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Este documento resume los principales tipos de disfuncionalidad yoica presentes en los trastornos de personalidad. Describe brevemente cada trastorno, enfocándose en cómo afecta la capacidad del individuo para relacionarse de manera independiente o dependiente de los demás. Identifica 14 trastornos de personalidad distintos, explicando las estrategias adaptativas disfuncionales que desarrolla el yo en cada caso para lidiar con la dimensión independencia-dependencia en las relaciones interpersonales.
Este documento resume los principales tipos de disfuncionalidad yoica presentes en los trastornos de personalidad. Describe brevemente cada trastorno, enfocándose en cómo afecta la capacidad del individuo para relacionarse de manera independiente o dependiente de los demás. Identifica 14 trastornos de personalidad distintos, explicando las estrategias adaptativas disfuncionales que desarrolla el yo en cada caso para lidiar con la dimensión independencia-dependencia en las relaciones interpersonales.
Este documento resume los principales tipos de disfuncionalidad yoica presentes en los trastornos de personalidad. Describe brevemente cada trastorno, enfocándose en cómo afecta la capacidad del individuo para relacionarse de manera independiente o dependiente de los demás. Identifica 14 trastornos de personalidad distintos, explicando las estrategias adaptativas disfuncionales que desarrolla el yo en cada caso para lidiar con la dimensión independencia-dependencia en las relaciones interpersonales.
Extraído de Psicopatología y Semiología Psiquiátrica del Dr. Ricardo Capponi. Resumen por Ps. Luis Catalán Arenas.
A. DISFUNCIONALIDAD YOICA EN LOS TRASTORNOS DE PERSONALIDAD
NEURÓTICOS: Disfunción yoica en el trastorno de personalidad dependiente: La actitud básica del dependiente es captar al otro "pasivamente", o sea, despertando su piedad, y/o estando dispuesto a portarse siempre bien con él para obtener el apoyo externo que necesita. Su existencia entera requiere de una forma sumisa de relación. Excesiva necesidad de aprobación social y afectiva. Congraciativos Muy poco agresivos Autoestima con Locus de control externo Auto desprecio y sentimientos de inferioridad Miedo a la soledad y al abandono Niega sus emociones para no afectar la relación Conciliatorios auto sacrificados y evitan los cambios Resignación doliente. Dependiente-Pasivo. Disfunción yoica en el trastorno de personalidad histriónico: Al igual que el dependiente, el histriónico no logró integrar la independencia en su interacción con los demás. Pero a diferencia del dependiente, que no busca activamente al otro que necesita, el histriónico aprendió a que sólo logra apoyo y admiración cuando lo conquista. Su estrategia es activa y no pasiva como el dependiente. Deseo evidente de conquistar el afecto del otro. Exagerados, muy expresivos y dramáticos. Forman amistad rápidamente Exigentes y manipulativos. Seductores. Confían demasiado en los demás, influenciables Escaza auto observación. Les aburre la soledad. Se percibe a sí mismo como estimulante, encantador, atractivo y capaz. Dependiente-Activo.
Disfunción yoica en el trastorno de personalidad narcisista:
No logra integrar la capacidad de ser dependiente. Se plantea no necesitando a los demás y bastándose a sí mismo. Supone al mismo tiempo que quienes lo rodean estarían a su disposición, dados las habilidades y encantos que posee, y desde luego no tendrá que esforzarse para lograr su complacencia y servilismo. O sea, su independencia la vive pasivamente. Más centrados en sí mismos que en los demás. Se consideran a sí mismos superiores y especiales. Inclinados a exagerar sus capacidades y poderes Transforman fácilmente los fracasos en éxitos Su autoestima no proviene del otro. Confirma en el otro sus ideas de superioridad y autosuficiencia. Cuando no logra confirmar su sobrevaloración, se descompensa. Se preocupa de ser adulado y admirado. Los otros están a su servicio, nunca debe algo. Aparentemente cercanos mientras se sienten adulados. Se retiran cuando desvaloriza al otro. Bajo compromiso. Independiente-Pasivo.
Disfunción yoica en el trastorno de personalidad antisocial:
El antisocial siente que debe luchar por obtener y mantener tal independencia. Debe autoabastecerse y no confiar en nadie sino en sí mismo, y para esto debe ser activamente luchador. Considera que él tiene derecho a un sitio especial, a dominar, a mantener su supremacía, pero esto no lo logra por sus encantos sino por la fuerza. Agresivo en la interacción. Pasa a llevar los derechos de los demás, domina y somete por la fuerza. Explotadores, mentirosos, ladrones, peleadores y desafiantes. A veces llegan a la criminalidad, violación, etc. Intimidadores y beligerantes. Incapaces de mantener relaciones cercanas, cálidas y comprometidas. Auto observación pobre y ausencia de mundo interno. Poco tolerantes al aburrimiento y la tristeza. Independiente-Activo. Disfunción yoica en el trastorno de personalidad compulsivo: El compulsivo queda atrapado en una ambivalencia, en la que alterna sus deseos de independencia y su necesidad de dependencia en forma escindida. Aunque vive ambos polos de esta dimensión, no logra integrarlos. Para el observador, esta ambivalencia no se hace evidente a primera vista, ya que el compulsivo opta por resolver su conflicto asumiendo una actitud sumisa y obediente, reprimiendo sus sentimientos desafiantes. Por esto decimos que su ambivalencia es pasiva. Expresivo, gentil y formal. Convencional y serio. Preocupado por las normas. Eficiente y detallista. Se da poco tiempo para recrearse, gozar y relacionarse afectivamente. Fachada de independencia vs intensas necesidades de dependencia. Excesivamente sumisos con ciertas personas. En una mayor intimidad y autenticidad con otra persona, les despierta una necesidad afectiva imperiosa y voraz. Se atan a otro “dominante” (persona, meta o institución). Auto observación pobre. Reprimido en su mundo interno. Se permite pocos placeres y es auto exigente. Mantiene su independencia a través del trabajo y el cumplimiento de normas. Ambivalente pasivo. Disfunción yoica en el trastorno de personalidad pasivo-agresivo: Desarrolla una estrategia activa al vivir su ambivalencia. Es similar al estilo que siguen los niños en su interacción con los demás, a través de explorar el mundo externo vía ensayo y error. Sus acciones y estrategias son espontáneas, cambiantes, pasan de la dominación a la sumisión de improviso. Son evitadores, explotadores, obstinados, etc. Erráticos e impredecible. Necesita de los demás de forma evidente. Deseo intenso de estar con los otros. Le encanta recibir regalos, adulaciones y beneficios. Deseo de pertenecer y ser líder en un grupo, pero se queja si no lo apoyan. Por otro lado, está en una lucha con su entorno al mostrarse hostil. No acude puntualmente, permanece callado y desinteresado. A ratos no soporta la compañía y se margina. En el trabajo es lento y cumple bien lo que se le solicita. Auto observación alternante. Hay una preocupación por sus conductas inadecuadas con sentimientos de culpa y auto desprecio, pero por otro lado se frustra (rabia, resentimiento, hostilidad y recriminación hacia los demás). Ambivalente-Activo.
Disfunción yoica en el trastorno de personalidad esquizoide:
Es un evitador de las relaciones con los demás, pero que a diferencia de la personalidad evitadora propiamente tal, que mantiene la capacidad y el deseo de relacionarse con los demás, pero evitándolos activamente porque la relación lo angustia, al esquizoide ni le atrae, ni tiene la capacidad de empatizar en la relación. Por esto decimos que su evitación es pasiva. Incapacidad para establecer relaciones sociales. No expresan ternura, calidez, ni sentimientos de agresividad. Incapacidad de sentir los sentimientos, necesidad y afectos del otro (amorosos o agresivos). Prefieren estar solos y tienen pocos o ningún amigo. Parecen fríos distantes y lejanos. Se relacionan mejor con las cosas que con las personas. Dedicación a hobbies, trabajos o al mundo imaginario. Auto observación distante. Escaza introspección por no lograr sentir emociones profundas. Aplanamiento afectivo. Evitador-Pasivo.
Disfunción yoica en el trastorno de personalidad evitador:
Es un evitador al igual que el esquizoide, pero que tiene la capacidad y el deseo de relacionarse con los demás. Evita hacerlo por la angustia que esta situación le produce, por lo cual está activamente dispuesto a eludirla. Hipersensitivo a los estímulos sociales, sentimientos y afectos del otro, sobre todo al desprecio y al rechazo. Actitud expectante y ansiosa frente a los demás. Si no recibe aprobación, se retira. Sentimientos de soledad. Es visto como tímido y aprensivo. Atención al entorno, expresión tensa y temerosa. Extrema sensibilidad y deseo de relacionarse afectivamente con el otro. Elude auto observarse y evita conocerse, por auto estima precaria y auto desprecio. Busca refugio en las cosas. Evitador-Activo. Disfunción yoica en el trastorno de personalidad orgánico: Lo que define al trastorno de personalidad orgánico es su imantación, perseverancia e incapacidad de desligarse y discontinuar una relación. Esta tendencia la llamaremos adhesividad, y es el polo opuesto de la evitación en la dimensión yoica de las relaciones. Se siente atraído a relacionarse con el otro, por una especie de atracción e imantación que ejerce el otro sobre él. Le resulta gratificante mantener esa relación que puede ir desde lo amoroso a lo destructiva sin lograr discontinuarla. Se quedan pegados, lo que resulta agotador para el otro. Auto observación constante en desde la fantasía, imaginaciones y pensamientos. Labilidad emocional, explosiones agresivas y/o sexuales. Adhesivo-Activo o Pasivo.
B. DISFUNCIÓN YOICA EN LOS TRASTORNOS FRONTERIZOS DE
PERSONALIDAD: Disfunción yoica en el trastorno de personalidad límite (Borderline): La personalidad límite se caracteriza por una grave dependencia. Esta dependencia puede ser vivida activa, pasiva y/o ambivalentemente. Lo que lo diferencia del dependiente, histriónico, compulsivo o pasivo-agresivo es el compromiso de la dimensión realidad-irrealidad. Irrealidad en la interacción, carácter exagerado, desproporcionado y fuera de lugar de conductas y sentimientos. Sentimientos de minsuvalía desproporcionado. Idealización de la persona de quien depende. Vive sintiendo la amenaza de la pérdida. La amenaza de pérdida genera celos, actitudes infantiles y temor-pánico cuando la amenaza es factible (límite dependiente-pasivo). Busca con desmesura llamar la atención de los demás, en relaciones extremadamente superficiales, poco personalizadas y cambiantes (dependiente-activo). Frente a la amenaza de la indiferencia, se disocia. Cae en euforia y pierde el sentido de las proporciones (dependiente-activo). Auto percepción de seducción y atractivo sin límites es de rango omnipotente y a menudo pueril (dependiente-activo). Su auto exigencia, escrupulosidad, culpa, auto reproches y autocastigos llegan al daño físico. Entrega compulsiva al trabajo, tarea o propósito, asumidos de manera dramática y sin espacio a interrupciones. Severo compromiso con el vínculo. Fijación patológica en la dependencia en el área de las interacciones. Dependiente-Irreal.
Disfunción yoica en el trastorno de personalidad paranoico
El compromiso yoico en esta dimensión realidad-irrealidad se hace evidente no sólo por alteraciones perceptivas, las cuales además pueden estar presentes en las micropsicosis, sino por una interacción con los demás y consigo mismo, francamente distorsionadas. Sobrevaloración de sí mismo notablemente exagerada. Cercano a la megalomanía casi psicótica. Hipersensibilidad al rechazo. Considera que tiene el derecho natural a cualquier cosa Cree que todo el mundo está en contra de él, así que despliega conductas agresivas e impredecibles. Siempre a la defensiva y dispuesto a atacar con distorsión grave de la realidad. Desconfiado, hostil, autorreferente y suspicaz. Exigencias moralistas, religiosas, legales, etc. Con fanatismo que va más allá de la rigidez. Poseedor de la verdad. Auto exigencia que lleva a la timidez, auto desprecio y rechazado. Vive en clima de suspicacias y auto referencias. Puede establecer vínculos de dependencia con grupos, instituciones o corrientes ideológicas. Dependen de una persona, siendo desconfiados y tendientes a la celopatía. Sentimientos de envidia e insatisfacción. Severo compromiso del área vincular. Fijación patológica de la independencia en el área de las interacciones. Independiente-Irreal.
Disfunción yoica en el trastorno de personalidad esquizotípico
La evitación de las relaciones interpersonales y de desconexión de sí mismo, es tan grave que el esquizotípico puede acercarse al autismo del esquizofrénico, con su falta de propositividad vital y su desgano. Sin embargo, al igual que los restantes trastornos fronterizos, pueden presentar micropsicosis de productividad autolimitada, que surgen en la búsqueda anamnéstica retrospectiva, pero que raramente llegan en su momento evolutivo a constituirse como brote productivo con el defecto consecuente. Actitud potente de desgano, falta de propósito vital y autismo. No le interesan las relaciones con los demás, son lejanos y fríos. Sin entusiasmo en iniciar o cultivar actividades o relaciones. Sin conciencia de su déficit (irrealidad). Evitador-Irreal. Disfunción yoica en el trastorno de personalidad orgánico (fronterizo) La perseveración afectiva, en un estado emocional o en un sentimiento, alcanza niveles extremos, llegando a crepuscularizarse y a perder el control por completo. La adhesividad al deseo y la pulsión, les impide poder aplazar su satisfacción, actuando impulsivamente. Por quedarse pegados en los detalles son incapaces de ver el conjunto, lo cual los hace ser sumamente irreflexivos, y con un manejo caótico de su realidad. Relaciones gravemente conflictivas con los demás y consigo mismo. Incapacidad de integrar la dimensión realidad-irrealidad. Su condición orgánica lo limita a una relación adhesiva. Adhesivo-Irreal. MECANISMOS DE DEFENSA: