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UD 2.

La internacionalización de la empresa
Entendemos por valor añadido la razón por la cual el cliente final
escoge la compra de un determinado bien o servicio, entendiendo que
este le proporciona o un beneficio mayor o la percepción de una
ventaja singular sobre el ofertado por la competencia.
En el ámbito económico, un elemento clave en la internacionalización
productiva es la financiación.
2.1. La actividad de la empresa transnacional
Definimos empresa internacional como toda empresa que realiza
actividades comerciales o que está enfocada al mercado exterior. Es
aquella que vende o produce sus productos no sólo en su país de
origen, sino también en otros países del mundo.
Llamamos empresa transnacional (CTN)/multinacional (MTN) a una
compañía que comprende una empresa matriz y todas sus filiales no
nacionales constituidas en sociedad.
• Entendemos por empresa matriz (o empresa madre) aquella
que controla, efectivamente, los activos de otra u otras
empresas, llamadas filiales o sucursales. Ejerce el control
administrativo, financiero y económico de las empresas
subordinadas, directa o indirectamente.
• Hablamos de sucursal cuando la empresa receptora de la
inversión está participada total o mayoritariamente por la
matriz y no cuenta ni con autonomía comercial ni financiera, ni
tampoco con imagen comercial diferenciada de la principal.
• Cuando la empresa participada tiene cierta autonomía
comercial y/o financiera respecto a la empresa matriz hablamos
de filial. Puede ser una empresa constituida exprofeso o
incorporada posteriormente a esta.
Existen dos condiciones fundamentales para el ejercicio de ese
control:
La matriz posee la suficiente participación accionaria
en la empresa.
Capacidad para gestionar estratégicamente a cierta
distancia, la cual depende de lo siguiente:
El sistema de transporte y las comunicaciones.
La organización interna de la empresa.
2.1.1. Formas de internacionalización
Entre las formas de intercambio distinguimos:
• Exportación indirecta: la empresa no asume la dirección de las
tareas de comercialización con el exterior.
• Importador: la empresa acude a mercados exteriores para adquirir
productos que o comercializa o emplea para su actividad en el
mercado doméstico.
• Exportación directa: la venta directa mediante su propio equipo
comercial.
• Agente comercial: intermediario independiente que realiza
operaciones comerciales internacionales por cuenta ajena.
• Subcontratación (outsourcing): una empresa acuerda con otra el
suministro de materias primas, bienes intermedios o servicios que
incorporan valor a la producción. El objetivo es que la empresa
proveedora optimice los recursos disponibles de la empresa que lo
contrata.
Formas de internacionalización de la propiedad
Definimos inversión extranjera directa (IED) o foreign direct
investment (FDI) como aquella inversión de capital por parte de una
persona natural o jurídica, en forma de instituciones o empresas, en
una economía no nacional.
• Este tipo de inversión conlleva una relación a largo plazo y refleja
un interés duradero por parte de la empresa que realiza la
adquisición. Debe señalarse que esta ejerce el control o un grado
significativo de influencia sobre la gestión de una empresa
participada.
• Por lo general, cuando la inversión es inferior al diez por ciento de
las acciones de la empresa participada se denomina inversión en
cartera (foreign portfolio investment, FPI).
• La anterior distinción es de tipo contable, el aspecto fundamental es
la capacidad de control en la gestión de la empresa.
Como ya señaló Hymer (1976): «Mediante la inversión directa una
empresa puede controlar a otra establecida en el extranjero e
integrar las políticas de precios y de producción de esta última con
sus propios planes».
La inversión extranjera directa desempeña un papel importante en la
globalización económica y puede tener beneficios tanto para los
países receptores como para los países de origen de los inversores, al
fomentar el intercambio de recursos, tecnología y conocimientos
entre diferentes economías.
También puede generar controversia y debates en algunos casos,
especialmente cuando hay preocupaciones sobre el control extranjero
de sectores estratégicos o la explotación de recursos naturales.

Es habitual distinguir entre las filiales que pueden ser el resultado de


IED destinadas a crear nuevas empresas o adquirir empresas ya
existentes.
Inversión en nueva creación o nueva planta (greenfield)
Supone una ampliación neta de la capacidad productiva para el país
receptor (en inglés, host). Es considerada como la inversión más
lucrativa para el país receptor de esa inversión, dado que, por lo
general, la entrada de capital extranjero conlleva la creación de
nuevos proyectos empresariales, así como la creación de empleo
neto.
Inversión en compañías existentes (brownfield)
Es toda inversión que resulta de fusiones y adquisiciones (Mergers &
Acquisitions, M&A). Pueden haberse llevado a cabo a través de
compras parciales o totales de otras empresas, y es habitual que se
realicen nuevas inversiones una vez adquirida la compañía; en ese
caso, esa inversión sería en realidad greenfield. Este modelo es
habitual cuando hay muchas empresas disponibles y, por lo tanto, se
requiere de una fuerte inversión inicial que le permita ser más
competitiva. Esto ocurre cuando las industrias muestran rendimientos
marginales crecientes o cuando existen bajas barreras de entrada por
adquisición, o cuando hay un exceso de capacidad productiva.
Alianzas y negocios conjuntos (joint venture)
Se definen como una asociación estratégica temporal a corto, medio o
largo plazo de un grupo de empresas, agrupaciones o alianzas de
personas que, conservando su independencia jurídica, se alían para
desarrollar un negocio conjunto, una inversión o colaboración
empresarial, trabajando bajo unas mismas normas e idéntica
dirección. La joint venture actúa bajo una misma dirección y normas
con el fin de alcanzar una operación comercial concreta.
Formas que no implican propiedad (non-equity forms of investment)
Existen múltiples formas de cesión de derechos a otras compañías
sobre el uso de activos propiedad de la matriz o de sus empresas
filiales, los más frecuentes son los siguientes:
• Licencia: contrato que permite el derecho de uso de una propiedad
intelectual (marca comercial, patente, diseño, know-how, etc.) a
cambio del abono de un pago o royalty.
• Franquicia: similar al de la licencia, este contrato permite a una
compañía, franquiciada, replicar el modelo de negocio de otra,
franquiciadora, en un determinado territorio. La empresa
franquiciadora puede controlar diversas fases de producción o la
comercialización.
• Contrato de gestión: acuerdo por el cual se concede a una
compañía la gestión de activos que son propiedad de otra, sin que
ello suponga una transferencia de propiedad definitiva, únicamente el
derecho a recibir pagos por el desarrollo de dicha gestión.
• Concesión: acuerdo por el que una compañía (concedente) otorga a
una compañía extranjera (concesionaria) el derecho a realizar una
determinada actividad durante un periodo de tiempo definido. Otorga
el control operacional, pero no la propiedad sobre los recursos
productivos.
Teoría de Hymer-Kindleberger
Stephen H. Hymer revolucionó con su tesis The international
operations of the national firms: A study of direct foreign investment
(1960) los trabajos centrados en las empresas transnacionales.
Hasta entonces, la teoría predominante se asentaba en el análisis de
los movimientos de capitales en función del tipo de interés efectivo en
cada país. Esto conlleva que, en un contexto de competencia
perfecta, los prestamistas internacionales se comportaban como
cualquier otro, transmitiendo financiación a aquellos países donde el
tipo de interés es más elevado.
Sin realizar ninguna diferenciación entre la elección de decisiones de
inversión, inversión en cartera o inversión extranjera directa, Hymer
demostró lo siguiente:
• La inversión extranjera directa no implica necesariamente el
movimiento de fondos del país emisor al país receptor, dado que, en
ocasiones, la IED se financia con préstamos de los propios países de
destino o por medio de otros instrumentos financieros que no
suponen una entrada neta de capital.
• La IED tiene lugar en ambas direcciones, de manera que en realidad
podemos encontrar países que son a su vez emisores y perceptores.
• La IED tiende a concentrarse en sectores concretos, en distintas
economías nacionales, en lugar de hacerlo en una sola economía o
región.
Estos tres puntos rebaten la idea de que el principal determinante
estaba en los diferenciales de tipos de interés entre países.
Stephen H. Hymer fue el primero en observar que las compañías
transnacionales no operaban simplemente prestando capital, sino que
la IED implicaba cierto grado de control sobre la actividad productiva
de los receptores de esas inversiones, no es solo una cuestión de
transferencia de fondos monetarios, sino que también conlleva otros
recursos como la tecnología, las técnicas organizativas y sus formas
de competir en los mercados.
Otra razón por la cual las compañías transnacionales invierten en
otros países es para aprovechar las ventajas de propiedad que
obtienen con el control de las empresas donde realizan la inversión,
beneficios que implican, a priori, obtener mayores márgenes de
beneficio o poder de mercado (Kindleberger, 1969).
Ejemplo: Sobre los efectos de la IED, Hymer (1976) sostiene lo
siguiente:
Del lado positivo, está demostrado que las empresas multinacionales
utilizan su acceso a los mercados internacionales de bienes, servicios
y capitales, así como su acceso a la tecnología, en una forma que
contribuye a integrar la economía mundial. La empresa internacional
al producir donde los costos son bajos y vender donde el precio es
alto, al tomar prestado capital allí donde es más barato e invertirlo
donde es más productivo, al difundir la técnica más avanzada a
través de su exportación de un país a todos los territorios en los que
opera, actúa como un sustituto de mercados imperfectos, repartiendo
de manera eficaz los productos y factores en el mundo.
Teoría ecléctica o paradigma OLI
Partiendo de la teoría de Hymer, a finales de los años setenta John
Dunning desarrolló la teoría ecléctica o paradigma OLI (ownership,
location, internalization).
En ella identificó tres tipos de beneficios que obtienen las compañías
transnacionales en todo proceso de internacionalización empresarial
vía IED:
• Ventajas de propiedad (ownership advantages). Permiten a la
empresa inversora adquirir cierto grado de poder de monopolio y
adelantarse al resto de sus competidores, pudiendo ser en el mercado
de la matriz o en el mercado de la empresa participada. Estas
ventajas revelarían el porqué.
• Ventajas de localización (location advantages). Aquellas derivadas
de establecerse en el destino concreto. Entre ellas: disminución en los
costes de transporte, ausencia de tarifas y aranceles, un acceso más
fácil a las redes de distribución y comercialización o de materias
primas. Estas ventajas identifican el dónde.
• Ventajas de internalización (internalization advantages). Se
identifican con aquellas actividades realizadas de forma interna.
Explican la forma de integración: vertical, la filial realiza actividades
en otra etapa del proceso; horizontal, cuando desarrolla la misma
actividad, y diversificada, cuando la filial se dedica a otra actividad
distinta. Es decir, explican el cómo.
Esta teoría es la predominante hasta la fecha, si bien ha sido
reformulada para incorporar nuevos elementos como los clústeres
sectoriales o la concentración geográfica de empresas
interrelacionadas, empleándose en parte para explicar las ventajas
competitivas de las empresas internacionales.
En la siguiente tabla se identifican las principales ventajas inherentes
a la internacionalización empresarial. En la mayoría de los casos,
estas están relacionadas e interactúan, optimizando o transformando
los procesos productivos para ser más eficientes en costes, calidad,
tiempos de entrega, etc.
Otras teorías
Existen otras teorías sobre la inversión extranjera directa y el
comportamiento de las empresas transnacionales que pueden
perfeccionar o completar al paradigma OLI.
Ciclo de vida del producto (Raymond Vernon, 1966)
Las empresas modifican su situación geográfica en función del grado
de madurez del producto que comercializan. Cuanto mayor sea el
grado de madurez del producto, más compleja será la posición
competitiva de las compañías, por lo que, tras una primera fase de
exportación, trasladarán la producción a países donde la competencia
sea más débil.
Internalización
La teoría de la internalización se fundamenta en el concepto de costes
de transacción de la escuela neoinstitucionalista. Esta sostiene
que hay ocasiones en las que la empresa puede gestionar de forma
interna mejor los intercambios. Si los costes de acudir al mercado son
superiores a los de gestión interna, entonces una empresa puede
considerar realizar una inversión exterior directa que le permita
optimizar beneficios.
Modelo Uppsala
Defiende que la internacionalización es un proceso gradual resultado
del incremento paulatino de la experiencia y el conocimiento que
aporta el desarrollo de la actividad empresarial en los mercados
exteriores. Las empresas intensifican su presencia en mercados
foráneos por etapas, exportando (directa e indirectamente), se
conceden licencias u otras formas de cesión de derechos, inversión en
cartera y, en el caso más avanzado, se adquiere una filial de
comercialización o de producción. Si bien este modelo resulta
adecuado para explicar la internacionalización de los años
cincuenta y sesenta, no resulta apropiado para el complejo
panorama actual.
2.2. Ventajas competitivas de la empresa internacional
A priori, las ventajas competitivas de cualquier economía se
identifican con su dotación de factores productivos, que, si bien son
importantes, no explican por sí solos su nivel de desarrollo ni su papel
dentro del comercio mundial. Sin duda es más determinante la
capacidad de las empresas nacionales de gestionar los recursos y las
ventajas competitivas con las que cuenten.
Entendemos por ventaja competitiva de una empresa cualquier
atributo o característica significativa en los bienes o productos
producidos que la dota de cierta superioridad sobre el resto de las
empresas competidoras.
Podemos identificar dos tipos de ventajas competitivas empresariales:
Internas
Externas
El primer tipo se fundamenta en menores costes o bien de fabricación
o de administración o de gestión operativa, lo que implica un coste
unitario inferior de su producto frente al del competidor.
Hablamos de ventajas externas cuando el producto o servicio
ofertado se apoya en cualidades distintivas que suponen un mayor
valor añadido frente a los de la competencia.
Existen dos grandes teorías sobre por qué las empresas obtienen
ventaja competitiva:
La teoría de la actividad de la empresa
La teoría de los recursos
En función de los elementos que enfaticen:
a) la capacidad de desarrollar su actividad una vez analizado el
contexto.
b) la posesión de recursos tangibles, intangibles y organizativos.
En los siguientes apartados se tratará la primera corriente,
especialmente desde los postulados del economista Michael E. Porter,
quien afirma lo siguiente:
«La competitividad de una nación depende de la capacidad de su
industria para innovar y perfeccionarse» (2007, p. 5).
2.2.1. Estrategias genéricas
Estrategia competitiva. La estrategia de una compañía es el conjunto
de decisiones que determinan la forma en que una empresa decide
añadir valor a la producción a través de la configuración y
coordinación de sus procesos productivos, incluida su capacidad de
introducir innovaciones en estos.
Conlleva una seria investigación de mercado o mercados objetivos; el
análisis de la capacidad productiva empresarial, tecnología,
conocimientos, financiación, etc., o la toma de decisiones relativas a
la organización de la producción y la comercialización.
Estas prácticas están orientadas a obtener unos objetivos concretos
como los beneficios económicos, el aumento del tamaño de la
empresa, un mejor posicionamiento, una excelente imagen
corporativa, etc., y, por supuesto, un seguimiento de los resultados
obtenidos.
Esencialmente, identificamos tres tipos de estrategias empresariales:
Liderazgo en costes
La empresa busca obtener los menores costes posibles que le
permitan ofrecer precios relativos más reducidos que los de sus
competidores y así ganar cuota de mercado. El punto débil de esta
táctica es la transformación del sistema productivo para reducir los
costes de un producto idéntico o muy similar por debajo de sus
competidores.
Diferenciación de producto
Se busca ofrecer al consumidor un producto o servicio con unas
características propias, diferentes y exclusivas; en definitiva, mejorar
la calidad de otros productos similares. Se trata de peculiaridades que
le permiten establecer precios más elevados y absorber cuota de
mercado a la competencia.
Enfoque
En lugar de orientarse al conjunto del mercado, la estrategia de
enfoque posiciona su operativa en un solo segmento del mercado
para obtener ventaja competitiva sobre esa fracción. Con este
objetivo, entre otras opciones, desea establecer una estrategia más
definida sobre el liderazgo en costes o en diferenciación de producto.
En la siguiente figura se señalan las cinco fuerzas competitivas que el
economista Michael Porter considera esenciales para determinar qué
es lo que realmente genera rentabilidad en una industria, así como el
nivel de competencia que lo define.

Michael Porter sostiene en su primer libro “Estrategia Competitiva”


que el potencial de rentabilidad de una empresa viene definido por
cinco fuerzas:
 El poder del cliente,
 El poder del proveedor,
 Los nuevos competidores entrantes,
 La amenaza que generan los productos sustitutivos
 La naturaleza de la rivalidad.
2.2.2. Estrategias de internacionalización
En posteriores trabajos, Porter (1982, pp. 283-303) adaptó el
esquema de cinco fuerzas competitivas al mercado global, incluyendo
a los competidores foráneos, admitiendo más agentes económicos;
una amplia gama de potenciales bienes sustitutivos, y mayores
diferencias entre las percepciones y visiones de las empresas
competidoras.
Cabe destacar dos aspectos fundamentales para la
internacionalización productiva de una empresa:
• Identificamos como industria global a aquella en la que la posición
estratégica de los competidores dentro de los distintos mercados
nacionales está influida profundamente por la posición que ocupa.
Además, la competencia se observa a nivel mundial y el mercado es
entendido en su conjunto.
• Cabe señalar que las empresas multinacionales no siempre actúan
de forma unificada, sino que se adaptan a particularidades regionales
o locales. En otras palabras, abordan varias estrategias en el mercado
global.
Fuentes de la ventaja competitiva global
Aparte de las fuentes ya conocidas de ventaja comparativa ordinaria
y diferenciación de producto, se puede observar el resto de los
factores a través de dos conceptos:
Las economías de escala
Tecnología.
1. Economías de escala
• Economías de escala en la producción. Es habitual que cuando una
compañía supera los límites comerciales en un mercado nacional opte
por ampliar la escala de producción, dirigiéndose esa nueva
producción a mercados. Hay que recordar que las economías de
escala se dan cuando el aumento de bienes intermedios en una
producción proporciona un incremento más que proporcional en el
total de bienes finales, alcanzando menores costes unitarios.
• Economías logísticas de escala. Al distribuir los costes derivados de
la cadena de suministros (barcos de carga, contenedores, etc.) entre
distintos mercados, se consigue que los costes fijos disminuyan y, por
tanto, se observa una reducción neta en los costes totales.
• Economías de escala en marketing. Las principales decisiones en
torno al marketing suelen tomarse en conjunto cuando se trabaja
para un mercado global, sin relegar algunas particularidades locales o
regionales. Al definir una escala mundial se reducen estos costes al
tiempo que permite desarrollar una imagen homogénea de producto o
marca.
• Economías de escala en compras. Debemos tener en cuenta que
una mayor producción de bienes o servicios implica demandar más
materias primas o bienes intermedios, que puede conllevar un
incremento del poder de negociación de la empresa como cliente.
2. Tecnología
• Tecnología de los productos de patente. Se pueden lograr
economías de escala cuando se tiene la capacidad de aplicar la
tecnología de patente en varias economías.
• Experiencia global. En el caso de una determinada tecnología que
tenga un coste importante debido al empleo de una patente, el hecho
de vender ese producto en varios o múltiples mercados supone una
disminución del coste por unidad producida.
• Movilidad de la producción. Este es un caso particular que implica
una ventaja competitiva, tanto en economías de escala como en
tecnología de patente; se presenta cuando la producción de un bien o
servicio es móvil.
Obstáculos de la competencia global
Obstáculos económicos:
• Costes de transporte y de almacenamiento.
• Elevada gama de productos.
• Canales establecidos de distribución.
• Ventajas del comercio de proximidad, entre las que se incluyen la
reparación local, cierta sensibilidad a los tiempos de entrega, o la
segmentación dentro de los mercados geográficos.
• Inexistencia de demanda mundial; un producto no es demandado
en cantidad suficiente para permitir su viabilidad en el medio plazo.
Obstáculos administrativos:
• Servicios intensivos locales. Cuando se requiera de un tipo de
marketing específico o de servicios al cliente que conlleven una
elevada especialización será complejo competir para las compañías
orientadas a un solo mercado global.
• Tecnología rápidamente cambiante. Cuando una empresa opera
globalmente tiene una capacidad de adaptación menor si se producen
cambios tecnológicos significativos que requieran de una redefinición
de toda o de parte de su estrategia global. En este sentido, es posible
que una compañía local independiente orientada a ese mercado esté
en mejores condiciones para la toma de decisiones o cambios en uno
o varios segmentos de su actividad productiva.
Obstáculos institucionales:
• Obstáculos gubernamentales. Los Gobiernos pueden establecer
distintas barreras comerciales, arancelarias, impositivas, permisos
especiales, etc., a la competencia global para proteger las industrias
locales. De hecho, este tipo de barreras han sido y son los
instrumentos estatales más implementados en la historia.
• Obstáculos de percepción o de recursos. Se producen cuando no
hay información suficiente para percibir la oportunidad de negocio y/o
la obtención de los recursos necesarios para realizarla, o, si la
hubiese, esta no sería perfecta. En economía se habla de
información asimétrica cuando algunos de los agentes en una
transacción no cuentan con toda la información de ese intercambio y
otros sí.
Alternativas estratégicas
• Competencia global con líneas extensas. Esta táctica busca
competir a nivel mundial en toda la línea de productos de la industria,
aprovechando las fuentes de la ventaja competitiva global para
conseguir o bien la diferenciación o bien una posición general con
costes más reducidos.
• Concentración global. La compañía orienta su actividad en un
segmento productivo donde participa a nivel mundial por ser
competitiva en esa división concreta, operando habitualmente desde
una base nacional.
• Concentración nacional. Aprovecha las diferencias de los mercados
nacionales para trabajar en una economía en particular, lo que le
permite superar a las empresas globales de la competencia.
• Nicho protegido. Busca economías en las que las restricciones a la
competencia global sean elevadas adaptando su operativa
empresarial a esa particularidad impuesta.
• Integración vertical internacional. Puede ser
O bien «hacia delante», cuando la empresa adquirida se encuentra
más cerca del consumidor,
O bien «hacia atrás», cuando la empresa adquirida está más alejada
del bien terminado.
Por ejemplo, si el poder de negociación de los proveedores locales es
elevado, la compañía puede acudir a otros proveedores en mercados
exteriores y reducir así el grado de concentración de la industria
proveedora rebajando los precios de adquisición de bienes
intermedios o de servicios.
Tipología por sus características
En función del ritmo de entrada se distingue entre
 Gradual, cuando el crecimiento es progresivo y se va
obteniendo paulatinamente una mayor cuota del mercado.
 Directo, cuando se adquiere una empresa que ya estaba
establecida en ese mercado.
En lo relativo a la financiación, una empresa puede optar:
Bien por emplear recursos propios de la empresa, valiéndose de sus
reservas.
Bien puede solicitar cualquier tipo de financiación externa, pidiendo
crédito a una entidad financiera o saliendo a bolsa.
2.2.3. Determinantes de la ventaja competitiva
Una dinámica orientada a fomentar la capacidad de innovación como
parte estratégica empresarial, tanto en bienes y servicios como en
procesos productivos, es un aspecto central de la ventaja competitiva
empresarial.
Porter (2007) señala cuatro cualidades que configuran todo escenario
nacional en el que las empresas realizan su actividad productiva. A
este esquema se le denomina el diamante o rombo de Porter.
Condiciones de los factores (factor conditions)
Habitualmente son las características más destacadas, si bien la
dotación de factores no determina cómo las empresas utilizan esos
recursos ni la operativa técnica.
Condiciones de la demanda (demand conditions)
Identifica la naturaleza de la demanda por un producto o un servicio
ofrecido en un determinado mercado. Analiza, entre otras
características: la composición y amplitud de la demanda doméstica,
el nivel de exigencia de los compradores locales o los mecanismos de
internacionalización en relación con las circunstancias locales o
regionales.
Industrias relacionadas y de apoyo (related and supporting
industries)
La existencia o no en una economía de industrias proveedoras y/o
relacionadas que sean competitivas internacionalmente determina el
éxito de una empresa o negocio. Este tipo de sinergias entre
empresas permite asegurar los inputs necesarios en el mercado
donde desempeña su actividad, introducir innovaciones de manera
conjunta y reducir los costes totales.
Estrategia, estructura y rivalidad de las firmas (company strategy,
structure, rivalry)
Se concreta en el entorno en el que las empresas se crean, organizan
y gestionan. No existen unas características universales de
competencia o de rivalidad. La competitividad de una industria
específica es el resultado de la interacción entre las prácticas de
gestión, la forma de organización preferida en cada país y las fuentes
de la ventaja competitiva.
La competitividad internacional y el proceso de innovación se
encuentran estrechamente vinculados.
Freeman (2004) analiza la interrelación entre la innovación, el
desarrollo de un nuevo producto y/o el proceso de
producción/organización, comercialización/distribución y su
implementación a la actividad productiva.
A este respecto, conviene precisar algunos conceptos:
• El esquema fundamental de cambio tecnológico puede dividirse en
tres etapas:
i) La obtención de una idea que desarrollar y su aplicación, la
invención;
ii) Su implementación exitosa a la actividad productiva, la
innovación,
iii) La integración en el mercado objetivo y en la actividad de la
economía en general, la difusión.
• El desarrollo de la innovación se encuentra estrechamente vinculado
al entorno nacional, local, o regional, denominado en este ámbito
como «sistema nacional de innovación».
• Esencialmente clasificamos las innovaciones, en función del grado
de novedad o disrupción que conllevan, en dos:
i) Innovaciones graduales/incrementales, cuando son una
sucesión progresiva de mejoras, y
ii) Innovaciones radicales, cuando suponen una profunda
transformación de la situación previa.
• Una innovación presenta, al menos, las siguientes particularidades:
Acoplamiento (coupling)
La aplicación de una idea que genera un progreso tanto en la
tecnología empleada como en los productos ofertados y en los
mercados donde se comercializa.
Creación (creating)
Implica la creación de nuevos productos o procesos productivos e
incluso nuevas empresas.
Agrupación (clustering)
La innovación no suele presentarse de forma aislada, sino que se
produce dentro de una oleada de cambios y transformaciones o, lo
que es lo mismo, de grupos de innovaciones interconectadas.
Asimilación (comprehending)
Para que la innovación pueda ser aprovechada por el sistema
productivo, ya sea esta una nueva habilidad, una nueva tecnología o
nuevos mercados, debe ser apropiada convenientemente.
Respuesta (coping)
La implementación de toda innovación en un proceso productivo debe
afrontar cierto grado de incertidumbre sobre su éxito; obviamente, el
riesgo para la empresa será más elevado cuanto mayor sea el grado
de novedad.
Debe tenerse en cuenta que gran parte de la innovación depende de
la capacidad de adaptación al entorno tecnológico. De acuerdo con la
clasificación de Pérez (2010), este no es un proceso meramente
aleatorio, sino que responde a tendencias de largo plazo, en las que
la empresa debe situarse y que afectan a todo el proceso de creación
de valor (proveedores, productores, distribuidores y consumidores).
Identificamos como revolución industrial el conjunto interrelacionado
de renovaciones radicales en múltiples sectores que modifica la lógica
colectiva de cómo producir y/o comercializar.
El cambio tecnológico debe ser una fuente de competitividad; sin
embargo, no tiene por qué afectar por igual a todos los sectores
económicos.
De este modo y dependiendo del grado, distinguimos los siguientes:
• Sectores vectores: son los protagonistas de la revolución
tecnológica. Por ejemplo, en lo referente a la actual fase, el sector de
las tecnologías de la información y comunicación.
• Sectores de infraestructura: aquellos que permiten el desarrollo de
la tecnología protagonista; en la actualidad, la conexión a Internet o
la generación de conexiones de red.
• Sectores inducidos: aquellos sectores que, a pesar de ser
actividades tradicionales, se modernizan gracias a la aparición de
nuevas tecnologías que permiten su continuidad productiva.
Aunque una empresa no desarrolle su actividad productiva entre los
sectores protagonistas del cambio tecnológico, sí puede conseguir
grandes ventajas competitivas si es capaz de introducir la tecnología
innovadora antes que sus rivales.
Lograr esto supone una modificación sustancial de la estructura de
costes, permite nuevas oportunidades de inversión o negocio y
genera un cambio en las prácticas habituales de la empresa.
2.3. Las cadenas globales de valor (CGV)
El desarrollo de sistemas internacionales de producción integrada,
denominados cadenas globales de producción (global commodity
chains, GCC) o cadenas globales de valor (global value chain, GVC),
supone la fragmentación y diversificación geográfica del conjunto de
actividades necesarias para producir un bien o servicio.
Desde los años ochenta del siglo XX, el intenso desarrollo de la
estructura productiva mundial ha conformado una evidente
segmentación internacional de la producción; esta evolución está en
sintonía con otras transformaciones en la cadena productiva.
Los avances en las tecnologías de la información y la comunicación, el
abaratamiento de los transportes, la reducción de las barreras al
comercio y la expansión de las finanzas han permitido a las empresas
transnacionales expandir sus mecanismos operativos, generando, con
ello, nuevas redes de producción y comercialización.
2.3.1. La cadena de valor como herramienta de análisis
Porter (1985, cap. 2) emplea el término cadena de valor como
modelo de análisis de las actividades estratégicas, primarias y de
apoyo para cualquier empresa.
Este esquema permite desagregar mejor el comportamiento de los
costes y la eficiencia en la obtención de la diferenciación o, lo que es
lo mismo, en lo que genera valor para los clientes.
La cadena de valor de una empresa y la forma en que desempeña sus
actividades son consecuencia de su historia, de su enfoque para
implementar la estrategia y, por supuesto, de los resultados de las
actividades, sin olvidar que su actividad productiva se desarrolla
dentro de un sistema de producción y un determinado entorno
competitivo.
Las actividades de valor son todas aquellas que hacen más rentable y
fortalecen la posición en el mercado de toda empresa.
Distinguimos entre dos tipos:
• Primarias: constituyen la base del proceso productivo, son las
implicadas en la creación de los bienes y servicios y su transferencia
a los consumidores. En ellas se incluyen la logística interna y externa,
la producción, el marketing y ventas o el servicio de posventa.
• De apoyo: aquellas que sustentan las actividades primarias,
brindando el soporte necesario que permite su desarrollo. Se agrupan
en abastecimiento, investigación y desarrollo, recursos humanos e
infraestructuras de la empresa.
Definimos como margen la diferencia entre el valor total y el coste
total de desempeñar las actividades de valor, y puede medirse de
diferentes maneras.
En la cadena de valor se incluye el margen del proveedor y del canal
de distribución, que debe separarse para analizar adecuadamente los
costes, los cuales se integran dentro del coste total final.
2.3.2. Funcionamiento
Las cadenas globales de valor están integradas a lo largo de todo el
sistema productivo; desde el mismo momento en que adquirimos la
materia prima hasta cuando el bien o servicio llega al consumidor
final.
Se distingue porque algunas fases están fragmentadas y localizadas
en distintas economías.
El desarrollo de las cadenas globales de valor ha promovido una
perceptible estructura productiva internacional por la que las
compañías internacionalizadas se mantienen localizadas en los países
desarrollados, donde se implementan las tareas de apoyo, gran parte
del marketing y los servicios posventa, mientras sus proveedores se
sitúan en países en desarrollo, donde se llevan a cabo algunas de las
tareas de producción o el tratamiento de las materias primas.
La estrategia de desagregación permite a las empresas mejorar los
beneficios de la inversión exterior directa (paradigma OLI) al mismo
tiempo que alcanzar las ventajas competitivas de las industrias
globales.
Según la United Nations Conference on Trade and Development
(UNCTAD, 2013), los factores fundamentales que influyen en la
participación nacional el valor agregado de las exportaciones son
dos: uno, el tamaño de la economía y de su mercado nacional; dos,
la tipología de las exportaciones. Por ejemplo, aquella que posea
recursos naturales en su territorio dependerá menos de otros países,
contribuyendo positivamente en el valor agregado total de las
cadenas globales de valor.
Las ventajas de la localización dependen cada vez más de su función
dentro de las cadenas globales de valor, dependiendo esencialmente
de la naturaleza del producto y no de sus características generales.
Entre las más habituales y relevantes se encuentran la disponibilidad
de mano de obra, las características específicas de los trabajadores
(competencias lingüísticas y educación), la calidad de la
infraestructura logística y de telecomunicaciones, la distancia a los
mercados finales o la disponibilidad de inputs.
2.4. Tendencias mundiales de la inversión exterior directa
Desde la crisis económica de 2008 el volumen de los flujos mundiales
de inversión exterior directa ha observado una significativa
disminución, especialmente durante los años más arduos de la gran
recesión. Si bien en 2020, como consecuencia de la pandemia del
COVID, las estimaciones fueron intensamente negativas, según el
World Investment Report de la UNCTAD (2020), la caída de la IED
puede ser mayor que la observada durante la última gran crisis y con
unas consecuencias a medio plazo intensas, en parte debido a los
cambios productivos ligados a la cuarta revolución tecnológica y al
incremento de políticas proteccionistas.
Desde inicios de siglo XXI, las características principales que han
definido a estas inversiones han sido:
• La mayor parte de las entradas de inversión extranjera directa se
han orientado hacia los países desarrollados, con la excepción del año
2014, cuando se derivaron en mayor cuantía hacia países en
desarrollo. Otra característica de los flujos destinados a las economías
más desarrolladas es su comportamiento sincrónico con respecto al
montante global, salvo en 2010, en el que los flujos de IED hacia
países en desarrollo fueron mayores.
• La evolución de las entradas de IED destinadas principalmente a los
países en desarrollo han observado un incremento sostenido, salvo en
el año 2009, coincidiendo con la tendencia internacional y el año más
complejo, al menos en este aspecto, de la crisis económica. Cabe
destacar que la IED es la fuente principal de financiación externa en
este tipo de economías.
• Los flujos monetarios destinados a las economías en transición son
los menos sustanciales dentro del conjunto global.
• Desde la crisis de 2008, la caída de los niveles de inversión
extranjera directa es palpable. El destino de estas inversiones
también ha variado; las destinadas a nuevas plantas y al sector
manufacturero se han contraído.
• La disminución de capital en forma de inversión extranjera directa
se ha visto compensada con el incremento de préstamos bancarios e
inversiones en cartera (constituyéndose, por tanto, como deuda)
(UNCTAD, 2019).
• La crisis del COVID-19 ha generado consecuencias muy negativas
en los flujos de IED y se prevé que las secuelas sean duraderas,
debido a la interacción directa y súbita en la oferta y la demanda
globales.

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