que NO tienen que ver con Cristo o sus orígenes…
Bien, todo esto solo tiene un objetivo en este escrito, y es el demostrar
que cada persona en este mundo tiene una forma diferente de encontrar la luz o la Riqueza Espiritual, de acuerdo a su forma o comportamiento. Y esto va concatenado a su situación social, cultural y familiar.
No es un buen comportamiento, que los Olorisa y los Babalawo de
nuestra cultura, caigan en aspectos de discusión sobre si nosotros tenemos fe en objetos o figuras, piedras o minerales, a los que llamamos los Orisa, y entonces, nos dejemos llevar por una lucha apasionada en la cual, intentamos demostrar que nosotros también tenemos derechos, porque en otras religiones también existen asesinos, violadores, sádicos o lo que la inmunda conducta humana muchas veces saca a relucir.
Y que lamentablemente en nuestra cultura, también existen
personajes con deplorables formas de actuar, ya por eso entonces, nosotros tenemos que decir, bueno, si hay sacerdotes sádicos, entonces no me critiquen, si hay evangélicos asesinos, entonces no me critiquen.
Independientemente que usted, no crea en los Orisa, o no crea en Ala, o
en Yahve, en Buda o en Olodumare. Se debe practicar la tolerancia y el respeto a la cultura que cada persona mantiene, y no es natural o al menos nunca fue correcto entre los practicantes de las tradiciones de Orisa, caer en señalamientos para otras doctrinas religiosas.
Sencillamente porque nosotros, asi como hicieron nuestros ancestros,
no vemos equivocada la fe de cada persona, por el contrario, procuramos convivir con la fe de cada quien y respetamos la forma.
Esto es tan asi, que en nuestros cultos, no existe, una manera
definitiva de tratar a nuestros ancestros, y por ello, si una persona debe atender a un familiar difunto, se ve obligado en hacerlo de la manera en que esa persona en vida le pudiera agradar, en pocas palabras, si esa persona era cristiana, lo natural es mandarle a hacer misas cristianas, y en el lugar donde se le atiende se colocan figuras alegoricas a la fé cristiana o católica en su defecto.
Es necesario comprender entonces, que nosotros los Iworo (sacerdotes
Lukumi o Yorùbá), no estamos aquí para vivir en una discusión con otras religiones, pues la nuestra, no es solo una religión, es una FORMA DE VIDA, es nuestra conducta de vida, una tradición, y una serie de costumbres, por ello no existen Iglesias o Templos, mas que el hogar de cada Sacerdote o Sacerdotiza Lukumi, y es en su hogar donde usted Olorisa o Babalawo debe practicar las enseñanzas de Osha - de Ifa, porque finalmente nuestras divinidades vienen a este mundo a buscar ayudar a la humanidad, y nunca a causar daño. Claro que nuestra practica, no tiene las mismas bases o fundamentos de las religiones Occidentales, y es por ello que nosotros no permitimos faltas de respetos o daños de las personas sin que esto no reproduzca una reacción a la acción causada.
Precisamente por eso, es importante que todos entendamos que en
este mundo, cada quien vino por una razón y todos y cada uno de nosotros tiene una razón de existir, las religiones no son más que la forma de mantener la moral del hombre lo mas pulcra posible, mas no podemos vivir amparados en nuestras religiones para ser felices, por eso es que todos tenemos la escogencia de hacer el bien y no mirar a quien, o hacer el mal y escondernos.
Usted tiene libre albedrio, libre escogencia, es importante nunca
olvide esto, procure con sus acciones el bien de usted y si no quiere hacer el bien a los demás, simplemente no le haga daño a nadie, esto de igual forma también será recompensado por las energías del Universo