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Ciertos órganos tienen requisitos especiales. Por ejemplo, el flujo de sangre a la piel
determina la pérdida de calor del cuerpo y, de esta manera, ayuda a controlar la
temperatura corporal. Además, el suministro de cantidades adecuadas de plasma
sanguíneo a los riñones permite que los riñones filtren y excreten los productos de
desecho del cuerpo y regulen los volúmenes y electrolitos de fluidos corporales.
Veremos que estos factores ejercen grados extremos de control del flujo sanguíneo local y
que los diferentes tejidos otorgan diferentes niveles de importancia a estos factores en el
control del flujo sanguíneo.
Importancia del control del flujo sanguíneo por los tejidos locales.
Se ha demostrado que el flujo sanguíneo a cada tejido generalmente está regulado al nivel
mínimo que satisfará los requisitos del tejido, ni más ni menos. Por ejemplo, en los tejidos
para los que el requisito más importante es el suministro de oxígeno, el flujo sanguíneo
siempre se controla a un nivel solo ligeramente superior al requerido para mantener la
oxigenación total del tejido, pero no más. Al controlar el flujo sanguíneo local de una manera
tan exacta, los tejidos casi nunca experimentan una deficiencia nutricional de oxígeno y la
carga de trabajo del corazón se mantiene al mínimo.
Teoría de los vasodilatadores para la regulación del flujo sanguíneo local agudo:
posible papel especial de la adenosina.
De acuerdo con la teoría de los vasodilatadores, cuanto mayor es la tasa de metabolismo o
menor es la disponibilidad de oxígeno u otros nutrientes para un tejido, mayor es la tasa de
formación de sustancias vasodilatadoras en las células del tejido. Se cree que las
sustancias vasodilatadoras se difunden a través de los tejidos hasta los esfínteres
precapilares, las metarteriolas y las arteriolas para causar dilatación. Algunas de las
diferentes sustancias vasodilatadoras que se han sugerido son adenosina, dióxido de
carbono, compuestos de fosfato de adenosina, histamina, iones de potasio, e iones de
hidrógeno.
Las sustancias vasodilatadoras pueden liberarse del tejido en respuesta a la deficiencia de
oxígeno. Por ejemplo, la disminución de la disponibilidad de oxígeno puede provocar la
liberación de adenosina y ácido láctico (que contienen iones de hidrógeno) en los
espacios entre las células del tejido; estas sustancias luego causan vasodilatación aguda
intensa y por lo tanto son responsables, o parcialmente responsables, de la regulación del
flujo sanguíneo local. Otras sustancias vasodilatadoras, como el dióxido de carbono, el
ácido láctico y los iones de potasio, también tienden a aumentar en los tejidos cuando se
reduce el flujo sanguíneo y el metabolismo celular continúa al mismo ritmo, o cuando el
metabolismo celular aumenta repentinamente.
Un aumento en la concentración de metabolitos vasodilatadores provoca vasodilatación de
las arteriolas, aumentando así el flujo sanguíneo tisular y devolviendo la concentración
tisular de los metabolitos hacia la normalidad. Muchos fisiólogos creen que la adenosina es
un vasodilatador local importante para controlar el flujo sanguíneo local. Por ejemplo, las
células del músculo cardíaco liberan cantidades diminutas de adenosina cuando el flujo
sanguíneo coronario se vuelve demasiado pequeño, y esta liberación de adenosina provoca
una vasodilatación local suficiente en el corazón para que el flujo sanguíneo coronario
vuelva a la normalidad. Además, siempre que el corazón se vuelve más activo de lo normal,
el metabolismo del corazón aumenta, lo que provoca una mayor utilización de oxígeno,
seguida de:
- Una disminución de la concentración de oxígeno en las células del músculo cardíaco
- La consiguiente degradación del trifosfato de adenosina (ATP)
- Aumento de la liberación de adenosina.
Se cree que gran parte de esta adenosina se escapa de las células del músculo cardíaco
para causar vasodilatación coronaria, lo que aumenta el flujo sanguíneo coronario para
suplir las mayores demandas de nutrientes del corazón activo. También han sugerido que el
mismo mecanismo de adenosina es un controlador importante del flujo sanguíneo en el
músculo esquelético y muchos otros tejidos, así como en el corazón. Sin embargo, ha sido
difícil probar que se formen cantidades suficientes de cualquier sustancia vasodilatadora
individual, incluida la adenosina, en los tejidos para provocar todo el aumento medido del
flujo sanguíneo. Es probable que una combinación de varios vasodilatadores diferentes
liberados por los tejidos contribuya a la regulación del flujo sanguíneo.
Posible función de otros nutrientes además del oxígeno en el control del flujo
sanguíneo local
● Ausencia de glucosa en la sangre perfundida → provoca vasodilatación tisular local.
○ Pasa algo similar con ausencia de aminoácidos y ácidos grasos.
● Deficiencia de vitaminas (conocida como beriberi) deficiencia de sustancias del
grupo B (tiamina, niacina y riboflavina) → vasodilatación
○ Estas vitaminas son necesarias para la fosforilación inducida por oxígeno que
se requiere para producir ATP en células tisulares.
■ Deficiencia de estas vitaminas → disminuye capacidad contráctil del
músculo liso → provocando vasodilatación local.
Ejemplos especiales del control “metabólico” a corto plazo del flujo sanguíneo local
● Mecanismos metabólicos → Se llaman así porque todos ellos funcionan en
respuestas a necesidades metabólicas de los tejidos.
○ Hiperemia reactiva: Producida después del bloqueo del riego sanguíneo
tisular durante un breve período de tiempo.
■ Cuando la sangre que irriga un tejido se bloquea por unos segundos o
por 1 hora o más y después se desbloquea → el flujo sanguíneo que
atraviesa el tejido aumenta hasta 4 a 7 veces de lo normal; este
aumento continúa por varios segundos si el bloqueo dura solo unos
segundos; y si dura 1 hora o más, el aumento continúa por ese
tiempo.
○ Hiperemia activa: Producida cuando aumenta la tasa metabólica tisular.
■ Cuando cualquier tejido se vuelve muy activo, la velocidad del flujo
sanguíneo aumenta a través del tejido.
■ El incremento del metabolismo local hace que las células devoren
rápido los nutrientes del líquido tisular, y que se liberen grandes
cantidades de sustancias vasodilatadoras.
● RESULTADO:
○ Dilatación de los vasos sanguíneos locales.
○ Aumento de flujo sanguíneo local.
● De esta forma, el tejido activo recibe los nutrientes adicionales
necesarios para mantener a ese nivel en funcionamiento.
● EJEMPLO → Hiperemia activa del músculo esquelético →
aumento del flujo sanguíneo muscular local en 20 veces
durante un ejercicio intenso.
Autorregulación del flujo sanguíneo durante los cambios en la presión arterial:
mecanismo “metabólicos” y “miógenos”
En cualquier tejido, el aumento rápido de presión arterial provoca un aumento inmediato del
flujo sanguíneo, pero en menos de 1 min este flujo vuelve a la normalidad, incluso si la
presión arterial se mantiene elevada. Normalización de flujo → Autorregulación.
Cuando se da la autorregulación, el flujo sanguíneo local de los tejidos del organismo estará
relacionado con la presión arterial.
● En tejidos como el encéfalo y corazón → la autorregulación es más precisa.
● Teoría metabólica:
○ Cuando la presión arterial es demasiado elevada, el exceso de líquido
proporciona demasiado oxígeno y nutrientes de otro tipo hacia los tejidos,
lavando los vasodilatadores.
■ Los nutrientes (especial el O2), más el descenso en los niveles
tisulares de vasodilatadores → provocan la constricción de los vasos
sanguíneos y el retorno del flujo casi a la normalidad, a pesar del
aumento de la presión.
● Teoría miógena:
○ Teoría basada en que el estiramiento brusco de los vasos sanguíneos
pequeños provoca la contracción del músculo liso de la pared vascular
durante unos segundos.
■ Entonces → cuando una presión arterial elevada estira el vaso, se
provoca una constricción vascular reactiva que reduce el flujo del
vaso sanguíneo casi a la normalidad.
■ Con presiones bajas → el grado de estiramiento del vaso es menor,
reduciendo el músculo liso, se reduce la resistencia vascular y ayuda
a recuperar la normalidad del flujo.
○ Se puede producir en ausencia de influencias nerviosas u hormonales.
○ Más pronunciada en arteriolas (Se puede ver también en arterias. vénulas,
venas e incluso en vasos linfáticos).
○ La contracción miógena se inicia por la despolarización vascular inducida por
el estiramiento.
■ Ese estiramiento tiende a aumentar rápido la entrada de Ca desde el
líquido extracelular hacia las células → provocando contracción.
○ Este mecanismo miógeno es importante para prevenir el estiramiento
excesivo de los vasos sanguíneos cuando aumenta la presión sanguínea.
○ Pero, el mecanismo no puede detectar directamente los cambios del flujo
sanguíneo en el tejido.
■ Los factores metabólicos anulan el mecanismo miógeno cuando las
demandas metabólicas de los tejidos están aumentando.
● EJEMPLOS → Incremento del flujo sanguíneo en el músculo
esquelético durante el ejercicio muscular.
Mecanismos especiales del control hasta regulación del flujo sanguíneo por cambios
en la vascularización tisular
Los mecanismos generales de control del flujo sanguíneo local actúan en la mayoría de los
tejidos del organismo, en territorios especiales actúan otros mecanismos diferentes.
1. En los riñones,el control del flujo sanguíneo se basa en retroalimentación
tubuloglomerular, en el que la mácula densa(de la zona en que el túbulo distal, cerca
de arteriolas aferente y eferente del aparato yuxtaglomerular de la nefrona), detecta
la composición del líquido al inicio de dicho túbulo. Cuando se filtra demasiado
líquido de la sangre a través del glomérulo hacia el sistema tubular, las señales de
retroalimentación de la mácula densa provocan constricción de las arteriolas
aferentes, reducen el flujo sanguíneo renal y la tasa de filtración glomerular a valores
casi normales.
2. En el cerebro, el control del flujo sanguíneo depende de la concentración de oxígeno
tisular, concentraciones de dióxido de carbono y de iones hidrógeno. El aumento de
cualquiera de ellos dilata los vasos cerebrales y permite el lavado rápido del exceso
de CO2 o de iones hidrógeno de los tejidos cerebrales. El nivel de excitabilidad del
cerebro depende en gran medida del control de las concentraciones de CO2 y del ion
hidrógeno.
3. En la piel, el control del flujo sanguíneo está relacionado con la regulación de la
temperatura corporal. El flujo cutáneo y subcutáneo regula la pérdida de calor del
cuerpo mediante la determinación del flujo de calor desde el centro a la superficie
del organismo, donde se pierde calor hacia el medio exterior. El flujo sanguíneo en la
piel está controlado en gran medida por los nervios simpáticos. El flujo sanguíneo en
la piel supone a 3 ml/min/100 g de tejido en tiempo frío. Cuando se expone a un
calentamiento, el flujo sanguíneo cutáneo puede incrementarse(7 u 8 l/min) para
todo el organismo. Si se reduce la temperatura corporal, el flujo sanguíneo en la piel
disminuye. Incluso con una vasoconstricción acusada, el flujo sanguíneo cutáneo
suele ser suficientemente elevado para satisfacer las demandas metabólicas básicas
de la piel.
Control del flujo sanguíneo tisular por medio de factores de relajación y contracción
de origen endotelial
Las células endoteliales de los vasos sanguíneos sintetizan varias sustancias que, cuando
se liberan, afectan al grado de relajación o contracción de la pared arterial. Para muchos de
estos factores de relajación o contracción de origen endotelial, las funciones fisiológicas
apenas se están empezando a comprender
Una vez que la regulación a largo plazo ha tenido tiempo de desarrollarse, los cambios a
largo plazo de la presión arterial entre 50 y 250 mmHg tienen poco efecto sobre la velocidad
del flujo sanguíneo local.
La regulación a largo plazo del flujo sanguíneo es especialmente importante cuando
cambian las demandas metabólicas del tejido a largo plazo. Es decir, si un tejido está
crónicamente hiperactivo, requiere un aumento crónico de las cantidades de oxígeno y otros
nutrientes.
SUSTANCIAS VASODILATADORAS:
● Bradicinina:
○ Cómo se forma:
1. La calicreína (enzima proteolítica) está inactiva en la sangre y líquidos
tisulares.
2. Se activa por maceración de la sangre, por la inflamación tisular u
otros efectos.
3. Actúa sobre la a2-globulina para liberar calidina (una cinina)
4. La calidina se convierte en bradicinina por enzimas tisulares.
5. La bradicinina persiste unos minutos y luego se inactiva por la
carboxipeptidasa (enzima convertidora).
6. La calicreína se destruye por su inhibidor
○ Provoca dilatación arteriolar potente y aumenta la permeabilidad capilar.
○ 1um → aumenta flujo hasta 6 veces.
○ Regula el flujo sanguíneo en la piel, en glándulas salivales y
gastrointestinales.
● Histamina:
○ Se libera por daño, inflamación y alergia.
○ Deriva de los mastocitos y basófilos
○ También aumenta la porosidad capilar
■ Intensa, puede provocar pérdida de grandes cantidades de líquido
circulatorio, provocando → Edema
● Uno de los principios fundamentales de la función circulatoria, dice que cada tejido
tiene la capacidad de autorregular su propio flujo sanguíneo de acuerdo a las
necesidades metabólicas. Tal vez haya un descenso transitorio, pero solo es a corto
plazo mientras no alteren el metabolismo de los tejidos. Es decir, mientras la P.A.
sea adecuada para perfundir los tejidos.